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Deuda externa

El general San Martín


y la deuda odiosa
Jor ge Francisco Cholvis*

Luego de haber examinado el Estatuto Provisorio sancionado


por el General San Martín en 1821, en su carácter de “Protector
de la libertad del Perú”, el autor afirma que es dicho documento
el que en primer término y al más alto rango normativo instituye
el concepto de “deuda odiosa”. Esa era la deuda pública que San
Martín expresamente rechazó. No había sido contraída con el
consentimiento del pueblo peruano ni tampoco en su beneficio;
por lo contrario, había sido utilizada para someterlo y sostener el
régimen colonial, como también para hostilizar a los demás pue-
blos independientes de América. Ello nos da la dimensión sobre
la grandeza del Padre de la Patria y Libertador de Pueblos. Para
los argentinos y en general para los latinoamericanos este prece-
dente tiene el valor de expresar el pensamiento de quien tuvo el
coraje y la firmeza necesarias para impulsar y sostener la inde-
pendencia nacional en los albores de nuestras historias patrias.

* Abogado constitucionalista. Discípulo del Dr. Arturo Enrique Sampay, autor de


numerosas publicaciones sobre temas constitucionales y Derecho Público.
30 realidad económica 202

Primera Parte quienes no deciden sobre los pro-


blemas “globales” y, por ello, se
encuentran anclados en las for-
Nuestro tiempo está dominado
mas extremas del subdesarrollo y
por la cuestión de la deuda exter-
la miseria. El imperativo estatal de
na, y las intervenciones de los Es-
dirigir la economía a un desarrollo
tados centrales y de los organis-
humano y servir a él se presenta
mos financieros internacionales
entonces incompatible con el pa-
en favor de los créditos que ale-
go de servicios financieros que re-
gan. Ahora, como antes, el endeu-
claman los pretendidos acreedo-
damiento externo es todavía el
res, y sus apoyos estatales y fi-
principal instrumento de dominio
nancieros. En este marco hay
que pesa sobre el pueblo argenti-
siempre una trágica postergación
no y buena parte de los pueblos
de lo que cabría llamar la deuda
de la región. Por ello, cada vez
social.
que de algún modo u otro surge el
tema de la problemática situación Pero este esquema de sojuzga-
argentina y de las opciones de so- miento y explotación precisó la ac-
lución, es prácticamente imposi- ción de una clase herodiana cóm-
ble evitar que aparezca el escollo plice de esa intervención, que se-
de la “deuda externa”. La misma, cundó al “club” del poder mundial
a su vez, es causa y consecuen- y a los distintos gobiernos colabo-
cia del subdesarrollo socioeconó- racionistas y que ejerció otorgó la
mico. “Nos guste o no, la cuestión máscara institucional necesaria
es de un peso específico enorme, para concretar esa dominación
a punto tal que constituye real- imperial. Por ello, es indispensa-
mente la hipótesis de conflicto ble recordar las dignas actitudes
más seria que tiene la República del Padre de la Patria y de otros
Argentina en la actualidad” (Mar- próceres en los duros momentos
tos, 2003). del parto de nuestra nación.
El sistema de endeudamiento es La lucha de nuestros juristas
un mecanismo de subordinación y contra la prepotencia de los paí-
de transferencia de riqueza de los ses centrales constituirá asimismo
estados y poblaciones de la peri- un honor histórico de los que asu-
feria hacia el centro capitalista, en men tal papel. Como señala Loza-
donde se encuentran las naciones da, durante todos estos años ha
de alto desarrollo (Estados Uni- habido -salvo algunas excepcio-
dos, Gran Bretaña, Alemania, nes- una marginación de lo jurídi-
Francia, Canadá, Italia y Japón). co en el tratamiento y discusión de
En ese esquema, nuestros países la “deuda externa”. Sugestivo sin
permanecen aislados, no pueden duda, porque el tema de la deuda
actuar en forma coordinada y por es, por definición, materia jurídica.
tanto están en la posición débil de La relación entre deudor y acree-
San Martín y la deuda odiosa 31

dor, la exigibilidad o falta de exigi- la el presente controla el futuro”.


bilidad de lo que se pretende Así la “historia oficial” también
adeudado, la legitimidad de los conforma un instrumento de poder
medios para compeler al deudor que orienta, alecciona y amenaza
al pago de la obligación, son pun- a cada paso, imponiendo un cor-
tos excluyentemente jurídicos (Lo- set intelectual (Salbuchi, 2003.).
zada, 2002:63). Sugestivo tam- Por tanto, se debe confrontar con
bién porque en otros tiempos his- ese conjunto de tergiversaciones
tóricos el mundo jurídico conocía institucionales y afrontar un nuevo
la denominada “doctrina argenti- examen sobre estos sucesos.
na”, sostenida en todos los foros * * * * *
internacionales por Carlos Calvo,
Luis M. Drago y otros juristas que La historia demuestra que la ce-
siguieron sus pasos. La Doctrina sación de pagos o “default” de los
Drago presenta hoy una excepcio- gobiernos, como el repudio de
nal significación frente al endeu- deudas que se les adjudicaban,
damiento externo de las naciones es una vieja práctica con antece-
subdesarrolladas. La respuesta dentes conocidos que viene de la
de esos juristas contra la prepo- época de los griegos y los roma-
tencia de los países centrales nos, desde varios siglos antes de
constituyó una actitud excelsa que Cristo. Sin llegar a esos tiempos,
debemos rescatar y mantener, recordemos que en el siglo XV el
pues sus alegatos tienen una for- Rey Eduardo IV de Inglaterra, si-
midable actualidad ante la reali- guiendo el ejemplo de su antece-
dad contemporánea. sor Eduardo III, incumplió sus
deudas con el Banco de los Médi-
Se observa también cómo la fal- ci de Florencia. No obstante, cua-
ta de análisis histórico del endeu- tro siglos después de estos sona-
damiento externo de las naciones dos defaults, la ciudad de Londres
posterga su solución, cuando es convertida en capital financiera
indiscutible que su estudio minu- del mundo era acreedora de los
cioso se transformará en un ele- Estados Unidos, América latina y
mento de significativa importancia de toda Europa. Durante el siglo
en la defensa de los derechos e XIX la mayoría de los gobiernos
intereses de las naciones que su- europeos incurrieron en cesación
fren la exacción exterior. Bien se de pagos (España siete veces,
calificó la importancia que tiene Austria tres, Portugal tres, Grecia
para los factores del poder real el dos, Turquía tres, Rusia una y Ho-
escribir (o re-escribir) la historia, landa una). América latina no es-
pues -tal como lúcidamente lo pre- taba a la zaga de Europa: todos
viera el novelista inglés George los países latinoamericanos sin
Orwel en su magistral novela excepción dejaron de pagar sus
1984-, “quien controla el pasado deudas en algún momento del si-
controla el presente; quien contro-
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glo XIX. En los Estados Unidos, reducción drástica de su deuda


