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EXPERIENCIA DE APRENDIZAJE Nº 7

“BUSCANDO LA SANTIDAD EN LA VIDA DIARIA A EJEMPLO DE JESUCRISTO Y LOS SANTOS”

ACTIVIDAD Nº 1: COMPRENDEMOS QUE JESUCRISTO ES MODELO DE SANTIDAD

1. LA SANTIDAD.
La santidad consiste en una disposición del corazón que nos hace humildes y pequeños en los brazos de
Dios, y confiados en su bondad paternal. Santo Tomas define santidad como la virtud por la que la mente de un
hombre se dedica a sí misma y todos sus actos a Dios.
Todos nosotros tenemos el íntimo deseo de seguir al Maestro, no sólo en las cosas de nuestro interés
personal, sino en todo. Este seguimiento marcará nuestra vida misma; una vida que, después de todo, sólo
podemos vivirla una vez: para acertar el camino, ser mejores y felices.
2. MEDIOS PARA ALCANZAR LA SANTIDAD.
Nuestra conversión, nuestro cambio de actitud es el primer medio para alcanzar la santidad, ello deberá
notarse en nuestras relaciones con Dios Trinitario: Recepción de los Sacramentos, confesión y comunión
frecuente, amor al prójimo (caridad, humildad y castidad), a ello se añade la oración, la penitencia, mortificación,
lucha contra las tentaciones.
En definitiva, Dios nos invita a todos a conseguir la santidad en el lugar que nos toca vivir, como
estudiante, como hijo, como padre de familia, como profesional, como militar, como sacerdote, etc.
La santidad no es algo reservado solo a unos cuantos, al contrario, es algo al que todos estamos
llamados. Los grandes santos que la Iglesia los proclamó, lo hizo justamente para mostrarnos que si es posible
vivir conforme a la voluntad de Dios.
3. MODELOS DE SANTIDAD.
El hombre de nuestro tiempo tiene especial necesidad de buscar, de encontrar a Cristo, ya que está
viendo rotas todas sus esperanzas, y nadie más que Cristo le podrá librar del desamparo que le aprisiona. Cristo
es la esperanza de los hombres.
Así lo afirman nuestros modelos de santidad:
• "Cristo es el amor que ama, es el camino para ser andado, la luz para ser encendida, la vida para ser vivida, el
amor digno de ser amado" (Madre Teresa de Calcuta).
• El que encuentra a Cristo experimenta el milagro de ver su vida transformada, con un ideal que le apasiona y le
da ganas de vivir, como la locura confesada por San Pablo: "Ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mí" (Gálatas
2,20).
• San Pablo dice: "Procurad la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor" (Hb. 12,14).
Todos estamos llamados a la santidad (todos los bautizados, ya pertenezcan a la Jerarquía, a los laicos,
todos somos llamados a la santidad). Los santos son nuestros ejemplos de santidad encabezados por la Virgen
María.
Jesucristo predicó la santidad de vida, de la que Él es Maestro y Modelo, a todos y cada uno de sus
discípulos de cualquier condición que fueran (cf. Mt 5,48). Todo cristiano de cualquier estado o condición de vida
está llamado a la santidad (cf. 1 Ts 4,3). Hemos nacido para ser santos e ir al Cielo; muchos lo han conseguido, los
que la Iglesia ha canonizado a lo largo de los siglos. El hombre tiene necesidad de arrodillarse delante de Dios y
de adorarlo, y dejar de hacerlo delante de los ídolos que él se ha fabricado. La Iglesia Católica, a través de los
siglos, da testimonio de esta aspiración y ha producido frutos abundantes.
Los Santos son los que han amado y servido a Dios verdadero, y siguen haciéndolo en el Cielo; son personas
destacadas por la perfección cristiana de sus vidas, sobresaliendo en alguna virtud o carisma; son modelos de
convivencia y comprensión cristiana, ejemplos de vida en gracia preocupados de los que aún peregrinamos hacia
la vida eterna; son obras maestras de la gracia de Dios; son los héroes de Dios, sus amigos íntimos, sus
familiares.
Los honramos porque interceden por nosotros, de manera especial por los que caminamos hacia la gloria.
Cada alma que está en el Cielo es un Santo, no solo los canonizados. Son personas de carne y hueso que
cumplieron con sus obligaciones adquiridas por el Bautismo; es decir, con la llamada universal a la santidad. (cf. Ef
1,45; Lev 11,44).
ACTIVIDAD Nº 2: PROMOVIENDO LA SANTIDAD EN MI FAMILIA
REFLEXIONAMOS EN TORNO A LOS SIGUIENTES TEXTOS

 En Mt 25, 21, “Muy bien siervo bueno y fiel; has sido fiel en lo poco, te
constituiré sobre lo mucho; entra en el gozo de tu Señor” ¿En qué han sido fiel los
santos? ¿Qué premio les da Dios por ser siervos buenos?

