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23-02-2005

Acción de petición de herencia - Prescripción -


19/05/04 - Rol Nº 6702-99
Santiago, diecinueve de mayo del año dos mil cuatro. Vistos : Se reproduce la
sentencia en alzada , con excepción del considerando 12º , 13º, 14º, 18todos los
cuales se eliminan. Y se tiene , en su lugar , y además presente : 1º.- Que el Fisco de
Chile obtuvo el reconocimiento de su calidad de heredero de don Luis Alberto Soto,
en virtud del auto de posesión efectiva dictado con fecha 4 de junio de 1991, por el
Primer Juzgado Civil de Santiago, el que se encuentra inscrito a Fs. 44080 Ndel
Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces de Santiago,
correspondiente al año 1991. 2.- Que, según lo dispone el artículo 1269 del Código
Civil: El derecho de petición de herencia expira en diez años, pero el heredero
putativo, en el caso del inciso final del artículo 704 podrá oponer a esta acción la
prescripción de cinco años. 3.- Que por otra parte, el inciso final del artículo 704 del
Código Civil dispone que al heredero putativo a quien por decreto judicial se le haya
dado la posesión efectiva, servirá de justo título el decreto; 4.- Que la acción
intentada en estos autos tiene por objeto reclamar una universalidad jurídica, el haz
hereditario como un todo, independientemente de la naturaleza de los bienes que la
conforman, por lo cual ha de considerarse como una acción de carácter mueble,
porque el derecho de herencia en sí mismo no puede ser considerado como
inmueble, aún cuando en la masa de bienes existan bienes raíces. 5.- Que
determinada la naturaleza de la acción deducida en estos autos, corresponde
determinar si ha transcurrido el lapso de tiempo requerido para la prescripción
adquisiti va que alega la demandada principal y demandante reconvencional, y
desde cuando se cuenta dicho plazo. 6.- Que como la acción de petición de herencia
es mueble, su plazo de prescripción es de cinco años que ha de contarse desde que
al heredero putativo se le haya deferido la herencia, merced a un decreto judicial
que le servirá de justo título. 7.- Que en caso sublite, es el auto de posesión efectiva
de la herencia de don Luis Alberto Soto, dictado con fecha 4 de junio de 1991, por el
Primer Juzgado Civil de Santiago, el justo título que habilita al heredero putativo,
en este caso el Fisco de Chile, para entrar en posesión legal de la herencia, no
siendo necesaria la inscripción en el Conservador de Bienes Raíces, porque lo que
se ha adquirido es una universalidad jurídica, que es de naturaleza mueble, aunque
la compongan también inmuebles. 8.- Que en consecuencia, a partir de la fecha del
auto de posesión efectiva a favor del Fisco, esto es el 4 de Junio de 1991, éste fue
reconocido como heredero del causante para todos lo efectos legales y por ende, a
contar de esa fecha empezó a correr el plazo de prescripción de la acción de petición
de herencia. 9.- Que consta en autos que la demanda fue notificada al Fisco con
fecha 9 de septiembre de 1996, es decir, transcurrieron más de cinco años, cual es el
plazo señalado en el artículo 1269 del Código Civil. 10.- Que en virtud de lo anterior,
no cabe sino acoger la excepción de prescripción interpuesta por el Fisco de Chile
en contra de la demandante y dar lugar a la demanda reconvencional de éste en
contra de la actora. Por estas consideraciones y de acuerdo , además con lo
dispuesto en los artículos 186 y siguientes , del Código de Procedimiento Civil, se
revoca la sentencia apelada de diez de junio de mil novecientos noventa y nueve,
escrita a fojas 62 y siguientes y se declara en su lugar: a.- Que se rechaza la
demanda de fojas 1 y siguientes, en todas su partes, sin costas por encontrarse las
actoras patrocinadas por la Corporación de Asistencia Judicial. b.- Que se hace
lugar a la demanda reconvencional deducida por el Fisco de Chile, declarando que
éste es dueño del inmueble ubicado en esta ciudad, que corresponde a la casa Ndel
Pasaje de Calle Cuevas Npor haberlo adquirido por pr escripción adquisitiva,
debiendo practicarse las anotaciones e inscripciones correspondientes en el
Conservador de Bienes Raíces de Santiago, sin costas por encontrarse las actoras
patrocinadas por la Corporación de Asistencia Judicial. Regístrese y devuélvase.
Redacción del Abogado Integrante Sr. Mauriz Nº 6702-99.- No firma el Ministro
señor Silva, quien no obstante haber concurrido a la vista de la causa y al acuerdo,
por encontrarse ausente. Pronunciada por los Ministros de la Segunda Sala de la
Corte de Apelaciones de Santiago, señora Gabriela Pérez Paredes, señor Mauricio
Silva Cancino y señor Abogado Integrante don Benito Mauriz Aymerich.

