Vivir para contarlo

Testimonios y Reflexiones de Sobrevivientes de la Guerra Sucia en México

PEDRO MIGUEL MORÓN CHICLAYO

MEDICO INTEGRANTE DE LA BRIGADA ROJA DE LA LIGA
COMUNISTA 23 DE SEPTIEMBRE ASESINADO EN PRISIÓN

Número 1. México 01 de junio de 2021


EDITORIAL
N
uestro colectivo ha estado atento al desarrollo
del proceso electoral que está en marcha en
nuestro país. Nos interesa, porque
coincidimos la mayoría de nosotros, en que hay que
apoyar a la Cuarta Transformación, impulsada por el
presidente Andrés Manuel López Obrador y darle
forma al Proyecto de Nación que él mismo propone
Pero la situación a últimas fechas no pinta bien, se
aprecia que MORENA no está haciendo lo debido para
ganar la elección (la que se denomina la más grande y
amplia en la historia de México) desde la selección de
los candidatos hay desviaciones que no llevan al
objetivo.
El planteamiento es ganar la mayoría en la Cámara
de Diputados, más aún, ganar más curules que las que
se ganaron en la insurrección electoral de 2018 y
entonces la pregunta sería: ¿Se está en el camino
correcto? Hay quienes pronostican que se ganará una
mayoría, pero menor a la que se tiene y otros incluso
piensan en que no se logrará y que las diputaciones de
MORENA y sus aliados no harán, ni siquiera, el
número que tienen ahora.
Pero ¿como se visualiza el proceso electoral? Para
empezar, no se puede negar que hay muchos candidatos
de la izquierda, integrada por los partidos que forman
la Coalición, que son realmente impresentables, o por
lo menos en otros casos, cuestionables. Hay expriistas,
ex­panistas, ex­perredistas y otros ex, que no llenan el
perfil que se requiere para que en caso de que sean
electos, puedan realmente trabajar en la línea de no
nada mas conservar, sino profundizar la Cuarta
Transformación. Es más, se dice y se aprecia, que en
muchos casos son enemigos de ella, tenemos el
ejemplo de Mauricio Toledo, de negro historial, que
2
Vivir para contarlo. Junio de 2021
aparece como abanderado ahora, del Partido del
Trabajo y que pretende reelegirse como diputado, bajo
esas siglas, recordemos sus acciones francamente
porriles en el proceso del 2018 en contra de candidatos
de MORENA y sus expresiones sobre López Obrador.
Podemos ver los casos de las candidaturas a las
gubernaturas en Nuevo León y San Luís Potosí, y otros
a nivel de diputaciones y presidencias municipales,
donde no vemos a la izquierda a la altura de las
necesidades. Hay candidatos que son totalmente
rechazados en actos proselitistas, por ejemplo en San
Cristóbal de las Casas, Chiapas. El mismo presidente
del partido, Mario Delgado, ha sido abucheado y
sufrido ataques con huevos ­en el buen sentido­ en
diversas partes del país, donde se ha presentado según
él a apoyar a sus candidatos. Además, ha sido acusado
de venta de candidaturas y se ha comentado, que no se
sabe por qué motivo desea una mejor relación con el
Verde Ecologista que con el Partido del Trabajo, que
cuando menos en lo formal, está situado a la izquierda
hasta de MORENA, al grado de haberle comunicado
intempestivamente, hace unas semanas, que la
coalición con ellos quedaba sin efecto, situación en la
que tuvo que intervenir López Obrador a instancias del
presidente de este, echando atrás, esta pifia política.
De pronto da la impresión que la izquierda se fabrica
sus propias contras.
Ahora ¿cómo van las fuerzas que están en contra
de la Cuarta? Es evidente que su condición es baja
dentro del proceso, los partidos políticos tradicionales
que hoy son aliados, pese a sus contradicciones, no
encuentran la recepción que esperaban dentro del
electorado. Los partidos que acaban de obtener su
registro, apenas se mueven y sus candidatos, salvo en
Vivir para contarlo. Junio de 2021
algunas regiones, tienen alguna presencia. Caso aparte
es el partido de Dante Delgado, Movimiento
Ciudadano, del cual se mira que hay cierta recepción
a sus campañas en algunos lugares, y lo que es de
llamar la atención, sin alianza política con otros
partidos, están continuando un trabajo que les ha dado,
hasta estos días, algunos resultados. Tal vez porque
tienen una posición propia. Y esperan más,
pretendiendo constituirse, según lo manifiestan, en la
Tercera Vía. Aunque hay que señalar que en los últimos
días no les ha ido tan bien, como en Sonora, donde su
candidato a la gubernatura declinó, sin avisar o
consultar con el partido, a favor de la alianza Va por
Sonora, en favor de Ernesto Gándara, además de que
su candidato a la presidencia municipal de Cajeme fue
asesinado. Se han producido también algunos
desacuerdos internos, lo que muestra que, en cierta
forma, llegará disminuido al 6 de Junio.
Desde luego hay que destacar los apoyos que tienen
los partidos oponentes al actual gobierno y a López
Obrador; las fuerzas de la derecha, ya no tan
emboscada, que están haciendo su juego apoyando
mediáticamente y con recursos económicos que se
aplican en las campañas de manera ilegal, que buscan
subir la votación de los opositores y bajar la votación
de la izquierda, basta ver la actividad de organismos
como el dirigido por Claudio X. González, denominado
Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, que
recibe cuantiosos recursos del Consejo Mexicano de
Negocios, que es la cúpula de las cúpulas, donde se
encuentran los empresarios mas ricos de México y es
nido de la oposición mas enconada al actual gobierno.
En días pasados, López Obrador denunció y protestó
ante el gobierno de los Estados Unidos, por el
financiamiento a esta organización, aunque desde luego,
los fondos siguen llegando. Es de hacerse notar,
también, la gran actividad que desarrollan en las redes
sociales y que les da ciertos resultados por lo masiva y
constante, como ese machacar, sobre todo del PAN,
que ahora se manifiesta por el accidente de la Línea 12
del Metro en la Ciudad de México.
Y, por último, dos aspectos también, sumamente
importantes:
La actuación del INE que está en franca actividad
contra todo lo que huela a izquierda, llegando al
extremo de que Lorenzo Córdova, su presidente, ha
declarado sobre la posibilidad de la anulación de las
elecciones, pasando antes por haber bajado de las
candidaturas a los representantes de Guerrero y
Michoacán, entre otros más. El papel que está jugando
el INE es peligroso, el pueblo ya no se las cree y si
pretenden abortar ahí los triunfos de la izquierda,
pueden pasar muchas cosas, no habría la resignación,
ni aceptación, que se dio en otros procesos.
Otro aspecto que considerar, es la intervención de
los diversos grupos del crimen organizado dentro del
proceso electoral, es claro que los ataques armados en
contra de los candidatos de los distintos partidos, son
obra de ellos, y es alarmante porque en procesos
pasados sabíamos que apoyaban a los que tendrían
componendas con los diversos grupos delictivos, pero
ahora se deja ver que candidato que no es de ellos no
pasa: se hace notar la gran cantidad de renuncias a las
candidaturas, a diversos cargos de elección, así como
la gran cantidad de ataques armados, casi todo los días,
que han producido un sinnúmero de asesinados, lo cual
se podría interpretar como que el crimen organizado
esta situando a sus candidatos y los hará llegar al
congreso, presidencias municipales y hasta
gubernaturas.
Esperaremos atentos el día 6 de este mes de junio,
sea cual sea el resultado. Los sobrevivientes estaremos
por profundizar la Cuarta Transformación, nos
mantendremos en la lucha contra la derecha, seguiremos
pugnando por el castigo a los perpetradores de la
desaparición de nuestros compañeros y por la atención
médica, económica y de reparación integral de daños
a los que todavía resistimos hasta estos días.
Enrique Tellez Pacheco
Presidente de Sobrevivientes de la Guerra Sucia A. C.
3

CARTA AL CAMARADA DOCTOR CHICLAYO:
E
ste 22 de mayo del 2021 se están cumpliendo
ya 47 años de tu vil asesinato en el tristemente
célebre Palacio de Lecumberri, por órdenes de
Miguel Nazar Haro el más sanguinario de los verdugos
que han existido en la historia mexicana, autor de
cientos de secuestros, torturas, atropellos y asesinatos
a lo largo y ancho del país.
Aún te recuerdo tan nítidamente con tus grandes
lentes gruesos con fondo de botella, vistiendo un saco
gris o una chamarra café y unos pantalones rectos
negros o de mezclilla con tus zapatos zoclos medio
boludos al frente y a veces usando una camisa de
manga corta blanca. Eras de una estatura baja,
aproximadamente de 1.65 metros y de una complexión
regular y cuerpo macizo, tenías tez morena y eras de
hablar alegre con tu clásico acento peruano
inconfundible.
Fuiste compañero de estudios y gran amigo de mi
hermano mayor, Heriberto, en la Facultad de Medicina
donde ambos cursaron la carrera de médico durante los
años del 67 al 72 en la Universidad Nacional Autónoma
de México. Ocasionalmente llegaste a ir a la casa a
visitar a mi hermano para estudiar o para alguna otra
cosa y te quedabas platicando con él o salían a caminar
un rato para conversar.
A finales de marzo de 1973 fuiste a verme para
invitarme a pertenecer a un movimiento revolucionario
que ya contaba con una organización, la que estaba
integrada con la unificación de varias organizaciones
a nivel nacional. Me dijiste que acordaron crear células
de 5 ó 6 elementos en todas partes de manera
compartimentada para un mejor funcionamiento y
4
Vivir para contarlo. Junio de 2021
protección, ya que al estar organizados así, no nos
conocíamos todos.
Esto lo hiciste porque sabías que yo había
simpatizado y había participado en algunas
movilizaciones del movimiento estudiantil popular del
68, asunto que conversamos en ese mismo año, en una
de las reuniones que tuvieron en mi casa, mi hermano
tú y otros compañeros de ustedes que pertenecían al
Comité Coordinador del Consejo Nacional de huelga
del 68.
Te causaba mucha gracia recordar que te platiqué
que en 1969, junto con mi hermano Juan y otro amigo
nos fuimos a buscar a Genaro Vázquez a Michoacán,
para integrarnos a la guerrilla de él, preguntándoles
ingenuamente a las personas que nos encontrábamos,
cómo podríamos dar con Genaro para integrarnos a su
grupo armado, obteniendo infructuosos resultados,
porque pues veían a unos chamacos de 17, 16 y 14
años, edades que teníamos en ese entonces,
regresándonos tristemente a nuestras casas.
También supiste por mi hermano Beto que les ayudé
a repartir el periódico quincenal que ustedes editaron
de 1969 a 1970 llamado LA HORMIGA. Asimismo
supiste que estuve en el Comité de Lucha de la Escuela
Nacional Preparatoria número 3 "justo Sierra" en San
Ildefonso, Distrito Federal y que me tocó estar el 10
de junio en la marcha de la Normal de Maestros al
monumento a la revolución donde me salvé de las balas
de los halcones por milagro ya que a ambos lados míos
cayeron muertos o heridos 2 compañeros de la marcha.
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Ese 10 de junio de 1971, conocimos por primera
vez a los llamados halcones, un grupo de choque
entrenado para reprimir al movimiento estudiantil.
Ellos habían sido llevados en camiones de la policía
y granaderos y se pusieron a disparar sobre los
estudiantes con rifles, pistolas y ametralladoras.
También de que participé en Brigadas de Apoyo a los
trabajadores de Ayotla Textil y otros grupos de
trabajadores en huelga y en pie de lucha.
A principios de mayo de 1973 renté, por órdenes
tuyas, un cuarto cerca del Colegio de Ciencias y
Humanidades Oriente, donde yo ya había contactado
a 4 compañeros estudiantes con los que había
coincidido que el único camino que existía ya no era
protestar por obtener pequeños logros democráticos,
sino que era la lucha armada por el Socialismo. Ibas
una o dos veces por semana para la sesión de estudio
en dicho cuarto. Tenías una profundidad de análisis y
un don para explicar las cosas fácil y
comprensiblemente por muy difíciles que éstas fueran.
En la última semana del mes de abril de 1973, te
acompañé a comprar muchísimo papel revolución para
hacer los volantes ¡Por un Primero de Mayo de
combate proletario! aproximadamente fueron como
20,000 hojas y te acompañe a dejarlas cerca de un
parque en la colonia San Juan de Aragón.
Durante nuestras reuniones de estudio tuve la
oportunidad de conocer a tu esposa "Luisa" quién nos
acompañó en ocasiones para repartir volantes o para
estudiar y discutir algunos temas en ese entonces tanto
de libros cómo de documentos así como al
compañero"Bruno" quien también nos daba enseñanzas
de defensa y ataque. Los documentos qué más
estábamos estudiando eran los "Procesos" y la
"Universidad Fábrica" así como El Capital y otros
libros.
Tu labor fue incansable porque no sólo atendías la
célula de Oriente sino que también estabas
coordinando a dos o tres células más; una de ellas de
CCH Vallejo con mi hermano Juan, aparte de qué te
convertiste en el doctor de las acciones armadas que
realizaba nuestra Brigada Roja tanto en el Distrito
Federal como en sus alrededores, en el Estado de
México.
En ese año de 1973, que lejos estábamos de
imaginarnos que al año siguiente el 22 de mayo de
1974 fueras asesinado de 39 puñaladas por unos presos
comunes apodados “El Coyote" y “El Zarco", quiénes
recibieron órdenes expresas del sanguinario Nazar
Haro y que, por azares del destino, quedaron impunes
sin ser ajusticiados.
En el mes de junio de 1973 fuimos a repartir unos
volantes al CCH Vallejo y se nos interpusieron un
grupo de estudiantes tipo porros que nos dijeron que
no podíamos repartir propaganda subversiva sin
autorización del Comité de Lucha, a lo que tú
camarada Miguel Morón Chiclayo que en aquel
entonces te conocíamos cómo "Esteban", te les
enfrentaste y les dijiste decidido, fuerte y claro: ¡Pues
háganse a un lado fantoches porque ésta es la guerrilla!
y al verte tan decidido y secundado por nosotros, se
fueron a buscar refuerzos mientras que nosotros por
nuestra parte nos apuramos a repartir los volantes que
eran alusivos al 10 de junio para salir lo más pronto
posible y así evitar un enfrentamiento innecesario
tanto de los seudo estudiantes como de la posible
llegada de la policía.
Durante los meses siguientes hubo un sinfín de
anécdotas de las cuales participamos juntos y las
narraré en algun otro escrito, y ya para los últimos días
del mes de noviembre de 1973 te detuvieron, al
compañero Arturo Rivas, a la compañera Artemisa
Tecla Parra y a Roberto Ramos, manteniéndolos
detenidos en distintas cárceles clandestinas y en el
Campo Militar Número 1 y en todos esos lugares
estuvieron sufriendo torturas de todo tipo durante
aproximadamente 9 semanas ilegalmente
incomunicados. Y ya para el mes de febrero de 1974,
al parecer tras recibir un revés de nuestros compañeros,
los presentan ante la prensa como que si hubieran caído
en un enfrentamiento precisamente en esos días
ocultando, cómo era su costumbre, que los habían
tenido detenidos durante 2 meses atrás, sometiéndolos
a las más inimaginables torturas, violando todo derecho
humano.
5
 Vivir para contarlo. Junio de 2021

En realidad el motivo de tu detención, no ha dentro de la Universidad y que se llamaba

quedado clara, tú supiste que fue debida a que fue a tu
domicilio a consultarte uno de los altos mandos de La
Liga al que le diste una receta médica para que se
surtiera de medicinas con la recomendación de que
inmediatamente que se la surtieran la destruyera, cosa
que al parecer no hizo y lo detuvieron a él y
encontraron la receta con tu domicilio. En ese entonces
tú, y muchos de nosotros, aún no entrábamos a la
clandestinidad.
De la declaración que te arrancaron a base de
torturas en la DFS, quiero extraer algunos datos
importantes de tu vida antes de venir a México y de
tus primeros días en el país.
“La Dirección General de Seguridad a través de
los agentes de la División de Investigación para la
Prevención de la Delincuencia, detuvieron el 30 de
noviembre último. La Dirección Federal de
Seguridad interrogaron al Dr PEDRO MIGUEL
MORÓN CHICLAYO con los alias "Esteban",
"Doc" de veintiséis años de edad, originario de
Chiclayo, Perú, con respecto a los hechos que se
investigan declaró: que nació el día ocho de octubre
de 1947 en la población de Chiclayo, República del
Perú, hijo del señor JUAN MANUEL MORÓN
VARGAS y de la señora ISMELIA CHICLAYO
SOTO, ambos de nacionalidad Peruana, que su
madre vive actualmente en la población de origen,
porque en el año de 1972 sufrió un accidente
automovilístico en el que pereció el padre del
declarante, que él es hijo único y que estudió sus
primeros cinco años en su lugar de orígen en una
escuela particular católica denominada Manuel
Lerdo, dirigida por sacerdotes católicos y que allí
mismo hizo su secundaria. Su preparatoria la
efectuó en el colegio militarizado Elías Aguirre en
la misma población de Chiclayo. Posteriormente
estudió en la universidad de San Marcos en Lima
Perú 2 años en la carrera de economía y
administración.
"Vanguardia Revolucionaria" cuyas tendencias
políticas eran afines al régimen de FIDEL CASTRO
RUZ, y que esto sucedía en los años de 1965 y
1966, cuando por otra parte en el Perú se
realizaban actividades de tipo guerrillero­ rurales,
pero en vista de que los anhelos del declarante era
estudiar Medicina y no poderlo realizar en su país,
debido a que el cupo en esa Carrera, era el de 200
alumnos restringido con relación a la demanda y
sintiéndose frustrado por otra parte por las
acciones políticas de la organización
Revolucionaria denominada "Vanguardia
Revolucionaria" que no pasaba de dedicarse
únicamente a la propaganda, sin proponer nada en
concreto de la línea política que abanderaban,
decidió venirse a México para estudiar la carrera
de Medicina, pero para eso, su padre descontento
con la ideología de él y sus actividades políticas en
la Universidad del Perú, decidió tramitar su ingreso
a la Facultad de Salamanca, España, y al darse
cuenta de eso, por su parte prefirió tramitar su
ingreso a la Universidad Autónoma de México ya
que comparando a España con México escogió
venir a éste País del que se imaginaba era
socialista, lo que actualmente ha constatado que es
un país Capitalista.

