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TEMA 2. ANÁLISIS ECONÓMICO DEL DELITO.

COSTES SOCIALES DEL DELITO.

Supone unos costes individuales y otros externos. Si se tiene en cuenta el coste individual y para otros la
cantidad óptima del delito es mucho menor.

Costes externos:

- Indirectos: gastos derivados de la rehabilitación de los presos, atrapar y condenar a los


delincuentes, de los delitos de cuello blanco, personal policial, de organismos públicos, de las
detenciones y condenas como cárceles, costes de transferencias como malversación, etc.

- Directos: bienes que se les quita a la víctima o vida.

Uno de los padres del análisis económico del delito es Becker, en el año 68 lleva a cabo un estudio
sistemático aplicando la herramienta económica al estudio de la criminalidad. El delito para este enfoque
es una conducta que produce efectos externos negativos o externalidades negativas, tanto en la riqueza
como en la utilidad social.

Cuando surgen este tipo de adaptaciones a la disciplina económica, algunos autores se preguntaron por los
delitos sin víctimas, dónde está ahí el efecto externo si no hay víctima. Pues aún en esos casos se producen
efectos externos, indirectos, pero efectos externos de todas formas. Así que sea como sea, todos los
delitos provocan externalidades.

1. DECISIÓN DE DELINQUIR.

El comportamiento del delincuente se asimila al de cualquier individuo en la toma de decisiones


(beneficios-costes) y obra “racionalmente” en el sentido económico, de tal manera que, si los beneficios
son mayores o iguales que los costes, el delito será cometido.

Los supuestos subyacentes a este modelo neoclásico de Becker son:

1- El individuo conoce beneficios y costes perfectamente, tienen información perfecta sobre los
resultados.

2- El individuo es libre para elegir entre actividades alternativas y las puede ordenar según sus
preferencias.

3- El individuo actúa intentando maximizar su utilidad dadas las oportunidades disponibles.

Racionalidad económica  si se cumplen dichos supuestos y el individuo comete un delito entonces será
porque es lo que maximiza la utilidad del delincuente.
Cuestiones importantes del modelo:

 NATURALEZA DE COSTES Y BENEFICIOS.

Es la clave para identificar lo que en economía llamaríamos la oferta de delitos por parte del
delincuente o el nivel de criminalidad agregado.

Beneficios o ingresos.

Los beneficios subjetivos de la comisión de un delito pueden variar entre individuos y según el delito
del que hablemos. Para todos los casos hay dos tipos de beneficios:

o Beneficios monetarios: no solo monetarios estrictos sino los que son también monetizables -
consecución de un bien que luego se puede vender.

o Beneficios no monetarios: relacionados con el bienestar psíquico del sujeto que delinque y que no
es fácil traducirlos en algo material, no monetizables fácilmente.

 PROCESO DE EVALUACIÓN Y VALORACIÓN DE ESOS BENEFICIOS Y COSTES.

Surgen tres cuestiones:

1) A veces el delincuente tiene que recurrir a ámbitos de transacción al margen de la legalidad para
monetizar esos beneficios no monetarios (eso que tienes que vender para conseguir dinero) y eso
puede complicar el proceso de asignar valores a los beneficios y costes porque normalmente en los
mercados negros el valor de las transacciones es menor, normalmente en esos mercados el
vendedor está en una posición de fuerza para fijar el precio, no están tan dispuestos a comprar los
objetos provenientes de un delito y por ello normalmente es menor.

Hay una valoración distinta para el mismo objeto. El beneficio monetario para el delincuente va a
ser menor que el valor real y eso es un coste social para la víctima. Esa diferencia es el coste social
externo que tendremos que incorporar en nuestros análisis.

2) El problema de cómo asignamos un valor a esos beneficios no monetarios para poder desarrollar el
análisis económico. La economía tiene herramientas para resolver esas cuestiones de manera más
o menos satisfactoria – utilidad o desutilidad que causan determinadas conductas –. (Pérdida de
valor  ej.: casa cerca de un aeródromo).