Arkansas y Florida cayeron en ce- externa. “Aunque las estimacio-
sación de pagos tres veces en ese nes varían por la dificultad de fijar
siglo. Mississipi no pagó a sus el monto exacto de las deudas de
acreedores, los tenedores de bo- preguerra y de establecer sus
nos ingleses de 1842. El mismo equivalencias con los nuevos
gobierno de los Estados Unidos Deutsche Marks, las diversas
cuando en 1898 concluyó la gue- fuentes consultadas (Hersel;
rra con España, como potencia de Kampff-meyer; Hútz-Adams; etc.)
ocupación, repudió las deudas en permiten concluir que el valor pre-
que había incurrido Cuba bajo do- sente neto de la deuda total se re-
minio español. La historia econó- dujo en alrededor de un 80 %. Es-
mica indica que durante todo el to resultó de una quita directa su-
decenio de los años 30 del siglo perior al 50 %, del perdón de to-
XX, las principales potencias eu- dos los intereses acumulados
ropeas cayeron en default de sus desde 1934 y de la concesión de
obligaciones en oro y monedas largos plazos de pago a tasas de
extranjeras y quedaron debiendo interés muy inferiores a las del
a los Estados Unidos 34 mil millo- mercado. A la vez la RFA consi-
nes de dólares de aquella época, guió un período de gracia de 5
que nunca pagaron (Conesa, años exentos de pagos, y además
2003:69). se convino que una parte de la
También Toussaint recuerda que deuda se abonase directamente
cuando España perdió Cuba en en marcos” (Nun, 2003). Ello, ade-
manos de Estados Unidos en más de otras consideraciones que
1898, la isla no pagó su deuda por llevaron a tratar cuidadosamente
orden de Washington y el Tratado la capacidad real de pago de la
de París sentó jurisprudencia so- RFA y a no dislocar su economía,
bre deudas odiosas. Costa Rica como tampoco afectar sus poten-
no honró la del dictador Tinoco, ciales recursos en moneda ex-
caído en 1922, tras un fallo de la tranjera.
Corte Suprema de Estados Uni- Desde que la mayoría de los paí-
dos. Y antes, las deudas de Napo- ses de América latina obtuvieron
león, los sudistas de Estados Uni- la independencia en las primeras
dos o el Zar de Rusia no se paga- décadas del siglo XIX, varias de-
ron cuando éstos tuvieron su oca- cenas de suspensiones de pagos
so, porque ni Francia ni los nordis- tuvieron lugar durante las cuatro
tas ni los soviéticos las asumieron grandes crisis de la deuda. Entre
(Clarín, 18 de diciembre de 2003). 1826 y 1850, en la primera crisis,
No se puede dejar de mencionar casi todos los países del continen-
que por el Acuerdo de Londres del te detienen sus pagos. Un cuarto
27 de febrero de 1953, la Repúbli- de siglo más tarde, en 1876, once
ca Federal de Alemania obtuvo la naciones de América latina entran
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en cesación de pagos. La tercera mos tener el más claro y preciso


duró de 1931 hasta finales de los conocimiento sobre este grave
años 1940 y en ese período 14 problema que afecta a la Nación.
países decretan una moratoria. La No se puede aceptar ni es com-
cuarta aún en curso estalló en prensible que la Argentina pueda
1982 y desde ese año hasta el asumir debidamente la defensa
2002, México, Bolivia, Perú, Ecua- de sus intereses, sin exponer fun-
dor, Brasil y Argentina interrum- dadamente las razones éticas, ju-
pen en algún momento el reem- rídicas, históricas, políticas y eco-
bolso por un período de varios nómicas que hacen a su derecho.
meses (conf. Eric Toussaint, Tampoco es creíble que esa de-
“¿Suspensión de pagos o anula- fensa pueda ser realizada de la
ción? Una deuda odiosa”). Actual- mano y con el asesoramiento jus-
mente la República Argentina se tamente de los representantes de
encuentra en default con una gran los que invocan el carácter de
parte de su “deuda externa” y su- acreedores y de los que durante
fre una pesada carga para cumplir décadas lucraron con el negocia-
con el resto, en particular con los do de la pretendida “deuda exter-
organismos financieros internacio- na”.
nales. Está soportando presiones * * * * *
de distinto tipo y se encuentra de-
mandada en tribunales de otros El comienzo de la vida indepen-
países y en organismos arbitrales diente de los países iberoamerica-
por grupos empresarios que tie- nos coincide casi con la aparición
nen participación en las empresas del constitucionalismo escrito. De
de servicios públicos que fueron tal forma, era lógico que los nue-
privatizadas en la última década vos Estados quisieran afirmar su
del siglo XX y que invocan a su fa- personalidad soberana a través
vor los “Tratados de Protección de de un instrumento jurídico de ran-
Inversiones” que se firmaron en go constitucional, que articulaba
ese período. su voluntad de organizar racional
y coherentemente su vida política.
La lucha y el esfuerzo por la ex-
tinción de la deuda externa de los “Para los hombres de coraje se
países postergados en su desa- han hecho las empresas”. Cuando
rrollo socioeconómico forma parte el General San Martín encaró la
de un combate mayor por la justi- suya de libertar la parte austral de
cia y la equidad entre todos los América del Sur, las condiciones
hombres. La exacción externa es de aquel desierto salpicado de pe-
uno de los más perversos elemen- queñas poblaciones que era la Ar-
tos que conducen a la honda crisis gentina resultaban infinitamente
moral, social, económica y política más graves y difíciles que las ac-
que aqueja a la Nación argentina. tuales. Había que hacerlo todo:
Por ello, es elemental que deba- crear confianza en la causa de la
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emancipación, levantar ejércitos y que el general San Martín puso en


edificar instituciones, vencer reti- vigencia en su lucha por la inde-
cencias de los que no veían más pendencia americana, en el “Pala-
allá de su realidad comarcana y cio Protectoral de Lima a 8 de oc-
superar los recelos de los que pre- tubre de 1821”. El mismo pone en
tendían medrar sin importarles las evidencia que el Padre de la Pa-
consecuencias (De Marco, 2003). tria tenía claro cuales deudas se
Como expresó Juan María Gu- debían “honrar”.
tiérrez, “la vida pública del Gene- Hay muchos aspectos que defi-
ral San Martín no puede encerrar- nen el pensamiento jurídico de
se en los términos reducidos de San Martín, según se revela a tra-
una biografía. Ligada a los gran- vés de bandos, edictos, reglamen-
des acontecimientos de la Inde- tos, instrucciones y leyes promul-
pendencia, en que los pueblos gadas en su carácter de Jefe del
son actores a la par de los ejérci- Ejército, de Gobernador Intenden-
tos y en la cual no ha tomado me- te de Cuyo y como “Protector de
nos parte la política que la ciencia la libertad del Perú”. Se puede es-
militar, palpita y se confunde con tudiar específicamente a San Mar-
la historia moderna de casi todo el tín como hombre de derecho, re-
continente americano” (Gutiérrez, correr su actuación legislativa en
1950:20). el Perú y encontrar aspectos no-
La vida de este gran hombre tan vedosos no muy conocidos, lo que
llena de acontecimientos menos demuestra que la personalidad
puede abrazarse en un artículo de del Libertador es inagotable como
estas características. No nos pro- expresión de grandeza y eleva-
ponemos analizar sus triunfos mi- ción de espíritu humano (Argaña-
litares o sus actos heroicos, pues raz Alcorta, 1989).
sólo sobre ello habría demasiado * * * * *
que decir. Sin embargo, vamos a San Martín entró triunfante en “la
ensayar un estudio que resalta Ciudad de los virreyes” el 10 de
sus valores éticos y su coraje en julio de 1821 y desde ese momen-
la lucha por la emancipación de to Lima fue libre. Como medida de
nuestros pueblos y traeremos a la primordial importancia San Martín
luz un documento que no está si- buscaba implantar el sentimiento
quiera mencionado por la historio- de independencia por algún acto
grafía actual, ni tampoco por juris- que ligara los habitantes de la ciu-
tas o políticos, y que enfoca un te- dad con su causa. Por consiguien-
ma de tanta actualidad para nues- te, el 28 de julio se celebraron las
tros pueblos como es el de la de- ceremonias para proclamar y jurar
nominada deuda externa y el po- la independencia del Perú y des-
der constituyente del pueblo sobe- pués de aceptar el ofrecimiento de
rano. Nos referimos al Estatuto una delegación del Cabildo de Li-
San Martín y la deuda odiosa 35