Que desde que Ingresó en la Universidad de San

Marcos en Lima Perú, empezó a sentir simpatía por
un grupo político de izquierda que se desenvolvía

6
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Que al recibir contestación de la Universidad
Autónoma de México, tramitó su documentación
migratoria para así poder ingresar a nuestro País
y así que el 26 de diciembre de 1966 salió del Perú
en avión y llegó a nuestro país el 3 o 4 de enero de
1967 después de haber permanecido en la Ciudad
de Miami Fla. EUA; y que al llegar al Aeropuerto
Internacional de la Ciudad de México mostró su
documentación FM­9 que corresponde a la calidad
de no inmigrante como estudiante; y que como
únicamente traía 20 dólares en la bolsa se fue a
hospedar a un hotel de baja categoría que se
encuentra ubicado en Viaducto e Isabel La Católica
y que después se fue a vivir a una casa que se
encuentra ubicada en la Calle de Iturbide, dónde
habitaban varios estudiantes del Estado de Nayarit,
que habían terminado la carrera de Economía y
otras, mismos que al mes le recomendaron una casa
de huéspedes de una señora de Nayarit de cuyo
nombre no recuerda, ubicada en la calle de Xola
cerca de la Glorieta de Etiopía, dónde vivió un mes
y medio, dónde conoció a unos estudiantes de
Sonora, entre ellos a PABLO CASTILLON ÁLVAREZ
y VÍCTOR ÁLVAREZ con quiénes después rentó un
departamento en Antonio Caso casi esquina con
Serapio Rendón. Que al ingresar a la Facultad de
Medicina de la UNAM conoció a FRANCISCO
LINO OSEGUEDA CÁCERES, RAÚL MORENO
WONCHE y a FRANCISCO TOLEDO G. con
quienes cultivó amistad y que al iniciarse el
movimiento estudiantil de 1968 y que desde luego
dada su Ideología participó ideológicamente con
los fines políticos del movimiento, sin embargo, no
fue a ninguna manifestación pública, ni asambleas,
ni mítines y ni reuniones por recomendaciones que
le hicieron sus mismos compañeros Raúl Moreno
Wonche y Lino Oseguera, quiénes se destacaban
como miembros del Consejo Nacional de Huelga,
para protegerlo, dada su calidad de extranjero y
además su padre vino en el mes de agosto, para
controlarlo, dada la situación estudiantil que se
presentaba en México. Que en los años de 1969, 70
y 71, se dedica a estudiar con ahínco para terminar
su carrera. En el año de 1972 recibe la noticia de
la muerte de su padre y como consecuencia el
término de la ayuda económica que su familia le
brindaba. Pero para eso, en diciembre de 1971,
conoció y se unió a BLANCA ESTELA (a) LUISA,
originaria de Cutzamala de Pinzón, Gro. y a quién
conoció en el Hospital General en un cursillo que
había de Medicina preventiva porque ella era jefa
de los Servicios de Medicina Preventiva del Hospital
del Seguro Social, en Acapulco Gro. Ella le
manifestó haber pertenecido al Partido Comunista
Mexicano, durante el tiempo que era estudiante
preparatoriana, y a través del tiempo ambos se
conocían y eran más afines en sus ideologías que
consistían en no ser creyentes de reforma alguna,
sino más bien en la necesidad de un cambio social
mundial, por la vía violenta, ya que las experiencias
hasta el momento habían demostrado que por la vía
pacífica no se llega a la toma del Poder. Que
durante el año de 1972 por la crisis económica que
padecía y que no pudo resolver por ningún medio,
se vio en la necesidad de ver a varios doctores, que
entre ellos menciona al Dr. DANIEL GONZÁLEZ Y
GONZÁLEZ quién lo recomendó al Hospital de
Santa Elena para que trabajara de enfermero,
puesto que para ese entonces había terminado el 5º
año de la Carrera de Médico. Que en el Hospital
de Santa Elena trabajó durante un mes porque sus
aspiraciones como pasante de Medicina, eran
mayores. Que en Octubre de ese año realiza sus
gestiones para realizar su Servicio Social en el
Centro de Salud "A" de Ciudad Netzahualcóyotl.
Lugar donde empieza a laborar sin sueldo y en vista
de que su situación económica era apremiante,
acude a la Facultad de Medicina para que lo
orientaran y le brindaran apoyo y así obtener el
sueldo que como pasante de medicina le
correspondía. Que cuando se encontraba
gestionando ésto último, a fines de febrero o
principios de marzo de 1973 saludó al dr.
FRANCISCO TOLEDO a quién había conocido en
sus estudios en la Facultad de Medicina y
encontrándose platicando con éste, llegó un joven
que le fue presentado al diciente como un futuro
Ingeniero Mecánico del Politécnico y los 3 se fueron
a tomar un café en la cafetería de la Facultad de
Medicina y al conocer al mencionado joven, quién
le dijo al declarante llamarse ERNESTO, que la
nacionalidad del de la voz era el de Peruano,
7
 Vivir para contarlo. Junio de 2021

empezaron a platicar sobre la situación política

del Perú, refiriéndose a la evolución del sistema
político de ese país que quería aparentar una
democracia liberal a pesar de estar bajo la bota
militar, pudiéndose dar cuenta el de la voz que el
mencionado ERNESTO era una persona
políticamente muy avanzada y que al término de
la plática el tal ERNESTO, insistió en acompañarlo
al autobús que iba a abordar para dirigirse a su
casa y durante el trayecto, ERNESTO le sugirió
tener otras entrevistas ya que mostró su interés en
tener conocimientos médicos. Que quiere aclarar
que el tal ERNESTO es ALFONSO ROJAS DÍAZ
(finado), quién falleció durante los hechos
sucedidos en POPO PARK y teniendo la fotografía
del cadáver a la vista en éste momento, lo reconoce
como al mismo al que se está refiriendo con el
nombre de ERNESTO. Que al haberle
proporcionado ese día su nombre y domicilio,
ALFONSO ROJAS DÍAZ, éste lo visitó varias
ocasiones durante el mes de marzo y abril".

Espero que este escrito ayude a aportar un poco

para conocer y reconocer la gran labor del Camarada
Pedro Miguel Morón Chiclayo, un valiente joven
revolucionario que ofrendó su vida en nuestro país
siendo de origen peruano, situación que enaltece aún
más su valía como un gran ser humano. Y junto a los
que recojan las armas de los caídos, diremos que tu
muerte no fue en vano y que por todos los caídos, no
un minuto de silencio, sino toda una vida de lucha.

¡Hasta la victoria síempre!

La tierra natal del combatiente revolucionario Pedro
¡Venceremos! Miguel Morón Chiclayo, en el Perú

Rafael Ramos Eusebio

Exmilitante de la Liga Comunista 23 de Septiembre
El autor agradece a los compañeros Simón, Arturo
y Eneida, su apoyo para la elaboración de este
escrito.
"Sobre todo, sean siempre capaces de sentir
en lo más hondo cualquier injusticia
cometida contra cualquiera en cualquier
parte del mundo. Esa es la cualidad más
linda de un revolucionario."

Ernesto "Che" Guevara

Carta de despedida de sus hijos

8
Vivir para contarlo. Junio de 2021

MENSAJE DE
RESPALDO AL
PUEBLO PALESTINO

Jóvenes palestinos sonriendo mientras son arrestados, redes sociales en una

coordinación unificadora por los “palestinos de 1948”, intifada popular y lucha
por la dignidad caracterizan el escenario de decenas de ciudades palestinas
en descontento político ante la ocupación israelí.
La ocupación sionista en territorio palestino exige que la opinión pública
transnacional se manifieste como respaldo y en solidaridad con las actuales
expresiones de resistencia palestina. Por ello, desde Sobrevivientes de la Guerra
Sucia A.C. enviamos un mensaje de apoyo a la causa palestina, que no es ajena
a nuestra lucha por la construcción de sociedades más justas, equitativas y
democráticas: compartimos su esperanza de tierras mejores.

¡Alto a la ocupación israelí y su desproporcionado uso de la fuerza en Gaza!

¡Libertad para Palestina!
¡Del río al mar, Palestina será libre!

9
 Vivir para contarlo. Junio de 2021

Las páginas de Vivir para contarlo están abiertas para

a los sobrevivientes de los diversos grupos que
formaron parte del Movimiento Armado Socialista en
México y para, familiares, estudiosos y personas
solidarias.

Nuestros objetivos

* Contribuir al rescate de la memoria histórica del

movimiento armado socialista en México,
* Recordar y redignificar a nuestros compañeros caídos
* Reflexión y posicionamiento sobre el periódo actual
* Reflexión y extracción de experiencias sobre el movimiento
armado socialista,
* Exponer los avances concretos de nuestra asociación civil
* Recuperar la poesía y otras expresiones literarias de
nuestros compañeros.

Pueden enviar sus colaboraciones al watsap

5628077160. Correo sobrevivientesdelag@gmail.com

Nota: Las colaboraciones se recibirán en archivo electrónico

de texto, debidamente corregido de redacción y ortografía. En
caso de exceder de 3 cuartillas se publicará por partes. El
Consejo Editorial priorizará los materiales recibidos a partir de
criterios de calidad, profundidad y oportunidad.

Los artículos publicados son responsabilidad de quién

escribe y NO NECESARIAMENTE REPRESENTAN EL
PUNTO DE VISTA DE NUESTRA ASOCIACIÓN.

Gaceta mensual. Aparece el primer día de cada mes. CONSEJO EDITORIAL: Presidente: Enrique Tellez
Pacheco. Responsables de Secciones. Caídos en la lucha: Rubén Ramírez González, Rafael Ramos Eusebio y
Judith Galarza. Testimonios: Roberto Ramos Eusebio y María Guadalupe Estrada Gámez. Análisis de Coyuntura
actual: David Cilia Olmos. Reflexiones sobre el periodo de la lucha armada socialista: Mario Rechy Montiel.
Poesía y literatura: Varinia Alfaro Estrada. Tipografía y Formación: Varinia Alfaro Estrada y David Cilia Olmos.

Página de Internet: https://sobrevivientesdelaguerrasucia.wordpress.com/

10
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Los prolegómenos del Partido de los Pobres
E
ste 18 de mayo de 2021 se cumplen 54 años de
la brutal represión a una manifestación pacífica,
en la plaza Morelos en Atoyac de Álvarez
Guerrero por el gobierno de Raymundo Abarca Alarcón,
con un saldo de campesinos asesinados. El mitin de
protesta, fue por la intervención policiaca en un
conflicto netamente educativo –que ya se había
resuelto­ en la escuela Gral. Juan Álvarez, donde
predominaba la corrupción y el despotismo contra
maestros, alumnos y padres de familia. La
inconformidad se inició al interior en las asambleas de
la escuela, por los años de abusos acumulados,
habiendo un cuestionamiento a la falta de probidad de
una mesa directiva que había perdurado diez años sin
ser removida. Ante el reclamo de maestros y padres de
familia, la respuesta a este descontento, la directora
Julia Paco Piza en contubernio con las autoridades
educativas del estado, ejerció represalias contra el
profesor Alberto Martínez Santiago; enviándolo a otra
zona escolar del municipio de Coyuca de Benítez. Fue
clara la actitud del bloque perverso:
Julia Paco Piza, maestros que la seguían, caciques y
lacayos a asumir una confrontación con la clara
decisión de no ceder nada; porque sustentaban un poder
que para ellos era indiscutible; cooptaban a todo
personaje representativo, incluso tenían a su favor al
presbítero Isidoro Ramírez Suárez de la iglesia de
Atoyac, ya que en cada misa el sermón era dedicado
contra el movimiento. Fue cuando en una misa la señora
Justina Mateos –quien formaba parte de un grupo
de voluntarios de apoyo a la iglesia– al escuchar al
sacerdote expresarse mal de los manifestantes; la mujer
renunció a este grupo de voluntariosos, ya ella apoyaba
al movimiento de la Juan Álvarez.
Al profesor Martínez se le acusaba de ser
comunista, impartir en sus clases ideas comunistoides
y, por lo tanto, decían no querer profesores de esa
ideología en el plantel. Según testimonios de alumnos
de sexto año, que participaban en el movimiento, el
profesor les leía párrafos de la revista Siempre y que
no mencionaba nada de comunismo. En cuanto a la
opacidad en la administración de los recursos, había un
cobro por alumno de inscripción y una mensualidad;
además una cooperativa sin ninguna rendición de
cuentas. Por otra parte, la obligatoriedad de uniforme
de diario más aparte otro de “gala”. Alumno que no
cumpliera con vestir el uniforme no tenía acceso a
entrar a recibir clases, todo esto expresaban los
maestros, alumnos y padres de familia inconformes,
por lo mismo se lanzaron a la lucha. En cuanto a los
pagos y los uniformes, podrá pensarse que eran
requisitos que se podían cumplir, pero había una
mayoría de alumnos de padres en pobreza extrema, en
un medio donde no existían fuentes de trabajo donde
emplearse; campesinos que –al levantar sus cosechas–
quedaban en las mismas condiciones de miseria, al
acudir con los acaparadores a vender sus productos
agrícolas a precios bajos.
Cabe señalar, que a esta escuela asistían los hijos
de la élite adinerada, que sentían como su propiedad y
con todo el derecho de atropellar a la gran mayoría de
pobres que también ingresaban a estudiar. Era
inminente que el movimiento se enfrentaría a la
burguesía local, porque sentían que se podía llegar
atentar con sus fuertes intereses políticos y económicos.
No solo sería la defenestración de Julia Paco Piza y los
maestros traidores, sino que si se ganaba sería un triunfo
para el comunismo, según su actitud reaccionaria y
anticomunista. Porque obviamente habría una
administración democrática, con un uso transparente
de los recursos y un trato digno al personal docente y
alumnos.
11

