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Una niña recibe

El síndrome de Turner es un trastorno genético que afecta el desarrollo de las niñas. La causa es
un cromosoma X ausente o incompleto. Las niñas que lo presentan son de baja estatura y sus
ovarios no funcionan en forma adecuada.

Otras características físicas típicas del síndrome de Turner son:

 Cuello corto con "pliegues" que van desde la parte superior de los hombros hasta los lados
del cuello

 Línea del cabello bajo en la espalda

 Baja ubicación de las orejas

 Manos y pies inflamados

La mayoría de las mujeres con síndrome de Turner son infértiles. Corren el riesgo de tener
problemas de salud como hipertensión arterial, problemas renales, diabetes, cataratas,
osteoporosis y problemas tiroideos.

Los médicos diagnostican el síndrome de Turner sobre la base de los síntomas y una prueba
genética. A veces se encuentra en pruebas prenatales. No existe una cura para el síndrome de
Turner, pero hay algunos tratamientos para los síntomas. La hormona del crecimiento suele
ayudar a que las niñas alcancen estaturas cercanas al promedio. La terapia de sustitución
hormonal puede estimular el desarrollo sexual. Las técnicas de reproducción asistida pueden
ayudar a algunas mujeres con el síndrome de Turner a lograr embarazarse.

Mutación genética poco frecuente que afecta el desarrollo cerebral en las niñas.

A pesar de ser ocasionado por una mutación genética, el síndrome de Rett no suele ser
hereditario.

Los bebés parecen saludables durante los primeros seis meses de vida, pero con el tiempo pierden
rápidamente la coordinación, el habla y la capacidad para usar las manos. Luego, los síntomas
pueden estabilizarse durante años.

No hay cura, pero los medicamentos, la fisioterapia, la terapia conversacional y el apoyo


nutricional ayudan a controlar los síntomas, evitar complicaciones y mejorar la calidad de vida.

El perro no quiere moverse tanto.

Estado de flacidez. Busca músculos flácidos en tu perro que no sean tan duros. Puedes notar que
tu perro se siente «más suave» y también más delgado.

Marcha anormal. La pérdida del tono muscular provoca que no sea capaz de caminar bien, por lo
que parece torpe y tiene más «accidentes» de lo común.

Inestabilidad al estar parado. Esto se observa como pequeños temblores de las extremidades
cuando se para o camina. Conforme pierde la fuerza, al perro se le hace más difícil mantenerse
en pie.
Imposibilidad de levantar la cabeza. Aunque no es un signo que aparezca en cualquier tipo de
atrofia muscular, las que afectan los músculos del cuello provocan que el can sea incapaz de
sostenerlo. En consecuencia, camina con la cabeza agachada la mayor parte del tiempo.

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