3) A veces los beneficios no se presentan de forma segura, sino que van a ocurrir con una
determinada probabilidad. (Valor esperado del beneficio: el valor de algo por la probabilidad de
que ocurra). Estas cuestiones de valores esperados son importantes en valoración de beneficios,
pero aún más en los costes.

Coste  tal multa por la probabilidad de que me pillen.


 LIMITACIONES DEL CONTEXTO QUE PUEDE INFLUIR EN EL ANÁLISIS.
Costes individuales de la acción delictiva.
A veces el beneficio no es un valor seguro, sino que será algo que ocurra con determinada
probabilidad, de tal manera que habría que jugar no con un número cierto sino en términos de valores
esperados. Esto ocurre siempre para el caso de los costes.
Valor esperado del beneficio = probabilidad x valor del beneficio.
a) Costes materiales: costes necesarios para llevar a cabo el acto delictivo, son instrumentos que
suponen un coste para el delincuente. Muchas veces esos costes son insignificantes dependiendo
de los delitos, pero serán costes que tendrán mucha relevancia en otros casos de delitos muy
sofisticados (ej.: actos terroristas).
b) Costes de oportunidad: aquella alternativa más valiosa posible a la comisión del delito concreto, el
tiempo empleado para la preparación o comisión del delito que podría haber dedicado a otro tipo
de opciones. Es el valor a aquella alternativa posible a lo que estamos realizando. El coste de
oportunidad se relaciona con el tiempo empleado en la comisión del delito y con la opción más
valiosa a la que podría haber dedicado su tiempo. Hay determinadas variables en el entorno que
influye que ese coste de oportunidad sea mayor o menor.
Ej.: índice de desempleo alto: coste de oportunidad bajo – mayor probabilidad de delinquir.
c) Coste esperado de la pena: la pena ocurre en términos de probabilidad. Es el resultado del
producto (multiplicación) de la probabilidad de ser condenado por la magnitud de la pena
(esperado = en términos de probabilidad).
Ej.: determinada actuación delictiva conlleva una multa de 100.000€ y existe la probabilidad de
que sea impuesta esa multa del 10%, entonces el coste esperado es de: 100.000 x 0,10 = 1.000€).
Las probabilidades:
o Probabilidad de arresto: ej.; si destino recursos al sistema policial puedo incrementar la
probabilidad de arresto, aumento de la probabilidad general y a su vez el coste esperado de la
pena reduciendo así la probabilidad de delinquir.
o Probabilidad de condena: destinando recursos al sistema judicial para que los juicios sean más
rápidos, que tengan recursos los juzgados para recabar pruebas para que no hay delitos sin
juzgar…
Los costes de la pena: si la probabilidad es del 10% y la magnitud de la pena son 100.000 euros de
multa, entonces el coste esperado de la pena es solo de 1.000:
Coste Esperado = 10% x 100.000 = 1.000
En cuanto al coste de la pena no es solo considerar la multa o los años de cárcel sino también los
ingresos que dejó de recibir durante ese tiempo condenado, un coste retardado adicional en el
sentido de que quienes cumplen una condena pueden verse después discriminados de alguna
manera, mayores barreras a la hora de encontrar trabajo, etc.
d) Coste moral: tiene que ver con la insatisfacción personal por la comisión del delito, como no es un
coste monetario es difícil cuantificarlo. Va a depender de muchas variables: educación, entorno,
empatía… y afecta a cómo toma la decisión el individuo. Es el coste más difícil de tratar y prevenir.
PUNTO DE EQUILIBRIO: consistirá en que el sujeto delinquirá cuando el beneficio neto de hacerlo
(beneficio – costes = beneficio neto) sea superior al de no hacerlo, es decir, el individuo maximizará su
beneficio neto. Dicho de otra manera, si lo hace es porque tendrá un mayor beneficio neto cometiendo el
delito que realizando una actividad legal o cometiendo cualquier otro delito.

