¡E M E R G E N C I A!
Katherine Atassi, RN, CNA,BC, OCN, MSM
Adjunct Nursing Instructor
West Virginia Institute of Technology
Montgomery, Virginia Occidental
Intoxicación hídrica
ACOMPAÑADA POR un compañero de
trabajo, Lucía D., de 28 años de edad, llega al
servicio de urgencias (SU) con un cuadro de
confusión leve, letargo, náuseas, disminución
reciente del peso corporal y poliuria. Usted le
acompaña a una cama y determina sus signos
vitales: presión arterial (PA), 90/60; pulso,
116; frecuencia respiratoria, 24; saturación de
oxígeno en sangre (SpO2), 93% en aire
ambiente, y temperatura de 37 °C. Después le
administra oxígeno suplementario por una
cánula nasal, le aplica un monitor cardíaco y
le inserta una vía intravenosa (i.v.) periférica.
La señora Lucía D. permanece consciente pero
sólo está orientada respecto a personas y
lugares. Mide 170 cm y pesa 94,1 kg, lo que
supone un índice de masa corporal de 31,5.
¿Cuál es la situación?
La señora Lucía D. señala que lleva varias
semanas intentando perder peso a base de tomar una dieta de
1.800 calorías y de beber al menos 4 l diarios de agua. A lo
largo de las últimas 8 semanas ha perdido 6,4 kg. Esta
mañana, cuando se pesó en casa su peso era de 91,8 kg, es
decir, 2,2 kg menos de lo que pesaba al llegar al SU.
En el monitor cardíaco se observa taquicardia sinusal sin
extrasístoles. En la revisión de los órganos y sistemas no se
detectan alteraciones importantes, aparte de una confusión leve
e intermitente, poliuria y aumento inexplicado del peso
corporal. Usted avisa al médico y obtiene muestras de sangre y
orina para su estudio analítico. La valoración del fondo de ojo es
negativa respecto al papiledema. Los resultados analíticos
indican disminución de la concentración sérica de creatinina
hasta 0,2 mg/dl (normal, de 0,6 a 1,1 mg/dl en las mujeres); de
la concentración sérica de sodio hasta 123 mEq/l (normal, de
135 a 145 mEq/l); de la glucemia hasta 60 mg/dl (normal, de 60
a 100 mg/dl); de la osmolalidad de la orina hasta 70 mOsm
(normal, de 75 a 300 mOsm/kg), y de la osmolalidad plasmática
hasta 250 mOsm (normal, de 285 a 295 mOsm). El resto de los
resultados analíticos está dentro de los límites normales,
incluyendo el hemograma completo, el nitrógeno ureico
sanguíneo y las pruebas de las funciones tiroidea y suprarrenal.
A consecuencia del letargo generalizado y de la desorientación
respecto al tiempo, se realiza una tomografía computarizada
ILUSTRACIÓN: ALFRED CALZA
craneal en la que no se detectan alteraciones.
¿Cuál es su valoración?
Los resultados del examen físico y del estudio analítico de la
señora Lucía D. indican hiponatremia hipotónica euvolémica
secundaria a intoxicación hídrica aguda. La hiponatremia
euvolémica suele deberse a un incremento del agua libre en
una situación de modificaciones escasas
del sodio corporal. Al incrementar de
manera importante su consumo de
agua, la señora Lucía D. dio lugar a una
dilución de la sangre, con aparición de
hiponatremia y sintomatología de
náuseas, letargo y confusión leve. Este
efecto de dilución dio lugar a su vez a
una disminución de la concentración
sérica de sodio y también se produjo
una disminución importante del
consumo de solutos debido al agresivo
programa de disminución del peso
corporal seguido por la paciente. Su
baja concentración sérica de creatinina
refleja el consumo insuficiente de
proteínas en la dieta. Los riñones
responden intentando retener más
sodio. La baja osmolalidad plasmática
refleja el exceso de agua corporal total
secundario a la depleción y la dilución de los solutos.
Con una hiponatremia grave (concentración sérica de sodio
inferior a 115 mEq/l), la paciente presenta riesgo de
convulsiones, coma y muerte.
¿Qué debe hacer de inmediato?
Llega el médico del SU, que está de acuerdo con su valoración
y prescribe la administración de 250 ml de una solución
hipertónica de cloruro sódico al 3%, administrada por vía i.v.
a lo largo de 5 h, junto con el diurético furosemida; todo ello
puede ser administrado y controlado estrechamente por
usted, que además también aplica la medida de limitación del
consumo de líquidos por vía oral. Dos horas después inicia la
administración de líquidos por vía i.v. Desaparecen los
síntomas de confusión leve de la señora Lucía D. Tras finalizar
la perfusión, la concentración sérica de sodio es de 128
mg/dl. Ahora sustituye la perfusión anterior por la perfusión
de 1 l de una solución de cloruro sódico al 0,9% a lo largo de
12 h.
¿Qué debe hacer posteriormente?
La señora Lucía D. es hospitalizada en la unidad de telemetría
para un estrecho control del nivel de conciencia, de la función
cardíaca y de la función renal. También hay que controlar sus
entradas y eliminaciones, y el peso corporal. Además, es
necesario consultar a un especialista en nutrición que revise e
implemente un plan de alimentación sana para que la
paciente pueda reducir su peso corporal. La señora Lucía D.
recibe el alta 2 días después, tras la desaparición de sus signos
y síntomas y una vez que se han normalizado todos sus
parámetros analíticos. N
Nursing. 2008, Diciembre 7