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UNIVESIDAD TECNOLOGICA DEL CIBAO ORIENTAL.

PRESENTADO POR:
HECTOR LUIS DIAZ MEDINA.
MATRICULA:
2016-1890.
ASIGNATURA:
HISTORIA DE LAS IDEAS POLITICAS II.
PROFESOR:
RAFAEL AUGUSTO GUZMÁN MARÍA.
TEMA:
ACTIVIDAD #1, UNIDAD I.
Introducción.

Debemos decir que tales conceptos van dirigidos a defender la orientación del régimen democrático
basado en el ejercicio independiente de los tres poderes en que se fundamenta HISTORIA DE LAS IDEAS
POLITICAS el republicanismo, subrayando que la existencia de la República Dominicana obedece a la
determinación de sus nacionales a ejercer plenamente sus derechos a ser libres. El pueblo dominicano se
organizó como Nación independiente el 27 de febrero de 1844. El marco político que cubrió su nacimiento
fue el republicano, y el modelo a seguir dividió los poderes públicos siguiendo la tradición americana, en
Poder Ejecutivo, Poder Judicial y Poder Legislativo. El acta de su primera constitución política proclamada
en noviembre de ese mismo año fue una copia arreglada de la Constitución haitiana de 1843, que a su vez
fue copia, adaptándola a su realidad, de la constitución norteamericana. La influencia del liberalismo
americano la generación de los dirigentes políticos independentistas fue tan evidente, que incluso los
primeros párrafos de la "Manifestación de los pueblos de la Parte Este de la Isla Española, Santo Domingo,
sobre las causas de su separación de la República Haitiana", de enero 16 de 1844, transcriben no sólo los
fundamentos en que se basa la declaración americana de 1776.

Desarrollo.
Influencia en Santo Domingo español de la Revolución francesa y las luchas
antiesclavistas del Santo Domingo Frances.

La denominada “era de Francia en santo domingo” es el periodo comprendido de 1802 a


1809, y se debió a varias razones, entre ella la decidida actitud del general de brigada Jean Louis
Ferrand de no rendirse a los negros ni entregarse a los ingleses cuando Dessalines proclamo a la
independencia de Haití.

La Revolución Francesa, influye de manera muy diferente en territorios tan cercanos


como la isla española y la de Trinidad. En Santo Domingo tuvo un impacto directo mucho más
fuerte que en ninguna otra colonia española, y sus consecuencias resultaron bastante negativas,
llevando a la ruina a una economía que empezaba a transformarse, mientras la población
descendía de forma alarmante. Por el contrario, en Trinidad, donde el impacto de la Revolución
se dio de manera indirecta, favoreció la política de colonización impulsada por la Corona,
contribuyendo al incremento de población que se había iniciado poco antes, lo que resultaría
determinante para la evolución de la agricultura y el comercio.

La colonia perdió dos tercios de su población y la casi totalidad de las familias


aristocráticas más antiguas y tradicionales de la isla; además la población dominicana pasó de ser
mayoritariamente blanca a ser esencialmente mulata. En Santo Domingo tuvo un impacto directo
mucho más fuerte que en ninguna otra colonia española, y sus consecuencias resultaron bastante
negativas, llevando a la ruina a una economía que empezaba a transformarse, mientras la
población descendía de forma alarmante.

Los puntos más destacados de colaboración entre Francia y la República Dominicana en


el siglo XX fueron el establecimiento del sistema de telégrafos, el establecimiento de la Alianza
Francesa en el año 1914, la construcción de la Basílica Catedral Nuestra Señora de la Altagracia,
en Higuey

La Constitución Haitiana del 1801.