Consecuencia: cuanto menor sean los beneficios privados o mayor sean los costes privados, menor será el
beneficio neto y menor será la “oferta de delitos” que tenga el delincuente a la hora de delinquir.
Entonces, la política criminal podrá influir en la medida en que pueda hacer que el beneficio neto sea más
pequeño y fácil intervenir para que el coste de delinquir sea más grande (coste esperado de la pena es
donde más fácil se puede intervenir).

Hay muchos estudios empíricos sobre la comisión de delitos.

Aparte de comprender la conducta criminal, también se encuentra en esto la base de “qué puede hacer el
sistema criminal” para influir en la conducta del delincuente, de cómo puede influir. Los individuos
respondemos a incentivos, y los poderes públicos cuando quieren incentivar o desincentivar ciertas
conductas, las instituciones públicas modifican los incentivos. Donde más va a influir la política criminal es
en los costes, en el valor esperado de la pena a través de la pena en sí, a través de la probabilidad de
arresto y condena en menor medida, en el entorno.

Según el modelo de Becker, el sujeto delinquirá cuando el beneficio de cometer el delito sea mayor que el
coste.

Saldo neto: beneficio mayor que coste.

La consecuencia lógica de eso es que cuanto más bajos sean los beneficios privados o cuanto más altos
sean los costes privados, menor será el beneficio neto y menos incentivos tendrá el delincuente para
delinquir, menor la oferta de delitos.

Pensando en otros costes (coste de oportunidad) también se puede influir (quizá no tan fuertemente como
en la pena y la probabilidad) en el ámbito del entorno, del contexto, eso que tiene que ver con el coste de
oportunidad de delinquir, mediante la alteración de las condiciones socioeconómicas en las que se
desenvuelve el sujeto, que condicionarán de alguna manera su decisión de delinquir.

2. PROCESO DE VALORACIÓN DE BENEFICIOS Y COSTES NO MONETARIOS.

BECKER y sus seguidores eluden el problema diciendo que todos los beneficios y todos los costes se
pueden monetizar, pero no dicen cómo. Sin embargo, otros autores dentro de este grupo, que también
dicen que se pueden monetizar, nos dan técnicas para saber cómo hacerlo.

Según SJOQUIST, las ganancias psíquicas se pueden medir a través de la cantidad de dinero que está
dispuesto a pagar el individuo para obtenerlas. El tipo de encuestas que se hace para valorar este punto es,
“¿cuánto estaría dispuesto a pagar por x?”, sabiendo de antemano que no lo va a pagar.
Algunos dicen que las ganancias psíquicas se pueden medir a través de la cantidad de dinero que el
individuo estaría dispuesto a pagar para obtenerlas. Propone un mecanismo para asignar ese valor. Lleva a
un problema inmediato de que distintos delincuentes con distinto nivel de renta tendrían beneficios
distintos de cometer el delito, personas de renta más alta obtendrían más ganancia psíquica por la
comisión de un delito porque disponen de más.

Según BOWLES, para evitar este problema plantean el instrumento de otra manera; tomar la cantidad de
dinero que el delincuente estaría dispuesto a percibir por NO cometer el delito.

Otros autores como BLOCK, LIND… estiman que es imposible la monetización en algunos casos y que en
estos casos esos métodos que se proponen no deben ser tenidos en cuenta para el diseño de la política
criminal. Estos métodos que se proponen no son válidos porque son cantidades alejadas de la realidad, por
lo que no pueden servir de base para la imputación de penas. Estos beneficios del tipo psicológico varían
infinitamente entre los individuos, delitos, momentos, en definitiva, que dependerán demasiado de
muchos factores subjetivos, por lo que no tiene sentido establecer un método de valoración único.

Cuestionan el modelo de Becker y proponen modelos alternativos, ya que no tiene sentido comparar los
modelos con los costes porque dependen mucho de factores que varían entre cada individuo.

