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Reportaje

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Artículo, por Adrián Macías


WhatsApp (poco a poco) en la biblioteca
No cabe duda de que las tecnologías de la información y la comunicación (las TIC), han ido
mejorando progresivamente aspectos de la gestión bibliotecaria como el proceso técnico, la
atención al usuario y la formas de realizar las acciones de marketing, conforme se han ido
incorporando al día a día de la biblioteca.

Adrián Macías / Desiderata


gratuitos disponibles para mejorar el
servicio y que el usuario sienta que la
biblioteca existe para responder a sus
demandas de información, empleando
aplicaciones en los que ellos mismos
tienen mayor presencia a medida que
pasa el tiempo. No obstante, más allá
de la frontera de una biblioteca muni-
cipal, el uso de estas herramientas sin
una configuración específica acaban
quedándose cortas en grandes biblio-
tecas o en bibliotecas universitarias.
Por eso en estos casos, se utilizan sis-
Gracias a los medios sociales online nes interdependientes que se ocupan temas integrados de gestión bibliote-
y a los dispositivos móviles, en par- de la totalidad de las funciones que caria que ofrecen el mayor grado de
ticular, la biblioteca ha comenzado a una biblioteca necesita llevar a cabo automatización posible y por ello mu-
tener un trato cada vez más estrecho y para una óptima gestión, como puede chos de los logros que en su gestión
personalizado con el usuario, no solo ser el caso de las bibliotecas univer- diaria un <<bibliotecario de pueblo>>
basado en la mera comunicación o sitarias, más proclive es a buscar al- consigue con WhatsApp serían muy
consulta de información, sino que los ternativas en la infinidad de aplicacio- complicados de extraporlar a una bi-
medios sociales y algunas aplicacio- nes que están disponibles para su uso blioteca universitaria.
nes móviles como WhatsApp se han libre en la red. A modo de ejemplo,
convertido en un canal válido para empleará seguramente Google Drive En el caso de la biblioteca pública,
que la información que se intercambia para almacenamiento e intercambio WhatsApp ha permitido al bibliote-
a través de ellos sirva de complemen- de documentos de trabajo, creará un cario comunicarse de tú a tú con el
to a servicios bibliotecarios como el blog del tipo http://mibiblioteca.wor- usuario para transmitir informaciones
de referencia, el de préstamo o el de dpress.com porque en su ayuntamien- tan variadas como un recordatorio de
extensión cultural. Aunque quizá es to solo le habrán dado una pequeña la fecha de devolución, las nuevas
pronto para que la facilidad y la uti- sección estática y escondida en la actividades de extensión cultural, el
lidad con la que un bibliotecario mu- página oficial del consistorio, creará horario de verano de la biblioteca o
nicipal incorpora este revolucionario un perfil personal en Facebook y lo las novedades adquiridas. A su vez, el
sistema de mensajería, <<facilón>> usará como página con la finalidad de usuario puede contactar por este me-
de usar y gratuito, lo haga de la mis- conseguir amigos rápido y quizá em- dio para reservar un libro o renovarlo
ma forma una biblioteca universitaria. plee Pinterest o similar para exponer (para notificar de ello al bibliotecario
las novedades, y todo ello indicará con el que tiene una relación cercana),
Cuanto menos automatizada está una que el bibliotecario de esa biblioteca puede apuntarse a una comida social
biblioteca, y con esto me refiero a que es un entusiasta de su profesión y que organizada en la propia biblioteca,
no posee una estructura de aplicacio está dispuesto a utilizar los recursos puede consultar si hay libros de física