Al agudizarse las contradicciones con la mesa
directiva que ejercía el predominio, los inconformes
deciden la lucha abierta y el 21 de abril de 1967,
realizan un mitin en la plaza Morelos donde
denunciaron todo lo antes descrito, pero ahora
exigiendo la renuncia de Julia Paco Piza y el regreso
del profesor desterrado Alberto Martínez Santiago.
Ante la búsqueda de solidaridad de otros planteles
educativos, acuden a la escuela Modesto Alarcón,
donde los maestros, la sociedad de padres de familias
y alumnos habían experimentado una experiencia
similar, al defenestrar a la directora Genera Reséndiz
que se aferraba a continuar con métodos rupestres de
la enseñanza, con la vara en mano y el maltrato a los
alumnos y a los profesores. Con la llegada de una
generación de docentes jóvenes, lo más lógico fue la
exigencia de cambios y las contradicciones se
exacerbaron que se emprendió una lucha por destituir
a la directora. También al interior del plantel, había
una cooperativa con un manejo no transparente y la
maestra Reséndiz obligaba a los alumnos a consumir,
sólo en este negocio.
En este movimiento el choque fue más con el
gobierno de Raymundo Abarca Alarcón, que se
empecinaba en mantener en el cargo a la directora con
anuencia del gobierno federal. La élite adinerada, no
tenía ningún interés en el control de este plantel, ya
que quienes ingresaban eran de la población marginada.
Sin embargo, fue una lucha que tuvo larga duración y
una de las represalias –en este caso– fue el destierro
de los profesores Lucio Cabañas Barrientos y Serafín
Núñez Ramos enviados al estado de Durango, pero la
presión de los padres de familia y alumnos obligó a la
Secretaría de Educación Pública a regresarlos, además
que en cuanto llegaron los mentores a Tuitán
municipio de Ciudad de Dios, organizaron la Unión
de Madres de Familias de Tuitán que exigían empleo
para sus esposos, activismo que no le pareció al
gobierno de Durango y pugnó porque los regresaran.
Así, triunfo el movimiento.
Con este antecedente, los maestros, padres de
familia y alumnos se sumaron a la lucha de la escuela
Gral. Juan Álvarez. Con esta experiencia y la influencia
con la población, fue preponderante la participación
12
Vivir para contarlo. Junio de 2021
de los docentes de la escuela Modesto Alarcón que por
su liderazgo tuvieron el reconocimiento los profesores
Lucio Cabañas Barrientos y Serafín Núñez Ramos y
se convirtieron en los principales dirigentes.
Transcurrieron muchos días de movilizaciones, los
jóvenes comunistas nos desplazábamos a comunidades
campesinas, donde hicimos asambleas invitando a los
pobladores para que participaran en esta lucha. El
movimiento había crecido y adquirido un carácter
popular, con la participación de la Organización de
Mujeres Mexicanas (OMM), Movimiento
Revolucionario del Magisterio (MRM), la Central
Campesina Independiente (CCI) y los colonos de la
Mártires de Chilpancingo. A la vez, de apoyar estas
organizaciones el pliego petitorio en la esc. Gral. Juan
Álvarez, exigían cumplimiento a sus propias demandas
al gobierno. Los campesinos se pronunciaban contra
el latrocinio de las compañías maderas en la sierra;
contra los acaparadores de las cosechas a precios
irrisorios, etc.
El movimiento cada vez se radicalizaba, al no
haber un atisbo de solución por el gobierno, que
atendía con pleitesía a los reaccionarios con los deseos
de que se sometiera a los inconformes. Con gran
euforia se realizaron movilizaciones nocturnas con
antorchas, lanzando consignas contra Julia Paco Piza
y los maestros traidores y los ricos; así fue como Lucio
en sus discursos, concibió al movimiento como del
PARTIDO DE LOS POBRES y al bando contrario
como el partido de los ricos (asociándolos al PRI).
Después los participantes en los mítines se fueron
identificando como del partido de los pobres contra el
partido de los ricos.
Al siguiente día, del inicio de la lucha, fue notable
la diferencia de la movilización con la participación
como oradores de Lucio Cabañas Barrientos, Serafín
Núñez Ramos y la profesora Hilda Flores; ante este
panorama Julia Paco Piza –sintiéndose poseedora del
edificio– ordenó poner candado en la puerta de entrada,
mientras en el interior, se encontraban algunos maestros
en un curso y a los cuales dejó encerrados. Sin
embargo, los manifestantes al darse cuenta de esto
acudieron a dar auxilio y abrir la reja a como fuera
posible. A partir de ese momento, el plantel fue tomado
Vivir para contarlo. Junio de 2021
por los padres de familia y se puso una guardia
permanente. A la vez, se instaló un plantón que
permaneció día y noche, con un equipo de sonido a la
sombra de un árbol de tamarindo, el cual se hizo
histórico, pero con el tiempo autoridades posteriores
remodelaron la plaza y lo cortaron.
Julia Paco Piza, sus seguidores y los caciques de
la zona –ante el descontento que se generalizaba de los
padres de familia, maestros que los apoyaban y
alumnos– intentaron recuperar el plantel, así que el día
23 de abril aproximadamente al medio día llegó la
sempiterna mesa directiva de la sociedad de padres de
familias y un llamado comité pro­construcción del
edificio encabezado por Wilfrido Fierro Armenta, Julia
Paco Piza y los maestros que la apoyaban, pero en
compañía también, del subprocurador del estado Lic.
Humberto Romo Palacios y el director de educación de
la entidad Prisciliano Alonso Organista y un grupo de
judiciales con armas largas resguardando a los
funcionarios. En su intento de entrar al edificio, son
rechazados a empellones y en el equipo de sonido nos
encontrábamos la profesora Hilda Flores, Roberto
Arceta, dirigente de la colonia Mártires de
Chilpancingo, Octaviano Santiago Dionicio y quien
esto escribe. Al micrófono Arceta y la maestra Hilda
Flores impulsaban a los que enfrentaban el grupo
provocador no dejarlos entrar. En ese instante llegó
Lucio –porque todavía no estaba presente– e hizo uso
del micrófono para arengar a los que estaban
protegiendo la escuela de los intrusos y con dedicatoria
a los caciques a su estilo dijo: ¡no dejen entrar a esos
barrigones!, ¡saquen a esos barrigones!, ¡Viva el Partido
de los Pobres!, ¡Muera el Partido de los Ricos!, ¡Muera
el mal gobierno!, etc… En la escaramuza Julia Paco
Piza en los empellones fue derribada, pero sus
seguidores la levantaron; fue así como optaron por
retirarse, ante su fracasado intento de hacerse del
edificio. En estos primeros días de lucha, el movimiento
más se fortalecía. Cabe señalar, que la presencia de la
policía judicial no era para reprimir porque fueron
rechazados igual que a todos los intrusos, ejercer una
acción represiva hubiera sido contraproducente para los
funcionarios del gobierno. Esta referencia, para nada se
hizo mención por el intelectual y el periodista de la
reacción Wilfrido Fierro y Rosendo Serna Ramírez de
la presencia de la fuerza represiva y que los elementos
policiacos trataron de amedrentar a los manifestantes.
El objetivo del comité de lucha en defensa de los
intereses de la escuela Gral. Juan Álvarez, era no
permitir más atropellos por la élite del poder en el
plantel, que siempre estuvo en contacto con el
gobernador Raymundo Abarca Alarcón en su afán de
evitar que el movimiento lograra sus demandas. Sin
embargo, el movimiento crecía y la población se
politizaba más y no iba a ceder a una transacción
indecorosa. En la escuela, además de la lucha que se
había emprendido, se desarrolló toda una actividad
cultural a cargo del profesor Serafín Núñez Ramos, muy
buen organizador para este tipo de cosas, se movilizó a
conseguir actores de obras de teatro, danza, música
clásica y conferencistas. Recuerdo haber asistido a una
conferencia impartida por Renato Leduc, destacado
periodista de la revista SIEMPRE. Imperaba un
ambiente cultural inédito que se llenaba un gran espacio
del plantel, era una gran diferencia a aquella escuela
acartonada donde si algo había era discriminación a los
pobres, por lo mismo los manifestantes fueron siempre
estigmatizados, como los huarachudos.
Militantes de la Juventud Comunista (que nos
hacíamos llamar Club de Jóvenes Democráticos de
Atoyac) después de recorrer algunas comunidades
rurales, donde invitamos a los pobladores a participar
en las movilizaciones de lo cual resultó una gran
concentración; esto fue el domingo 30 de abril con la
presencia de muchos campesinos con todo el ánimo de
brindar su apoyo hasta alcanzar el triunfo.
Al siguiente –1º de mayo– la movilización
adquirió doble carácter: por la evocación del Día del
Trabajo y la protesta contra el señorío empoderado de
la que ellos llamaban Escuela Real. Esta marcha
también fue masiva y refulgente con antorchas por las
calles de Atoyac, lanzando consignas recordando las
luchas obreras por lograr la jornada de 8 horas,
asimismo contra la directora Julia Paco Piza, el
gobernador Raymundo Abarca Alarcón, el partido de
los ricos y vivas al Partido de los Pobres, etc. El
movimiento tuvo una constante: no demostraba
desgaste, por el contrario, cada día se fortalecía y más
13

gente de la población simpatizaba con éste. Así
transcurrieron los días, hasta que ya se auguraba un
posible triunfo al saber de un sustituto –de la directora
Paco Piza– de nombre Ramón Pantaleón López y que
el comité en defensa de los intereses de la escuela Gral.
Juan Álvarez, tenía que entrar en pláticas con dicho
director para ver cómo sería el funcionamiento del
plantel. Sin embargo, el primer tropiezo fue que no
estaba definido el regreso del profesor Alberto Martínez
Santiago, decidiendo los inconformes seguir las
movilizaciones hasta una clara solución sobre este
caso. Ante este avance de la solución, el día 8 de mayo
una comisión del comité en defensa de los intereses de
la escuela Juan Álvarez, se trasladó a Chilpancingo a
entrevistarse con Raymundo Abarca Alarcón y llegar a
una solución definitiva. A su regreso, en la noche había
una gran cantidad de gente reunida en la plaza Morelos,
con la convicción de que habría una solución positiva
al conflicto. Fue el momento que se presentaron a
informar de los acuerdos: Lucio Cabañas y Manuel
García Cabañas presidente municipal –quien dice que
por orden del gobernador– se presentó para dar fe de
la resolución donde se corroboró la separación del cargo
de la directora Julia Paco Piza y el regreso del profesor
Martínez Santiago estaría sujeto a una investigación
previa, pero se cumpliría. Sin embargo, los padres
inconformes y la población reunida le preguntaron a
García Cabañas, con mucho enojo, ¿qué se iba hacer
con los maestros contrarios al movimiento? éste no
logró articular respuesta alguna; entonces Lucio agarró
el micrófono e hizo una consulta a la multitud allí
presente, la cual respondió alzando las manos de
manera unánime a favor de que dichos profesores
adictos a la directora se fuera de la Juan Álvarez. De
todo este procedimiento, no se hace tampoco referencia
alguna en ningún medio de información de que el
pueblo aprobó la resolución y decidió no aceptar a los
maestros que estuvieron en contra del movimiento
democrático.
Como todo cambio por venir indicaba que sería
complicado; ya que la burguesía aceptaría no fácilmente
ese triunfo, máxime que la guardia de padres de familias
permaneció para evitar que los profesores rechazados
entraran. No obstante, Julia Paco su mesa directiva y
la élite del dinero no los dejaría huérfanos, seguirían
14
Vivir para contarlo. Junio de 2021
pugnando porque se mantuvieran dentro de la escuela
y fueran la punta de lanza para oponerse a los cambios
sustanciales de una nueva administración.
A pesar de toda la tensión que existía, el día 12
de mayo se hace un gran evento que arropaba el triunfo
del movimiento y el día de las Madres. Un gran
programa musical con mucha participación y sin ningún
discurso político con referencia al movimiento. La
asistencia fue masiva, como se acostumbraba en las
concentraciones de protesta, por lo mismo, se pensaba
realizar después del triunfo eventos culturales en la
plaza Morelos para mantener el vínculo con el pueblo.
En la escuela Gral. Juan Álvarez, se empezó a
restablecer las actividades y los lugares de los maestros
rechazados ya se estaban ocupando por otros docentes,
me consta que una maestra conocida de nombre
Clementina Santiago Reinada, estuvo integrada a
impartir clases y presenció la represión. En apoyo a los
mentores afines a Paco Piza, la reacción siguió actuando
y envió a una comisión con las autoridades educativas
y fue del conocimiento que uno de los integrantes fue
J. Guadalupe Fierro Rosas, quien se desempeñaba como
maestro albañil y muy activo contra el movimiento.
Esta acción, fue el inicio de la ofensiva contra el comité
en defensa de los intereses del plantel. Estos enviados
denunciaron ante las autoridades educativas que no se
dejaba trabajar a los profesores. Con esta situación que
se consideró agravante por el gobierno de Abarca
Alarcón, el 17 de mayo envió al Procurador de Justicia
del Estado, Lic. Horacio Hernández Alcaraz y el
director de educación profesor Prisciliano Alonso
Organista, reguardados por elementos de la Policía
Estatal y Judicial que a su llegada introdujeron a los
profesores disidentes a la escuela con la fuerza
policiaca, advirtiendo que venían a arreglar las cosas y
que debían trabajar en armonía. Los funcionarios se
retiraron a Chilpancingo, pero dejaron a la policía con
el supuesto de vigilar el orden.
Ante este escenario se realiza una asamblea el 17
de mayo en la escuela Modesto Alarcón, como
principales dirigentes los profesores: Lucio Cabañas
Barrientos, Serafín Núñez Ramos e Hilda Flores Solís
abordaron el problema de la presencia policiaca en la
Vivir para contarlo. Junio de 2021
plaza Morelos y sometieron a consideración la
participación a una manifestación al día siguiente. La
respuesta fue unánime de los asistentes de ir, pero a la
vez, Lucio Cabañas fijó su posición ante el problema
que se enfrentaría, recuerdo con mucha claridad su
aspecto, con mucha seriedad y molestia por la traición
de las autoridades, de no respetar la voluntad del
pueblo; la decisión de limpiar la administración de la
escuela Juan Álvarez, de ahí su expresión de la
siguiente manera: “nosotros cuando tomamos la
decisión de participar en este movimiento, dijimos, si
matan un campesino o campesinos compañeros
nuestros , tenemos que vengarlos, ya no vamos a
permitir que caigan más compañeros de nuestro lado…”
aunque finalmente dijo: “pero no va pasar nada, no
pasará de algunos golpes y que nos lleven a la cárcel y
luego nos saquen”. En cuanto a Serafín Núñez Ramos,
pronunció un discurso con mucho ánimo para que los
presentes en la asamblea participaran en el mitin y en
cuanto a su posición dijo: “estoy dispuesto si en
necesario perder mi profesión, no solo de profesor
puedo trabajar hasta de barrendero puedo vivir, pero
no dejaremos de luchar…” la percepción en esta
asamblea fue que nadie se arredró ante la presencia
policiaca. Lucio en su última intervención, planteó la
realización de un mitin pacífico; una protesta pacífica,
es falso lo que propagaron los voceros de los caciques,
que sugirió que llevaran armas de fuego o punzo
cortantes, es cierto, que ante las preguntas de los
asambleístas de ¿que llevar para defenderse? Dijo Lucio
“llevar palos si quieren”, para defenderse de la policía
si eran agredidos.
Algunos que participamos en dicha asamblea, en
la esc. Modesto Alarcón salimos con cierta
preocupación habiendo vivido el acoso de la policía en
nuestra militancia y que –la policía– podía ser capaz
de todo. Sin embargo, existía una actitud indeclinable
de seguir en la lucha y ganarle espacio a la élite del
poder.
Los compañeros que llegaron desde temprano a
la plaza Morelos, indicaron que a partir de las nueve
de la mañana el pueblo empezó a congregarse, mientras
la Policía Estatal (uniformada de beige, casco blanco
y carabinas M­1) se desplazaba del Palacio Municipal
a la escuela Gral. Juan Álvarez resguardando por si
hubiera algún intento de los padres de familia de
apoderarse del edificio. En ese momento se instaló el
aparato de sonido abajo del árbol de tamarindo y con
la tensión de la presencia policiaca, indicaron algunos
compañeros de la Juventud Comunista presentes, se
inició el mitin aproximadamente a las once de la
mañana del 18 de mayo de 1967 y como orador Lucio
Cabañas –en su discurso– condenó la intervención de
la policía en un asunto educativo, al no respetar una
decisión del pueblo de no permitir a los maestros
expulsados entrar a la escuela a laborar. Los elementos
policiacos, se paseaban prepotentes con sus cascos
blancos, ante esta amenaza, cuando llegó Lucio anunció
que se pospondría la protesta y se recorrerían los
pueblos para que se concentraran de la sierra y los bajos
(la costa), pero mientras tanto arremetió contra los
policías, ridiculizándolos comparando sus cascos con
bacinicas que traían en la cabeza. Los compañeros
presentes han afirmado que el militar al mando de la
fuerza represiva, capitán Enrique Arellano Castro se
sintió ofendido y se dirigió a donde estaba Lucio
hablando, trató de arrebatarle el micrófono el cual fue
atacado con un puñal por parte de Isabel Gómez; fue
en ese momento que inició el combate entre la Policía
y los manifestantes. Éstos últimos protegieron de
inmediato a Lucio, principalmente eran las mujeres del
mercado quienes llevaron a cabo esta defensa; fue
llevado a un lugar fuera de peligro, aunque se resistía
dejar a los campesinos en la refriega contra la policía.
Tristemente, las bajas fueron más de nuestros
compañeros y cayeron asesinados peleando: Arcadio
Martínez, Feliciano Castro Gudiño, Regino Rosales de
la Rosa, Prisciliano Téllez y María Isabel Gómez, esta
última en estado de embarazo. Heridos fueron Gabino
Hernández Girón y Juan Reynada Victoria. Ante la
agresión de la policía, sólo el doctor español Antonio
Palos Palma, exiliado por la guerra civil en España,
acudió con su maletín a dar auxilio a los compañeros
heridos. De parte de la fuerza represiva fueron dos
muertos y dos heridos, que después de la masacre huyó
llevándose los heridos y un muerto, pero en su fuga,
dejó uno en la oficina del ministerio público, nos
encontrábamos ahí con el compañero Octaviano
Santiago y presenciamos cuando la población
15

notoriamente enardecida quería sacar al policía muerto
para quemarlo. En esos momentos llegó el ejército,
haciendo maniobras de pecho a tierra como si estuvieran
en combate, además rescataron al muerto y retiraron a
los pobladores que lo querían sacar de la oficina. Hubo
muchos comentarios al calor del coraje, impotencia y
desesperación: que se había disparado de la azotea de
Juan García Galeana y de la casa de Donaciano Luna.
Sin embargo, no es creíble porque siendo así, la cantidad
de muertos hubiera sido mayor. Pero las declaraciones
de la profesora Hilda Flores y otros integrantes del
comité en defensa de los intereses de la escuela Gral.
Juan Álvarez, así fueron difundidas por la prensa que
cubrió los hechos de la represión en la plaza Morelos.
En el repliegue de Lucio arropado por los
manifestantes enardecidos, le insistían ir a quemar las
casas de los ricos de Atoyac responsables de la masacre;
sin embargo, Cabañas y otros maestros los
persuadieron que no era posible por la situación
desfavorable, pero reafirmó que la vía de la lucha legal
se había terminado y que llegó el momento de irse para
la sierra y preparar las condiciones para ajusticiar a los
culpables de la muerte de los compañeros; atacar a la
policía judicial para vengar a los caídos, pero también
definió que la lucha sería contra el gobierno.
Ese día Lucio se trasladó al pueblo El Ticuí, con
la finalidad de contactar a algunos campesinos e
informarles de los sucesos y manifestarles su decisión
y los pasos a seguir después de ser reprimido el mitin.
A su regreso a Atoyac pasó la noche en casa de la
profesora Hilda Flores Solís, acompañado de cinco
campesinos, para entonces ya estaban provistos de
armas, aunque eran de cacería.
Octaviano Santiago Dionicio y quien esto escribe
no sabíamos aún el paradero de Lucio, pero el 19 de
mayo asistimos a la casa de la maestra Hilda Flores
Solís, para informarnos de cómo había que
solidarizarnos con los familiares de los compañeros
caídos en la masacre. A nuestra llegada, había más
personas que conversaban con la maestra y nos
sumamos a la plática, que era del mismo tema de la
agresión de la policía a la manifestación. La forma de
la construcción, del hogar de la profesora Hilda no
permitía distinguir muy bien hacia la cocina, por lo
16
Vivir para contarlo. Junio de 2021
tanto, quiénes entraban a la casa no se percataban de
quiénes se encontraban en ese espacio. En cuanto se
fueron los simpatizantes solidarios, la profesora me
condujo a la cocina, donde estaba Lucio que portaba
una pistola calibre 22 en la cintura junto con cinco
campesinos también armados con escopetas y rifles
calibres 22, entre éstos conocí a Alfonso Cedeño Ponce
(El Güero Cedeño) y J. Isabel Piedra. Quise
comunicárselo a Octaviano –compañero con quien
compartimos mucho de la vida de militancia y siempre
deposité mucha confianza en él– por eso después de
saludarlos a todos, le comenté a Lucio que Octaviano
también se encontraba allí y deseaba que se integrara a
la plática, noté beneplácito en el él, no obstante,
preguntó con cierta inquietud: “¿Octaviano no se
espantará si nos ve armados, porque está muy
chamaco?”; le aseguré que no se espantaría pues
conozco su temple y decisión, a pesar de su corta edad.
Con discreción lo hice pasar sin comentarle quién se
hallaba allí en ese momento, la sorpresa fue igual de
mayúscula que la mía al saber que se encontraba Lucio
Cabañas Barrientos, el profesor que estaba a punto de
convertirse en guerrillero. En nuestro encuentro, a pesar
de su tranquilidad que lo caracterizaba le notamos
agotamiento físico, además mostraba dolor cuando nos
pidió información de la organización al apoyo a los
familiares de los compañeros asesinados, sugiriéndonos
dar toda la solidaridad necesaria. Asimismo, reiteró la
decisión de irse a la sierra para combatir a los caciques,
la policía judicial, hacer la guerra contra los ricos y el
gobierno.
El día 19 de mayo de 1967, aproximadamente a la
cinco de la tarde, con gran pesar y coraje salió el
pequeño grupo hacia el oriente de la ciudad de Atoyac
con destino a la sierra, en un viaje sin retorno. Aquí se
dio la separación de Lucio con Serafín Núñez Ramos,
pues éste último no estaba de acuerdo con la lucha
armada y por algún tiempo no se sabría nada de él. Este
fue el inicio de lo que fue la guerrilla del Partido de los
Pobres junto con su Brigada Campesina de
Ajusticiamiento.
Pedro Martínez
Integrante de la Brigada Campesina de Ajusticiamiento
del Partido de los Pobres
Vivir para contarlo. Junio de 2021
La desaparición de
JOSÉ BARRÓN CALDERA
P
rofesor en la Escuela Preparatoria Central de la
Universidad Autónoma de Sinaloa; Miembro de
la Liga Comunista 23 de Septiembre, en 1975
ingresó a la Liga a través de David Jimenez Sarmiento,
jefe de la Brigada Roja en la Ciudad de México,
integrándose de lleno al movimiento insurrecto en enero
de 1976 con el pseudónimo de Pablo.
José Barrón Caldera nació el 9 de febrero de 1953,
en la ciudad de Culiacán Sinaloa, hijo de la señora
María de Jesús Caldera de Barrón y del señor José
Barrón Quiñones; Doña Chuyita fue la Presidenta de la
Unión de Madres con Hijos Desaparecidos de Sinaloa,
y parte importante del Comité Eureka, ícono de lucha
desde la fecha de desaparición de su hijo hasta el día
de su fallecimiento
José fue estudiante del Instituto Regional de
Culiacán luego del Instituto Politécnico Nacional,
donde siempre se distinguió por su participación en
todas las luchas por los Derechos Humanos.
Su esposa María del Rosario Flores Navidad y José
tuvieron una hija de nombre Paula Barrón Flores, quien
lamentablemente falleció el 6 de junio de 2020, víctima
de COVID, y sin conocer el paradero de su padre,
dejando a su pequeño hijo Romel Inzunza Barrón.
El 10 de junio de 1976, José Barrón Caldera venía
de la Ciudad de México hacia la Ciudad de Culiacán,
fue detenido, en Magdalena, Jalisco, lo bajaron por la
fuerza del camión de pasajeros donde viajaba siendo
detenido por militares al mando de Luis de la Barreda
Moreno, según consta en documento del Archivo
General de la Nación, firmado por Luis de la Barreda.
Tenemos también el testimonio notariado de la
señora Berta Cázarez de Gálvez, quién viajaba en el
mismo avión donde llevaban esposado a José de la
Ciudad de México hacia Culiacán, percatándose que
estaba esposado y con varios individuos escoltándolo.
La señora inmediatamente que llega a Culiacán busca
a doña Chuyita madre de José Barrón para decirle que
ella era testigo y que estaba dispuesta atestiguar donde
fuera y ante quien consideraba pertinente, de que ella
había visto a su hijo en el mismo vuelo, de la Ciudad
de México a la ciudad de Culiacán
José fue visto por compañeros en las inmediaciones
del Instituto Tecnológico de Culiacán, además de
testimonios de su desaparición en el Campo Militar
Número 1 en la Ciudad de México.
Seguimos exigiendo la presentación de nuestro
compañero José Barrón Caldera.
Martha Alicia Camacho Loaiza
Ex militante de la Liga Comunista 23 de Septiembre
17

