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El documento resume la Ley de Say, una teoría económica formulada por Jean-Baptiste Say que establece que la oferta crea su propia demanda. Explica que según esta ley, no puede haber un exceso de oferta porque la producción de bienes genera ingresos que se gastan en la compra de otros bienes, manteniendo así el equilibrio entre oferta y demanda. También discute que John Maynard Keynes criticó esta ley argumentando que los tenedores de dinero pueden decidir ahorrar en lugar de gastar, lo que puede dar lugar
El documento resume la Ley de Say, una teoría económica formulada por Jean-Baptiste Say que establece que la oferta crea su propia demanda. Explica que según esta ley, no puede haber un exceso de oferta porque la producción de bienes genera ingresos que se gastan en la compra de otros bienes, manteniendo así el equilibrio entre oferta y demanda. También discute que John Maynard Keynes criticó esta ley argumentando que los tenedores de dinero pueden decidir ahorrar en lugar de gastar, lo que puede dar lugar
El documento resume la Ley de Say, una teoría económica formulada por Jean-Baptiste Say que establece que la oferta crea su propia demanda. Explica que según esta ley, no puede haber un exceso de oferta porque la producción de bienes genera ingresos que se gastan en la compra de otros bienes, manteniendo así el equilibrio entre oferta y demanda. También discute que John Maynard Keynes criticó esta ley argumentando que los tenedores de dinero pueden decidir ahorrar en lugar de gastar, lo que puede dar lugar
Ley de say La Ley de Say, es un principio económico que indica que no puede existir demanda sin haber oferta, hoy en medio de la crisis muchos principios que antes eran negados son aceptados y vueltos a estudiar para mejorar las inversiones o el entendimiento de la economía. Formulado por Jean-Baptiste Say, su teoría se basa en demostrar que la recesión no ocurre por fallas en la demanda o faltantes de dinero. Sino que, todo lo contrario, a mayor cantidad de bienes (demandados) se produzcan, existirán más bienes (oferta). También conocida como ley de los mercados, fue formulada por Jean Baptiste Say (1767-1832) y señala que no puede haber un exceso de oferta porque este es absorbido por la propia demanda que genera. La teoría de Say defiende que las recesiones o crisis no se producen como consecuencia de fallos en la demanda o falta de dinero, sino al revés, por anomalías en la oferta. Como el autor sostenía, al producirse más bienes se genera más riqueza, lo que a la vez provoca que al producir otros bienes estos sean demandados. De tal forma que automática y cíclicamente, la oferta crea su propia demanda, generando un círculo vicioso que mantenga la relación entre oferta y demanda de manera continua. La imposible sobreproducción o exceso de oferta y desaprovechamiento de los recursos productivos viene dada por el hecho de que producir bienes ya es en sí misma una fuente de generación de ganancias, aunque sea bajando los precios. Con ese dinero se podrán comprar otros bienes, creando indefinidamente un sostenimiento de la oferta a través del movimiento de la demanda, siendo ésta la base de la ley de Say. En economía, la ley de Say, también llamada ley de los puntos de venta, fue denunciada por el economista francés Jean - Baptiste Say (1767 - 1832) y se refiere al fenómeno de las crisis económicas. Sostuvo en esa ley que bajo el régimen de libre comercio las crisis prolongadas no son posibles, ya que la oferta crea demanda. De hecho, en una economía de libre mercado cada sujeto a precios de mercado elige ser un comprador o un vendedor. Si en un momento dado usted tiene un exceso de oferta, los precios tenderán a caer. La caída de los precios hará que la nueva demanda sea asequible. Es en este sentido que la oferta siempre puede crear su propia demanda. En caso de una crisis de sobreproducción, el remedio de las crisis no debería, según Say, buscarse en la intervención estatal sino en una capacidad autorreguladora del mercado. En cualquier caso, entonces, el libre comercio actuaría como un remedio en sí mismo, requiriendo la formación de un nuevo equilibrio económico. Esta ley también se llama la ley de los puntos de venta, ya que cada producción siempre encontraría una salida natural en el mercado. Say, por lo tanto, estaba convencido de que el mercado dejado a sí mismo tendía a alcanzar el equilibrio del pleno empleo. Hay dos corolarios de la ley: En el Capítulo XV del Libro I de su Traité d''économie politique (1803), Say escribe: Como puede ver, Say, asume que el dinero de la venta está destinado a ser gastado inmediatamente; en este sentido, el vendedor también es siempre un comprador y, con esto, ofrece una salida a las producciones de otros. De hecho, esta conclusión está en línea con la regla de contabilidad de doble entrada, que establece que en cada transacción se cobra y acredita a un individuo al mismo tiempo. John Maynard Keynes, en su teoría general de Empleo, Interés y dinero, criticó la ley con el argumento de que el titular del dinero puede estar motivado para sostenerlo en lugar de gastarlo; el vendedor, por lo tanto, puede no resolverse como consumidor, una circunstancia que causa una demanda agregada insuficiente. Esta hipótesis se basa en el concepto de acaparamiento: el acaparamiento consiste en el escape de parte de los ingresos recibidos en forma de salarios, ganancias o intereses, del circuito económico definido por la circulación monetaria. Según Keynes, la inflación de precios ocurre solo cuando la economía alcanza su plena capacidad productiva. Antes de eso, el aumento de la demanda requiere un aumento de la oferta: si se contrata a más trabajadores para producir mayores cantidades de "bienes y servicios", entonces la demanda y la oferta crecerán juntas.