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CONSTRUCCION DE SUBJETIVIDADES
Asesor
JORGE DAVID SANCHEZ
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Jurado
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Jurado
Bogotá D.C_________________________
La Universidad Francisco José de Caldas no se hará responsable de las ideas
expuestas por los graduandos.
La biblioteca de Babel
APROXIMACION A UNA CARTOGRAFIA DEL DISPOSITIVO ESCOLAR Y LA
CONSTRUCCION DE SUBJETIVIDADES
Resumen
Palabras clave:
1
Tabla de contenido
2
APROXIMACION A UNA CARTOGRAFIA DEL DISPOSITIVO ESCOLAR Y LA
CONSTRUCCION DE SUBJETIVIDADES
Una buena parte de las vidas de los niños, niñas y jóvenes, transcurre en el contexto
escolar. Y no es solo una buena parte de su tiempo, sino también de su experiencia
vivencial y cotidiana más significativa. Sin embargo no es la sed del conocimiento
- él espacio del aula - lo que convoca hoy a los y las estudiantes, sino el espacio
de convivencia e interacción con sus pares: el espacio del descanso, el cambio de
clase, las horas libres. La interacción que se da en esos momentos sucede en uno
de los pocos espacios de la vida que escapa parcialmente a las reglamentaciones
institucionales. Sin embargo, eso no significa que no estén enmarcados y
atravesados por una compleja red de relaciones de poder.
En los tiempos libres y los descansos la relación con el otro, la amistad, la atracción,
el encuentro, no son espacios normativizados, allí no hay que leer ningún manual
que prescriba, ni el deber ser, ni los límites. Estos se definen en el vivir cotidiano,
en la interacción, arriesgándose, acercándose al otro, conociéndolo, explorando –
a veces transgrediendo - límites, deseos, sensaciones, risas, emociones,
sentimientos, miradas compartidas, complicidades. También están allí, diferentes
formas de violencia: la hostilidad, la agresividad, las amenazas, las burlas e
intimidaciones que llevan a construir espacios estratégicos de alianzas, de defensa
o de aislamiento.
Sea como sea, está también la otra parte, la institucional, el espacio normativo,
reglado, cronometrado, parcelado, disciplinado. Para la gran mayoría de
estudiantes, es un espacio con el que toca aprender a convivir, pero esta vez no,
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desde el deseo, la espontaneidad, el entusiasmo y el querer, sino desde el deber
ser, la disciplina, el cumplir, el horario, las notas, los contenidos, las rutinas y
dinámicas estructuradas.
El eje de ese espacio está constituido por los saberes parcelados de algunas
disciplinas definidas como fundamentales y obligatorias - otras han quedado
excluidas – y los énfasis puestos en cada una de ellas que muestran marcadas
intensidades diferenciales. Estos saberes, predefinidos como conocimientos
necesarios y fundamentales, constituyen los supuestos, es decir, la razón de ser de
la escuela en la modernidad: formar ciudadanos “democráticos” y transmitir el
legado cultural de la humanidad.
Más allá de las críticas que podrían hacerse a la pertinencia y relevancia de los
saberes incluidos en los currículos y los excluidos de ellos, el interés es analizar y
comprender el contexto escolar como espacio de construcción de subjetividades:
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los esquemas de interacción que allí se desarrollan, los saberes que circulan, las
relaciones de poder que allí se estructuran y legitiman, el tipo de relaciones
individuales y grupales que se establecen con esos saberes, las posibilidades y
modalidades de participación activa, las formas en las que el sujeto se integra o
hace frente a las presiones del grupo y de la institución, las dinámicas relacionales
que se generan a partir de la circulación de discursos, significados y contenidos
simbólicos, todos ellos, elementos que intervienen en la construcción de
subjetividades en el contexto del dispositivo escolar.
Por todo ello, para los niños, niñas y jóvenes la escuela no es solo un espacio más
de la vida, es, en términos de experiencia vital, afectiva y social, uno de los espacios
privilegiados en los que la subjetividad se construye en medio de un espacio
atravesado por el complejo entramado de múltiples relaciones de poder.