Durante varios meses, la isla estuvo bajo control francés. El 20 de mayo de 1802, por
decreto de Bonaparte, se restableció la esclavitud en Haití. En octubre de 1802, Petion y
Desaliñes se rebelaron nuevamente. Al mismo tiempo, se inició una epidemia de fiebre amarilla,
de la que murió Leclerc, y una parte importante de su cuerpo (20 mil personas). En mayo de
1803, los rebeldes de la facción mulata y la facción negra se unieron en una reunión conocida
como la "convención de Arcahaie", donde los rebeldes consolidaron el poder en un general,
Juan-Jocobo (Jean-Jacques) Dessalines. Fue en esta reunión que se creó la bandera haitiana
rasgando la bandera francesa en tres, descartando la parte blanca (que simboliza la eliminación
de los franceses), y uniendo las bandas roja y azul para mostrar la unidad entre las poblaciones
negra y mulata. En 1803, Gran Bretaña, que reanudó la guerra con Francia un año después del
Tratado de Paz de Amiens, comenzó a ayudar a los rebeldes. El bloqueo británico de Haití hizo
imposible que los franceses enviaron refuerzos a la isla. El 18 de noviembre de 1803, los
franceses son finalmente derrotados y el 29 de noviembre abandonan la parte occidental de Haití.
Parte de la fuerza expedicionaria, incluido su nuevo comandante Donacien Rochambeau, fue
capturada por los británicos. Pero los franceses pudieron mantener el control sobre Santo
Domingo, la parte oriental de la isla.

El 7 de julio de 1801, la Asamblea Colonial adoptó una constitución, según la cual Santo
Domingo seguía siendo posesión de Francia, pero recibió autonomía, y Toussaint-Louverture se
convirtió en gobernador vitalicio. Finalmente se abolió la esclavitud. Pero el primer cónsul de
Francia, Napoleón Bonaparte, se negó a reconocer la constitución y al final del año envió una
fuerza expedicionaria bajo el mando de su cuñado Charles Leclerc a la isla para restaurar el
poder francés. El 29 de enero de 1802, Leclerc desembarcó en Haití con su ejército. A él se
unieron los mulatos Rigo y Petion. Muchos de los aliados de Louverture se pasaron al lado
francés, incluido su socio más cercano Jean Jacques Dessalines. El 5 de mayo, Louverture aceptó
una tregua propuesta por Leclerc, quien prometió no restaurar la esclavitud. Louverture fue
puesto bajo arresto domiciliario en su finca, y el 6 de junio, por orden de Leclerc, fue enviado
con su familia a Francia, donde murió el 7 de abril de 1803.

Las Insurrecciones antiesclavistas en el Santo Domingo Español.

En las postrimerías del Antiguo Régimen, la trata atlántica de esclavos, la extensión de


