Está en la página 1de 5

Reporte de lectura número 1

Caso Artavia Murillo VS Costa Rica

El Estado debe garantizar el goce y la protección integra de un derecho tan importante


como es, el derecho a la vida, es por ello que resulta trascendente realizar un análisis
profundo a este caso en concreto que permite ahondar sobre la concepción de un
término tan allegado a este derecho como lo es el de “persona”; debemos entender
que para la materia que nos ocupa la persona debe ser concebida como un ente capaz
de tener derechos y contraer obligaciones, sin embargo, se trata de un término que
debe abordarse de manera más amplia cuando resulta complejo determinar los
excedentes y limitantes para la protección al derecho a la vida, debido a que supone
la protección que el Estado dispensa a la existencia de la persona.

El Caso Artavia Murillo VS Costa Rica tiene su antecedente en un Decreto Ejecutivo


emitido por el Ministerio de Salud a partir del cual el Estado declaraba inconstitucional
la práctica de la fecundación in vitro, lo anterior, debido a que establecía que se trataba
de una violación al derecho a la vida el cual se encontraba consagrado en distintos
instrumentos nacionales como internacionales, un ejemplo de esto es la Convención
Americana sobre Derechos Humanos que fue el marco legal a través del cual la Corte
Interamericana de Derechos Humanos toma como eje para el análisis y la resolución
del caso. Al promoverse la acción de inconstitucionalidad y dejar sin efecto el decreto
que permitía llevar a cabo tal práctica, nueve parejas presentaron una petición ante la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos a efecto de evidenciar puntos
importantes por los cuales recurrían al tratamiento de la fecundación in vitro y los
derechos convencionales que les habían sido transgredidos ante de la declaración de
inconstitucionalidad; de tal manera que al ser admitida su petición y subsanada a lo
largo de algunos años, se remite el caso a la Corte Interamericana para que decidiera
si era procedente establecer que el Estado había violentado la serie de derechos que
habían hecho valer las presuntas victimas en su petición inicial.

A lo largo del análisis del caso la Corte estableció los alcances y la severidad en la
limitación de los derechos que se habían vulnerado, destacándose entre estos los que
corresponden al derecho a la integridad personal, libertad personal y vida privada y
familiar, de tal manera que tuvo que tomarse como punto de partida el artículo 11 de
la Convención Americana sobre Derechos Humanos que a grandes rasgos establece
que las instituciones estatales de ninguna manera pueden injerir o interferir
arbitrariamente en situaciones que afecten la vida privada y familiar de una persona,
lo anterior, basándonos en la esencia de los derechos antes mencionados que versa
sobre el hecho de que toda persona debe decidir libremente como organizar su vida
individual y social en base a sus propias opiniones y convicciones; por lo que es
evidente que todo ser humano puede disponer con libertad sobre sus derechos
reproductivos y todo lo que implican, pues el derecho a fundar una familia es
considerado un aspecto importante de la vida privada. Es así que la autonomía
reproductiva y el acceso a los servicios de salud en ese ámbito, involucran el derecho
de acceder al avance tecnológico y médico que para tal efecto se ha desarrollado a lo
largo de muchos años y que ha permitido a muchas parejas infértiles poder procrear;
aunado a esto les permite decidir libremente cuantos y en qué momento desean tener
hijos.

Por lo que al dejar sin efecto el decreto que permitía la fecundación in vitro el Estado
restringía el acceso a esta serie de derechos consagrados en la Convención
Americana enfocándose prioritariamente a la protección al derecho a la vida del
embrión, lo que dio lugar a que la Corte se detuviera a realizar una interpretación del
artículo 4.1. de la Convención Americana en relación a la concepción en la maternidad.
Como bien se establece en las disposiciones de la Convención Americana en su
artículo 4.1, que a la letra dice: “Toda persona tiene derecho a que se respete su vida.
Este derecho estará protegido por la ley y, en general, a partir del momento de la
concepción. Nadie puede ser privado de la vida arbitrariamente” (Convención
Americana sobre los Derechos Humanos , 1981); el punto clave en el que cobro énfasis
la resolución por parte de la Corte fue al momento de cuestionar la interpretación que
se había realizado con respecto al término concepción, que si bien, marcó la pauta
para que la Sala Constitucional determinara la violación a un derecho humano, por otro
lado la Corte decidió hacer una determinación del momento en que podía considerarse
se encontraban violentando el derecho a la vida durante el proceso de la fecundación
in vitro.

A partir de esto, surge la interpretación en base a la cual la Corte determino que esta
práctica no estaba atentando contra el derecho a la vida, toda vez, que estableció en
base a la presentación de pruebas científicas por parte de la defensa, que al momento
de ser fecundado un óvulo se encuentra en un estado de desarrollo donde no posee
más que un simple potencial de vida, de modo que si no se implanta en el útero de la
mujer las posibilidades de que pueda sobrevivir son nulas ya que no se estaría
desarrollando bajo las condiciones óptimas a fin de lograr su crecimiento. Por lo que,
aunado a lo anterior, no podía determinarse que el proceso de concepción era
excluyente del cuerpo de una mujer, pues de no implantarse el óvulo al útero no habría
manera de que el embrión sobreviviera, entonces no podía existir una violación a la
disposición establecida en el artículo 4.1. de la Convención Americana, ya que la
defensa del derecho a la vida comienza desde el momento de la concepción que surge
cuando se implanta el óvulo en el útero de una mujer y no cuando en un inicio el óvulo
es fecundado, a raíz de esto, estaríamos hablando de una protección gradual y no
absoluta a este derecho ya que su defensa dependió del desarrollo y la procedencia
de las excepciones de la práctica de la fecundación in vitro.