5
El orden discursivo y la invisibilidad de lo simbólico
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circunstancia, que cualquiera, en fin no puede hablar de cualquier cosa.
(p.11)
El discurso, por más que en apariencia sea poca cosa, las prohibiciones que
recaen sobre él, revelan muy pronto, rápidamente, su vinculación con el
deseo y con el poder. Y esto no tiene nada de extraño: ya que el discurso -
el psicoanálisis nos lo ha mostrado - no es simplemente lo que manifiesta (o
encubre) el deseo; es también lo que es el objeto del deseo; y ya que - esto
la historia no cesa de enseñárnoslo - el discurso no es simplemente aquello
que traduce las luchas o los sistemas de dominación, sino aquello por lo que,
y por medio de lo cual se lucha, aquel poder del que quiere uno adueñarse.
(p.12)
Estos saberes, que circulan a través del lenguaje, producen a su vez, realidades. El
orden del discurso está enmarcado en un determinado orden institucional que a su
vez está ligado a regímenes de verdad que son legitimados como tales. Al respecto
plantea Foucault (1992):
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pensamientos, conducta, o cualquier forma de ser, obteniendo así una
transformación de sí mismos con el fin de alcanzar cierto estado de felicidad,
pureza, sabiduría o inmortalidad.
Estos cuatro tipos de tecnologías casi nunca funcionan de modo separado,
aunque cada una de ellas esté asociada con algún tipo particular de
dominación. Cada una implica ciertas formas de aprendizaje y de
modificación de los individuos, no sólo en el sentido más evidente de
adquisición de ciertas habilidades, sino también en el sentido de adquisición
de ciertas actitudes. (p. 48)
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elementos, pueden ser rastreados, cartografiados, en cada una de estas historias.
El proceso de esta investigación se ha orientado hacia generar ese rastreo,
intentando establecer un dialogo entre la analítica de Foucault y la teoría de las
representaciones sociales.
10
partido de y contribuir a un trabajo sobre la subjetivación, desde un punto de
vista teórico y práctico. El esbozo, ciertamente limitado, que acabamos de
trazar podría proporcionar ciertas orientaciones, trátese de la vinculación
entre subjetividad y representación, en el plano de la producción de
conocimientos y de significados; de efectos sobre los contenidos
representacionales imputables a las formas de subjetivación ligadas a los
marcos sociales e históricos; o del papel de las representaciones en la
constitución de las subjetividades y de su afirmación identitaria.
Desde este último punto de vista, sería interesante ver cómo la intervención
sobre las representaciones endosadas por cada quien puede contribuir a un
cambio de subjetividad. Esta perspectiva no es nueva. Foucault la ha
abordado a propósito de las técnicas del sí mismo. (p.49)
11
integra pasivamente, en el marco de las rutinas de vida o bajo la presión de
la tradición o de la influencia social. (p.51)
1
El trabajo de campo fue desarrollado desde febrero de 2012 en el Liceo Nacional Antonia Santos, J.M. y
desde junio hasta agosto de 2015, en el Colegio Campestre Monte Verde, J.M. ambas instituciones adscritas
a la Secretaria de Educación Distrital de Bogotá.
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Los hallazgos. Aproximación a una cartografía del dispositivo escolar.
13
prisión" como máquina óptica para ver sin ser visto. Si hay una historicidad
de los dispositivos, ella es la historicidad de los regímenes de luz, pero es
también la de los regímenes de enunciación. Pues las enunciaciones a su
vez remiten a líneas de enunciación en las que se distribuyen las posiciones
diferenciales de sus elementos (p.155)
14
El examen como tecnología del saber
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“salvarse” de reprobar el grado lectivo. No en vano hoy en día cuando los
estudiantes – algunos con nerviosismo e incertidumbre - reciben el informe de sus
notas bimestrales y lo miran, afirman con sorpresa: “me salve”. Han obtenido la
salvación y los sujetos siguen su curso, en el doble sentido del término: curso o
grupo con el cual vienen estudiando y el curso o camino que les ha sido demarcado
para transitar. El examen convierte al estudiante en un caso concreto, lo inserta en
una topología de comparación con los demás, le asigna un lugar que “es” suyo y
que “se lo merece”, lo ata a una clasificación, a una identidad.
