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UNIVERSIDAD PRIVADA ANTENOR ORREGO

FACULTAD DE CIENCIAS DE LA SALUD

PROGRAMA DE ESTUDIO DE OBSTETRICIA

ASIGNATURA:

Cirugía e Instrumentación en Obstetricia

Docente:
Dr. Paredes YupanquiDemetrio Baltazar

ALUMNOS:

● Abanto Escobar, Fatima


● Chullunquia Vergara, Ana Gabriela
● Paredes Nieto, Daniela.
● Salvador Lavado, Kari Lisset.

Trujillo – Perú

2022
INTRODUCCIÓN

A lo largo de la evolución humana, la conceptualización del dolor es un mecanismo


de defensa que activará una señal de alarma que avisa y protege del daño al
organismo. El dolor es la razón más frecuente por la que se solicita atención
médica. El dolor puede ser agudo o crónico, intermitente o constante, pulsátil o
estable. A veces el dolor es muy difícil de describir. Se siente en un solo sitio o
sobre un área extensa, y su intensidad varía de leve a insoportable. La tolerancia al
dolor difiere considerablemente en cada persona. Una determinada persona tiene
dificultades para tolerar el dolor debido a un pequeño corte o un hematoma y, sin
embargo, otra persona puede tolerar el dolor causado por un accidente grave o una
herida por arma blanca. La capacidad para soportar el dolor varía según el estado
de ánimo, la personalidad y las circunstancias de cada uno.
EL DOLOR
DEFINICIÓN:
En 1979, la Asociación Internacional para el Estudio del Dolor (IASP, por sus siglas
en inglés) definió el dolor como una experiencia sensorial y emocional desagradable
asociada con un daño tisular real o potencial, o descrita en términos de dicho daño.
En 2020, la IASP propuso una nueva definición: El dolor es una experiencia
sensorial y emocional desagradable asociada o similar a la asociada con daño
tisular real o potencial.

Las siguientes consideraciones fueron tomadas en cuenta para la nueva definición:

● El dolor es una experiencia personal influenciada en diferentes grados por


factores biológicos, psicológicos y sociales.
● El dolor y la nocicepción son fenómenos diferentes. El dolor no puede ser
inferido solamente por la actividad de las neuronas sensoriales.
● Las personas aprenden el concepto de dolor a través de las experiencias de
vida.
● Si una persona manifiesta una experiencia dolorosa, ésta debe ser
respetada.
● Aunque el dolor usualmente cumple una función adaptativa, puede tener
efectos adversos sobre la funcionalidad y el bienestar social y psicológico.
● Una de las maneras para expresar dolor es por la descripción verbal; la
incapacidad para comunicarse no niega la posibilidad de que un humano o
animal experimente dolor.

EPIDEMIOLOGÍA

El dolor es la causa más frecuente de consulta médica y el motivo más habitual de


solicitud de medicamentos sin receta. Diversas encuestas realizadas en nuestro
país muestran que alrededor del 30% de la población refiere haber padecido en las
últimas 48 horas, más del 40% en la última semana y casi un 80% en los últimos
seis meses. Tanto su prevalencia como su intensidad son mayores en las mujeres y
también aumentan con la edad.

El más frecuente es el dolor osteoarticular (principalmente la lumbalgia), seguido de


las cefaleas y, a mayor distancia, el dolor torácico y el abdominal. Con frecuencia es
crónico y afecta en gran medida a la calidad de vida y a la capacidad para
desarrollar las tareas diarias. Además de los costes directos que implica su
tratamiento, conlleva unos costes indirectos muy elevados en pérdidas de horas de
trabajo y disminución del rendimiento.

La epidemiología del dolor permite establecer la dimensión de lo que representa el


dolor en la salud y ayuda al desarrollo de medidas específicas para su solución.

¿Cómo se mide el dolor?