las plantaciones y el tráfico marítimo y comercial derivado, alcanzaban su plenitud. Algunos de
los procesos de acumulación de capital, división del trabajo y producción a escala que
configuraron el lanzamiento del capitalismo se encuentran relacionados con el desarrollo de este
sistema esclavista moderno de producción de mercancías. En ese contexto, la influencia y la
extensión de las ideas y experiencias que cuestionaban el Antiguo Régimen circulaban por el
Atlántico como lo hacían las mercancías y los seres humanos considerados como tales; tal
circulación era pareja al crecimiento de la conflictividad entre los esclavos y sus amos, ya que
conforme crecía el comercio de mercancías producidas en las plantaciones, también lo hacían la
trata y la exigencia de mayor productividad a la mano de obra esclava. Esa conflictividad, se
alimentaba tanto de las experiencias culturales y de organización social que los esclavos traían
consigo desde África, como de las posibilidades para la expresión del malestar que el propio
sistema de encuadramiento colectivo de las plantaciones ofrecía. Dicha conflictividad, en
diferentes grados, había existido con diferentes expresiones desde el comienzo de la trata
atlántica en el siglo 5 XVI, con motines, rebeliones localizadas y episodios recurrentes,
conocidos como cimarronaje, de grupos de esclavos huidos que se organizaban establemente
para subsistir y resistir a sus perseguidores. En las décadas finales del siglo XVIII, a esa
conflictividad creciente dentro del sistema esclavista, se añadió la que prendió entre plantadores
y administradores coloniales, entre la burguesía comercial y marítima partidaria del pacto
colonial basado en el monopolio y los sectores emergentes de esa misma burguesía situados en
las propias colonias que pugnaban por la libertad de comercio. Dentro de la jerárquica sociedad
esclavista, sus diferentes grupos por encima de los esclavos, es decir, negros y mulatos libres,
pequeños propietarios y comerciantes blancos, miembros de los niveles inferiores de la
administración, trataban de aproximarse al nivel de los grandes plantadores y de la burguesía
comercial. Todos intentaban reinterpretar a su favor los cambios que la crisis del Antiguo
Régimen y la reorganización de los tableros de poder internacionales estaban introduciendo en el
mundo atlántico. Cuando los procesos se aceleraron, a partir de la independencia de las Trece
Colonias y del estallido de la Revolución Francesa, los esclavos observaron cómo los conflictos
entre los diferentes grupos de la sociedad que les tenía como base crecían, sin contar con ellos,
observaron también como esos enfrentamientos rompían los sistemas tradicionales de
organización de la estructura social. Ese aprendizaje, transformó la conflictividad y el malestar
creciente en las plantaciones en una serie de rebeliones nunca antes conocidas en la sociedad
esclavista, que se produjeron en la economía de plantación más rica y desarrollada hasta el
momento: la colonia francesa de Saint-Domingue. Ésta ocupaba la tercera parte occidental de la
segunda gran isla de las Antillas: La Española. Tras trece años de rebeliones y guerras contra tres
potencias europeas, Francia, Reino Unido y España, en 1804, los esclavos sublevados
proclamaron la independencia pasando a ser el segundo estado independiente de América. Saint-
Domingue se convirtió en Haití. Los efectos que tales acontecimientos causaron fueron
perdurables, y condicionaron el futuro de la trata atlántica, el papel y organización de las
colonias productoras de mercancías coloniales, los procesos posteriores de independencia
americana, entre otras cosas. Condicionaron también la política americana de la Monarquía
Católica en los momentos finales de su propia existencia, durante el reinado de Carlos IV.
La esclavitud africana y la trata asociada, jugaron también un papel de importancia en la
América española desde los inicios de la colonización. El debate sobre la condición legal de los
indígenas conquistados, así como la necesidad de hacer frente a su brutal caída demográfica,
efecto de la conquista, que se produjo a lo largo del siglo XVI, favorecieron el efecto de
fomentar la sustitución, o el complemento de la mano de obra indígena con la esclava africana.
Los esclavos negros llegaron a todos los rincones de la América española, pero no en la misma
cantidad, ni con los mismos cometidos. En las zonas que quedaron prácticamente despobladas de
indios como las islas caribeñas, o con escasa población indígena, se hicieron cargo de las
incipientes economías de plantación que fueron consolidándose, sobre todo en Venezuela,
durante el siglo XVIII. En las zonas de gran producción minera y agricultura y ganadería
extensiva, su presencia e importancia como mano de obra fue subsidiaria a la de los indígenas, o
se concentró en las explotaciones de productos coloniales que también surgían

Sin contradicción con lo anterior, la esclavitud africana y la trata asociada, jugaron


también un papel de importancia en la América española desde los inicios de la colonización. El
debate sobre la condición legal de los indígenas conquistados, así como la necesidad de hacer
frente a su brutal caída demográfica, efecto de la conquista, que se produjo a lo largo del siglo
XVI, favorecieron el efecto de fomentar la sustitución, o el complemento de la mano de obra
indígena con la esclava africana. Los esclavos negros llegaron a todos los rincones de la América
española, pero no en la misma cantidad, ni con los mismos cometidos. En las zonas que
quedaron prácticamente despobladas de indios como las islas caribeñas, o con escasa población
indígena, se hicieron cargo de las incipientes economías de plantación que fueron
consolidándose, sobre todo en Venezuela, durante el siglo XVIII. En las zonas de gran
producción minera y agricultura y ganadería extensiva, su presencia e importancia como mano
de obra fue subsidiaria a la de los indígenas, o se concentró en las explotaciones de productos
coloniales que también surgían en estos territorios, como las plantaciones de azúcar de la costa
peruana.

Colonialistas e Independentistas en el marco de la reconquista.

Sus principales protagonistas fueron los reinos cristianos de Asturias-


León, Castilla, Navarra, Aragón y Portugal. El avance de estos reinos fue un proceso lento y
discontinuo en el que se alternaron etapas de expansión con otras de estabilización de las
fronteras.