Puede entonces entenderse esta técnica del examen como una actualización del
poder pastoral, transferido en un primer nivel, a la institución escolar, en un segundo
nivel tanto a los estados nacionales en el contexto de la modernidad (pruebas
ICFES), como a los organismos supranacionales en el contexto del neoliberalismo
y la globalización a través de las pruebas PISA (Programme for International Student
Assessment), administradas por la Organización Mundial del Comercio.
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El cuadro de honor como tecnología de los signos
Al igual que el elemento anterior y vinculado con él, este mecanismo discursivo,
está también construido con elementos heredados de la Edad Media. Es frecuente
que en la mayor parte de las instituciones educativas cada periodo académico se
publique un “cuadro de honor” en donde figuran los estudiantes en orden
descendente de rendimiento académico.
No es difícil verificar este tipo de situaciones, basta con hacer un seguimiento de las
calificaciones obtenidas por los estudiantes, en cada asignatura a lo largo del año o
consultar varios estudios de psicología social y educativa que se han ocupado de
trabajar el tema de las profecías auto cumplidas o efecto Pigmalión.
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Las relaciones entre pares como tecnología del poder
Las tecnologías del poder, las jerarquías y las relaciones de dominación del mundo
social se reproducen de alguna manera en el contexto escolar. Una compleja red
de relaciones de poder, se va tejiendo en el espacio escolar, en medio de las
interacciones cotidianas. Cada quien echa mano de los recursos con los que cuenta
para ejercer, imponer, resistir, aislarse, aliarse o protegerse. Seguimos nuevamente
a Deleuze (1989)
Apelan estas líneas de fuerza a recursos que pueden ser múltiples y variados: el
conocimiento, la fuerza, la agresividad, el humor, la intimidación, la solidaridad, el
liderazgo. Quizás sea más ilustrativo dar la palabra a la narrativa de los propios
sujetos para identificar las líneas de fuerza del dispositivo. El siguiente texto hace
parte de un ensayo en el que se pide a los y las estudiantes que escriban sobre el
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tema “cómo vivo y cómo me siento en mi curso” y da cuenta de la compleja red de
poderes existentes en la interacción cotidiana:
“…mi curso está dividido en grupos, aunque todos nos llevamos, están los
que mandan: son esos que les vale la autoridad y no les importa tener que
imponerse por encima de la autoridad, son los que les gusta poner la última
palabra, sin siquiera hacerlo para bien. Luego siguen los que les siguen la
corriente: son los que casi en todas las ocasiones hacen lo que ”los que
mandan” dicen, quizás por miedo, temor a ser rechazados o insultados… y
por ultimo están los demás, esos que ni se dejan llevar ni se imponen, hacen
lo que les toca y también molestan, pero tampoco hacen nada para cambiar
la situación. Creo que dentro de estos, estoy yo”. (Estudiante, género
femenino, 13 años, julio de 2015)
La investigación social está bastante ligada a la idea de los saberes expertos de las
disciplinas y su régimen de verdad. Pero el hecho de tomar distancia de ellos y dar
la voz a los propios sujetos insertos en el contexto que se pretende investigar,
evidencia cuanto se ha dejado de lado. Esta narrativa escrita por una niña de 13
años, visibiliza la compleja interacción de juegos de poder que funcionan a manera
de red, dentro del contexto escolar. No solo hace una taxonomía de los grupos de
poder y de sus características, sino que también evidencia las motivaciones,
temores y deseos puestos en juego; las interacciones que se desarrollan en medio
de esa red y las posiciones estratégicas que los sujetos ocupan.
