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Universidad Autónoma Metropolitana

Tema: Anestesia

Grupo: BE02O. Trimestre: 22-O.

Modulo: Anatomía y fisiología en el


diagnóstico y manejo clínico.

Alumno: Frida Guadalupe Buitrón Román.

Dra: Denisse Duran


ANESTESIA
¿Qué es la anestesia?
La anestesia es un tratamiento médico que evita que los pacientes sientan dolor durante
procedimientos como una cirugía, ciertas pruebas de detección y diagnóstico, extracción de
muestras de tejido (por ejemplo, biopsias de la piel) y tratamientos dentales.

¿Qué es la anestesia local?


Los anestésicos locales son fármacos que producen un bloqueo reversible de la conducción
del impulso nervioso. Estos inhiben la función sensitiva y motora de las fibras nerviosas,
además de suprimir la sensibilidad dolorosa transmitida por fibras aferentes vegetativas, sin
producir alteración de la conciencia. Al cesar su efecto, la recuperación en la función
nerviosa es completa.
Para la anestesia local se requieren fármacos cuyas características sean adecuadas. Son
propiedades ideales de los anestésicos locales las siguientes:
 Potencia suficiente para producir anestesia
 Selectividad sobre el tejido nervioso
 Bajo grado de toxicidad sistémica
 Reversibilidad del efecto
 Periodo de latencia corto, acción rápida y duración suficiente
 Baja sensibilidad a las variaciones del pH
 Capacidad de combinarse con oros agentes sin reducir sus propiedades
 Tener actividad farmacológica en forma tópica o inyectada
 No deben producir tolerancia ni dependencia
 No deben de ser irritantes para el nervio, ni para los tejidos
 No deben descomponerse durante la esterilización
 No deben provocar reacciones alérgicas
Sin embargo, cabe mencionar que, aunque algunos fármacos cuentan con todas estas
propiedades, no existe un anestésico local ideal que se ajuste a todas las necesidades
clínicas en odontología.

Tipos de anestesia:
Anestésicos tipo éster:
Su uso es muy limitado en la actualidad. En la odontología se ha descontinuado su empleo
parenteral por la gran cantidad de reacciones alérgicas que se reportan, debido a que
durante su metabolismo producen un producto altamente antigénico, como lo es el ácido
paraaminobenzoico. El único anestésico tipo éster que aun se usa en la anestesia bucal es la
benzocaína para administración tópica en gel. A este grupo pertenecen la procaína, la
cloroprocaina y la tetracaína. La procaína se caracteriza por su baja unión a proteínas (6%)
y su baja liposolubilidad, lo que le da una baja potencia y corta acción; además es menos
estable a la luz que los anestésicos tipo amidas. Su metabolismo es plasmático y son
excretados por via renal. Son biotransformados por la pseudocolinesterasa, por lo que en
los pacientes con deficiencia genética de esta enzima deben usarse con precaución.

Anestésicos tipo amida


Los anestésicos tipo amida, como la lidocaína, la mepivacaína, la prilocaína, la bupivacaína
y la articaína, son los utilizados actualmente. Se ha demostrado que estos fármacos tienen
un gran perfil de seguridad, muy baja incidencia de reacciones alérgicas y que tanto su
acción intermedia como su potencia analgésica son adecuadas.
LIDOCAÍNA
Esta indicada para producir anestesia regional o local mediante infiltración o bloqueos
tronculares periféricos (plexos braquiales, trigeminales, intercostales) y centrales. No se le
debe de administrar a pacientes con historial de hipersensibilidad a anestésicos tipo amidas,
pacientes con insuficiencia hepática, enfermedad renal y pacientes con isquemia regional.
En adultos sanos se recomienda una dosis máxima de clorhidrato de lidocaína al 2% con
epinefrina 1:80 000 que no exceda los 7 mg/kg de peso ni los 500 mg por dosis. Se puede
administrar en pacientes diabéticos, depresivos, alérgicos, hipertensos y con hipertiroidismo.

El inicio de acción de la lidocaína es rápido (2 – 3) minutos y su duración es intermedia.


Cuando se utiliza con vasoconstrictor la anestesia pulpar dura de 55 a 90 minutos y en
tejidos blandos de 3 a cuatro horas.

