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Podemos decir que la moda rápida es una estrategia que se adopto en la industria

de la moda donde se busca la renovación, lo más pronto posible de las colecciones


de ropa con productos a precios bajos. El cambio de diseños tiene el fin, de
satisfacer los gustos inmediatos del consumidor hacia las tendencias de moda, a lo
que nos lleva a unos de los principales problemas de la moda rápida, es el
sobreconsumo de la población que posee más prendas de las que realmente puede
usar.
Citando a Greenpeace habla de cómo Se trata a la ropa como artículos desechables
a la que no se le atribuye un valor y cada vez son más cortos los ciclos de vida de
los productos. Esto provoca millones de toneladas de desechos textiles.
Actualmente, la industria textil es la segunda más contaminante, ya que emplea un
alto consumo de energía. Además de la sobreproducción, con la globalización ha
aumentado la competitividad comercial. Lo que lleva a las grandes cadenas de
moda a llevar su producción a países en desarrollo para reducir costes e
incrementar los beneficios ocupando posiciones altas dentro del sector textil. Esta
estrategia trae consecuencias negativas para la cadena de producción, generando
impactos sociales y medioambientales.
Donde encontramos la Explotación los recursos naturales, Contaminación los
recursos hídricos y la generación de una enorme cantidad de desechos. El destino
normalmente de la ropa es la quema de esta, ya sea para la generación de energía
es entidades con escasos recursos, también como medio de calor o se tira en un
vertedero. la producción de ropa requiere más recursos naturales para la producción
de materias primas, como el algodón, la lana, o piel, Esto agota aún más nuestros
recursos forestales, hídricos y terrestres.
La mayoría de la fabricación de ropa se realiza en países en vías de desarrollo,
donde las leyes ambientales pueden no ser tan estrictas. Esto significa que muchas
veces, las aguas residuales no tratadas de las fábricas se vierten directamente en
ríos o lagos, las cuales pueden ser extremadamente tóxicas que dañan los
ecosistemas y la salud de las personas.
Ahora hablaré de las consecuencias sociales que también es uno de los temas que
se tienen que tocar cuando se habla de sustentabilidad.

La producción de las prendas se realiza en países que tienen condiciones laborales


precarias. Las pésimas condiciones de trabajo, incluido un salario mal pagado,
representan un problema ético y un claro ejemplo de explotación, así como un
atentado a los derechos humanos, en los que se encuentra también la explotación
laboral infantil y el trabajo forzado. Todo esto con el fin de rebajar el coste de
producción y tener un mayor número de productos lo más rápido posible, para así,
estar dentro del mercado o poder competir y un número mayor de ventas.

En opinión la industria de la moda es esencialmente opaca sobre sus prácticas. Los


clientes no quieren oír hablar de grandes promesas y afirmaciones. Solo
necesitamos que las empresas muestren lo que están haciendo; eso es
transparencia.

Sin datos y divulgación pública, no puede haber forma de que las empresas tomen
decisiones estratégicas y midan su impacto. Una buena opción que podemos hacer
nosotros como para incentivar e impulsar a las principales marcas a ser más
transparentes y alentarlas a revelar más información sobre sus políticas, prácticas
y cadena de suministro. Por último, también necesitamos una mejor regulación
gubernamental para responsabilizar a las marcas y exigir una divulgación adecuada
y formas unificadas de medir el impacto.
Otra cosa que podemos hacer nosotros como ciudadanos responsables seria:
No comprar más ropa de la que necesitas puedes gastar en otras cosas, darle un
segundo uso a tu ropa ya sea como trapo, decoración, etc. Si no quieres darle un
segundo uso, puedes donarla a personas que necesitan ropa, todo esto con darle
una vida útil y no incentivar a la compra descontrolada de ropa solo por moda.

Hay campañas en mundo que se llevan acabo para reciclar la ropa donde campañas
trabajan con una de las mayores recicladoras de ropa del mundo, la alemana I:CO,
que recibe prendas de todos los continentes y se encarga de procesar lo que puede
ser reciclado. Además, se compromete a entregar el valor de los kilos que fueron
efectivamente procesados a diversas ONGs. Primero, la ropa pasa a un proceso de
selección – que incluye alrededor de 350 criterios – como el material, la calidad y
aspecto para determinar si pueden ser vendidas al mercado de ropa de segunda
mano. Las prendas con materiales absorbentes, por ejemplo, son utilizadas para
hacer paños de cocina. Además se debe separar algunas partes de las prendas que
no corresponden a materiales como algodón, denim, etc. Ese es el caso de los
botones, cierres o accesorios que sean metálicos, éstos son sometidos un proceso
de fundición de metales.

Lo que no se puede usar para volver al mercado es procesado para crear fibras
sueltas que sirven para crear nuevas prendas, y lo que definitivamente no puede
ser usado para vestuario, se utilizan para crear materiales para construcción o
aislantes para la producción automotriz.
Por último, el futuro de esta estrategia de moda rápida, si no se hace algo con la
moda rápida aumentará más el consumo de la gente hacia estos productos, esto se
debe a que las redes sociales y los influencers son una campaña de marketing muy
buena que hace que más gente lo vea sin la necesidad de ir al centro comercial y
comprarlo, por lo que tambien las ventas en línea hacen que la compra de ropa sea
más fácil.

Algo bueno es que las personas se estan volviendo más consciente de lo que esta
estrategia de moda rápida esta causando a nivel ambiental y social, no solo se estan
buscando estrategia para que la ropa sea más sustentable si no que muchas
personas estan tomando iniciativas para reducir las consecuencias ambientales
sobre esta situación.

Como había comentado tenemos que incentivar a las empresas que sean más
transparentes en las estrategias que toman, ya que, sin datos y divulgación pública,
no puede haber forma de que las empresas tomen decisiones estratégicas y midan
su impacto. Una buena opción que podemos hacer nosotros como para incentivar
e impulsar a las principales marcas a ser más transparentes y alentarlas a revelar
más información sobre sus políticas, prácticas y cadena de suministro. Por último,
también necesitamos una mejor regulación gubernamental para responsabilizar a
las marcas y exigir una divulgación adecuada y formas unificadas de medir el
impacto.

Es un hecho que el internet a explotado esta industria de moda y mientras más


avances tecnológicos esta seguirá creciendo dañando al medio ambiente por lo que
hay que incentivar y concientizar a las empresas que sean más trasparentes y
consientes sobre el daño que estamos haciendo, asi como no dejarse llevar por lo
que esta de moda si no, comprar por lo que se necesita y no ver a la ropa como
algo desechable, sobre todo.

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