A partir de los argumentos expuestos por la Corte para definir el alcance de la


protección del derecho a la vida consagrado en el artículo 4.1 de la Convención
Americana se determinó que el Estado había actuado de manera arbitraria al interferir
en la vida privada de estas personas violentando sus derechos reproductivos y a una
vida privada y familiar, agregándole a esto el hecho de que se propicio de manera
indirecta la discriminación respecto a la discapacidad, género y situación económica
de las víctimas; toda vez que la infertilidad es catalogada como una enfermedad
reproductiva que representa una limitación por quienes la padecen para disfrutar
enteramente de un derecho al que aún sin esa condición tienen acceso, por lo que
debieron considerarse protegidas en materia de discapacidad. Ahora bien, surgió un
impacto respecto a los estereotipos y prejuicios de la sociedad en razón de género y
la imposibilidad de que todas las parejas demandantes contaran con los recursos
económicos para que pudieran acceder a estos métodos de reproducción asistida en
el extranjero.

De esta manera, la Corte determino la evidente transgresión a los derechos materia


de juicio por parte de Costa Rica, debiendo el Estado acatar medidas urgentes a fin de
permitir el acceso a sus ciudadanos a los procedimientos de reproducción asistida
como lo es la práctica de la fecundación in vitro, lo cual constituyo un importante
precedente para el Sistema Interamericano ya que creo un impacto interno en la
realidad política y social de Costa Rica. (Benavides Hernández & Carvajal Pérez, 2016)

Conclusiones

La fecundación in vitro sin duda representa la oportunidad de muchas personas para


procrear hijos y es un derecho el acceso a este tipo de procedimientos de reproducción
asistida, en todo momento el Estado debe velar por el respeto a los derechos a la vida
privada y familiar de cada uno de nosotros para que de ese modo no exista una
interferencia arbitraria en asuntos que resultan ajenos y de propia decisión y convicción
del ser humano.

Sin duda, podemos establecer que la resolución por parte de la Corte a este caso tan
controversial es el resultado de extender la interpretación de muchas disposiciones
legales que fueron aplicadas al caso en concreto, de este modo puedo afirmar la
evidente violación a los derechos reproductivos de las parejas demandantes, toda vez
que se preponderó un derecho sobre muchos otros que tendrían una repercusión y un
alcance severo en la esfera jurídica de los involucrados, pues si bien, es importante
destacar que se trata de la protección a un derecho humano tan relevante como es el
derecho a la vida también estamos hablando del derecho al acceso a los medios de
asistencia reproductiva que en última instancia son recurridos por las personas que
padecen de infertilidad para procrear biológicamente, aunado a esto y para evidenciar
que de ninguna manera se estaría atentando contra la vida de una persona, resulta de
suma importancia distinguir el momento en que se origina la fecundación y la
implantación, ya que no podría afirmarse que el embrión fecundado puede llegar a su
óptimo desarrollo de no ser por la implantación en el útero de la mujer, que sería el
momento en que se origina la concepción y por lo tanto, el estatus de persona para el
Estado por lo que antes de eso no podría establecerse una violación al artículo 4.1. de
la Convención Americana de los Derechos Humanos que versa sobre la protección al
derecho a la vida.

Se debe garantizar la protección a la vida privada y familiar de una persona, pues cada
ser humano es responsable de sus decisiones y de la manera en que quiere conducirse
ante la sociedad de acuerdo a sus ideales y creencias, por lo que denegar
desproporcionada e injustificablemente el acceso a técnicas que permiten satisfacer
un derecho es una evidente y arbitraria injerencia por parte del Estado que se convierte
en la vulneración de su derecho; por lo que atendiendo al caso en específico la
reparación hacia la víctimas abarco no solo el hecho de que el Estado tuvo que acatar
medidas que propiciaban el pleno disfrute de los derechos reproductivos y el respeto
a su vida privada y familiar de todos sus ciudadanos y ciudadanas, sino que marco un
precedente importante en relación al respeto de la dignidad de las personas y el
sometimiento a la justicia internacional a fin de evitar que en un futuro se cuestione el
carácter imperativo de las resoluciones emitidas por el más alto tribunal de un Estado.

Bibliografía
Benavides Hernández , V., & Carvajal Pérez, M. (2016). Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de
Investigaciones Jurídicas de la UNAM . Obtenido de Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de
Investigaciones Jurídicas de la UNAM : http://www.juridicas.unam.mx/

Convención Americana sobre los Derechos Humanos . (1981). San José, Costa Rica.

Grupo de Trabajo, Portal de Jurisprudencia Electoral Americana . (28 de Noviembre de 2012).


Obtenido de Grupo de Trabajo, Portal de Jurisprudencia Electoral Americana :
https://www.te.gob.mx/juriselectoral/OEA/content/caso-artavia-murillo-vs-costa-rica

También podría gustarte