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Eficiencia, justicia y política

en el sentido de Pareto
Philip Kitzberger

Resumen

El concepto de “óptimo de Pareto” ha tenido una amplia utilización en la teoría social y política de
los últimos decenios. Si bien el concepto analítico evoca el nombre de quien lo formulara originalmente,
poco se ha indagado sobre el lugar y significación que ocupa el mismo dentro de la obra teórica de
Vilfredo Pareto (1848-1923). El propósito del siguiente artículo es cubrir dicha carencia tratando de
ligar, simultáneamente, la problematización teórica del economista y sociólogo italiano con el universo
de problemas teóricos actuales en el cual está inmerso el concepto de “optimalidad paretiana”.1

Introducción

¿Es posible encontrar fundamentos carne el dictum de Goya, en tanto parecía


racionales para el orden político? La que el sueño de la razón había realmente
fundamentación, explicación y justificación de producido un monstruo. Para algunos de
los ordenamientos humanos por medio de la éstos –pensemos por ejemplo en los
razón ha sido, indudablemente, uno de los principales exponentes de la llamada escuela
motivos constantes del pensamiento social y de Frankfurt– la Razón había degenerado en
político de occidente. una mera razón instrumental, quedando –en
La secularización de los sistemas tanto facultad humana– despojada de su
sociopolíticos, la inversión del principio de eticidad inherente. El problema teórico-político
legitimidad y las demás alteraciones de la cobraba así su forma en la pregunta acerca de
estructura y la conciencia, propias de la las posibilidades de trascender este producto
modernidad, han determinado la primacía de históricamente pervertido y, consecuentemente,
esta preocupación en la teoría política. en torno a la redefinición de ese viejo atributo
Desde principios del presente siglo la humano que merece ser escrito con
reflexión teórica se ha visto obligada a repasar mayúscula.
los vínculos entre racionalidad y orden político Desde otras perspectivas de pensamiento,
democrático. La experiencia de las guerras principalmente en el ámbito anglosajón, el
mundiales y el totalitarismo parecen haber camino emprendido para la refundamentación
sacudido con violencia el ensueño liberal- del orden político –hecho que ha supuesto
iluminista. Para muchos intelectuales se hacía una acusación de conservadurismo por las

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posiciones arriba referidas– ha preferido no Veamos la formulación original de Pareto:
cuestionar tan radicalmente el concepto de “Diremos que los miembros de una colectividad
racionalidad proveniente de la tradición liberal- gozan, en una cierta posición, de un máximo
individualista. de ofelimidad [utilidad], cuando es imposible
A este debate han concurrido ciertas alejarse mínimamente de esa posición, de tal
corrientes de la filosofía práctica, elaboraciones modo que la ofelimidad [utilidad] de la que
neocontractualistas, una vertiente neoutilitarista gozan cada uno de los miembros de esa
conocida como Economía del Bienestar colectividad aumente o disminuya” (Pareto,
(Welfare Economics) y las llamadas teorías 1927, cap. VI, 33). En otras palabras, este
de la Elección Pública (Public Choice). Todas principio indica que una situación es óptima si
estas líneas de pensamiento tienen en común un cambio no puede hacer que la utilidad de al
la preocupación por la posibilidad de elaborar menos un individuo mejore sin provocar,
una justificación de carácter universalizable simultáneamente, una reducción de la utilidad
para los acuerdos, arreglos institucionales y de al menos otro individuo. Inversamente, una
elecciones públicas, propias de un orde- situación es Pareto-subóptima o Pareto-
namiento democrático. Más allá de las perfectible en tanto sea posible mejorar la
controversias internas, todos estos desarrollos posición de al menos un individuo dejando la
convergen en el supuesto según el cual la posición de los demás al menos indiferente.
eticidad de un ordenamiento sólo es fundable La centralidad de dicho criterio en la
a partir de una extensión de postulados discusión teórica es sencilla de explicar.
individualistas, en tanto el único parámetro El pensamiento liberal en su vertiente
normativo posible está en una concepción de utilitarista clásica suponía que, partiendo de
la autonomía moral del individuo o en un postulado de individualismo hedonista, el
considerar que la noción de lo “justo” sólo puede bienestar máximo de la colectividad, el estado
derivarse desde intereses individuales cuyo más deseable para la sociedad en conjunto o
único juez es su propio portador. la función de utilidad social (para utilizar la
nomenclatura contemporánea), podía
La eficiencia como criterio metodológico y establecerse como la sumatoria de los
como parámetro de justicia distributiva coeficientes de satisfacción de cada uno de
los individuos que componen el grupo. Esta
Todo lector o estudioso que haya fórmula, que en términos de Bentham precisa
curioseado mínimamente en la mencionada al interés general como consistente en la
problemática se habrá topado con el concepto felicidad del mayor número posible, ha sido
de Pareto-optimalidad u óptimo de Pareto. Cada atacada por sus graves implicaciones. En
uno de los aportes en el debate hace referencia, tanto ética social, es posible argumentar desde
discute o toma posición respecto del criterio aquélla un orden donde la satisfacción de unos
analítico que lleva el nombre de Vilfredo Pareto, pocos justifica la opresión de la mayoría, en
el sociólogo y economista italiano, también tanto una sumatoria admite que el total de
conocido por su teoría de la circulación de las satisfacción de un ordenamiento tal sea mayor
élites, quien elaboró el problema a lo largo de que el de una sociedad más igualitaria. En
su extensa e inabarcable obra. términos más generales, este criterio admitía
¿En que consiste este tan mentado criterio? potencialmente cualquier tipo de arreglo social.

