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Pensar Como Un Enjambre Redes Interetnic PDF
Pensar Como Un Enjambre Redes Interetnic PDF
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Amazonra
CONTEM PORÁN EA
Margarita Chaves y Carlos Del Cairo (compiladores)
@'Klffit'fftr
Persptrtivas anÍopológÉs sobre la Amuonia ontemporánea / Margatita Chaves Chamotro y
carlos Luis Del Caho Sihr¿, 6mpilador6- -Bqgotá, Instin¡to C¡lombiano de Ant¡opología e
Histoía y Fonlñcia Universid,ad Javedana, 20 I 0.
680 p., il., mapas
978-958-8t8t-62-2
1. Comunidadesindígenas-Amazonas(Región).2.-¡dcnfidadcultu¡al.-3.Coü-Amazonas
(Región). +. Costumbrs indfgenas. -1. Chaves Chamotro, Margaria. -lt. D€l Cairo Silva, Ctrlos Luis
cDD 981.1 306.08998
INsrruTo CoLoMBTANo DE ANRorcmfa E HlsroRl^, ICANH, y PoNrHoA UNMRSTD D lAvEru NA, PUJ
Teléfonos: (57 1) 561 94 00 I 5ó1 9700 Teléfonos: (57 t) 232 76 6s | 320 8320 y territoriales de los piaroa de Venezuela
1^E
Faxr (57 1) 561 9ó 00 extensiones 125 ó 144 Faxr (57 1) *t. 47 52
GERI(ñ FREIRE.. ..
M.icanh.govco w,.iaveriana.edu/editorial
y indígena amazónica
Bogotá, D. c,, colombia Paisanos en Bogotá. ldentidad étnica migración
t29
Luls¡ Fenx,r¡¡o¡ Sfuicn¡2r........-.......... -"'
con las autofizaciones de:
Edibra Unsp, 2Oo2; Conteúdo Exprsso S.A, 1992i hrade Publia¡ions, 1992;
SAGE Publ¡aüons Ld., 2003r Taylor 6¡ Francis Group, 1999 y 2OO5; Staae Universiry of Nil York, sul¡y hes, 1997; rA ALTERIDAD Y tAs PoÚncAs DE tA IDENTIDAD
AmeriÉn Anrhropologiel Asff¡aüon, AAA, 1997; y Rsista Andina, 2006 2| ras REPRESENTAcIoNEs DE
-153-
Todos los derechos resenadG.
Esta publicación no puede ser reproducida, total ni parcialmente, por ningrln medio invenbdo
y ecopolítica
o por invenutrse, sin permiso previo del ICANH y de la Pontificia Universidad Javeriana. E1 punto medio cambiante. lndígenas amazónicos
lmpreso en colombia por Javegral calle 46¡ N" 82-54, inter¡or 2, Bogotá, D. c. Bern A. Co¡¡ru.t¡ Y L¡un¡ Gn¡n¡,u...............,...
5| r-os DlscuRsos SoBRE DESARRoLLo
Las encrucijadas del liderazgo político indfena en la Amazonia colombiana
-467-
occidental colombiana
Coordenadas en juego. Identidad cultural caboclo en la Amazonia Paradojas dei desarrollo alternativo en la Amazonia
..537
M¡nf¡ Cuueilcr¡ R¡ltfnEz v |uluN'r Iclesus -" "-
.'" " " "
4| r-as FRoNTERAs cuLTuRALEs y NAcToNALEs visión ticuna y visión conservacionista sobre los delfines'
Ética y conocimientos en el trapecio amazónico
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S¡lou,qNco, JAIME et á1. (1993).'An Experiment in Rainforest Conservation". Cultural después de tres meses él y doña lsabel se fueron a vivir juntos. En una serie de visio-
S urv íval Quarterly (verano) : 56-5 9. nes, los ancestros le enseñaron sobre el mambe (la coca) y le dieron de mambear por
primera vez. En otra visión, los ancestros (que ahora son cinco) diieron a doña lsa-
SrE¡n¡¡¡N M¡cLe¡¡, Ar-r-vn (1994). "'Oniy Slaves Climb Trees': Revisiting the Myth of
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"Porque los otros no eran mis maridos", dice doña Isabel, que tuvo dos compañeros
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TuR¡¡En, T¡R¡r,rcE marido, tiene que construü maloca, porque nosotros no tenemos a donde ir, no tenemos en
thropologt Todqy, 8: 5-16. donde sentarnos. si construye maloca allí, nosotros iremos". "cuando mi padre se
UNróN Hu¡cr¡r¡vos (1997a). "lnforme de la directiva de la Unión Indígena paralaad- murió,', cuenra doña lsabel, "yo lloraba y lloraba: soy huérFana. É1 se murió cha-
muscado como un ratón, quemando chagra. Mi esposo me consoló,
'Unnimaíramal
ministración, uso, aprovechamiento y gestión comunitaria del área de los Hua-
nunca muere, su corazón vive, escucha su voz'. Yyo lo oí cantando en un
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l4Bel
490 | rlNsan coMo uN ENjAMBRE. REDEs rNTDRÉTNrcAs EN LAs MÁRGENEs DE LA MoDERNTDAD
GToVANNA r',1rcanEr-r-r | 491 ii::l
baile, ofreciend o cahuana2 a los invitados". Doña Isabel tenía muchas matas i.:
de coca, con el fin de conectar o rearticular otras" (Grossberg, 1992:54). El enfoque en la praxis
pero un maloquero envidioso ilamó a la policía para que las arrancara.
