Universidad de la Costa
Barranquilla
MARICELA BOLIVAR, LAURA CANTILLO, MARIANA COBA, VALENTINA GONZALEZ
VIOLENCIA EN CONTRA DE LA MUJER COLOMBIANA
DURANTE LA PANDEMIA
VIOLENCE AGAINST COLOMBIAN WOMEN DURING THE PANDEMIC
Resumen
El presente texto busca abordar el tema
de la violencia en contra de la mujer
durante el tiempo de pandemia,
planteando los sucesos como fuente de
una problemática social la cual recae
bajo los mismos paradigmas y las
mismas características de las víctimas y
lo victimarios, teniendo como enfoque el
aumento de los casos debido a una
condición mundial que se presentó
debido a las medidas de prevención del
contagio del covid-19.
Esta problemática genera un gran
impacto negativo en la vida de las
victimas las cuales se busca analizar a
través de su entorno los diferentes
problemas o trastornos que suelen
padecer, también se busca abalizar las
normas vigentes y mecanismos activos
para la prevención, control y sanción.
Palabras claves
Feminicidio, salud mental, violencia
doméstica, conflicto, pandemia, maltrato
físico, crisis social.
Abstract
This text seeks to address the issue of
violence against women during the time
of the pandemic, raising the events as a
source of a social problem which falls
under the same paradigms and the same
characteristics of the victims and the
perpetrators, having as Focus on the
increase in cases due to a global
condition that arose due to the measures
to prevent the spread of covid-19.
This problem generates a great negative
impact on the lives of the victims, which
seeks to analyze through their
environment the different problems or
disorders that they usually suffer, it also
seeks to endorse the current regulations
and active mechanisms for prevention,
control and sanction.
Keywords
Femicide, mental health, domestic
violence, conflict, pandemic, physical
abuse, social crisis
Facultad de derecho
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Barranquilla
INTRODUCCION
La violencia contra la mujer es una
violación a los derechos humanos y un
asunto prioritario de salud pública y
protección social, ya que genera fractura
del tejido social y contribuye al deterioro
crónico de la salud integral de las
víctimas a lo largo de sus vidas, está
violencia se puede presentar de
diferentes formas: física, sexual,
psicológica, económica, entre muchas
otras.
Teniendo en cuenta lo anterior,
Colombia presenta un enfoque de
derechos como una guía de acción ética,
política y jurídica que busca proteger y
garantizar el goce efectivo de los
derechos humanos, los derechos
sexuales y los derechos reproductivos de
las mujeres víctimas de violencia. El
Ministerio de Salud y Protección Social
enmarca la atención integral a las
víctimas de violencias de género en
acciones que garanticen respuestas
institucionales oportunas y dignificantes,
que contribuyan a la recuperación de la
integridad, dignidad y autonomía de las
víctimas, atendiendo sus necesidades de
acuerdo con sus características
particulares de tal manera que se reduzca
el impacto y las consecuencias físicas,
mentales.
Por consiguiente, este trabajo va dirigido
a responder el siguiente interrogante:
¿Qué recursos, información y atención
especializada brinda el estado a las
mujeres víctimas de violencia? Teniendo
presente que en Colombia las cifras de
violencia contra la mujer ascienden cada
vez, y que está problemática afecta en
general a la toda la sociedad la
investigación va dirigida al
departamento del Atlántico, en
específico la ciudad de Barranquilla, en
los barrios que ocupan el suroccidente de
la ciudad debido a que presentan la
mayor cifra de problemas sociales
debido a su condición socioeconómica,
este enfoque va dirigido a los últimos dos
años 2020-2022 analizar las cifras y
casos de violencia contra mujer e
inspeccionar las características
predominante de los victimarios y la
atención que brinda el estado para estos
caso.
Para el análisis de estos recursos la
investigación, el método que se
implementará es el descriptivo, para el
análisis de los datos implementados, por
lo tanto, se debe tener presente que está
problemática social conlleva un enfoque
socio jurídico, el cual se busca generar y
promover campañas de prevención y
protección para las víctimas de violencia
contra la mujer.