Mi nombre es Arturo Gallegos Nájera...
Y
o soy nacido en Tierra Caliente pero, por
azares del destino y por necesidades de
sobrevivencia mis padres, me trajeron de un
año a la costa grande al municipio de Coyuca de
Benítez. Y, bueno, pues soy de origen campesino. No
tengo carrera no tengo prácticamente estudios; sin
embargo, creo yo que lo poquito que pude aprender en
la escuela primaria, donde tuve la fortuna de estudiar
mi instrucción primaria, fui admirador de un gran
hombre mexicano que fue don Francisco Villa. Debo
reconocer mi ignorancia con don Emiliano Zapata. Mis
respetos, pero mi primer revolucionario al que admiré
fue a don Francisco Villa de tal manera, pues eso a la
postre vino a influir en mi decisión de incorporarme a
la lucha armada de la década de lo 70.
Yo me casé en 1970 con la hija de un señor que fue
revolucionario de 1910. Se incorporó a la edad de los
11 años a la Revolución de aquellos tiempos contra
Porfirio Díaz. Su nombre fue Don Petronilo Castro
Hernández. Me casé con su hija. El casamiento fue el
4 de Julio de 1970 y para Diciembre de 1970 mi suegro
tuvo la confianza de invitarme a su domicilio para que
conociera al profesor Lucio Cabañas. Obviamente yo
conocía al profesor Lucio por referencias periodísticas,
porque hablaban los soldados de que ya andaban en la
sierra peinándola, y que lo andaban buscando porque
era un delincuente; sin embargo, ya tenía los
antecedentes de qué era lo que buscaba. Cuando yo
supe que era el personaje que me iban a presentar, pues
¡bueno!. A mí me dio mucho gusto ¿no? Y, cuando me
dijeron que si lo podía apoyar con mi domicilio para
que estuviera, no pensé en negarme; al contrario, me
sentí muy bien ¿no? de servir en algo. De tal manera
que esa relación me fue emboletando con el grupo
armado. Yo nunca participé con las armas en las mano
con el Partido de los Pobres. Le soy muy franco; sin
embargo, lo apoyé decididamente, ya sea con mi
domicilio, con mandados, con lo que fuera, pero nunca
con las armas en la mano.
18
Vivir para contarlo. Junio de 2021
A raíz de la detención de Guadalupe Castro Molina
que era hija de don Petronilo, mi cuñada el día 23 de
Abril de 1972, yo fui perseguido. Mejor dicho, ella el
25 llevó a la policía a su domicilio donde estaba don
Petronilo. Ese día fue detenido. Yo presencié la
detención de don Petronilo. Cuando la policía se bajó
yo estaba adentro. No entraron. La policía se bajó
porque, como vivíamos en un cerro, se bajó y yo vivía
mas abajo. Me bajo detrás de la policía, y ya estaban
allí, ya me estaban esperando. Ya mi cuñada los había
llevado.
De allí empezó una persecución contra mi persona.
Te repito, hasta ese momento yo no me había metido
para nada en la cuestión de las armas, pero aun así, la
persecución fue haciéndose cada vez mas feroz.
Estamos hablando del mes de Abril del 72 hasta mayo
del 73. En este periodo yo anduve viviendo o sobre
viviendo por distintas partes del País, pero ya para mayo
llegué a Acapulco, y me puse a trabajar de manera
media clandestina.
Vivía en una casa que tenía teléfono y, en una salida
que tuve al centro, me encontré con un familiar de
Lucio el cual me pidió que le diera alojamiento al
compañero. Y, ante la situación esa de persecución, dije:
‘yo no puedo dar consentimiento, si no sé de quién se
trata, porque llevar a cualquiera a un domicilio, es de
mucho riesgo. Entonces necesito tener la garantía de
que es alguien serio.’ Cuando me dieron su nombre,
no tuve forma de negarme, porque era un amigo, un
conocido: Carmelo Cortés Castro. Por allá, por el 20
de Agosto, llegó Carmelo Cortés Castro con su
compañera Aurora de la Paz Navarro del Campo y le
di alojamiento en la casa que yo vivía. Era una villa
que tenía 12 cuartos. Yo le asigné uno a ellos para que
vivieran. Esto sucedió del 20 de Agosto a Octubre mas
o menos. Estuvimos platicando muchas cosas. Me
platicó sus experiencias y, en otras, tratando de
inducirnos un poco a la lectura marxista. No era
propiamente el marxismo lo que en ese momento a mi
Vivir para contarlo. Junio de 2021
me llamaba la atención; mas bien, lo que me llamaba
la atención era la acción directa y, para esto, me gustó
mucho un librito que traía. No recuerdo quien lo
escribió, pero se llama Actas Tupamaras. Y me gustó
a mí tanto, que dice uno: ‘estos sí eran buenos, quiero
ver si puedo ser igual que ellos.’ Le entro; le entro pero
con la intención de participar sin derramar sangre.
Porque que a ellos los masacraron. Es una lastima, pero
ellos no anduvieron asesinando por asesinar, siempre
cuando hubo necesidad. Fue por algo.
En fin [de] noviembre de 1973 nosotros habíamos
pensado crear una organización de tipo urbana que, de
alguna manera, apoyara al Partido de los Pobres en la
sierra, pues sufríamos por escasez de recursos
económicos, por armamento, por ese tipo de cosas.
Entonces empezamos a buscar compañeros. Aquí debo
decir que en esta tarea nos vimos unidos [con] Carmelo
Cortés, que tenía muchos amigos dentro del sector
estudiantil. Me pide que yo me encargue de buscar
algunos compañeros que pudieran tener la posibilidad
de participar ya en la lucha armada. Obviamente que
no era gente preparada, que no era gente campesina.
Eran gente del pueblo, no eran intelectuales pero
simpatizaban. Debo decirle que todos nosotros los que
fundamos las FAR teníamos siempre un cordón
umbilical común, el Partido de los Pobres. Ese era el
punto de referencia, excepto uno que era Aurora de la
Paz del Campo que venia del MAR y, me parece, que
antes había sido del Movimiento 23 de Septiembre. Eso
fue como en mayo. Nosotros empezamos con la teoría.
Había necesidades urgentes. Andábamos viviendo
de milagro. No teníamos recursos. Entonces, lo primero
era buscar recursos para poder prepararse. Así fue
como el día 30 de noviembre tuvimos una primer
expropiación.
Salimos muy perfectos, nos dimos el lujo de hacer
creer a la policía que éramos marcianos, porque nunca
se dieron cuenta. Salió muy limpiecito. Sin
derramamiento de sangre, lo que nosotros queríamos.
Lo que a mi me dio ánimos es lo que yo no tenía la
intención de participar en hechos de sangre, porque eso
se iba a dar de manera fortuita, no porque nosotros
quisiéramos.
Vale decir que dentro de la que considero mi familia
tengo seis desaparecidos: Guadalupe Castro Molina es
de Abril de 1972, dos días después del 17 de abril. A
mí detienen el 20 de septiembre de 1974. Después de
mi detención, un 9 de enero del 75, detienen a mi
cuñado menor de edad de 17 años Eleazar Castro
Molina que no esta en la lista. El día 15 detienen a mi
concuño Daniel Martínez García. El sí era militante de
las FAR. Fabiola Castro fue detenida el 16 [con] Daniel
Martínez Garcia, si eran militantes de las FAR. No así
Eleazar, Ni Guadalupe ni Don Petronilo, porque en ese
tiempo ni siquiera había idea de que iba a surgir esta
organización. El día 29 de julio de 1977 fue detenido
también mi hermano Víctor Hugo Nájera. Con esto se
hacen seis desaparecidos, pero hubo un asesinato. Esto
ocurrió el dia 12 de septiembre de 1974 en lugar
conocido como Plan de Lima, que está cercano a Tierra
Colorada. Allí cayeron en una emboscada tres
compañeros y el primer caído fue mi primo hermano
Ciro Nájera Fajardo, el segundo fue un líder estudiantil
de nombre Víctor Hugo Herrera Pegueros y un herido
Moisés Pérez [Cipriano]. Este compañero, de hecho
fue el caminito por donde la policía recorrió y logró la
detención de tres miembros de las FAR y el primero
fue Juan Islas Martínez y el segundo fue Rocío Moreno
Vargas y el tercero fui yo.
Ese es el primer golpe que recibimos como
organización: tres detenidos, digamos que fueron
detenciones bastantes complicadas, porque sobre uno
de los compañeros recaía casi, casi, el peso de la
organización. Afortunadamente la policía no lo supo y
no supo explotar ese detalle, si no, tal vez otra fuera la
historia. Y, bueno pues, de esta manera nosotros es que
creímos que íbamos aportar algo a la nueva
organización que se avecindaba porque, de paso,
nosotros aspirábamos a una revolución socialista.
Nosotros nunca pensamos en luchar contra la
burguesía internacional, contra la oligarquía o el
imperialismo. O sea, para nosotros estaba muy claro
que lo mismo daba que nos explotara un gabacho, o
que nos explotara un nacional. La explotación era igual
de terrible. Entonces, dentro de lo que nosotros
llegamos a concebir, entendimos que la lucha era en
contra del capital, en contra de todo lo que sonara a
explotación, y así mismo entendimos que no había
19

tantos mexicanos no había estadounidenses, no había
guatemaltecos. Para nosotros, el proletariado era uno
solo, era un sola clase social que tenía que buscar la
unidad para enfrentar a su principal enemigo, la
burguesía.
Así lo decimos nosotros. Entonces ¿qué había que
hacer? Decíamos nosotros: Enterrar las viejas
estructuras de dominación del estado burgués para,
sobre ellas, cimentar las nuevas que, necesariamente,
tendrían que conducir a una sociedad y a un estado
justo, un estado que es de corte socialista, en donde la
riqueza fuera repartida equitativamente. Y, bueno,
teníamos la referencia de Cuba. Aquí, el que trabaja
come y el que no trabaja no come. Por lo tanto,
pretendíamos establecer un estado donde ya no hubiera
un patrón que nos explotara, que todos trabajáramos,
que a todos nos tocara de acuerdo a lo que
trabajáramos.
A lo mejor es muy rústica la idea, pero a lo mejor
no lo pudiera yo decirlo mas claro. De tal manera que
nosotros nos vimos precisados a tomar las armas, ya
con la seguridad de que era necesario. No fuimos en
calidad de aventureros, no fuimos en calidad de
mercenarios [...] nadie me engañó y asumo la
responsabilidad que me tocó vivir en esos hechos
históricos, de tal manera que hoy vale decir que estuve
ocho años en la cárcel y fui liberado.
Ya dije que mi detención fue en 1974, mi liberación
fue en 1982 y a partir de entonces –aparte de
desobediente­, me he dedicado, en lo poquito que se
puede, a cada uno de mis sectores de intervención. Yo
soy universitario. En 1993 asumí la dirección estatal
de mi sindicato de la Universidad Autónoma de
Guerrero la entregue en 1996. He sido dirigente de
taxistas. He sido dirigente colono. A lo mejor ya los
años me pesan y ya no quiero andar mucho en esto,
pero es muy difícil dejar de hacer lo que uno esta
acostumbrado.
Aquí el sector estudiantil tuvo un papel importante
en varias organizaciones. No nada mas en el Partido
de los Pobres, de las Fuerzas Armadas Revolucionarias,
sino también de las Fuerzas Armadas de Liberación de
20
Vivir para contarlo. Junio de 2021
la Vanguardia Armada Revolucionaria del Pueblo que
fueron organizaciones locales o estatales. Digamos que
poco se sabe de estas dos organizaciones [hay]
sobrevivientes que no quieren hablar mucho de ello.
Yo no se por qué razón.
Yo considero que todos nosotros que sobrevivimos
esta etapa tenemos una obligación moral. Nosotros
tenemos una riqueza histórica que no nos pertenece.
Somos solamente depositarios; de tal manera que, al
transcurrir los años, nos vamos a convirtiendo en
viejos, casi, casi, apolillados. En cualquier momento
podríamos caer a causa de un paro cardiaco, a lo mejor
un carro nos atropella, y nos vamos a llevar una riqueza
que no nos pertenece. Somos depositarios, repito.
Entonces yo hago la invitación a estos compañeros que
no han querido hablar del la FALVARP y las FAR a
que lo hagan básicamente dentro de estas
organizaciones o, mas bien, estas organizaciones que
fueron formadas básicamente por estudiantes. Nosotros
fuimos metidos [al movimiento] por estudiantes. Eso
no quiere decir que fueran únicos. También había otros.
Pero, básicamente, la mayor parte de la gente eran
estudiantes, lo que significa que su nivel intelectual era
de regular calidad.
En el caso de Carmelo yo quisiera hacer énfasis en
esto. Carmelo Cortés Castro, originario de El Rincón
de las Parotas, municipio de Atoyac, era hijo de
campesinos; sin embargo él, con esfuerzo y con mucho
empeño, hizo la secundaria. Bueno, la primaria la hizo
en Atoyac y la secundaria mediante una beca que le
otorgó el Gobernador de ese tiempo. Se fue a estudiar
a Ayotzinapa. Allí se conoció con mucha gente. Fue
dirigente por primera ocasión y la gente empezó a verlo
como un líder natural. Cuando él termina la secundaria
regresa a Chilpancingo. En Chilpancingo quiere
estudiar la carrera de derecho, para esto tiene que cursar
la preparatoria y, la única que existía, era la Prepa Uno,
que está en frente de la Alameda Maldonado. Y es que
no termina, o en ese año iba a terminar su preparatoria
­estoy hablando de 1966­, cuando se da una lucha en
contra de la reelección del rector en ese tiempo Virgilio
Gómez Moarro. Obviamente el sector estudiantil
empezó a unirse con los académicos, con los
administrativos, y se empezó a mover el sector
Vivir para contarlo. Junio de 2021
universitario. Esta lucha se dice que fue la primera que
se dio en la universidad después de que dejó de ser
colegio del Estado. Si ustedes se dan cuenta, fue en
1963 cuando ya fue la Universidad Autonomía de
Guerrero. Esta lucha tuvo sus consecuencias. El rector
Virgilio Gómez Moarro renunció. Pero es que el sector
estudiantil fue reprimido. 47 universitarios fueron
separados de sus aulas, de sus trabajos, entre ellos
Carmelo Cortes Castro.
Bueno, podemos hablar de otro Pedro Helguera
Jiménez, Ricardo Texta. Pablo Sandoval también era
estudiante en este tiempo. A muchos no los recuerdo
tanto. Carmelo es la excepción, porque a él le ponen
una notita –yo vi en el acta de consejo­, donde dice:
fulano de tal, fuera de la universidad. En el caso especial
de Carmelo este no tiene derecho a reingreso. Todos
podían, si excusaban, si pedían perdón. Pero éste ni
aunque se hinque. Éste no entra. Esa acta corresponde
a Marzo de 1967. Por lo tanto, él ya no pudo estudiar.
Fue miembro de Juventud Comunista, filial del
Partido Comunista. Pues mediante la intervención del
Partido Comunista él consigue una beca para irse a
estudiar, allá por 1968 o 1969, a la Unión Soviética, en
la Universidad Patricio Lubumba. Él estuvo allá un año.
Obviamente fue a una carrera de cuadros, no fue a
estudiar una carrera académica. Allá tuvo contacto con
mucha gente, con muchos mexicanos, entre otros Diego
Lucero y, se dice, Raúl Ramos Zavala y otros
centroamericanos. Él nos hablaba de gente que había
conocido que, por cierto, le dejaron sus formas de hablar
y él las practicaba. En Sudamérica, en Panamá, mucho
hablan de la vaina esa. En fin, su cultura se nutrió de
tantas palabras desconocidas para él y que a nosotros
nos hacia reír cada vez que las manifestaba.
Él regresó el 69 y, en el 70 se incorporó al Partido
de los Pobres. En el 73 fue sancionado. Lo bajaron y a
partir de esa sanción, ya se queda conmigo y hace el
proyecto de las Fuerzas Armadas Revolucionarias. Él
tenía mucho contacto con gente del sector estudiantil.
Mediante los buenos oficios de su compañera es que se
hizo contacto con ellos y Eleazar. Tuvieron en su seno
un 60 porciento que eran universitarios. Algunos de
muy reconocido prestigio, otros que finalmente
doblaron las manos –hay un grupo que se les dice
‘guerrilleros arrepentidos’. Casi todos ellos eran
universitarios. De ese grupo de guerrilleros se salva uno:
Virgilio de la Cruz Hernández. Lo quisieron utilizar
para fregar gente. Prefirió darse a la fuga y no participar
en ese tipo de delaciones. Posteriormente Virgilio era
ya un abogado y fue detenido en Chilpancingo. Hay
una carta que el envía a Carlos Ulises Acosta Víquez,
en donde le pide que se le permita registrarse, porque
en ese tiempo Rubén Figueroa había elaborado una ley
para amnistiar a los presos políticos. Obviamente a los
que el quería, que eran los que ya andaban afuera. Es
que él manda esa carta pidiendo acogerse a esa ley. No
se por qué razón. La única explicación que yo encuentro
es que el procurador Acosta Víquez le tomó la palabra,
lo traicionó, lo detuvo. Porque él fue detenido
posteriormente en el zócalo de Chilpancingo. Estoy
hablando de 1978. Esa es la participación del sector
estudiantil y, como referencia, Víctor Hugo era dirigente
estudiantil universitario y todos los que cayeron fueron
universitarios. No es casualidad así que había un buen
número de universitarios dentro de las FAR.
Obviamente dentro del Partido de los Pobres, como
Antonio Hernandez y Alejandra Cárdenas.
Soy el tercero en ser detenido. Detienen a la
compañera Rocío Moreno Vargas. Ésta cumple con una
cita que me correspondía a mí pero, como no pudo
comunicármela, la cumplió ella responsablemente y fue
detenida. Yo conocía su domicilio, de tal manera que
ella es detenida a las diez y yo llego a su domicilio a
las once veinte y es la hora en que soy detenido. Soy
trasladado primero a una casa de torturas que está
ubicada por el fraccionamiento de Insurgentes, en la
avenida del mismo nombre, para ser torturado. Después
de ser torturados nos trasladaban a lo que era el viejo
campo aéreo militar de Pie de la Cuesta. En esta cárcel
yo tuve la oportunidad de ver a varias personas que
están aun en calidad de desaparecidas. Entré y, en primer
lugar, a la compañera Teresa Estrada Ramírez –a la que
yo conocí dentro de una organización armada dentro
del FAL­, porque en una ocasión tuvimos reunión de
organización a organización. Ella, allí en ese lugar, me
regaló un dulce. Un hermanito de Lucio que estaba ahí,
que fungía como el que nos auxiliaba para llevarnos al
baño, me lo llevó. Me dijo: ‘abre la boca. Es un dulce.
21