San Josemaría dice: "La santidad es para todos y no sólo para unos
cuantos privilegiados: no consiste en realizar unas gestas extraordinarias, sino en cumplir
con amor los pequeños deberes de cada día. ¿Quieres de verdad ser santo? Cumple el
pequeño deber de cada momento: haz lo que debes y está en lo que haces." La santidad
"grande" está en cumplir los "deberes pequeños" de cada instante”. Con estas palabras
¿Qué nos quiere decir San Josemaría?

ACTIVIDAD Nº 3: COMPRENDEMOS LA FESTIVIDAD DE TODOS LOS SANTOS


FIESTA DE TODOS LOS SANTOS
1. Una gran fiesta en el cielo.
El primero de noviembre se celebra la fiesta de Todos los
Santos. Para toda la Iglesia es una gran celebración porque
hay gran fiesta en el cielo. Para nosotros es una gran
oportunidad de agradecer todos los beneficios, todas las gracias
que Dios ha derramado en personas que han vivido en esta tierra y
que han sido como nosotros, con las mismas debilidades, y con las
fortalezas que vienen del mismo Dios. Celebremos este día con un
corazón agradecido, porque Dios ha estado grande con nosotros y
estamos alegres.
El primero de noviembre es un buen día para reflexionar todo
el bien espiritual y material que por intercesión de los santos
hemos obtenido y tenemos hasta el día de hoy, pues los santos que desearon la Gloria de Dios desde
aquí en la tierra lo siguen deseando en la visión beatifica, y comparten el mismo deseo de Nuestro Señor
Jesucristo de que todos los hombres se salven, que todos los hombres glorifiquen a Nuestro Señor.
Es importante en este día tan importante para toda la Iglesia detenernos a pensar en todo el bien que Dios ha
dado a la humanidad por medio de tantos hombres y mujeres que fieles a la voluntad de Dios, fieles a su amor
fueron testigos del Reino del Señor. La cantidad de santos, santas y mártires que dejaron una huella tan profunda
en su paso por esta tierra que ni el tiempo ni los cambios de generaciones han podido borrar. Y si decimos que
es de todos los Santos es porque también celebramos a tantos Santos y Mártires que Dios ha querido tener en el
anonimato, y que nosotros no conocemos por su nombre pero sabemos por la fe que están dando gloria a Dios.
Celebremos con gozo este día, y pidámosle a Dios Nuestro Señor nos conceda disfrutar en esta tierra de la
protección de sus santos y que un día nos conceda estar con ellos para glorificarlo en su eternidad.

2. la Iglesia ha instituido la fiesta de todos los santos por las siguientes razones:
 Para alabar y agradecer al Señor la merced que hizo a sus siervos, santificándolos en la tierra y
coronándolos de gloria en el cielo.
 Para honrar en este día aun a los Santos de que no se hace fiesta particular durante el año.
 Para procurarnos mayores gracias multiplicando los intercesores.
 Para reparar en este día las faltas que en el transcurso del año hayamos cometido en las fiestas
particulares de los Santos.
 Para animarnos más a la virtud con los ejemplos de tantos Santos de toda edad, sexo y condición, y con
la memoria de la recompensa que gozan en el cielo.
Ha de alentarnos a imitar a los Santos el considerar que ellos eran tan débiles como nosotros y sujetos a las
mismas pasiones; que, fortalecidos con la divina gracia, se hicieron santos por los medios que también nosotros
podemos emplear, y que por los méritos de Jesucristo se nos ha prometido la misma gloria que ellos gozan en el
cielo.
Se celebra la fiesta de Todos los Santos con tanta solemnidad porque abraza todas las otras fiestas que en el
año se celebran en honor de los Santos y es figura de la fiesta eterna de la gloria.

3. Para celebrar dignamente la fiesta de Todos los Santos debemos:


 Alabar y glorificar al Señor por los regalos que hizo a sus siervos y pedirle que asimismo nos las conceda
a nosotros.
 Honrar a todos los Santos como a amigos de Dios e invocar con más confianza su protección.
  Proponer imitar sus ejemplos para ser un día participantes de la misma gloria.
Que Santa María Reina de los santos nos conceda la alegría de servir con humildad a Dios esta tierra para verle
y gozarle en la vida eterna.
ACTIVIDAD Nº 4: ELABORAMOS UNA ORACION PARA ALCANZAR LA SANTIDAD A EJEMPLO DE LOS
SANTOS.

