Impuesto al valor agregado

Su origen se remonta a las antiguas civilizaciones como la egipcia; ya por los años de 1954
apareció en Francia y se lo conocía como un impuesto a las ventas. A partir de 1967 por
exigencia de la Comunidad Económica Europea fue implantándose en la mayor parte de los
países de América Latina y pasó a constituirse en una de las fuentes importantes de ingresos
tributarios para el estado en muchos países del mundo.

En Ecuador existía el Impuesto a las Ventas y Sustitutivos, pero en el año de 1970 fue
reemplazado por el Impuesto a las Transacciones Mercantiles (ITM), el mismo que estuvo
vigente hasta diciembre de 1989, debido a la reforma tributaria expedida en el gobierno del
Dr. Rodrigo Borja, donde se desarrolla el Impuesto al Valor Agregado.

(IVA)

El origen de los impuestos comienza cuando el hombre decide vivir en comunidad, formando
las sociedades, luego éstas constituyen un Estado, el mismo que es llevado por un gobierno y
éste a su vez para satisfacer las necesidades de sus comunidades, considera viable la
implantación de tributos en forma obligatoria.

Se tiene conocimiento que el IVA es aquel impuesto existente para poder gravar al valor en
todas las etapas de las transferencias como en importaciones de bienes muebles y servicios
prestados tanto en territorio nacional como exterior. Es un impuesto indirecto influyente en
toda comercialización donde su función principal es el imponer un gravamen (establecimiento
del tributo) en ciertos productos y servicios.

Es un impuesto indirecto que aplica un porcentaje sobre el valor agregado o añadido que se
genera en cada fase de comercialización; el responsable de recaudar y declarar el IVA es el
agente de percepción, pero quien realmente paga es el consumidores decir trata de que el
vendedor traslade expresamente el monto del gravamen al comprador o usuario final de los
bienes y servicios.

Es decir, es un impuesto que incrementa el importe final del producto, esto colocándolo frente
a una descripción mucho más profesional donde se asume la importancia de valores
económicos en la facturación.

¿Quién debe pagar?

Todas las personas y sociedades que presten servicios y/o realicen transferencias o
importaciones de bienes.

Las personas y sociedades designadas como agentes de retención mediante la normativa

tributaria vigente realizarán una retención del IVA en los casos que amerite.

Quienes hayan pagado el IVA podrán utilizarlo como crédito tributario en los casos
contemplados en la Ley de Régimen Tributario Interno.