DISCUSIÒN
La violencia en contra de las mujeres
colombianas es una problemática social
la cual se viene desencadenando a través
de la historia de forma silenciosa y casi
que secreta, debido a que anteriormente
eran temas que no se trataban por los
prejuicios de la sociedad y que para ese
momento de la historia la sociedad era
situada desde una perspectiva machista y
controladora. En ese momento la historia
da un giro inesperado cuando se suma a
esta problemática el conflicto armado, y
es ahí cuando se empieza a mirar estas
problemáticas de una forma crítica e
internacional, debido a que el conflicto
trajo como consecuencias masivas
violaciones en contra de las mujeres;
acceso carnal, violencia física, secuestro,
entre otros actos. “el conflicto armado
Fue el mayor desencadenante de la
violencia de género, instrumentalizando
a las mujeres como medio de satisfacción
dentro de los campos de los grupos al
margen de la ley” Álvarez, R. &
Naranjo, K. (2010). Violencia contra
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las mujeres: Historias no contadas226.
Recuperado de:
Este tipo de visualizaciones
internacionales han permitido a los
gobiernos colombianos darse cuenta de
las problemática sociales a las cuales se
enfrentan. Debido a esto se han creado
normativas como la sentencia C-410 de
1994, Es una de las más antiguas en
describir la violencia contra la mujer
como una problemática real, en la cual
Se analizó la discriminación histórica de
la que ha sido objeto la mujer, las
consecuencias y causas entre ellas
mencionado el conflicto armado en
Colombia y los mecanismos que se
tomaron para contrarrestar la violencia y
proteger a las mujeres.
Mientras el gobierno colombiano es
vigilado desde el exterior por entes
internacionales, busca en su interior
combatir la lucha y cerrar las brechas de
violencia en contra de la mujer, es
entonces cuando decide priorizar las
comisarías de familia definiéndolas
como entes de prevención, control y
sanción para estos casos de violencia en
contra de la mujeres, el cual se llevó a
cabo a través de la ley 248 de 1995 la
cual tenía como finalidad empoderar a la
mujer dándole los mismos derechos y
libertades que tenían los hombres, entre
los cuales se encuentran: “Artículo 6. El
derecho de toda mujer a una vida libre de
violencia incluye, entre otro; El derecho
de la mujer a ser libre de toda forma de
discriminación, y El derecho de la mujer
a ser valorada y educada libre de
patrones estereotipados de
comportamiento y prácticas sociales y
culturales basadas en conceptos de
inferioridad o subordinación”, tal como
lo define la convención sobre la
eliminación de todas las formas de
discriminación contra la mujer
“discriminación… toda distinción,
exclusión o restricción basada en el sexo
que tenga por objeto o resultado
menoscabar o anular el reconocimiento,
goce o ejercicio por la mujer,
independientemente de su estado civil,
sobre la base de la igualdad del hombre
y la mujer, de los derechos humanos y las
libertades fundamentales en las esferas
política, económica, social, cultural y
civil o en cualquier otra esfera.” angulo,
c. & luque, j. (2019). panorama
internacional de los derechos
humanos de la mujer: una mirada
desde Colombia.
Uno de los mayores retos que ha tenido
que afrontar el gobierno nacional
colombiano ha sido el covid-19 no solo
en el área de la salud, denominado como
pandemia a nivel mundial, sino también
a nivel social, todas las problemáticas
que se desencadenaron a raíz de los
mecanismos que se implementaron para
contrarrestar el virus. Uno de los campos
más afectados fue la lucha en contra de
violencia hacia las mujeres. “Colombia y
el mundo entero se encuentran en la
imperiosa necesidad de tomar medidas
de urgencia para contrarrestar los graves
efectos de la emergencia ocasionada por
la pandemia del virus que causa el
COVID-19. Sus efectos, sin duda,
permean la vigencia de los derechos
humanos de las personas víctimas de
desplazamiento forzado por causa del
conflicto armado interno.
mediante el Decreto 417, declaró el
«Estado de emergencia económica,
social y ecológica derivado de la
pandemia por Covid-19». Por ello, en
cabeza del Departamento Administrativo
para la Prosperidad Social y de la Unidad
para la Atención y Reparación Integral a
las Víctimas (UARIV), anunció las
medidas que adoptaría para garantizar
los derechos fundamentales de la
población víctima de violencia durante el
periodo de aislamiento obligatorio. Una
de estas acciones consistía en brindar
ayudas humanitarias a través de estas
medidas podemos resaltar la ley 2215 de
2022 en la que da una extensión a los
mecanismos de protección para las
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mujeres que están siendo víctimas de
violencia, estos mencionan los albergues
como lugares de acogida temporales y la
Sentencia C-179 de 2020 en la cual
revelan las cifras de los casos de
violencia como consecuencia del
confinamiento las cuales fueron
publicadas por el instituto nacional de
medicina legal y ciencias forenses en el
boletín de enero; en Colombia se
presentaron 5.137 casos de violencia
intrafamiliar de los cuales 3.376
(65,71%) fueron en contra de la mujer
quienes han sido las principales víctimas.