MEPIVACAÍNA
El clorhidrato de mepivacaína es una amina terciaria usada como anestésico local, es
cristalina, soluble en agua y muy resistente a la hidrólisis ácida y alcalina. En solución no
es irritante con los tejidos y, al igual que la lidocaína tiene un período de latencia corto,
pero su duración es más prolongada. Su principal ventaja es que posee un ligero efecto
vasoconstrictor, por lo cual su toxicidad es menor que el de la lidocaína cuando se
administra sin vasoconstrictor.
La dosis dependerá del sitio donde se utilice, de la técnica anestésica y la edad del paciente.
En infiltraciones en pacientes pediátricos, cuando se usa sin vasoconstrictor, se recomienda
que ésta no supere un cartucho (1,8 ml, en concentración al 3%). En adultos la dosis
máxima recomendada de mepivacaína al 3% simple es de 5.3 cartuchos (286 mg). Cuando
se calcula la dosis para niños, es necesario tener en cuenta que no se debe de superar los 6.6
mg/kg de peso.
Indicado en px diabeticos, Enf. CV, asmaticos.

PRILOCAÍNA
Produce una vasodilatación más intensa que la mepivacaína, pero menos que la lidocaína y mucho
menor que la de la procaína. Su latencia en de 3 a 5 minutos y su durabilidad es de 1,9 horas.

 Dosis máxima recomendada. La DMR de la prilocaína es de 8,0mg/kg de peso


corporal para los pacientes adultos, hasta una dosis máxima recomendada de 600mg
 Indicado para diabeticos, epilepticos, cardiopatas.
 No administrar a px con alergias, embarazadas, anemia, enfermedades renales e
hipoxia.

PROPOXICAÍNA

La propoxicaína se combinaba con la procaína en solución para poder acelerar el comienzo


de acción y conseguir una anestesia más profunda y de mayor duración que la obtenida en
exclusiva con la procaína.
No se comercializaba sola, ya que su elevada toxicidad (7-8 veces la de la procaína)
limitaba su utilidad como agente único. Su latencia es de 2 a 3 minutos. Su duración es de
0.4 horas.

ARTICAÍNA

El clorhidrato de articaína con epinefrina es una solución acuosa estéril, que contiene
articaína en una concentración al 4% (40 mg/ml) y un vasoconstrictor como la epinefrina en
concentraciones 1:00 000 o 1:200 000. La articaíana es un tercio mas potente que la
lidocaína. Es considerado como un anestésico de potencia y duración intermedia (60 – 75
minutos de anestesia pulpar), larga duración de anestesia residual en tejidos blandos (3 a 6
horas) y rápida velocidad de inicio. Su toxicidad es equiparable a la de la lidocaína y la
mepivacaína.

BUPIVACAÍNA

El clorhidrato de bupivacaina es una solución estéril, cristalina, apirógena e isótonica que


se encuentra en cartuchos para anestesia dental. Estabiliza la membrana neuronal y
previene el inicio y la transmisión del impulso nervioso de manera reversible. Su velocidad
de absorción depende del sitio donde se inyecte y si se usa simple o con un vasoconstrictor.
Es cuatro veces mas potente que la lidocaína. Su efecto anestésico puede durar hasta más de
6 horas. La dosis máxima de bupivacaína que sin epinefrina es de 2,5 mg/kg y con
epinefrina, de 4 mg/kg. No se debe de administrar en pacientes con historial de
hipersensibilidad a anestésicos tipo amida y pacientes con disfunción hepática o
enfermedad renal.
Mecanismo de acción de la anestesia
El impulso nervioso o potencial de acción se transmite periféricamente hasta generar la
activación e otro canal de Na dependiente de voltaje, cuya apertura perpetuara el cambio de
polaridad a todo lo largo de la fibra nerviosa. Esto permite el avance del impulso de manera
autónoma, generando así la transmisión del impulso nervioso.
Los anestésicos locales actúan impidiendo la propagación del impulso nervioso, al bloquear
los canales de Na dependientes de voltaje, lo que no permite la entrada del ion Na. De esta
manera, evitan que el estimula alcance el umbral suficiente para que se desencadene un
potencial de acción, disminuyendo así la velocidad de despolarización y, por lo tanto, la
velocidad de conducción. Para ello deben atravesar la membrana nerviosa, puesto que su
acción farmacológica fundamental la llevan a cabo mediante la unión al receptor en el canal
de Na, desde el lado citoplasmático de la misma.
El canal de Na es una glicoproteína compuesta por cuatro dominios que contienen una
secuencia de 6 a 8 aminoácidos, los cuales forman una estructura helicoidal alfa que
atraviesa la membrana nerviosa. El sitio al cual se une el anestésico local es la subunidad
alfa, bloqueando de esta manera el canal de Na e impidiendo que este ion ingrese a la célula
nerviosa.
Este sitio de fijación para anestésicos locales, que se ubica en la porción interna de la
región transmembrana del canal, es la forma no ionizada del anestésico, que actúa como
vehículo transportador para atravesar la fase lipídica de la membrana neuronal y alcanzar
así el sitio de unión desde el citoplasma
Una vez que la molécula de anestésico se halla en el interior del canal, la forma ionizada es
la responsable de la interacción con el receptor y, por lo tanto, de la actividad
farmacológica. La fracción ionizada solo puede acceder al sitio de fijación para anestésicos
locales desde el interior de la célula, a través del poro axoplásmico del canal cuando este se
encuentra abierto.
En la medida en que la frecuencia de estimulación se incrementa, la probabilidad de que los
canales de Na estén abiertos, y por tanto expuestos a los anestésicos locales, es mayor,
aumentando con ello la efectividad del fármaco. El bloqueo sobre el receptor se revierte
cuando la membrana se hiperpolariza, debido a que se reduce la inactivación del canal de
Na, lo que permite la entrada de algunos iones de Na y hace que la fase de despolarización
se inicie gradualmente.