ma, el 3 de agosto de 1821 asu- ese documento, que el general


mió el cargo de “Protector de la li- San Martín ofreció observar y
bertad del Perú”. De tal modo to- cumplir bajo la lealtad de su pala-
ma el mando político y militar de bra y la fe de su juramento, las fa-
los departamentos libres del Perú, cultades que iba a ejercer emana-
adoptando el nombre de “Protec- ban del imperio de la necesidad,
tor”, el mismo que usara José de la fuerza de la razón y de la
Gervasio Artigas para ejercer la exigencia del bien público” (Gutie-
jefatura de “los pueblos libres” del rrez, 1950:63; Speroni, 1975: 156-
litoral (Galasso, 2000:354). 163).
Uno de los primeros y más signi- ¿Cuál era el ambiente en que
ficativos decretos del régimen re- transcurría esta trascendente cir-
volucionario instituido por San cunstancia en la vida del Perú? En
Martín, fue mandar destruir los la oración que ese día 8 de octu-
bustos del rey y los escudos rea- bre pronunciara el doctor don Ma-
les, reemplazándolos por las ar- riano José Arce en ocasión de ce-
mas del Perú, con la leyenda “Li- lebrarse el juramento del Estatuto
ma-Independiente”. Algo análogo Provisorio encontramos estas sig-
había hecho en Buenos Aires la nificativas palabras: “Ocupémo-
Asamblea del Año XIII que la Lo- nos, pues, en estos momentos de
gia Lautaro inspiraba (Rojas, dar gracias a nuestro Pachaca-
1940: 218). mac, al eterno hacedor del univer-
Su acción fue intensa para rom- so (...) ¿Quién creería, oh perua-
per los lazos coloniales y construir nos, al ver vuestras desgracias en
un nuevo orden social. Organizó los años 1810, 1811, 1813 y 1815,
la hacienda pública y reformó el que se habría de efectuar vuestra
sistema de comercio. Abolió el libertad? Pero ellas mismas iban
servicio personal de los indíge- preparando el camino de vuestra
nas, las encomiendas y las mitas felicidad en las manos paternales
“como un atentado contra la natu- de la providencia. Sí. Los clamo-
raleza y la libertad”. En una de sus res y gemidos de los pobres lle-
primeras proclamas declaró la li- gan al trono de la justicia eterna; y
bertad de vientres y emancipó a movidos de ellos el Señor, ‘Yo me
los esclavos que tomasen las ar- levantaré, dice y vengaré a los hu-
mas por la independencia. Fundó mildes de sus impíos opresores -
una biblioteca nacional. Pese a Propter miseriam inopum et gemi-
que podía ejercer poderes absolu- tum pauperum, nunc exurgam di-
tos, autolimitó sus facultades y cit Domininus. Salmo 11, v. 6- (...)
promulgó “un Estatuto Provisional El vencedor de Maipú toma el mo-
que fuese una verdadera constitu- desto título de Protector de la li-
ción reglamentaria de las atribu- bertad del Perú; el poder queda
ciones del Protectorado. Según depositado en sus manos por la
voluntad de los pueblos bien ex-
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presada en sus operaciones y por imprenta, fue organizada abolien-


el sagrado juramento prestado en do la censura previa, sin más res-
este día °Pueblos del Perú! Ya te- tricciones que las que reclamaban
néis un padre de la patria vigilante las circunstancias, pero sometien-
por vuestra ilustración y por vues- do en todo caso la calificación y el
tro bien, cuya única nobilísima juicio a la deliberación del jurado,
ambición es contemplar desde un y fundaba la administración de
honrado retiro vuestra futura felici- justicia independiente “como una
dad” (de la Puente Candamo, de las garantías del orden social”.
1974: 299-303.) Nadie podía ser privado de sus
Bien se expresó que “el Protec- derechos garantidos sino por sen-
torado de San Martín hace época tencia de autoridad competente
en los anales del Perú. Declaró la conforme con las leyes, y es de
independencia, fundó su primer resaltar que en una época de re-
gobierno nacional y bosquejó su volución en que las pasiones de la
constitución política” (Mitre, lucha estaban encendidas, se de-
1946:804). Ensanchando el círcu- clarase que “por traición sólo se
lo de la vida pública -como vimos- comprende conspirar contra la in-
dictó el Estatuto Provisional que dependencia, y por sedición, reu-
resumía todas las facultades y de- nir fuerza armada para resistir las
rechos, diseñaba la estructura de órdenes del gobierno, conmover
poder y con esas normas autolimi- al pueblo o parte de él con igual
taba sus facultades en dicho car- fin, sin que nadie pudiese ser juz-
go. Se daba su propia regla -agre- gado como sedicioso por opinio-
ga Mitre-, ofreciendo, según sus nes políticas. Reconocía, por justi-
palabras, “lo que juzgaba conve- cia y equidad, todas las deudas
niente cumplir, nivelando los de- del gobierno español que no hu-
beres del gobierno con la ley de bieran sido contraídas para escla-
las circunstancias, para no expo- vizar al Perú u hostilizar a los pue-
nerse a faltar a ellos”. Consagraba blos independientes de América, y
en términos absolutos las garan- quedaban en su fuerza y vigor las
tías individuales, mantenía la insti- leyes preexistentes en cuanto no
tución de las municipalidades por contrariasen la independencia del
elección popular; creaba un Con- país y las formas del Estatuto. El
sejo de Estado con voto consulti- Protector juró públicamente el es-
vo; afirmaba “el derecho que com- tatuto, empeñando su honor de
pete a los que disienten de la cumplirlo fielmente” (Mitre, 1946:
creencia católica”; la libertad de 820-821; Gutierrez, 1950:63-641).

1
El texto completo del Estatuto se encuentra en el libro titulado “Una voluntad America-
na. San Martín y Bolívar” (Recopilación de Documentos), editado por el Ministerio de
Educación de la Nación, Buenos Aires, 1983, págs. 41 a 51; un ejemplar de esta pu-
blicación se encuentra en la biblioteca del Instituto Nacional Sanmartiniano. También
en http://www.congreso.gob.pe/dpc/quipu/constitu/1821b.htm )
San Martín y la deuda odiosa 37

Al concluir esta parte transcribi- forma de gobierno adecuada y ve-


remos textualmente dos artículos rificado esto, consideraré haber
del Estatuto que evidencian la hecho bastante y me alejaré”
grandeza y actualidad del pensa- (Hall, 1920,:110-111; Galasso,
miento del Padre de la Patria. En 2000:353).
la Sección última expresamente La otra norma a la cual recurri-
estableció que “El presente Esta- mos en su texto expreso, se trata
tuto regirá hasta que se declare la de aquella que también refiere Mi-
independencia en todo el territorio tre y es la primera que figura en
del Perú, en cuyo caso se convo- los artículos adicionales del Esta-
cará inmediatamente un Congre- tuto: “Animado el Gobierno de un
so General que establezca la sentimiento de justicia y equidad,
Constitución permanente y forma reconoce todas las deudas del go-
de gobierno que regirá en el Esta- bierno español que no hayan sido
do”. En esta norma se refuerza la contraídas para mantener la es-
decisión emancipadora y se reco- clavitud del Perú, y hostilizar a los
noce que sólo el pueblo en ejerci- demás pueblos independientes de
cio del poder constituyente legiti- América”. Su simple lectura nos
mará la Constitución permanente. hace ver la novedad de estos con-
Las razones del general San ceptos y también pone en eviden-
Martín para institucionalizar este cia un elevado criterio ético sobre
principio se encuentran en las pa- las deudas que se debían honrar.
labras que trasmite por entonces Esta disposición se inserta en la
a Basilio Hall: “En los últimos años esencia revolucionaria del desig-
he estado ocupado constante- nio y acción del general San Mar-
mente contra los españoles o me- tín que, como expresó en su Pro-
jor dicho, a favor de este país, clama a los peruanos desde Pisco
porque yo no estoy contra nadie el 8 de septiembre de 1820, tiene
que no sea hostil a la causa de la “a la libertad por objeto y la opre-
independencia. Todo mi deseo es sión por causa” (publicada en la
que este país se maneje por sí Gaceta Ministerial de Santiago de
mismo y solamente por sí mismo”. Chile, el 22 de noviembre de
Para San Martín la cuestión de la 1820, y reproducida en Barcia y
forma de gobierno que definitiva- Trelles, 1946:45-46). Es la defini-
mente regirá el Estado sólo es ción del sentido moral de su lucha
obra del pueblo a través del ejerci- en el proceso de la revolución de-
cio efectivo del poder constituyen- mocrática que impulsaba “contra
te y así se lo manifiesta a Hall: “En los prejuicios, el fanatismo y la ti-
cuanto a la manera de gobernar- ranía”.
se, no me concierne en absoluto. En el pensamiento del general
Me propongo únicamente dar al San Martín institucionalizado en el
pueblo los medios de declararse Estatuto “que ofreció observar y
independiente y de establecer una
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cumplir bajo la lealtad de su pala- yeron grandemente a formar la