Dada la complejidad y la diversidad del dolor, y particularmente, el carácter


intensamente subjetivo de su percepción, parece evidente que su cuantificación
constituye un reto muy difícil de afrontar. Sin embargo, la cuantificación del dolor es
algo imprescindible a la hora de diagnosticar y tratar las causas que lo producen, de
mitigar la intensidad de su padecimiento y de valorar el efecto de los medicamentos
y los procedimientos destinados a anularlo, prevenir o paliar. Por el carácter
marcadamente subjetivo del dolor, parece obvio que es preciso empezar por que
sea el propio paciente quien lo valore. Para ello, las escalas más frecuentemente
utilizadas son las verbales y la escala analógica visual, que cuantifican la respuesta
del paciente al ser interrogado acerca de la intensidad del dolor que presenta.

TIPOS DE DOLOR

La clasificación del dolor puede hacerse en función de diversos criterios:

Según su duración
• Dolor agudo. Es un fenómeno de corta duración que generalmente se asocia a un
daño tisular y desaparece con la curación de este último. Suele estar claramente
localizado y su intensidad se relaciona con el estímulo que lo produce. Se
acompaña de reflejos protectores, como la retirada de la extremidad dañada o
espasmos musculares y produce un estado de excitación y estrés que conlleva un
incremento de la presión arterial.

• Dolor crónico. Tiene una duración de más de 3 o 6 meses, se prolonga más allá
de la curación de la lesión que lo originó o se asocia a una afección crónica. Tanto la
intensidad como la etiología y el patrón de evolución son muy variables. No tiene
una acción protectora y está especialmente influenciado por los factores
psicológicos, ambientales y afectivos.

Según su origen

• El dolor nociceptivo es el causado por la activación de los receptores del dolor


(nociceptores) en respuesta a un estímulo (lesión, inflamación, infección,
enfermedad). Como ocurre con el dolor agudo, suele haber una relación directa
entre su intensidad y la gravedad de la agresión.

• El dolor neuropático se origina por un estimulo directo del sistema nervioso


central (SNC) o una lesión de los nervios periféricos. No se relaciona, por tanto, con
la estimulación de las terminales sensitivas y suele acompañarse de disestesias y
parestesias. Es habitual que sea desproporcionado para el estímulo que lo produce
(hiperalgesia) y que aparezca sin que haya una causa identificable. Se considera un
dolor patológico, ya que no tiene ninguna utilidad como mecanismo de alerta o
defensa. Aunque se debe a causas muy diferentes, presenta características
comunes a la mayoría de los pacientes, como hormigueo, picazón, quemazón,
opresión, punzadas o descargas eléctricas.

• El dolor psicógeno no se debe a una estimulación nociceptiva ni a una alteración


neuronal, sino que tiene una causa psíquica (depresión, hipocondría) o bien se trata
de la intensificación desproporcionada de un dolor orgánico que se debe a factores
psicológicos.
Según su localización

El dolor nociceptivo de divide en:

• Dolor somático, cuando se estimulan los receptores de la piel, el sistema


musculoesquelético o vascular. Se caracteriza por estar bien localizado y aunque
con frecuencia es punzante, su tipología varía de unos pacientes a otros.

• Dolor visceral, que se debe a lesiones o disfunciones de los órganos internos,


aunque hay vísceras que no duelen, como el hígado o el pulmón. Es profundo,
continuo y mal localizado e irradia incluso a zonas alejadas del punto de origen.
Suele acompañarse de síntomas vegetativos (náuseas, vómitos, sudoración).

Por su parte, el dolor neuropático se divide en central y periférico, según en que


parte del sistema nervioso se localiza la lesión o enfermedad que lo causa.

Según su curso

El dolor que persiste a lo largo del día sin aliviarse se denomina continuo y sus
exacerbaciones repentinas y transitorias, dolor irruptivo. Este último se puede
clasificar a su vez en incidental (cuando existe un factor desencadenante como el
movimiento, la ingesta o la defecación) e idiopático o espontáneo.

Según su intensidad

Se considera leve si no interfiere en la capacidad para realizar las actividades


diarias, moderado cuando dificulta estas actividades, e intenso cuando interfiere
incluso en el descanso.

Según su sensibilidad al tratamiento

Se emplean clasificaciones como la que se basa en su respuesta a los opioides


(buena, parcial o escasa) y términos como dolor difícil (cuando no responde a la
terapia analgésica).