Ojo, para esta actividad podrás emplear los siguientes enlaces o la información propuesta.

EJEMPLOS DE SANTIDAD
https://www.youtube.com/watch?v=lpefqPaQJn0 https://www.youtube.com/watch?v=dU3gbBCr99w
¿Quién fue María Goretti?
¿Qué virtudes podemos imitar de María ¿Quién fue Domingo Savio?
Goretti?
¿Qué virtudes podemos imitar Santo
Domingo Savio?

https://www.youtube.com/watch?v=fPd6OxjKAHE https://www.youtube.com/watch?v=sh4ASCGK-
a8&t=199s
¿Quién fue Santa Rosa de Lima?
-¿Quien fue San Martin de Porres?
¿Qué virtudes te atrae de Santa Rosa
de Lima? -¿Qué virtudes podemos imitar de San
Martín de Porres?

EJEMPLOS DE SANTIDAD

MARÍA GORETTI VIRGEN Y MÁRTIR (Fiesta Central: 06 de julio)


Santa María Goretti nació en 1890 en Italia. Su padre, campesino, enfermó de malaria y
murió.
Una tarde, María estaba sentada en lo alto de la escalera de la casa, remendando una
camisa. Aunque aún no cumplía los doce años, era ya una mujercita.
Alejandro, un joven de 18 años, subió las escaleras con intención de violar a la niña.
María opuso resistencia y trató de pedir auxilio; pero como Alejandro la tenía agarrada
por el cuello, apenas pudo protestar y decir que prefería morir antes que ofender a Dios.
Al oír esto, el joven desgarró el vestido de la muchacha y la apuñaló brutalmente. Ella
cayó al suelo pidiendo ayuda y él huyó.
María fue transportada a un hospital, en donde perdonó a su asesino de todo corazón,
invocó a la Virgen y murió veinticuatro horas después.
Alejandro fue condenado a 30 años de prisión. Por largo tiempo, fue obstinado en no arrepentirse de su pecado,
hasta que una noche, tuvo un sueño en el que vio a la niña María, recogiendo flores en un prado y luego ella se
acercaba a él y se las ofrecía. A partir de ese momento, cambió totalmente y se convirtió en un prisionero
ejemplar. Se le dejó libre al cumplir 27 años de su condena. Al salir de la cárcel, una noche de Navidad, la de
1938, pidió perdón a la mamá de María, y aquella noche, en la misa de Gallo, comulgaron juntos.
El caso de María Goretti se extendió por todo el mundo. En 1947, el Papa Pío XII la beatificó y en 1950 la
canonizó. En la ceremonia estuvieron presentes su madre, de 82 años, dos hermanas y un hermano. Y, aunque
parezca increíble, también asistió Alejandro, el arrepentido asesino de la santa.
¿Qué nos enseña la vida de María Goretti?
 La principal enseñanza es la vivencia de la virtud de la pureza: pureza de alma y cuerpo.
 A perdonar a nuestros enemigos, a pesar de que nos hayan causado un daño irreparable. Como también lo hizo
el Papa Juan Pablo II, al perdonar a Alí Agca, quien tratara de asesinarlo en 1981.
 María Goretti nos enseña a ser fuertes ante situaciones difíciles, confiando siempre en Dios.

Oración
Santa María Goretti, este día te pido que me ayudes a vivir la virtud de la pureza, para entender que la castidad
es un medio para cultivar mi voluntad y así, lograr la santidad en el estado de vida al que Dios me llama.
Amén.

SANTO DOMINGO SAVIO (Fiesta Central: 06 de mayo)

