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BOCETO DE SEMINARIO DE OCLUSION

DESARMONIA OCLUSAL Y SINDROME DE COLAPSO DE MORDIDA

DESARMONIA OCLUSAL: Cuando se presenta alteraciones de una de las partes, el


sistema responde
adaptándose para conservar su funcionalidad; esta adaptación podría terminar con
el tiempo en cambios patológicos, como desarmonías oclusales leves, moderadas
o severas y dependiendo de la magnitud de la misma y de la presentación de
eventos estresantes que superen el umbral de adaptación del paciente. Teniendo
como consecuencia que al sobrepasar este límite se hablará de una oclusión
patológica, Definida por Rossemberg como aquella patología donde hay evidencia de
enfermedad en cualquiera de los componentes del sistema por causas oclusales. A
continuación se muestra el cuadro resumen de los diagnósticos oclusales reportados
por la literatura (Ilustración 10), presentado por Guerrero, Marín & Galvis en el año
2013.

DESARMONIA OCLUSAL LEVE.


Siendo el estado más leve de la desarmonía oclusal encontraremos 2 tipos, la IA y la
II. En la IA la máxima intercupidacion coincide con la relación céntrica adaptada.
Puede presentar algún tipo de deformación, pero logro generar cambios
adaptativos en las superficies articulares. Las articulaciones pueden aceptar la
carga sin producir malestar al sistema por tanto no es necesaria la corrección oclusal
ya que no existe desarmonía entre ATM y la Oclusión. En la II, la máxima
intercupidacion no coincide con relación céntrica. Los cóndilos deben desplazarse
desde relación céntrica a máxima intercuspidacion. Hay discrepancia oclusal, y
puede verse afectado por obturaciones altas que generan puntos de contacto
prematuros y o interferencias oclusales.
En los dos tipos de desarmonía oclusal leve se tiene que no hay ausencias dentales,
hay una guía anterior funcionante, y hay un espacio libre interoclusal adecuado, sin
presencia de disminución en la dimensión vertical.
DESARMONÍA OCLUSAL MODERADA:
Teniendo en cuenta que la enfermedad oclusal es de tipo evolutivo, el proceso
puede continuar, va la desarmonía oclusal moderada, de la cual se encuentras 2
tipos, la IIA y la III, en donde la IIA se caracteriza por tener la máxima
intercuspidacion no coincidente con posición de céntrica adaptada, además se van
a encontrar hallazgos como:
 Los cóndilos se deben desplazar para que ocurra la máxima intercupidacion.
 Dolores musculares por desórdenes intracapsulares o interferencias
oclusales.
 Malposiciones y ausencias dentales.
 Guía anterior funcionante
 Espacio libre interoclusal alterado.
La desarmonía oclusal moderada III se caracteriza por Máxima intercupidacion no
coincide con relación céntrica, además signos y síntomas de desorden
temporomandibular en curso, presenta cualquier tipo de alteración oclusal asociado
a perdida prematura de dientes. perdida de soporte posterior, alteración del plano
oclusal, traumatismo oclusal primario o secundario y un ELI alterado.
DESARMONIA OCLIUSAL SEVERA
Según la clasificación de Guerrero en el 2013, es de un solo tipo, la IV, en esta se
encuentra que la máxima intercupidacion no coincide con relación céntrica, o no
puede ser verificada. La relación oclusal está en una etapa activa de trastorno
progresivo debido a que las ATM se encuentran patológicamente inestables.
Además, se puede encontrar mordida abierta progresiva, asimetría progresiva y
protrusión mandibular, una posición condilar poco estable, la dimensión vertical
alterada, una guía anterior no funcionante. Es una alteración oclusal evidente y
marcada.
introducción y concepto del Colapso Posterior de Mordida.
Antes de abordar esta enfermedad desde un punto de vista clínico, diagnóstico o
terapéutico, sería interesante recordar apartados como el recuerdo histórico y
conceptual de esta patología, así como la fisiopatología, o clasificación y diagnóstico
clínico y diferencial, que nos ayuden a la hora de abordar su tratamiento dentro de la
Rehabilitación Oral.
El diagnóstico precoz y la eliminación de los posibles factores etiológicos al igual que
en la mayoría de enfermedades, constituyen la mejor manera de tratarla que es la
Prevención, que, de no realizarla a tiempo, puede conducir a un deterioro importante
de todo el sistema estomatognático, cuya única terapia será una Rehabilitación Oral
Completa.
Definición y Recuerdo Histórico
En 1966 Ramfjord y Ash acuñaron el término “Colapso de Mordida “al referirse a esta
patología. Posteriormente en 1968 Amsterdam y Abrams hacían referencia a este
término como “Colapso Posterior de Mordida “, causado por una disminución de la
Dimensión Vertical de Oclusión DVO. Con posterioridad a estos autores, en 1975
Stern y Brayer propusieron el término de “Colapso de la Oclusión “ y la Academia de
Prostodoncia en 1994 lo bautizó como “Sobremordida Posterior”.
El colapso posterior de mordida CPM es una enfermedad común en pacientes adultos,
que puede acompañarse de enfermedad periodontal que dependiendo del grado de
afectación y de la pérdida de soporte óseo, puede asociarse a un volcamiento o
mesialización de los dientes posteriores con disminución de la DVO, pudiendo ir
asociado o no, con una vestibulización y espaciamiento de los dientes anteriores EDA.
¿Enfermedad o Síndrome? Llegado a este punto y dado que en la literatura mundial
al referirse a esta patología utiliza ambos términos, considero que sería interesante
analizar si estamos ante uno u otro vocablo. Para mí el Colapso Posterior de Mordida
es un Síndrome, y me explico ayudado de Wikipedia:
En medicina, un síndrome (del griego συνδρομή syndromé, ‘concurso’) es un cuadro
