MAESTRÍA EN INVESTIGACIÓN Y DOCENCIA UNIVERSITARIA

Artículo de opinión

EDUCACION A DISTANCIA

Por: Lucila Santillan Ramírez

https://orcid.org/0000-0003-1883-8605
daip7035@gmail.com
Asesor: David Auris Villegas

La educación a distancia, en nuestro sistema educativo, se inició hace décadas y estaba centrado
básicamente al nivel educativo superior y el auto aprendizaje profesional o técnico, y el
estudiante aprendía apoyado de un contenido físico, es decir libros, documentos, audiolibros,
infografía, materiales audios visuales, etc. Y con el uso de la tecnología desde un poco más de
una década se empezó la modalidad de la educación virtual haciendo uso de plataformas
digitales como Moodle e integrando las fortalezas del e-learning y el uso de las TIC en el
proceso de autoevaluación con fines de acreditación de carreras universitarias.

Es el contexto de la pandemia que todo nuestro sistema educativo ingresa abrupta y

obligatoriamente a la educación a distancia, ocasionando un gran impacto en el quehacer
pedagógico porque no se estaba mínimamente preparados a pesar de las propuestas de planes
a nivel nacional como los “Lineamientos Tecnológicos de la Dirección de Innovación
Tecnológica en Educación (DITE) del Ministerio de Educación y que planteaba los 5 HITOS
DIGITALES, estrategias y propósitos de la Educación Básica Regular a cumplir al 2021. Como
todo en nuestro país, son programaciones y planes bien estructurados completos y ambiciosos,
pero no se gestionan ni se implementan con el presupuesto de inversión ni el equipo tecnológico
por los entes encargados del gobierno.

Esta nueva modalidad educativa ha sido un gran reto para todos los integrantes educativos. En
cuanto a los docentes, a pesar del esfuerzo de docentes en reinventarse en su modo de enseñar
adaptando la situación y contexto de sus estudiantes, no ha habido un logro destacado debido
entre otras causas por la falta de alfabetización digital de la gran mayoría, por el
desconocimiento de estrategias y herramientas digitales, para poder favorecer a todos los
estudiantes por igual, en el uso de las herramientas digitales que mejor ayuden en el propósito
y las realidades cambiantes y familiares de los estudiantes.
 MAESTRÍA EN INVESTIGACIÓN Y DOCENCIA UNIVERSITARIA

La implementación forzada de esta educación a distancia ha generado cierta innovación

pedagógica en los docentes que se han vuelto generadores de contenidos formando grupos y
comunidades educativos y generando un nuevo mercado digital dirigido a capacitaciones y
venta de materiales educativos. En cuanto a los estudiantes la mayor dificultad es la gran
desigualdad en el acceso digital y la conectividad precaria con la que cuentan la mayoría de los
estudiantes a nivel nacional, como recarga mínima de datos o megas en un único celular
familiar y esta situación los excluye de los beneficios del uso de herramientas digitales. Otra
dificultad es la participación, adecuación y adaptación de los padres y los integrantes de la
familia a esta nueva realidad ya que esta modalidad de educación a distancia virtual requiere
imperiosamente el acompañamiento de los padres o familiares para el logro de los aprendizajes.

Es en la educación a distancia que se debe buscar que los estudiantes desarrollen

competencias y habilidades para APRENDER a APRENDER y por ende desarrollar
competencias digitales para la ciudadanía digital, competencias y habilidades para la búsqueda
de información confiable, competencias y habilidades para la discriminación de información
por calidad y veracidad, nuevas competencias comunicativas digitales, entre otras más.

Por lo tanto, en esta educación a distancia se necesita: un docente alfabetizado

digitalmente, se necesita una planificación basada en los tipos de aprendizaje, en técnicas,
estrategias y herramientas digitales específicas que apoyen los tipos de aprendizaje en la
modalidad sincrónica y asincrónica y sobre todo de la inversión para trascender la barrera de
la brecha digital en los estudiantes. Por eso es necesario establecer nuevos enfoques para
desarrollar el sistema educativo más abierto para el futuro inmediato de la educación a distancia
y que se va a complementar con la presencialidad.

©Lucila Santillan Ramírez