Técnicas infiltrativas
La anestesia infiltrativa, también llamada anestesia terminal o periférica, permite el bloqueo
de las terminaciones nerviosas de los nervios sensoriales en una zona específica.
TÉCNICA SUBMUCOSA
Consiste en inyectar entre 0,5 y 0,9 mL de solución anestésica o un cuarto de cartucho por
debajo de la mucosa que se pretende anestesiar, a la altura de los ápices cuando el
procedimiento es dental y entre el epitelio y el conectivo en procedimientos de tejidos
blandos. En la inyección periapical, el bisel de la aguja no debe tocar el hueso, de modo que
se logre anestesiar los tejidos blandos peridentales, el hueso subyacente, el periostio y la
pulpa dental. Se punciona en el fondo del surco vestibular del diente sin buscar contacto
con el hueso adyacente. Se utiliza una aguja de 0,30 x 10 mm o una aguja corta de calibre
delgado. El cuerpo de bomba y la aguja debe tener una angulación de 45 grados con
respecto al eje axial del diente.
Es eficaz para exodoncias de dientes temporales anquilosados, operatoria dental, cirugías
menores de tejidos blandos (frenillectomias, escisión de lesiones patológicas epiteliales o
de tejido conectivo), remoción de espículas óseas o dentales, cirugía de reposición labial y
cirugías gingivales.

TÉCNICA SUPRAPERIÓSTICA
La inyección supraperióstica se emplea para anestesiar el plexo nervioso del diente a tratar
y, por ende, el periostio, el hueso alveolar adyacente y la pulpa dental, En ella la solución
anestésica se debe difundir primero a través del periostio, el hueso cortical y el hueso
medular para alcanzar plexos nerviosos apicales. Se hace una punción en el fondo del surco
vestibular del diente que se anestesiara, llevando la aguja suavemente contra el hueso con el
bisel hacia este. Esto permite que la solución anestésica se difunda a lo largo de la cortical y
la medula ósea. Se recomienda usar una aguja de 0,33 x 10 mm. El cuerpo de la bomba
(jeringa) y la aguja deben tener una angulación de 45 grados con respecto al eje largo axial
del diente que se va a anestesiar. Se debe depositar entre 0,5 y 0,9 mL de solución
anestésica o un cuarto de cartucho, previa aspiración sanguínea en la zona donde se desea
realizar el procedimiento.
Es muy eficaz para las exodoncias de temporales anquilosados y la remoción de la caries
profunda y tratamiento de operatoria dental, pulpotomías y tratamientos de conductos en
dientes vitales, exodoncias simples y quirúrgicas en dientes permanentes maxilares, tallado
o preparación de pilares para prótesis fija en dientes vitales.