05-07-2010

Interpuesta petición de herencia, el demandado, en el


caso que desee alegar la prescripción, deberá
demandar reconvencionalmente

Santiago, seis de mayo de dos mil diez.      

VISTO:   En estos autos rol Nº 28.995, seguidos ante el Juzgado Civil de Ancud,
juicio en procedimiento ordinario, caratulado Alvarado Sánchez, Juan Emilio c/
Alvarado Huentelican, José Sergio, don Juan Emilio Alvarado Sánchez dedujo
demanda de petición de herencia, en contra de don José Sergio Alvarado
Huentelican. 
Funda su pretensión señalando al efecto que es comunero de la herencia intestada
quedada al fallecimiento de sus bisabuelos, don Bartolo Alvarado Huentelican y
doña Rosalía Milapichún Díaz, la cual recae sobre un inmueble rural de 81,50
hectáreas, ubicado en Huincha, comuna de Ancud, añadiendo que adquirió los
derechos hereditarios que reclama en virtud del derecho de transmisión que
sobrevino a su respecto al fallecer su padre don José Efraín Alvarado. 
Sostiene que no ha podido ejercer sus derechos hereditarios pues don José Sergio
Alvarado Huentelican tramitó la posesión efectiva de los causantes, excluyéndolo y
pretiriéndolo, toda vez que la respectiva posesión efectiva se encuentra inscrita
exclusivamente a nombre del demandado en el Registro de Propiedad del
Conservador de Bienes Raíces de Ancud, correspondiente al año 2003. 

Solicita por tanto, se de lugar a la demanda en todas sus partes y se reconozca, en


definitiva, su derecho hereditario respecto de la herencia quedada al fallecimiento
de don Bartolo Alvarado Huentelican y de doña Rosalía Milapichún Díaz, con
expresa condena en costas. Contestando la demanda, el demandado solicitó su
rechazo, con costas, señalando, en resumen, que no es efectivo que haya excluido
al demandante de la posesión efectiva de los causantes, aclarando que se limitó a
solicitar el reconocimiento de susderechos hereditarios, por transmisión al
fallecimiento de su padre, don Horacio Alvarado Milapichún, en la herencia
intestada quedada al fallecimiento de sus abuelos; que asistía al interesado el
derecho de pedir la ampliación de la posesión efectiva, lo que no se realizó en la
oportunidad que correspondía; y que la acción impetrada en autos se encontraría
prescrita, entendiendo que dicho plazo sería, a su juicio, de diez años contados
desde el fallecimiento de los causantes, don Bartolo Alvarado Huentelican y doña
Rosalía Milapichún Díaz, situación que en la especie habría acontecido el 14 de
abril de 1940 y el 8 de enero de 1943, respectivamente, habiendo transcurrido, en
consecuencia, más de sesenta años contados a la época de la notificación de la
demanda. Por sentencia de primero de junio de dos mil siete, escrita a fojas 47, la
señora juez titular del tribunal a quo negó lugar a la demanda de petición de
herencia, con costas. Apelado el fallo por el demandante, una de las Salas de la
Corte de Apelaciones de Puerto Montt, por sentencia de catorce de noviembre de
dos mil ocho, que se lee a fojas 82, lo confirmó.   En contra de esta última decisión
la aludida parte ha deducido recurso de casación en el fondo.  Se ordenó traer los
autos en relación.   