Hasta donde pueden llegar estas líneas de fuerza en el espacio interno del
dispositivo, en términos de transgresión y violencia, lo evidencia la siguiente
narrativa de una estudiante perteneciente al mismo curso, pero que ocupa otra
posición en él:
“…aquí lo que más practican los chinos es el bulling como la empanadita, que
se le burlen a uno por la estatura, por el físico, eso es muy aburrido, hasta porque
uno opina se burlan o lo curten y si uno los acusa con un docente nos hacen la
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vida imposible para llegar al tema de la humillación. Yo no soy así, a mí no me
gusta hacer humillar a alguien por nada, porque a veces dicen la verdad en la
cara. La verdad yo estudio aquí muy incómoda por todo el bulling que hacen
mental y psicológicamente, lo sé porque yo lo soporté en séptimo, me hacían
bulling, me amenazaban porque era la mejor de la clase hasta llegar al punto
que yo no quería volver al cole, tenía miedo de que me hicieran daño. Cuando
los profes se enteraron les llamo la atención a los estudiantes y todo empeoro,
enferme, lloraba todo el tiempo por el bulling, la verdad no se lo deseo a nadie,
todo lo que yo soporté ni lo pienso soportar otra vez…” (Estudiante, género
femenino, 13 años, julio de 2015).
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Las ideas tóxicas como tecnologías del yo
Por fin Foucault descubre las líneas de subjetivación. Esta nueva dimensión
suscitó ya tantos malentendidos que dio trabajo precisar sus condiciones.
Más que ningún otro, este descubrimiento nace de una crisis producida en el
pensamiento de Foucault, como si éste hubiera tenido que modificar el mapa
de los dispositivos, encontrarles una nueva orientación posible, para no
dejarlos que se cerraran simplemente en líneas de fuerza infranqueables,
que impusieran contornos definitivos. Leibniz expresaba de manera ejemplar
este estado de crisis que vuelve a lanzar el pensamiento cuando cree uno
que todo está casi resuelto: se creía uno en puerto seguro, pero se encuentra
lanzado ahora en plena mar. Y Foucault por su cuenta presiente que los
dispositivos que analiza no pueden ser circunscritos por una línea envolvente
sin que aún otros vectores no pasen por arriba o por abajo: "¿Cruzar la línea,
como pasar al otro lado?", dice Foucault. Esta manera de pasar la línea de
fuerzas es lo que produce cuando ella se curva, forma meandros, se hunde
y se hace subterránea o, mejor dicho, cuando la fuerza, en lugar de entrar en
relación lineal con otra fuerza, se vuelve sobre sí misma, se ejerce sobre sí
misma o se afecta ella misma. Esta dimensión del sí-mismo no es en modo
alguno una determinación preexistente que ya estuviera hecha. También
aquí una línea de subjetivación es un proceso, es la producción de
subjetividad en un dispositivo: una línea de subjetivación debe hacerse en la
medida en que el dispositivo lo deje o lo haga posible. Es hasta una línea de
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fuga. Escapa a las líneas anteriores, se escapa. El sí-mismo no es ni un saber
ni un poder. Es un proceso de individuación que tiene que ver con grupos o
personas y que se sustrae a las relaciones de fuerzas establecidas como
saberes constituidos: es una especie de plusvalía. (p.156)
A partir de estos indicios se diseñó otro instrumento que indagara con mayor
profundidad las representaciones sociales asociadas a estos aspectos y que
permitiera identificar los espacios, procesos y grupos o personas que incidieron e
intervinieron en esas construcciones subjetivas, buscando develar cuales eran los
elementos que socavaban la confianza de los estudiantes en sí mismos y la
confianza en los demás, los dos elementos que aparecieron en la indagación
preliminar como los más fuertes y comunes.
2
El instrumento mencionado está incluido como Anexo 1
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fue bastante asertiva y edificante y logró que estos contenidos simbólicos pudieran
ser fácilmente identificados por los y las estudiantes. Se trata de un instrumento que
indaga acerca de percepciones que tienen los y las estudiantes acerca de si mismos
que consideran de carácter nocivo o desfavorable para sí mismos.