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Reportaje

de primero de bachillerato y si hay préstamo de portátiles. una desiderata o una renovación fuera del ámbito de <<Mi
En estos casos es probable, incluso, que el bibliotecario cuenta>>. Además, de que a pesar de que podemos contar
esté empleando su propio móvil, porque le será más có- 15 bibliotecas que en la actualidad tienen activo el servi-
modo ya que con muchos de esos usuarios coincidirá en la cio, no se puede decir que se trate de un servicio que en
taberna del pueblo para tomar un chato de vino, se irá de todos las ocasiones ofrezca resultados. Tal y como ha com-
pesca los domingos o serán casi familia. Por lo que What- probado Sandra Clemente, algunas bibliotecas universita-
sApp se ha vuelto una herramienta esencial de comunica- rias no contestan los mensajes, otras te derivan al correo
ción en contextos sociales en los que a pesar de las peque- electrónico (doble trabajo entonces), en algunos casos no
ñas distancias, casi cualquier persona está acostumbrada admiten consultas fuera del horario de la biblioteca y tan
a ir motorizada a casi cualquier sitio (eso pasa mucho en solo en contadas ocasiones utilizan indicadores estadísti-
los pueblos andaluces). La inmediatez que proporciona cos para valorar el uso de este medio.
esta aplicación de mensajería se ha vuelto esencial puesto
que las personas de los pueblos y de las pequeñas ciudades La parte negativa es la poca o escasa animosidad que se
otorgan un gran valor a su tiempo libre y tienen a la bi- percibe en las bibliotecas universitarias para ampliar el uso
blioteca integrada como un componente más de su rutina. de la herramienta, teniendo en cuenta que se trata de la
En algún momento del día pasarán por la biblioteca para segunda red social en uso después de Facebook. En este
hacer una gran variedad de actividades, incluyendo charlar tipo de bibliotecas donde toda la gestión está automatiza-
animadamente con la bibliotecaria. da, la utilización de soluciones que requieren el trato per-
sonal con el usuario resultan chocantes, sobre todo en el
Por lo anterior, más si cabe, WhatsApp debería ser una caso de WhatsApp que requeriría disponer de un dispo-
heramienta fundamental para que el usuario no tuviera sitivo telefónico especialmente habilitado y de personas
que acudir innecesariamente a la biblioteca, permitiéndole especialmente encargadas para contestar consultas a veces
economizar su valioso tiempo distribuido en miles de ta- demasiado específicas para las que ya hay mecanismos ha-
reas, la mayor parte de ellas estresantes. Sin embargo, los bilitados como el perfil <<Mi cuenta>>. En cambio, como
sistemas de información que se emplean en las bibliotecas se percibe en el libro Biblioteca pública: mientras llega
universitarias aún no permiten integrar automáticamente el futuro -escrito por Fernando Juárez- para la biblioteca
la información que llega por WhatsApp de forma que no pública WhatsApp ha supuesto un ‘soplo de aire fresco’,
consista en un corta-pega como haría cualquier persona, ya que ha permitido al bibliotecario <<llegar directamente
pero eso no justificaría la elevada cantidad que la insti- al bolsillo del usuario>>, manteniendo una comunicación
tución ha gastado en programas informáticos que requie- directa y personalizada, mediante el uso natural de la pla-
ren que la información llegue por canales donde pueda ser taforma tecnológica. La aplicación amplifica la labor bi-
capturada para la realización eficiente de sus procesos ad- bliotecaria valiéndose únicamente de móviles conectados
ministrativos. Así, como mucho, a lo máximo que llegan a Internet, incluso llegando a aquellos usuarios que no uti-
en la actualidad es a crear un grupo para resolver dudas lizan las redes sociales. ¡Todo el mundo tiene WhatsApp!
y consultas inmediatas (pero que al final te animan a que E incluso ahora, gracias a la extensión WhatsApp Web, es
utilices el correo electrónico) o bien a crear una lista de posible la transmisión de grandes conjuntos de informa-
difusión o un grupo relacionado con un club de lectura en ción (como la sinopsis de un libro o una receta de cocina)
concreto. Es decir, nada que ver con el listado de posibili- no resultan labores tediosas, que tan solo unos años antes
dades que señalaba Julián Márquina en su artículo <<¿Uti- había que realizar con el minúsculo teclado de un smar-
lizarías Whatsapp en la estrategia de comunicación de tu tphone.
biblioteca?>>, referido a listas de difusión; servicio de re-
ferencia digital; clubs de lectura; grupos de debate; comu- Referencias
nicación interna entre trabajadores; avisos y recordatorios
CLEMENTE, Sandra. Tienes WhatsApp de tu biblioteca. BiblogTeca-
a los usuarios y buzón de sugerencia, que es más propio de rios. 7 de junio de 2017. Recuperado de http://www.biblogtecarios.es/
las bibliotecas públicas, como lo demuestran los grupos de sandraclemente/tienes-whatsapp-biblioteca/
WhatsApp establecidos por los bibliobuses de Cuenca por
cada municipio al que acuden. JUÁREZ, Fernando. Biblioteca pública. Mientras llega el futuro. Bar-
celona: UOC, 2015

La inmediatez y la transmisión informal de la comunica- MÁRQUINA, Julián. No muchas bibliotecas aprovechan el poten-
ción resultan de momento incompatibles con los canales cial de Whatsapp. Julianmarquina.es. 1 de marzo de 2016. Recupera-
y las aplicaciones de gestión de la información propias do de http://www.julianmarquina.es/no-muchas-bibliotecas-aprove-
chan-el-potencial-de-whatsapp/
de la biblioteca universitaria. No creo que en la mayoría
de los casos el usuario de estas bibliotecas pueda realizar

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