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Adicionalmente, esta teoría implicaba la Pero permanecía aún el problema de
existencia de un juez externo capaz de establecer un criterio de bienestar sin acudir a
cuantificar las utilidades individuales en modo ellas, es decir, de encontrar un criterio racional
neutral a los fines de conformar la sumatoria. y universalizable cuyo contenido ético
El problema no es sólo lo que debe ser descansara estrictamente sobre una base
considerado placer o satisfacción, sino cómo científica. El criterio de Pareto aparecía
se deben ponderar las satisfacciones de los entonces como una novedad dado que en él
diferentes individuos. quedaban fuera las comparaciones
Así se le presenta un problema al interpersonales. El concepto de ofelimidad,
pensamiento liberal. Éste no puede, por un neologismo acuñado por Pareto para evitar las
lado, renunciar al principio libertario según el ambigüedades del concepto de utilidad del
cual todo arreglo social debe ser juzgado en lenguaje corriente, es la primera formulación
función del espacio que otorga al individuo para explícita 2 de lo que hoy se conoce como
desplegar sus intereses y ambiciones utilidad ordinal y preferencia revelada (Allais,
individuales; la justificación del Estado no 1968, 407; Schumpeter, 1965, 1291). “Si las
puede, para el liberalismo, tener otro sentido; utilidades de cada uno de los individuos fuesen
por otra parte, sin embargo, queda instalado el cantidades homogéneas y, por consiguiente,
problema de establecer hasta qué punto la se pudiesen comparar y sumar, nuestro
satisfacción de un individuo es posible en estudio [la determinación de los máximos de
tanto se evidencia que las satisfacciones utilidad colectiva] no sería difícil, al menos
individuales colisionan unas con otras. teóricamente. ... Pero el asunto no es tan
En este contexto, el principio de Pareto, sencillo. Las utilidades de los varios individuos
redescubierto póstumamente por Hicks y Allen son cantidades heterogéneas, y una suma de
en los años ‘30 parecía ofrecer el camino para tales cantidades no tiene sentido alguno, no
una solución científica de la economía (Cirillo, existe, no se puede considerar”. (Pareto 1988,
1973, 148; Schumpeter, 1301) a partir de la cual §2126-7) En economía pura, dice Pareto, solo
se reabría la posibilidad de fundamentaciones es posible partir “de una única norma, es decir,
ético-normativas del orden social o institucional la satisfacción del individuo, ... de tal
derivadas del principio de racionalidad satisfacción este último es el único juez. Así
individual. ha sido definida la utilidad económica, o sea
Los desarrollos de la economía neoclásica la ofelimidad” (Pareto 1988, §2110). Esto
habían avanzado ya la crítica a las significa que el observador puede construir
comparaciones interindividuales de la utilidad. conceptualmente escalas de preferencia
La crítica del utilitarismo clásico encontraba individual pero limitándose siempre a una
sustento en los desarrollos del neopositivismo ordenación en base a preferencias explicitadas.
según el cual las proposiciones éticas de Si al comparar constelaciones distributivas sólo
carácter metafísico carecen de sentido (Sen se afirma una superioridad, en tanto y en cuanto
1998, 49). La crítica suponía que toda la mayor utilidad de al menos un individuo esté
comparación interpersonal acude a una acompañada por, al menos, la indiferencia de
proposición de tal carácter perdiendo así su todos los demás, no se está incurriendo en
atributo de racionalidad y cayendo una comparación interpersonal. Ante una
consecuentemente en el subjetivismo-ético. situación alternativa donde la mayor

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prosperidad de unos supusiera la disminución de un debate y de una inabarcable bibliografía
de la utilidad relativa de otros, la deseabilidad/ (Sen, 1998) que, iniciados en los años ‘50,
indeseabilidad de tal alternativa debería ser perduran y se reproducen hasta la actualidad.
juzgada a partir de un criterio adicional. Éste Excede la intención y posibilidades de este
contendría necesariamente, al menos en modo trabajo reseñar, incluso someramente, la
implícito, un coeficiente arbitrario de amplitud de la discusión contemporánea acerca
ponderación de utilidades (Pareto 1988, §2110, del óptimo paretiano. Sólo será necesario indicar
2129). algunas de sus líneas básicas para pasar a la
El criterio de Pareto parece abrir así la discusión respecto del lugar que ocupa la noción
posibilidad de comparar situaciones de máximo de ofelimidad para una colectividad
distributivas sin violar el postulado de en la obra económica y sociológica de Vilfredo
racionalidad individual. Este respeto por la Pareto. Pero la intención de este tratamiento
racionalidad, entendida como la consecución no pretende ser una arqueología del concepto
consistente de la propia satisfacción por parte de Pareto-optimalidad. El descubrimiento
de los individuos, no podía dejar de llamar la paretiano no fue una contingencia respecto del
atención de los teóricos de sensibilidad liberal. contexto de la discusión teórica general; la obra
El aporte de Pareto reabría la posibilidad de de Pareto es rica en consecuencias teóricas
vincular individualismo, racionalidad y respecto del problema de la utilidad individual y
normatividad como postulados para una idea colectiva. El presente trabajo pretende
de racionalidad colectiva, dado que el equilibrio demostrar que desenterrar tales argumentos
paretiano excedía la mera constatación de la no es ajeno y puede constituir un aporte a la
convergencia de las conductas individuales problemática teórica actual.
colectivamente consideradas y adquiría el En términos generales, el debate de los
carácter de racional en el sentido de principio últimos años ha girado en torno de la relación
universalizable, de deber ser. Lo que entre el criterio de Pareto y la posibilidad de
inicialmente constituyó, en la percepción de construir principios de justicia3 sobre criterios
los economistas, un avance en la cientificidad racionales. El espectro de la discusión supone
de la determinación de los puntos de equilibrio en un extremo la posibilidad de considerar al
económico, se expandió en la percepción de óptimo como un criterio de justicia en sí, hasta
una fundamentación racional (universalizable) el extremo opuesto de negar cualquier relación
de la justicia, de los ordenamientos entre justicia y óptimo. Como es natural
económicos y del orden político para los suponer, la polémica transcurre entre la infinita
filosofos de la moral, los economistas filósofos gama de posibilidades intermedias. De no
y los teóricos de la política. consistir en un principio de justicia válido en
No obstante, sería exagerado considerar sí, muchos consideran que el criterio de Pareto
este pequeño eslabón en la historia del tiene una conexión estrecha con un principio
pensamiento como una revolución teórica. Más tal. En tales casos el óptimo constituye una
preciso sería el relato si se afirma que, condición necesaria aunque no suficiente;
recuperada por la así denominada economía otros, por ejemplo, sostienen que el óptimo se
del bienestar y exiliada de su contexto original debe retraducir, a través de una noción de
en la obra del pensador italiano, la categoría unanimidad, en un criterio para evaluar la
analítica en cuestión ha sido la piedra de toque elección de normas constitucionales

