Chatelain 1

Keeara Y. Chatelain

Ivelisse Malavé

Lengua espanola

3 de marzo de 2023

Colaborar con amor

En un nivel básico, ser listo en colaborar es simplemente una lista de rasgos de

carácter. Sin embargo, cada principio de esta habilidad está cercanamente ligado a los demás,

lo que permite que cada principio funcione en armonía con los demás. Cualquiera que pueda

lograr esta armonía de ciertos rasgos de carácter y aplicarlos está listo para colaborar: alguien

que busca ayuda y la ofrece. Utiliza esto, junto con la colaboración con los demás, para liderar.

También emplean la sabiduría para tomar decisiones que pueden afectar a todo un grupo,

especialmente a la hora de tomar riesgos y hacer compromisos.

Debido a los principios que conforman lo que es ser listo para colaborar y a la forma en

que cada uno de ellos trabaja conjuntamente, el liderazgo de servicio reside en el centro de

esta habilidad. Yo soy una líder sierva e incluso tengo un premio que lo demuestra, así que ser

lista para colaborar es uno de mis puntos fuertes. Esto se debe a que ser listo para colaborar

no sólo consiste en ser un líder, sino en utilizar el liderazgo de servicio para influir a los demás,

incluso cuando requiere tomar riesgos o hacer cosas que no queremos. Poseo todas las

características que me hacen lista para colaborar. En algunos aspectos, sin embargo, la forma

en que muestro estos rasgos puede no ser "convencional".

A lo largo de mi vida, especialmente en el colegio, he dado muestras de cada uno de los

principios de ser lista para colaborar en los estudios, el deporte y otras actividades

extracurriculares. Por ejemplo, siempre he ofrecido ayuda a mis compañeros, tanto dentro

como fuera del aula. Ya sea ayudando en la investigación de un tema específico para la clase

de ciencias sociales, corrigiendo un ensayo para la clase de inglés o enseñando a un

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compañero una nueva habilidad en la practica de fútbol, siempre he ayudado a los demás. No

sólo esto, sino que busco ayuda de la misma manera, haciendo preguntas a los profesores y

compañeros cuando estoy confundida, y yendo a tutorías cuando estoy realmente atascada.

Esto demuestra que muestro el primer principio de ser lista para colaborar: "Buscar y ofrecer

ayuda y consejos sin esperar nada a cambio".

Además, he demostrado la capacidad de delegar el trabajo de acuerdo con las

fortalezas y debilidades individuales muchas veces a lo largo de la escuela secundaria. Un

ejemplo específico es que asumí un papel de liderazgo para un trabajo de investigación de

grupo que hicimos para la clase de español en nuestro segundo semestre de 11º grado. Tuve

que asignar a cada miembro del grupo tipos de trabajo que sabía que se adecuaban a sus

puntos fuertes. Por ejemplo, asigné a un miembro más extrovertido del grupo el trabajo de

hacer entrevistas, mientras que otro miembro del grupo se encargó de hacer la investigación en

línea porque sabía que tenía esa habilidad. También lo hago como jugadora de fútbol,

asignando distintas posiciones a diferentes jugadores según su nivel de habilidad y estilo de

juego cuando jugamos partidos o en las prácticas.

El mencionado trabajo de investigación también ayuda a ilustrar mi capacidad de llegar

a compromisos para lograr una tarea común. Desde el principio, mi grupo y yo decidimos que

no queríamos que el proyecto afectara a nuestra vida personal y a nuestra salud mental, así

que decidimos limitar nuestro trabajo. Nunca trabajamos más de dos horas fuera de clase, y

nos negamos a complicar el proyecto más de lo necesario en un esfuerzo por ir más allá. Esto,

por supuesto, hizo que saquemos una B en el proyecto, pero era un compromiso que

estábamos dispuestos a hacer por nuestro bienestar. Este proyecto también demostró mi

capacidad para escuchar, respetar y considerar las ideas de los demás, porque tuve que tener

en cuenta la opinión de los miembros de mi grupo sobre la dirección que querían que tomara el

proyecto, el tema que investigaríamos y, en última instancia, cómo íbamos a manejar la

situación.
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Por último, he influido en mi comunidad a través del servicio de muchas maneras. En

menor escala, he ayudado a mis compañeros con tarea, el trabajo de clase e incluso con

consejos para la vida. Por ejemplo, ayudé a uno de mis compañeros a elegir su carrera y le di

consejos sobre cómo seguirla. A mayor escala, pasé una semana como traductora para una

misión médica en Jarabacoa y La Vega, ayudando a docenas de personas a acceder a

atención médica que de otro modo no habrían podido recibir.

En conclusión, poseo todas las cualidades de alguien que está listo para colaborar,

como demuestran los múltiples ejemplos citados. Soy capaz de llegar a compromisos para

lograr una tarea común, soy capaz de buscar y ofrecer ayuda, soy capaz de delegar el trabajo

adecuadamente, y mucho más. Sobre todo si tenemos en cuenta que hay innumerables

ejemplos más que podrían demostrar mis capacidades en esta habilidad, es innegable que

estoy lista para colaborar.