Te lo manda la compañera que está en frente.’ Busqué
la manera de acomodarme y estaba boca arriba, y la
venda se me aflojo un poco. Entonces la vi a ella
recargada en la pared de enfrente sonriendo. Me sonrío
y yo le agradecí el gesto del dulce con un movimiento
de cabeza. También estaba allí el hermano de Lucio, al
que yo conocí como Javier, pero me parece que se llama
o llamaba Manuel Serafín Gervasio. Con él tuve
pláticas, y me comentó cómo fue detenido. Repito, nos
conocíamos. También había otros. Entre esos estaba el
compañero Moisés Pérez Cipriano, que había sido
detenido ocho días antes de mi detención, allá donde
fue la emboscada a los compañeros. El compañero
estaba herido –atravesado de bala a esta altura, el pie
roto, de cara vendado­. Cuando lo llevaban al baño iba
brincando en un solo pie. Y también pongo énfasis aquí,
porque este compañero nos juntamos en una ocasión
en el baño. Se asombró de verme. Nos habían detenido
y quedamos en que cualquiera de los dos que saliera
con vida de esa terrible situación, tenía la obligación
moral de decir todo lo que había ocurrido, apegándose
estrictamente a la verdad. Por eso, en el libro que yo
escribo hago referencia a tres compañeros a los que les
dedico el trabajo: en primer término a don Petronilo
Castro Hernandez porque él después de haber sido un
revolucionario de 1910 no tira a la basura a su ideales
y continúa, él es enlace entre la vieja Revolución de
1910 y la nueva que se gestaba de la lucha guerrillera.
Cabañas el fundador del Partido de los Pobres. Él, su
familia no tenía nada que ver; sin embargo fue
reprimida y fue desaparecida. Total que él es primero
y el segundo es Carmelo, porque reconozco en él la
calidad y la capacidad organizativa. Era un tipo muy
inteligente, muy capaz, y le agradezco la oportunidad
que me haya dado de participar con él y haber
depositado su confianza en mí porque, de hecho, de mí
dependía su seguridad, y creo que no lo hice mal;
porque a mí me detuvieron y él no cayó a pesar de que
él estaba en mi casa. El tercero es, justamente, el
compañero Moisés Pérez Cipriano a quien yo conocía
como ‘Lorenzo’, porque hoy estaba yo cumpliéndole
mi compromiso de escribir la verdad de los hechos; no
solamente de nuestra intención, sino de la historia de
la organización. Porque en mi calidad de fundador
conocía casi perfectamente la historia.
22
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Yo concluiría con quienes vi de los compañeros.
Repito. Teresa Estrada, Manuel Serafín Gervasio y el
compañero Pérez Cipriano, que fue asesinado el día en
que a nosotros nos presentaron a la opinión publica. Él
aparecía en los medios, en los diarios, que estaba
muerto, desgraciadamente. Y el juez que me llevó mi
causa me enseñó una fotografía de él donde lo tenían
en una mesa ya muerto. Era el cuerpo nada más.
Entonces por ahí hay mucho que investigar. Qué
razones tuvieron para asesinarlo, si él no estaba
muriéndose. De hecho, él iba al baño brincando. Él no
estaba para morirse. Más no se cuánto tiempo estuvo
en esa casa. Nos tenían por horas, nomás mientras nos
iban a fregar allá en Insurgentes. Aquí era el lugar donde
nos traían a descansar, entre comillas. A descansar,
porque allá las madrizas [también] nos las daban. Aquí
nunca me golpearon; por lo menos aquí. Entonces ahí
tardábamos horas. Depende de cuánto llevaran al otro
compañero a azotar. Hasta que terminaban y volvían
con el otro, y así sucesivamente.
A mí, en lo personal, el tipo de torturas fueron cortas.
En la boca del estomago, a puño cerrado. Obviamente
lo tiran a uno. Está maneado con las manos para atrás,
vendado y maneado de los pies. Un golpe y uno cae y
no se puede uno parar, lo golpean en los riñones a base
de patadas. Ese tipo de tortura. La otra es de aplicar
corriente eléctrica a las partes nobles. Quiero decir que
eso fue lo que más me afectó. Yo no sabía que la
corriente dejara moretones, pero estaba yo moreteado
toda esta parte hasta los genitales. Era la corriente. La
tortura psicológica. Tenemos a tu familia. A tu padre,
a tu madre, a tu mujer, a tus hijos y a tus hermanos, y
los vamos a matar de uno por uno si no cantas. Obvio
que es más difícil soportar la incertidumbre que las
madrizas. Entonces aquel que esté débil ahí canta. La
policía logra sus objetivos, porque amenazó. En mi caso
no fue así, porque solamente yo sabía donde estaba
Carmelo. Estaba en mi casa. Yo no lo estaba dando, por
lo tanto no tenían a nadie. Esta es una tortura que es
bastante difícil de decir, porque me recuerda casos muy
feos, que es de cuando estuvieron amenazándome. Me
agarraron los testículos, me los amarraron con un ixtle.
Es una cuerda de ixtle. Supongo que todo mundo lo
sabe. Me levantan y estoy en una plancha de madera.
Me levanta y yo hago contra peso. Me jalan, me jalan,
Vivir para contarlo. Junio de 2021
me jalan, y me dicen que si no voy a cantar. En ese
momento no había dicho nada. No. Mi conclusión
rápida fue que como no sabía nada, no tenía que decir
nada. Cuando yo no quería decir nada, sacaron una
navaja de barbero. Me agarran, me la colocan aquí.
Entonces siento el frío del acero ahí, teniendo la navaja.
Y que le dieran el jalón, pues eso es práctico. Es en ese
momento que me dicen: ‘no vas hablar.’ Fue el
momento más difícil para mi, cuando pasa una película
rápida en mi cerebro. Si me van a castrar, me van a
matar, y si me van a matar pues no les voy a decir nada.
Y así me la rifé. Y les dije: ‘no se nada.’ Fue lo que
contesté. La respuesta de ellos fue brutal. Ya no me
castraron, pero me dijeron: ‘¡hijo de tu mal dormir! te
crees muy valiente. Pues aquí lo valiente nos vale. ¡Hijo
de tu madre! ¿no? Me agarraron y me los empezaron
agarrar así, hasta que me hacían desfallecer. Perdía el
conocimiento. Estaba sudando mucho, yo me acuerdo.
Y, total, me dejaban reponer. Y me mantuve. Yo creo
que eso me valió para poder sobrevivir. Yo siento que
si me hubieran aflojado con las amenazas de que me
iban a castrar, seguramente hubiera corrido la misma
suerte que Moisés. Los asesinaron. Como ya no hubo
más que tres, a éstos los presentamos. Nos paramos el
cuello de que somos muy inteligentes para investigar,
y no pasa nada. Entonces, eso fue lo que me salvó la
vida, o nos salvó la vida a los dos. Repito, para mí esa
fue la tortura mayor. Hubo otro tipo de tortura. Así que
esos son pan comido, hombre. Pero la peor la amenaza
no sabe uno lo que va a pasar, ¿qué otra cosa quisieran?
Desaparecen a tu hermano en el centro de Acapulco a
las cuatro de la mañana. Él va y entrega su unidad. Él
era taxista. Esos son ya policías judiciales los que lo
detienen. La verdad es que no se en ese momento. Yo
ya estaba detenido, y lo único que supe fue por sus
compañeros, que él estaba lavando el carro para
entregar, y sus amigos le avisaron a la familia que había
sido detenido por un grupo de gente armada. Se lo llevó
y nunca supimos nada de él; pero vale decir que él fue
visto en la cárcel.
Hay testimonios en que él estuvo. Prueba de ello es
que un detenido, José [Plancarte?] Jiménez, fue
presentado a la prensa con la camisa de mi hermano y
los guaraches, porque mi hermano se los dio. Él me dijo
que a él ya lo iban a presentar. Para que no se viera mal,
sin camisa, que se llevara la de él, y que ahí estaban los
guaraches y que, a cambio de eso, le mandó un recado
para una amistad que tenía ahí, por el cine Variedades,
por el cine Bahía. Que le dijeran a su abogado que se
prepara, para ahora que lo presentaran lo defendiera
¿no? Lamentablemente yo no se qué pasó. Yo no quiero
acusar a nadie pero, como por arte de magia,
desaparecieron tanto el abogado como la persona que
le llevó el recado al abogado. O sea no habla de José,
sino que había un taquero que conocía al abogado. Al
taquero lo desaparecieron. No se si le llevó el recado
directamente al abogado. O sea, hay la duda si con el
personaje, quemando el recado se lo dijo a la policía,
simplemente. Al abogado lo desaparecieron.
Ya hablé de una emboscada en que cayeron los
compañeros. Fue en el Plan de Lima. Está cercano a
Tierra Colorada, sobre la carretera que va a
Chilpancingo. Nosotros teníamos en nuestro poder a la
señora Margarita Saad. Nosotros formábamos parte del
comando que iba a recibir el dinero. Obviamente había
un condicionamiento a la familia de no intervención
policíaca. Sin embargo, pues si interviene la policía.
Caen en una emboscada los compañeros, y esto es
cuando iban a recibir dinero. Entonces, ante estos
hechos es que, como sobreviviente, yo soy el que le
aviso a los compañeros de lo sucedido, y la
organización decide la ejecución de los que los
secuestraron. Es un hecho lamentable que no te
esperabas, pero que finalmente hubo una razón. Hubo
algo que los orilla a eso. Fue una emboscada, pues
enfrentamiento es que por lo menos te dan chance de
ponerte atrás el palo, y ahí no. Ellos iban caminado, esa
es la verdad que dio Moisés, cuando sintieron los
madrazos. Ni siquiera les marcaron el alto.
Tomado de la declaración de Arturo Gallegos Nájera ante
la Fiscalía Especial FEMOSP. Agradecemos Alberto
López Limón su colaboración. Se respetó la redacción
original lo mas posible. Se hicieron algunas correcciones
en los evidentes errores ortográficos o de transcripción.
23

•Toluca. 31 de mayo de 1978.
La muerte de Gerbacio y de Ferreira
E
l 31 de mayo de 19878 murió
en mis brazos Gerbacio
Ariscorreta Torres, activista de
la Facultad de Humanidades de la
Universidad Autónoma del Estado de
México, originario de Almoloya del
Río. El día anterior agentes policíacos
lo habían golpeado hasta dejarlo por
muerto. Como pudo se trasladó a
Ciudad Universitaria (Cerro de
Coatepec en Toluca) y me interceptó
en el Cerro de Coatepec, juntos
llegamos a Ciencias Políticas, ahí me
narró las torturas a las que había sido
sometido y las preguntas que le hacían
sobre la organización y sobre el trabajo
político que estaba realizando en la
región de Jalatlaco­Tianguistenco.
Era muy grave situación en la que
lo veía, llamé por teléfono a la Cruz
Roja y luego decidí salir y detener al
primer carro que llegara o saliera.
Abrazándolo, por que él ya no podía
mantenerse en pie, caminamos hasta la
explanada, ahí se desvaneció. En ese
momento escuché la sirena de la
ambulancia que se acercaba subiendo
el cerro de Coatepec, lo abandoné por
un momento para hacerle señas, al
regresar el musitaba algo con cariño,
tranquilo, tuvo un estertor y murió en
mis manos.
Fue durante la primera Huelga del
SITUAEM que entendí que Gerbacio
era un gran camarada. Apenas iniciada
la huelga se sumó a las brigadas.
24
Cuando el gobierno ordenó el cerco
total del perímetro de Ciudad
Universitaria en el Cerro de Coatepec
por el terrible Batallón de Radio
Patrullas del Estado de México
(Barapem en ese entonces comandado
por Alfredo Ríos Galeana) nos fuimos
quedando sin alimentos. En el comedor
de Humanidades, la parte más remota
y protegida del Cerro de Coatepec, nos
mirábamos la cara comiendo
cucharadas de café en polvo con azúcar
que era lo único que nos quedaba de
nuestras provisiones originales.
Pensando cuanto tiempo más
podríamos resistir así, apareció de
repente Gerbacio y sobre la mesa fue
sacando de su mochila de alpinista una
enorme cantidad de latas de atún y
otros alimentos. Había escalado por
atrás del Estadio Universitario, ahí
donde el Cerro de Coatepec se levanta
casi vertical y coincidiamos que parecía
imposible de escalar, pero Gerbacio
subió para traernos un arma: comida,
que fue determinante para mantener la
huelga y con ello obtener una victoria
contundente sobre el Estado:
Cuando terminó la huelga, Gerbacio
de incorporó también a la producción
del periódico clandestino “Liberación”
que era editado por el Consejo
Revolucionario El Pueblo Vencerá y a
partir de ahí desarrolló un importante
trabajo de organización y
concientización en la cuenca del río
Lerma.
Vivir para contarlo. Junio de 2021
En una región que abarca Jalatlaco,
Gualupita, Capulhuac, Ocoyoacac,
Atlapulco, Tianguistenco, Almoloya
del Rio y Tenango del Valle. El Bacho
formó comités de lucha en normales y
otras escuelas, la región de pintó de
rojo y negro, en todos esos pueblos las
bardas empezaron a gritar rebeldía.
A los pocos días de la muerte de
Gerbacio conocí a Miguel Ferreira
Reyes representante de la Facultad de
Humanidades ante el Consejo
Universitario, era el mejor amigo de
Gerbacio. Me dijo que el iba a
investigar que es lo que había sucedido
exactamente, sin embargo, en esa
búsqueda fue asesinado el 29 de
septiembre de 1978 a las 3 de la
mañana, cuando salía de la panadería
donde trabajaba en Guadalupe
Yancuictlalpan (localidad de Santiago
Tianguistenco también conocida como
Gualupita).
Con la muerte de estos dos
camaradas, la lucha ya no tuvo vuelta
atrás. Teníamos que seguir hasta vencer
o morir.
David Cilia Olmos
Ex militante de la Liga Comunista
23 de Septiembre
Vivir para contarlo. Junio de 2021
10 de junio en la memoria
E
l 10 de junio llegué con mi
compañero Raúl a la
manifestación, cuando la
marcha había iniciado. En la calle
de Instituto Técnico estaban
enfilados los flamantes tanques
antimotines recién estrenados por el
gobierno de Luis Echeverría, se
veían imponentes, tenían una forma
extraña, grandes, cuadrados y con
muchos aditamentos, ventanitas y
mangueras. Eso fue lo primero que
vi al acercarnos al lugar donde
encontraríamos la marcha.
Entramos por una de las calles
que iniciaban en Instituto Técnico
hasta donde iba pasando la
manifestación, nos encontramos con
el contingente de la prepa popular.
Raúl se adelantó a buscar a su
hermana que iba con el contingente
de prepa 8 y yo me quedé con Zoía
que estaba con otros compañeros
del MIRE que venían con el
contingente de la popular. El
ambiente se sentía con mucha
tensión pues desde días antes se
había manejado la versión de que
no permitirían el avance de la
manifestación que se dirigía al
Zócalo, sin embargo, la marcha
había salido y la gente se mostraba
muy combativa pues era la primera
manifestación que saldría a la calle
después de la represión del
movimiento en 1968.
De repente en una de las calles
laterales de la normal la calzada de
los maestros la marcha se detuvo y
retrocedió, la gente corría de
regreso pues en la esquina con San
Cosme se había desatado la
violencia. El Rojo, un compañero
de la prepa corría en contrasentido
con un pañuelo en la boca y los ojos
llorosos, están echando gases
lacrimógenos nos dijo, empezó la
confusión algunos corrían, otros se
agrupaban para hacer frente a los
halcones que llegaban por las calles
laterales a la de los maestros. Zoia
y yo corrimos primero hacia un
acalle lateral, pero igual ahí también
había tumulto y enfrentamientos,
entonces corrimos hacia San
Cosme, agarradas de la mano
corrimos hasta alcanzar San Cosme
donde tomamos el rumbo a Tacuba.
Ibamos corriendo frente de la
Normal cuando un auto Renault
blanco con una antena en el techo,
que seguro era de agentes se nos
emparejó, al darnos cuenta nos
detuvimos en seco y quedamos
atrás del auto que se frenó, entonces
aprovechamos para cruzar hacia la
otra acera y ya no nos siguieron
pues había un camellón.
Seguimos corriendo, atrás de
nosotros se oían los disparos,
mucha gente corría en varias
direcciones, algunos se agrupaban
y trataban de repeler la agresión,
nosotros seguíamos corriendo en la
dirección hacia Tacuba y nos
metimos en una casa que tenía la
puerta abierta, nos había alcanzado
Raúl que no había encontrado a su
hermana. Después supimos que
junto con Susana otra compañera de
prepa 8, se habían metido en una
iglesia en busca de refugio. El lugar
al que llegamos era una especie de
vecindad que tenía departamentos,
ahí ya había muchos compañeros
refugiados, algunos estaban en el
25