Las alusiones expresadas por los y las estudiantes fueron recogidas de manera
textual en una matriz para su posterior sistematización. Ver Tabla 1
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GENERO EDAD I DEAS TOXI CAS SOBRE MI MI SMA O MI MI SMO
f 701 12 que soy fea y gorda, no puedo expresar que soy diferente,como no creia igual que todos me decian satanica
f 701 12 muy tocada, no tengo ideas toxicas
f 701 13 que soy fea, no me quieren, no tengo talentos, no puedo hacer lo que me propongo
f 701 14 que soy ciega, falta de confianza en mi misma
f 701 14 que soy bruta, que soy inserv ible, soy buena para nada
f 701 14 que no soy inteligente, que no sirv o para nada, que soy una chichona, que soy una boba
f 701 13 las groserias que digo
f 701 13 cuando mi hermana nacio mi mama me grita siempre y soy gritona con mi mama
m 701 12 la escucha y el irrespeto contra mis amigos, que yo no puedo, que soy bruto
m 701 15 que soy bruto, que no puedo y que no sirv o para el estudio
m 701 12 que soy alguien que no sirv o para nada, que soy bruto
m 701 12 que no se matematicas, que soy bobo, que no se hacer nada, que no soy bueno para el estudio
m 701 14 la recocha, la sonrisa, hablo mucho
m 701 13 que soy bruto, no sirv o para las matematicas, que soy feo desde pequeño
m 701 13 no escuchar, ser irrespetuoso, que soy mal estudiante y que no sirv o para nada
m 701 12 que yo no puedo
m 701 14 soy un poco grande,pienso que soy inteligente, mas que los demas
m 701 12 que yo soy bruto y feo
m 701 14 que no juego bien futbol, que no soy tan div ertido,
m 701 12 pensar que no puedo, confiar mas en la gente que en mí, la timidez
m 701 13 que soy un bueno para nada, que soy estupido y que no se hacer nada
m 701 13 que soy feo, bruto, torpe y no sirv o para nada.
m 701 13 que soy gordo, feo, inutil, las materias que perdi
m 701 13 que no puedo concentrarme, que no sirv o para nada, no confio en mí, creo que soy bruto
m 701 14 que no hay amigos de v erdad, siempre hay que ser desconfiado, v acio, no puedo ser como los demas
m 701 12 que soy lento para hacer las cosas y que no sirv o para nada
m 701 16 que no puedo, no sirv o para nada, que no v oy a progresar
F 702 12 que soy fea por el color de piel
F 702 15 que soy fea
F 702 12 que soy boba, que no me v aloran ni me quieren
F 702 12 ninguna, me dicen fea pero no lo acepto
F 702 13 que soy fea por mi color de piel trigueña
m 702 13 me hacen bulling y me dicen niña
m 702 14 eso v iene en uno
m 702 14 lo que me dicen a mi me resbala, que soy bruto
m 702 12 cuando me llaman gordo
m 702 14 que soy retrasado mental
m 702 13 no tengo porque me resbalan
m 702 15 las cosas que a v eces me dicen no debo creerlas
m 702 14 que no me acepten como soy, que digan que soy feo y tonto
m 702 12 nonguna, no v iv ir con mi mama
m 702 12 las v erbales que me insultan
f 703 14 no me considero bonita, pienso que todo el mundo es mejor que yo y que no puedo dar mas
f 703 14 que soy mala para dibujar y leer
f 703 12 que mis amigas me dicen que yo soy chismosa
f 703 12 que me asusten, que me v isto fea, que soy fastidiosa, que soy intensa,que soy fea
f 703 12 usted no puede
m 703 12 que me llaman cabeza plana
m 703 13 las matematicas, el ingles, no puedo hacer los ejercicios, las groserias
