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clases de silogismo

Silogismo categórico

Un silogismo categórico o silogismo clásico es un silogismo compuesto por exactamente tres


proposiciones categóricas (dos premisas y una conclusión).1 Una proposición es categórica cuando tiene
una de las siguientes cuatro formas:1

· Universal afirmativa (proposiciones-A): Todo S es P

· Universal negativa (proposiciones-E): Ningún S es P

· Particular afirmativa (proposiciones-I): Algunos S son P

· Particular negativa (proposiciones-O): Algunos S no son P

· Por ejemplo, el siguiente argumento es un silogismo categórico:

Por ejemplo, el siguiente argumento es un silogismo categórico:

1)

1. Todos los gatos son animales.

2. Algunos gatos son negros.

3. Por lo tanto, algunos animales son negros.

2)

4. Todo M es S

5. Algunos M son P

6. Por lo tanto, algunos S son P

Silogismo hipotético

Un silogismo hipotético es aquel que parte de varios juicios basados en hipótesis y acaba extrayendo una
conclusión válida al relacionarlos entre sí. Se trata de una herramienta usada en la lógica muy presente
en cualquier tipo de vivencia, ya que permite extrapolar relaciones entre hechos interconectados.
La definición clásica señala que los silogismos hipotéticos son una clase o regla de inferencia con la cual
sacar conclusiones. En este caso, y de ahí su nombre de hipotético, lo que plantea es un caso en
condicional, pudiendo aparecer términos válidos o inválidos.

De acuerdo con la lógica proposicional, que usa conectores lógicos para unir los conceptos, el hipotético
en un tipo de silogismo del cual se puede extraer una inferencia.

El silogismo hipotético se caracteriza por estar formado por juicios hipotéticos. La estructura formal del
silogismo hipotético es la siguiente:

Si A es, B es

Si B es, C es

Luego, si A es, C es.

SILOGISMO DISYUNTIVO.

El silogismo disyuntivo es aquel cuya premisa mayor establece una disyunción exclusiva, de manera que
los dos miembros no pueden ser simultáneamente verdaderos, ni simultáneamente falsos. Ejemplo:
"Todo círculo es una curva o una recta; es una curva; luego, no es una recta".

Existen dos modos formalmente válidos de concluir: la premisa menor afirma uno de los dos predicados,
y la conclusión niega el otro (modo ponendo-tollens); o la menor niega uno de los predicados, y la
conclusión afirma el otro (modo tollendo-ponens: al negar se afirma).
Ejemplos:

O es de día o es de noche;

es de día;

luego no es de noche.

O es de día o es de noche;

es de noche;

luego no es de día.

O es de día o es de noche;

no es de día;

luego es de noche.

O es de día o es de noche;

no es de noche;

luego es de día.

Principios del silogismo


Después de que Aristóteles define el silogismo, lo divide, no en dos tipos, sino en grados, en perfecto e
imperfecto. La diferencia entre lo perfecto y lo imperfecto no concierne a la necesidad: la conclusión se
sigue necesariamente de las premisas en ambos casos. La diferencia se refiere a cuán evidente, cuán
obvio es que la conclusión se sigue de las premisas. El silogismo perfecto no necesita más proposición
que las dadas para que quede claro que se sigue la conclusión. El silogismo imperfecto requiere que se
agregue otra proposición para que sea obvio que la conclusión se sigue de las premisas.

Por ejemplo, en el silogismo "todos los triángulos tienen tres lados, todas las figuras de tres lados tienen
180 grados, luego todos los triángulos tienen 180 grados" es obvio que la conclusión se sigue
necesariamente. Pero puedo dar otro silogismo, "ningún libro es de metal, todas las monedas son de
metal, por lo tanto, ningún libro es una moneda", en el que no es obvio que se siga la conclusión. La
conclusión se sigue necesariamente, pero es difícil ver que así sea. Para ver que se sigue, necesitamos
agregar otra declaración, "ninguna cosa de metal es un libro".

Si está alerta, objetará, recordando de la definición del silogismo que la conclusión se sigue de las
premisas sin la adición de ninguna otra premisa o término. Aristóteles respondería que la premisa
añadida no es necesaria para que se siga la conclusión, se añade para dejar claro que se sigue la
conclusión. La premisa añadida proviene de las premisas originales y no aporta nada nuevo a los
términos del argumento. En nuestro ejemplo, la premisa añadida, "ninguna cosa de metal es un libro" no
añadió términos nuevos, y se sigue de la premisa original, "ningún libro es de metal". Simplemente
aclara que la conclusión sigue. Aun así, dado que se supone que un silogismo nos hace ver que se sigue
la conclusión, la necesidad de aclarar indica que este silogismo es imperfecto.

A continuación, Aristóteles analiza los principios del silogismo. Primero, discute los principios de todos
los silogismos, y segundo, discute principios adicionales que son útiles solo para el silogismo imperfecto.
Así explica Aristóteles la primera:

Decimos que un término se predica de todo otro, siempre que no se encuentre ninguna instancia del
sujeto de la cual no se pueda afirmar también el otro término. Ser predicado de ninguno debe
entenderse de la misma manera.

Aristóteles está diciendo que los dos principios de los silogismos son los significados de las frases "dicho
de todos" y "dicho de ninguno". Primero debemos preguntarnos qué significan estas frases, y luego
cómo son los principios de todos los silogismos.

Podemos explicarlo mejor dando un ejemplo. Vimos antes que la frase, "blanco se dice del hombre"
significa que blanco se predica del hombre. Esto ocurre en la declaración "el hombre es blanco". Blanco
se dice de todos los hombres cuando el sujeto "hombre" se usa universalmente en la declaración
resultante, "todos los hombres son blancos". Así, la frase "dicho de todos" indica que el predicado se
atribuye al sujeto universalmente, y no en virtud de una parte. De manera paralela, la frase "dicho de
ninguno" significa que se niega universalmente el predicado del sujeto: por ejemplo, que ningún hombre
es blanco.

Además, la afirmación y la negación universales son principios de todo silogismo porque un silogismo
funciona solo cuando al menos una premisa es universal. Se volverá obvio por qué esto es así más
adelante, cuando veamos las variedades útiles particulares del silogismo. Pero ya está claro que si no
entendemos lo que significan los enunciados universales, o si entendemos mal lo que significan,
entonces necesariamente entenderemos mal el silogismo, tanto el perfecto como el imperfecto.
formas especiales de silogismo
El silogismo es la expresión de un razonamiento deductivo (que va de lo general a lo particular). Ahora
bien, existen varias especies de silogismos. Es justo recordar que al tipo de silogismo que vimos (el que
consta de tres términos distribuidos en dos premisas y una conclusión) le llamaremos silogismo simple o
típico. Además, el silogismo simple se caracteriza por ser categórico, o sea, que sus premisas enuncian
juicios de una manera contundente, que su contenido se da por hecho. En cambio algunos silogismos se
enuncian en función de alguna condición de una hipótesis de causa-efecto (silogismo condicional), de
una unión entre dos factores (silogismo copulativo) o de posibilidades (silogismo disyuntivo); y existen
otras variedades silogísticas que modifican el esquema del silogismo típico, pues el pensamiento es algo
vivo que difícilmente se puede encasillar. Todas estas formas especiales del silogismo son las siguientes:
entimema, epiquerema, polisilogismo sórites, silogismo comparativo, silogismo condicional, silogismo
conjuntivo, silogismo disyuntivo y el dilema

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