patio, otros se habían subido a los
techos, afuera se escuchaban
muchos gritos y disparos, a veces
muy cercanos que hacían que nos
separáramos de la puerta dónde nos
asomábamos a mirar. Todavía
recuerdo a un hombre tirado en una
esquina y alguna gente mirándolo o
atendiéndolo. De repente la gente
empezó a correr hacia donde
estábamos, algunos se metieron a la
casa y cerraron la puerta pues
venían tras de ellos. Muchos
corrieron hasta el fondo de la
vecindad y nosotras nos metimos en
un departamento que pertenecía a
una mujer ya muy mayor que nos
aceptó y nos sentó en un sillón de
su sala. Estábamos sólo Zoía y yo.
Afuera se seguían escuchando los
disparos, Zoia lloraba, yo estaba
alerta, en cada disparo se abrazaba
hacia mí temblando. La dueña de la
casa nos ignoraba, no nos dirigía ni
una palabra. Era una señora de más
de 60 años, delgada y vieja, de tipo
aristocrático, un cabello blanco bien
peinado y un vestido de tipo
conservador y elegante. En la mesa
había platos servidos, estaba
comiendo y ponía mucha
parsimonia y elegancia en su
servicio, nosotros la mirábamos
desde el sillón y no disimulábamos
nuestra angustia, ella nos ignoraba.
Comía lentamente como si fuera
toda una ceremonia o un ritual,
afuera todavía se seguían oyendo
disparos, ella no se inmutaba y
nosotros sentíamos como resonaban
los truenos dentro de nuestro
ánimo. Zoia tenía en un morral un
gran paquete de volantes que se
repartirían en la manifestación y yo
en una bolsa un paquete de
banderines de tela con la figura del
Che Guevara.
26
En un descuido de la señora, que
se había dirigido a servirse una
tacita de té, nos deshicimos de
ellos, levantando un cojín del sillón
de su sala y los metimos abajo,
luego nos sentamos encima para
que no se notaran. Pasó el tiempo
lentamente, los disparos
disminuían, empezaba a oscurecer
y poco a poco iba quedando todo en
silencio, Zoia ya estaba más
calmada, me miró y nos
levantamos, dimos las gracias a la
señora quien nos abrió la puerta y
salimos.
Los estudiantes que estaban
resguardados en el lugar se iban
marchando poco a poco, avisados
por los vecinos.
Una camioneta de mudanzas de
redilas azules y tapada con una lona
azul también se detuvo al frente de
la vecindad y el chofer nos indicó
que nos subiéramos rápido a la
parte de atrás, subimos un grupo
grande como de 20 de los que
todavía estábamos ahí.
Iban con nosotros también mi
hermano y mi esposo que habían
permanecido en el patio. La
camioneta nos dejó cerca del metro
Tacuba.
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Ahí nos bajamos con cautela,
decidimos ir a la casa de Alfonso
pues se había acordado el verse
después en su casa. Muchos no
habían regresado. Abordamos el
auto de una compañera y
marchamos en busca de los que
faltaban. Fuimos a la casa de
algunos, muchos ya se habían
reportado, pero había algunos que
no aparecían.Al día siguiente
fuimos al hospital de la cruz verde
cercano al casco de Santo Tomás,
las ventanas y algunas paredes
estaban agujereadas por balas, nos
permitieron entrar a ver si
reconocíamos a algunos de los
heridos. Ahí estaba Olaf, pero no lo
pudimos ver pues estaba grave,
entre los menos graves estaba
Héctor Arturo con un balazo el
hombro, en esa misma sala había un
señor también grave con una herida
de bala en el cuello, no podía hablar
y estaba todavía como desconocido.
Otro compañero de la prepa popular
Enrique Treviño Tavares murió
varios días después. Después de
este acontecimiento me desligué
casi totalmente de la lucha
estudiantil y me dediqué de lleno a
la formación de una organización
armada.
Luz Aguilar Terrez
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Tom de Analco
E
l 7 de marzo de 1947, en el pequeño poblado
de El Venadillo, acaso a siete kilómetros de
Mazatlán, Sinaloa, nacieron dos varones: el
mismo día, a la misma hora, en casas contiguas, por
así decirlo, sólo separados por una pared: Tomás
Lizárraga Tirado y Arturo Martínez Sandoval. Tomás
y Arturo, segundo hijo cada uno de sus respectivas
familias, tuvieron la tranquila vida campirana de ese
tiempo, compartiendo correrías, conociendo la vida
silvestre y toda clase de animales caseros.
­Jugábamos a los tiradores, hechos con ligas de
llanta de bicicleta; teníamos la creatividad infantil de
construir carritos con ruedas de pochotes, trepábamos
en los árboles y hacíamos columpios en los más
grandes­ comenta Arturo.
Tantas veces hemos evocado a Tomás… hoy
nuevamente hablamos de él y se emocionan, tanto
Arturo como su primo menor, Raúl Tirado Sandoval,
a quien suponemos primo de Tom.
El Venadillo fue un punto del sitio a Mazatlán, por
parte del general Álvaro Obregón, quien allí estuvo,
señala Arturo. También llegaron a ese lugar los
generales Elpidio y Ángel Osuna, hermanos, y Juan
Carrasco.
­O sea, dejaron caliente al Venadillo­ ríe Arturo
Martínez Sandoval, mientras saborea su aromático café
y mira el reventar de olas marinas, en el restaurante
Ocean Grill, de Mazatlán.
­En tiempo de lluvias nos bañábamos en los arroyos,
encuerados, y en sus bordos jugábamos con el barro y
allí mismo hacíamos resbaladillas.
Como a los 14 años Tomás emigró a Guadalajara,
integrándose al famoso barrio de Analco, donde el
joven hizo amistades fraternas, entre ellas, con Manuel
Rodríguez, “El Clark”, otro sinaloense emigrado.
En fin, Arturo permaneció en El Venadillo y en la
ciudad de Mazatlán, convirtiéndose en hombre
trabajador, empresario, padre de familia, aficionado al
beisbol y buen amigo de los amigos.
Tomás se convirtió en “El Tom de Analco”,
personaje de “Los Vikingos”, poderosa agrupación
juvenil, rebelde y de pelea. “Los Vikingos” se
integraron al Frente Estudiantil Revolucionario, de la
Universidad de Guadalajara. En marzo de 1973, con
la fundación de la Liga Comunista 23 de Septiembre
(por aquel asalto guerrillero en equinoccio), se
convirtieron en un fuerte destacamento de la guerrilla
mexicana contra el gobierno de Luis Echeverría
Álvarez.
En 1974 Tom estuvo en la ciudad de México, donde
yo vivía. Quizá en septiembre nos conocimos a un
costado de la Calzada de Tlalpan, a él le gustaba esa
zona. Ambos quedamos del mismo lado en una grave
escisión de la Liga. Se conformó el ala crítica y radical
(imagínense), disidente de la Comisión Nacional.
Nuestros líderes eran Leopoldo Angulo Luken, a quien
conocíamos como “El General” o “El Gene” y “El
Sam”, por su seudónimo “Samuel”, entonces dirigente
de la Brigada Revolucionaria Emiliano Zapata,
perteneciente a la Liga Comunista 23 de Septiembre,
que operaba en Oaxaca.
A Tomás le llamábamos “El Gorras” o “El Gorrión”.
De cuerpo atlético, largas piernas, largos brazos, usaba
modernas y coloridas camisas, desfajadas y muy
holgadas, para disimular la pistola y la granada que
llevaba al cinto. Era alto, de piel blanca, ojos claros,
27

amielados, que a veces se veían verdosos; era de escaso
y rubio pelo lacio, tupido y abultado bigote y una mirada
penetrante, escudriñadora y desconfiada. Tomás poseía
una larga e intensa experiencia de lucha y combate,
desde el pleito callejero, los enfrentamientos pandilleros
a trancazos o a balazos, hasta las acciones políticas
armadas (para hacerse de recursos o distribuir
propaganda o realizar traslados carreteros), así como
los combates guerrilleros y la cruda vivencia de la
prisión, la tortura, el escape frustrado y, al final, la
libertad anhelada para reincorporarse a la Liga. Era
excelente chofer, usando al volante sólo la mano
izquierda, colocando la derecha en la palanca de
velocidades, para ir rápido cambiando de carril y de
velocidad, frenando, acelerando, incrustándose en un
pequeño espacio entre el tráfico vehicular, sacando
máximo provecho del Datsun color naranja bajito y de
modelo reciente, en muy buenas condiciones mecánicas.
Controlar el volante con una sola mano permitía,
eventualmente, con la otra empuñar la pistola.
Por cierto, Tomás portaba una Colt .38 Súper,
Commander, sin pavonar, o sea, color acero, muy
hermosa, que era su orgullo. En cierta ocasión, “El
Gene” hizo una exposición sobre balística. Una
conclusión fue que el calibre nueve milímetros (en
pistola), era superior al .38 (Especial o Súper), al .45 y
desde luego a los calibres .380 y menores. El calibre 44
se descartó por inusual. Puntos de comparación entre
calibres eran la capacidad de destrucción, determinada
por el grosor de la bala, y la capacidad de penetración,
determinada por la forma de la bala. Los calibres .38 y
.45 eran de punta relativamente achatada, mientras el 9
milímetros, relativamente puntiagudo. En fin, el calibre
nueve milímetros tenía superioridad y debía preferirse.
Pero Tom hacía caras de que no y daba palmaditas a su
arma, como diciendo “aquí nomás sus chicharrones
truenan”. Desde luego “El General” lo notó.
­Es mejor la 9 milímetros­ dijo.
­Yo mi “Chúper”, carnal­ respondió Tomás.
­Está tiene más penetración­ insistió “El Gene”, entre
mentor y jefe, señalando su propia pistola, una
Browning.
28
Vivir para contarlo. Junio de 2021
­¡Esta también penetra, carnal!­ se escuchó y las risas
fueron incontenibles.
“El General” lo regañó, “El Gorras” escuchó, pero
sin dar su brazo a torcer. Tomás consideraba que con
una Súper (Colt .38) era poco menos que invencible.
Raúl Tirado Sandoval recuerda que Tom era como
de 1.85 metros de estatura, fuerte, con muchos amigos
de Analco que visitaban El Venadillo y jugaban futbol
en shorts, lo cual le sorprendía, porque en el Venadillo
campeaba el beisbol y entonces nadie usaba shorts.
­Pero ellos venían de Analco, de Guadalajara, donde
había mucho futbol: ¿quién se iba a imaginar que esos
muchachos, aguerridos allá, estaban jugando pacífica
y alegremente acá, como de vacaciones? Pero
de seguro traían armas­ reflexiona­ Eran entre 20 y 30
jóvenes, de pelo largo, que hacían suyas las calles
amplias del Venadillo.
En la ciudad de México Tom y yo hacíamos unos
recorridos.
­¿Cómo entraste a la Liga?­ le dije.
­En una calle del barrio estaba sentado, fumando
mariguana, cuando llegó el “Clarck” y dijo: “¿Sabes
qué?, la bronca no es contra la FEG, la bronca es contra
el Estado”.
­¡Cámara, carnal, no hay pedo!­ respondió Tom,
conteniendo el humo del cigarro, y desde ese momento
ya era militante guerrillero y socialista.
Un día pasamos frente a una feria y entramos, directo
a tirar con rifle de municiones. Le expliqué aquella
técnica de “horizontalidad y paralelismo”, que enseñaba
Adolfo Lozano Pérez, “Mariano”. Tom se emocionó y
disparó “sin apuntar”, desde abajo, casi a la cintura. En
efecto, derribó un tornillo. Tocó mi turno y dudé
interiormente, pero me repuse y confié en la técnica de
mi maestro “Mariano”: también derribé un tornillo. Y
así seguimos un ratito. Al llegar con “El Gene”, en la
casa donde nos concentrábamos, Tom estaba impaciente
por contar la hazaña.
Vivir para contarlo. Junio de 2021
­A ver, Güero, cuéntale aquí a mi “General”.
Referí en detalle el ejercicio de tiro y “El General”
estaba henchido de satisfacción por su preferido.
Tom tenía esposa e hijo. No supe si procreó más.
Una noche dijo que salía hacia Guadalajara. Lo
acompañé por el automóvil en que viajaría. Escogió
uno, nuevo, supusimos que en buen estado mecánico.
Lo abrió mientras yo vigilaba. Lo echó a andar y nos
alejamos del lugar.
­Mira, se la voy a regalar a mi hijo­ expresó
contento, mostrándome una flauta.
Sobre su muerte, acaecida en 1977, hay varias
versiones. Primera: que fue accidente. Que Tomás y
sus amigos acostumbraban ir al Grullo, lugar de aguas
termales en Jalisco, donde Tom tenía un compadre,
donde “iban y ‘pistiaban’”. ­Por favor, no quiero que
haya desmadre, no traigan armas­ había pedido el
compadre. Por eso, para quedar desarmado, dentro
del carro uno de ellos sacó la pistola, “con tiro arriba
y se le disparó”, accidentalmente.
Segunda: que fue traición, según Miguel Topete. Se
presume que en combinación con el gobierno, con la
policía y por dinero, dos amigos no políticos de Tom
y Cevallos, a quien llamábamos “El Faisal”, de alguna
manera sorprendieron a Tom y lo mataron a balazos.
Después lo tiraron a orilla de carretera. Después fueron
por “El Faisal”, supuestamente para llevarlo con Tom.
“El Faisal” desconfió, pero fue con ellos, en carro,
ocupando el asiento posterior y ellos como piloto y
copiloto. De pronto el piloto saca la pistola y dispara
sobre “Faisal”, éste hace lo mismo y lo mata, pero el
copiloto dispara también y muere “Faisal”. El copiloto
se fue de México, volvió décadas después y se presentó
a la policía, cuando ya había prescrito el delito.
En 1977, en Culiacán o Mazatlán, uno de nuestros
dirigentes nacionales me comentó sobre la muerte de
Tom. Dijo que fue consecuencia de una traición.
­¿Sabemos o podemos averiguar quiénes fueron?
­Sí.
­Entonces hay que matarlos.
­Nosotros ya no estamos en armas.
­¿Y qué?
Eduardo Esquivel Revilla
Ex Militante de la Liga Comunista 23 de Septiembre
Epifanio Avilés Rojas
Primer Desaparecido
registrado de la época de la
Guerra Sucia.
En México no habrá
democracia ni se podrá
hablar de un régimen de
derecho mientras existan
personas en desaparición
forzada.
29