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(Buchanan, 1962). Entre los que objetan la y experiencia histórica; por tal hecho sería una
pertinencia del óptimo a la hora de construir burda simplificación considerar el pensamiento
un principio de justicia, las posiciones y los de este autor como un cuerpo teórico cerrado
argumentos son muy variados. Entre los más y coherente. Por ello, si bien cierta reducción
comunes cabe destacar el hecho de que el es siempre inevitable, será necesario hacer
principio sólo funciona a partir de la evaluación algunas distinciones en lo que refiere a la obra4.
de distribuciones dadas, y por tanto, no dice Una vez aclarada la problematización
nada acerca de una distribución primaria o bien paretiana, quedará claro que el discurso teórico-
adquiere –por ello– un carácter conservador normativo en que aparece actualmente el
(Rawls, 1986, Sen, 1970). El óptimo es un criterio de optimalidad es ciertamente extraño
principio de eficiencia económica y no un criterio y al menos parcialmente ajeno al uso y
de justicia; por tanto, en caso de ser deseable, significado que le otorgaba el autor (Cirillo, 145).
debe ser antecedido lexicográficamente por una Formado como ingeniero en la década del
norma ética (Rawls, 1986). También existen ‘60 del siglo pasado, Pareto se desempeñó a
objeciones más radicales que cuestionan el lo largo de las dos décadas siguientes en el
propio carácter de racionalidad del criterio y sector industrial y participó tangencialmente
afirman así su futilidad, dado que el óptimo en la vida política de la Italia posterior al
viola ciertas certezas de sentido común (Sen, Risorgimento. De este período provienen sus
1998, 50). Por ejemplo: frente a una distribución primeros escritos económicos caracterizados
extremadamente desigual, ¿puede afirmarse por un tono militante y polémico. En ellos Pareto
la optimalidad-racionalidad de un cambio que toma partido en la llamada lucha liberista, es
altera positivamente la utilidad del más decir, en la defensa de una política de libre
favorecido, dejando invariada la utilidad de mercado y en oposición al proteccionismo
todos los demás? ¿Es esta distribución económico dominante. Independientemente del
realmente superior o más racional que otra tono polémico-político de estos escritos, se
donde, disminuyendo mínimamente (Pareto- insinúan en ellos ya algunas de las principales
subóptimo) la utilidad del más favorecido, se intuiciones de su obra económico-teórica
aumenta considerablemente la utilidad del posterior. A mediados de la década del noventa
resto de la colectividad? y fruto de su creciente renombre intelectual,
Toda esta discusión acerca del óptimo de sumado a una serie de decepciones de la vida
Pareto se ha realizado independientemente del práctica, Pareto consigue la cátedra de
lugar que ocupa este criterio en el pensamiento economía política en la Universidad de Lausana
del autor. En lo que sigue intentaremos en Suiza. A partir de ese punto, y a lo largo de
bosquejar el entramado teórico en el que se la siguiente década, aparecen sus principales
inserta el problema de la utilidad social en la obras económicas en las que se observa un
obra de Pareto. gradual alejamiento del liberalismo económico
como doctrina. A mediados de la primera
El lugar de la “ofelimidad” en la obra década del nuevo siglo se produce otra
paretiana. mutación en su derrotero intelectual, pero esta
vez las causas son inherentes a la reflexión
La obra de Pareto es muy vasta y fué teórica. A medida que avanza en su economía
escrita a lo largo de varias décadas de reflexión pura, concluye que ésta no puede explicar por

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sí sola el equilibrio económico y social. Esta su utilización reviste, como podremos
convicción lo lleva a retirarse de la vida observar, un carácter normativo. En la
universitaria para dedicar el resto de su vida al argumentación liberal de Pareto tiene un lugar
estudio y elaboración de una ciencia más central su ley de la repartición de la riqueza
amplia –de la que la economía comprende sólo (Allais, 406); con ésta Pareto quiere demostrar
una porción– capaz de explicar el equilibrio y que, a partir de la observación histórica de la
la dinámica de las sociedades: la sociología. distribución de los réditos en las sociedades
Ahora bien, habíamos afirmado que el de las que se puede obtener prueba empírica,
concepto de máximo de ofelimidad no asume, se observa una constante distributiva, la cual
según el autor, un contenido normativo. En su tiene la forma de una curva o pirámide (Pareto,
formación positivista Pareto pretende trabajar 1965). La conclusión es que la constancia en
desde una ciencia libre de valores y basada la desigualdad distributiva responde a la
en la mera observación y relevamiento de naturaleza de la propia sociedad dada la
regularidades empíricas. A lo largo de toda su heterogeneidad natural de sus componentes
vida, Pareto no abandonaría la convicción (Pareto 1927, cap. VII, 13). A lo sumo se pueden
acerca del valor de la ciencia empírica –o observar diferencias en cuanto a la altura y la
lógico-experimental en sus propios términos– forma (más trunca o más puntiaguda) de la
como forma única de acceso a un conocimiento curva. En consecuencia las distribuciones
racional de la realidad. Lo que a lo largo de su igualitarias no son –siempre siguiendo a
obra se ha alterado radicalmente es su Pareto– posibles en el nivel de la sociedad5.
concepción acerca de los límites y alcances Basado en su propia formulación de la ley,
de la ciencia. Esta alteración es fundamental Pareto afirma consecuentemente que una
y está estrechamente vinculada a su disminución de la desigualdad, es decir, una
comprensión del lugar y determinación de las disminución de la altura de la curva, sólo es
funciones de utilidad social. posible mediante un aumento de la
En sus primeros trabajos está presente, y productividad total de la sociedad. En otros
no sólo implícitamente, la creencia en la términos, para aumentar la utilidad de los
posibilidad de una política racional y científica. menos favorecidos debe aumentarse el
Por medio de un conocimiento adecuado de la producto total de la sociedad. Una
realidad sería posible fundar un orden social redistribución de un producto constante en un
más racional, más eficiente económicamente sentido más igualitario, implicando una
y más justo. La defensa del libre mercado no disminución en la utilidad de los más
es así, para el autor, una mera convicción o favorecidos, produciría sólo una disminución
preferencia ideológica. En su obra temprana, de la productividad venidera, y en cuanto tal,
Pareto intenta probar que la competencia se puede afirmar que el resultado sería
económica, como el principio social más ineficiente o subóptimo. El cierre de este
eficiente, es científicamente demostrable. silogismo paretiano es sencillo: la libre
En la peculiar defensa paretiana del competencia de factores económicos es la
liberalismo económico propia de sus escritos forma de ordenamiento que maximiza el
tempranos, el concepto de optimalidad aparece potencial productivo de una sociedad, ergo es
implícitamente y, si bien el autor consideraba el más justo. En conclusión, es posible afirmar
estar haciendo un uso neutral y descriptivo, que en el pensamiento más temprano de Pareto