con las matas que aquí se propone articula los siguientes argumentos. 1. que los procesos de produc- i
de coca que quedaron y el apoyo de otras tres familias, aun siendo mujer,
doña Isabel ción de sentido tienen bases corpóreas; 2. que la capacidad de actuar en el presente
logró construir su maloca. se demoraron ocho meses. Ella les dio decomer
plátano, cahuana. ya han tenido varios rituales de
casabe, implica un proceso de selección histórica, y que en este proceso el acto de olvidar es tan ::
baile. importante como el acto de rememorar. Como sugiere la narración de doña Isabel, a ia ::
cual volveremos más adelante, esta labor comporta la continua negación de conceptos ,ll
y valores culturales como condición para formar nuevos conceptos y vaiores (Fabian,
2OO1);3. que la reflexión sobre lo cotidiano debe situarse en la intersección enre mi-
En un ar!ículo publicado 0", or,*.r;;; en ra página web der Foro sociar Mun-
croprocesos de producción de sentido y macroprocesos de dominación (Escoba¡ 1 992).
dial, Arturo Escobar (2003) recalca Ia necesidad de prestar más atención a la
relación
entre la realidad social, el marco teórico que utilizamos para interpretarla y En un escenario que ha sido plasmado históricamente por la utilización estratégica de
las políticas
y esperanzas que nacen de nuest¡as interpretaciones. El argumento de Escobar para categorías étnicas con ei fin de consolidar fronteras tanto fisicas como conceptuales,
ver Ia realidad social de 'btra forma" se sustenta en una serie de teorías alternativas la capacidad de enlazar reconstrucción cultural e interculturalidad adquiere un sentido
que, reunidas bajo el nombre de "teoría de la complejidad", buscan profundo de resistencia y agenciamiento.
entender las diná_
micas y los procesos que intervienen en la creación de sistemas complejos.
ta teoría
de la complejidad sostiene que en ámbitos tan diferentes como lnternet, las
colonias Los rcrló¡uerRos
de insectos, el sistema inmunológico o el cognitivo, los barrios de una
ciudad o los En las afueras de Leticia, a lo largo de la única carretera que se desprende de la ciu-
movimientos sociales globales, la compleiidad no es el resultado de un plan general
dad, una señalización marca la distancia hasta Tarapacá, sobre el río Putumayo: 175
implementado desde arriba, si no algo que emergd desde abajo: de un entrete]ido
de kilómetros. En realidad, la carretera se intenumpe bruscamente en el kilómetro 18 con
interrelaciones que se acogen a normas sencillas y locales y que se multiplica;
y au- unos cuantos kilómetros más de camino destapado. La carretera ocupa un lugar clave
toorganizan con una lógica que ellas mismas van creando. Más que la suma
de sus. en la topograffa del poder de la frontera. Vía de colonización y artefacto retórico del
partes, estas redes reflejan una inteligencia coiectiva, que se adapta y
al mismo tiempo discurso del progreso, la carretera es también el registro visible de la corrupción de las
genera las condiciones para su existencia. íntimamente dinámica,
descentralizada y no administraciones locales que desde los años ochenta se disponen a pavimentarla con
jerárquica, en el ámbito social "la lógica del enjambre" (Johnson,
2001) se convierte en cemento reba.jado, que se deshace rápidamente bajo el sol y la lluvia. Los obreros rasos
una opción política que prionza los diversos puntos de vista, subjetividades y
marcos que trabajan en la pavimentación y repavimentación ad libitum de la carretera son en
de significado disponibles localmente para rcjer, desde abajo, redes que
traspasan los su mayoría indígenas provenientes de las comunidades r¡ecinas. Sujetos a una vefsión
I inderos convencionales tr azados desde arriba.
actualizada del sistema de enganche, ellos raramente vienen pagados; en el mejor de
"Redes" y "enjambres" son buenas herramientas conceptuales, los casos, sus salarios son bonos a redimir en algún supermercado de la ciudad.
no solo para Ios
teóricos de la complejidad, sino también para el intelectual uitoto cuyas palabras
sirven Demarcado por la carretera y la frontera con Brasil, el Resguardo Indígena
de epígrafe a este artículo. Más que los conceptos exclusivos de ,,cultura" ,.etnicidad",
o Tikuna-Uitoto, Kilómetros 6 y 1 14, tiene una extensión de 7.560 hectáreas y aproxi-
estas herramientas nos permiten entender los nexos entre reafirmación
de la identidad, madamente 1.200 habimntes, principalmente indígenas de varios grupos étnicos,
interculturalidad y posibilidad de agencia en un resguardo multiétnico del
Trapecio además de mestizos y colonoss. El tejido multiétnico del Resguardo es el producto
Amazónico: el Resguardo Indígena Tikuna-uitoto, kilómetros 6 y 11. Este escenario
de sucesivas oleadas de desplazamiento y reubicación impulsadas durante el siglo
está caracteúzado por dos movimientos aparentemente divergentes: uno
dirigido a re- xx por múltiples factores, entre los cuales se cuentan la explotación del caucho, la
forzar las identidades étnicas y subétnicas (los clanes y los linájes) y el otro,
a lontestar consolidación del estado-nación, la degradación ambiental, el conflicto armado y, por
las lronteras étnicas y culturales hacia la creación de redes sociales y
semánticas com- último, los proyectos de desarrolló.