m 703 12 que no puedo cumplir mi sueño, que no tengo talento para jugar futbol
m 703 14 me crei como bruto, que no sabia ni aprendia nada
m 703 15 las groserias, a pelear, v ago
m 703 14 que me llamen retrasado mental porque tengo un problema de habla
m 703 15 que soy muy comelon
m 703 12 que pienso que no puedo jugar futbol bien
m 703 15 que soy a v eces pesimo para tapar
m 703 14 cuando estoy jugando futbol y me dicen que soy un bruto
m 703 12 que no v oy a pasar el año
m 703 14 algunas v eces me siento que soy un tonto que me dejo pasar a todos por encima 24
A partir de esta matriz, se buscó el nivel de recurrencia con el que aparecen las
alusiones tomando el conjunto de ellas como campo semántico. En el proceso de
análisis se buscó identificar las categorías emergentes y las frecuencias obteniendo
los siguientes resultados:
TOTAL 68 100
Estos hallazgos permiten identificar cuáles son las representaciones sociales más
recurrentes acerca de las ideas tóxicas que los y las estudiantes tienen acerca de
sí mismos y sí mismas. Es de anotar que aunque existan representaciones que por
su nivel de recurrencia sean hegemónicas, también hay otras que, aunque tienen
un bajo nivel de recurrencia también son bastante significativas en términos de que
están dando cuenta de la construcción y la existencia de otros tipos de
subjetividades no hegemónicas.
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IDEAS TÓXICAS ACERCA DE SI MISMO O SI MISMA
APODOS
HOMOFOBIA
DIFERENTE
RACISMO
BOBO O BOBA
NO TIENE IDEAS TOXICAS
MAL FUTBOLISTA
FEO O FEA
INCAPAZ
NO INTELIGENTE
0 5 10 15 20 25 30 35
Porcentaje del total de alusiones
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CONTEXTOS Y PERSONAS CON LAS QUE CONSTRUYO IDEAS TOXICAS ACERCA DE SI MISMO O SI
MISMA
CONTEXTO EN EL QUE CONSTRUYO IDEAS
TOXICAS FAMILIAR ESCOLAR
Mama, papa, Grupo de
CON QUIEN CONSTRUYO IDEAS TOXICAS hermanos pares Profesores
NUMERO DE ALUSIONES 22 33 8
PORCENTAJE 35% 52% 13%
PORCENTAJE TOTAL POR CONTEXTO 35% 65%
FAMILIAR Mama,
papa,hermanos
35%
ESCOLAR Grupo de
pares
52%
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Frente a la indagación acerca de con quienes construyeron esas ideas tóxicas se
identificó que la gran mayoría lo hizo con la influencia de sus pares dentro del
contexto escolar ( 52 % ); con profesores que tuvieron o tienen actualmente (el 13%)
y con la familia, (el 35%). Aunque esta investigación no pretende ser cuantitativa,
los datos pueden señalar tendencias. Hecha esta aclaración y teniendo en cuenta
los datos, la influencia del espacio escolar suma el 65 % del referente y el espacio
familiar el 35%.
Una segunda parte del instrumento buscó explorar la producción gráfica de los
estudiantes para acceder a sus representaciones y contrastar, como sería la
representación del sujeto con estas ideas tóxicas y sin ellas. Los resultados
obtenidos son bastante ilustrativos por la riqueza simbólica y significativa que tienen.
Sobre el uso de representaciones gráficas en la exploración de representaciones
sociales plantea Abric (2001) que:
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Las dos imágenes suponen dos temporalidades diacrónicas, un antes y un después.