TÉCNICA INTRALIGAMENTARIA
Se refiere a la infiltración de la solución anestésica en el espacio del ligamento periodontal.
Generalmente se utiliza como una técnica secundaria, como complemento de una técnica
troncular. La aplicación de anestesia intraligamentaria antes de luxar el diente reduce la
propiocepción de las fibras beta en ligamento periodontal, evitando así que el paciente
perciba la sensación de presión inherente a esta fase de la extracción dental. Por ejemplo,
en los procesos de exodoncias, la aplicación de la anestesia intraligamentaria antes de luxar
el diente reduce la propiecepción de las fibras beta en ligamento periodontal, evitando así
que el paciente perciba la sensación de presión inherente a esta fase de la extracción dental.
La punta de la aguja, con el bisel hacia el septum interproximal, se introduce en el espacio
del margen gingival a expensas de las caras mesial y distal del diente. El bisel de la aguja
debe mirar hacia el hueso interseptal y no hacia la cara del diente, ya que el el trayecto que
sigue la solución es hacia los nervios intraóseos de la lámina cribiforme.Se inyectan 0,2 mL
de solución en cada cara del diente (o lo que corresponda a unas gotas de solución).
Esta técnica se utiliza como inyección primaria en pacientes que no pueden ser anestesiados
con las técnicas usuales, como en caso es el caso de los pacientes hemofílicos. En pulpas
dentales inflamadas, como complemento de un bloqueo troncular mandibular o del nervio
dentario inferior. Como técnica suplementaria, previa a la luxación, en las exodoncias de
dientes permanentes.
TÉCNICA INTRAÓSEA
La técnica intraósea consiste en aplicar entre 0,9 y 1,8 mL de solución anestésica a través
del hueso medular en el espacio interradicular, por distal del diente a tratar. Para lograrlo,
es necesario hacer una perforación del hueso cortical con los aditamentos que para este fin
encontramos en los sistemas o kits de anestesia intraósea o utilizar los equipos electrónicos
disponibles para anestesia osteocentral.

Técnica transcortical:
Con base en lo observado en el examen clínico y radiográfico, se escoge el sitio de
perforación y así se escoge el sitio de perforación y se aborda la cortical con el mandril,
perforándola a través de la banda de encía adherida y luego se introduce una aguja 30G
extracorta (0,30 x 8 mm) en el catéter guía, si se cuenta con él, o a través del agujero en la
encía y el hueso. La perforación no debe hacerse en mucosa libre porque se corre el riesgo
de lacerarla por enrollamiento en el mandril perforador.

Técnica osteocentral:
Previa evaluación clínica, se ubica el sitio de punción, que en este caso es el septum
interproximal mesial o distal del diente a tratar. La punción se hace en la papila gingival. El
sistema electrónico permite la perforación por rotación de la aguja y el deposito
osteocentral de la solución anestésica empleada. Se ´pueden utilizar desde 0,9 ml hasta 1,8
ml de solución anestésica.
Es recomendable en procedimientos dentales que requieran anestesia pulpar profunda, tales
como: remoción de caries profundas, pulpotomías y tallado de pilares en dientes vitales.
Molares mandibulares con pulpitis sintomática, en los cuales se ha demostrado que la
técnica mandibular o el bloqueo del nervio dentario inferior no producen una anestesia
adecuada y en cirugías orales que impliquen osteotomías u ostectomías.
TÉCNICA INTRAPULPAR
Cuando se expone la cavidad pulpar de un diente durante su abordaje o como consecuencia
de un proceso traumático sobre la estructura dental, es posible utilizar la inyección
intrapulpar como técnica complementaria para lograr un control adecuado del dolor
producido por el grado insuficiente de anestesia pulpar que se obtiene mediante un bloqueo
troncular. Es de gran utilidad en endodoncia, durante los tratamientos de conductos
radiculares en dientes vitales, como complemento de un bloqueo primario, y en cirugía
bucal cuando se requieren odontosecciones, en las que el paciente puede referir dolor
cuando la fresa se acerca a la cámara pulpar.
Luego de identificar la cámara pulpar o los conductos radiculares, se introduce una aguja
corta, de 0,40 x 14 o 16 mm. Se requiere una aguja de calibre hueso y lumen reducido para
evitar su torsión o ruptura, al abordar la cámara pulpar o el sistema de conductos.
La solución anestésica se inyecta vigorosamente en el interior de los conductos, a razón de
0,2 a 0,3 ml.
La anestesia intrapulpar esta indicada en los siguientes casos: Durante los tratamientos de
conductos en dientes vitales, cuando hay dolor pulpar a pesar de haber aplicado bloqueos
tronculares. En pulpotomías y pulpectomías, siempre que la pulpa dental este expuesta. En
exodoncias quirúrgicas o de dientes retenidos el paciente suele referir dolor durante la
odontosección cuando la fresa se acerca a la cámara pulpar.