plejas. Para comprender esta lógica aparentemente contradictoria,
hay que relacionarla
con los procesos de construcción de sociabilidad, entendida esta última
como un pro-
ceso de articulación que se realiza en la praxis, "desligando y desarticulando
conerciones
f,-tu" dinámicas locales orientadas a la consolidación de derechos territoriales y culturales
resultaron en laconstitución de la Reserva Natural Indígena en 1978, y del Resguardo en 1986.
2 rNcoRA: Resolución 005 de 198ó.
Bebida de almidón de Wca (Manihot spp.).
3 Po¡ esta razón se llama también emergence theoty (Johnson, 2001).
5 Estos incluyen tikuna, uitoto (muina-murui), miraña, bora, muinane, andoke, ocaina, yagua,
cocama, )4lcuna y macuna.
492 | elHsan coMo uN ENIAMBRE. REDEs ¡NrERÉTNlcAs EN LAs MÁRGENEs DE
LA MoDERNTDAD crovANNAMlcAREru | +93
"legislación diri-
volatilidad y corrupción de la clase política local, lo cual se refleja en la multiplicación decisivo en la consolidasión de las fronteras coloniales y nacionales. I-a
de programas de desarrollo inconsecuentes con las aspiraciones de sus habitantes gida a proteger a ios indios", entre 1 B0o y 1 900, revela en realidad ia manera como Ia po-
proceso de consolidar su
y en marcadas relaciones de dependencia laboral y política. Sin embargo, de la ciu- UtaciOn inOlgena sirvió a los propósitos del estado-nación en el
control sobrá una zona de frontera contendida y muestra que el movimiento y el control
dad provienen también informaciones, tecnologías y metodologías que, si son bien
utilizadas, pueden llegar a fortalecer los procesos y las reivindicaciones locales. La dei movimiento son utilizados para establecer soberanía sobre el territorio (Stepputat'
experiencia de articular conocimientos y facultades diversas y a veces discordantes 2OOO). El estado establecía la cantidad de tiena suministrada a cada una de "las tribus
viene siendo apropiada por la Gente de Cenrro a través de la metáfora del "canasto". paganas que quieren abandonar la vida nómada y ser reducidas a panoquias formales"
casas, ropa, animales domésticos y misio-
Esta metáfora abarca múltiples significados que conciben individuo y sociedad como ioóminguez y Gómez, 1994: 1 12), les ofrecía
entretejidos de sustancias, saberes y relaciones (Candre y Echeverri, 1996: 49-51). neros, y, como ejemplo de 1o que Taussig (1982) llama "conquista a través del comercio",
y
facilitaba las relaciones comerciales con mercaderes nacionales extranjeros'
Al mismo
Así, informaciones, pensamientos y habilidades diversas se convierten en las fibras
ley contemplaba que las "tribus salvajes" que asaltaran los asentamientos o
con las cuales "tejer", como elios dicen, "un nuevo canasto". tiempo, la
Una institución clave en los procesos de reconst¡ucción política y social gue se que áificultaran el tránsito y el comercio debeían ser capturadas, asentadas e instruidas
despliega en el Resguardo es la maloca. El resurgir de la maloca es relativamente én,,las cosas prácticas de la vida cotidiana" (Domínguez y Gómez, i994: 115). Estas
.,tribus indígenas paganas" que vivían en los "teÍitorios baldíos" iugaban un doble pa-
reciente: Ia primera maloca del resguardo fue construida en los años sesenta, antes
pel en el pro..to de consoiidación del estado-nación: como imagen negativa del ideal de
que los residentes empezaran a asentarse en las comunidades. En el año 2005, el
lvida social civilizada" divulgado por el estado, reforzaban su proyecto de autodefinición
territorio relativamente pequeño dei Resguardo ya contaba con siete malocas, cuatro y
de ellas ubicadas en los caseríos. La mayoría de estas maiocas ya no sirven como conceptual e ideológica, y una vez que los indígenas eran "reducidos a la vida social"
el avance colo-
unidades residenciales y cumplen ahora una función más especializada, como espa- asentados en pueblos como ciudadanos legítimos, marcaban fisicamente
nizador del estado y se conveÍían en la prueba viviente de su misión civilizadora.