Desde fines del siglo XI la reconquista estuvo animada por el espíritu de cruzada que
predicó el Papado a partir de 1095. Por esta razón, durante los siglos XII y XIII los reinos
cristianos de la península ibérica recibieron la ayuda de los Caballeros Templarios y de la Orden
de San Juan de Jerusalén.

Los siglos de la Reconquista fueron tiempos de guerras y conflictos entre cristianos y


musulmanes, pero también de coexistencia pacífica, intercambios comerciales y fusión de las
culturas hispano visigoda, árabe, andalusí y norafricana. Los principales protagonistas de la
Reconquista fueron los siguientes:

 Don Pelayo (…. – 737): primer rey de Asturias, quien ganó la batalla de Covadonga en el
722.
 Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid (1048 – 1099): líder militar castellano que logró conquistar
la ciudad de Valencia en 1094. Sus hazañas están narradas en el Cantar del mío Cid.
 Jaime I, el Conquistador (1208 – 1276): rey de Aragón, conquistó Valencia y las islas
Baleares.
 Reyes católicos (1479 – 1504): matrimonio integrado por Isabel de Castilla y Fernando de
Aragón. Unieron sus reinos, concluyeron la Reconquista y dieron impulso a la expansión
ultramarina.

La Influencia de la Constitución Española de Cádiz.

La Constitución de Cádiz fue fundamental para el desarrollo de los principios del


constitucionalismo moderno en Iberoamérica. Su influencia, no obstante, fue muy dispar en la
historia constitucional del conjunto de Estados que resultaron del proceso de disgregación de la
América española.
La Constitución de Cádiz de 1812 provocó limitar el poder de la monarquía, la abolición
del feudalismo, la igualdad entre peninsulares y americanos y finalizó la Inquisición española.

La Lucha de los pueblos Sur- americano.

En América, los pueblos indígenas luchan por mantener una existencia digna en medio de
numerosas formas de injusticia sistémica, y quienes defienden sus derechos son víctimas de
ataques violentos e intimidación.

La Inquietud política durante el periodo de la España Boba. Los


Ideales políticos de Núñez de Cáceres y la Filosofía de Rousseau del Derecho
Natural.

Durante el período que siguió a la Reconquista (España Boba), ocurrieron varias


conspiraciones orientadas a derribar el poder español, especialmente durante los años 1810, 1811
y 1812, años en que la situación económica se volvió insoportable.

Probablemente Núñez de Cáceres y la mayoría de sus camaradas, en concordancia con su


postura liberal, aspiraban a abolir la esclavitud, por lo que él mismo otorgó en los días siguientes
cartas de manumisión a todos sus esclavos.

La filosofía general de Rousseau está centrada en que el hombre es bueno por naturaleza,
pero la sociedad lo esclaviza y corrompe. El hombre natural es un ser humano libre, motivado
por conservar su bienestar (amour de soi) y limitado por la piedad (pitié).

La Constitución Haitiana de 1816 durante el periodo del régimen de


Boyer.

La Constitución Haitiana del 1816, tuvo puntos muy importantes sobre la libertad de los
hombres, debido a que Haití fue la primera nación de color que se independizó,
esta constitución reconoció los derechos del hombre resumiéndolos en cuatro: La libertad, la
igualdad, la seguridad y la propiedad
La Aparición del pensamiento liberar: Juan Pablo Duarte.

Duarte sentó las bases para el advenimiento de una República que como estado
democrático garantizara la igualdad de oportunidades y la libertad de sus ciudadanos.

Los Ideales Duartianos.

El Instituto Duartiano fue creado el 26 de enero de 1964 por un grupo de notables


personalidades que tenían la visión de propulsar y mantener vivos los cimientos patrióticos del
Padre Fundador de la República, Juan Pablo Duarte.

La Influencia de la Declaración Americana de 1776 en la Manifestación


de enero de 1844.

Los valores liberales y federales que impulsaron la independencia de Estados


Unidos tuvieron un efecto inspirador en los criollos latinoamericanos, prontos para rebelarse ante
el Imperio Español. Sin embargo, las ideas que crecían entre los estadounidenses también
provocaron preocupación en el sur.

Conclusión

Al concluir podemos ver que en esta unidad tratamos lo que fue la etapa que curso la
republica dominicana del colonialismo al liberalismo independentista.

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