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hay una utilización normativa del concepto de instrumentalizan ciertos medios para alcanzar
máximo de utilidad en tanto construye una un fin determinado en forma adecuada (Pareto,
noción de justicia distributiva basada en el 1988, §151). Ahora bien, para poder determinar
concepto de eficiencia y optimalidad. Pareto la racionalidad de una acción es necesario
creía haber encontrado así los fundamentos poder confrontar empíricamente la adecuación
científico-racionales para un ordenamiento teleológica de medios y fines implicados. En
social y político. Sin embargo, como veremos economía esto no es difícil en tanto la acción
a continuación, esta convicción no habría de considerada consiste primordialmente en la
perdurar. consecución de fines basados en la
En lo que se podría denominar el período satisfacción que provéen los bienes materiales.
de madurez del pensamiento paretiano, Pero estos fines son lo que Pareto denomina
correspondiente a sus escritos sociológicos, fines directos (Pareto, 1988, §151) y éstos
se produce un vuelco hacia una visión remiten necesariamente a una determinación
evidentemente más pesimista de los asuntos anterior. El fin directo es un dato que podemos
humanos. Su abandono de los ideales del observar, pero no nos dice nada acerca de la
liberalismo económico no se produjo, sin motivación a actuar de un individuo; a partir
embargo, en pos de otra orientación ideológica de este no podemos saber, por ejemplo, porqué
como suelen creer algunos 6. Sería más la satisfacción de un asceta está en abstenerse
preciso afirmar que la mutación en su de los placeres materiales y porqué el hedonista
pensamiento se produjo en el nivel filosófico- se satisface en ellos. Hay algo por detrás que
antropológico. En su propia fundamentación de no podemos conocer, pues no se trata de
la necesidad de abandonar la economía por la entidades empíricamente observables, pero
sociología se encuentra la explicación. cuya existencia podemos deducir a partir de
Para el autor el objeto de las ciencias las manifestaciones en el comportamiento
sociales consiste en la observación empírica (derivaciones) y que, a través de ciertos
de la sociedad considerada como un sistema mecanismos de abstracción, podemos tipificar
en equilibrio; la economía estudia cómo surgen (residuos). Lo que hay detrás de estas
y se establecen los equilibrios a partir de los manifestaciones puede ser de carácter muy
comportamientos individuales determinados diverso, Pareto habla de instintos, sentimientos,
por los gustos y obstáculos (Pareto, 1926, cap. estados psíquicos, inclinaciones, tendencias,
III). Esta definición de la acción individual etc. (Pareto, 1988, §161) No obstante, sería
implica lo que hoy se denomina un postulado equivocado interpretar a partir de lo dicho que
de racionalidad económica, dado que se Pareto pasa a postular el irracionalismo en la
supone un comportamiento maximizador por acción humana. El autor es cauto al afirmar
parte del actor. El economista debe, sin que la acción de los individuos en sociedad es
embargo, atenerse a la ofelimidad de cada predominantemente no-lógica lo cual es
individuo en particular dado que los gustos, distinto a decir que es ilógica (Pareto, 1988,
las preferencias, los fines y los valores que §150). Las acciones no-lógicas poseen, a
determinan la acción no son predeterminables diferencia de las ilógicas, un sentido subjetivo
y ocupan el lugar de datos a relevar en el o mentado. Los individuos actúan adecuando
análisis científico. La acción humana es medios a fines, pero los fines (últimos) de las
racional –lógica, dice Pareto– en tanto se acciones son entidades no empíricas,

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conceptos metafísicos, entidades imaginarias, datos del problema que se quiere resolver
valores éticos o estéticos, etc. El que no se con el razonamiento lógico-experimental.
las pueda denominar lógicas depende Aparece aquí nuevamente la indeterminación
exclusivamente de la imposibilidad de del concepto de utilidad...” (Pareto, 1988,
contrastar empíricamente estos fines. §2143, las negritas son mías).
Sintetizando el discurso, Pareto –en su Calificando al concepto de utilidad como
madurez– concluye que las acciones indeterminado, Pareto quiere significar su
socialmente relevantes están determinadas, en carácter irracionalizable. Esto se debe a que
última instancia, por conceptos y/o entidades “los conceptos que los diversos individuos
científicamente irreductibles. Por detrás de las tienen acerca del bien propio y ajeno son
acciones hay siempre un sustrato lingüístico escencialmente heterogéneos, y no hay modo
en el que aparecen nociones absolutas, de reducirlos a una unidad” (Pareto, 1988,
abstractas o personificadas como bien, §2143).
justicia, belleza, verdad (en su sentido absoluto), La sociología de Pareto nos dice que el
Dios, naturaleza, etc. Ontológicamente estas concepto de utilidad no es racionalmente
entidades son equivalentes a la noción de determinable, pero simultáneamente es el
valores en Max Weber (Freund, 1974, 187-ss.) factor, el determinante, la especificación del
dado su carácter irreductible e irracionalizable. orden mismo. Sin un concepto absoluto de
Simultáneamente, y es difícil exagerar el bien, de justicia, de verdad, no hay sociedad.
dramatismo con que Pareto asume esta En consecuencia, la determinación del
percepción, el autor observa que estas óptimo social debe ser considerada de otro
entidades son determinantes a la hora de modo. Pareto homologa las consecuencias
explicar el orden social. Desde un teóricas de su sociología con una nueva
individualismo metodológico, reducido a la distinción en cuanto a las funciones de utilidad
postulación de una racionalidad económica social.
como principio de la acción humana, no se Para darle una solución teórica al problema,
puede explicar la propia existencia de la vida Pareto define dos conceptos analíticos que,
en sociedad, del orden político. La según afirma, corresponden respectivamente
maximización por sí sola no dice nada acerca a los ámbitos de la economía y de la sociología:
de qué es lo que hay que maximizar7. el máximo de ofelimidad PARA una
En tanto la economía observa acciones colectividad y el máximo de utilidad DE una
racionales, bajo un postulado de adecuación colectividad.
teleológica, es una explicación incompleta del “En economía política podemos determinar
equilibrio social (Pareto, 1988, §1732-5). La el equilibrio con la condición de que cada
racionalidad es un principio de orientación de la individuo consiga el máximo de ofelimidad. ...el
acción, pero deja abierto el problema de su equilibrio será posible en infinitos puntos para
determinación y su resultado. En consecuencia, los cuales se han alcanzado los máximos de
“...una sociedad determinada exclusivamente ofelimidades individuales” (Pareto, 1988,
por la “razón” no existe y no puede existir. Y §2128) Recordemos que la ofelimidad
ésta ya no porque los “prejuicios” de los descansa en una escala ordinal de preferencias
hombres impidan a los mismos seguir los reveladas, en consecuencia, los puntos de
dictámenes de la “razón”; lo que falta son los equilibrio observados a partir de las

