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Las cartas de crédito son créditos documentarios, en el sentido de que se pagan mediante la
presentación de ciertos documentos que certifiquen que se ha embarcado determinada
mercancía. En una relación comercial internacional, el cliente del banco que solicita la
apertura de la carta de crédito es el importador (Comprador), y el Beneficiario es el
exportador (vendedor). En una venta internacional, con una carta de crédito documentario, el
pago del precio de la mercancía exportada no la realiza el importador directamente, sino que
la realiza el banco emisor de la carta de crédito. De lo cual, el exportador, una vez recibe la
carta de crédito del Banco Emisor sabe que éste (y no el importador) le pagará el precio,
siempre y cuando presente los documentos que evidencian que se ha hecho el embarque de
la mercancía. Crédito documentario es precisamente la obligación que asume el banco de
pagar al exportador el precio, sujeto a la condición de que se presenten los documentos
exigidos.
“…Comprende todo acuerdo, cualquiera que sea la denominación o descripción, por medio
del cual un banco (Banco Emisor, obrando por solicitud y de conformidad con las
instrucciones de un cliente (el Ordenante del crédito) o a aceptar letras de cambio
(instrumentos de giro) libradas por el Beneficiario, o autoriza a otro banco para que efectúe el
pago o acepte dichos instrumentos de giro contra la entrega de los documentos exigidos
siempre y cuando se cumplan los términos y condiciones del crédito (RRUU, Art. 2).
Las partes en una relación de carta de crédito: las partes esenciales en toda relación de
carta de crédito son tres: 1) Un comprador (importador) que es el ordenante de la carta de
crédito: 2)un banco emisor: 3) un vendedor (exportador) que es el beneficiario de la
obligación de pagar que asume el banco por medio de la carta de crédito.
Cómo opera la carta de crédito: el banco emisor de ésta, ubicado en el país del ordenante,
utiliza a otro banco en el país del beneficiario, para que le notifique o avise a éste la apertura
de la carta de crédito. Este segundo banco es llamado banco notificador o avisador el cual le
suministrará al beneficiario un ejemplar del documento para que tome conocimiento de los
términos y condiciones de la carta de crédito. Al mismo tiempo el propio banco notificador u
otro banco del lugar, le confirmará la carta de crédito al beneficiario (banco confirmador). La
confirmación es una obligación autónoma y directa que asume el banco confirmador ante el
beneficiario, de modo que éste pasa a tener ante sí dos obligados a cumplir la misma
obligación. La carta de crédito debe indicar un banco designado, encargado de recibir la
documentación y completar las operaciones con los demás bancos. Un banco designado no
está obligado a pagar, salvo que también haya confirmado la carta de crédito, en cuyo caso
se convierte en un banco pagador. Todas las funciones descritas pueden ser cumplidas por
un solo banco, si así lo hubiere solicitado el beneficiario. Esto ocurre cuando el beneficiario,
en lugar de recibir el pago de inmediato, libra a su favor una cambial contra el pagador a un
plazo convenido por el ordenante, comprador de la mercancía.
Revocable o irrevocable
Confirmada o no confirmada
Domiciliada o circular
Con entregas únicas o sucesivas
De crédito único o rotatorio
Con pago a la vista, diferido o anticipado
Transferible, etc.
La carta de crédito es revocable o irrevocable según sea el tenor del compromiso del
banco emisor y del banco confirmador. La revocación tiene validez, siempre que se
haga antes de la presentación de los documentos de embarque por el beneficiario.
Normalmente la carta de crédito es irrevocable. Es más a partir de 1994 y conforme a
las RRUU se presume que el crédito es irrevocable. Para que sea revocable, es
necesario que se incorpore tal cualidad en forma expresa en el documento.
La carta de crédito puede ser de crédito único en el sentido de que una vez utilizado
se extingue y con ella la relación jurídica correspondiente, pero puede ser también de
crédito rotativo, lo cual permite renovar o regenerar la carta de crédito sin necesidad
de proceder a instrumentar de nuevo la operación. Los créditos rotativos se utilizan a
favor de los suplidores periódicos de materias primas o productos elaborados.
Según la oportunidad de pago. Las cartas de crédito son de tres tipos diferentes: con
pago a la vista, exigible contra presentación de documentos: crédito con pago diferido,
con o sin aceptación de letras de cambio por parte del obligado a pagar; crédito con
pago anticipado, el cual permite al beneficiario recibir adelantos antes de la entrega de
los documentos de embarque; constituyendo una garantía (cláusula verde) o sin
constituir garantía (cláusula roja).