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10 acciones del día a día que promueven la

igualdad de género
Las mujeres generalmente ganan menos que los hombres, hacen más tareas en el hogar y sufren más
violencia sexual. Conoce cómo cambiar esta realidad

Las mujeres todavía tienen menos derechos y oportunidades que los hombres, pero las pequeñas
actitudes pueden cambiar esta realidad

En el año 2017, una investigación del Foro Económico Mundial demostró que la desigualdad de


género en el mundo es del 32% –es decir, las mujeres tienen solo el 68% de los derechos,
oportunidades y recursos que los hombres en el mundo. Estas diferencias y la velocidad con la que
trabajamos para disminuirlas varían de país a país. Pero, según el estudio, si se mantienen las
condiciones actuales, serán necesarios 100 años para que todas las personas, independientemente del
sexo biológico y de la orientación sexual, vivan de forma igualitaria.
Aunque todavía tenemos un largo camino por recorrer, cada vez más el mundo se vuelve consciente
de que es necesario actuar para combatir la desigualdad de género – que, en muchas partes del
mundo, se potencializa por la asociación a otros tipos de discriminación, como racismo, xenofobia,
homofobia, etc. Con los años, los beneficios de la igualdad de derechos son cada vez más evidentes.
Un estudio realizado por la Organización Internacional del Trabajo, por ejemplo, mostró que, si hasta
2025 los países redujeran la diferencia de la participación entre mujeres y hombres en el mercado de
trabajo en un 25%, el mundo tendría un incremento de 204 millones de personas en la fuerza laboral,
lo cual inyectaría 5800 billones de dólares en el PIB mundial.

Además de la participación en el mercado laboral, la diferencia salarial podría beneficiar la economía


mundial si se eliminara. Un estudio publicado en 2017 por el Institute for Women’s Policy Research,
demostró que si todas las mujeres que trabajan en Estados Unidos ganasen lo mismo que los
empleados hombres en la misma posición, el país tendría un aumento de un 2,8% del PIB.
Acciones tales como garantizar la igualdad de remuneración para los mismos cargos (en el sector
privado, público y tercer sector) y dividir las tareas domésticas dentro de la casa pueden ayudar a
combatir el problema. Hemos preparado una serie de contenidos para que conozcas cómo contribuir
para un mundo más justo en el día a día, desde la infancia y en la adolescencia. Es el tercer artículo de
la serie, mira lo que pueden hacer los adultos para avanzar en la igualdad de género.
DIVIDE LAS TAREAS DOMÉSTICAS Y EL CUIDADO DE LOS HIJOS
Las tareas domésticas y el cuidado de los niños son responsabilidad de todos los adultos de la casa –
observa si en la tuya hay una división igualitaria. La sobrecarga de los cuidados del hogar y los niños,
en gran parte del mundo, todavía se deposita en las mujeres. Un  informe divulgado por la ONU en
2015 señala que las mujeres de los países en desarrollo, hacen por día, tres horas más de trabajo no
remunerado (trabajo doméstico y cuidado de los niños) que los hombres – en países desarrollados,
este índice es, en promedio de 2 horas más.
Según estudios, la sobrecarga de tareas domésticas puede incrementar las posibilidades de que la
mujer desarrolle trastornos mentales, además de afectar la productividad en el trabajo, influyendo
como consecuencia en el salario.

QUÉDATE ATENTO A LOS SIGNOS DE VIOLENCIA DOMÉSTICA


Busca ayuda y ofrece apoyo en caso de que sepas de alguna amiga o conocida que esté sufriendo una
relación abusiva o violencia doméstica. Este tipo de violencia no se limita a agresiones físicas. Ataques
verbales (insultos y amenazas, por ejemplo) o psicológicos (comportamiento controlador, intimidante y
manipulador) también afectan a las mujeres y suelen aparecer de forma combinada. En caso de que
experimentes una situación de violencia doméstica, sabes que no estás sola. Busca ayuda y denuncia.
El mismo informe de la ONU citado señala que, en la mayoría de los países con datos disponibles,
menos del 40% de las mujeres que sufren violencia buscan ayuda de cualquier tipo. Entre las que lo
hacen, la mayoría lo busca en la familia y amigos y pocas van a instituciones y mecanismos formales,
como policía y servicios de salud. Menos del 10% de las mujeres que buscan ayuda, después de sufrir
violencia fueron a la policía.

APOYA A LAS MADRES, INVOLUCRA A LOS PADRES


Responsables de niños y adolescentes necesitan el apoyo de toda la sociedad. Ofrecer el asiento del
autobús a una mujer embarazada, exigir la implantación de cambiadores en todos los baños de centros
comerciales (no solo en el de mujeres) y presionar por la garantía de licencias de maternidad y
paternidad en las empresas son acciones necesarias. Los datos más recientes de la ONU, publicados en
2015, señalan que sólo el 53% de los países ofrecen al menos 14 semanas de licencia por maternidad y
el 48% de los países tenían alguna licencia por paternidad.