Técnicas tronculares en el maxilar superior


Las técnicas tronculares son aquellas que permiten el bloqueo de un tronco nervioso y sus
ramas colaterales. Su aplicación en odontología permite anestesiar zonas extensas, tanto en
el maxilar superior como en el inferior y sus estructuras anexas.
TÉCNICA INFRAORBITARIA
Permite obtener el bloqueo troncular de las ramas terminales del nervio maxilar superior,
especialmente del ramillete infraorbitario y, en algunas ocasiones, anestesia las ramas
alveolar anterosuperior y media superior (responsables de la inervación de los incisivos y
premolares maxilares). Su abordaje puede ser extraoral o intraoral.
La punción debe hacerse en el fondo de surco, sobre el canino, o mesial al primer premolar
en caso de que el agujero infraorbitario se encuentre mas hacia el canto externo del ojo. Se
utiliza una aguja de 32 o 27mm de longitud y con un calibre de 0,40mm. Se aplica entre 0,9
y 0,12 ml de solución anestésica. Esta se introduce en dirección al agujero infraorbitario,
hasta que la presión ligera que ejercemos en la piel de la región infraorbitaria con el dedo
índice impida su paso hasta cuando verifiquemos que la punta de la aguja esta en la
proximidad del agujero infraorbitario. Esta técnica se utiliza para exodoncias simples,
raspados y alisados radiculares a campo abierto, alargamiento cornal y suturar heridas en la
mejilla, ala de la nariz y labio.

TÉCNICA ALVEOLAR ANTEROSUPERIOR


Mediante esta técnica se pretende anestesiar las ramas del plexo alveolar anterosuperior,
responsables de anestesiar los incisivos maxilares. Se hace una punción en el fondo de
surco vestibular del canino, con una aguja de calibre 0,40 mm y de 27 mm de largo, la
aguja debe tener una angulación de 45 grados con respecto al eje largo o axial del diente
que se anestesiara, en el sector anterosuperior. Se inyectan entre 0,9 y 0,12 ml de solución
anestésica o medio cartucho. Esta técnica se utiliza para exodoncias simples, raspados y
alisados radiculares a campo abierto y alargamiento coronal.
TÉCNICA ALVEOLAR MEDIA SUPERIOR
Las ramas alveolares medias superiores forman parte de un plexo nervioso que en conjunto
con las ramas alveolares anterosuperiores son responsables de inervar la región premolar e
incisiva. El bloqueo de esta rama permite garantizar anestesia pulpar profunda en la región
premolar. Se hace una punción en el fondo de surco vestibular entre las raíces del primero y
el segundo premolar, con una aguja de 0,33 mm de calibre y 21 mm de largo. La aguja se
introduce con una angulación de 45 a 90 grados con respecto al eje largo o axial del diente.
Se depositan entre 0,9 y 0,12 ml de solución anestésica o medio cartucho. Esta técnica se
utiliza para las exodoncias simples, raspados y alisados radiculares a campo abierto,
alargamiento coronal, remoción de caries profundas, pulpotomías, exodoncias simples y
únicas de dientes permanentes maxilares y tallado o preparación de prótesis fija en pilares
vitales.

TÉCNICA ALVEOLAR POSTEROSUPERIOR


Con ella se anestesian las ramas alveolares posterosuperiores de la rama maxilar superior
del V par craneal, que penetran al maxilar superior a través de los agujeros alveolares que
se localizan por detrás de la tuberosidad e inervan los molares superiores, la pulpa, la
mucosa, el hueso y el periostio de esta zona. Traccionando la mejilla con el espejo, hacia
arriba y afuera, se introduce el cuerpo de bomba con una angulación de 45 grados respecto
al eje del primer molar y se punciona en el fondo de surco sobre el segundo molar, teniendo
presente que se debe dirigir la aguja unos 4 mm hacia arriba, adentro y atrás de la
tuberosidad del maxilar. La aguja debe de ser de 21 o 27mm de largo. Se inyectan de 0,5 a
1,0 ml de solución anestésica. Esta técnica se utiliza para exodoncias simples, múltiples y
quirúrgicas, exodoncias quirúrgicas o de dientes retenidos, cirugía de tejidos blandos,
cirugías preprotésicas, endodoncias de dientes vitales, raspados y alisados radiculares a
campo abierto, abordajes quirúrgicos del seno maxilar.

