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INGENIERIA EN ELECTRÓNICA Y AUTOMATIZACIÓN

Universidad de las Fuerzas Armadas ESPE

ELECTRONICA MEDICA

Nota del autor:


DEPARTAMENTO DE ELÉCTRICA Y ELECTRÓNICA
Ing. Electrónica, ESPE.

Cristian Paul Guilcazo Chasiloa


Darwin Rodrigo Taco Chuquitarco
Katherine Brigette Villarreal Peñafiel

Latacunga - 2022
1. Dilemas en la genética

La genética y su aliada la ingeniería conforman una tecnociencia de enorme poder transformador


del fenómeno de lo viviente en nuestro planeta. La audacia de sus emprendimientos requiere ser
acompañada de riguroso discernimiento bioético.

Con las nuevas posibilidades diagnósticas y terapéuticas en genética, se plantean muchas


controversias sobre cómo deben utilizarse. Por ejemplo, hay preocupaciones acerca de que la
información genética podría utilizarse en forma indebida para discriminar (p. ej., al negar la
cobertura de seguro de salud o empleo) a las personas con factores genéticos de riesgo para
trastornos particulares. Las cuestiones incluyen la privacidad de la información genética de una
persona y el interrogante acerca de si las pruebas debieran ser obligatorias.

Está admitido el cribado prenatal para anomalías genéticas que causan trastornos graves; sin
embargo, existe preocupación porque el cribado también podría utilizarse para seleccionar rasgos
estéticamente deseables (p. ej., aspecto físico, inteligencia).

La clonación es muy controvertida. Estudios en animales sugieren que la clonación es mucho más
probable que los métodos naturales para dar por resultado defectos que son mortales o causan
problemas de salud graves. La creación de un ser humano por clonación es ampliamente visto
como inmoral, es ilegal en la mayoría de las jurisdicciones y es difícil desde el punto de vista
técnico.

La herencia de ciertos trastornos mitocondriales ahora se evita creando un embrión utilizando


material biológico de 3 personas diferentes. Las técnicas se basan en el hecho de que las
mitocondrias derivan por completo de la madre y que las mitocondrias contienen su propio DNA
separado del DNA nuclear.

En transferencia pronuclear, una mujer con una mutación mitocondrial tiene un óvulo que se
fertiliza in vitro con un espermatozoide de su pareja. Un óvulo donante de una mujer con
mitocondrias normales también se fertiliza con espermatozoides del mismo donante. Luego, los
pronúcleos masculino y femenino se eliminan del primer cigoto y se trasplantan en el cigoto
donante después de que se ha eliminado su núcleo. Este embrión fertilizado contiene el DNA
espermático de un macho, el DNA del óvulo de la hembra afectada y las mitocondrias normales (y
su genoma) de una segunda hembra, lo que da como resultado un embrión sin enfermedad
mitocondrial.

La transferencia materna del huso es un procedimiento similar. En este caso, se elimina un


ovocito de la mujer afectada. Cuando el ovocito está en la etapa de metafase II de la división
celular, el complejo huso-cromosoma se elimina y se inserta en un ovocito donante sano del que
ya se ha eliminado el núcleo. Este óvulo se fertiliza con un espermatozoide y se implanta en el
útero del receptor.

2. Dilemas bioéticos en las unidades de cuidados intensivos

Limitación del esfuerzo terapéutico

El término de limitación del esfuerzo terapéutico (LET) es una expresión médica acuñado en
nuestro entorno, no exento de polémica. Existen múltiples definiciones de LET. Suelen coincidir
en referirse a no iniciar o retirar un determinado tratamiento, en el que no se genera beneficios al
paciente, tanto en situaciones en las que éste puede o no puede decidir por sí mismo. Su
justificación se da ante la percepción de desproporción entre los fines y medios terapéuticos. En el
momento actual la LET está plenamente acreditada, siendo muy frecuente en el ámbito de los
cuidados críticos, existiendo posicionamientos de diferentes sociedades científicas que las avalan,
hasta considerarla un estándar de calidad.

Partiendo de esta realidad en la que los pacientes, en su mayoría, no están en condiciones de poder
decidir, las decisiones de LET se pueden tomar a partir de estas tres posibilidades u orientaciones
que recomienda Quintana:

a) declaraciones expresas que hubiera hecho el paciente previamente;

b) lo que decida el allegado más próximo al enfermo, y

c) actuar en función de lo que más favorezca al enfermo, entendiendo que lo que más le favorece
es lo que le proporciona mayor bienestar. Además de lo anterior, cabe tomar en consideración estas
propuestas para la toma de decisiones de LET en los pacientes de medicina intensiva.
- La decisión debe ajustarse al conocimiento actual de la medicina, fundarse en la medicina basada
en la evidencia y "hacer correctamente las cosas que son correctas".

- La decisión debe discutirse colectivamente y tomarse en consenso. La presencia de dudas por


parte de un solo miembro del equipo implicado en la decisión debe hacer que ésta se posponga, o
bien se debe apartar al profesional en la toma de decisiones respetando el derecho de objeción de
conciencia.