En la primera imagen se re-presenta, con una fuerte potencia simbólica, un espacio
cerrado y homogéneo caracterizado por la oscuridad. En términos del lenguaje
visual, el conjunto de la imagen está construido por líneas diagonales que expresan
desequilibrio e inestabilidad. Las dos diagonales que conforman el suelo, se
encuentran en el fondo evocando la sensación de cierre. Las tres líneas que
componen el encuadre de la imagen representan una tensión no resuelta y en el
punto en donde ellas confluyen está posicionado el sujeto, asignándole a él esa
tensión. El lugar del observador está localizado en un punto muy superior al sujeto,
en términos de diseño es un encuadre en picada, es decir un encuadre tomado
desde lo alto, desde arriba. Son elementos constitutivos de su estructura, los muros
que conforman un callejón que no conduce a ningún lugar, conformando un espacio
cerrado del cual no se puede escapar, ni siquiera saltando los muros, pues ellos
ascienden sin que se les vea el final. En la dimensión corporal el sujeto ocupa la
posición del fondo - está en el fondo - literalmente arrinconado y asume una posición
cerrada, defensiva, en la que parece encerrado en sí mismo y además, sin rostro;
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la posición de su cabeza y la dirección de su mirada adquieren el mismo sentido.
Estos elementos icónicos re-presentan una subjetividad desempoderada y
devaluada.
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El dispositivo y las líneas de fuga
Retomando los elementos de análisis desarrollados hasta acá, se puede ver como
las diferentes tecnologías del dispositivo escolar promueven universos simbólicos
que sirven de base para la construcción de procesos de subjetivación paralizantes
y devaluadores en el sentido de generar posiciones y significados tomados por los
sujetos como propios y dejándolos atados a una identidad: la víctima, el matón, el
nerdo, el repitente, el vago, el peor, el miedoso, el lento, el retrasado, etc. Todas
estas nominaciones circulan habitualmente de manera cotidiana en el contexto
escolar. Pero habría que decir también que donde hay poder hay resistencias, hay
luchas.
Esta forma de poder se ejerce sobre la vida cotidiana inmediata que clasifica
a los individuos en categorías, los designa por su propia individualidad, los
ata a su propia identidad, les impone una ley de verdad que deben reconocer
y que los otros deben reconocer en ellos. Es una forma de poder que
transforma a los individuos en sujetos. Hay dos significados de la palabra
sujeto: sometido a otro a través del control y la dependencia, y sujeto atado
31
a su propia identidad por la conciencia o el conocimiento de sí mismo. Ambos
significados sugieren una forma de poder que subyuga y somete. (p.6)
32
entra en crisis, viabilizando aperturas a nuevos horizontes y reelaboraciones hacia
caminos intencionadamente marcados por el empoderamiento y la autonomía. Al
respecto de las posibilidades de nuevas construcciones, afirma Deleuze (1989):
33
En ese sentido, queda planteada la introducción de la novedad y la apertura hacia
caminos de ruptura y de quiebre de las líneas de subjetivación. Una verdad dada,
una idea arraigada acerca de uno mismo que es considerada como verdad absoluta,
como parte de la esencia del ser, como parte de una supuesta identidad, puede
relativizarse a partir de la reflexividad, entendida como el volver a ocuparse de ella,
revisarla, confrontarla con las verdades de los otros y las otras, pensarla, ponerla
en cuestión, mirarla nuevamente, pero esta vez con extrañeza, con distanciamiento
y sospecha.
Una gran parte de estos elementos del dispositivo, está codificada en procesos de
enclasamiento social pero también familiar, escolar y personal. Este enclasamiento
tiene que ver por un lado con un orden de enunciación que clasifica, califica y
jerarquiza, rotula. Siempre que hay un proceso de jerarquización aparecen unas
categorías. Por ejemplo, se nace de clase social alta o baja. Esos enclasamientos
no son en el fondo de tipo económico sino esencialmente simbólicos; lo que están
haciendo, es asimilando en una escala axiológica, la clase social con el valor de la
persona y esto tiene una influencia importante en la forma como la sociedad la mira
y en la forma como esta persona se mira a sí misma y mira a los otros, lo cual genera
un peso importante en la construcción de su subjetividad y en el posicionamiento
del sujeto en el mundo.
