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PATRIA O COLONIA

Por Néstor Forero

La presentación del mapa extractivo de la república es lo suficientemente explicativo y doliente


de nuestra actual situación. Enredados en una maraña de acuerdos y convenios, deudas ilegales
e impagables, licuación del poder soberano y sumidos el 50% de la población en la pobreza, la
telaraña de la dependencia nos somete y sobre ella, posada está la araña sacrificante.

Es la misma araña que somete con escasa visibilidad al mundo, a través del sistema bancario.
Cuando en Bretton Woods se definió la estructura monetaria mundial con implementación del
dólar como moneda transaccional y la creación del Fondo Monetario internacional, el Banco
Mundial y la Organización Internacional del Comercio, con marcada influencia norteamericana,
Gran Bretaña, perdida la discusión entre el proyecto defendido por Lord Keynes ante White,
funcionario de la administración estadounidense, se refugió en la defensa del Banco
Internacional de Pagos (BIS).

El BIS (Bank for International Settlements) fue creado a principios de la década del 30 por el
Acuerdo de La Haya, surgido entre el gobierno de Hitler en Alemania y por Montagu Norman
presidente del Banco de Inglaterra. Su misión original: canalizar los pagos efectuados por
Alemania en concepto de reparación de guerra estipulados por el Tratado de Versalles. Durante
el desarrollo de la Segunda Guerra Mundial, cambió su objetivo, reversando las transferencias
de los países invadidos hacia Berlín, por tal motivo, al término de la guerra. EE. UU. intentó
liquidarlo en Bretton Woods y encontró la férrea oposición de Gran Bretaña, que toleró la
implementación de la influencia del dólar a nivel mundial y la creación de sus instituciones
(Fondo Monetario Internacional, Banco Mundial, Organización Internacional de Comercio), pero
no aceptó la liquidación del BIS.

Poco conocido y escasamente mencionado, el Banco Internacional de Pagos, se lo presenta


como el banco central de los bancos centrales, que fija pautas comunes (Acuerdos de Basilea)
de manejo y registración de los activos, más de setenta bancos centrales reportan a él.

Si alguien requiriera saber dónde está alojado un capital fugado o por donde este transitó,
debe preguntarle al BIS.

Esa es la institución preservada por Gran Bretaña.

A la salida del respaldo en oro del dólar (1972) se intensificó el uso de las guaridas fiscales, mal
llamados paraísos fiscales. Actualmente se estima que más del 50% del comercio internacional
se tramita por estas guaridas. La mayoría de ellos responden a la Comunidad Británica de
Naciones.

Conjuntamente se ha implementado una cultura de fobia al estado, especialmente en las capas


pudientes de la sociedad, fomentando la inutilidad y el abandono de una filosofía del estado. Así
éste se convierte en un mero instrumento sin mayores objeciones ni miramientos, utilizable
tanto a izquierda como a derecha, incapaz de controlar la renta que está a su cargo.

La resultante es la implantación de un sistema corrupto, que resulta ser el precio o salario que
las clases dirigentes cobran para no mentar la dependencia.
Suele presentarse la fuga de capitales como responsabilidad del país víctima y no de aquellos
que reciben esa afluencia de recursos

Y la verdadera “seguridad jurídica” que promueven las corporaciones es la implementación de


un sistema tributario y financiero que facilite la fuga de capitales.

Dice Nicholas Shaxson “Gran Bretaña está posada como una araña en el centro de una vasta
telaraña internacional de paraísos fiscales, desde donde atrapa billones de dólares en forma de
negocios y capitales provenientes de todo el mundo para encauzarlos hacia la City de Londres”.

Los paraísos fiscales han hecho un daño irremediable al sistema mundo, esas verdaderas
guaridas libertarias y elitistas, infestadas de delincuentes económicos, políticos, sociales y
financieros, reciben, lavan y reciclan los fondos de los actos delictivos de todo el mundo y los
vuelven a ingresar al sistema formal a través de las agencias inversoras de aportantes anónimos,
no casualmente domiciliadas en los mismos paraísos fiscales.

Estas guaridas no son un grupo de estados independientes que ejercen sus derechos soberanos
en sus leyes y regímenes fiscales, sino que responden a los intereses de las principales potencias,
especialmente Gran Bretaña y EE. UU., que conforman anillos protectores de impunidad, de
primero, segundo y tercer orden, para que cuando llegan los fondos al centro del dispositivo, los
mismos gocen de la total impunidad del anonimato.

Pero de los pocos datos que se conocen y pueden ser verificados, existe la tendencia que las
corporaciones de bandera norteamericana eligen la estructura de extraterritorialidad británica,
así se conoce que antes de su quiebra, Enron utilizaba 692 filiales en Islas Caymán, 119 filiales
en las Islas Turcas y Caicos, 43 filiales en Mauricio y 18 en Islas Bermudas, todos territorios
correspondientes a la Comunidad Británica de Naciones. Por su parte la Auditoría General de
EE. UU. informó que el Citigroup dispone de 427 filiales en paraísos fiscales.