A 46 AÑOS DE LA CAÍDA EN COMBATE
DE MARIANO Y ALEJANDRA
J
amás pasaba inadvertido con su mirada inteligente,
penetrante. Sus ojos oscuros escudriñaban,
calculaban y traspasaban la apariencia. Nunca
inadvertido con su recia y fornida figura; con su piel
morena; con seriedad y fuerza irradiadas a través de sus
movimientos corporales, su tono de voz, sus palabras.
Quien lo observara diría que ese hombre poseía una
gran convicción vital.
Hasta que lo mataron, junto con nuestra querida
“Alejandra”, Teresa Hernández Antonio, esposa de
David, en el episodio de la exposición canina en Ciudad
Universitaria, junio 15 de 1975, o sea, desde el principio
hasta el final, de “Mariano” sólo supieron que era
“Mariano”.
No hubo rendijas que permitieran atisbar sobre su
identidad. En realidad, las que hubo, pasaron
inadvertidas o se cerraron para siempre con la muerte.
Por ejemplo, cuando sucedieron aquellos asaltos
simultáneos a tres bancos, en Chihuahua, el 15 de enero
de 1972, “Mariano” llegó en motocicleta, acaso de
Torreón, intervino exitosamente y salió rápido, por
carretera y en la misma moto, con una parte del dinero,
que se destinó a la organización armada.
Dos personas supieron de él: Diego Lucero,
capturado y sacrificado al día siguiente por el Gobierno,
y José Luis Alonso Vargas, herido por una esquirla y
detenido en una de las tres acciones.
30
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Así me lo dijo el propio José Luis. Los demás ni lo
conocían ni lo conocieron. Diego y José Luis no podían
delatarlo y éste, a la postre, guardó un silencio protector.
Cuando “Mariano” radicó en la ciudad de México y
participó en acciones de armas por varios lugares de la
República, simplemente siguió siendo “Mariano” o un
camarada con algún seudónimo, de manera que ni sus
compañeros cercanos tenían datos de él. Si un
guerrillero caía prisionero y era interrogado, a lo más
confirmaba que “Mariano” era “Mariano”. Así en los
carteles o planas de periódico donde difundían nombres
y fotografías de los buscados, “Mariano” simplemente
resultaba ser “Mariano” y su rostro aparecía borroso,
por proceder de su imagen grabada en acción. El
cuidado sistemático de los más ínfimos detalles de la
clandestinidad contribuyó a mantenerlo incógnito.
Él era integrante de uno de los primeros grupos
armados y clandestinos (Guajiros, 1971). Había sido
dirigente de estudiantes y maestros rurales. Con todo
sigilo pasó a la clandestinidad y a las armas. Sus
compañeros originales cayeron luchando o partieron a
distintas localidades, aislados de “Mariano”. Así quedó
cubierto con el velo de una clandestinidad
prácticamente absoluta.
Tengo entendido que otro que le conocía fue
Leopoldo Angulo Luken, a quien llamábamos
“General” o “Matus”. También lo cubrió con el silencio,
hasta que ese silencio careció de sentido con el
Vivir para contarlo. Junio de 2021
fallecimiento de “Mariano”.
Cuando ingresé a la Liga Comunista 23 de
Septiembre, quizá en julio de 1973, “Mariano” era ya
un experto guerrillero, extremadamente perspicaz,
observador y vigilante del riesgo hasta el detalle.
Cuidadoso en grado sumo. Precisamente de la
observación y el estudio de las experiencias guerrilleras
aisladas e individuales, surgió el documento “Acerca
de una embrionaria experiencia militar”, con que
“Mariano” nos dotó de invaluables indicaciones para
la defensa y protección. Por otra parte, nos hacía
observaciones y sugerencias personales.
—Los zapatos, compa, que no llamen la atención.
La ropa era importante. Cómo abordar un autobús
para asegurar que nadie nos seguía.
—Graneado, compa, graneado—. Indicaba, para la
hora de disparar en enfrentamiento, no se trataba de
andar de gatillo alegre soltando una andanada de
plomazos, sino dar tiempo a cada tiro en aras de la
efectividad.
Revisar de vista a toda persona que se aproximara
y determinar si portaba arma. Catalogar a todo vehículo
para saber si era de la policía.
—Te acuestas como si fueras a dormir, te pones
cómodo, apagas la luz, haces todo lo normal para
dormir, cierras los ojos… pero no duermes, estás atento
y captas ruidos, movimientos… así vigilas toda la
noche. Esa técnica permitía velar con mínimo cansancio
y máximo tiempo de alerta. Él la descubrió en una
emergencia, estando solo y por tanto sin posibilidad de
compartir tiempos de guardia.
Un grupo de militantes estábamos encerrados en
casa de David Jiménez Sarmiento, “Chano”,
participando en un seminario sobre el imperialismo,
donde Lenin y Hilferding eran autores básicos. En un
momento dado, David quiso una explicación ampliada
sobre el capital financiero y llamó a “Mariano”, quien
estaba en otra parte de la casa. Con solicitud y
amabilidad procedió a explicar y comentar el tema
abordado, con excelente acogida de los oyentes.
Algo similar sucedió en otra ocasión, me parece que
en otra casa del mismo David. Se trataba de estudiar el
plan de una acción de armas, que exigía meticulosidad,
precisión y desde luego que cada miembro del comando
obrara según lo indicado. Quien exponía era David.
—…pero mejor que explique “Mariano” —exclamó
y cedió la palabra.
Pausada y claramente desglosó el plan, haciendo
señalamientos en un croquis. Digamos que
pedagógicamente nos condujo por el derrotero que
debía seguir la acción, ubicando a cada quien en su
lugar, su papel y su parte. Ambas ocasiones fueron
propicias para conocer, admirar y valorar las
personalidades de mis dos superiores, David y
“Mariano”. Sin egoísmos, sin banalidades, con plena
identificación y entrega a la causa, con mentalidad
abierta, con fraternidad. Cumplir la tarea con salud
mental y cooperación total. Eso era lo importante. Ni
siquiera se pensó en el qué dirán los demás, quién
quedará bien, quién mal. Así eran las lecciones
adicionales, enseñanzas de vida.
Manejar a la izquierda.
—Si manejas a la izquierda, pegado a la raya, el otro
se aparta un poco y tienes más espacio para maniobrar —
me decía “Mariano”.
A veces había persecuciones y se trataba de obtener
las mejores condiciones de evasión. Ciertamente,
pegado a la raya, quien va en sentido contrario se aparta
un poco de manera espontánea, dejando libre un espacio
mayor. Ese recurso era virtud, para nosotros y en ese
tiempo. Este detalle muestra, precisamente, lo detallista
que era “Mariano”. Cuidaba lo esencial, lo general y
lo particular hasta el escrúpulo. Con Adolfo Lozano
Pérez, igual que con otros guerrilleros fallecidos, se
perdió inteligencia, convicción, valentía, heroísmo.
Lo que no fue igual, sino peculiar, específico de
“Mariano”, fue la sensibilidad y agudeza hacia lo
militar, en lo teórico, en lo genérico y particularmente
31
 Vivir para contarlo. Junio de 2021

respecto a los aspectos técnicos de lo militar. En esta
materia fue observador, estudioso, documentado, sin
reservar o guardar con egoísmo el conocimiento y la
experiencia. Su conocimiento personal se convertía en
divulgación y calificada enseñanza personal. “Mariano”
fue espíritu de justicia, amor a la libertad, entrega sin
límites a lucha social por los obreros, campesinos y
pobres de México y del mundo. “Mariano” fue aguda
mirada hacia la necesidad del combatiente
revolucionario. “Mariano” fue amoroso padre y esposo.
Fue lealtad, valentía, arrojo, serenidad en el combate,
corazón abierto al sacrificio y a la muerte por un ideal.
fresca como esa mañana, estará en mi memoria la figura
de “Mariano”, como revolucionario, jefe, mentor y
guerrero.
MARIANO Y TERESA VIVEN!!
LA LUCHA SIGUE Y SIGUE Y SIGUE!!!
HASTA LA VICTORIA, SIEMPRE!!!!
Eduardo Esquivel Revilla
Ex Militante de la Liga Comunista 23 de Septiembre

Una mañana luminosa y fresca, abruptamente supe

que mi jefe “Mariano” ya no estaba. Tan luminosa y

15 de junio de 1975. Las Islas C.U.

C
onocí a Adolfo Lozano
Pérez“Mariano”, en su
casa, de Torreón, a fines de
octubre del ´71. David López
Valenzuela y yo andábamos
estudiando la posibilidad de
realizar una expropiación bancaria
en esa ciudad, en alianza con
algunos miembros del grupo
Procesos. Nos dimos cuenta de que
era muy peligroso pues los bancos
del centro de la ciudad estaban
resguardados por militares. Así que
aprovechamos los tres días que
pasamos ahí para aprender a
manejar motocicleta. Él y David
habían sido dirigentes nacionales
de la FECSM. Lo volví a ver dos
días antes de realizar la triple
expropiación bancaria en
Chihuahua, que terminó en
tragedia, el 15 de enero de 1972. Él
participó en otro de los bancos,
exitosamente y salió de la ciudad
en su motocicleta, con parte de lo
recaudado. Era miembro de nuestro
grupo, ahora conocido como Los
Guajiros.
32
Teresa Hernández Antonio
El 15 de junio de 1975 era un
domingo y había un desfile de
perros (“exposición canina”) en la
explanada (las “islas”) de Ciudad
Universitaria. Y en medio del
jolgorio de aristócratas y paseantes,
los agentes de la Dirección Federal
de Seguridad y División de
Investigaciones para la Prevención
de la Delincuencia montaron un
dispositivo especial en varias partes
de CU, para detener a algunos
dirigentes de la Liga Comunista 23
de Septiembre. Como resultado de
la emboscada, mueren, en las islas
de CU, Adolfo Lozano Pérez
(Mariano) y Teresa Hernández
Antonio (Alejandra), esposa de
David Jiménez Sarmiento. Los
cadáveres de los caídos son
conducidos al Servicio Médico
Forense; sus cuerpos muestran el
tiro de gracia. Gilberto Rincón
Gallardo nos contó que él estaba
presente en esa exhibición canina
y que Mariano, tratando de
esconderse, se colocó detrás de él,
pero que un agente le disparó a la
cabeza, que sobresalía de la de
Rincón, y cayó muerto.
José Luis Alonso Vargas
Ex militante del Grupo Guajiros
Vivir para contarlo. Junio de 2021
Dijimos: Volveremos... y volvimos
E
l Colectivo de Sobrevivientes de Guerra Sucia,
A.C., está en plena actividad. Nos propusimos
publicar nuestra Gaceta Vivir para Contarlo y
vamos bien; hemos editado nuestro número 0 con gran
éxito y en los primeros días del mes de junio saldrá, tal
y como lo programamos, el número 1. Los compañeros
integrantes del Consejo Editorial están trabajando duro.
El entusiasmo es grande y los resultados aún más.
Nuestra Gaceta ha tenido gran aceptación y los
comentarios y opiniones sobre de ella son bastante
positivos, pese a que el número 0 fue una edición
“piloto”. Lo anterior se debe a dos cosas: primero, a la
gran entrega y compromiso de todos y, en segundo
lugar, a la seguridad de que el camino de nuestra
actividad requiere de un órgano informativo, que
mantenga las tareas que nos hemos planteado en
conocimiento de amplios sectores de la izquierda.
Estamos seguros de que seguiremos avanzando y que
iremos creciendo en calidad y cantidad de nuestros
contenidos.
Por otro lado, como parte de nuestro trabajo político
permanente nos hemos integrado a otros colectivos que
luchan, en diferentes aspectos, por dar solución a
demandas que atiendan las secuelas que generó el
Movimiento Armado Socialista (MAS), como es la
lucha por los detenidos­desaparecidos que, luego de
tantas décadas, no hemos obtenido una respuesta clara
ni veraz por parte de las autoridades correspondientes.
Sabemos que partimos, en este tema, desde las primeras
manifestaciones de las “doñas” en los años setenta.
Mucho tiempo ha transcurrido y el Estado y el
Gobierno Mexicano, de una u otra forma, evaden llegar
al punto necesario que nos permita saber qué sucedió
con nuestras compañeras y compañeros que fueron
detenidos y de quienes nunca más se supo su paradero.
Por lo anterior, todos los colectivos que hemos buscado
integrar nuestras estrategias propusimos al actual
gobierno que se modifique el enfoque: hay que ir por
los perpetradores, en cuyos casos todavía viven gran
número de ellos, para obtener información. Sabemos
nombres, filiaciones y direcciones de muchos de ellos
y se ha hecho entrega de esta información a las
autoridades responsables.
Estamos trabajando en conjunto, presionando para
que la Secretaria de Gobernación integre nuestras
demandas, desde nuestros propios conceptos y
perspectivas, a la agenda mínima con la que se está
trabajando en coordinación con esta autoridad. ¿Como
lo hicimos? Con la fuerza de la unidad a través del
colectivo de colectivos, desde donde buscamos
establecer la agenda de trabajo, evitando así que sean
las autoridades quienes interpreten cuáles son nuestras
demandas y sus matices. En ese marco de trabajo
tenemos abierta la posibilidad de establecer una
entrevista con el presidente Andrés Manuel López
Obrador, al que presentaremos nuestras exigencias.
¡Bienvenido el trabajo en conjunto de largo alcance!
El interés particular de los sobrevivientes se centra
en la problemática de los detenidos­desaparecidos, así
como en el establecimiento de un proceso
33

administrativo más eficiente para el reconocimiento de
víctimas y la definición de la autoridad u organismo
gubernamental que será responsable de su ejecución.
Otras demandas presentadas por los colectivos de
sobrevivientes son: la reparación de daño integral
­colectivo y personal­; la atención médica y económica
de nuestros compañeros ­esto debe ser contemplado a
través de otorgamiento de pensiones y de la reparación
de las víctimas; por ejemplo, las de Guerrero en las
pérdidas de cosechas, animales y propiedades que
sufrieron por efectos de la represión directa del Ejército
Mexicano­; la recuperación de la memoria histórica;
así como la conversión en espacios de memoria de las
instalaciones donde las fuerzas represivas, de todo tipo,
torturaron, asesinaron y desaparecieron compañeros,
en donde resalta el caso del llamado “Metro”, que existe
en el Campo Militar Número Uno.
Con base en la unidad de los colectivos, tenemos
34
Vivir para contarlo. Junio de 2021
muchas posibilidades de alcanzar los fines planteados
y como Sobrevivientes de la Guerra Sucia AC estamos
aportando el trabajo que nos corresponde convencidos
de que esa es la ruta que necesitamos para establecer
la agenda de trabajo con las autoridades.
Por último, celebramos la integración de
compañeros de diversas organizaciones a nuestro
colectivo, mismos que, en su momento, participaron
en el MAS y que ahora ven nuestra opción como una
oportunidad de trabajar políticamente para mantener
viva nuestra presencia política a nivel nacional, llegar
al punto de lograr reconocimiento a nuestra actividad
revolucionaria y obtener la justicia y la verdad que
todavía nos debe el estado mexicano.
Enrique Tellez Pacheco, Ex militante de la ACNR y
Presidente de la Asociación Civil Sobrevivientes de la
Guerra Sucia.
Vivir para contarlo. Junio de 2021

C O R P U S 71
David Roura.

Y por las calles

La sangre de los niños
Corría simplemente
como sangre de niños
Pablo Neruda

Ciudad nuestra. ¡Marchemos!

Antes de juegos cotidianos, Ven, no nos detengamos.
que amo y que a diario debo mi camino. Retomemos nuestra libertad.

Ahora, ciudad sitiada ¡Marchemos!

de hambre
ciudad de policía militarizada. La tarde es una nube de policías.

Después de tu herida en Tlaltelolco La trampa tendida, es la imposición de la

te rescataremos en tu pulsar de multitud “apertura”
desesperada Los gritos y la desesperación son nuestra
y nuestro canto de libertad voz.
irradiará tu rebeldía, tu juventud, tu Las garras de halcones, que nos atacan, son
cambio. su dialogo:

¡Alzaremos nuestra voz Chacos, kendos, varas eléctricas,

justo a la altura de la vergüenza disparos desde lo alto,
del silencio de este país! a quema ropa,
Compañera:
disparos desde las vallas policíacas.
Ven, tendremos lo que cada habitante Nuestra resistencia
de esta ciudad tiene. Camina,
no dejes que hieran nuestra conciencia, desorganizada, inocente, desesperada.
no dejes que amedrenten nuestro amor,
no dejes que allanen nuestra lucha. Nuestros refugios

35

en edificios, en casas, en comercios,
en la Normal Superior, bajo los autos,
tras los postes, en las banquetas.
Nos ocultamos entre los cuerpos inertes
de compañeros
del robo de cadáveres en el forense.
Todo fue órdenes, disparos,
miradas confusas, llanto,
asfalto, sangre, muerte.
Terror, terror, coraje
y tanto pinche miedo.
Son nuestros los muertos,
los heridos,
los desaparecidos,
serán nuestros los presos
y los perseguidos.
Mañana en esta prensa cómplice, se dirá:
“Pleito entre estudiantes”
tendremos de frente a los asesinos,
“Se conspira contra el país”
“Conjura comunista”
“Agentes enemigos de la nación…”
No dirá nada de la protección
cínica y coautora de la policía,
No dirá nada de las balas expansivas.
36
Vivir para contarlo. Junio de 2021
No dirá nada del asalto
de los halcones a la Cruz Verde
para rematar a los nuestros,
para rescatar a sus heridos.
No dirán nada
No habrá una lista de muertos y
desaparecidos.
¡Callarán!
¿Podrán siempre callar?
No habrá sino discursos,
enmiendas y encuentros
con intelectuales
de conciencia comprada
de convicción prostituida.
Pero algún otro día
de un mañana no lejano,
a sus esbirros
y tendrán que responder
sangre por sangre, de cada uno
de nuestros compañeros caídos.
Vivir para contarlo. Junio de 2021

INVITACION AL
CAMINO
Ernesto Guevara de la Serna

Para Helena Leiva de Holst

Hermana, falta mucho para
llegar al triunfo

Hermana, falta mucho para llegar al triunfo.