NO TE INVOLUCRES (Y REPRENDE) ACTITUDES MACHISTAS Y RACISTAS


No hagas y no te calles al escuchar comentarios que ridiculicen, desprecien o humillen a las mujeres,
personas negras, indígenas, miembros de la comunidad LGBTQI o cualquier otro miembro de
comunidades históricamente marginadas. Conversa con compañeros, amigos y familiares y llama la
atención sobre la reproducción del machismo, racismo, homo y transfobias.
ELIGE, APOYA, FINANCIA, DA ESPACIO
Averigua quiénes son las candidatas mujeres, especialmente mujeres de comunidades
subrepresentadas. Además de votar, considera otras formas de apoyar y dar espacio para la promoción
de mujeres y LGBTQI en las artes, las ciencias, los deportes, etc.
Según datos de ONU Mujeres de 2017, solo hay 17 países con mujeres como jefes de Estado y/o de
gobierno en el mundo. El promedio mundial de mujeres en el Congreso es de apenas 23,4%.

NO SUPONGAS; ESCUCHA
Uno de los principales obstáculos para la eliminación de los prejuicios es el hecho de que la gente tiene
dificultad, en primer lugar, para reconocer que existe. Investigaciones han comprobado que todos
reproducimos prejuicios y visiones estereotipadas relacionadas con diversos temas, incluyendo género
y raza. “La neurociencia y las ciencias del comportamiento aprendieron mucho sobre nuestros
prejuicios inconscientes. Todos los tenemos, y están basados en raza, religión, orientación sexual y
género. Lo importante es ser conscientes de nuestras suposiciones y desafiarlas”, explica a Lise Eliot,
profesora de neurociencia de la Chicago Medical School.
Por lo tanto, trata de prestar atención a tus supuestos y saber que ninguno de nosotros es inmune a
emitir comentarios y realizar actitudes prejuiciosas. Cuando alguien señala algo problemático en su
charla, escucha y reflexiona.

CONTRATA DIVERSIDAD
Valora, estimula y contrata equipos diversos. Un estudio de la Boston Consulting Group, , realizado
con 1700 empresas en ocho países, demostró que, cuanto más diversos eran los cuadros de
funcionarios, mejores eran  las performances y tendencias para la innovación de las empresas. La
investigación indicó incluso que la inclusión de apenas un 2,5% de mujeres en un equipo de gerentes
puede aumentar en un 1% la facturación proveniente de la innovación.
Una manera de aumentar la contratación de grupos no representados, según la consultora en
diversidad April Reign, es quitar nombres, fotos y direcciones de los currículos en la fase inicial del
proceso de selección, porque, según encuestas, los prejuicios de género y raza aparecen incluso antes
de la entrevista. “Esta práctica [de eliminar nombres de los currículos] está comenzando a ocurrir más
en Estados Unidos y debe darse más. Porque no debería importar quién es la persona, si el candidato
es ideal para el trabajo, pero existen prejuicios inconscientes. Si Janet Thompson envía exactamente el
mismo currículo que Mark Thompson, las evidencias muestran que Mark obtendrá una entrevista, y no
Janet, aunque los currículos sean idénticos”, explica Reign. “Es por eso que, si se quitan los nombres y
se espera a que la persona ingrese a la sala, entonces uno sabrá que estará siendo realmente justo con
el otro lado de la mesa en términos de contratación”.
PAGA (Y EXIGE) EL MISMO SALARIO PARA CARGOS IGUALES
Por cada dólar que recibe un hombre, la mujer gana, en promedio, de 70 a 90 centavos, según datos de
la ONU. Por lo tanto, es importante tener en cuenta, chequear y apoyar a empresas que pagan el
mismo sueldo, beneficios y bonificaciones a empleadas y empleados con posiciones equivalentes.
Si esto no ocurre en el lugar donde trabajas, moviliza recursos y contactos para solicitar la publicación
de los sueldos de todos los empleados o llevar a cabo una auditoría para regularizar la situación de los
pagos, como ya ha ocurrido en algunas empresas de Estados Unidos y países europeos.

ACOSO SEXUAL Y RACISMO: TOLERANCIA CERO


Funcionarias/os necesitan tener un canal seguro para denunciar casos de acoso moral, sexual, escolar,
racismo, sin estar expuestos/as o ser despedidos/as. Aquellos casos comprobados deben ser
sancionados. Además, la consultora April Reign explica que es importante observar “cómo están
representadas las personas que son más vulnerables” en el comité que investiga las denuncias.

HAZ (O SOLICITA) CAPACITACIÓN ANTIRRACISMO Y ANTIPREJUICIOS


En el trabajo, el racismo y los prejuicios que alcanzan a personas de grupos históricamente marginados
a menudo se vuelven microagresiones, es decir, bromas o comentarios ofensivos muchas veces sin
intención de ofender – pero que ofenden y generan estrés.
Una de las maneras de poner fin a las microagresiones es ofrecer formación sobre la diversidad y
prejuicio implícito. Pero, como orienta April Reign, la capacitación debe incluir a todo el mundo.
“Necesita empezar desde arriba. No puede ser solamente que el CEO diga simplemente ‘ok, vamos a
pagar eso’. Ellos [líderes] tienen que participar”, dice.

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