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Anexo I
Pero: “el grupo no nace, se hace” , o mejor dicho, se va haciendo permanentemente porque no
basta estar juntos para que el grupo esté constituido.
Para ello será necesario usar objetivos y técnicas adecuadas. La pluralidad de manos
enriquece la producción y la pluralidad de mirada acrecienta la objetividad. La relfexión
teórica llegará a posteriori como una consecuencia lógica del trabajo realizado en
conjunto.
En este taller el proceso de investigación está siempre presente porque los métodos de
conocimiento no se dan como respuesta definitiva, como productos acabados, sino como
un proceso de búsqueda continua. Generalmente en los talleres no se prioriiza la
investigación como objetivo en sí mismo, pero sí se utiliza los recursos de los métodos y
técnicas de investigación. Aunque puede haber también talleres específicos de
investigación.
En el taller el coordinador no enseña sino que ayuda a aprender, guía a su grupo en los
distintos momentos por lo que pasa éste. En el primer acercamiento, el maestro-
coordinador deberá ser un observador receptivo de su grupo para llegar a conocer la
situación por la que el mismo está atravesando en cada momento. Y podrá decidir
intervenir o no según las necesidades del grupo a su cargo.
El maestro-coordinador deberá, además: organizar, estimular, contener, explicitar y
realimentar a su grupo, porque no sólo tendrá que proponer actividades que faciliten la
tarea sino también deberá trabajar sobre los vínculos que se generan en el grupo.
Necesitará que su práctica como coordinador sea asesorada y/o supervisada por un
coordinador con más conocimientos y, sobre todo, con mayor experiencia que él mismo
en el campo de la dinámica grupal.
Es quien observa y registra los distintos momentos por los que pasa el grupo, la forma de
abordar el trabajo y de resolver los problemas vinculares.
Ayuda al coordinador en la lectura del emergente grupal: (qué se está diciendo aunque no
se lo exprese verbalmente, por qué se hace lo que se está haciendo). Podrá ser un
participante del grupo o no.
En el vínculo docente alumno se rompen las habituales relaciones de poder ya que, por
momentos, los roles se intercambian.
En el taller el conocimiento deja de ser objeto que el docente posee y transmite para
llegar a ser mediador en la enseñanza-aprendizaje.
……
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II. Bitácora
Se trata de un material (cuaderno, carpeta, libretita, conjunto de papeles afiche, o la forma que
cada maestro le quiera dar, también dependiendo del número de chicos 1) en donde se escribe
en forma colectiva, con los chicos, lo que se va haciendo y aprendiendo cada día.
Conversar sobre lo realizado y sobre los aprendizajes que se van logrando les permite a los
chicos rememorar y tomar conciencia de sus logros, así como continuar comprendiendo que la
escritura tiene como una de sus finalidades guardar memoria y también plasmar las
expectativas. Desde la perspectiva del maestro, es útil para evaluar esos logros por parte de los
chicos, tener un medio de ejercitar la escritura colectiva (en la medida en que el texto se acuerda
con los chicos) y comunicar a otros (familias, personal directivo) las tareas y logros.
Apertura de la bitácora:
Al inicio del período de recuperación, el maestro les explica a los chicos que van a seguir
encontrándose por unos días más para aprender en un grupo pequeño, lo que les permitirá
contar con él más cercanamente; también les relata lo que van a hacer: jugar, escuchar cuentos,
1
En general, las escrituras colectivas (que se hacen a la vista de todos) se realizan en papeles afiche o en el pizarrón. Cuando el
grupo de los niños es pequeño (digamos, un máximo de tres chicos), también se puede hacer en una hoja, sobre la mesa de
trabajo: el maestro al medio del grupo y los chicos dictándole y siguiendo la escritura, leyendo, etc. De esta manera, se logra,
también, una situación de mayor proximidad.
escribir. Los chicos, a su vez, comentan, a pedido del maestro, lo que les gusta hacer en la
escuela y lo que sienten al iniciar esta etapa diferente del año escolar. Dedicarse un momento a
esta conversación puede permitirnos conocer un poco más sus preocupaciones y preferencias,
aunque puede ser que los chicos no sepan muy bien qué contestar (si han venido “ocultándose”
en la masa del grupo hasta ahora, seguramente les resultará difícil hablar de sí mismos en este
momento); en tal caso, el maestro escucha solo lo que tienen para decir, repregunta algo si es
necesario, pero sobre todo se concentra en que se genere un clima de grupo intelectual, bajo la
idea de que todos (chicos y maestro), se comprometen nuevamente en este momento.
A partir de esta conversación, el maestro les comenta que todos los días van a escribir entre
todos lo que fueron haciendo; al finalizar esta etapa le van a leer la bitácora al director de la
escuela (u otra persona con quien el maestro haya acordado esto previamente).
- lo que quieren aprender en este período (aquí es conveniente no incluir propósitos que sean de
muy alto alcance, puesto que es probable que en este tiempo no se culmine todo el proceso que
no se ha logrado a lo largo de todo un año escolar, pero sí una nueva relación con la escritura,
unas ganas de aprender, de escuchar cuentos, de aprender juegos, de mejorar en algún aspecto
puntual, etc.).
Al finalizar las actividades, cada día se destinan alrededor de quince minutos para recordar lo
que hicieron y lo que aprendieron. Luego, se acuerda entre todos un borrador oral para esa
escritura, que el maestro lleva a cabo a la vista de todos (dependiendo de la cantidad de chicos,
esto se puede realizar en un afiche o en un material más pequeño). Es importante focalizar esta
escritura en la pregunta: ¿Si lo decimos así, el director (o quien sea el destinatario) nos va a
entender? Con la mente en el futuro lector, se buscan maneras más claras para decir aquello
que se desea comunicar.
Bitácora de la semana
Al concluir la semana, se escribe un texto para contar cuáles fueron las actividades que más les
gustaron y explicar por qué. Seguramente, previamente será necesario releer las bitácoras
finales de cada día.
En caso de que se cuente con quince días de trabajo, se recomienda realizar un texto al finalizar
cada una.
(Extraído del Plan de Alfabetización inicial.- Propuesta días más para seguir aprendiendo - Ministerio de educación
de la Naición)