El lenguaje y la comunicación son dos conceptos que están estrechamente
relacionados, y ello es debido a que el lenguaje es un instrumento para la comunicación; pero no es el único instrumento; y para que sea eficaz la comunicación se debe contar con otras habilidades. Sin embargo, las diferencias que existe entre comunicación y lenguaje dependen en gran medida del marco teórico que estudie la psicología del lenguaje. Se puede, tomando a la psicología del lenguaje, mencionar la existencia dos perspectivas, por un lado, la semiótica, que pone su atención en el lenguaje tomándolo como un sistema de elementos, como ser signos, señales; y por otro lado está la lingüística, que se encuentra centrada en el proceso de producción y comprensión. Por consiguiente, el lenguaje pasa ser un mediador en las relaciones con el medio, es decir, en un mediador simbólico en las actividades de las personas, por ejemplo, si expreso que haré una donación tal fecha, y luego no lo cumplo, las personas que han escuchado esa promesa no confiarán en mi palabra. Tomando a Bruner, que expresa el hecho de que los códigos semánticos, están centrados en la transmisión de información; y la perspectiva pragmática refiere al empleo del habla con fines sociales, por ejemplo, promesas, advertencias, declaraciones, etc. Pero también hay un elemento, no menos importante, que es el silencio, ya que este puede expresar un sinfín de cosas dependiendo el contexto en el que ocurra; es decir, tenemos que saber que nadie puede no comunicar, y ya sea mediante el habla o el silencio, pero siempre estamos comunicando algo, claro que el receptor deberá poder comprender, por ejemplo, lo que el silencio buscaría comunicar. La perspectiva psicológica, entendemos, permite estudiar dos modalidades básicas, la producción y la comprensión del lenguaje, debido a sus implicaciones en el proceso comunicativo; por lo que dificultaría poder separar lo que es la actividad cognitiva y la comunicativa, respecto a la actividad lingüística. Por su parte, el autor Riviere, refiere que el habla es una actividad producida por el lenguaje, y que primeramente se asienta en los procesos cognitivos y motivacionales; por ende, los sujetos mediante el habla buscan poder expresarle al que escucha lo que éstos piensan, sienten, temen, desean, etc. Asimismo, para que este proceso de comunicación sea considerado como eficaz, debe utilizar combinaciones de signos que puedan ser adecuadamente descifrados e interpretados por los interlocutores. Para ello se debe considerar importante el hecho de conocer el contexto comunicativo, el motivo de la conversación y quien es el interlocutor; por lo que el lenguaje al ser un proceso comunicativo tiene repercusiones sociales. Entonces, el lenguaje, es un conjunto de diferentes medios que permite a las personas poder expresarse y transmitir pensamientos, sentimientos, deseos, etc. Tal vez, sería menester entender que la comunicación es una de las funciones psicológicas fundamentales en los seres humanos, ya que la misma permite compartir las ideas, intensiones, deseos, actitudes, silencios, etc.; incluso mucho tiempo antes de que se creara el lenguaje, existían varias maneras de comunicación.