Está en la página 1de 1

Cada niño y niña son un mundo, y en cada mundo existen cien maneras de comunicar, de

acoger, de percibir, cien maneras de ser y enseñar a ser.


Los niños y niñas de párvulos en cada intento de exploración, encuentran una experiencia
de vida en la que se descubren e identifican en el otro la oportunidad de aprender, de
recorrer juntos, un camino lleno de desafíos que les permite el desarrollo de habilidades
físicas, motrices, lingüísticas, emocionales, científicas desde el control y automatización de
movimientos que empiezan a adaptarse al medio.
las relaciones entre pares juegan un papel importante en el desarrollo infantil.  Ellas ofrecen
singulares oportunidades para construir aprendizajes sociales, que de una u otra manera los
llevan a comprender las dinámicas del medio. Sus intereses y necesidades los llevan a
contextos donde el compartir sus juguetes, ofrecer un poco de su comida, motivar y
convencer a sus amigos, los intentos por calmar el llanto del otro, defender sus intereses y
conciliar, les permite perfilarse como seres sensibles, empáticos y resilientes.
El deseo de conocer su mundo, los lleva a una constante exploración del medio.
permanentemente están tocando, probando, experimentando e interactuando con todo lo
que les rodea. Todo este proceso de acercamiento a su mundo por medio de su cuerpo y sus
sentidos como mejores aliados, les permite, además, experimentar y avanzar en la vivencia
de ser parte de grupos que los llevan a embarcarse en aventuras, intercambiar ideas, saberes
y opiniones, con sus pares, sus maestras y otros adultos, no solo empleando el lenguaje
verbal, sino también, el gestual, interpretando miradas, posturas, etc. Es en esta interacción
donde las niñas y los niños se van acercando a las construcciones sociales.
En este nivel de desarrollo, es verdaderamente significativo pertenecer a un grupo de
aprendizaje con el cual, los niñas y niñas se conectan y crear lazos de amistad, pero también
de ciencia, de pensamientos con los que le dan sentido y significado a sus representaciones
físicas y metales.
Un grupo de aprendizaje es como una colección de personas que están emocional,
intelectual y estéticamente involucradas en la resolución de problemas, la creación de
productos y en la búsqueda de significado; un ensamblaje en el que cada persona aprende
autónomamente y a través de las formas de aprender de los otros, facilitando un tipo de
aprendizaje cualitativo autónomo, construyendo su entendimiento personal del mundo.
Mara Krechevsky y Ben Mardell

También podría gustarte