TÉCNICA NASOPALATINA
Complementa la técnica que anestesian por vestibular y permite realizar procedimientos en
la premaxila que comprometan la región palatina. Se utiliza para procedimientos
quirúrgicos en el tercio anterior del paladar, como los quistes del conducto nasopalatino y
cirugía de torus palatinos, en los cuales se complementa con un bloqueo del nervio palatino
anterior bilateral. Se procede a la punción intraoral, que se hace a un lado de la papila
incisiva, teniendo en cuenta que el cuerpo de bomba forme un ángulo de 45 grados con el
rafe medio palatino. En esta técnica solo se introduce la punta de la aguja con el bisel
mirando hacia el agujero nasopalatino, ya que la mucosa palatina se encuentra bien
adherida al plano óseo subyacente. Se depositan de 0,2 a 0,5 ml de solución anestésico.
Esta técnica se utiliza en cirugías preprotésicas, exodoncias simples, múltiples y
quirúrgicas, exodoncias quirúrgicas o de dientes retenidos en posición palatina, raspados y
alisados radiculares a campo abierto, abordajes quirúrgicos de lesiones quísticas.

TÉCNICA PALATINA ANTERIOR


Permite anestesiar la región posterior del paladar, desde el primer molar hasta el tercer
molar del lado anestesiado. Se utiliza en conjunto con la técnica alveolar posterosuperior
para exodoncia de los molares maxilares. Una vez identificadas las referencias intraorales,
se traza una línea imaginaria que corra paralela al rafe medio y divida por la mitad el
hemipaladar del lado que se anestesiara. Luego se traza en línea horizontal desde la cara
distal del primer molar hasta el rafe medio, perpendicular a la anterior. La punción se hace
en donde se entrecruzan dichas líneas con una aguja que puede ser extracorta (10 mm) o
corta (21 mm). Esta técnica se utiliza en endodoncias simples, múltiples, quirúrgicas y en
exodoncias de dientes retenidos por palatino, en cirugía preprotésicas, raspados y alisados
radiculares a campo abierto, abordajes quirúrgicos de lesiones quísticas palatinas o en
cirugía de torus palatinos y colocación de implantes oseointegrados en la región posterior
maxilar.

TÉCNICA PALATINA MEDIAL


Esta técnica se implementa cuando se planea un procedimiento dental en premolares
maxilares que implique el compromiso de la mucosa, hueso, y ligamento periodontal por
palatino, como es el caso de la exodoncia de premolares. Esta consiste en la inyección
palatina de analgésico entre los dos premolares. Una buena estrategia para determinar el
lugar de punción en esta técnica consiste en trazar un triangulo cuya base este en las
coronas de los dos premolares y su vértice en la mucosa palatina, en el hemipaladar, justo
en la porción acolchonada de la mucosa, que se localiza al trazar una línea imaginaria
vertical desde el incisivo lateral y divide el hemipaladar en dos.

Técnicas tronculares en el maxilar inferior


La técnica mandibular involucra el bloqueo de los nervios dentario inferior, lingual y largo
bucal. Cuando se hace referencia al bloqueo del nervio dentario o alveolar inferior, se
indica la técnica que permita bloquear el nervio responsable de la inervación de los
molares, premolares y los incisivos mandibulares.
TÉCNICA MANDIBULAR CONVENCIONAL
La técnica mandibular convencional se puede aplicar de forma indirecta o directa. Esto
depende de si se hace la punción inicialmente llevando la jeringa o el cuerpo de bomba
hacia el mismo lado que se va a anestesiar o si la punción se lleva a cabo directamente
desde la comisura contralateral