cio para reuniones o como atractivo ecoturístico. Sin embargo, la maloca sigue con-
servando una ft¡erte asociación con el ritual y el saber ancestral, convirtiéndose en El proceso de fiagmentación y reubicación de la población nativa recibe un nlle-
años recientes en un centro propulsor de alternativas políticas y culturales propias. vo impulso a paftir de los años cincuenla, cuando la creación de "comunidades in-
dígenas" se convierte en el requisito para vincular los indígenas a los
programas
Estas alternativas se articulan en "la base", es deci¡ la "palabra de vida" sirve como
de desarrollo. Es obvio que, a pesar de asumir una posición central en ei discurso
medida orientadora del vivir y el pervivir.
alternativo sobre empoderamiento y participación, los conceptos de "comunidad" y
"participación comunitaria" son supremamente problemáticos. Estas formas socia-
"Yo vte pREGUNTo: Zps rsra uNA coMuNtoao?"
les impuestas contrastan en muchos aspectos con la "realidad" de laS comunidades
indígenas, y hasta pueden convertirse en un obstácu1o para los procesos de reorga-
El que quíere dominar no vive en la realidad nización política Y social.
de quíen no quíere ser dominado.
Localizadaen el kilómetro 1 1 de la carretera Leticia-Tarapacá, la comunidad indí-
lntelecual uitoto gena Nimaira Naimeki lbirilr Muina-Murui, conocida como Kilómetro i 1' se extiende
airededor de las canchas deportivas y a lo largo de una quebrada de aguas estancadas
Es cada vez más evidente que para entender la Amazonia se hace necesario romper cuyo curso lue detenido años atrás por un puente mal proyectado' EI terreno de la
el confinamiento de las sociedades indígenas en tribus pequeñas y aisladas. Más que comunidad muestra las trazas de una serie de proyectos de desarrollo fracasados: el
delinear un espacio real de organización política y social, ellas son el producto de puesto de salud, la cerca para el ganado, 1os tanques piscícolas, el gallinero, la planta
formas de control colonial y académico impuesto históricamente sobre las socieda- para procesar fariña, Ia huerta experimental, las letrinas, el acueducto, y otros. Pero
des indígenas. Un número creciente de investigaciones revela, en cambio, un pano- los proyectos no simplemente fallan, sino que a veces generan más problemas Al no
rama complejo de organización regional, con redes de intercambio de gran escala, tomar en cuenta las fonnas propias de organización, los proyectos han exacerbado
las divjsiones internas y las disputas por el poder entre clanes y etnias.
"¿Es esta
sociedades estratificadas y sistemas económicos, políticos y religiosos interétnicos
una comunidad?", pregunta un líder del Kilómetro 11. "Prefiero el realismo. Diría
(Denevan, 1992; Goldman,1993,200'4; Helms, 1987; Jackson, 1983; Myers, 1981;
Oberem, 1974; Roosevelt, 1991; Scazzochio, 1978; Whitehead,1994). más bien que esta es una ciudadela. Las instituciones hablan de colectividad' pero Se
creía que confusionismo debía referirse a la entremezcla desordenada "gente de la selva" (Whitten, 1976). Paru los piros dei bajo Urubamba, la capacidad
de subjeti-
vidades causada por la imposición de un orden ajeno. Algunos meses de canalizar alianzas matrimoniales y productivas en relaciones de intercambio con 'ri
después, el
líder que concibió la palabra me expricó su propiá signifiiado para gente aiena es lo que los diferencia de los "bravos" yaminahua. Gow (1991, 1993)
el rérmino, de
acuerdo con su interpretación de la etimología de la palabra: de
con: "juntos,,y sostiene además que para los piros la identidad no es un atributo fijo y que, según Ia
I
"fusión'. Así pues, confusionismo significa gue .,todo funciona porque situación, el mismo individuo puede ser identificado o identificarse diferentemente
esiá articu-
lado, en la diversidad hay armonía, todo está gobernado por está principio" como piro, campa o mestizol3. Como sugiere Santos-Granero (2000), el ideal moral
(er líder
también sugirió una relación con conflucio y las filosoffas orientales¡. de "coexistencia amigable" (convívíaliqt) en la Amazonia radica en una perspectiva
Rmbas orien-
taciones coexisten en la comunidad, siendo la comunidad una cáscara interétnica que contempla relaciones de intercambio, alianza, predación y cambio
vacía en la
organización social de los comuneros (Gasché, 1gg2)12. Opuestas, si son transétnico.
sacadas
de su contexto, estas dos opciones se ensambran en una perspectiva
interétnica. Para entender estos procesos, es clave preguntar cómo los individuos reconci-
La palabra de vida juega un paper fundamental para articular esta perspectiva y
lian la diferencia en sus praxis diarias. La atención hacia el cuerpo y el carácter
elevarla a modelo de sociabilidad moral.
negociado de la identidad ha llevado a algunos autores (Overing y Passes, 2000) a
relacionar la construcción de la sociabilidad en la Amazonia con un sistema moral
"S¡srevtas RETtcuI¡,RES tMpREVtstBLEs,' y La BuENA vtDA "centrado en la virtud". Este tipo de moralidad no está preocupado por la adhesión
a normas y obligaciones, sino por "la calidad de la 'buena vida' [...] engendrada a
través de las prácticas y habilidades ingeniosas de aquellos que interactúan personal
Mambeando solo la coca de uno no se le siente el sabor
e íntimamente en el día a día"ta (Overing y Passes, 2000: 4). La construcción de una
/l4eJor vq/ a mambear adonde otro.