CONSIDERANDO:   

 PRIMERO: Que el actor, en su demanda de fojas 12, solicitó, básicamente, que


se declarara su derecho hereditario respecto de la herencia quedada al
fallecimiento de sus bisabuelos, don Bartolo Alvarado Huentelican y doña Rosalía
Milapichún Díaz. 
El demandado, por su parte, contestando la demanda refutó la efectividad de
haber excluido al actor, por el hecho de haber solicitado la posesión efectiva de los
causantes omitiendo mencionarlo como otro de los herederos, toda vez que,
entendía asistía a aquél el derecho de pedir la ampliación de la posesión efectiva y
esgrimió, además, la excepción de prescripción de la acción;   

SEGUNDO: Que la sentencia recurrida, que reprodujo parcialmente y confirmó el


fallo del tribunal a quo, rechazando, en definitiva, la acción de petición de herencia,
reflexionó para arribar a tal resolución que si bien en estos autos se encuentra
acreditado el parentesco del demandante con Bartolo Alvarado Huentelican y
Rosalía Milapichún Díaz, aquel no indica en su demanda cuáles son los derechos
hereditarios que invoca para llegar a los causantes, esto es si sucede por
transmisión o representación, existiendo causantes intermedios, añadiendo, a
continuación, que además, no se acreditó el fallecimiento de María Emilia Alvarado
Milapichún, abuela del actor, mediante el certificado de defunción
correspondiente?;  

TERCERO: Que en razón de lo señalado, resulta evidente inferir que respecto de


la excepción de prescripción de la acción de petición de herencia, no existe un
pronunciamiento expreso por parte de los jueces del mérito, ni tampoco es posible
colegir una decisión tácita al efecto, toda vez que los sentenciadores no analizaron
de manera alguna la controversia sub lite en relación a dicha defensa, siendo su
deber hacerlo;   

CUARTO: Que los jueces, para dar estricto cumplimiento a lo dispuesto por el


constituyente y el legislador, deben emitir pronunciamiento respecto de todas las
pretensiones que se derivan de la acción intentada, como de las alegaciones,
defensas y excepciones de la parte demandada. 
En el caso de autos, ante una acción de petición de herencia, frente a la defensa
del demandado que esgrimía la extinción de aquélla por prescripción, al haber
transcurrido más de diez años entre la fecha en que, a su juicio, se habría hecho
exigible la obligación y, supuestamente, la época de la presentación de la
demanda y de su notificación, evidentemente los sentenciadores del mérito
debieron examinar los presupuestos de procedencia de la excepción de
prescripción. Al prescindir de tal examen, indispensable para una adecuada
resolución del asunto sometido al conocimiento del tribunal, los jueces de alzada
omitieron también un pronunciamiento sobre la materia, dejando de dar
cumplimiento a las exigencias que se les han impuesto, en orden a que la decisión
definitiva deberá comprender todas las acciones y excepciones que se hayan
hecho valer en el juicio. Tan importante como antigua es esta obligación impuesta
a los magistrados, por lo quesu inobservancia corresponde sancionarla, privando
de valor al fallo;  

SEXTO: Que la omisión precedentemente apuntada constituye la causal de


casación en la forma prevista en el artículo 768 Nº 5, en relación con el artículo
170 Nº 6, ambos del Código de Procedimiento Civil, puesto que efectivamente no
se razonó, ni se resolvió en torno a todas las pretensiones, alegaciones y defensas
opuestas por las partes; 
   

SEPTIMO: Que el artículo 775 del Código de Procedimiento Civil dispone que los
tribunales, conociendo, entre otros recursos, por la vía de la casación, pueden
invalidar de oficio las sentencias, cuando los antecedentes manifiesten que ellas
adolecen de vicios que dan lugar a la casación en la forma, oyendo a los abogados
que concurran a alegar, exigencia que no pudo ser satisfecha en el caso en
particular, por no comparecer ninguno de los profesionales que representa a las
partes a efectuar defensas orales ante esta Corte;    

OCTAVO: Que por las razones expresadas en las motivaciones anteriores, se


procederá a ejercer las facultades que le permiten a esta Corte casar en la forma
de oficio.  