TÉCNICA INDIRECTA: ANESTESIA DE LOS NERVIOS DENTARIO INFERIOR,


LINGUAL Y LARGO BUCAL
Con una aguja de 0,40 mm x 27 mm se punciona la mucosa introduciendo solo la punta de
esta (4 mm), tomando como referencia el borde del dedo que descansa en el fondo del
triángulo retromolar.Se lleva el cuerpo de bomba hacia los premolares contralaterales, sin
torcer la aguja y cuidando de que la jeringa se adose a la comisura labial de ese lado. Luego
se termina de introducir la aguja, unos 10 a 15 mm, hasta obtener un tope óseo suave, el
cual indica que la punta de la aguja esta en la cara interna de la rama ascendente, justo por
encima de la espina de Spix, Después de realizar la aspiración sanguínea negativa se
deposita 1ml de solución anestésica al encontrar tope óseo suave para el nervio dentario
inferior, y al retirar la aguja se depositan 0,5 ml durante el retiro para anestesiar el nervio
lingual. Antes de que la aguja se retire completamente y habiendo depositado 1,5 ml de
solución anestésica, se depositan los 0,3 ml restantes llevando la punta de la aguja hacia el
borde anterior de la rama ascendente, anestesiando así el nervio largo bucal.
TÉCNICA DIRECTA: TÉCNICA MANDIBULAR CONVENCIONAL Y BLOQUEO
DEL NERVIO DENTARIO INFERIOR CON INFILTRACIÓN VESTIBULAR O
LINGUAL
En la técnica directa de bloqueo mandibular, a diferencia de la indirecta, la primera punción
se hace directamente desde la región de los premolares contralaterales al sitio que se va a
anestesiar, a la altura de la comisura labial ipsilateral. Esta técnica permite abordar
directamente el nervio dentario inferior a la altura del agujero dentario.
Se punciona la mucosa en la zona donde descansa el borde del dedo índice o pulgar,
tratando de que la punción siempre sea por encima de la espina de Spix. Se debe aplicar
siempre en máxima apertura de la boca. Luego se desliza la aguja suavemente, de 6 a 15
mm, permitiendo que la punta de la aguja haga un tope óseo suave con la cara interna de la
rama ascendente. Para esta técnica es adecuada una aguja de 0,40mmm x 27 mm. Se
anestesian el nervio dentario inferior y el lingual en la primer punción, utilizando para ello
1,8 ml de solución anestésica, previa aspiración sanguínea. Se inyecta 1,0 ml en el
momento del tope óseo para el nervio dentario inferior y 0,8 ml para anestesiar el nervio
lingual en el trayecto de retiro. Después de colocar un nuevo cartucho y esperar 3 minutos,
se procede a anestesiar el nervio largo bucal en un segundo tiempo. Este se aborda a nivel
del fondo de surco, donde se encuentra una rama gingivobucal, y se inyectan 0,5 ml de
solución anestésica.
La técnica mandibular convencional se indica en los casos de: Exodoncias simples,
múltiples y quirúrgicas mandibulares, exodoncias quirúrgicas de terceros molares retenidos,
cirugías de tejido blandos cirugías preprotésicas como raspados y alisados radiculares a
campo abierto y sutura de heridas en la mucosa del carrillo adyacente a los dientes
mandibulares y en piel del labio o el mentón.
TÉCNICA MENTONIANA
Permite anestesiar la región premolar mandibular mediante el bloqueo del ramillete
mentoniano que emerge en esta zona a través del agujero del mismo nombre, en esta
técnica no se produce anestesia pulpar de los premolares. Utilizando una aguja de 0,30 x 21
mm, se punciona entre las raíces de los dos premolares, llevando el cuerpo de la bomba con
una angulación de 45 grados, hasta encontrar un tope óseo, el cual no es indispensable. Se
inyecta lentamente 0,9 ml de solución anestésica, con previa aspiración sanguínea negativa.
Es recomendable que luego de inyectar la solución anestésica se haga un masaje suave en
forma circular sobre la piel de la región anestesiada, con el fin de permitir que la solución
anestésica penetre el agujero mentoniano y se logre una anestesia completa, Esta técnica se
utiliza para exodoncias de premolares, exodoncias de incluidos en la región premolar,
tallado de premolares vitales, colocación de implantes oseointegrados en la zona, raspados
y alisados radiculares, cirugías periodontales

TÉCNICA INCISIVA
Permite anestesiar la región incisiva mandibular mediante el bloqueo de las ramas incisivas,
que son ramas terminales del nervio alveolar inferior.
Se identifica el frenillo labial inferior, entre los incisivos centrales mandibulares, y se aplica
anestesia tópica en la zona. Luego se punciona al lado de la banda fibrosa que conforma el
frenillo labial. El cuerpo de bomba se ubica en una angulación de 45 grados con respecto al
eje largo del incisivo central inferior, dirigiéndolo lateralmente. Se atraviesa el frenillo
labial inferior en el fondo de surco, desde el lado derecho, evertiendo el labio inferior para
lograr exponer la zona que se va a puncionar. Se debe evitar tocar el hueso. Después de la
aspiración negativa, se inyectan entre 0,4 y 0,9 ml de solución anestésica. Para finalizar se
masajea suavemente la zona anestesiada para mejorar la difusión de la solución anestésica a
través del trabeculado óseo en la zona.

TÉCNICA INCISIVA DE SELDIN


Se evierte el labio inferior en su totalidad y se aplica anestesia tópica en el fondo del surco,
en la zona del canino mandibular derecho. Se coloca el cuerpo de la bomba paralelo al eje
largo del canino mandibular, se punciona en el fondo de surco y se introducen 5 mm de la
aguja. Se inyectan unas gotas de solución anestésica en esta posición y luego se lleva
lentamente el cuerpo de bomba a una posición horizontal, teniendo la precaución de no
torcer la aguja. Con el cuerpo bomba en posición horizontal, se sigue introduciendo la aguja
hasta que se logra atravesar el frenillo labial en la línea media. Solo es necesario que entre 5
y 7 mm de la aguja atraviesen la línea media. Se inyectan de 0,9 ml de 1,8 ml de anestésico
en el trayecto de retiro de la aguja. Con esta técnica se logra anestesiar la región del canino,
incisivo lateral, y central del lado anestesiado, e incluso los incisivos centrales y laterales
contralaterales.

