Está en la página 1de 1

SOLUCIÓN AL RACISMO Y DESIGUALDAD EN GUATEMALA

Hace poco más de 20 años, tras la firma de los Acuerdos de Paz en 1996, la discusión
sobre el racismo y la discriminación racial emergieron como temas de política pública en
Guatemala. Desde entonces a la fecha, las políticas han tenido grandes altibajos.
En este contexto, la Comisión Presidencial contra la Discriminación y el Racismo contra los
Pueblos Indígenas en Guatemala (CODISRA) les hemos solicitado a la Sede Subregional
de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en México elaborar un
proceso de cooperación técnica para analizar, valorar y medir los efectos de la
discriminación racial y el racismo en la reproducción y profundización de la desigualdad
estructural que afecta a los pueblos indígenas en el país. Un equipo de investigadores
trabajó de la mano de la CODISRA y la CEPAL para generar el presente estudio.
El objetivo de este estudio es visibilizar la desigualdad social que resulta del racismo y la
discriminación racial, y recomendar contenidos de política pública que permitan ir
avanzando en los caminos hacia la igualdad social promoviendo a la vez la diversidad
cultural.
“Para revertir la desigualdad es necesario tomar medidas redistributivas, y constituir el
núcleo de las políticas públicas con vistas a garantizar los derechos, la justicia y la igualdad
en una sociedad multiétnica. Tales políticas reportarían tanto beneficios directos (por
ejemplo, el refuerzo de las capacidades humanas en diversos grupos) como beneficios
indirectos (por ejemplo, la mejora de la cohesión social)”
Dichas recomendaciones consisten en transitar hacia una nueva generación de políticas
públicas que reconozcan la diversidad y que permitan evaluar las limitaciones; promulgar
una ley general de proscripción y sanción del racismo y la discriminación; fortalecer el papel
tutelar del Ministerio de Trabajo y Previsión Social; hacer una revisión y consolidación de la
información estadística relacionada con los pueblos indígenas para un adecuado diseño,
ejecución y evaluación de las políticas públicas; poner en marcha un esfuerzo de
sensibilización y educación ciudadana sobre la diversidad étnica y cultural de la sociedad
guatemalteca; que el Estado comience a reflejar de manera sistémica la diversidad étnica y
cultural de la sociedad, y que se atienda con alta prioridad la situación agraria del país.

A pesar de las limitaciones estructurales e institucionales el Estudio sobre racismo,


discriminación y brechas de desigualdad en Guatemala reconoce que hay cuatro hitos que
posibilitan la disminución de desigualdad en el país pluriétnico y multicultural: la
Constitución Política de la República de 1985 y su Artículo 66 referente a la “Protección a
grupos étnicos”; los Acuerdos de Paz, que reconocen los derechos indígenas tanto
individuales como colectivos, reconociendo además al país como multiétnico y pluricultural;
el Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), cuyo principal aporte es
el reconocimiento de la categoría de pueblos indígenas como sujetos de derechos a nivel
individual y colectivo; y la Política Pública para la Convivencia y la Eliminación del Racismo
y la Discriminación Racial, la cual constituyó “precedentes importantes para el desarrollo de
legislación, políticas y mecanismos institucionales a favor del ejercicio de derechos de los
pueblos indígenas”.

También podría gustarte