ANALGÉSICOS
La palabra analgésico procede etimológicamente del prefijo griego a-/an-(carencia,
negación) y de algos (dolor). Según la Asociación Internacional para el Estudio del
Dolor (IASP), éste se define como la experiencia sensorial y emocional
desagradable asociada a una lesión hística real o potencial, o descrita en términos
de dicho daño. Por tanto, el dolor no es solamente una sensación, es una
experiencia. Además, no se trata únicamente de algo sensorial, sino que también es
algo emocional. En ocasiones, el dolor no precisa de una lesión para manifestarse,
puede existir en ausencia de ella.
Los analgésicos se clasifican en primarios y secundarios.

● Los analgésicos primarios tienen como efecto farmacológico principal aliviar


el dolor. Son de amplio espectro, es decir, útiles en numerosos tipos de dolor.
Se distinguen tres tipos:
- Analgésicos-antitérmicos puros: paracetamol.
- Analgésicos-antiinflamatorios (AINE): ácido acetilsalicílico (AAS),
ibuprofeno, COX selectivos (celecoxib y rofecoxib). Los AINE actúan
bloqueando la enzima ciclooxigenasa (COX) e impidiendo la síntesis
de prostanoides (prostaglandinas y tromboxanos). La COX tiene tres
isoenzimas: COX-1, COX-2 y COX-3. Los AINE bloquean de forma
diferencial los tres isoenzimas lo que condiciona sus propiedades
farmacológicas.
- Opioides: Son fármacos por excelencia en el dolor postoperatorio.
Estos agonistas puros de los receptores opioides (morfina, codeína,
metadona, fentanilo), parciales (buprenorfina), agonistas-antagonistas
(pentazocina) y mixtos (tramadol).

Analgésicos secundarios

Los analgésicos secundarios tienen otras indicaciones, pero pueden disminuir algún
tipo de dolor específico. Son de espectro reducido y los hay de varios tipos:

● Antidepresivos: amitriptilina y clorimipramina.


● Antiepilépticos: carbamazepina, lamotrigina,
● Relajantes musculares: diazepam, tetrazepam y gabapentina y topiramato.
Están indicados en el ciclobenzaprina (antidepresivo tricíclico empleado en el
tratamiento del dolor que tiene un origen como relajante muscular).
neurógeno o neuropático. El mecanismo
● Anestésicos locales: lidocaína y prilocaína. Fundamental de acción de los
antiepilépticos, en los síndromes neurógenos, es su acción sobre el sistema
Los coadyuvantes o auxiliares se administran de propagación de la descarga
neuronal, ya que al conjuntamente con los analgésicos primarios y/o bloquear
los canales de Na dependientes del voltaje secundarios para potenciar sus
efectos analgésicos o estabilizan la membrana neuronal y suprimen la para
contrarrestar sus efectos indeseables. Se emplean: hiperexcitabilidad
neuronal anómala.
● Corticoides.

La escalera analgésica de la OMS

Se diseñó inicialmente para combatir el dolor oncológico. Sin embargo, en la


actualidad se utiliza en la mayoría de pacientes que presentan dolor. Consiste en
una graduación progresiva de la terapéutica analgésica de acuerdo con la respuesta
obtenida por el paciente. Implica el empleo inicial de paracetamol y AINE, para
pasar después a las asociaciones con opioides menores (codeína, etc.) y
posteriormente a los opioides mayores (morfina, etc.).
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
● del Arco, J. (enero de 2015). Curso básico sobre dolor.Fisiopatología,
clasificación y tratamiento farmacológico | Farmacia Profesional. Elsevier.
https://www.elsevier.es/es-revista-farmacia-profesional-3-articulo-curso-basico
-sobre-dolor-tema-X0213932415727485

● ESTEVA E. (2008). Analgésicos clasificación y usos. Offarm. Vol. 27. Núm.8.


Páginas 68-76. Disponible en:
https://www.elsevier.es/es-revista-offarm-4-articulo-analgesicos-clasificacion-u
so-13126070

● Vidal Fuentes, J. (2020). Versión actualizada de la definición de dolor de la


IASP: un paso adelante o un paso atrás. Revista de la Sociedad Española del
Dolor , 27 (4), 232–233. https://doi.org/10.20986/resed.2020.3839/2020

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