UNIVERSIDAD NACIONAL

AUTÓNOMA DE HONDURAS
Facultad de Humanidades y Artes
Carrera de Pedagogía y Ciencias de la Educación

Asignatura PA-217:
Administración Educativa III

Tarea: Ensayo; La importancia de la buena dirección

en los procesos educativos y el papel del

director(a) como motivador para el cumplimiento

de los objetivos institucionales.

Presentado por:

Estudiante No. Cuenta

Joel Eduardo Pérez Álvarez 20181006412

Catedrática:
María Cristina Aguilar Martínez

07 de abril de 2023

Ciudad universitaria “José Trinidad Reyes”

 La importancia de la buena dirección en los procesos educativos y
el papel del director(a) como motivador para el cumplimiento de los
objetivos institucionales

Llevar a cabo una labor dentro de la dirección en los procesos educativos, es una
labor, organizada que se debe de construir de una manera minuciosa, en tareas
organizadas dentro de la planificación, la ejecución, control y la evaluación para
llevar a cabo una buena dirección de todo el personal docente que se encuentra
vinculado a las labores académicas del centro educativo. Para llevar a cabo esta
labor, es necesario no dejar por fuera alguno de los contextos que se vinculen al
proceso educativo, donde se encuentran e interactúan tanto el personal docente
como los y las estudiantes.

La dirección aplicada a los procesos educativos, en otras palabras, son actividades

propias del tipo Administrativo-pedagógico, donde como mencionamos
anteriormente, se involucra la planificación, organización, dirección, supervisión la
evaluación, el presupuesto con el cual cuenta el instituto, entre otros factores, para
realizar una buena labor directiva como máxima autoridad educativa a nivel de
instituto.

Un centro educativo con una buena administración, reconoce la fuerte necesidad

que conlleva poseer una buena dirección en el instituto, ya que, a través de ella, y
como la persona ejerza su rol durante la dirección de forma responsable, se podrá
asegurar en la mayor medida posible alcanzar el éxito en la gestión de la
organización. Con esto, me refiero a que, el director del centro educativo, se
encuentra como la primera autoridad del instituto y máximo responsable inmediato
para administrar la prestación del servicio educativo, llevando su labor a cabo, bajo
el cumplimiento dentro de las normas y lineamientos establecidos por la Secretaría
de Educación.

Es bien sabido, que un centro escolar será exitoso en la eficiencia, principalmente

en la medida de lo eficiente, creativo, calculador y responsable que sea su director
al mandato de la institución educativa.
La dirección, o función que cumple un director para la labor dentro de los centros
educativos es considerada una necesidad pedagógica administrativa, siendo de vital
importancia, ya que facilita la movilización del personal, en lo que respecta al
momento de diseñar, implementar y llevar a cabo la ejecución de las políticas
institucionales, que les beneficien en herramientas para el acompañamiento
pedagógico en la labor educativa. Es importante que dentro de ello, el director se
desarrolle no solamente como una autoridad máxima, sino que también como un
líder, que sea consciente de la realidad donde se sitúa la institución que dirige, y
que la dirección que le dé a la organización educativa sea por el mejor camino
dentro de lo que a sus posibilidades y alcance pueda permitirse llevar a cabo de
manera conjunta con todo el equipo conformado por el personal docente y la
comunidad educativa en general.

Es importante recalcar, de que la función de un director es de una complejidad de

alto nivel, esto, no solamente relacionada por todo el conocimiento que debe
poseer, sino que debe presentar destrezas y habilidades gerenciales, experiencia y
liderazgo, para valerse de los recursos que tiene a su disposición, tantos
pedagógicos, administrativos y organizacionales, que le ayuden a plantear objetivos
institucionales. Los objetivos institucionales que se deben llevar a cabo, deben
desarrollarse con la motivación constante a todos los involucrados, para no
desviarse de lo que se desea alcanzar.

Los objetivos institucionales que se plantee el director educativo, deben ser

construidos de forma minuciosa para que los mismos, cumplan en lo mayor posible
satisfacer las necesidades educativas presentes en los estudiantes, planeando y
realizando la labor en medida de que todo se encuentre al alcance de sus manos y
no fuera de sus posibilidades.

Es por ello, que se reconoce que un director de centro educativo debe de tener
conocimiento a totalidad de la realidad donde se desenvuelve, para formular sus
objetivos institucionales con liderazgo hacia el personal educativo, para lograrlos de
forma conjunta con la comunidad educativa involucrada y lograr cambios reales en
los estudiantes, quienes serán beneficiados, en todos los aspectos donde los
objetivos institucionales sean planteados dentro de las áreas que deban tratarse.