bra y la fe de su juramento”, toda conciencia de los hombres de Ma-
deuda contraída para someter al yo fue la emancipación de la Amé-
Perú o en contra de la libertad de rica del Norte, que allí dio el golpe
los pueblos de nuestro continente de muerte al sistema colonial. “La
debía ser rechazada cualquiera revolución de los establecimientos
fuere su pretendido acreedor. ingleses en Norte América y la es-
trepitosa alarma que dio Francia
Segunda Parte al universo, despertaron en las co-
lonias españolas el espíritu de re-
En el primer artículo adicional del sistencia. El entusiasmo con que
Estatuto Provisorio que el general ambas naciones llamaron al géne-
San Martín promulgó en 1821, no ro humano, para que entrase en la
sólo adopta un criterio distinto al época de los grandes sucesos, hi-
texto que sancionó la Constitución zo pensar sobre su suerte a los
de los Estados Unidos en 1787, americanos del Sur” (Monteagu-
sino que además incorpora un do, en O’Donnell, 1998:193).
principio que este país institucio- Otras publicaciones de dicha
nalizará recién en 1868 con la En- época permiten afirmar que la
mienda XIV, Sección 4a, que se le Constitución de los Estados Uni-
introdujo a la Constitución des- dos era conocida por los próceres
pués de finalizada la Guerra de de Mayo (Dürnhofer, 1972:97-
Secesión. No se puede argumen- 118; Sampay, 1975:89), así es
tar que la actitud de San Martín que durante esos días en Buenos
haya sido por desconocimiento Aires se conoció la Constitución
del texto original, pues éste era de los Estados Unidos, adaptada
suficientemente conocido por por Moreno a su ideario de igual-
nuestros próceres. dad, pero con apariencia de tratar-
Es sabido que la primera Consti- se de una traducción, y fue impre-
tución escrita que se sanciona en sa con el título de Constitución fe-
el mundo surge después que las derativa asentada por la ‘Conven-
13 colonias inglesas de América ción del 17 de septiembre de
del Norte logran su independen- 1787’ (v. también, Dürnho-
cia, y que en ella se diseñó un no- fer,1976).
vedoso sistema institucional y se Después de esta edición de la
dio forma a un Estado federal pa- Constitución de los Estados Uni-
ra un gran territorio, lo que fue un dos se hicieron otras, y los pue-
motivo de gran atracción en las blos de habla española no necesi-
colonias españolas de América taron conocer el inglés o el fran-
latina. cés para estudiar al constituciona-
Uno de los acontecimientos y lismo americano. En 1811 se pu-
causas eficientes que contribu- blicó en Cádiz una traducción que
San Martín y la deuda odiosa 39

sin duda sirvió de antecedente al cipalmente las relativas a la orga-


proyecto de Constitución españo- nización constitucional norteame-
la que se imprimió en la misma ricana” (Luna, 1966:60). El jefe de
ciudad ese año y que después se los orientales pertenece también a
convirtió en la Constitución de Es- los argentinos como un protago-
paña de 1812. En Santa Fe de nista mayor de la gesta emancipa-
Bogotá en 1811 apareció otra tra- dora. El “Protector de los Pueblos
ducción hecha por “el ciudadano Libres” estuvo impulsado por una
Miguel del Pombo”. El mismo año obsesión emancipadora que lo
también aparece la que hizo el ca- aparea con San Martín o Bolívar.
raqueño Manuel García de Sena y * * * * *
que se encuentra en su obra “La
independencia de la Costa Firme Ciertamente, no se puede afir-
justificada por Thomas Paine mar que en 1821, al momento de
treinta años ha”, Extracto de sus dictar el Estatuto, San Martín no
obras. Traducción del inglés al es- haya tenido conocimiento de la
pañol por D. Manuel García de Constitución de los Estados Uni-
Sena, Philadelphia, en la imprenta dos de América que había sido
de T. y J. Palme, 1811 (Seco Vi- sancionada en 1787. Por ello, sa-
llalba, 1943:44, en donde señala bía que el artículo VI, en su prime-
que los repúblicos argentinos dis- ra parte había dispuesto que “To-
ponían también otro libro de Ma- das las deudas y compromisos
nuel García de Sena: “La Historia contraídos con anterioridad a la
concisa de los Estados Unidos adopción de esta Constitución se-
desde el descubrimiento de la rán igualmente válidos, por los Es-
América hasta el año 1807”). tados Unidos sujetos a esta Cons-
titución, como lo eran al amparo
Está probado también que a fi- de la Confederación”. Sabía tam-
nes de 1811, Artigas recibe -entre bién que los Estados Unidos ha-
los primeros en el Río de la Plata- bían declarado su independencia
esta versión castellana de la el 4 de julio de 1776 y que los “Ar-
Constitución de los Estados Uni- tículos de la Confederación y de
dos, y dicha publicación incluía Perpetua Unión”, fueron prepara-
asimismo diversos textos de las dos por el Congreso Continental y
constituciones de los Estados que sometidos a los Estados en 1777
integraban la Unión (Demicheli, y ratificados más tarde por sus re-
1971:77). “El caudillo era un hom- presentantes (Peltason, 1987).
bre de letras gordas; tenía solo la Según ese documento los Esta-
elemental instrucción común en la dos Unidos reunidos en Congre-
gente de su medio y de su época. so, tenían facultad para contraer
Pero a medida que sus responsa- empréstitos o emitir bonos sobre
bilidades se lo iban imponiendo, el crédito de los Estados Unidos,
elaboraba y aclaraba su pensa- para construir y equipar una mari-
miento político con lecturas, prin-
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na, para fijar el número de fuerzas dustrializado e influido por la inmi-


del ejército de tierra y para reque- gración, no marchaba de acuerdo
rir de cada uno de los Estados el con el Sur patriarcal, tradicionalis-
contingente que para su forma- ta, defensor de la libre empresa y
ción les correspondiera. Estable- con su economía apuntada sobre
cía así que “todas las cargas de la la agricultura, un rubro que nece-
guerra, como todos los demás sitaba de la muy barata mano de
gastos en que se incurriera para la obra proporcionada por los escla-
defensa común o para el bienes- vos. Las diferencias se ahondaron
tar general y que hubiesen sido paulatinamente y las elecciones
votados por los Estados Unidos de 1860, que dieron el triunfo al
en Congreso reunidos, serán cos- republicano Abraham Lincoln,
teados por un tesoro común ...” precipitaron los acontecimientos.
(Cooley, 1898:98). Estas eran las Entre el 12 de abril de 1861 y el 3
deudas públicas que se declara- de marzo de 1865, en el territorio
ban válidas por el artículo VI, 1a de los Estados Unidos se libró la
parte de la Constitución federal. Guerra de Secesión, que puso
Eran las que en ese marco había sangriento fin a una larga pugna
contraído la Confederación. entre dos ideologías absoluta-
Por ello, podemos apreciar aho- mente opuestas, dos estilos de vi-
ra la grandeza y agudeza del ge- da dispersos, dos formas enfren-
neral San Martín al decidir con su tadas de mirar el futuro de la Na-
criterio de patriota americano las ción (Adams, 1980:62).
deudas que no se debían honrar. Terminada la guerra civil, la En-
Los acontecimientos en América mienda XIV fue propuesta el 13 de
del Norte llevaron a que varias dé- junio de 1866 y ratificada el 9 de
cadas después, en otras circuns- julio de 1868, y dispone: “La vali-
tancias sociales y políticas, se dez de la deuda pública de los Es-
adoptara en nivel constitucional tados Unidos autorizada por ley,
una norma con similar alcance en incluyendo las deudas incurridas
los propios Estados Unidos me- para pagos de pensiones y pre-
diante una reforma a la Constitu- mios por servicios hechos para
ción. Nos estamos refiriendo a la suprimir la insurrección o rebelión,
Enmienda XIV, Sección 4º. no será cuestionada. Pero ni los
Desde los primeros años de Estados Unidos, ni Estado alguno,
existencia de los Estados Unidos, asumirán ni pagarán deuda u obli-
las voces que se alzaban en con- gación alguna, que se haya incu-
tra de la esclavitud o en su defen- rrido para auxiliar la insurrección o
sa mantenían un exacerbado, ás- rebelión contra los Estados Uni-
pero dialogo. Era un gran proble- dos, ni reclamo alguno por eman-
ma que detrás ocultaba otros ma- cipación o pérdida de esclavos;
yores. El Norte proteccionista, in- declarándose que todas esas
deudas, obligaciones y reclamos,
San Martín y la deuda odiosa 41