clínico o un conjunto sintomático que presenta alguna enfermedad con cierto
significado y que por sus propias características posee cierta identidad; es decir, un
grupo significativo de síntomas y signos (datos semiológicos), que concurren en
tiempo y forma, y con variadas causas o etiología.
Todo síndrome es una entidad clínica que asigna un significado particular o general a
las manifestaciones semiológicas que la componen. El síndrome es plurietiológico
porque tales manifestaciones semiológicas pueden ser producidas por diversas
causas. De este modo, es común diferenciar entre formas primarias y secundarias de
un mismo síndrome. Las formas primarias corresponden a aquellos síndromes no
relacionables con una etiología o enfermedad conocida, mientras que las formas
secundarias son aquellos síndromes con etiología conocida o al menos vinculados
clínicamente con otra enfermedad. Por ejemplo, el síndrome de Raynaud describe un
trastorno vasomotor que afecta fundamentalmente a las manos y que puede aparecer
como forma primaria/idiopática o asociado a numerosas causas como enfermedades
autoinmunes, hematológicas, fármacos, etc.
Si bien por definición, síndrome y enfermedad son entidades clínicas con un marco
conceptual diferente, hay situaciones en la patología que dificultan una correcta
identificación de ciertos procesos en una categoría o en otra.
Una vez leído a Wikipedia, me reitero en que el CPM es para mí un síndrome, dado
que su clínica viene dada por una serie de signos y síntomas que aparecen en
distintas enfermedades, como analizaré a continuación.
Los Factores Etiológicos más frecuentes del Colapso Posterior de Mordida son los
siguientes:
• Enfermedad periodontal en sus distintos grados, que en casos severos provoca un
EDA.
• La no reposición de dientes extraídos que junto con la anterior suelen ser las
causas más frecuentes y descritas en la literatura mundial.
-Más frecuente en braquicefalia
-Desgaste por atrición anormal de los dientes en bruxistas
-Alteración oclusal por caries, fractura o mala operatoria dental
-Maloclusiones como clases II-2 o mordidas abiertas anteriores no tratadas, que
analizaré más adelante.
La Fisiopatología del Colapso Posterior de Mordida parte de una oclusión inestable
provocada por diversos motivos, que conduce a una disminución de la Dimensión
Vertical de Oclusión, acompañada o no de periodontitis leve, moderada o severa, que
dependiendo de su gravedad, puede provocar EDA, sin querer esto decir que siempre
que exista un EDA deba estar acompañado de una CPM y viceversa.
El colapso posterior de mordida es una maloclusión crónica del adulto, en la que la
pérdida gradual del soporte dental posterior, originado a su vez por una inadecuada
inclinación axial de los dientes posteriores, un desgaste excesivo de los mismos o por
una combinación de ambos factores que provocan, en caso de no ser corregidos a
tiempo, una transmisión inadecuada de las fuerzas masticatorias, que a futuro
producirán un deterioro importante de todo el complejo sistema estomatognático.
Clasificación del Colapso Posterior de Mordida
Atendiendo a la etiología de esta enfermedad o síndrome, me atrevería a clasificarla
en tres grupos:
1- CPM DENTAL en el que no hay pérdida de soporte óseo, siendo su causa la no
reposición de dientes extraídos, el desgaste de los dientes posteriores de premolares
a molares o la combinación de ambos.
2- CPM PERIODONTAL asociado a una pérdida de soporte óseo, que dependiendo
del grado de afectación suele acompañarse de una vestibulización de los dientes
anteriores superiores EDA.
3- CPM MIXTO que suele ser el más frecuente, por tratarse de una enfermedad del
adulto, con patología dental y periodontal.
El diagnóstico del CPM nos lleva a un plan de tratamiento específico y
multidisciplinario, teniendo que incluir técnicas periodontales, ortodóncicas y
prostodoncias.
El ideal en cuanto al Tratamiento del CPM se refiere, sobre todo cuando existe una
mesialización de molares, consistiría en realizar un tratamiento periodontal seguido de
una terapia de ortodoncia que reposicione los dientes, intentando recuperar la DVO
perdida con el posterior tratamiento rehabilitador de las piezas ausentes. Este sería el
tratamiento de elección, pero como he comentado en varias ocasiones, no es menos
cierto que muchos pacientes adultos, pese a nuestra insistencia, no desean pasar por
dichos tratamientos y nos solicitan otros más rápidos de ejecución, que en muchos
casos les podremos ofrecer, si les realizamos Estudios Funcionales y Encerados
Diagnósticos.
Caso clínico.
Mujer de 48 años de edad, Bruxista consciente día y noche, Clase II-2, con un
Síndrome CPM a simple vista, Bruxista consciente día y noche, gran deterioro oclusal
y ausencia de 14,15,16,26,36,37,46 y 47, enorme y llamativa extrusión de 17 y 27, con
dolor por sobrecarga de toda la musculatura masticatoria y en ambas ATM a la
palpación y apertura.
Diagnóstico Clínico: Bruxismo grado II, desgaste por atrición grado II con Síndrome
CPM de origen Dental, dado que existe buen soporte óseo, originado por movimientos
de dientes posteriores al no haberse reemplazado en su momento las piezas extraídas
con ausencia de Esparcimiento de Dientes Anteriores EDA.
Todo esto deberemos confirmarlo en el Estudio Funcional y Encerado Diagnóstico que
serán las siguientes pruebas complementarias.
Dejo este caso aquí, ya que será objeto del próximo artículo 37, segunda parte
dedicada al CPM, en el que expongo cómo realicé una ROC para obtener una
restitución de la funcionalidad y estética severamente deterioradas.

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