Por lo tanto, con esta sentencia se obligó
a las comisarías de familia a prestar
servicios ininterrumpido,
implementando protocolos para
contrarrestar el contagio del Covid 19,
como lo fueron las líneas de atención
purpura en Bogotá, la línea de atención
virtual para denunciar acosos entre otras
medidas.
CONCLUSIÓN
Los mecanismos del gobierno nacional,
no solo se deben enfocar en prevenir y
sancionar sino también en garantizar el
apoyo integral para sus víctimas. Porque
es una problemática que implica a toda
la sociedad, por consiguiente, a la
administración pública para la
responsabilidad social, que todos
tenemos.
La violencia física es una violación que
no tolera los derechos básicos de una
mujer, que es un ataque al derecho a la
vida, a la seguridad y libertad, en
resumen, contra la dignidad. Sin duda,
las raíces del problema de la violencia de
género se encuentran en los patrones
culturales que asignan a mujeres y
hombres roles diferentes en la familia, la
división de deberes dentro de la misma y
el sistema de trato tradicional hacia la
mujer como una persona de menor
estatus social, posición, clase y estilo de
vida.
A pesar de los avances legislativos en el
reconocimiento de los derechos de las
mujeres en los últimos años, la
discriminación y la violencia contra ellas
continúan, poniendo en riesgo su
integridad y su vida. Por lo tanto, es
imperativo armonizar la legislación
nacional con los más altos estándares y
asegurar su correcta implementación.
Persisten serios vacíos en el diseño e
implementación de políticas públicas
para garantizar la minimización de
violencia de las mujeres colombianas.
Las instituciones ejecutivas y judiciales
que se ocupan de las mujeres deben estar
comprometidas con procedimientos
adecuados, efectivos e imparciales y
estar dispuestas y ser capaces de
brindarles protección. Asimismo, deben
existir los mecanismos suficientes de
transparencia y rendición de cuentas para
evaluar y dar seguimiento a las medidas
adoptadas.
La violencia estructural contra las
mujeres se ha agudizado, negándoles el
acceso a la justicia y protección judicial,
sin darles garantías de que la violencia
contra ellas dejará de volver a ocurrir y
el derecho a la reparación de daños desde
una perspectiva de derechos humanos y
género, para ellos y sus familias. Deben
existir procedimientos para evitar la
aplicación discrecional de la justicia por
parte de los encargados de hacer cumplir
la ley y quienes buscan justicia,
fortalecer los procedimientos de
investigación efectivos y prevenir la
impunidad. Los delitos y violaciones de
derechos humanos contra las mujeres
deben ser investigados desde la
perspectiva de género, niñez, diversidad
sexual y derechos humanos.
No hay información para enfrentar cada vez
mejor la realidad de vida de las mujeres,
especialmente aquellas en situaciones más
vulnerables. Los registros de datos
nacionales y departamentales no cuentan con
información desagregada por categorías
como sexo, edad y nivel socioeconómico
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para comprender mejor la violencia contra

las niñas, adolescentes y mujeres; si son
indígenas, sexualmente diversas o en
condición de desplazadas. Deben tener
acceso a diagnósticos precisos,
información asequible y completa a nivel
sectorial, así como de municipios y
diferentes organismos que trabajan en el
bienestar de la mujer.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
ARIAS LONDOÑO, M. (1990). Cinco
formas de violencia contra la mujer.
Colombia: Editorial Colombia nueva Ltda.
Asamblea General (2006). Estudio a fondo
sobre todas las formas de violencia contra la
mujer: Informe del Secretario General, 2006.
A/61/122/Add. 1. 6 de julio.
Asamblea Parlamentaria del Consejo de
Europa. (2002). Recommendation 1582 on
Domestic Violence against Women.
https://repositorio.defensoria.gov.co/bits
tream/handle/20.500.13061/106/PDF_6
.pdf?sequence=1&isAllowed=y
http://www.scielo.org.co/scielo.php?
script=sci_arttext&pid=S0121-
86972008000100005

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