se considerarán ilegales, nulas y o actos de desapropiación sufri-


sin valor”. Esta Sección garantiza- dos durante la guerra civil, por he-
ba el pago de las deudas adquiri- chos obrados por las autoridades
das durante la guerra civil de la federales. Esta comisión era so-
Unión, pero desconocía todos los berana, es decir que sus decisio-
adeudos contraídos durante la nes no eran susceptibles de ape-
misma por los Estados del Sur. lación, pero además los deman-
“La idea dominante era que la es- dantes estaban sujetos a una re-
clavitud era en sí la causa de la gla rígida: no se admitía ninguna
guerra civil, con todas sus pérdi- intervención diplomática a favor
das y calamidades, y que su des- de los reclamantes extranjeros,
trucción era la destrucción de un pues el sólo hecho de esa inter-
enemigo público, no pudiendo vención diplomática obligaba ipso
surgir de ella ninguna reclamación facto a rechazar sin más análisis
justa” (Cooley, 1898:59). Así ob- el reclamo en cuestión. “Es fácil
servamos que en nivel constitu- imaginar el escándalo internacio-
cional se institucionaliza un crite- nal que se hubiera desatado si en
rio ético sobre las “deudas” que un examen pormenorizado de ca-
deben “honrar” los Estados Uni- da una de las obligaciones exter-
dos. Ninguna que haya servido nas un país latinoamericano hu-
“para auxiliar la insurrección o re- biera obrado del mismo modo”
belión”, ni tampoco reclamo “por (Lozada, 2002:55).
emancipación o pérdida de escla- * * * * *
vos”, puede ser asumida ni, por
tanto, cancelada. San Martín ha- No se puede afirmar que haya si-
bía innovado y su criterio ético ins- do una definición circunstancial en
titucionalizado al más alto rango la vida del General San Martín la
normativo se encuentra ratificado que instituyó en los artículos del
en la Constitución de los Estados Estatuto Provisional de 1821. No
Unidos. El texto de la Enmienda bien llegado al Río de la Plata
XIV, Sección 4º -como veremos- adoptó definidas actitudes en pos
es un claro precedente de “deuda de lograr la independencia y la
odiosa” que no se pagó. constitución. Sus criterios morales
se aprecian como una constante
Al respecto Lozada nos enseña en toda su acción pública y priva-
que Carlos Calvo cita con justifica- da, y se ajustan al principio que in-
do beneplácito una decisión del corporó en el Estatuto sobre la
gobierno de Washington de 1868, deuda que reconocía a España y
según la cual se formó una comi- también aquella que rechazaba.
sión para examinar las reclama- Para su íntimo ámbito personal y
ciones pecuniarias formuladas por la posteridad, en la cláusula 5a de
ciudadanos norteamericanos y su testamento se preocupó en de-
extranjeros en razón de pérdidas clarar expresamente “no deber, ni
42 realidad económica 202

haber debido nada a nadie” (ver nuestra país. El Primer Triunvirato


http://www.siste.com.ar/sanmar- se encaminaba solapadamente
tín.htm). hacia una política medrosa o reac-
Volvamos hacia atrás en el tiem- cionaria; había reprendido a Bel-
po y hacia la ciudad de Buenos Ai- grano cuando enarboló la bandera
res en el espacio, para ratificar nacional en Jujuy; había retarda-
con hechos históricos, en los que do la convocatoria de una Asam-
activamente intervino el general blea general; había intervenido en
San Martín, su constante acción tramoyas electorales que lo des-
para el logro de esos altos objeti- prestigiaron del todo. Esa política
vos. El 9 de marzo de 1812 se ha- errada culmina con la rebelión po-
bía producido el arribo de la fraga- pular y militar del 8 de octubre de
ta George Canning, trayendo a 1812, encabezada por la Socie-
bordo a algunos militares argenti- dad Patriótica y la Logia Lautaro;
nos que habían recibido forma- aquella con Bernardo de Montea-
ción en Europa y que venían a gudo y los jóvenes amigos de Ma-
sustituir a aquellos tribunos que riano Moreno; la otra integrada
sin experiencia y quizás sin voca- por prestigiosos jefes militares.
ción se encontraron en las cir- “Tales errores soliviantaban ya el
cunstancias obligadas de condu- instinto democrático de las ma-
cir tropas, como fue el caso de sas, interpretadas por la Logia
Castelli y Belgrano. Entre los pa- Lautaro en aquel momento, o sea
sajeros estaban San Martín, Al- por San Martín, Alvear y Montea-
vear, Zapiola, Chilavert y otros. gudo, actores nuevos, que iban a
imprimir nuevo impulso a la revo-
Ya se encuentra en Buenos Ai- lución vacilante” (Rojas, 1940:63).
res el teniente coronel José Fran- A la cabeza de sus granaderos -y
cisco de San Martín, plenamente apenas a siete meses de haber
convencido “de la necesidad de llegado al Río de la Plata- San
luchar contra el absolutismo, la Martín “asume claramente el parti-
nobleza, los privilegios y el oscu- do de la Revolución, según la en-
rantismo, de revolucionar la vieja tendía Mariano Moreno, y lucha
sociedad abriendo cauce a for- por reencauzar al gobierno por el
mas, costumbres y valores nue- sendero de Mayo” (Galasso,
vos, siguiendo el ejemplo de los 2000:88).
revolucionarios franceses y es-
pañoles” (Galasso, 2000:66). Ini- El ejemplo de todo un pueblo ex-
cia así su inclaudicable acción li- patriado -el éxodo Oriental de
bertadora en pos de la Patria 1811- ha ejercido lógico y natural
Grande latinoamericana. influjo en ese importante suceso.
Lo mismo que en Mayo, pueblo y
A los pocos meses ocurrieron ejército ocupan la plaza pública y
sucesos de importancia para el reclaman a viva voz la renuncia
posterior desarrollo histórico de del gobierno (Demicheli, 1971:
San Martín y la deuda odiosa 43

33). Sin embargo, existe una dife- independencia y constitución,


rencia esencial con las definicio- coincidiendo con el postulado arti-
nes del Cabildo de Mayo, dada guista de la “independencia abso-
“en el hecho de que a partir del luta”. Proponían los “lautarinos”
movimiento del 8 de octubre la de Buenos Aires organizar la opi-
idea de la independencia y la de nión pública, fortalecer la autori-
dictar una Constitución para el dad, disciplinar la milicia, propa-
nuevo Estado, se encontraban gar la revolución y definir los pro-
perfilados como objetivos que la pósitos democráticos de la eman-
Asamblea General debía tratar” cipación americana. “La fugacidad
(Tagle Achával, 1977:152). de los gobiernos después de
La caída del Primer Triunvirato y 1810, la derrota reciente de los
la asunción del mando por lo que ejércitos patrios y la anarquía de
se llamó el Segundo Triunvirato, los partidos internos, persuadie-
impuesto por los revolucionarios, ron a San Martín sobre la conve-
contenía una promesa de nacio- niencia de una asociación secre-
nalización de la Revolución de ta, acaso no de principios masóni-
Mayo y la responsabilidad de su cos ni de métodos carbonarios,
cumplimiento recaía ahora en la aunque sí inspirada en tales mo-
Logia Lautaro y en la Sociedad delos” (Rojas, 1940:55). Por ello
Patriótica, como inspiradoras de se consideró que se trataba de
la revolución del 8 de octubre y una logia con modalidades masó-
soportes ideológicos del nuevo nicas de forma, pero de fondo y
gobierno. objetivos nacionales (Chávez,
1967:105). “De lo que no cabe du-
Es imprescindible recordar que da es que su objetivo estaba sig-
al poco tiempo de su arribo a es- nado por el liberalismo revolucio-
tas tierras, San Martín, Alvear y nario de la época en pugna con el
Zapiola echan las bases de una absolutismo, la aristocracia y la
logia similar a la de Cádiz, y pue- beatería” (Galasso, 2000:81).
de aventurarse que inicialmente
se llamó “Logia de los Caballeros En el petitorio los revolucionarios
Racionales”, como lo era la gadi- reunidos en la plaza de Mayo exi-
tana (Galasso, 2000:77/79). La gían al Cabildo, “bajo la protec-
Logia Lautaro -como se la conoce ción de las legiones armadas y la
después- se formó como sociedad parte más sana del pueblo”, que
política destinada a encauzar la reasuma el mismo la autoridad
Revolución. Era una especie de que le delegó el pueblo congrega-
continuación de la que existía en do el 22 de mayo de 1810 y ade-
Cádiz y vinculaba a personas na- más, se instituya un poder ejecuti-
cidas en América y que servían en vo que “proceda ulteriormente y
el ejército español. Dicha socie- sin demora a la convocación de
dad secreta tuvo como programa una asamblea general extraordi-
naria que decida de un modo dig-
44 realidad económica 202

