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Tema 26.

Úlceras por presión: Concepto, proceso de formación, zonas y factores de riesgo.


Medidas de prevención y protección, higiene y cambios posturales.
Las úlceras por presión (UPP) son:
✔ Lesión circunscrita y abierta en piel o en mucosa.
✔ Lesión frecuentemente de origen isquémico en piel y tejidos subyacentes, que se
producen por presión anormal y sostenida, en general contra planos óseos.
✔ Multiforme
✔ Existe pérdida de tejido en el epitelio.
✔ De escasa tendencia a la cicatrización espontánea
LAS ÚLCERAS PUEDEN Y DEBEN PREVENIRSE
Prevenir, cuidar y disminuir la incidencia de las úlceras por presión significa buena calidad
asistencial.
Realizar registros para control y evaluación.
Las UPP se deben principalmente a una presión prolongada que ocluye el suministro de
sangre a los tejidos. Se definen como áreas localizadas de necrosis tisular que se desarrolla
cuando un tejido blando es comprimido entre una prominencia ósea y una superficie externa
por un período prolongado de tiempo. Esto oprime la circulación sanguínea de la zona con la
consiguiente isquemia y daño tisular, provocando una solución de continuidad de la piel y
necrosis subyacente, ambos factores favorecen la infección y con ello mayor daño local y
riesgo de sepsis.
LA PIEL
✔ Órgano más grande del cuerpo.
✔ Protección contra calor, luz y lesiones
✔ Regula la temperatura del cuerpo
✔ Almacena agua y grasa
✔ Es un órgano sensorial
✔ Impide la pérdida de agua
✔ Evita el ingreso de bacterias
Constituida por 3 capas
✔ Epidermis
✔ Dermis
✔ Hipodermis
EPIDERMIS
Mide de 0,4 a 1,5 milímetros de espesor. Las palmas de las manos y las plantas de los pies
son las dos únicas zonas en las que la epidermis es más gruesa; está compuesta por cinco
capas (abajo – arriba): Basal o germinativa-Espinosa-Granulosa-Estrato lúcido-Capa córnea.
DERMIS
Se encuentra debajo de la epidermis, compuesta por terminaciones nerviosas, vasos
sanguíneos, glándulas sebáceas y sudoríparas, colágeno y elastina. Gracias a las
terminaciones nerviosas de esta capa sentimos lo que tocamos. Mide unos cuatro milímetros.
Dividida en tres zonas: Papilar- Reticular-Profunda
HIPODERMIS
Es la capa más profunda. La mayoría de las células que la componen almacenan grasa con el
objetivo de mantener el cuerpo a la temperatura ideal. Para esa función cuenta con las
glándulas ecrinas y apocrinas. (producen sudor). El tejido adiposo de la capa subcutánea del
abdomen puede alcanzar un grosor de 3 cm. Aquí nace el cabello. (excepto los labios, las
palmas de las manos y las plantas de los pies).
➢ ALTERACIONES DE LA PIEL: TIPOS DE LESIONES CUTÁNEAS
✔ Primarias: se forman sobre piel sana
✔ Secundarias: origen en alteración patológica previa
Primarias
✔ Vesícula: lesión elevada, circunscrita, de contenido seroso o hemorrágico, menor de
0’5 cm.
✔ Ampolla o flictena: lesión de similares características que la vesícula, pero mayor de
0’5
Secundarias
✔ Ulcera: lesión deprimida por pérdida de epidermis, dermis y tejido celular subcutáneo.
*Clasificación según su origen *Clasificación según la
profundidad
Por Presión (UPP)
✔ Venosas
✔ Arteriales
✔ Mixtas
✔ Diabéticas
✔ Iatrogénicas
✔ Oncológicas

✔ Estadio I: Caracterizado por un enrojecimiento persistente sobre una prominencia
ósea. Este eritema indica que se ha llegado al límite de tolerancia de la piel a la
presión, por eso, esta fase constituye el punto de alarma inicial para la formación de
una ulceración, y representa la única fase reversible de la misma. Durante esta fase, si
se elimina la presión persistente, conseguiremos evitar la aparición de una necrosis
tisular profunda que constituiría el punto de partida de una UPP. Por eso, durante esta
fase, los esfuerzos terapéuticos deben ir encaminados a la prevención, para se deben
utilizar productos que mantengan la zona hidratada y procurar mucha movilidad.