 Y de conformidad a lo expuesto, normas legales citadas y lo señalado en los


artículos 786 y 806 del Código de Procedimiento Civil, se invalida de oficio la
sentencia dictada por la Corte de Apelaciones de Puerto Montt, de fecha catorce
de noviembre de dos mil ocho, escrita a fojas 82, la que se reemplaza por la que
se dicta a continuación, sin nueva vista de la causa.  Téngase por no interpuesto el
recurso de casación en el fondo deducido en lo principal de fojas 84, por el
abogado don Cristian Iván Oyarzo Vera, en representación de la parte
demandante.  

Regístrese.  

Redacción a cargo del Ministro Sr. Juan Araya Elizalde.  

Rol Nº 7.852-08.-   Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los


Ministros Sres. Adalis Oyarzún M., Sergio Muñoz G., Juan Araya E., Guillermo
Silva G. y Abogado Integrante Sr. Domingo Hernández E. 
No firma el Abogado Integrante Sr. Hernández, no obstante haber concurrido a la
vista del recurso y acuerdo del fallo, por estar ausente.   Autorizado por la
Secretaria Sra. Rosa María Pinto Egusquiza.   En Santiago, a seis de mayo de dos
mil diez, notifiqué en Secretaría por el Estado Diario la resolución precedente.

__________________________________________________________________
_______

Santiago, seis de mayo de dos mil diez. 


 

De conformidad con lo dispuesto en el artículo 786 del Código de Procedimiento


Civil, se dicta el siguiente fallo de reemplazo: 
 

VISTO: 
   Se reproduce la sentencia en alzada, previa eliminación de los fundamentos
séptimo y octavo. Y TENIENDO EN SU LUGAR Y, ADEMÁS, PRESENTE:  

PRIMERO: Que para acreditar las situaciones fácticas en que sustenta su acción,


el demandante acompañó a los autos, además de las probanzas que se
pormenorizaron en los motivos quinto y sexto del fallo del tribunal a quo , la
siguiente prueba documental: 1.- Certificado de nacimiento de doña Amelia
Alvarado. 2.- Certificado de matrimonio de don Bartolo Alvarado Huentelican y de
doña Rosalía Milapichún Díaz. 3.- Certificado de nacimiento de doña María Emilia
Alvarado Milapichún. 4.- Certificado de identificación de doña María Emilia
Alvarado Milapichún. 5.- Fotocopia de comprobante de retiro de documento,
individualizado como rectificación administrativa a nombre de doña María Emilia
Alvarado. 6.- Copia simple de sentencia recaída en recurso Rol Corte Nº 456-
2007. 7.- Certificado de defunción de doña María Emilia Alvarado Milapichún,
extendido por la Dirección General de Registros Públicos del Ministerio de
Gobierno de la provincia de Santa Cruz, de la República de Argentina.  

SEGUNDO: Que tal como se expresa en el fundamento tercero del fallo de primer


grado, de conformidad a lo prevenido en el artículo 1264 del Código Civil: El que
probare su derecho a una herencia, ocupada por otra persona en calidad de
heredero, tendrá acción para que se le adjudique la herencia, y se le restituyan las
cosas hereditarias, tanto corporales como incorporales; y aun aquellas de que el
difunto era mero tenedor, como depositario, comodatario, prendario, arrendatario,
etc., y que no hubieren vuelto legítimamente a sus dueños, pudiendo inferirse, en
consecuencia, que la acción de petición de herencia puede ser definida, entonces,
como aquella que compete al heredero para obtener la restitución de la
universalidad de la herencia, contra el que la está poseyendo, invocando también
la calidad de heredero. Es la acción que tiene el heredero contra el poseedor de
una herencia que se da por tal para que se le reconozca su derecho a la totalidad
de la herencia o a una cuota de ella y se le restituyan las cosas hereditarias,
corporales o incorporales, que constituían el patrimonio del difunto fueran o no de
su propiedad?. (Luis Claro Solar, Explicaciones de Derecho Civil Chileno y
Comparado, Editorial Jurídica de Chile, t. XVI, Nº 1.946, pág. 238). De lo señalado
se colige que son requisitos de admisibilidad de la acción sub lite: 1.- la
legitimación activa de parte de quien la ejerce, esto es, la calidad de heredero del
causante por parte del demanda nte; y 2.- la legitimación pasiva del demandado,
es decir, que se dirija efectivamente en contra de quien ocupa la herencia en
calidad de heredero;  

