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Es un sustantivo masculino que equivale a causa, motivo, razón. Puesto que se trata
de un sustantivo, se usa normalmente precedido de artículo u otro determinante:
Ejemplos
No comprendemos el porqué de esa decisión.
Seguro que ese comportamiento tiene su porqué.
Ejemplo
Hay que averiguar los porqués de sus extrañas decisiones.
Ejemplos
¿Por qué no me trajiste el pedido indicado?
No comprendo por qué tuvimos que hacer una piscina en invierno.
¡Por qué calles más bonitas pasamos!
Se trata de una conjunción átona, razón por la que se escribe sin tilde. Puede usarse con
dos valores:
Como conjunción causal, para introducir oraciones subordinadas que expresan causa,
caso en que puede sustituirse por locuciones de valor asimismo causal como puesto que
o ya que:
Ejemplos
No me comí el plátano porque ya estaba lleno.
El partido no fue justo, porque ellos jugaban con uno más.
Teniendo en cuenta esta acepción, puede tratarse de una de las siguientes secuencias:
La preposición por + el pronombre relativo que. En este caso es más corriente usar el
relativo con artículo antepuesto (el que, la que, etc.):
Ejemplos
Este es el caso por (el) que la policía está investigando todo eso.
Los platos por (los) que competían no llegaban a la altura de sus categorías.
No conocemos la causa por (la) que al final ocurrió lo sucedido.
Sino, sino y si no
“Sino” es una conjunción adversativa que se emplea para contraponer dos conceptos:
No asistió al cine, sino al teatro; No quiso viajar a Lima,sino a Ciudad de México.
“si no” está constituido por una conjunción condicional (si) y el adverbio de negación
(no). Aparece en oraciones condicionales:
Si no hubiera intervenido la policía, se habría desatado una gresca.
Hay, ahí, ay
1. HAY es una forma conjugada del verbo haber. Es una palabra monosílaba cuyo golpe
de voz recae en la vocal a. Verás que es un verbo porque siempre se puede cambiar por
otras formas del verbo haber (había, habrá...)
2. AHÍ es un adverbio que indica lugar. Es palabra bisílaba y aguda, cuyo golpe de voz
recae en la i. Puedes comprobarlo cambiándolo por otros adverbios de lugar como allí o
aquí.
3. AY es una interjección que sirve para expresar dolor u otras emociones. Se pronuncia
igual que 'hay' y suele ir entre signos de exclamación en los textos, y tiene entonación
exclamativa, en las conversaciones (¡Ay!, qué susto).
No lo olvides: ‘hay’ es haber, ‘ahí’ es un lugar, ‘¡ay!’ es una exclamación. ¡Ah! y ‘ahy’
no existe.