Hay 3 factores más que influyen de manera decisiva en la decisión del delincuente:

A. Información.

Cuando hacemos una valoración de beneficios y costes, va a ser distinta si tenemos información perfecta a
si no la tenemos. El individuo debe de estar bien informado, porque si el individuo conoce de verdad los
verdaderos costes de, en este caso, delinquir, no incurrirá en un fallo donde los costes reales no se vean
adecuadamente reflejados.

El modelo de Becker resuelve la cuestión asumiendo que, en casos de existir fallos de información, esos
fallos son insignificantes, es decir, asume que el contexto social e informativo proveerá el volumen y la
calidad de información procedentes de su entorno, medios de comunicación, otros delincuentes, etc.

Hay que reconocer que, aun existiendo todas esas fuentes de información, hay que reflexionar si la
información que llega es objetiva, es decir, valorar su calidad.

Cuando hablamos de fallos de información serían otro tipo de fallo de mercado alejándonos del óptimo:

- Información imperfecta: todos desconocen algunos aspectos relevantes de la decisión. Muchas


veces ocurre cuando la decisión tiene que ver con algo futuro (ej.: no tenemos información perfecta
de si voy a tener un accidente de tráfico o no, nadie lo sabe).

- Información asimétrica: una de las dos partes tiene mucha más información que la otra (ej.:
cuando vamos al médico y nos receta x, cuando queremos comprar un coche de segunda mano).
En ambos casos es muy probable que el individuo haga una valoración equivocada de beneficios y cotes, y
ello afectará a su decisión de delinquir.

- Ejemplo: si el individuo desconoce el tipo o magnitud de la pena, o desconoce la probabilidad de ser


condenado, calculará mal el coste de su actuación y puede que la decisión que toma sea distinta a la
que habría tomado en condiciones de haberlo sabido.

El fallo de información además de influir en la conducta son muy importantes tenerlos en cuenta a la hora
de diseñar una política criminal. Puede que estemos insistiendo en una política criminal cuando no
podemos explicar el por qué – aunque yo aumente la probabilidad el individuo quizás no lo perciba.

El modelo Neoclásico resuelve el problema asumiendo que, de haber fallos de información en el ámbito
del delito, estos fallos son pequeños e insignificantes porque asumen que el contexto social va a proveer el
volumen y la cantidad de información necesarios, asumen que hay un supuesto de información perfecta. Es
bastante plausible porque muchas veces, en general, hay un volumen de información por distintas vías
muy grande- entorno, medios de comunicación, otros delincuentes, etc.- Pero también ocurre por un lado
que a veces es difícil conocer cuál es la pena por hacer algo ya que la decisión del juez va a estar sujeta a x
circunstancias (agravante, atenuante, etc.).

El resultado es siempre que los individuos mal informados que infravaloran los costes o sobrevaloran los
beneficios van a delinquir más que en ausencia de esos fallos de información.

B. Actitud frente al riesgo.

Los costes se estiman en términos de:

Valor esperado de la pena (VEP) = valor de la pena (VP) x probabilidad (II).

Cuando estamos en términos de probabilidad tiene sentido la actitud frente al riesgo.

Buena parte de los modelos económicos del comportamiento criminal, siguiendo a Becker, comparten la
idea de que los delincuentes muestran preferencia por el riesgo. Ese supuesto es un tanto problemático en
el ámbito de la ciencia económica porque, en general, cuando estudiamos problemas económicos casi
siempre asumimos que los individuos somos aversos al riesgo, lo que se contrapone a la preferencia de los
delincuentes por el riesgo.

La actitud ante el riesgo puede ser de 3 tipos:

- Preferencia por el tiempo.

- Neutrales ante el riesgo.

- Aversión al riesgo.
Ante una posible pérdida:

 Persona es aversa al riesgo: cuando ante una posible pérdida está dispuesta a pagar una cantidad
mayor al valor esperado de ese riesgo para evitarlo.