Estudios internacionales han manifestado que un tercio de la riqueza que se produce en el


mundo es canalizado por activos bancarios originados en condiciones de extraterritorialidad, y
que, si se suma lo producido por la City de Londres, en manos de la telaraña extraterritorial se
alcanza el 50% de los activos mundiales.

En ese orden debe incorporarse la administradora de fondos denominada Black Rock, la tercera
economía del mundo detrás de China y EE.UU. Fundada en 1988, declara bajo su administración
activos por 9.496 billones de dólares; acciones de más de 17.000 empresas de todo el mundo,
Coca Cola, Apple, Microsoft, General Electric, Bayer- Monsanto, Unilever, Barclays, Societe
Generale,J.P.Morgan,City, Bank of America, Cedit Suisse, Deutsche Bank, BBVA, Santander, Total
Occidental, Repsol, Telefónica, entre otras miles tienen entre sus accionistas a Black Rock.

En nuestro país declara acciones de YPF, Pampa Energy, Central Puerto, Loma Negra, IRSA,
Telefónica, Coca Cola, Bayer, Exxon Mobil, Apple, Microsoft, Procter & Gamble, Tenaris,
Mercado Libre, TGN, Arcos Dorados, Adecoagro, Glencore y participaciones en las principales
productoras y transportistas de granos y en explotaciones mineras como Bajo La Alumbrera,
Aguilar, Agua Rica y Pachón en San Juan. Conformó uno de los grupos del canje de los bonos
privados en 2020, llamado Grupo Ad Hoc de Bonistas Argentinos, junto a los administradores
Fidelity y Ashmore.
Fue uno de los tres grupos que lideraron el canje de bonos privados por 66.238 millones de
dólares al 31 de agosto de 2020, en plena pandemia y sin ser revisada su legalidad y legitimidad.

Black Rock es así en conjunto la principal tenedora de activos del país. E inversionista de las
explotaciones que se detallan en el mapa.

Como la cartografía sirve para explicar situaciones que de otra manera necesitarían cientos de
páginas explicativas, el que precede este informe nos muestra el resultado del accionar
financiero y económico y la diplomacia claudicante llevada por décadas por nuestro país
traducida en las implantación de bombas de saqueo y transferencia de riquezas que asolan
nuestro territorio.

Conjuntamente se implantó una cultura individualista, ególatra y materialista tendiente a


cercenar nuestro pensamiento nacional de característica latinoamericanista y amputar de
nuestra conciencia la territorialidad y vastedad de nuestros recursos.

Así mientras el BIS monitorea el flujo de fondos mundial a través de los más de setenta bancos
centrales bajo su órbita; el FMI y el Banco Mundial imponen recetas recesivas y condicionan la
aplicación de las políticas ajenas al interés nacional; las guaridas reciben el producto de la
corrupción y la reciclan en los fondos inversores y la producción de riqueza real queda cada vez
más lejos del control de estados cada vez más debilitados. Nuestro país es un ejemplo de la
debelación ( #1) implantada por el poder colonial.

Al observar el doliente mapa de la explotación de nuestras riquezas uno encuentra la razón por
la no invasión militar británica al continente durante la batalla del Atlántico Sur. Gran Bretaña
aprendió de la historia y luego de 1806, 1807 y 1845, supo que no podría contra la legítima
reacción popular que incendiaría todo el continente.

Optó por una estrategia indirecta, desplegada a través del tiempo y mediante la firma de
tratados como los Acuerdos de Madrid y Londres de 1989 y 1990, Malcorra- Duncan de 2016, y
Fodadori – Duncan de 2019 y los convenios de garantía de inversiones y para evitar la doble
imposición tributaria, consolidó su posición en medio de una prolongada crisis que asola nuestro
país.

Sabemos que Gran Bretaña necesita una Pax en el Atlántico Sur para depredar sus recursos e
implementar un paraíso fiscal en Malvinas, que canalice las tropelías al sur del continente y paso
necesario entre tres océanos.

El mapa nos explica también porqué tenemos un 50% de pobreza y la escasa población nacional
en las áreas bajo explotación imperial.

Los argentinos que durmieron el sueño eterno bajo la esperanza de “Malvinas Volveremos”
merecen que por nuestra honra conocer el verdadero estado de dependencia de nuestra Patria.

Nosotros, nosotros no nos rendimos.

(#1) Debelación: Principio del derecho romano, debellectio, cuya traducción es el estado de
aniquilamiento del estado a causa de la conquista de este.

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