Nace en Riva de Chieri, Italia, en la humilde casita de los esposos Carlos y Brígida, el 2 de
abril de 1842. Al año siguiente toda su familia se traslada a las colinas de Murialdo. Es un
niño del pueblo, nacido en una familia profundamente cristiana y joven, pobre y de buen
ejemplo.
El 8 de abril de 1849 hace su Primera Comunión. Muy temprano, vestido de fiesta,
Domingo se dirige a la Iglesia parroquial de Castelnuovo. Es el primero en entrar al templo
y el último en salir. Aquel día fue siempre memorable para él. Arrodillado al pie del altar,
con las manos juntas y con la mente y el corazón transportados al cielo, pronuncia los
propósitos que venía preparando desde hacía tiempo: "Propósitos que yo, Domingo Savio, hice el año de 1849, a
los siete años de edad, el día de mi Primera Comunión.
1. Me confesaré muy a menudo y recibiré la Sagrada Comunión siempre que el confesor me lo permita.
2. Quiero santificar los días de fiesta.
3. Mis amigos serán Jesús y María.
4. Antes morir que pecar”.
Estos recuerdos fueron la norma de todos sus actos hasta el fin de su vida.
Efectivamente, el 9 de marzo, postrado en la cama, en un momento se incorpora y le dice a su papá que lo
asiste: “Papá, ya es hora”, y va repitiendo las oraciones de los moribundos que entre sollozos lee el papá. Luego
parece adormecerse. Pasados algunos minutos entreabre los ojos y con voz clara y sonriente exclama: “Adiós,
querido papá, adiós. ¡Oh, qué hermosas cosas veo!”, y expira con las manos juntas sobre el pecho, tan
dulcemente que su padre cree que se adormece de nuevo. Tenía 14 años y 11 meses.

SANTA ROSA DE LIMA (Fiesta Central: 30 de agosto)


Fue la primera santa americana nació en Lima, Perú, el 30 de abril de 1586. Sus padres fueron
Gaspar de Flores y María de Oliva. Fue bautizada con el nombre de Isabel, pero comúnmente la
llamaban Rosa. En 1597 Santo Toribio de Mogrovejo, segundo arzobispo de Lima, la confirmó en
Quives, Canta. Rosa se caracterizó por su humildad, sencillez, obediencia, caridad y paciencia.
Muy joven descubrió su vocación a la vida religiosa y tomó como modelo de vida a Santa Catalina
de Siena. Luego de un problema financiero que tuvo su padre, la familia de Rosa atravesó por
una fuerte crisis económica por lo que la santa se dedicó a coser y trabajar en la huerta.
Poco tiempo después emitió sus votos de virginidad. Al cabo de diez años ingreso a la Tercera Orden de
Santo Domingo y se dedicó a servir a los más necesitados, sobre todo a los pobres y enfermos. En su casa se
dedicaba a rezar y a acoger a los mendigos. Durante toda su vida se entregó a Dios y al prójimo, mostró un
especial cariño por Cristo Crucificado. Tuvo el don de hacer milagros y se hizo muy conocida entre los limeños.
Transcurrió sus últimos años de vida en la casa de su bienhechora María de Uzátegui (hoy Monasterio de
Santa Rosa), falleció en la madrugada del 24 de agosto de 1617, a los 31 años de edad. Santa Rosa de Lima,
Patrona de Hispanoamérica y Filipinas, fue beatificada por el Papa Clemente IX en 1668 y canonizada por
Clemente X en 1671.
SAN MARTÍN DE PORRES (Fiesta central: 3 de noviembre)
Nació en Lima, Perú, en 1579. Fue el hijo natural del caballero español Juan de Porres
y de la india panameña libre Ana Velásquez. El santo mulato fue bautizado en la iglesia de
San Sebastián, en la misma pila y por el mismo párroco que había bautizado a Santa Rosa de
Lima. Martín vivió con su madre, aprendió el oficio de barbero y adquirió conocimientos de
medicina, mediante el trato con un cirujano. Desde niño dio muestras de su profundo amor por
Dios. Al mismo tiempo su amor al prójimo lo condujo a ayudar a todos, aún en las tareas más
humildes. A los 15 años ingresó como donado al convento de Santo Domingo en Lima y en
1603 hizo la profesión como hermano lego.
Los superiores de San Martín, pronto advirtieron sus cualidades y caridad por ello le
confiaron, junto a otros oficios, el de enfermero. Sus habilidades y el ardor con que cuidaba a los enfermos atrajo
incluso a los religiosos de otras comunidades que llegaban a Lima sólo para atenderse con el santo. San Martín
fue muchas veces despreciado y humillado, por ser mulato, pero nunca se rebeló contra los insultos que le
inferían.
Su abnegación, su modestia y la paz que irradiaba impresionaban a cuántos conocía. En la enfermería y
en la portería del convento del Rosario (Santo Domingo) atendía con acogedora bondad y amor a los pobres y
enfermos. Realizó numerosos milagros y curaciones. San Martín de Porres, Patrono de la Justicia Social, murió el
3 de noviembre de 1639. Fue beatificado por el Papa Gregorio XVI en 1837 y canonizado por Juan XXIII en 1962.

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