Esos son los enclasamientos macro, pero están también los que jerarquizan a todos
los niveles. Toda una madeja de taxonomías que funcionan en términos de género,
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de belleza, de inteligencia, de poder económico, de creatividad, de confianza, de
capacidad artística, intelectual, relacional, comunicativa, etc. Prácticamente todos
los aspectos de la vida están clasificados y calificados y los universos simbólicos
dominantes en cada sociedad, están construidos con base en una arbitrariedad,
definida por relaciones de poder, que hace que los universos simbólicos de las
clases dominantes están sobrevalorados y los de las clases populares están
devaluados.
Hay toda una estructuración socioeconómica, pero lo que en el fondo pesa más y
mantiene la estabilidad de las estructuras sociales, lo que las reproduce e intenta
perpetuarlas, es el funcionamiento de los dispositivos de producción de
subjetividades devaluadas, sostenidas por un conjunto de valores que hace que las
personas acepten, tanto la situación en la que están como el orden social, como si
fueran elementos del orden natural y de carácter normal. Las estructuras sociales
injustas y la aberrante inequidad presentes hoy en el mundo globalizado, quedan
de esta manera invisibilizadas.
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¿Qué elementos del dispositivo escolar refuerzan la construcción de subjetividades
devaluadas? La competencia descarnada, la rotulación, la estigmatización, la
calificación y su contrapartida oculta: la descalificación, la ironía, la invisibilizacion,
el silencio, las relaciones de poder autoritarias, presentes aún en una buena parte
de las instituciones y agentes educativos, la norma indiscutible, no reflexionada, el
deber ser descontextualizado, el desprecio, la arbitrariedad, el juicio, el prejuicio y
muchos otras situaciones que corresponden a violencia simbólica, producen auto
marginación y construcción de subjetividades replegadas. A propósito del
dispositivo escolar afirma Foucault (1988):
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intervención analítica, critica y reflexiva, lo cual pasa por hacer conciencia de que él
mismo hace también parte del dispositivo, que está inmerso en él. En este sentido,
afirma Deleuze (1989):
37
de la historia y la parte del acontecer, la parte de la analítica y la parte del
diagnóstico. Si Foucault es un gran filósofo, lo es porque se valió de la historia
en provecho de otra cosa; como decía Nietzsche, obrar contra el tiempo y así
sobre el tiempo en favor de un tiempo futuro. Pues lo que se manifiesta como
lo actual o lo nuevo, según Foucault, es lo que Nietzsche llamaba lo
intempestivo, lo inactual, ese acontecer que se bifurca con la historia, ese
diagnóstico que toma el relevo del análisis por otros caminos. No se trata de
predecir, sino de estar atento a lo desconocido que llama a nuestra puerta.
(p. 161).
38
A manera de cierre y apertura
39
nuevas subjetividades. En ese sentido existe una multitud de experiencias que
desde el saber pedagógico de los docentes, están planteando caminos distintos de
investigación e innovación. Plantea Hoyos (2015) que:
Quizás es tan importante lo que hay que aprender, como lo que hay que
desaprender y para eso debería trabajar el sistema educativo, debería
convertirse en un sistema de des-aprendizaje, de develamiento, de
deconstrucción de universos simbólicos subalternos, aplastantes,
empobrecedores, devaluadores, inmovilizadores, inhibidores, negadores de
la autonomía y de la búsqueda de libertad individual y colectiva. Pero el
sistema educativo está apasionadamente dedicado a la reproducción de esos
universos simbólicos y, lo que es peor, dedicado sin siquiera saberlo. La
inconciencia es una condición fundamental para que la reproducción del
orden social funcione. (p.101)
Cerramos con una última cita de Foucault (1988) acerca de los objetivos y el sentido
de las luchas actuales:
Desde esta perspectiva habría que plantear que, si la escuela de hoy está
aportando a construir subjetividades sumisas y devaluadas, la apertura y el esfuerzo
de los y las docentes que desarrollan procesos de investigación, debe enfocarse
hacia la construcción de condiciones de posibilidad para el surgimiento de nuevas
subjetividades liberadoras, buscando caminos para potenciar las líneas de fuga del
dispositivo escolar.
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