✔ Estadio II: Si continúa la presión, se producirá una necrosis tisular de la parte de
tejido comprendida entre la piel y el hueso subyacente, que se traducirá en la
aparición de una placa oscura, de aspecto seco, que se mantiene así durante varios
días y que, progresivamente, va experimentando un reblandecimiento progresivo por
los bordes, comenzando a macerarse para finalizar formando gruesos esfacelos
húmedos que progresivamente se eliminan, ya sea de forma espontánea o por
sucesivas escarectomías quirúrgicas. Durante esta fase los exudados de superficie
pueden ser negativos (16%), no demostrando contaminación o pueden aparecer
gérmenes Gram positivos. Por otro lado, en esta fase, el tratamiento a realizar será
conservador, encaminado a la eliminación de la escara.
✔ Estadio III: Durante la fase de detersión o de limpieza, la úlcera se presenta como
una oquedad profunda, con la aparición de esfacelos necróticos y restos de fibrina en
el fondo y con un tejido recubierto de un exudado purulento y maloliente como
consecuencia de los productos de invasión bacteriana y la destrucción de tejidos
desvitalizados. En muchas ocasiones, el aspecto externo de la úlcera puede llevar a
engaños, ya que se presenta con un orificio externo pequeño que deja en el interior
una importante cavidad o saco ulceroso. En los exudados de superficie podemos
apreciar la existencia de gérmenes gramnegativos, cuyo número de colonias aumentan
durante toda la fase de detersión. En esta fase el tratamiento conservador irá
encaminado a favorecer la limpieza local de la úlcera y la eliminación del tejido
necrótico formado.
✔ Estadio IV: Pérdida de todas las capas de la piel con destrucción extensa, necrosis
tisular, o daño del músculo, hueso o estructuras que lo soportan como tendones o
cápsula articular. Tractos sinuosos o cavernas.
Grado III – Grado IV
VALORACION
✔ Al ingreso, historia incluyendo estudio detallado del estado general del paciente
✔ Factores predisponentes
✔ Continente o no tipo de tratamiento
✔ Identificación de enfermedades que pueden interferir en el proceso de curación
(alteraciones vasculares, respiratorias, metabólicas, inmunológicas, neoplasias.).
✔ Patologías agudas
✔ Hábitos tóxicos: tabaco, alcohol...
✔ Higiene.
✔ Tratamientos farmacológicos (corticoides, aines, inmunosupresores...).
✔ Valoración nutricional. tipo de alimentación: enteral por SNG, dieta normal oral o por
túrmix...
✔ Riesgo de úlceras (Escala de Norton – Escala de Bradem).
FACTORES PREDISPONENTES:
➔ PRESIÓN PERMANENTE
➔ Pérdida sensitiva; propicia la disminución de la percepción del dolor y presión.
➔ Parálisis motora asociada con atrofia muscular;
➔ Incapacidad para responder a la presión.
➔ Desnutrición. Determinan que la piel sea más vulnerable
➔ Déficits metabólicos secundarios a traumatismos o inmovilización prolongada.
➔ Espasticidad y contracturas articulares.
➔ Edad: Anciano
✔ La piel de los ancianos tiene una regeneración más lenta.
✔ Existe una disminución de la fuerza de unión de las células en la epidermis, con un
retardo en su regeneración y una disminución del riego sanguíneo en la dermis.
✔ Disminución o perdida de la sensibilidad al dolor, se adelgazan todas las capas de la
piel y se alteran los tejidos elásticos y colágeno que la componen.
✔ La falta de vitamina C puede aumentar la fragilidad de los vasos sanguíneos y del
tejido graso que de alguna manera sirve como colchón de nuestro cuerpo, reduciendo
de esta forma su protección y facilitando la producción de lesiones por presión.