"buena vida" no se adapta a planes axiomáticos ni a categorías sociales a priori. Más
Anciano muinane
bien, radica en la capacidad para relacionar modelos individuales y colectivos con
experiencias en buena medida imprevisibles. Resaltando el papel de la práctica en los
La inciinación a enTazar la continuidad étnica con la capacidad de entretejei procesos de construcción de sentido, esta perspectiva vincula la formación de sujetos
relacio-
nes con el otro, con el ser diverso, parece ser un tema constante socioculturales con la participación en un conjunto de actividades -una "comunidad
en las sociedades
de la práctica"- en relación con las cuales los participantes comparten sentidos y
visiones (Lave y Wenger, 1991: 98).
12 Gasché.(1982: 11-12) notar "a) la asambrea generar regularmente
reúne soro una pane de la
comunidad nativa, mientras Para 1a Gente de Centro, la construcción de la sociabilidad y de una vida "buena"
la otra parte-se mantieie indife¡ente a lo q",,..rt? ütrnao
_que
en este marco instituciona|; b) que el presidente, por consecuencia, son dos caras de la misma moneda, Esta perspectiva, expresada en la "palabra de
no prád. pr.Ád., se, el
vocero de toda la comunidad ni, menos aún, ejerier cuarquier autoridaá,orr.'.i.án;unto
a. vida", concibe la vida como una construcción frágil, incesantemente proclive a la
su pueblo y; c) que la colaboración entre comuneros nunca compromete
a la totalidád de los
miembros de la comunidad,-sino que, por el contrario, la coraboración
,a pr*ti." ." .i *"ra"
más reducido de dos o tres familias de una misma comunida¿, u
I* iuurá, ,. p"J."'**r, t_
13 _.
El papel que mimesis y disimulación cultural juegan en los procesos de identificación -por
ocasionalmente, familias ¡esidentes en otras comunidades; entonces ejemplo a t¡avés de la adopción estratégica de marcas étnicas ajenas documentada en varias
cabe preguntarse, ócuáles
son los criterios que determinan que estas agrupaciones funcionan
en tu prá.tiá coo,o uniara* regiones de la Amazonia no¡occidental (DeBoe¡ 1 990; Erickson, 1 98ó; Henley y Martéi-Muller,
organizativas reales, mientras-que la unidaá gr,obal propuesta por ra
ley'*¡¿ g.runiáa¿ nativa- 1978, Scazzocchio, 1978)- evidencia ulterio¡mente la inutilidad de categorías rígidas de la
tiene un carácte¡ meramente formal medianté el cuál vlncula it pueutá J'up"r"i" r.ga identidad.
y burocrático nacional?,' "irJ" 14 Esta y las demás traducciones del inglés son de G. Micarelli.
498 | emsan coMo uN ENIAMBRE. REDEs rNrERÉTNrcAs EN LAs MÁRcENEs DE LA M.DERNTDAD clovANNA urcanl:-r-r | 499
i;:ll;ii
iii:i tt,il
,ti'
desintegración. El compromiso personal de cada sujeto es mantener la vida, rege-
"Nuesrno pRlNcrpro oe oRcerulzac¡ó¡¡" liri:iil
nerando constantemente un entretejido ordenado de relaciones. Más que un género 1¡,1
de discurso, la paiabra de vida es un acto creativo "que se manifiesta .n-for*u 'l;
'¡
tangible, con abundancia de gente y alimentos" (candre y Echeverri, 1996: 32). sus Recordar no es lo opuesto de olvídar. Recordar es una¡,corma de olvídar. ll.:: :l )l
manifestaciones más visibles son el ritual del diálogo que tiene lugar cada noche en Milan Kundera l::,1 iii!
15 Maraca(Theobromabtcolot-H.8.),cacao(meobromacacaoL.),ñame(DíoscoreaalataL.),otliga
o pringamosa (Urera bacclfera L.), )rica Wanihot spp.).
I 501
500 | rens,rn coMo uN ENIAMBRE. REDES rNTEilÉTNrcAs EN LAs MARGENES DE rA MoDERNIDAD
GToVANNA MTCARELLI
Ella, al volver al otro día, se dirigió al lugar sembrado y notó que había nacido una historia cuenta que las hojas de coca (al mismo tiempo la enseñaza y la progenie) son
matica. Muy contenta se puso la nÍña, porque vio crecer lo que el mundo necesitaba recogidas en un canasto (al mismo tiempo el pensamiento y la matriz) teiido por un
para combatir el mal y tener el mundo sano y a la gente honrada; pero ni la mamá ni padre para su hiia para que pueda a),udar a su mamá en el trabaio de la chagra. La
el papá sabían por qué estaba tan contenta, pues la niña no decía cuál era el motivo ioc" .s un regalo dei creador a sus hiios y es preparada con un pensamiento piuralis-
de su alegría. E¡a un secreto que no podía revelar a nadie hasta que ella viera vencer ta y de abundancia, adquiliendo así una calidad sagrada y universal. Y finalmente,
al mal.
la coca pone alegre a la gente.