no los grandes negocios de la co- cha de facciones en su seno frus-


munidad”. Días mas tarde, el ya trará estos objetivos sostenidos
instituido Segundo Triunvirato por San Martín y por los diputados
emite un manifiesto en el cual re- que en la Asamblea los impulsa-
lata los sucesos ocurridos y afirma ban; en primer término se poster-
los móviles de la independencia y gó la declaración de la indepen-
la constitución, sobre la base de lo dencia y posteriormente la vuelta
que sostenía la Logia Lautaro y la al trono de Fernando VII a fines de
Sociedad Patriótica. Para ello pro- 1813, hace abandonar por com-
picia la convocatoria de una pleto los proyectos constituciona-
Asamblea General con toda la les que se habían presentado en
plenitud y legalidad que las cir- la Asamblea.
cunstancias permiten. Esta Asam- Sin embargo, los ideales susten-
blea tendría “por objeto principal tados por la Logia Lautaro en la
poner límite a la obediencia del revolución de 1812 se patentizan
pueblo, estableciendo la garantía en la obra legislativa que realizó la
de sus derechos y fijando el siste- Asamblea: gobierno representati-
ma que debe regir a las Provincias vo, división de poderes, prerroga-
Unidas, cuya falta de definición no tivas del Congreso, garantías indi-
puede justificarse ni por las dificul- viduales, libertad de imprenta, in-
tades de la empresa ni por los pe- violabilidad del domicilio, abolición
ligros que nos rodean” (Abad de de la esclavitud, de la inquisición,
Santillán, 1966:164/165). la mita, el yanaconazgo, los tor-
De tal modo, el Segundo Triunvi- mentos, emancipación americana
rato el 24 de octubre de 1812 con- y consagración de los emblemas
voca a nuestra primera asamblea argentinos: bandera, himno y es-
constituyente, con el signo inequí- cudo propios. “Estas instituciones
voco de una declaración de inde- que han pasado a la Constitución
pendencia. Formalmente, es el de 1853 son las mismas que San
primer instrumento de nuestra his- Martín estableció en el Perú cuan-
toria constitucional que declara do ejerció el Protectorado” (Rojas,
caduca la autoridad de Fernando 1940:66. Galasso, 2000:106).
VII en el Río de la Plata y necesa- * * * * *
ria la organización de un nuevo
estado independiente. Por lo tan- Es indispensable recordar pala-
to, es la convocatoria a esta cons- bras del General San Martín ex-
tituyente el primer acto oficial que presadas tres años después
contiene un pronunciamiento cla- cuando en el año 1816 estaba ins-
ro e inequívoco en pro de una talado el Congreso de Tucumán y
Constitución Nacional, fundado en aún no declaraba la independen-
la independencia absoluta de la cia nacional. Pero antes es impor-
Nación y en la soberanía inaliena- tante destacar que por muchos
ble del pueblo. No obstante, la lu- motivos, las circunstancias que
San Martín y la deuda odiosa 45

rodeaban las actividades del Con- tado mendocino al Congreso:


greso no eran las más favorables. “Hasta cuando esperamos para
Fernando VII gestionaba ante las declarar nuestra independencia?
otras potencias europeas el apoyo ¿No es una cosa bien ridícula
que necesitaba para recuperar los acuñar moneda, tener pabellón y
dominios de ultramar y no se po- cucarda nacional, y por último, ha-
día prever la conducta que adop- cerle la guerra al soberano de
tarían los miembros de la Santa quien se dice dependemos, y no
Alianza con respecto a las nuevas decirlo, cuando no nos falta más
naciones del continente america- que decirlo? (Mitre, 1946:318/319;
no. Ese peligro puede explicar las Irazusta, 1966:20).
vacilaciones y actitudes de algu- Tampoco se puede dejar en el
nos en aquellos instantes críticos. olvido la Orden General del 27 de
Además, los portugueses inva- julio de 1819, dirigida a los “Com-
dían la Banda Oriental y no se pañeros del Ejército de los An-
adoptaron medidas de resistencia des”, donde expresa: “Ya no que-
efectiva en apoyo a Artigas y los da duda que una fuerte expedi-
pueblos que estaban con él, ni por ción española viene a atacarnos
Buenos Aires ni por las otras pro- (...) La guerra se la tenemos que
vincias. Asimismo, los realistas hacer del modo que podamos. Si
habían tomado la ofensiva en el no tenemos dinero, carne y un pe-
Alto Perú y los ejércitos patriotas dazo de tabaco no nos ha de fal-
retrocedían en derrota después tar. Cuando se acaben los vestua-
del desastre de Sipe-Sipe ocurri- rios nos vestiremos con las baye-
do el 28 de noviembre de 1815. titas que nos trabajan nuestras
Tampoco era brillante la situación mujeres, y si no andaremos en pe-
en el resto del país y varias pro- lota como nuestros paisanos los
vincias rehusaron el envío de di- indios. Seamos libres y lo demás
putados (Abad de Santillán, 1966 no importa nada. Yo y vuestros
211). Jamás el panorama nacio- oficiales os daremos el ejemplo en
nal e internacional se presentó tan las privaciones y trabajos (...)
hostil a la Revolución como, preci- Compañeros, juremos no dejar las
samente, en aquel año 1816. Las armas de la mano hasta ver el
condiciones para declarar la inde- país enteramente libre, o morir
pendencia eran notablemente con ellas como hombres de cora-
peores que las vigentes en 1810 je”. Estos conceptos definen cate-
(Galasso, 2000:171). góricamente la personalidad del
A pesar de todo ello, una vez Padre de la Patria.
constituido el Congreso, San Mar- Independencia, constitución y un
tín empezó a instar -a la par de definido criterio ético sobre las
Belgrano-, por la inmediata decla- deudas que se debían “honrar”,
ración de la independencia nacio- fueron vigorosas bases en el pen-
nal. Escribía a Godoy Cruz, dipu-
46 realidad económica 202

samiento y en la acción del Gene- por el potencial de la Gran Colom-


ral San Martín. Estas metas fue- bia y se hallaba en la cúspide de
ron una constante en los objetivos su poderío” (Suárez, 2003 ). Lue-
institucionales que sostenía, lo go de la entrevista regresa a Lima,
que se encuentra reflejado en los el 20 de septiembre se instala el
documentos que hemos visto. Es- Congreso constituyente y se pro-
pecialmente debemos resaltar duce la renuncia de San Martín.
que fue su férrea decisión la que Dos días después el Libertador
llevó a la sanción del Estatuto Pro- parte rumbo a Valparaíso. Se ale-
visorio de 1821, cuando aún no jó del Perú llevando consigo los tí-
había concluido la guerra de la in- tulos de “Protector” y “Fundador
dependencia. Recordemos que de la libertad del Perú”, que le re-
en él autolimitó sus poderes de conoció la República por él liberta-
gobierno, instituyó en su texto los da, y el Estandarte de Pizarro co-
clásicos derechos del ciudadano, mo símbolo de su victoria (Rojas,
reconoció la soberanía popular 1940:254).
como único medio de legitimar el A los pocos meses, el 28 de fe-
poder constituyente y declaró que brero de 1823 Riva Agüero es
el Perú no reconoce las deudas nombrado primer presidente del
del gobierno español que “hayan Perú y el 20 de junio pide ayuda a
sido contraídas para mantener la Bolívar, quien envía al general An-
esclavitud del Perú, y hostilizar a tonio José de Sucre. El 1º de sep-
los demás pueblos independien- tiembre el Libertador Simón Bolí-
tes de América”. La voluntad san- var llega al Callao y el Congreso
martiniana de rechazar esas deu- le otorga el Mando Supremo del
das adquiridas en perjuicio del ejército independiente. Casi a fi-
pueblo peruano y de los otros nes de ese año, el 12 de noviem-
pueblos del continente se mantu- bre, es sancionada por el primer
vo instituida mientras el “Protector Congreso Constituyente la “Cons-
de la libertad del Perú” estuvo en titución Política de la República
el ejercicio del cargo. Peruana”.
Veamos brevemente el desarro- Pero en ella ya no figura la nor-
llo de los acontecimientos poste- ma rigurosamente preceptiva que
riores y sus consecuencias. El 26 San Martín había instituido sobre
y 27 de julio de 1822 San Martín la deuda pública que se debía
se reúne con Simón Bolívar en la “honrar” y cuál se rechazaba. La
ciudad ecuatoriana de Guayaquil. nueva Constitución sólo deja libra-
El Libertador argentino carecía del do a criterio del Congreso “cuanto
respaldo del gobierno de Buenos estime necesario a la dirección de
Aires, “circunstancia que determi- este importantísimo negocio”
naba el progresivo debilitamiento (art.161; el texto está en
de las tropas bajo su mando, http://www.congreso.gob.pe/mu-
mientras que Bolívar era apoyado
San Martín y la deuda odiosa 47