✔ Si se agrega inmovilidad o postración, constantes abrasiones, la humedad producto de
las incontinencias tanto urinaria como fecal, colchones y sillas duras y los factores
iatrogénicos como una excesiva prescripción de reposo o de medicamentos sedantes e
hipnóticos a dosis inconvenientes para nuestros ancianos, entonces existe una elevada
probabilidad de producir una escara.
➔ Incontinencia
✔ La humedad facilita la maceración de la piel.
➢ ULCERAS POR PRESIÓN
Originadas por la hipoxia producida por la presión en situaciones de inmovilización.

ESCALA DE NORTON DE RIESGO UPP


ESCALA DE BRADEN

➢ Localización de las UPP: Las zonas de presión ósea

VALORAR EL TEMAÑO Y PROFUNDIDAD: MEDIR


➢ ERITEMA: Enrojecimiento de la piel.
➢ ERITEMA QUE NO PALIDECE: Enrojecimiento que persiste al aplicar presión con la
punta del dedo).
➢ ERITEMA QUE PALIDECE: Zona enrojecida que se pone blanca o pálida
temporalmente cuando se aplica presión con la punta del dedo.
➢ ESCARA: Tejido grueso, duro, negro, correoso, necrótico, desvitalizado
➢ ESFACELO: Tejido necrótico (muerto) en proceso de separación de las partes
viables del cuerpo. Se percibe en la acumulación de desechos de células muertas en la
superficie de la herida y su color tiende a ser amarillo por la gran cantidad de
leucocitos presentes. El tejido amarillo no siempre es esfacelo, sino que puede tratarse
de tejido subcutáneo, tendón o hueso.
➢ GANGRENA necrosis de los tejidos que complica en diversos grados por una
infección bacteriana secundaria. Hay tres tipos: secas, mojadas y gangrena gaseosa
➢ CAVERNA Pasaje cerrado bajo la superficie de la piel que está abierto solamente en
una zona de la superficie. La localización de las cavernas y la tunelización debe
documentarse.
➢ LECHO
✔ Aquella zona física del interior de la piel donde crecerá el tejido nuevo: tejido de
granulación, tras una perdida previa de sustancia o tejido
✔ De características únicas y especiales, genera nuevo tejido sano que paulatinamente
irá ascendiendo hasta llegar a la superficie de la piel.
✔ El lecho de la herida es muy permeable mientras la epidermis es prácticamente e
impermeable
✔ El lecho de la herida predomina un ambiente húmedo, muy vascularizado mientras la
epidermis es seca.
➢ EXUDADO
✔ Contiene diversas sustancias, agua, electrolitos, nutrientes, mediadores inflamatorios,
células de la serie blanca, enzimas proteolíticas, factores de crecimiento y productos
de desecho.
✔ Una humedad excesiva provoca maceración y su escasez implica tener un lecho seco
y retraso en la cicatrización.
✔ Un correcto control de este exudado hará que no se acumulen en exceso materiales
que retrasen la cicatrización, pero permitirá mantener un lecho de la herida con la
correcta humedad.
✔ La cura en ambiente húmedo y elegir de manera adecuada los apósitos es la manera
más eficaz, para controlar el exudado y permitirnos una mejor y más rápida
cicatrización
MEDIDAS DE PREVENCIÓN
➢ Una buena nutrición: Adecuada a las necesidades energéticas, ricas en proteínas de
alto valor biológico y garantizando la hidratación. Ajustadas a las necesidades
dietéticas individuales.
➢ Higiene
✔ Higiene y aseo general diario
✔ Minuciosa exploración de la piel aprovechando los momentos del aseo, de los
cambios posturales o cambios de pañales para una detección precoz de la pre-
úlcera.
✔ Aplicación de cremas hidratantes, no usar que contengan alcohol
✔ Evitar arrugas en las sabanas
✔ Protecciones en los pedales de las sillas de ruedas
✔ Utilizar absorbentes de incontinencia cambiándose siempre que sea necesario.
