geográficos dispersos. Sobre una cierta porción de espacio, es el resultado de la combinación dinámica, por tanto, inestable, de elementos físicos, biológicos, y antrópicos, que interactuando dialécticamente unos con otros hacen del paisaje un conjunto único e indisociable en perpetua evolución. CONTEXTO HISTORICO DE PAISAJE Las referencias occidentales nacientes relacionadas con la noción o término paisaje pueden encontrarse en los antiguos pensadores clásicos, entre ellos, los académicos y filósofos estoicos, quienes interpretaron el pasado observando el presente con la importante idea geográfica de una Tierra «diseñada» para la existencia armónica entre la naturaleza y el «hombre» LA INVENCIÓN DEL CONCEPTO CIENTÍFICO DEL PAISAJE
La concepción científica de paisaje
(Landschaft) aparece en Rusia a finales del siglo XIX y principios del XX. Siguiendo los principios de la escuela alemana de la descripción geográfica
comparativa, fundada por Alexander von Humboldt y Carl Ritter, los geógrafos intentan englobar la realidad geográfica, natural y humana, en un doble sentido, espacial y metodológico. LA AMBIGÜEDAD DE LA TEORÍA DEL PAISAJE Esta ambigüedad va a dar lugar, en el siglo XX, a continuas discusiones entre los geógrafos sobre su definición, la morfología de su estructura y sus métodos de estudio. CAMBIOS IMPORTANTES EN LA TEORÍA DEL PAISAJE
Durante mucho tiempo la Ciencia del Paisaje rusa estará
marcada por el «objetivismo» de la definición de los complejos territoriales y de sus límites, por el determinismo en el análisis de las relaciones entre los componentes del paisaje y por la visión «discontinualista» de la «morfología del paisaje». VISIÓN «CONTINUALISTA»
El paisaje es, a la vez, un proceso natural y la metáfora de una
interacción entre los elementos de la naturaleza. Esta visión penetra con dificultades en los estudios paisajísticos y habrá que esperar a la década de los sesenta para que, al lado del concepto del paisaje «estático» y «discontinuo», se afirme su visión dinámica y «continualista». LA RENOVACIÓN CONCEPTUAL DE LA CIENCIA DEL PAISAJE
Por una parte, apoyándose en la Teoría de sistemas, la Ciencia del
Paisaje esclarece los problemas de discontinuidad propia al paisaje. La renovada Ciencia del Paisaje intenta esclarecer la cuestión ambigua del origen, o génesis, del complejo natural y de los factores responsables de su estructura. MARCO JURIDICO
Definir el paisaje y su importancia para la
planeación y gestión urbana invita a reflexionar en la posibilidad de reconstruir una categoría jurídica que pueda titularizarse como derecho subjetivo exigible en los procesos de planificación y gestión del territorio RELACIÓN ENTRE EL PAISAJE Y MARCO TEORICO La importancia del paisaje para el desarrollo territorial de las ciudades actuales, obliga a pensar en las posibilidades de justificar la existencia de una categoría jurídica que pueda titularizarse como derecho subjetivo y que pueda ser exigida su protección en los procesos de planificación y gestión del territorio urbano. RELACIÓN ENTRE EL PAISAJE Y MARCO TEORICO La importancia del paisaje para el desarrollo territorial de las ciudades actuales, obliga a pensar en las posibilidades de justificar la existencia de una categoría jurídica que pueda titularizarse como derecho subjetivo y que pueda ser exigida su protección en los procesos de planificación y gestión del territorio urbano.
la relación entre el paisaje como categoría jurídica y su valor
patrimonial está determinada por las posibilidades de desarrollo en sus relaciones y la viabilidad de su gestión como una u otra. PAISAJE Y POLITICA PUBLICA En este contexto se enmarca la consideración del paisaje en las políticas públicas: con una dispersión semántica, habitual en los estudios de paisaje, que se confunde con el cometido laxo de las políticas públicas y, por lo tanto, delicado de interpretarse de múltiples maneras. Bajo esta consideración,relacionamos los distintos ámbitos en los que convergen paisaje y políticas públicas, lo que ofrece es una visión global, que permita acercarse a una relación original y, aparentemente, productiva. POLITICAS DEL PAISAJE Desde este marco legal se pueden contar diferentes instrumentos para la gestión pública del paisaje: legislaciones ad hoc, estructuras administrativas y ejecutivas ad hoc, catálogos de paisaje, cartas de paisaje, fi chas de paisaje, impactos de paisaje, actuaciones específicas, indicadores de paisaje y programas de formación y cooperación. Por su significado es preciso señalar de manera separada la participación del paisaje en la ordenación del territorio. LEGISLACIONES AD HOC Como oportunamente se ha anunciado, las leyes con temática estrictamente paisajística son reducidas. Existen, sin embargo, legislaciones que atienden tangencialmente a temas de paisaje. En España estas políticas acostumbran a vincularse a urbanismo, ordenación del territorio y ambiente, pero también a turismo o agricultura. Las disposiciones de estas leyes pueden ser de carácter más o menos restrictivas. ESTRUCTURAS ADMINISTRATIVAS Y EJECUTIVAS AD HOC Para la correcta ejecución de un cuerpo legal de tal amplitud como es el paisaje, a menudo se precisa la creación de una estructura administrativa y ejecutiva ex professo; es recurrente que las materias de paisaje sean tratadas por ministerios, secretarías, consejerías y similares. El carácter holístico y aplicado del paisaje a veces compromete esta clasificación, motivo por el cual no son desaconsejables órganos compartidos entre áreas de política CATALOGO DE PAISAJE
Los catálogos de paisaje representan una de las aportaciones
más signifi cativas sobre el tema. Su objetivo es inventariar y analizar un paisaje concreto, principalmente con finalidades CA aplicadas y, particularmente, con vistas a la ordenación territorial. Su alcance territorial más apropiado son las regiones naturales o funcionales CARTAS DE PAISAJE Las cartas de paisaje reúnen iniciativas dirigidas a la protección, reconocimiento y promoción del paisaje, y se articulan en torno a la consideración del paisaje como recurso. ORDENACIÓN DEL TERRITORIO Y PAISAJE
Se conoce que determinados aspectos territoriales pueden ser eficazmente
planteados y desarrollados desde la intervención pública; existen diferentes instrumentos de planificación y gestión desarrollados al efecto. Comúnmente se distinguen dos planteamientos: uno que hace referencia a orientaciones económicas y redistribución de presupuestos públicos, y otro que atiende especialmente a la planificación física y a la definición de modelos territoriales.