 Persona neutra: si está dispuesta a pagar un valor igual.

 Persona amante del riesgo: si está dispuesta a pagar una cantidad menor que el valor esperado de
ese riesgo para evitarlo.

 Ejemplo: pérdida ante accidente de coche.

Ante una posible ganancia:

 Somos aversos al riesgo: si preferimos pagar menos del valor esperado para asumir ese riesgo.

 Somos neutrales: si estamos dispuestos a pagar una cantidad igual.

 Somos amantes del riesgo: si estamos dispuestos a pagar una cantidad mayor del valor esperado.

 Ejemplo: ganar la lotería.

De una manera intuitiva, los que son preferentes por el riesgo es como si infravaloraran la probabilidad de
las pérdidas y sobrevaloraran la probabilidad de ganar, al revés para los aversos.

Implicaciones:

- Cuando somos preferentes al riesgo nos afectan más los cambios en la probabilidad que los
cambios en el valor. Somos más sensibles a la elasticidad que a la probabilidad.

- Más recursos en la probabilidad que en el valor de la pena, los delincuentes otorgan mayor
importancia a la probabilidad, por ello, más recursos en policías, en agilizar la justicia… para que la
prevención sea eficaz.

- Diferentes delincuentes se comportan de manera diferente ante el mismo delito con el mismo valor
esperado y la misma probabilidad, ello por su actitud frente al riesgo.

La evidencia empírica avala que los delincuentes son preferentes por el riesgo y ha de tenerse en cuenta a
la hora de diseñar la política criminal y la asignación de recursos.

C. Preferencia temporal.

Cuando una persona comete un ilícito lo normal es que el beneficio se perciba de forma inmediata
mientras que la sanción puede demorarse más o menos en el tiempo dependiendo de muchas cosas: del
delito, la persona, el lugar…

Es por esto por lo que necesitamos lo que en economía se llama actualizar el valor de la sanción al
momento presente para poder comparar el beneficio presente con el valor actualizado de la sanción
futura.
En economía es algo relativamente frecuente que tengamos que hacer eso de actualizar valores futuros.
Una forma de verlo es pensar que el dinero pierde valor a lo largo del tiempo, los valores monetarios de
cualquier cosa pierden a lo largo del tiempo.

Ejemplo: no nos da igual tener 100 euros hoy que tenerlos dentro de diez años. La respuesta al porqué no
nos da igual tiene que ver con el coste de oportunidad. Si yo eligiera los 100 euros dentro de diez años
estaría renunciando, por ejemplo, a los intereses que me habría generado si hubiese puesto ese dinero en
un banco. ¿Cómo se calcula?

*Coste de oportunidad: aquello a lo que renunciamos.

La economía nos dice cómo actualizar un valor presente a cosas del futuro, esto ocurre sobre todo en el
sistema financiero. Usar (tipo de interés anual) es algo así como una media entre lo que se llaman tasas de
preferencia por el presente o tasas de descuento individuales (el equilibrio de las tasas de cada uno), es
decir, cada persona descuenta el futuro de una manera diferente…

- Algunos prefieren tener el dinero hoy, los cuales tendrán una alta tasa de descuento o tasa de
preferencia por el presente. Estos son los tomadores de préstamos.

- Otros tendrán menos necesidad de disponer hoy del dinero teniendo menos preferencia por el
presente o menos tasa de descuento. Estos son los ahorradores.

Esta es la base del sistema financiero, en el cual se ponen en contacto los que necesitan el dinero presente
y no lo van a tener hasta el futuro y los que tienen el dinero en el presente y no lo van a necesitar hasta el
futuro.

Cuanto mayor sea su preferencia por el presente o cuantos más sean los años en los que va a ocurrir
aquella sanción, menor será el valor actualizado de la sanción o condena, es decir, menores costes tendrá
para el individuo delinquir. Ej.: delitos fiscales.

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