Aseo de la piel perineal y zona sacro - glútea evitando humedad.
✔ Movilización del paciente a la vez que se realiza el cambio de absorbente.
✔ Utilizar colectores de orina en aquellos pacientes varones que lo precisen.
✔ Evaluación del paciente en silla de ruedas por si puede evitarse las sillas con cuña
de incontinencia por úlceras en glúteos.
✔ Estimación de la necesidad de uso de sondaje vesical
➢ Con masajes: Además de activar la circulación, la utilización de cremas hidratantes o
aceites favorece la buena hidratación de la piel. Estimular la circulación mediante
masajes suaves, utilizando aceites específicos disponibles en el mercado (soluciones a
base de ésteres de ácidos grasos hiperoxigenados)
➢ Con dispositivos para aliviar la presión: Por ejemplo, utilizando colchones
neumáticos, cojines de gel de flotación o protectores para talones y codos.
➢ Mediante un estricto programa de movilización y cambios posturales: Teniendo en
cuenta nivel de riesgo.
✔ Elabore un plan de rehabilitación que mejore la movilidad y actividad del
paciente.
✔ En períodos de sedestación efectuar movilizaciones horarias si puede realizarlo
autónomamente, enséñele a movilizarse cada quince minutos.
✔ Mantener el alineamiento corporal, la distribución del peso y el equilibrio.
✔ Evitar el contacto directo de las prominencias óseas entre sí.
✔ Evitar el arrastre. Realizar las movilizaciones reduciendo las fuerzas
tangenciales.
✔ En decúbito lateral, lo sobrepase los 30 grados.
✔ Si es necesario, eleve la cabecera de la cama lo mínimo posible (máximo 30°)
✔ No utilizar flotadores u otros dispositivos de presión, usar dispositivos que
mitiguen al máximo la presión
Los cambios posturales deben ser programados dentro del plan de cuidados.
APOYO IDEAL
✔ Que sea capaz de reducir la presión tisular
✔ Que aumente la superficie de apoyo
✔ Que facilite la evaporación de la humedad
✔ Que disminuya las fuerzas de cizalla
✔ Buena relación coste/beneficio
✔ Sencillez en el mantenimiento y manejo
✔ Que sean compatibles con los protocolos de control de infecciones
✔ Que sean compatibles con las necesidades de reanimación cardio pulmonar en
ámbitos con pacientes de elevada complejidad médica.

➢ CUIDADOS DE LA ULCERA
Un plan básico de cuidadas locales de la úlcera debe de contemplar:
● Desbridamiento del tejido necrótico
● Limpieza de la herida
● Prevención y abordaje de la infección bacteriana
● Elección de un producto que mantenga continuamente el lecho de la úlcera húmedo y
a temperatura corporal.
DESBRIDAMIENTO
La presencia en el lecho de la herida de tejido necrótico bien sea como escara negra, amarilla
de carácter seco o húmedo, actúa como medio ideal para la proliferación bacteriana e impide
el proceso de curación.
En cualquier caso, la situación global del paciente condicionará el desbridamiento (enfermos
con trastornos de la coagulación, enfermos en fase terminal de su enfermedad, etc.)
Las características del tejido a desbridar, igualmente orientará el tipo de desbridamiento a
realizar:
✔ Desbridamiento cortante o quirúrgico
Está considerado como la forma más rápida de eliminar áreas de escaras secas adheridas a
planos más profundos o de tejido necrótico húmedo. El desbridamiento quirúrgico es un
procedimiento cruento que requiere de conocimientos, destreza y de una técnica y material
estéril. Por otro lado, la política de cada institución a nivel asistencial determinará quién y
dónde realizarla.
El desbridamiento cortante deberá realizarse por planos y en diferentes sesiones (salvo el
desbridamiento radical en el quirófano), siempre comenzando por el área central, procurando
lograr tempranamente la liberación de tejido desvitalizado en uno de los lados de la lesión.