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ofelimidades pueden reclamar para sí un concepción realista del poder público queda
carácter objetivo, científico o racional. Pero en implícito el supuesto de un universo de bienes
este mismo paso Pareto nos está revelando escasos en el que el dominio político consiste
que los puntos de equilibrio determinables de en ocultar, por medio de racionalizaciones,
este modo son infinitos. En estos infinitos mitos e ideologías, el hecho mismo de que
puntos está el límite de lo que la ciencia nos unos dominan y otros son dominados. Así,
puede decir. toda dinámica social consiste necesariamente
La consideración de los equilibrios en una violación constante, aunque
racionales –en el sentido de universalizables– disimulada, del máximo de ofelimidad para una
corresponde a la economía, dado que ésta colectividad.
considera a la acción en su aspecto racional- El rol de la sociología es observar los
instrumental. “Cuando la colectividad está en criterios –que como hemos afirmado, en la
un punto Q, del que puede alejarse práctica se encuentran en forma de ideologías,
beneficiando a todos los individuos, procurando teorías legitimantes, mitos o simples
a todos mayor disfrute, es manifiesto que, bajo argumentaciones políticas– que se utilizan para
el aspecto económico, conviene no detenerse componer las funciones de utilidad social, los
en tal punto, sino seguir alejándose de él hasta máximos de utilidad de una colectividad. “...el
que se beneficien todos. Cuando se llega a un poder público debe necesariamente comparar
punto P donde esto ya no es posible, es –no es preciso investigar ahora con qué
preciso, para detenerse o para proseguir, recurrir criterios– las diversas utilidades” (Pareto, 1988,
a otras consideraciones ajenas a la Economía; §2131).
es decir, es preciso decidir, mediante El comparar, el establecer coeficientes
consideraciones de utilidad social, éticas u (imaginarios) que permitan homogeneizar y
otras cualesquiera, a qué individuos es establecer así funciones de utilidad social es
conveniente sacrificar beneficiando a los otros. siempre un acto arbitrario y parcial, pero ello
Bajo el aspecto exclusivamente económico, no depende del cinismo manipulador de una
una vez llegada la colectividad a un punto P, élite que sólo pretende el poder, la opresión o
conviene que se detenga” (Pareto, 1988, el dominio. Se trata de un hecho inherente a la
§2129, las negritas son mías). constitución y existencia de la sociedad misma
La economía marca así el límite del dada la heteronomía y heterogeneidad de sus
conocimiento y determinabilidad racional de los componentes8.
óptimos colectivos, pero ya hemos visto que Los principios de utilidad social no pueden
el límite es una curva de puntos infinitos. La ser racionalmente determinados como ya lo
función de utilidad social en que debe hemos visto. Pero ello no quita que,
descansar un orden concreto no es frecuentemente, se apele a la racionalidad, o
racionalmente demostrable, el equilibrio mejor dicho a una pseudoracionalidad, para
concreto será siempre fruto de una decisión y legitimarlos.
este ámbito pertenece a la política que, por “Las clases gobernantes responden a
definición, carece de una fundamentación menudo confundiendo un problema de máximo
racional. de la colectividad con el problema de máximo
Las funciones de utilidad social parten para la colectividad. Procuran también llevar
siempre de un criterio político arbitrario. En esta el problema a la búsqueda de un máximo de

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utilidad individual, intentando hacer creer a las de ignorancia, posición originaria, etc., no
clases gobernadas que hay una utilidad indirecta serían más que la forma de intentar dar un
que, si se la tiene en debida cuenta, cambia en “barniz lógico” a una sensibilidad igualitarista10 ;
ventajas el sacrificio que a estas clases se mientras en Nozick, conceptos como el justo
les pide. Lo cual puede efectivamente suceder título y la teoría de la formación del estado
algunas veces, pero no sucede siempre, y son como proceso evolutivo de mano invisible de
muchos los casos en que, incluso teniendo en las asociaciones de protección, no
cuenta las utilidades indirectas, resulta no ya responderían a otra cosa que a sentimientos
una ventaja, sino más bien un sacrificio para meritocráticos.
las clases gobernadas. En realidad, sólo las A los ojos de Pareto, todas estas
acciones no-lógicas pueden hacer en estos argumentaciones teóricas implican, implícita
casos que las clases gobernadas, olvidando o explícitamente, la construcción de
el máximo de utilidad individual, se acerquen coeficientes para hacer homogéneas las
al máximo de utilidad de la colectividad, o bien utilidades heterogéneas de las diversas clases
solamente de la clase gobernante; cosa que, sociales. “El admirador del “superhombre”
muy frecuentemente, es intuido por ésta” asignará un coeficiente casi igual a cero a la
(Pareto, 1988, §2134). utilidad de las clases inferiores y obtendrá un
El hecho de la no-logicidad en que se punto de equilibrio que se acerca mucho al
sustenta la acción social, su carácter adecuado primer estado [una sociedad con alta
a sentimientos, a sensibilidades heterogéneas, desigualdad distributiva]. El amante de la
a normas, a valores, implica una esencial igualdad asignará un coeficiente elevado a la
heterogeneidad e irreductibilidad en el modo utilidad de las clases inferiores, y obtendrá un
de ponderar las utilidades individuales y su punto de equilibrio que se acerca mucho al
traducción en criterios para los ordenamientos segundo estado. No tenemos otro criterio que
sociales. el sentimiento para elegir entre éste y aquél”
(Pareto, 1988, §2135).
Una lección de escepticismo La lección del Pareto sociólogo parece así
amarga, radical, escéptica, cuando menos
Si observamos el conjunto del debate desagradable ya que nos presenta el problema
contemporáneo, al que hemos hecho referencia ético como irreductible, como un problema de
más arriba, desde la perspectiva paretiana, sentimientos, como una decisión en el sentido
detrás de los diferentes argumentos en favor de Carl Schmitt. No sorprende entonces que
de uno u otro criterio distributivo o de justicia, entre los que conocen su obra tardía11 se
no hay más que sensibilidades o percepciones despierten las más encendidas pasiones de
relativas diferentes9. adhesión12 y rechazo. A sus ojos, el óptimo
Si tomamos como ejemplo la discusión entre marca el umbral hasta el cual la ciencia puede
Rawls y Nozick acerca del modo de ponderar predicar acerca de cuestiones de equidad; a
socialmente la desigualdad natural y adquirida, su vez, Pareto reconoce que dicho punto es
deberíamos decir, siguiendo a Pareto, que cada insuficiente para elucidar un principio de orden
uno de ellos racionaliza en argumentaciones social o político y que, en consecuencia, la
científicamente indemostrables, su propia interacción humana precisa de juicios basados
sensibilidad. Los conceptos rawlsianos de velo en entidades arbitrarias e irreductibles. Las

