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Francisco Fernández Buey. Palencia, 1943. Filósofo comunista y ensayista. Estudió filosofía en Barcelona.
Expulsado de la universidad española en 1966 por su actividad antifascista, a finales de la década de 1960 y
principios de la de 1970 trabajó como traductor para varias editoriales y como colaborador de varias enciclopedias
para las que escribió artículos de temática filosófica y sociológica. En esa época tradujo al español obras de
Descartes, Saint-Just, Piaget, Febvre, Hyppolite, Garaudy, Touraine, Laffont, Balibar, Gramsci, Bordiga, Della Volpe,
Colletti, Geymonat, entre otros. Desde 1972 ha ejercido la docencia en la Universidad. Ha sido profesor en los
departamentos de filosofía, económicas y sociología de las universidades de Barcelona y Valladolid. En la
Universidad de Valladolid fundó en 1984 un centro dedicado a los estudios sobre la paz y el desarme, vinculado a la
Unesco. Desde 1993 es catedrático de filosofía política en la Universidad Pompeu Fabra de Barcelona, donde
coordina, además, una cátedra Unesco sobre estudios interculturales. Desarrolla sus actividades académicas en el
marco del Instituto Universitario de Cultura de la Universidad Pompeu Fabra, en el que ha dirigido un proyecto de
investigación sobre la obra del lógico y filósofo marxista Manuel Sacristán e impartido varios cursos de doctorado
sobre ética práctica, filosofía política, historia de las utopías y configuración de una tercera cultura. Su larga
trayectoria en la lucha política contempla: entre 1963 y 1978, militancia en el PSUC, federación catalana del PCE; en
1966, fue uno de los fundadores del Sindicato Democrático de Estudiantes en la Universidad de Barcelona (SDEUB);
en la primera mitad de los setenta destacó en la organización del movimiento de profesores no-numerarios; luego,
a finales de esa década, militó en el Comité Antinuclear de Catalunya (CANC) y fue uno de los primeros filósofos
europeos en teorizar el comunismo ecologista desde las revistas Mientras tanto y El Viejo Topo; participó en el
congreso fundacional de Izquierda Unida en 1986. Es autor de diversos ensayos: Conocer Lenin y su obra (Dopesa,
1977), Ensayos sobre Gramsci (Materiales, 1978), Contribución a la crítica del marxismo cientificista (Universitat
Autònoma de Barcelona, 1984), Albert Einstein, filósofo de la paz (Publicaciones del Centro de Información y
Documentación para la Paz y el Desarme, 1986), La ilusión del método. Ideas para un racionalismo bien temperado
(Crítica, 1991), Discursos para insumisos discretos (Libertarias, 1993), Redes que dan libertad (Paidós, 1994), La gran
perturbación. Discurso del indio metropolitano (Destino, 1995), La barbarie: de ellos y de los nuestros (Paidós, 1995),
Ni tribunos. Ideas y materiales para un programa eco-socialista (con Jorge Riechmann, siglo XXI, 1996), Trabajar sin
destruir (con Jorge Riechmann, HOAC, 1998), Marx (sin ismos) (El Viejo Topo, 1998), Ética y filosofía política. Asuntos
públicos controvertidos (Bellaterra, 2000), Leyendo a Gramsci (El Viejo Topo, 2001), Poliética (Losada, 2003), Guía
para una globalización alternativa (Ediciones B, 2004), Albert Einstein. Ciencia y conciencia (El Viejo Topo, 2005),
Desobediencia civil (Bajo Cero, 2005), Utopías e ilusiones naturales (El Viejo Topo, 2007).
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Francisco Fernández Buey: Tres pistas para intentar entender Mayo del 68
Una evidencia tan flagrante no necesita ser siguieron, hemos sido los unos y los otros
explicada. El espectáculo organiza con o, más directamente, con las trivialidades
maestría la ignorancia de lo que ocurre e, de base que los mandamases del mundo
inmediatamente después, el olvido de que de ahí salió y los letratenientes a ellos
aquella parte de los acontecimientos que vinculados quieren que sepan las nuevas
pudo ser conocida. Lo más importante es lo generaciones. No estoy hablando de
más ocultado. En estos últimos veinte años conspiración del silencio, ni siquiera de
no hay nada que haya sido cubierto por tergiversación conscientemente
más mentiras inducidas que la historia de construida. Al contrario. Pienso que, en
mayo de 1968. Ciertas lecciones útiles este caso, cuanto más se habla y más se
podrían sacarse de algunos estudios escribe más domina el espectáculo y más
desmitificadores sobre aquellas jornadas y nos alejamos todos de lo que realmente
sobre sus orígenes, pero eso es un secreto fue aquello. Así que no voy a pretender
de Estado”. aquí contar la verdadera verdad del mayo
del 68. Sólo pretendo contar brevemente
Estas palabras de Guy Debord pueden
mi versión de los hechos con palabras que
parecer una exageración. Y tal vez lo sea.
se acerquen, eso sí, a las palabras que se
Pero son también una de esas
pronunciaban entonces, la mayor parte de
exageraciones candidatas a la verdad: en
las cuales se han hecho impronunciables, y
lo que hace a mayo del 68, lo más
tal vez incomprensibles, en los tiempos que
importante es lo más ocultado. Pues la
corren ahora.
derecha política de entonces redujo la
interpretación de los hechos a un gran Daré dos pistas más.