Ante la posibilidad de la aparición de dolor en esta técnica, es aconsejable la aplicación de un
antiálgico tópico (gel de lidocaína 2%, etc.).
La hemorragia puede ser una complicación frecuente que podremos controlar generalmente
mediante compresión directa, apósitos hemostáticos, etc. Si no cediera la situación con las
medidas anteriores se recurrirá a la sutura del vaso sangrante.
Una vez controlada la hemorragia sería recomendable utilizar durante un periodo de 8 a 24
horas un apósito seco, cambiándolo posteriormente por un apósito húmedo.
✔ Desbridamiento químico (enzimático)
El desbridamiento químico o enzimático es un método más a valorar cuando el paciente no
tolere el desbridamiento quirúrgico y no presente signos de infección.
Existen en el mercado diversos productos enzimáticos (proteolíticos, fibrinolíticos,) que
pueden utilizarse como agentes de detersión química de los tejidos necróticos.
La colágenas es un ejemplo de este tipo de sustancias.
Existen evidencias científicas que indican que ésta, favorece el desbridamiento y el
crecimiento de tejido de granulación.
Cuando vaya a ser utilizada, es recomendable proteger la piel peri ulcerar mediante una pasta
de zinc, silicona, etc., al igual, que aumentar el nivel de humedad en la herida para potenciar
su acción.
✔ Desbridamiento autolítico
El desbridamiento auto lítico se favorecerá mediante el uso de productos concebidos en el
principio de cura húmeda.
Se produce por la conjunción de tres factores, la hidratación del lecho de la úlcera, la
fibrinólisis y la acción de las enzimas endógenas sobre los tejidos desvitalizados.
Esta fórmula de desbridamiento es más selectiva y atraumática, no requiriendo de habilidades
clínicas específicas y siendo generalmente bien aceptado por el paciente.
Presenta una acción más lenta en el tiempo. Cualquier apósito capaz de producir condiciones
de cura húmeda, de manera general y los hidrogeles en estructura amorfa de manera
específica son productos con capacidad de producir desbridamiento autolítico. En el caso de
heridas con tejido esfacelado, los hidrogeles en estructura amorfa (geles), por su acción
hidratante facilitan la eliminación de tejidos no viables por lo que deben considerarse como
uno opción de desbridamiento
✔ Desbridamiento mecánico.
Se trata de una técnica no selectiva y traumática.
Principalmente se realiza por abrasión mecánica a través de fuerzas de rozamiento
(frotamiento), uso de dextranómeros, mediante la irrigación a presión de la herida o la
utilizaci6n de apósitos humedecidos que al secarse pasadas 4-6 horas se adhieren al tejido
necrótico, pero también al tejida sano, que se arranca con su retirada. En la actualidad son
técnicas en desuso.
LIMPIEZA DE LA LESIÓN
✔ Limpie las lesiones inicialmente y en cada cura.
✔ Utilice como norma suero salino fisiológico.
✔ Use la mínima fuerza mecánica para la limpieza de la úlcera, así como para su secado
posterior.
✔ Use una presión de lavado efectivo para facilitar el arrastre de los detritus, bacterias y
restos de curas anteriores, pero, sin capacidad para producir traumatismos en el tejido
sano.
✔ La presión de lavado más eficaz es la proporcionada por la gravedad o por ejemplo la
que realizamos a través de una jeringa de 35 ml con una aguja a catéter de 0,9 mm
que proyecta el suero fisiológico sobre la herida a una presión de 2 kg. /cm2.
✔ Las presiones de lavado de la úlcera efectivas y seguras oscilan entre 1 y 4 kg. /cm2.
✔ No limpie la herida con antisépticos locales (povidona yodada, clorhexidina, agua
oxigenada, ácido acético, solución de hipoclorito,) o limpiadores cutáneos. Todos son
productos químicos citotóxicos para el nuevo tejido y en algunos casos su uso
continuado puede provocar problemas sistémicos por su absorción en el organismo.
PREVENCIÓN DE LA INFECCIÓN
Siempre existe un riesgo de colonización y de infección bacteriana en las ulceras por presión.