TERCERO: Que del mérito de los antecedentes allegados a la causa y de la


prueba rendida en autos, apreciada en forma legal, es posible tener por
establecidos los siguientes hechos: a).- El demandante don Juan Emilio Alvarado
Sánchez es hijo de don José Efraín Alvarado y de doña María Bernarda Sánchez
Valle. b).- El padre del actor, don José Efraín Alvarado, quien falleció el 24 de
diciembre de 1951, era hijo no matrimonial de doña Emilia Alvarado
Milapichún. c).- La abuela paterna del demandante, doña Emilia Alvarado
Milapichún, quien falleció en Río Gallegos, provincia de Santa Cruz, Argentina, el
25 de junio de 1987, era hija matrimonial de los causantes, don Bartolo Alvarado
Huentelican y doña Rosalía Milapichún Díaz. d).- El demandado, en su calidad de
hijo de don Horacio Alvarado Milapichún, fallecido el 15 de noviembre de 1977,
quien, a su vez, era hijo matrimonial de los causantes, don Bartolo Alvarado
Huentelican y doña Rosalía Milapichún Díaz, solicitó la posesión efectiva de éstos
últimos, la que le fue concedida por resolución judicial de fecha 24 de marzo de
2000, en autos rol Nº 3.637, seguidos ante el Juzgado de Letras de Ancud, ??sin
perjuicio de otros herederos con igual o mejores derechos?. e).- La posesión
efectiva de los bienes quedados al fallecimiento de don Bartolo Alvarado
Huentelican y de doña Rosalía Milapichún Díaz se inscribió a nombre del
demandado, don José Sergio Alvarado Huentelican, en el Registro de Propiedad
del Conservador de Bienes Raíces de Ancud, el 31 de octubre de 2003. La
inscripción especial de herencia se practicó también a nombre del demandado
ante el mismo registro conservatorio con idéntica fecha. f).- La demanda de autos
fue presentada ante el Juzgado de Letras de Ancud el 10 de noviembre de 2004 y
notificada personalmente a don José Sergio Alvarado Huentelican, el 19 de
noviembre del mismo año; 