Al volver por la tarde llegó a la casa con alegría y dijo al papá:
Estos mismos temas resuenan en los discursos de los líderes y autoridades tradi-
- Papá, hazme unos canasticos para yo cargar. cionales indígenas que en 1998 participaron en los encuentros para elaborar el Plan
Y el papá le contestó: de Vida del Resguardo:
- Bien, hiia, Ios haré para que ayudes a tu mamá a rraeryu.ca.
La coca es nuestro libro de inteligencia y sabiduría, la coca es nuestra Biblia, la
Terminado el canastito, se lo dio a la niña y ella se puso muy contenta y al otro día se
coca eS nuestra ley, la coca eS nuestro reglamento, la coca para nosotros eS nuestro
fue con la mamá para la finca al lugar donde estaba la coca. Allí encontró la mata con
sexto sentido [...] Eso es la coca para nosotlos. con eso curamos, con eso nosotros
tres hojas. Ella las cogió y las puso en el canasto. por la rarde regresó con la mamá a
arreglamos los problemas. No estamos diferenciando de unos a otros, porque nosotros
la casa, con la coca dentro del canasto, y le dijo al papá:
unimos esa fuerza por medio de la coca. Nosotros no estamos diciendo a los bola, a
- Papá, hay que poner la o'lla más grande y tostar la cosa que te traje. Te he visro los muinane, a los andoke que la coca de us[edes no sirve. iNo! Tenemos diferentes
comer coca que no se debe comer, porque estas hojas solo comen los animales. De hoy
lenguas, pero es el mismo uso, directamente con el Padre creador. En cambio, ustedes
en adelante mambearás buena coca y verás y aprenderás muchas cosas, porque es un
los blancos sí, porque cuando llegó la Biblia nacieron miles de sectas y eso es lo que
don de dios para salvar la humanidad.
está confundiendo a la humanidad hoy en día, porqué cada uno iala por su lado,
Con estas palabras Búinaima se puso muy conrento. Colocó en el fogón la olla, y y nadie cree en nadie [...]. En cambio, para nosotfos la coca es buena para todos,
cuando estaba bien caliente le pregüntó a la niña: donde haya unión, donde hay esa integración, donde hay ese calor humano, donde '
- iDónde está la coca? cualquiera situación de tristeza o de peliglo la arreglamos a través de la coca' del
diálogo. La coca y el ambil, o sea el tabaco, son las dos fuerzas que tenemos. Es lo
Y la niña contestó:
más importanle para ser indígenas. El tabaco es masculino, es fuerza y pode¡ y la
-Al pie del pilón gue tú manejas y en el canasro que rú me hiciste.
coca es femenina, es inteligencia y sabiduría.
Rápidamente buscó la coca, pero no encontró sino tres hojas desconocidas y dijo:
El indígena uiroto riene la organización del mambe. En cada etnia, como ocaina,
- Aquí no hay sino tres hojas. ¡8ué es esto para semejante olla! Más vale poner una bora... nació en otra forma, pero la misma historia 1leva. El mambe no se utiliza para
chiquita en lugar de una tan grande. todos, los niños, todos. No, compañeros. El mambe únicamente utiliza e1 que va a dar
Y dijo la niña; consejo, el que va a enseña¡, el que va a hacer una actividad cultural. Pero no solo
No desconfies y ponte a tostar en nombre de |úziñamiu nombrando a toda la gente
para lo cultural. Dentro de este medio concierne de todo. En este espacio se ven las
-
que existió en el mundo, así: la coca que comía bora, ivenga aquí! La coca que comía enfermedades, se ve el hurto. Se ve de todo. Para eso nos sirve. Así nosotros venimos
okaina, ivenga aquí! La coca que comíagídoní, ivenga aquí!... ró. organizándonos, solucionamos problemas. Nosotros para analizar a la humanidad
mambeamos. No para venganza. Desde que yo mambeo yo tengo respeto para todos.
Y así siguió nombrando todas las cocas. Así fue como Búinaima comenzó a tostar, y
El mambe es para unirnos.
cuando tostó bien ya estaba llena la olla. Fue el primer milagro de la coca, que con
rres hojas se llenó la olla. Nuestra cultura tradicional es a base del tabaco y la coca. Es Ia base de la organización
de las comunidades indígenas. cuando se reúne, se hace el mambe, se hace el ambil,
El mito cuenta cómo la coca se convierte en el poder de Búinaima -su "inteli- con eso se habla. Para aconsejar a los niños en el mambeadero, en el sitio sagrado.
para aconsejar a los jóvenes, para que aprendamos a respetar nuestlos ancianos y a
gencia"- para rescatar a la humanidad después dei cataclismo. La coca tiene una
reconocer a nuestra familia. También para aconsejar algunos adultos que no cumplen
connotación moral, ya que a),uda Búinaima a buscar a la "buena gente". En esta
con las reglas o con los consejos recibidos dentro del sitio sagrado'
búsqueda, Búinaima engendra la coca: su hija Búinaiño. Ella, a su vez, siembra la
La coca y el tabaco son el punto fijo de la partida del desarrollo social de las
coca y la entrega a su papá para que haya "un mundo sano" y "gente honrada". La
comunidades indígenas que las consuman y mantienen.