Las técnicas incisivas se utilizan en exodoncias múltiples de incisivos inferiores,


exodoncias de incluidos en la región mentoniana, endodoncias de incisivos inferiores,
cirugías de lesiones quisiticas en la región mentoniana, tallado de dientes vitales,
colocación de implantes oseointegrados en la zona, raspados y alisados radiculares y
frenillectomias labiales, reducción de fracturas dentoalveolares mentonianas y sutura de
heridas en el labio inferior y la piel del mentón.
COMPLICACIONES LOCALES
ROTURA DE LA AGUJA
Desde la introducción de las agujas dentales de acero inoxidables desechables
para la anestesia local dental, la rotura de agujas se ha convertido en una
complicación sumamente infrecuente. Las agujas dentales largas tienen mas
posibilidades de romperse durante la inyección. Sin embargo, dado que es
improbable que la aguja aguja larga se introduzca por completo (aproximadamente
32 mm) en las partes blandas, parte de la aguja permanecerá visible en la boca
del paciente. La aguja se introduce hasta el cono (hasta la empuñadora). En todos
los casos publicados estaban implicados bloqueos de los nervios alveolar inferior y
alveolar posterosuperior. En todos los casos que se mencionaba, la rotura de la
aguja se produjo en el cono, nunca a lo largo del eje central.

PARESTESIA
La parestesia se define como una anestesia persistente (anestesia bastante más
allá de la duración esperada) o una alteración de la sensibilidad bastante mas allá
de la duración esperada de la anestesia. Además, la definición de parestesia
debería incluir hiperestesia y disestesia, en las que el paciente presenta tanto
dolor como acorchamiento. La respuesta clínica del paciente ante esta
complicación puede ser muy variada: Sensación de acorchamiento, inflamación,
hormigueo y picor. Puede asociarse disfunción oral, incluida la mordedura de la
lengua, el babeo, la disgeusia y dificultad para hablar. La parestesia es también
una de las causas mas frecuentes de litigio por mala praxis en odontología.

PARÁLISIS DEL NERVIO FACIAL


El séptimo par craneal conduce los impulsos motores a los músculos de la mímica
facial, del cuero cabelludo, del oído externo y de otras estructuras. Se produce la
parálisis de algunas de sus ramos terminales cuando se realiza un bloqueo del
nervio infraorbitario o cuando se infiltran los caninos maxilares. También se
observa una debilidad muscular cuando, en ocasiones, se anestesian las fibras
nerviosas motoras mediante la introducción inadvertida de anestésico en su
proximidad. Esto puede producirse cuando el anestésico es infiltrado en el lóbulo
profundo de la glándula parótida, a través del cual se extienden los ramos
terminales del nervio facial.
TRISMO
El trismo, se define como un espasmo tetánico prolongado de los músculos
mandibulares por el que la apertura normal de la boca está restringida (mandíbula
bloqueada). El termino se utiliza actualmente para referirse a la restricción de los
movimientos de la mandíbula. Aunque el dolor pospunción es la complicación local
más frecuente de la anestesia local, el trismo puede llegar a ser uno de los
problemas mas crónicos y complicados de tratar.

LESIÓN DE PARTES BLANDAS


Los traumatismos labiales y linguales autoinfligidos se deben con frecuencia a una
mordedura o masticación inadvertida del paciente sobre estos tejidos mientras
permanecía anestesiado.

HEMATOMA
La salida de sangre a espacios extravasculares puede producirse por la laceración
inandvertida de un vaso (arterial o venosa) durante la infiltración de un anestésico
local. Un hematoma provocado como consecuencia de la laceración de una arteria
generalmente aumenta de tamaño de forma rápida hasta que se aplica el
tratamiento debido a la presión sanguínea significativamente mayor dentro de la
arteria. La laceración de una vena puede dar lugar o no a la formación de un
hematoma. La densidad tisular que rodea al vaso lesionado es un factor
determinante.

REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS:
Martinez A. (2018) Anestesia bucal. Bogota: Editorial Medica Panamericana.

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