Todas las úlceras por presión están contaminadas por bacterias, lo cual no quiere decir que las
lesiones estén infectadas.
En la mayor parte de los casos una limpieza y desbridamiento eficaz imposibilita que la
colonización bacteriana progrese a infección clínica.
El diagnóstico de la infección asociada a úlcera por presión debe ser fundamentalmente
clínico.
Los síntomas clásicos de infección local de la úlcera cutánea son:
✔ Inflamación (eritema, edema, tumor, calor)
✔ Dolor
✔ Olor
✔ Exudado purulento
La infección de una úlcera puede estar influenciada por factores propios del paciente (déficit
nutricional, obesidad, fármacos, inmunosupresores, citotóxicos, enfermedades concomitantes,
diabetes, neoplasias, …, edad avanzada, incontinencia, etc.) y otros relacionadas con la lesión
(estadio, existencia de tejido necrótico y esfacelado, tunelizaciones lesiones átonas,
alteraciones circulatorias en la zona, etc.)
Ante la presencia de signos de infección local deberá de intensificarse la limpieza y el
desbridamiento.
Si transcurrido un plazo entre dos y cuatro semanas, la úlcera no evoluciona favorablemente
o continua con signos de Infección local, habiendo descartado la presencia de osteomielitis.,
celulitis o septicemia, deberá implantarse un régimen de tratamiento con un antibiótico local
con efectividad contra los microorganismos que más frecuentemente infectan las úlceras por
presión y durante un periodo máximo de dos semanas.
Si la lesión no responde al tratamiento local, deberán realizarse entonces, cultivos
bacterianos, cualitativas y cuantitativos, preferentemente mediante aspiración percutánea con
aguja a biopsia tisular, evitando, a ser posible, la recogida de exudado mediante frotis que
puede detectar solo contaminantes de superficie y no el verdadero microorganismo
responsable de la infección.
Identificado el germen se habrá de plantear un tratamiento antibiótico especifico, reevaluar al
paciente y la lesión.
Control de la infección.
✔ Seguir las precauciones de aislamiento de sustancias corporales
✔ Utilice guantes limpios y cámbielos con cada paciente
✔ El lavado de manos entre los procedimientos con los pacientes es esencial.
✔ En pacientes can varias úlceras, comience por la menos contaminada
✔ Use instrumentos estériles en el desbridamiento quirúrgico de las ulceras por presión
✔ No utilice antisépticos locales.
✔ Los antibióticos sistémicos deben administrarse baja prescripción médica a pacientes
con bacteriemia, sepsis, celulitis avanzada u osteomielitis.
✔ Cumpla con la normativa de eliminación de residuos de su institución.
ELECCIÓN DEL APÓSITO COMPETENTE
Las evidencias científicas disponibles demuestran la efectividad clínica y bajo la óptica
coste/beneficio (espaciamiento de curas, menor manipulación de las lesiones…,) de la técnica
de la cura de heridas en ambiente húmedo frente o la cura tradicional.
Un apósito ideal debe ser biocompatible, proteger la herida de agresiones externas físicas,
químicas y bacterianas, mantener el lecho de la úlcera continuamente húmedo y la piel
circundante seca, eliminar y controlar exudados y tejido necrótico mediante su absorción,
dejar la mínima cantidad de residuos en la lesión, ser adaptable a localizaciones difíciles y ser
de fácil aplicación y retirada.
Los apósitos de gasa no cumplen con la mayoría de los requisitos anteriores.
"La selección de un oposito de cura en ambiente húmedo deberá de realizarse considerando
las siguientes variables":
✔ Localización de la lesión
✔ Estadio
✔ Severidad de la úlcera
✔ Cantidad de exudado
✔ Presencia de tunelizaciones
✔ Estado de la piel perilesional
✔ Signos de infección
✔ Estado general del paciente
✔ Nivel asistencial y disponibilidad de recursos
✔ Coste-efectividad
✔ Facilidad de aplicación en contextos de autocuidado
Para evitar que se formen abscesos o se «cierre en falso» la lesión, será necesario rellenar
parcialmente (entre la mitad y las tres cuartas partes) las cavidades y tunelizaciones con
productos basados en el principio de la cura húmeda.