La palabra de consejo que nos ha sido entregada por nuestros abuelos nace de un
principio de organización, que son la coca y el tabaco. Desde allí nacieron el conseio
1 ó Bora y ocaina son grupos étnicos; Grdoni es un clan uitoto.
:j
502 | reNsan coruo uN ENJAMBRE. R¡¡es nrrnÉrHrcqs
EN iAs ¡4.ARGENE' DE LA M.DERNTDAD ,r',.1
i
Elevar la coca a principio de renacimiento curtural y Frcun¡ 1. C¡nÁrum oEl Pu¡ ¡t Des¡RRor-r-o*.
desarroilo constituye una
potenrc reivindicación de autonomía frente
a la imposición de modelos de desarrollo
ajenos y a las poríticas nacionares e internacionales
de erradicación de Ia coca: Ios
macroprocesos de dominación. Al mismo tiempo, DEPARTAMENTO DEL AMAZONAS
la eficacia de estas reivindicaciones
se sustenta en el papel que coca y tabacojuegan
en ros microprocesos de producción MUNICIPIO DE LETIC¡A
de sentido. según Echeverri, ra palabra ¿e vi¿a jugó
un papel decisivo puru ,.rr.u,
una "comunidad moral" después del genocidio y la
diáspora^causados por ta caucire_
ría. Echeverri nota
un poder espiritual para cazar, curar o luchar (1994: 148,168); con el medio para invo-
un jefe dueño de maloca. Pero doña Isabel contradice muchas de las normas cultu-
car los ancestros (1994:300); con la inütación a un ritual de baile y como pago por las
rales para ser maloquero. Primero, es mujer. Además vive con un indígena que no
canciones. En un comentario, uno de los inlormantes de preuss declara que es gracias al
mambea y toma habitualmente ayahuasca, una planta de poder que para la Gente de
ambil que la gente tiene conocimiento de Ia tradición. La coca, en contraste con su omni-
Centro no es comúnmente accesible a las mujeres y es utilizada solo en casos extre-
presencia en el discurso indígena contemporáneo, se menciona raramente en la colección
mos por los chamanes. Sin embargo, con una simple respuesta -"nosotras también
de Preuss. Cuando aparece, está asociada con relaciones amigables y de aliarza; es brin-
rcnemos derecho"- doña Isabel es capaz de persuadir a los ancestros. Su respuesta es
dada a los invitados o consumida antes de partir a un viaje en territorios ajenos (1994:
ia palabra sabia de un nimaírama: el conocimiento es para todos, y ella lo busca para
223,329); es ofrecida como agradecimiento o pago (1994:145,502,418) o para infundir el beneficio de una colectividad. Mostrando su adhesión a una autoridad superior,
coraje (1994:418); ! se utiliza para transmitir el conocimiento tradicional y enseñar el
ella derrumba las normas culturales que no le permiten el acceso a una posición de
comportamiento correcto (1994: 680). Esta gama semánrica permanece implícita, sin poder comúnmente retenida por hombres.
variaciones notables. sin embargo, el discurso indígena contemporáneo revela un des-
l)na vez convencidos, los ancestros le muestran su propio camino de conoci-
lizamiento entre diferentes matices de significado. De un lado están los significados ac-
miento: la tierra y sus manos. Es decir, las condiciones y habilidades necesarias para
tuales de la coca y el tabaco, que resaltan valores de paz, alianza,coedstencia, tolerancia
trabajar (el hecho de "mirarse" sugiere una relación con el mito de origen de la Gente
y sabiduría. Del otro están ]as connotaciones latentes, que se proyecran desde el ámbito
de Centro, en el cual e\ nieto de centro, una vez prueba la coca y el tabaco, mira su
de la brujería, a aquelios de la venganza, la guerra y la antropofagia. En este espacio,
cuerpo y se da cuenta de que es persona; con este reconocimiento inicia su apren-
la Gente de centro ajusta su posición en un diálogo con la historia. conscientes de la
dizaje en las formas correctas del vivir). Enseguida, doña Isabel tiene una visión
impracticabilidad de ciertas memorias para su lucha acrual, elios ha hecho su programa
de abundancia: una chagra llena con todo tipo de comida. Esta es una visión sobre
para olvidarlas. l¿ memoria para borrar concierne a los "canastos" de la antropofagia,
cómo reunir y cuidar gente, pero es también una visión de gente (Candre y Echeverri,
la guerra interétnica y la masacre cauchera. con un acto voluntario de olvido, e1los dicen
1996). Así como plantas diferentes crecen en una chagra sin dañarse una a otra,
que "han empacado estos canastosylos han enterrado'. Como dice Kundera: "Fccordar
también gente diferente puede vivir en armonía si se reúne bajo los preceptos de la
no es lo opuesto de olvidar. Recordar es una forma de olvidar". Esta resignihcación de
coca y ei tabaco: "pensar bien, hablar bien y trabaiar bien para que todos vivan bien".
