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Carcinoma Hepatocelular (CHC)

A nivel global, el CHC, también conocido erróneamente como hepatoma, es responsable de


aproximadamente el 5,4% de todos los cánceres, pero su incidencia varía ampliamente en
diferentes partes del mundo.
PATOGENIA
Las enfermedades hepáticas crónicas son el marco más frecuente para la aparición del CHC.
Aunque suele identificarse en un trasfondo de cirrosis, esta no es necesaria para que surja el tumor.
Los factores subyacentes más importantes en la hepatocarcinogenia son las infecciones víricas
(VHB, VHC) y las lesiones tóxicas (aflatoxina, alcohol). De este modo, donde el VHB y el VHC
son endémicos hay una elevada incidencia de CHC. La coinfección aumenta más el riesgo.
Otros factores de riesgo del CHC comparten la capacidad de causar una lesión hepática crónica
asociada a varios grados de inflamación. Estos factores son:
• Consumo de alcohol, que aumenta de forma sinérgica el riesgo con el VHB, el VHC y
posiblemente incluso con el tabaquismo.
• Trastornos hereditarios, en particular la hemocromatosis hereditaria y la deficiencia de
α1AT, y en menor grado la enfermedad de Wilson.
• El síndrome metabólico y su obesidad, diabetes mellitus y HGNA acompañantes, todos los
cuales aumentan el riesgo de CHC.
Las mutaciones con ganancia de función en la catenina β y las mutaciones con pérdida de función
en p53 son las dos mutaciones causantes más frecuentes. Se identifican mutaciones en la catenina β
en hasta el 40% de los CHC. Los nódulos displásicos de grado alto son probablemente los
precursores más importantes del CHC en la hepatitis vírica y en la hepatopatía alcohólica. Se
encuentra a menudo un CHC franco en los nódulos displásicos de grado alto en muestras de biopsia
o resecadas.
MORFOLOGIA
El CHC puede verse a simple vista como: 1) una masa unifocal (habitualmente grande); 2) nódulos
multifocales ampliamente distribuidos de tamaño variable, o 3) un cáncer infiltrante difuso, que
penetra ampliamente y a veces afecta a todo el hígado. En ocasiones, los CHC surgen dentro de
nódulos displásicos, superando finalmente a estas lesiones precursoras. Las metástasis
intrahepáticas por invasión vascular o extensión directa son más probables una vez que los tumores
alcanzan un tamaño de 3 cm. Estas metástasis suelen ser nódulos tumorales pequeños satélite
alrededor de una masa primaria grande.
La muerte suele deberse a: 1) caquexia; 2) hemorragia digestiva o por varices esofágicas; 3)
insuficiencia hepática con coma hepático, o, pocas veces, 4) rotura del tumor con hemorragia
mortal. La supervivencia a los 5 años de los tumores grandes es mínima, y la mayoría de los
pacientes mueren en los 2 años siguientes al diagnóstico.

Bibliografia
• Vinay Kumar, Abul K. Abbas, Jon E. Aster (2018) Robbins PATOLOGÍA HUMANA. Elsevier.
• Vinay Kumar, Abul K. Abbas, Jon E. Aster (2015) Robbins y Cotran: Patología Estructural y
Funcional. Elsevier.

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