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críticas actuales del óptimo, en la mayoría de como una prototeoría de la argumentación
sus versiones, coinciden con Pareto en resaltar inscripta en su teoría de la ideología.
sus limitaciones como criterio de justicia, pero Como decíamos, sería razonable entonces
asumen, a diferencia de este, la necesidad de cerrar concluyendo que todo el debate
arriesgar y buscar algún tipo de postulación contemporáneo es, en tanto continuidad del
ética (Sen, 1998) que permita reducir el clásico, una discusión ideológica. En tanto
carácter intuitivo de nuestros juicios normativos ideología no se puede intentar buscar
(Rawls, 1986). proposiciones verdaderas en estos discursos.
Llevado el argumento hasta este punto En estos sólo es posible evaluar su efectividad
parece que no hubiera nada más para decir. respecto de un público determinado13.
Desde la perspectiva del Pareto sociólogo toda Pero tal vez sea conveniente no detenerse
disquisición acerca de los ordenamientos aún. Es cierto que si se pretende encontrar en
sociales desde la ética excede el marco del Pareto una respuesta al problema de los
discurso científico. Los criterios de justicia en principios de justicia no se puede ir más allá
una sociedad suponen siempre la construcción de su decepcionante conclusión de que tal
de un coeficiente que exige, inevitablemente, búsqueda no se puede satisfacer por medios
algún modo de ponderación de las utilidades. racionales. En tal sentido se llega al mismo
Estos coeficientes, sean construidos en base resultado que se podría llegar formulándole la
a pretensiones éticas o no, se encuentran misma pregunta al escepticismo ético de Max
siempre en el ámbito de los sentimientos o de Weber o al decisionismo de Carl Schmitt.
valores y este tipo de entidades apelan Todos estos autores comparten una posición
siempre a juicios indemostrables. Toda relativista respecto del problema ético.
construcción teórica tendiente a una Pero el pensamiento de Vilfredo Pareto
demostración racional de un principio ético no reviste una peculiaridad distintiva respecto de
es más que una argumentación política. La estos otros dos pensadores. Como hemos
pretensión de verdad que se esconde tras estas visto, si se lo considera genéticamente, se
racionalizaciones apela a ciertos instrumentos constata que Pareto sí partió de una pretensión
discursivos propios y funcionales a la persuación. de fundamentar el orden social en términos
No es casual que en su análisis de la científico-racionales. Hemos visto que en sus
derivaciones Pareto utilice como ejemplos al escritos económicos previos al pesimismo de
utilitarismo clásico, a las teorías del contrato su etapa madura, Pareto cree en la posibilidad
social y al formalismo ético de Kant. En todas de resolver el problema del ordenamiento social
estas visiones Pareto encuentra ilustraciones de –incluyendo por supuesto su dimensión ética–
una lógica del sentimiento cuyos mecanismos prescindiendo del problema de los valores o
difieren, a sus ojos, del discurso lógico de la caída en el subjetivismo.
experimental. La reificación de conceptos como
naturaleza en las teorías contractuales, la ¿Liberalismo o pesimismo antropológico?
utilización de conceptos tendientes al sentimiento
como felicidad en el utilitarismo, los argumentos Hemos hablado de su particular defensa del
de autoridad, las ficciones, las pruebas liberalismo económico. La misma fue
verbales, etc., constituyen sólo ejemplos de lo considerada peculiar debido a su presuposición
que Bobbio y Perelman consideran en Pareto concerniente a la heterogeneidad intrínseca de

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los componentes de toda sociedad. El la optimalidad de la eficiencia a partir de una
enunciado de la heterogeneidad proviene distribución dada, es producto del carácter
explícitamente de sus trabajos empíricos indeterminado de los puntos de eficiencia para
acerca de las curvas históricas de la un colectivo dado. Recordemos que
distribución de los réditos. Parece poco gráficamente la eficiencia u optimalidad se
ortodoxo respecto del liberalismo clásico el representa como una curva conteniendo
derivar una justificación normativa de una infinitos puntos posibles. El reconocimiento de
proposición de orden fáctico. Tal trasposición dicha indeterminación provoca que el criterio
del plano del ser al del deber ser sería de eficiencia sólo pueda configurar una
catalogada por la mayoría de los pensadores condición necesaria, pero no puede él constituir
liberales como una clásica falacia naturalista. el principio de justicia en sí.
Sin embargo, si se compara la estructura En el Pareto liberista esta situación queda
silogística del argumento con algunas de las resuelta en tanto el enunciado 1 fija
formulaciones liberales contemporáneas, en normativamente la distribución inicial. ¿Pero
particular con el radicalismo libertario de no se trataba, como habíamos observado, de
Nozick, se puede observar que se trata de una normativización ilegítima de una
razonamientos casi equivalentes. proposición fáctica? Retomaremos esta
Recordemos brevemente como razonaba pregunta un poco más adelante.
Pareto: Para las justificaciones liberales (enten-
1 - La desigualdad (distributiva) es inherente demos por liberal en este punto a aquellas que
o consustancial a toda sociedad, realizan una defensa de la sociedad de
2 - La libre alocación de factores (el libre mercado), el problema ético queda –dada la
mercado) determina el límite de eficiencia indeterminación distributiva del principio de
(optimalidad) en una sociedad, y concluye, eficiencia– desplazado a una justificación de
3 - Las utilidades percibidas por cada uno de las distribuciones iniciales. En la medida que
los miembros de una sociedad (incluso estas justificaciones sean encontradas, toda
los menos favorecidos) no puede ser distribución secuencial ulterior será justa en
mayor (en tanto y en cuanto no se perju- tanto respete el criterio de optimlidad o
dique a ningún otro) que bajo una situa- eficiencia. Esta característica es claramente
ción de libre mercado. detectable en Nozick cuando éste afirma que al
Observemos a continuación que lo que se momento de resolver problemas de justicia, la
denomina el “Teorema fundamental de la teoría de la utilidad marginal (eficiencia)
economía del bienestar” responde al segundo armoniza fundamentalmente con una teoría de
argumento de Pareto: “Este teorema demuestra la intitulación o justo título (entitlement theory)
que bajo ciertas condiciones...todo estado (Nozick, 1974, 175). En la afirmación de esta
social óptimo en el sentido de Pareto es un complementariedad solidaria entre ambas
equilibrio perfectamente competitivo con teorías o principios, el autor de Anarquía Estado
respecto a algún conjunto de precios (y para y Utopía presupone dos razonamientos. En
alguna distribución inicial de las dotaciones de primer lugar, que el criterio de eficiencia es
las personas)” (Sen, 1998, 52)14. compatible e instrumental a un principio de
La restricción incluida en el paréntesis, es justicia libertario dado que configura un umbral
decir, el hecho de que sólo se pueda considerar para medir las restricciones interindividuales