seo/congreso/padres.pdf ). de los que todavía debemos”, pa-


Aunque diversas circunstancias ra concluir que “aborrezco más las
y documentos emanados en ese deudas que a los españoles”
mismo tiempo del puño del liberta- (Acosta, 2003).
dor Bolívar nos llevan a la conclu- Eran las deudas que durante la
sión de que no habría estado en guerra de la independencia tuvie-
conocimiento de ese cambio en ron que contraer los patriotas para
relación con el Estatuto Provisorio financiar sus ejércitos, y para ello
de 1821. Así, cabe recordar que necesitaron recurrir a círculos eu-
es recién en marzo de 1824 cuan- ropeos inescrupulosos que les
do Bolívar traslada su cuartel ge- proporcionaron créditos en condi-
neral a Huanuco y asume el man- ciones usurarias y equipos bélicos
do supremo del Ejército Liberta- a precios exorbitantes. En el Esta-
dor. Pero antes, cuando fue a Ba- tuto Provisorio San Martín recha-
bahoyo, el 14 de junio de 1823, en zó las obligaciones contraídas por
los momentos en que se prepara- España “para mantener la esclavi-
ba para la campaña que estaba tud del Perú y hostilizar a los de-
por comenzar en el Perú, no podía más pueblos independientes de
dejar de angustiarse por otros pro- América”. Las expresiones de Bo-
blemas que agobiaban a los pa- lívar fueron ante las leoninas cláu-
triotas, y en la carta que le escri- sulas que contenían los presta-
bió al general Santander arreme- mos a los que tuvo que recurrir
tió contra prestamistas y negocia- para sostener la guerra contra Es-
dores, y decía allí que “la deuda paña y dirigidas a prestamistas y
pública es un caos de horrores, de negociadores, que ya le comenza-
calamidades y de crímenes (...) ban a infligir a las nacientes repú-
Colombia, una víctima cuyas en- blicas la pesada coyunda del en-
trañas despedazan esos buitres; deudamiento externo. Eran dos
ellos devoran con anticipación los facetas de un mismo problema.
sudores del pueblo de Colombia; Luego se contrataron nuevas
ellos han destruido nuestro crédito deudas para pagar vencimientos
moral, en tanto que no hemos re- anteriores y así se gestaba la pri-
cibido sino los más escasos auxi- mera crisis de la “deuda externa”
lios. Cualquiera que sea el partido latinoamericana. En 1824 el “can-
que se tome con esta deuda, es to de sirenas” de las libras esterli-
horrible: si la reconocemos deja- nas de la Banca Baring al servicio
mos de existir, si no (...) el opro- de la Corona Británica, atrapa a
bio”. Y un año más tarde dirigién- las flamantes repúblicas america-
dose al mismo Santander, Bolívar nas, y con sus intereses, comisio-
fue aún más categórico, cuando nes y escandalosos negociados,
señaló que “es asombroso lo que el endeudamiento deviene en un
Usted me dice de los pagamentos proceso continuo.
que se han hecho en Colombia, y
48 realidad económica 202

Esos empréstitos surgieron de


una coyuntura impuesta por la ne- Epílogo
cesidad de fondos de las repúbli-
cas hispanoamericanas para sos- Pero todavía queda una última
tener las guerras de la indepen- reflexión sobre el primer artículo
dencia. Pero también muestran adicional del Estatuto Provisorio
cómo ese instrumento sirvió para de 1821, y está relacionada con lo
extraer metálico de nuestros paí- que muchos años después co-
ses y, en su lugar, empapelarlos mienza a denominarse “deuda
de billetes. Las Provincias Unidas odiosa”.
del Río de la Plata, por ese año
En 1898 se desarrollaron los su-
1824, con otras motivaciones tam-
cesos que posteriormente lleva-
bién tuvieron su empréstito con la
ron a conformar la doctrina de la
Casa Baring Brothers. Desde en-
odious debt, que en principio pue-
tonces la operación se repitió in-
de traducirse como la deuda odio-
contables veces y puede asegu-
sa. Aunque también se le ha adju-
rarse que es el signo distintivo de
dicado los expresivos sinónimos
nuestra historia económica (para
de “repugnante, execrable, abo-
ampliar estos conceptos, véase:
minable, detestable”.
Scalabrini Ortiz, 1940; Fitte, 1962;
Rosa, 1964; Ortega Peña y Duhal- Los acontecimientos históricos a
de, 1968; y Vedoya, 1971). que nos referimos transcurren
concluida la guerra de los Estados
Luego vendrían las batallas de
Unidos con España, que llevaría a
Junin (6 de agosto de 1824) y
la independencia de Cuba. Los
Ayacucho (8 de diciembre de
EUA como potencia ocupante de
1824), que obligaron al Virrey La
la isla se opusieron a reconocer la
Serna y a los jefes realistas a ca-
deuda contraída por el gobierno
pitular, y así se cierra el período
colonial español, con el funda-
de las guerras que hacen realidad
mento razonable de ser la deuda
la independencia política de las
inválida dado que había sido im-
naciones hispanoamericanas. Sin
puesta al pueblo cubano sin su
embargo, aún resta cerrar ese ci-
consentimiento y que, además,
clo efectivizando un pleno desa-
los fondos del empréstito no fue-
rrollo económico y social de los
ron usados para beneficio del mis-
países latinoamericanos, que per-
mo. Nacieron por fuerza de una
mita a nuestros pueblos obtener
relación de poder y no fueron de
las mejores condiciones de vida,
utilidad para el pueblo cubano.
tanto materiales como culturales,
Este principio, luego reconocido
para que todos y cada uno de sus
en el derecho internacional, sos-
habitantes puedan realizarse en
tiene que la deuda no es válida si
su plena dignidad humana.
esencialmente ha sido impuesta
por la fuerza. Noam Chomsky, el
San Martín y la deuda odiosa 49

célebre lingüista y politólogo, ba- bía sido contraída con el consenti-


sándose sobre estos sucesos y miento del pueblo peruano ni tam-
principios, en una entrevista radio- poco en su beneficio; por lo con-
fónica transcrita por The Nation el trario, había sido utilizada para so-
24 de abril del 2000, así ha califi- meterlo y sostener el régimen co-
cado a la deuda externa de los lonial, como también para hostili-
países del Tercer Mundo y sostu- zar a los demás pueblos indepen-
vo que ella es en esencia una dientes de América. Ello nos da la
“construcción ideológica” (Lozada, dimensión sobre la grandeza del
2002:83/85). Padre de la Patria y Libertador de
También señala Feinman que Pueblos. Para los argentinos, y en
antes, en 1927, Alexander Sack, general para los latinoamerica-
un implacable especialista inter- nos, este precedente tiene el valor
nacional en deuda pública, defini- de expresar el pensamiento de
ría la deuda execrable en estos quien tuvo el coraje y la firmeza
términos: “Si un poder despótico necesarias para impulsar y soste-
incurre en una deuda, no por las ner la independencia nacional en
necesidades o los intereses del los albores de nuestras historias
Estado, sino para otorgar mayor patrias.
fuerza a su régimen despótico, Debemos tenerlo presente en
para reprimir a la población que se nuestros días y, tomando esos
le enfrenta, etc., esta deuda es conceptos, examinar el resultado
odious para la población de todo que dejaron para nuestro país los
ese país”. Por su lado el econo- empréstitos contraídos por los go-
mista Jeff King resume este con- biernos de facto en la década de
cepto y expresa que “deudas los setenta del siglo pasado, luego
odiosas son aquellas contraídas que el sistema bancario interna-
contra los intereses de la pobla- cional concluye el reciclaje de los
ción de un país y con el completo petrodólares, y nos vienen en ca-
conocimiento del acreedor” (Fein- rácter de préstamos con las exor-
man, 2003). bitantes tasas de interés que en la
Luego de haber examinado el realidad tributaron y con otras
Estatuto Provisorio sancionado cláusulas lesivas al interés nacio-
por el General San Martín en nal; pero también se debe consi-
1821, en su carácter de “Protector derar cómo se contrajeron y cuál
de la libertad del Perú”, podemos fue el resultado de los fabulosos
afirmar que es dicho documento el préstamos que en la posterior eta-
que en primer término y al más al- pa que se inicia luego de conclui-
to rango normativo instituye el do el último período de facto -es-
concepto de “deuda odiosa”. Esa pecialmente en la década de los
era la deuda pública que San Mar- noventa-, fueron utilizados para
tín expresamente rechazó. No ha- sostener un sistema económico
que hundía al país y que sólo be-
50 realidad económica 202