La frecuencia de cambio de cada apósito vendrá determinado par las características
específicas del producto seleccionado.
Será precisa elegir el apósito que permita un óptimo manejo del exudado sin permitir que
deseque el lecho de la úlcera ni lesione el tejido peri ulcerar.
➢ La cura húmeda
✔ Mantiene un ambiente húmedo y caliente, ideal para cicatrizar.
✔ La herida ha de estar húmeda, y la piel perilesional, seca.
✔ Aumenta el aporte de oxígeno y nutrientes a través de la angiogénesis
✔ Acidificación del pH de la zona, creando un ambiente bacteriostático que disminuye
el riesgo de infección;
✔ Facilidad para la migración celular
✔ Control del exudado sin perjudicar la piel peri ulcerar
✔ Protección de las heridas de la contaminación
✔ Reducción de los tiempos de cicatrización;
✔ Reduce el dolor;
✔ Renovaciones fáciles y espaciadas
➔ Apósitos basados en cura húmeda:
✔ Alginato: en placa, en cinta
✔ Hidrocoloides: en placa, en gránulos, en pasta (combinados con alginato cálcico, en
fibra
✔ Hidrogeles: en placa, en estructura amorfa (geles)
✔ Poliuretanos: en film/película, hidrofílicos hidro celulares en placa, hidro celulares
para cavidad, espumas de polímero, gel de espuma de poliuretano
➢ Tratamiento coadyuvante en las UPP.
En la actualidad la estimulación eléctrica es la única terapia coadyuvante con rasgos
complementarios suficientes como para justificar la recomendación. Podrá plantearse en
aquellas UPP estadio III y IV que no han respondido a la terapéutica convencional. En
cualquier caso, deberá de asegurarse que se posee el equipo adecuado y personal adiestrado
en su manejo, siguiendo los protocolos que han demostrado seguridad y eficacia en ensayos
controlados.
➢ Reparación quirúrgica de las UPP.
Se deberá considerar la reparación quirúrgica en aquellos pacientes con úlceras por presión en
estadios III o IV que no responden al tratamiento convencional.
Del mismo modo, será necesario valorar elementos como la calidad de vida, riesgos de
recidiva, preferencias del paciente, etc.
Junto a las posibilidades para ser candidato a tratamiento quirúrgico (inmovilidad
postquirúrgica evitando la presión sobre la región afectada, nutrición adecuada, pacientes
médicamente estables, etc.).
➢ Educación y mejora de la calidad de vida
El programa de educación debe ser una parte integral de la mejora de la calidad.
Los programas educativos son un componente esencial de los cuidados de las úlceras por
presión. Estos deben integrar conocimientos básicos sobre estas lesiones y deben cubrir el
espectro completo de cuidados para la prevención y tratamiento.
Serán dirigidos hacia los pacientes, familia, cuidadores y profesionales de la salud.
➢ Cuidados paliativos y ulceras por presión
El que un paciente se encuentre en estado terminal de su enfermedad no justifica el que se
haya de claudicaren el objetivo de evitar la aparición de las úlceras por presión. En el caso de
que el paciente presente úlceras por presión se deberá de actuar:
✔ No culpabilizando al entorno de cuidados de la aparición de las lesiones.
✔ Es una complicación frecuente y en muchos casos en ese estadio, probablemente
inevitable.
✔ Planteando objetivos terapéuticos realistas de acuerdo con las posibilidades de
curación, evitando, enlas posibles técnicas agresivas.
✔ Manteniendo limpia y protegida la herida, para evitar el desarrollo de la infección.
✔ Seleccionando apósitos que permitan distanciar la frecuencia de las curas para evitar
el malestar causado por este procedimiento.