44
de los derechos. En segundo lugar, que estos productividad social, sino también una situación
derechos sólo pueden ser considerados tendiente a un respeto por las utilidades
históricamente, esto es, que los derechos subjetivas15. Para utilizar sus propios términos,
deben ser evaluados de acuerdo a la sus sentimientos son tan meritocráticos como
legitimidad vinculada a su proceso de los de Nozick; si éste los ha derivado en
adquisición y transferencia (recordemos que términos de un postulado del derecho natural,
Nozick deriva su teoría del justo título de la aquél –debido a sus posiciones metodológicas–
teoría lockeana de la apropiación y derecho los derivó en términos de una teoría con
de propiedad). pretensión de regularidad empírica. Vista de
En el lockeanismo de la teoría de los este modo, la proposición fáctica de la
derechos de Nozick existe un fuerte y explícito desigualdad en Pareto cumple el mismo rol
acento meritocrático (Nozick, 1974,197-9). Las normativo de justificación de una distribución
capacidades y dones naturales son considerados inicial. Tenemos entonces una estructura
como cualidad y parte constitutiva de la persona argumental análoga: una distribución inicial
(Nozick, 1974, 210) y la idea de derechos está normativamente justificada (justo título en
fuertemente asociada, en su proceso Nozick, desigualdad natural en Pareto) implicará
adquisitivo, a las ideas de trabajo, esfuerzo y secuencialmente distribuciones justas en tanto
voluntad (Nozick, 1974, 210). Todo acto de se observen ciertas restricciones (principio de
adquisición o libre transferencia de derechos, eficiencia u optimalidad).
en tanto no viole el principio de eficiencia (o El Pareto sociólogo asume con amargura
derechos adquiridos ajenos), puede ser que sus defensas juveniles del liberalismo
considerado justo y suficiente como criterio contienen un componente arbitrario y, como
para las alocaciones colectivas. Es más, todo tal, injustificable. La justificación de una
arreglo social o institucional ulterior no sólo sociedad ordenada bajo el libre mercado
será superfluo sino que pondrá en peligro los también supone un coeficiente de
principios de justicia libertarios. ponderación de utilidades, es decir, un criterio
Volvamos ahora a la pregunta acerca del de máximo de utilidad DE una colectividad,
postulado paretiano de la heterogeneidad de ya que si bien está basada en una idea de
los individuos. Si se procede a poner un máximo de utilidad PARA una colectividad
paréntesis en la falacia naturalista mencionada, (optimalidad) supone una justificación arbitraria
atribuyéndola al prejuicio empirista del joven de una distribución anterior originada en la
Pareto, se puede releer el planteamiento heterogeneidad de las capacidades de los
liberista del pensador italiano en una clave muy individuos. Pareto termina por reconocer que
similar a la visión libertaria de Nozick. Su ponderar positivamente las aptitudes y dones
radicalismo antimetafísico nunca le habría innatos o adquiridos (sea por medio de afirmar
permitido adscribir a un postulado iusnaturalista la desigualdad natural o por invocación del
o a una idea de derechos. Pero Pareto justo título) en una situación de desigualdad
comparte con Nozick –y con buena parte de social es tan arbitrario como el criterio opuesto
las teorías del libre mercado– la idea de que de considerar que estas cualidades
sólo un libre despliegue de las capacidades, individuales no deben influir en las
sean estas naturales o adquiridas socialmente, distribuciones de bienes de una sociedad.
permite no sólo alcanzar el límite de la La idea que encontramos implícita en

45
Pareto es que los coeficientes de ponderación, estructura básica es injusta [lease: cuando
además de irreductibles más allá del subsisten capacidades o dones, innatos o
sentimiento, se construyen en base a peticiones adquiridos, moralmente contingentes], los
de principio situadas al nivel de la concepción principios de justicia autorizarán cambios que
del individuo. En consecuencia puede resultar pueden conducir a una disminución de las
interesante concluir con la observación de cómo expectativas de los mejor situados; en
las diferencias entre los criterios de justicia en consecuencia la concepción democrática no
la polémica entre Rawls y Nozick son es consistente con el principio de eficiencia
reductibles al modo en el cual se ponderan los si este principio significa que sólo los
dones naturales en tanto atributos individuales. cambios que mejoran las expectativas de
Ya hemos expuesto la posición y todos son los permitidos. La justicia es
ponderación positiva de las aptitudes y como prioritaria frente a la eficiencia y requiere
ello conduce a su teoría del justo título algunos cambios que no son eficientes en
complementado por el criterio de eficiencia este sentido. La consistencia se obtiene sólo
como elementos de justicia en Nozick. Dada en el sentido de que un sistema perfectamente
esta consideración de los dones y capacidades, justo es también eficiente” (Rawls, 1986, 79-
el autor argumenta que todo criterio de justicia 80,). En este párrafo queda claramente
tendiente a un resultado distributivo final viola, evidenciado que la descalificación de las
en tanto supone redistribuciones independientes aptitudes son la base del coeficiente que le
de los derechos anteriormente adquiridos, los permite a Rawls realizar comparaciones
principios libertarios (Nozick, 1974, 193). interpersonales de utilidad consideradas por
Opuestamente, en Rawls los dones y él moralmente justificadas.
capacidades (sean innatos o socialmente Podemos entender –a partir de lo expuesto–
adquiridos) son considerados y calificados por qué ambos se acusan mútuamente de realizar
como contingentes (Rawls usa el término de peticiones de principio moralmente arbitrarias
una lotería), en consecuencia ellos deben ser (Nozick, 1974, 189; Rawls, 1986, 72-3). No es la
dejados de lado en la posición originaria. Este intención de este trabajo tomar partido o continuar
razonamiento implica que la contingencia de la polémica. Si bien Pareto –como hemos
su distribución supone una arbitrariedad en el intentado probar– apoyaría sentimentalmente a
plano moral (Rawls, 1986, 72) y, en Nozick, no admitiría razón en ninguno. Ambos
consecuencia, a la hora de deliberar sobre los serían sólo legítimos representantes de humores
principios de justicia, estas contingencias o sentimientos diversos tan legítimos el uno
deben ser cubiertas por el velo de ignorancia. como el otro. La sociología de Pareto no es en
Estos presupuestos explican también el rapport realidad otra cosa que un intento de encontrar la
ambíguo de los dos principios de justicia (igual relación entre ciertos sentimientos socialmente
libertad y principio de la diferencia) elegidos existentes, las peticiones de principio (Pareto
en la posición originaria. Previo haber críticado utilizaría aquí el término de residuos) y las formas
el óptimo de Pareto como extraño a un criterio como estas se despliegan y ocultan detrás de
de justicia pero concediendo luego que –previo racionalizaciones o argumentaciones. El lector
respeto de los principios de justicia– la juzgará si esta mirada escéptica aporta algo al
búsqueda de situaciones eficientes es problema de encontrar fundamentos racionales
deseable, el autor concluye que “...cuando la al orden social y político.