El camino es largo y el presente incierto;
¡el mañana es nuestro!
No te quedes a la vera del camino.
Sacia tus pies en este polvo eterno.
Conozco tu cansancio y tu desazón tan
grandes;
sé que en el combate se opondrá tu sangre
y sé que morirías antes que dañarla.
A la reconquista ven, no a la matanza.
Si desdeñas el fusil, empuña la fe;
si la fe te falla, lanza un sollozo;
si no puedes llorar, no llores,
pero avanza, compañera,
aunque no tengas armas y se niegue el norte.
No te invito a regiones de ilusión,
no habrá dioses, paraísos, ni demonios
—tal vez la muerte oscura sin que una cruz
la marque—.
Ayúdanos hermana, que no te frene el
miedo,
¡vamos a poner en el infierno el cielo!
No mires a las nubes, los pájaros o el viento;
37
 Vivir para contarlo. Junio de 2021

nuestros castillos tienen raíces

en el suelo.
Mira el polvo, la tierra tiene
la injusticia hambrienta de la
esencia humana.
Aquí este mismo infierno es la
esperanza.
No te digo allí, detrás de esa
colina;
no te digo allá, donde se
pierde el polvo;
no te digo, de hoy, a tantos
días visto...
Te digo: ven, dame tu mano
cálida
—esa que conocen mis
enjugadas lágrimas—.
Hermana, madre,
compañera... ¡Camarada!
este camino conduce a la
batalla.

Deja tu cansancio, deja tus

temores,
deja tus pequeñas angustias
cotidianas.

¿Qué importa el polvo acre?,

¿qué importan los escollos?
¿Qué importa que tus hijos no
escuchen el llamado?
A su cárcel de green-backs
vamos a buscarlos.

Camarada, sígueme; es la hora

de marchar...

38
Vivir para contarlo. Junio de 2021

POSTER A MARX
He aquí al maldito al rodas
al temido que ensancha
al odiado más allá de octubre
al subterráneo para aniquilar y pulverizar
al expansivo ancestrales contradicciones
al terrenal para socializarse
al de la lucha de clases a la medida del mundo
en la punta de la lengua
al de los baños de sangre Pero he aquí que demócratas
y cómoda dictadura y socialdemócratas
al cabrón de ondulante cabellera de gruesos y severos lentes
y barba agresiva y libre. de lengua hinchada
Ved los parpados de novedosas teorías
pesados de tanto futuro con su raído traje
y la amplia frente de redentores
repleta de materialismo histórico parchado de reformas
y dialécticos giros con la plusvalía coagulada,
la recta mirada tiritando de huelgas
traspasando siglos chillan a ocho columnas
adusta de tácticas y estrategias. que no es cierto
que ya cicatrizó
¡Ved! que fue tangencial
como escama a lo sumo horóscopo proletario
la pelirroja espiga tan Buda
de rojos granos tan Cristo
que harinan tan chispa
socialistas áreas tan curiosidad
que maduran tan mercancía
en proletarias organizaciones tan luz de bengala
que maduran ¡Que ya ni chingan!
en “legítimas ganancias” Agustín Hernández Rosales
Cárcel de Lecumberri 1976
¡Ved!

39
 LUIS ECHEVERRIA
ES UN GENOCIDA
LUIS ECHEVERRÍA ÁLVAREZ ORDENÓ LA MUERTE DE LAS SIGUIENTES PERSONAS DURANTE EL MOVIMIENTO ESTUDIANTIL DE 1968:
Agustina Matus de Campos, Ana Regina Teuscher Kruger, Ángel Santiago Luna, Ángel Valdez Velasco, Antonio Peña Maya, Antonio Solórzano Gaona, Antonio
Vargas Valle, Bertha Corona Tafoya, Carlos Antonio Beltrán Beltrán, Carlos Beltrán Maciel, Carlos Cristóbal Fortanel Hernández, Cecilio de León Torres, Constantino
Corrales Rojas, Cornelio Benigno Caballero Garduño, Cuitlahuac Gallegos Bañuelos, Eliseo Herrera Mendoza, Enrique González Ramírez, Ernesto Morales Soto,
Fernando Hernández Chantre, Florentino Moreno Magaña, Gilberto Reinoso Ortiz , Gloria Valencia Lara de González , Guillermo Rivera Torres, Jaime Armando Reyes
Haro, Jaime Pintado Gil, Jorge Ramírez Gómez, Josafath Figueroa Vargas, José Hernández Toledo, José Ignacio Caballero González, Julio Aldana González, Leonardo
Pérez González, Lorenzo Hernández Reséndiz, Luis Gómez Ortega, Luis Lorenzo Ríos Ojeda, Melitón Pérez Vitel, Miguel Llamas González, Miguel Miranda Salas,
Octavio Rodríguez Cid, Pedro Gustavo López Hernández, Petra Martínez García, R. Ma. Maximiana Mendoza Robles, Ramiro Rodríguez Guzmán, Ramón Horta
Ruiz, Román Nájera Valverde, Rosalino Marín Villanueva, Sergio Aguilar Lucer, Siete personas no identificadas, Telésforo M. López Carballo, Vicente Reymel
Betanzos, Víctor Manuel Hernández Linares, ** Asesinados por personal del Ejercito Mexicano. LUIS ECHEVERRÍA ÁLVAREZ ORDENÓ EL SECUESTRO,
TORTURAS, SIMULACRO DE FUSILAMIENTO EN EL CAMPO MILITAR NO. 1 DE LAS SIGUIENTES PERSONAS, (LUEGO DE LA MATANZA DE
TLATELOLCO EL 2 DE OCTUBRE DE 1968): Alfonso Basilio Pérez, Alfonso Berlanga Jano, Alfonso González Rojas, Alfonso Saúl Álvarez Mosqueira, Amada
Velasco, Anselmo Muñoz Juárez, Arturo Ávila Curiel, Camilo Cahuich Varguez, Carlos Alfonso Taylor Cunha, Carlos Antonio González Narváez, Carlos Armando
Flores de Dios González, Carlos Cifuentes Martínez, Carlos Eduardo Taylor Cunha, Carlos Enrique Taylor Cunha, Carlos González Narváez, Carlos Martín del Campo
Ponce de León, Ciriano Ibarra Alfonso, Eduardo Martínez Rodríguez, Enrique Espinosa Villegas, Enrique González, Fernando Núñez Ballesteros, Florencio López
Osuna, Gilberto Ramón Guevara Niebla, Heliodoro Virgen Alcalá, Javier May Flores, Javier Montiel Cornejo, Jorge Octavio García Pérez, Jorge Octavio García Pérez,
José Camilo Cahuich Varguez, José Francisco Aguilar Aguilar, José Luis González de Alba, José Martínez González, José Santiago Díaz Cobarrubias, José Vega
Becerra, José Vega Becerra, Juan Antonio Muro García, Juan Flores Vicenteño, Juan Javier Fernández Ávila, Juan Jesús Aguirre Alcalá, Leonardo Hernández Calva
(o Valva), Luis González Sánchez, Luis Jorge Abaunza Galicia, María Paz Romero Chávez, Mario Luna Hurtado, Mario Solís Hernández, Marisela Olivar Morales,
Miguel Ledesma Cortés, Octavio López Pérez, Pablo Gómez Álvarez, Rolando Nora Sánchez, Samuel González Bernández, Sergio Antonio Castañeda Báez, Servando
José Dávila Jiménez, Silverio Martínez Sandoval, Sócrates Amado Campos Lemus, Víctor Bonilla Olivares. LUIS ECHEVERRÍA ÁLVAREZ ORDENÓ Y SUPERVISÓ
LAS SIGUIENTES MASACRES COLECTIVAS: Tlatelolco 2 de octubre en 1968; San Cosme 10 de junio en 1971; Masacre de Nepantla contra las FLN, en
1974; San Ignacio Río Muerto, Sonora, en 1976. LUIS ECHEVERRÍA ÁLVAREZ ORDENÓ EL ASESINATO EN EMBOSCADAS GUBERNAMENTALES,
O EN NOTABLE DESVENTAJA MILITAR DE POR LO MENOS LAS SIGUIENTES PERSONAS: Avelina Gallegos, José de Jesús Corral García, Juan Cota
Leyva, Luis Miguel Corral García, Diego Lucero, Genaro Vázquez Rojas, Pablo Alvarado Barrera, Raúl Ramos Zavala, José Ignacio Olivares Torres, Efraín Calderón
Lara, Lorenzo Valenzuela, Manuel Gómez García, Roberto Verdugo Gil, Roberto Rendón Pacheco, Salvador Corral García. LUIS ECHEVERRÍA ÁLVAREZ ORDENÓ
LA DETENCIÓN, INCOMUNICACIÓN, TORTURAS Y DESAPARICIÓN CONTRA POR LO MENOS LAS SIGUIENTES PERSONAS: Abarca García
Emeterio, Acosta Serafín Macario, Adame de Jesús Maria, Adame de Jesús Ruperto, Adame de Jesús Vicente, Aguirre Bertín Roberto, Alcántara Aispuro Francisco I.,
Almogabar Ríos Jorge Alberto, Álvarez Azanza Alberto, Argello Smith Julian, Argello Villegas Francisco, Arreola Yánez Pablo, Arrieta Memije Eusebio (a), Arroyo
Dionisio Alberto, Arroyo Secundino Román, Ávila González José de Jesús, Baena Roque, Bahena Román Filemón, Balbuena Carmelo, Barrientos Campos Félix, Barrientos
Flores Anastasio, Barrientos Flores Justino, Barrientos Martínez Emiliano, Barrientos Peralta Zacarias, Barrientos Reyes Raymundo, Barrientos Ríos Apolinar, Barrientos
Rojas Raymundo, Barrios Castro Santiago, Barrón Caldera José, Bello Ríos Ausencio, Benítez Bravo Raúl, Benítez Simón Armando, Bernal Castillo Inés, Bernal Martínez
Diógenes, Blanco Julián, Bracamontes Patiño Bartolo, Cabañas Felipe, Cabañas Navarrete Julián, Cabañas Ocampo Eleno, Cabañas Tabares Lucio, Cabañas Vargas Miguel
Ángel, Cadena Diego Miguel, Calderón Laguna Crescencio, Campos Ramírez Candelario, Caraballo Bolín Ma. Constancia, Cascahuate Carrasco Tania, Castillo de Jesús
Roberto, Castillo Felipe, Castillo Gervasio Lucio, Castillo Iturio Juan, Castillo Iturio Margarito, Castillo Ríos Cándido, Castrejón Raúl, Castrejón Vázquez Rosalio, Castro
Arteaga Inocencio, Castro Castañeda Francisco, Castro Castillo Maurilio, Castro Domingo Francisco, Castro Hernández Petronilo, Castro Molina Eleazar, Castro Molina
Fabiola, Castro Molina Guadalupe, Castro Rosas Pedro, Castro Velásquez Isaías, Chalma de la Cruz Rubén, Chalma García Francisco, Chávez Bello Artemio, Chávez
Pérez José Armando, Chávez Rosas Rafael, Chávez Villa Artemio, Clavel Juárez Floriberto, Contreras Navarro Joaquín, Corral García José de Jesús, Coutiño Gordillo
Javier, Cruz Ávila Cutberto de La, Cruz Ávila Humberto, Cruz Espinoza José Luis, Cruz Flores José Luis, Cruz Mayo Ángel, Cruz Ramírez Miguel, Cruz Yánez Mariano
de La, Delgado Jiménez Emilio, Díaz Fierro Aurelio, Diego Flores Francisco, Diosdado Mendoza Antonio, Domínguez Rodríguez Gabriel, Domínguez Rodríguez Plutarco,
Dorantes Pérez Alberto, Estrada Ramírez Teresa, Fierro Abarca Julián, Fierro Nava Eusebio, Fierro Polanco Cipriano, Fierro Valadez Esteban, Fierro Valadez Jesús, Flores
de Jesús Marciano, Flores Galeana Mardonio, Flores Gervasio, Flores Gervasio José, Flores Gregorio San Vicente, Flores Jiménez Agustín, Flores Leonardo Antonio,
Flores Martínez Agustín, Flores Serafín Eladio, Flores Serafín José Jesús, Flores Zamora Marcelino, Galeana de Jesús Alberto, Galeana Santiago Joel, Galeana Vázquez
Eleno, Gallangos Cruz Avelino Francisco, Gallangos Cruz Roberto Antonio, Gallangos Lucio Antonio, Gamio Roffe Sergio Arturo, Gámiz García Jacob, Garay José,
García Campos Isidoro, García Castro Luis Francisco, García Castro Luis Francisco, García Cruz Maximino, García Cruz Maximino, García Flores Melquíades, García
Juárez Ascencio (n), García Martínez Ricardo, García Mateo Miguel, García Pintor Austreberto, García Téllez Mauro, Garríos Santiago, Gaytán Saldivar Oscar Javier,
Gervasio Benítez Octavio, Gervasio Manuel, Gómez Abarca Bernardo, Gómez Flores Juan, Gómez Magdaleno Francisco, Gómez Mendiola Lucia, Gómez Serafín
Alejandro, Gómez Serafín Eugenio, Gómez Vargas Lucino, González Fernando, Gorgonio Santiago Pedro, Gorostiola Toriz Francisco, Gudiño Dircio Tomas, Guerrero
Gómez Gloria, Guichar Gutiérrez Juan, Guzmán Cruz Anafer, Guzmán Cruz Armando, Guzmán Cruz Solón Adenabe, Guzmán Cruz Venustiano, Guzmán Jiménez José
de Jesús, Hernández Ramírez Placido, Hernández Valente Placido, Herrera Sánchez Ignacio Tranquilino, Herrera Sánchez Juan de Dios, Higinio Ortiz Vicente, Iturio
Barrientos Armando, Iturio de Jesús Doroteo, Iturio de Jesús Margarito, Iturio Martínez Armando, Izazaga García Rito, Jesús Alquicira Marino de, Jesús de La Cruz
Bautista Sulpi, Jiménez Alvarado Leonardo, José García Simón, José García Wenceslao, Juárez Juárez Ascención, Juárez Juárez Cutberto, Juárez Juárez Marcelo, León
Rosado José Guadalupe, Leyva Vinalay Gregorio, Linares Martínez Martiriano, López Gaytan Henry, Loza Patiño Pablo, Maldonado Valencia Rogelio, Martínez Barrientos
Gaudencio, Martínez Bernal Diógenes, Martínez García Daniel, Martínez García Marcelino, Martínez Huerta Lourdes, Martínez Rojas Villado, Mata Carmelo, Mesino
Acosta Alberto, Mesino Aguilar Filemón, Mesino Galicia Julio, Mesino Lezma Ernesto, Molina Martínez Rodolfo, Mondragón Medina Heleodoro, Morales Galeana
Fernando, Morales Gervasio Abelardo, Morales Gervasio Raymundo, Morales Legideno(ño) Flavio, Morales López Delia Cirila, Moreno González Candencio, Moreno
Pérez Olegario, Mújica Díaz Ignacio, Mújica Leoncio, Najera Nava Miguel, Naríos López Gabriel, Naríos López Pascual, Nava Hipólito Esteban, Nava Hipólito Macario,
Navarrete de la Paz Marcial, Navarrete Jiménez Abel, Noriega Zavala Jacinto, Núñez Alba Germán, Ocampo Sotero Patricio, Ochoa Loza Ubaldo, Ochoa Morales Ubaldo,
Olea Hernández Adusto, Onofre Ocampo (Campos) Juan, Onofre Pedro de Jesús, Pablete García Constantino, Peralta Santiago Lucio, Perdón Vernar Teódulo, Pérez
Carmona Saturnino, Pérez Gázquez Raúl, Piedra Ibarra Jesús, Radilla Barrientos Miguel Ángel, Radilla Gómez Petronilo, Radilla Pacheco Rosendo, Radilla Reyes Alberto,
Ramírez Alejo, Ramírez García Guadalupe, Ramírez Rojas Donaciano, Ramírez Samaycón José, Ramos (de la) Cruz Eduviges, Ramos Cabañas Eduviges, Ramos Cabañas
Felipe, Ramos Cabañas Heriberto, Ramos Cabañas Marcos, Ramos Cabañas Reynaldo, Ramos Tabares Melitón, Rebolledo Martínez David, Rebolledo Ocampo Getulio,
Reséndiz Hernández Aristeo, Reséndiz Hernández Eugenio, Reséndiz Hernández Eva, Reséndiz Hernández Fulgencio, Reséndiz Salmerón Bernardo, Reséndiz Valente
Bernardo, Reyes Félix Bernardo, Reyes Francisco, Ríos de Roque Ramona Ó, Rivera Patiño Alejandro, Rocha Manzanares de Herrera Cristina, Rojas Gaxiola José Manuel,
Rojas Vargas David, Romero Dionisio Israel, Romero Flores Justino, Romero Loeza Félix, Roque Romero Román, Ruiz Santiago Juventino, Sáenz Garza Elisa Irina,
Salas Obregón Ignacio Arturo, Sánchez Barrera Ezequiel, Sánchez Bello Mario, Sánchez Cruz Edilberto, Sánchez Sierra Salvador, Sánchez Vergara José Ascensión,
Sandoval Héctor David, Santos Dorante Alfonso de Los, Serafín Juárez Marcelino, Serafín Peralta Miguel, Serrano Abarca (Eduardo) Heron, Serrano Vargas Aquilino,
Serrano Vargas Francisco, Serrano Zamora Fidel, Serrano Zamora Mariano, Severiano Iturio Jesús, Sicairos Angulo José Guadalupe, Silva Arestegui Gilberto Joel, Soleado
Luna Crescencio, Sotelo Guillermo Gabriel, Sotelo Patiño Perla, Tapia Pérez Daniel, Tecla Parra Adolfo, Texta Marina, Tomalán Gómez José, Torralba Álvarez Lázaro,
Torres Galindo Isidro, Torres Ramírez de Mena Teresa, Urban D. Rafael, Uríoste Santiago Antonio, Urióstegui Terán Miguel, Valdez Morales Modesto, Valenzuela Rojo
Miguel Ángel, Vargas Pérez Agustín, Vargas Pérez Carmen, Vargas Pérez Juan, Vargas Viviano Arturo, Vázquez Baltazar Margarito, Vázquez de Jesús Juan, Vázquez
Mendoza Sebastián, Velásquez Martínez Fidelino, Vélez Cienfuegos José Luis, Victorino Gutiérrez Filiberto, Villa Laura, Villamar Bernardo, Vinalay Jiménez Virgilio,
Vives Chapa Carlos, Zambrano Rosendo, Zamora Hernández Zenón, Zamora Román Ignacio, Zurita Carballo Federico... y muchos más.

LUIS ECHEVERRÍA DEBE ESTAR EN LA CÁRCEL