nefició a los pretensos acreedores ticas, pero también sin olvidar la


y a sus comisionistas con las altí- actitud paradigmática del General
simas ganancias que recibieron. San Martín, estamos en condicio-
Tan es así que el último informe nes de sostener que gran parte de
preliminar del Banco Mundial so- la denominada “deuda externa ar-
bre desigualdad en América latina gentina” puede ser conceptuada
incluye cifras escalofriantes, re- como odious debt.
sultado de las políticas de ese pe- En la medida en que el grava-
ríodo. Pero debe dejar algunas men de la deuda afecta de mane-
enseñanzas valiosas. Si América ra crítica el ejercicio de las funcio-
latina se convirtió en el continente nes básicas del Estado, sus efec-
más injusto, la Argentina fue el tos trascienden los límites de una
país con mayor incremento de la relación puramente contractual,
desigualdad durante el decenio, la civil y comercial y adquieren una
que supera el promedio de evidente connotación pública. Si
América latina (Alegre, 2003). la “deuda externa” coloca a la Na-
Asimismo, no puede dejar de re- ción argentina en la desgraciada
cordarse que a partir de 1992 los situación que padecemos, es ele-
gobiernos de los países deudores mental que se debe tener la más
mediante el denominado Plan transparente visión y precisa res-
Brady, fueron compelidos a rene- puesta sobre cómo se llega a esta
gociar el endeudamiento externo real catástrofe que nos asedia.
que padecían -también la Argenti- Sólo por esa vía podremos tener
na- en forma tal que provocara el el conocimiento preciso para dar
implícito reconocimiento forzado respuesta a los planteos que nos
de las deudas ilegítimas, con los realizan los que invocan sus pre-
inaceptables niveles de anatocis- tendidos créditos y, sobre todo,
mo a que había llegado su monto para que nuestro pueblo salga de-
en el momento de la firma de esos finitivamente de esta injusta situa-
convenios y con la finalidad de ción y no la vuelva a padecer en el
brindar a los bancos internaciona- futuro. Lo que la Argentina impe-
les la coartada para disimular su riosamente necesita es una pro-
responsabilidad y colocar como funda investigación sobre la deu-
escudos humanos a millares de da pública externa e interna, y así
tenedores de bonos esparcidos estaremos en condiciones de cali-
por el mundo. Todo ello fue el ne- ficar con precisión en qué medida
cesario mecanismo para la imple- es deuda o por lo contrario una
mentación y ejecución sistemática exacción ilegítima. Un pueblo que
de un plan económico-financiero es víctima de esta circunstancia
que posibilitó la destrucción del debe defenderse.
aparato productivo y un endeuda- Es necesario precisar con clari-
miento inconsulto e ilegítimo. Con dad sus orígenes y no rehuir las
dichos antecedentes y caracterís-
San Martín y la deuda odiosa 51

investigaciones que se deben históricas, económicas y financie-


practicar con ese fin. A esos efec- ras, para sostener con éxito un
tos no sólo será necesaria la inter- debate sobre la pretendida “deuda
vención de los órganos institucio- externa” y hacer valer sus dere-
nales del Estado, sino que tam- chos e intereses. Sin embargo, no
bién se deberá iniciar un profundo podemos dejar de tener presente
examen y confrontar sobre los as- palabras de Alejandro Olmos,
pectos jurídico-institucionales del cuando hace tiempo advirtió que
endeudamiento externo. No se “el tema de la deuda es tabú y una
debe impedir este debate, por lo suerte de sordera colectiva pare-
contrario “es indispensable a la ce haber atacado a quienes se
luz de la experiencia de la deuda instalaron en las más importantes
externa, contraída y acrecentada oficinas del Estado”. Nuestro pue-
irresponsablemente por los gober- blo tiene fundadas expectativas
nantes con desconocimiento de la de que esos conceptos queden
sociedad” (Declaración de los sólo como recuerdo de un pasado
Obispos Católicos, “Ante los de- oprobioso que debemos deste-
safíos del ALCA”, ver texto en rrar.
http: //ar.geocities.com/cea_pren- Por todo ello, consideramos que
sa/docalca.htm). Por eso, debe no alcanza con apelar solamente
brindársele al pueblo argentino la al argumento de las metas fisca-
más amplia información acerca de les y monetarias. El superávit fis-
la enorme “deuda externa” que cal y el crecimiento del PIB son
pesa sobre el país. condiciones necesarias para el
No somos un país pirata o que pago de la deuda legítima que de-
explota a carpinteros estadouni- ba asumir la Nación, pero no su
denses, plomeros alemanes o ju- razón. Si se adopta ese criterio se
bilados japoneses. Por lo contra- cae en el error de enfrentar sola-
rio, es nuestro pueblo el que sufre mente los aspectos cuantitativos y
una permanente exacción de sus no se analiza cómo se inició el
riquezas y tozudamente se le tra- problema. Si el debate sobre la
ta de imponer un endeudamiento “deuda externa” se afronta de
premeditado y apañado por los or- “buena fe” no se puede omitir exa-
ganismos internacionales de cré- minar el origen del endeudamien-
dito, por los bancos que lucraron to y las causas de su evolución.
con la “timba” financiera y por los De lo contrario se debilita la posi-
países de alto desarrollo que sos- ción de nuestro país y se acentúa
tuvieron estas equivocadas e in- la situación de inferioridad en que
justas políticas en este mundo por distintos motivos nos encon-
“globalizado” que nos toca vivir. tramos. Nos deja casi rendidos
La República Argentina tiene so- ante los organismos financieros y
bradas razones éticas, jurídicas, la banca internacional que son
responsables principales de la si-
52 realidad económica 202

tuación presente. flagelo contemporáneo que está


Ciertamente, para fortalecer la llevando al genocidio social de mi-
defensa de nuestros intereses es- llones de seres humanos en este
te tema deberá ser asumido como mundo contemporáneo.
“causa nacional”. Pero ello será No es concebible resignar el
difícil de lograr si no se comienza examen sobre la legalidad y legiti-
por precisar el origen fraudulento midad de los empréstitos, como
de la presunta deuda y a dónde tampoco se puede dejar de deter-
fue a parar semejante suma. minar los índices de responsabili-
¿Quiénes negociaron, en qué dad de los organismos internacio-
condiciones y con qué beneficios? nales de crédito y de los bancos
No se puede callar el derecho que colocadores de bonos. La “deuda
nos asiste y prescindir de múlti- externa” se debe renegociar sobre
ples exhortaciones, declaraciones la base de una investigación pro-
y documentos que, a propósito del funda y rigurosa. Por supuesto ha-
endeudamiento a que están so- cer realidad este objetivo no es
metidos numerosos países, efec- una tarea nada fácil ¿Acaso se
túan calificadas personalidades, puede creer que fue sencilla la
organizaciones sociales, entida- gesta heroica de San Martín: for-
des eclesiásticas y diversos foros mar un ejército, atravesar las más
internacionales que luchan para altas cumbres de los Andes y gol-
que termine definitivamente este pear en el centro mismo del impe-

rio colonial español?


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