 CUARTO: Que el artículo 1269 del Código Civil prevé que: ?El derecho de
petición de herencia expira en diez años. Pero el heredero putativo, en el
caso del inciso final del art ículo 704, podrá oponer a esta acción la
prescripción de cinco años?.
Opuesta la excepción de prescripción en los términos que se explicitaron en
la parte expositiva del fallo de casación que antecede, cabe no obstante
recordar, que como ha señalado la doctrina y la jurisprudencia de esta Corte
Suprema, resulta improcedente colegir del contenido de la norma recién
transcrita una eventual prescripción extintiva de la acción, toda vez que por
tratarse de una acción propietaria, que no se pierde por el no uso, la norma a
aplicar debe ser el 2517, según la cual la acción de petición de herencia sólo
se va a extinguir cuando el poseedor haya adquirido el derecho de herencia
por prescripción adquisitiva ordinaria o extraordinaria? (C. de Santiago, 5 de
junio de 1990, Rev. Der. y Jur., t. LXXXVII, sec. 2ª, pág 122; C. Suprema, 28 de
octubre de 2003, Rev. Der. y Jur., t. 100, sec. 1ª, pág 200). De acuerdo a lo que
se ha manifestado, interpuesta la acción de petición de herencia, el
demandado -que se encuentra poseyendo la herencia- en el caso que desee
alegar la prescripción, deberá demandar reconvencionalmente solicitando que
se declare que él ha adquirido la herencia por prescripción adquisitiva, que será
ordinaria de cinco años, tratándose del heredero de buena fe a quien se otorgó la
posesión efectiva, o de diez años en los demás casos. La reflexión que antecede
bastaría para rechazar desde ya la defensa que se sustenta en una pretendida
prescripción de la acción de petición de herencia, puesto que tal como se
desprende del mérito de autos, aquélla no fue esgrimida como demanda
reconvencional, en los términos en que se señaló precedentemente. No obstante
lo anterior y sólo a mayor abundamiento, es dable razonar que, en todo caso, no
existiendo alegación ni prueba alguna en contrario, debiera considerarse que el
demandado de autos tomó posesión de la herencia al practicarse a su nombre las
inscripciones registrales que se mencionaron en el apartado signado con la letra e)
del motivo tercero -el 31 de octubre de 2003- o, a lo más, desde la fecha en que se
le concedió la posesión efectiva de los bienes de los causantes, mediante
resolución judicial de 24 de marzo de 2000, por lo que desde esa data a la época
de notificación de la demanda 19 de noviembre de 2004, no transcurrió tampoco el
plazo de cinco años previsto en el artículo 1269 del Código Civil, por lo que la
excepción de prescripción de la acción deberá indefectiblemente ser desestimada; 

 QUINTO: Que ahora bien, encontrándose acreditados los requisitos de


admisibilidad de la acción sub lite, esto es, la calidad de heredero del causante por
parte del demandante, situación fáctica que se infiere incuestionablemente del
mérito de los certificados de nacimiento que dan cuenta de la cadena de
parentesco que vincula al actor con los causantes, de quienes descendiente en
cuarto grado y de los certificados de defunción de los ascendientes que en línea
directa gozaban del derecho a suceder que le fue transmitido y la posesión del haz
hereditario por parte del demandado, circunstancia que se colige, a su vez, del
tenor indiscutido de las copias autorizadas de las inscripciones de la posesión
efectiva y especial de herencia, que rolan a fojas 10 y 11, es menester concluir la
razonabilidad y justicia de la reclamación efectuada por el demandante, quien,
además, posee reconocimiento legal de su pretensión en los artículos 1264 y
siguientes del Código Civil, por lo que se accederá a su demanda en los términos
que se detallarán en lo resolutivo de este fallo. 

Por tanto y de conformidad, además, con lo dispuesto en las citas legales


mencionadas y en los artículos 186 y siguientes del Código de Procedimiento Civil,
se resuelve: I.- Que se revoca la sentencia apelada de fecha primero de junio del
año dos mil siete, escrita de fojas 47 a 50, en cuanto por ella se rechaza, con
costas, la acción de petición de herencia interpuesta a fojas 12, disponiendo en su
lugar que se la acoge en todas sus partes y, en consecuencia, se declara que el
demandante don Juan Emilio Alvarado Sánchez, es titular de derechos hereditarios
respecto de la herencia intestada quedada al fallecimiento de don Bartolo Alvarado
Huentelican y de doña Rosalía Milapichún Díaz. 
II.- Que no se condena en costas a la parte demandada, por haber tenido motivo
plausible para litigar. 

Regístrese y devuélvase. 

Redacción a cargo del Ministro Sr. Juan Araya Elizalde. 

Rol Nº 7.852-08.-  

Pronunciado por la Primera Sala de la Corte Suprema, por los Ministros Sres.
Adalis Oyarzún M., Sergio Muñoz G., Juan Araya E., Guillermo Silva G. y Abogado
Integrante Sr. Domingo Hernández E. 
No firma el Abogado Integrante Sr. Hernández, no obstante haber concurrido a la
vista del recurso y acuerdo del fallo, por estar ausente.   Autorizado por la
Secretaria Sra. Rosa María Pinto Egusquiza.   

En Santiago, a seis de mayo de dos mil diez, notifiqué en Secretaría por el Estado
Diario la resolución precedente.

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