46
Notas casi supérfluo aclarar que nos encontramos aquí en las
antípodas de las explicaciones utilitaristas y
1
El presente trabajo es producto de una pregunta contractualistas del orden social.
transformada en sugerencia por parte de un estimado
8
amigo y colega. Dentro de la literatura de la Economía del Bienestar, el
único que se aproxima a este tipo de conclusión es
2
Digo explícita porque en los desarrollos de los que hoy Arrow (1951), quien, en su conocido teorema de la
se conocen como marginalistas, de los cuales Pareto imposibilidad, concluye que toda función de utilidad social
fue deudor y copartícipe, la redefinición estaba implícita. en la que se cumplen los postulados de racionalidad
Para la relación entre Pareto y otros economistas como (consistencia, completitud, transitividad) incurre
Marshall, Menger, Jevons, Walras, Edgeworth y Fischer necesariamente en un principio dictatorial, manipulativo
vease Schumpeter (1965, caps. 5 y 7). o viola la condición de optimidad.

9
3
Valga la aclaración que por “justicia” se entiende, en Esta constatación no es igual a decir que detrás de
este contexto, una acepción restringida a problemas cada uno se ocultan intereses instrumentalizados
distributivos. No obstante, en parte de la discusión -por concientemente en forma ideológico-manipulativa.
ejemplo en el caso de Rawls- está en juego no sólo la
10
distribución de bienes “materiales” sino también bienes En sus escritos posteriores Rawls, sin llegar al
“no-materiales”como los derechos y libertades. radicalismo escéptico de Pareto por supuesto, relativiza
un tanto su teoría de la justicia afirmando que se trata
4
Un panorama de la evolución intelectual del pensador de una argumentación política y no filosófica.
puede ser obtenido a partir de la biografía de Bousquet
11
(1928). No he encontrado en la literatura en cuestión
referencias a la obra sociológica de Pareto. Todas las
5
Estos escritos deben entenderse también en su referencias son al Manual de Economía Política. Se
ubicación polémica frente al marxismo y demás teorías puede suponer que el desinterés se debió a que la
socialistas. Pareto se empeña en demostrar que el primera recepción referida a los problemas de la utilidad
concepto de sociedad sin clases y su implícita idea de recayó exclusivamente en manos de económistas. El
igualdad no revisten más que un carácter metafísico y Tratado de Sociología General apareció editado en
propagandístico. inglés en 1938. Durante la década del ‘30 la recepción
de su sociología fue muy importante en el mundo
6
Si bien no se puede negar que las consecuencias anglosajón, pero siempre restringida a sociólogos y
políticas de sus reflexiones teóricas son de carácter filósofos.
conservador, es absurda la afirmación corriente según
la cual Pareto fué un mentor del fascismo. Ciertamente 12
Me refiero aquí a una adhesión teórica, no a la
no puede ser calificado de demócrata, pero a lo largo de utilización ideológica de la que ha sido víctima, como
su vida jamás abandonó la defensa de las libertades tantos otros teóricos sociales, durante el período del
civiles. fascismo.

7 13
Este cambio radical en la consideración de la acción Es interesante aclarar, sin embargo, que a diferencia
como principio del orden social en Pareto fue de la Ideologiekritik positivista, Pareto rechaza la idea
brillantemente reconocido por Parsons (1968). Sería de una sustitución de los “prejuicios” ideológicos

47
existentes en la sociedad por una “Aufklärung” Nozick, Robert (1974); Anarchy State and
(ilustración) científica. El porqué de este rechazo se Utopia, Basil Blackwell, Oxford
debe encontrar en consonancia con su visión
sociológica arriba expuesta. Pareto, Vilfredo (1927); Manuel d’Économie
Politique, Giard, Paris.
14
El autor de quien se ha tomado la cita recalca
justamente que este resultado de la economía del Pareto, Vilfredo (1965); Écrits sur la courbe
bienestar es éticamente “bastante modesto” dado que de la répartition de la richesse, Droz, Ginebra.
al faltar una valoración se está evadiendo del problema
ético de las distribuciones. Pareto, Vilfredo (1988); Trattato di Sociologia
Generale, UTET, Torino. (4 tomos)
15
Sería posible argumentar –aunque no lo haremos en
este trabajo– que la teoría de la circulación de las élites Parsons, Talcott (1968); The Structure of
es una extensión de la misma consideración de las Social Action, The Free Press, New York.
capacidades humanas aplicada a la idea del equilibrio
social. De todos modos no pretendemos insinuar con Rawls, John (1986); A Theory of Justice,
esto que dicha teoría sea de espíritu liberal. Oxford University Press, Oxford.

Schumpeter, Joseph (1965); Geschichte der


Bibliografía ökonomischen Analyse [título original: History
of Economic Analysis], Vandenhoeck &
Allais, Maurice (1968); “Vilfredo Pareto: Ruprecht, Göttingen.
Contributions to Economics” , en: International
Enyclopaedia of Social Sciences, The Sen, Amartya K. (1970); Collective Choice and
Macmillan Company, New York, Vol. 11. Social Welfare, Holden-Day, San Francisco.

Arrow, Kenneth J. (1951); Social Choice and Sen, Amartya K. (1998); Sobre Ética y
Individual Values, John Wiley & Sons, New York. Economía, Alianza, Madrid.

Bousquet, George H. (1928); Vilfredo Pareto,


sa vie et son oeuvre, Payot, Paris.

Buchanan, James (1962); “The Relevance of


Pareto Optimality”, en: The Journal of Conflict
Resolution, Ann Arbor, Vol. 6.

Cirillo, Renato (1973); “Pareto and


Contemporary Welfare Economics”, en:
Cahiers Vilfredo Pareto, Nro. 30, Droz, Ginebra.

Freund, Julien (1974); Pareto. La théorie de


l’équilibre, Seghers, Paris.

48

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