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La empresa de la autora prestaba servicios jurídicos a taxistas, pero enfrentó problemas de pago que causaron pérdidas. Esto requirió cambiar rápidamente el mercado objetivo, estrategias y servicios sin seguir un método formal de toma de decisiones. Aunque la decisión fue acertada, un proceso estructurado habría arrojado mejores resultados a largo plazo. La autora reconoce la importancia de manejar conflictos y trabajar en equipo para lograr objetivos empresariales.
La empresa de la autora prestaba servicios jurídicos a taxistas, pero enfrentó problemas de pago que causaron pérdidas. Esto requirió cambiar rápidamente el mercado objetivo, estrategias y servicios sin seguir un método formal de toma de decisiones. Aunque la decisión fue acertada, un proceso estructurado habría arrojado mejores resultados a largo plazo. La autora reconoce la importancia de manejar conflictos y trabajar en equipo para lograr objetivos empresariales.
La empresa de la autora prestaba servicios jurídicos a taxistas, pero enfrentó problemas de pago que causaron pérdidas. Esto requirió cambiar rápidamente el mercado objetivo, estrategias y servicios sin seguir un método formal de toma de decisiones. Aunque la decisión fue acertada, un proceso estructurado habría arrojado mejores resultados a largo plazo. La autora reconoce la importancia de manejar conflictos y trabajar en equipo para lograr objetivos empresariales.
La toma de decisiones es el proceso mediante el cual se realiza una elección entre
diferentes opciones, para resolver situaciones cotidianas ya sea en el ámbito laboral, familiar, personal o empresarial. Tomar una decisión puede generar espacio a una disyuntiva, hacer uso del razonamiento en muchas ocasiones puede resultar caótico, ya que la persona o el grupo que toma la decisión pueden estar motivados por sentimientos de duda, frustración, miedo o profunda excitación que no permiten pensar y definir de manera objetiva una situación planteada. Soy la accionista y gerente comercial de una empresa que tiene por objeto social prestar servicios de asesorías jurídicas en todo tipo de accidentes, principalmente el mercado que se manejaba era el de los conductores de servicio público, los taxistas más específicamente, tenerlos a ellos como clientes representaba para nosotros como empresa la mayor fuente de ingresos, sin embargo el tema del recaudo se volvió un problema, a pesar de que había un contrato de por medio, se encontraron grandes dificultades por parte de ellos para cumplir con el pago del servicio. Este inconveniente empezó a reflejar pérdidas económicas considerables que pusieron en riesgo tanto el capital humano como financiero de la empresa; esta situación nos llevó a replantear y a tomar decisiones de manera inmediata, como cambiar de mercado objetivo, implementar nuevas estrategias de mercadeo, brindar otro tipo de servicios y ampliar el portafolio para poder sacar a flote nuevamente la compañía. Durante este proceso no se siguió un método en particular ni similar al de toma de decisiones, por la premura del tiempo y la situación crítica que pasaba la empresa, lo importante era tomar acciones correctivas de manera rápida que evitaran problemas jurídicos y financieros. Considero que la decisión fue buena y acertada, ya que arrojó óptimos resultados casi que de manera inmediata mejorando considerablemente el panorama, sin embargo, si se hubiese realizado un proceso de toma de decisiones estructurado los resultados serían mucho más positivos y con perspectivas más amplias, de igual manera se sigue trabajando sobre la marcha para la consecución de objetivos orientados a cumplirse al 100%. Como gerente de mi empresa, sé que el conflicto aunque se puede manejar estoy segura que no se puede evitar, hay situaciones cotidianas que nos confrontan y genera espacios de opiniones divididas que ponen a prueba nuestra capacidad de resolución y toma de decisiones para garantizar un buen clima laboral. El conflicto siempre va a existir y no debemos tomarlo como un todo negativo, ya que la diversidad o pluralidad de criterios nos permite evaluar todos los frentes para buscar la mejor opción para la empresa. El trabajo en equipo coordinado es importante porque garantiza la consecución de objetivos específicos, afianza las relaciones laborales, mejora el clima laboral, se trabaja de manera más productiva, se integran la experiencia, el conocimiento, el aprendizaje, la comunicación, el liderazgo, la ética, el compromiso y el sentido de pertenencia por la organización.