valores y praxis sostiene los cambios históricos de las sociedades indfenas y se convierte
La chagra se convierte en un símbolo de coexistencia que abarca ideas de cultivo,
en un recurso estrategico para construir agenciamiento. por su significado complejo-una
simbiosis y abundancia.
visión performativa y en proceso de la cultura, opuesta a nociones abstractas de auten-
ticidad, no solamente tolerante de las diferencias, sino urdida con ellas-, la palabra de Ahora sus intenciones deben ponerse en práctica. Los ancestros enseñan a don
vida emerge como una herramienüa valiosa para hacer de la cultura una forma de vivir William a mambear, legitiman su unión y empiezan a invadir sus sueños con una
r¡iable. Tejiendo a diario las fibras que hacen la vida posible, la palabra de vida responde presencia casi amenazadora ("ahora son cinco') presionándole para que construya
al sufrimiento físico, social y espiritual que anida en las márgenes deshilachadas de la la maloca. Ya que ella los llamó, ahora debe ofrecerles una base en donde su conoci-
modernidad. miento pueda sentarse. Conectando las visiones de los ancestros con Ia memoria de
su padre muerto en la chagra, doña Isabel nos da un mensaje claro sobre el signifi-
cado que la maloca adquiere para ella. La maloca se convierte en una "morada emo-
Urv lucan EN DoNDE sENTARSE
cional" (Basso, 1996): mientras doña Isabel intenta superar la pena por 1a muerte
Volvamos ahora a la historia de doña Isabel. La narración empieza con su reivindica- de su padre, lamentándose de que es "huérfana" -es decir, alguien sin padres, pero
ción apasionada de su derecho a recibir el conocimiento. Doña Isabel es una mujer de también una persona desarraigada y oprimida tiaíeniki en la lengua uitotor8)-, ella
mediana edad, de alto rango, hijadeunnímaírama, un sabedor dueño de maloca. Ha
viajado varias veces del Putumayo a Leticia y está activamente comprometida con las
políticas que se desenvueiven en el Resguardo. Como integrante del consejo de sabe- tg- Los huérfanos eran individuos capturados en las guerras étnicas que venían incorporados en el
grupo como siwientes del jefe, el cual podía disponer de ellos, por ejemplo, intercambiándolos por
dores, se la invita frecuentemente a dar su opinión sobre los asuntos de actualidad. bienesdeprestigio.Eranllamados"hué¡fanos" araízdelamuertedesulíderpolíticoyreligioso,
Es una mujer estimada, conocedora de las labores y prerrogativas femeninas, que al cual se lo nombrabamooma, "padre". Lapalabtajaieniki denota umbién una persona común,
habla una palabra "dulce" y "fría", nola palabra de chismes y peleas, sino la paiabra alguien que no pertenece a un linaje de rango (Gasché, 1982). Según Pineda camacho (1985: 61),
parece también indicar el hombre que, contraviniendo la norma de patrilocalidad, escoge vivir
que trae abundancia y tranquilidad.
en la maloca de la mujer baio la protección del suegro. El Huérfano de Centro es un personaje
iCuál es entonces el conocimiento que ella tanto anhela, pero no está avtorizada recurrente en los mitos de la Gente de Centro. En el mito muinane del origen de la educación, por
ejemplo, es el llamado a descubrir el verdadero sabo¡ de la coca y el tabaco, que el Padre Creadol
a solicitar? La narración sugiere que es el conocimiento para convertirse eniyaíma,
le ha dado a probar. Por prueba y eno¡ logra por fin encontrar "el sabo¡ del saber".
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crovANNA r',uc,rneu-r | 507
de doña Rerenr¡¡cras
Isabel son capaces de infiltrarse por las fisuras de normas hegemóqicas que establecen
la autoridad masculina y quebrarlas. Respondiendo de manera innovadora a la domina- ÁnH¡ru, K¡t (2001). "From Longhouse to Village: Structure and Change in the Colom-
ción -tanto inte¡:na como externa-, doña Isabel transforma las normas culturales para bian Amazon", en Bqtond the Visíble and the Material. The Amerindianization
restablecerlas a un nivel más inclusivo y asegurar su continuidad. Estos procesos son oJsocieqt [n the Work oJPeter Riviére, Laura Rival y Neil L. Whitehead (eds.).
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derecho y no como residuo de una cultura ideal e integra. Es más, fodas las culturas CaNon¡, Hrpóriro v Ju,r,n Ávano EcH¡wRm (1996). Coot Tobacco, Sweet Coca. Teaching oJa
son híbridas, si las miramos desde abajo, y no desde arriba. Este cambio de Colombian Sageifrom the Colombian Amazon. Foxhole, Devon: Themis Books.
508 | ennsan coMo uN ENJAMBRE. REDEs lNTERfrNrcAs EN LAs MARGENEs DE LA MoDERNTDAD
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