Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Introducción
Desarrollo
Como afirma Roxin1, “la imputación al tipo objetivo presupone la realización de un peligro
creado por el autor y no cubierto por un riesgo permitido dentro del alcance del tipo”.
Por otro lado, cabe preguntarnos de dónde proviene esta teoría: “La teoría de la imputación
objetiva nace con el fundamento de tratar de dar respuestas y soluciones para aquellos
casos los cuales no podían ser resueltos a través de las teorías de equivalencias o la teoría
de la adecuación”2.
De allí surge que la teoría de la imputación objetiva lo que permite es definir cuándo un
comportamiento se encuentra dentro de un espacio jurídicamente permitido, así como
también cuando se está frente a un comportamiento socialmente desaprobado; y ello se
analiza a través del juicio de imputación.
1
Claus Roxin (Hamburgo, Alemania, 15 de mayo de 1931) abogado penalista y jurista alemán.
2
Righi Esteban, Derecho Penal Parte General, Albedoperrot, Buenos Aires, Edición 2019
Esteban Righi3, ha sostenido que esta teoría viene a significar el núcleo de toda acción
penalmente relevante.
Cabe resaltar que una vez que se encuentra configurada una acción que resulta punible,
pasará a analizarse en el marco de la tipicidad objetiva, donde se tendrá en cuenta si el
comportamiento realizado se adecua a lo descrito en la ley. La subsunción en el tipo
objetivo requiere considerar lo que el sujeto hizo a diferencia del tipo subjetivo que es lo que
efectivamente "quiso" realizar.
La teoría de la imputación objetiva persigue los resultados causados por una acción
humana cuando de ella deviene la creación de un peligro jurídicamente desaprobado, que
da lugar a una conducta típica.
Resulta fundamental analizar el juicio de imputación además del nexo causal; entendiendo
que la imputación del tipo objetivo presupone que la acción debe crear un riesgo
jurídicamente desaprobado (de manera necesaria) y como resultado se debe dar la
concreción de ese peligro.
Por otro lado, podría suceder que se den los requisitos para la imputación, pero sin
embargo que se recaiga en alguna de las causales de exclusión de la imputación objetiva:
una disminución del riesgo, una prohibición de regreso, una autopuesta en peligro, la
realización del riesgo, el principio de confianza, o un riesgo permitido, siendo esta última la
que desarrollaremos a continuación.
La Sala interviene con motivo del recurso de apelación interpuesto por la defensa del
imputado contra el auto del juez de la instancia de origen que lo procesó como autor del
delito de homicidio calificado por el vínculo y por haberse cometido contra una mujer en un
contexto de violencia de género. Los vocales confirmaron el procesamiento.
3
Esteban Justo Antonio Righi (Resistencia, 4 de septiembre de 1938-Buenos Aires, 5 de marzo de
2019), abogado y profesor.
4
“R., J. H. s/procesamiento” (causa n° 69.135/2017) rta. 27/12/2017
brazos y rostro, luego de lo cual la empujó, cayendo de espaldas contra el suelo y huyendo
del lugar luego que un vecino intercediera. A raíz de lo ocurrido, sufrió una fractura de
cadera que fue operada con éxito pero cuatro días después, presentó un cuadro de
somnolencia, dificultad respiratoria y malas condiciones generales de salud que derivó en
su fallecimiento.
Como bien sabemos, en toda sociedad nos encontramos frente a un riesgo permitido. Un
comportamiento que genera un riesgo permitido se considera socialmente normal, porque
en esa configuración es aceptado de modo normal. Por lo tanto, los comportamientos que
crean riesgos permitidos no son comportamientos que hayan de ser justificados, sino que
no realizan tipo alguno.5
Para Jakobs, “deja de estar permitido aquel comportamiento que el propio Derecho define
como no permitido, prohibido ya por su peligrosidad concreta o abstracta, incluso bajo
amenaza de pena o de multa administrativa. A través del establecimiento de la prohibición
de la puesta en peligro –que cuando menos es de carácter abstracto- el comportamiento
queda excluido del ámbito de lo socialmente adecuado, y se define como perturbación de la
vida social; esto acontece por la simple realización de un comportamiento así configurado
sin tener en cuenta el resultado que produce”.
Por último indicaron que no existían indicios de una concausa que hubiere interrumpido el
curso causal y que el accionar del encausado fue con dolo eventual, ya que nada hizo para
5
Gunter Jakobs, La imputación objetiva en el Derecho Penal. Editorial Ad-Hoc, edición 1996, págs.49
y ss.
evitar la producción del resultado lesivo, el cual debió representarse dada la vulnerabilidad
física de su madre, la cual conocía.
Conclusión
En el caso de haberse creado un riesgo, hay que considerar también si ese riesgo se
encuentra enmarcado bajo alguna de las causales de exclusión propias de la imputación
objetiva.
Al hacer este análisis exhaustivo, es la única manera a través de la cual podríamos concluir
si estamos frente a una conducta típica, o si en verdad nos encontramos frente a una
conducta atípica.