✔ Mejorando el bienestar del paciente, evitándole dolor e intentando controlar, de
existir, el mal olor de las lesiones (mediante apósitos de carbón activado, gel de
metronidazol, etc.)
✔ En situación de agonía será necesario valorar la necesidad de realizar cambios
posturales en el paciente.
➢ Evaluación: indicadores y parámetros de control.
El proceso de evaluación es un instrumento básico para mejorar la eficacia de los
procedimientos empleados en el cuidado de las úlceras por presión.
Es necesario establecer un programa de calidad con el objetivo de mejorar la atención
prestada a los pacientes, facilitar un trabajo en equipo y permitir objetivar la práctica
asistencial.
La problemática de estas lesiones debe ser abordada desde un enfoque interdisciplinar. Los
resultados de los cuidados pueden medirse en base a la incidencia y prevalencia de las ulceras
por presión. Los estudios de incidencia y prevalencia deben ser realizadas periódicamente, la
idealidad pasaría por monitorizarlos e integrarlos dentro de una política local sobre úlceras
por presión. Como un instrumento para evaluar la evolución de estas heridas puede utilizarse
el índice de severidad.
➔ TRATAMIENTO ESPECÍFICO DE LAS UPP.
➢ PRE ULCERA
✔ Piel intacta, eritema que desaparece al eliminar la presión.
✔ Estimular la circulación mediante masajes suaves utilizando una solución a base
de ésteres de ácidos grasos hiperoxigenados
✔ No usar si existe pérdida de continuidad en la integridad de la piel.
✔ Cambio apósitos, si no existen contraindicaciones o empeoramiento de la lesión
cada 7 días.
✔ Almohadillar la lesión si se considera oportuno.
➢ ESTADIO I.
✔ Eritema (piel rosada) que no recupera el color normal después de retirar la presión.
Afecta a epidermis. No alteración en la continuidad de la piel.
✔ No masajear la zona para evitar los riesgos de traumatismo capilar.
✔ Lavado de la zona con suero fisiológico al 0,9%.
✔ Secado de la úlcera.
✔ Aplicación de apósitos hidrocoloides semi oclusivos
➢ ESTADIO II.
➢ Evitar el uso de antisépticos locales (tipo povidona yodada) ya que su uso retrasa la
curación
➢ Caso de existir vesícula, drenarla y retirar la piel lesionada.
➢ Lavado de arrastre con suero fisiológico al 0,9%.
➢ Secado del lecho ulcerado. Realizar esta técnica con suavidad a fin de no lesionar el
tejido de granulación.
➢ Aplicación de apósitos en función del grado de exudado:
➢ Hidrocoloides (carboximetilcelulosa sódica) en fases de granulación y epitelización.
➢ Hidro reguladores, que presentan mayor poder de absorción si existe exudado.
➢ Cambio de apósitos en función del exudado. Siempre que haya pérdidas, pudiendo
mantenerse el apósito hasta 5 días.
➢ ESTADIO III y IV
✔ Eliminar el tejido necrótico (desbridamiento enzimático o manual si procede) a fin de
facilitar las fases de granulación y epitelización.
➢ NECROSIS SECA.
✔ Realizar incisiones en la placa necrótica para que los productos sean efectivos.
✔ Aplicar pomadas enzimáticas de colagenasa
✔ Aplicar apósito de gasa húmeda (suero fisiológico al 0,9%).
✔ Cambio de cura cada 24 horas.
✔ Acelerar el proceso mediante un desbridamiento manual.
✔ No mantener la cura a base de colagenasas una vez eliminada la placa necrótica.
✔ Uso de hidrogeles
✔ Cubrir la lesión con apósitos hidrocoloides
➢ ÚLCERAS EXUDATIVAS
✔ Apósitos de poliuretano
✔ Apósitos de alginato cálcico
✔ Apósitos hidro poliméricos
✔ Cavitación/Tunelización.
✔ Hidrogeles.
✔ Alginato cálcico en cinta
✔ Apósitos de poliuretano para heridas profundas
✔ En cualquiera de las elecciones, cubrir la úlcera con un apósito externo.

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