complot anarco-marxista, a una gran
conspiración (que quedaría desmontada en
las primeras elecciones que siguieron a las II
grandes movilizaciones); el gaullismo, que Segunda pista. Mayo-junio del 68 no fue la
salió fortalecido de ellas, vio en los gran fiesta lúdica, como se viene diciendo
acontecimientos una “crisis de civilización” casi siempre, sino el gran susto. O aún
a la que había que hacer frente mejor: una gran protesta estudiantil que se
precisamente reforzando “nuestra acabó convirtiendo en un gran susto para
civilización”; los restos de los grupúsculos la gran mayoría. Lo que empezó como un
marxistas de entonces interpretaron los memorial de quejas en las universidades
hechos como una crisis internacional del (en Estrasburgo, en Caen, en Nanterre) se
capitalismo tardío que, a pesar de la convirtió enseguida en un movimiento de
derrota de mayo, se seguiría pudriendo; y protesta social generalizado en las
los nuevos camaleones fueron adaptando barricadas de París, y, a partir del
su interpretación de los hechos a lo que momento en que se multiplicaron las
vino después: principio del fin de las ocupaciones de fábricas y las huelgas
ideologías, gran fiesta lúdico-juvenil, obreras, en un ensayo general
anuncio del individualismo revolucionario que asustó a la mayoría de
contemporáneo, fin del psicodrama de la la sociedad francesa del momento.
era revolucionaria, revuelta reformista,
insurrección democrática que anunciaba el De ahí el gran susto: se asustaron los
retorno a los principios de la gran burgueses que vieron peligrar sus
revolución francesa, origen de los nuevos propiedades; se asustaron los pequeños
movimientos sociales, etc., etc. burgueses que vieron peligrar sus
privilegios y los de sus hijos (Chabrol
“Todo mentiras”, decía Debord. Se puede enseña); se asustó De Gaulle que tuvo que
decir con una expresión menos drástica: echar mano del ejército; se asustó el
medias verdades que se corresponden bien partido socialista que creía pasada la época
con lo que luego, en los años que
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Francisco Fernández Buey: Tres pistas para intentar entender Mayo del 68
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Francisco Fernández Buey: Tres pistas para intentar entender Mayo del 68
Tercera pista. Muchas veces se ha dicho y Sorbonne: ahí hay muy poco feminismo,
se ha escrito en los últimos tiempos que los casi nada de ecologismo y, desde luego,
movimientos sociales nuevos, críticos y nada de pacifismo.
alternativos, tuvieron su origen en el mayo
Sintomáticamente no hay ni una sola mujer
francés del 68. Pero también esto es
entre los líderes destacados del
inexacto. Y conviene precisarlo.
movimiento y las grabaciones que han
No hay duda de que 1968 representó el quedado (cintas magnetofónicas y
momento culminante de uno de los cinematográficas) muestran que a las
movimientos sociales más activos e mujeres apenas se las dejaba tomar la
interesantes de la segunda mitad del siglo palabra en los comités. Es verdad que se
XX, el movimiento estudiantil o citaba Reich y se hablaba de sexualidad
universitario, que, por supuesto, no se liberada, pero mayormente para varones.
redujo a los acontecimientos de Francia y El primer cartel publicitario détournée, que
que produjo manifestaciones importantes muestra a una mujer acariciándose los
en los cuatro puntos cardinales: en pechos mientras de su boca sale el gemido
Berkeley y en Milán, en México y en orgasmático ( “Ahhhhhh!!! La Internacional
Barcelona y Madrid, en Berlín y en Tokio, Situacionista!!!”) no era precisamente una
en Londres y en Praga y en Varsovia. representación del gusto del nuevo
feminismo...
Hay dos rasgos o características que
aparecen reiterativamente y con mucha Las alusiones a los hyppies y a los beatknis
fuerza en todos (o casi todos) los que hay, por ejemplo, en los textos
movimientos estudiantiles de entonces, y situacionistas de entonces son todas
que, efectivamente, heredarían los despreciativas o paródicas. Y el lenguaje y
movimientos sociales posteriores. Me el tono de la mayoría de las intervenciones
refiero al antiautoritarismo y al en las asambleas y en los comités de
antiimperialismo. Antiautoritarismo no sólo ocupación, así como el de la mayoría de los
en el sentido de la crítica de la autoridad panfletos escritos, era más bien
de la familia, del Estado, de las iglesias y “guerrero”, crítico del militarismo, sí
del mandarinato existente en la (particularmente cuando se hablaba de la
universidad, sino también como autonomía intervención norteamericana en Vietnam),
radical respecto de todos los partidos pero también exaltador de la violencia
políticos del arco parlamentario. Y revolucionaria, ya fuera en términos
antiimperialismo entendido como leninistas, guevaristas, consejistas,
oposición a los dos modelos maoístas o para recordar las virtudes de
socioeconómicos cristalizados durante la Durruti, de los combatientes del Vietcong o
guerra fría. En líneas generales estos rasgos del general Giap.
pasarían, ya en los años setenta, a la crítica
Los orígenes del feminismo, del ecologismo
feminista del patriarcado, a la crítica
y del nuevo pacifismo que cuajarían como
ecologista de la sociedad industrial y
movimientos en las dos décadas siguientes
productivista y a la crítica pacifista de la
no están ahí. Hay que buscarlos en otros
estrategia militar del terror.
sitios: en las universidades
Pero si por movimientos sociales nuevos norteamericanas, en las manifestaciones
entendemos lo que por entonces empezó a británicas contra la guerra (organizadas por
llamarse “nuevo feminismo”, o ecologismo el Comité Russell, entre otros), en los
o pacifismo, hay que decir enseguida que el discursos de Luther King y en la
mayo francés del 68 tuvo muy poco que Universidad Libre de Berlín.
ver con eso. Basta para probarlo con ver
Para no alargar más este punto y concluir
los documentos escritos y orales que han
con la tercera pista pondré aquí un sólo
quedado de las asambleas de Nanterre y la
ejemplo. El eslogan más célebre y más
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Francisco Fernández Buey: Tres pistas para intentar entender Mayo del 68