- Debe siempre informarse y consultar a los familiares, intentando alcanzar un acuerdo, en lo


posible, directo. En ningún caso debe responsabilizarse a la familia en la toma de decisiones, ya
que eso no sólo es cruel sino además inadmisible desde el punto de vista profesional. La LET en
los sistemas de medicina intensiva porcentualmente es una decisión médica. En menos ocasiones
es autónoma.

- No ingresar a un paciente en una UCI es una forma de LET. Por ello hay que procurar que los
profesionales de los servicios de hospitalización y los médicos de cabecera aconsejan a sus
pacientes, fundamentalmente a los crónicos, la realización de voluntades anticipadas o "testamento
vital".

Una vez tomada la decisión de LET, existe la obligación ética de no abandonar al paciente durante
el proceso de la muerte y garantizar que reciba las necesarias medidas de bienestar, cuidados,
analgesia y sedación, asegurando la ausencia de dolor físico o psíquico.

3. Admisión o no de un paciente en una UCI

En las UCI y los servicios de Emergencias no se presenta el problema relativo a la aceptación de


la internación, ya que se trata de pacientes que por su estado crítico no están en condiciones de
expresar su voluntad. Cuando los cuidados deben reemplazar al tratamiento porque éste resulta
inaplicable dada la irreversibilidad del cuadro, es imprescindible la derivación a una sala de
cuidados paliativos para rodear al paciente de la comodidad necesaria y procurarle el mayor
bienestar posible en la última fase de su vida. Sin embargo, cabe señalar que en nuestro medio no
existen disposiciones legales que regulen este tipo de decisión.

En situaciones límites en que se debe tomar una decisión acerca de internar a un paciente o no,
habría dos tipos de enfermos graves que serían los siguientes:
- Pacientes en estado crítico: con frecuencia ingresan en una UCI o de Emergencias. Son los que
presentan un estado agudo de descompensación y tienen peligro de vida pero con posibilidades de
recuperación.

- Pacientes en estado terminal: son los que el pronóstico indica que morirán en un plazo
relativamente breve. En estos casos no estaría indicada su internación en una UCI o un Servicio
de Urgencias, sino más bien en una Unidad de cuidados paliativos.

En principio se estima que para que se lo admita en una UCI, un paciente debe tener posibilidades
definidas de recuperación, presentar la gravedad suficiente como para que no pueda tratarse en un
servicio menos complejo y, en último lugar, requerir apoyo de sus funciones vitales, además, en
términos específicos asistencia respiratoria mecánica.

Por último, en este aspecto resulta oportuno destacar que muchos dilemas bioéticos tienen su
origen en una indicación inadecuada de internación en una UCI de pacientes terminales. La
aplicación de un soporte puede plantear la necesidad de otro adicional. No poner el segundo o
retirar el primero puede suscitar conflictos personales, institucionales o con los familiares. De allí
la importancia de evaluar si el paciente reúne las condiciones ya establecidas para ingreso en una
UCI.

4. LA PENA DE MUERTE

La pena de muerte, pena capital o ejecución consiste en provocar la muerte a una persona
condenada por parte del Estado, como castigo por cometer un delito establecido en la legislación.

La práctica de la pena de muerte contradice el derecho a la vida y el derecho a no ser sometido a a


torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes. Es cada vez mayor el consenso
acerca de la abolición universal de la pena de muerte.

el dilema de la pena de muerte tendría en favor la disponibilidad de una solución clara y sólida. Si
no tiene efectos, es decir, si no previene crímenes como los que castiga, la posición en contra de
la pena de muerte apuntaría que no tiene sentido aplicarla

¿Funciona la pena de muerte? La respuesta más lógica que existe, al menos en teoría es que sí.

El favor de la pena de muerte se sostiene que ella previene más asesinatos sentando un precedente
público, un estímulo negativo tangible, grave y visible. Un castigo grande para una pena grande.
Quien sea que tiene frente a sí la decisión de matar a otro, sabe que el castigo que puede recibir es
ejemplar. Lo pensará más de una vez antes de hacerlo

Existen personas que están en contra de la pena de muerte. Suelen ellas decir que no tiene sentido
matar a culpables de grandes crímenes porque ese castigo no previene crímenes de igual magnitud.

Afirman en contra de la pena de muerte que no produce un efecto de disuasión. Es decir, no evita
crímenes futuros similares a los que castiga

5. LA MUERTE CEREBRAL Y El TRASPLANTE

Este dilema no es simplemente un problema médico y biológico a pesar de que sí están muy
vinculados, este tema afecta e involucra a toda la sociedad y a pesar de los pasos que ya se han
venido dando, opino que todavía existe la necesidad de una profunda indagación filosófica, ética,
legal y social en aras de llegar a un consenso acerca del mismo.

La vida y la muerte siempre son objeto de valoraciones morales. Cuando se habla de la muerte se
hace de manera atemporal. Es algo que inevitablemente va a ocurrir en un futuro lejano, pero nadie
vive pensando en la proximidad de esa muerte. Desde el punto de vista biológico la muerte es un
proceso durante el cual uno o más órganos vitales van a dejar de funcionar. La muerte encefálica
como sinónimo de muerte del individuo, como el cese irreversible de las funciones integradas de
todo el encéfalo, el concepto de la muerte cerebral como motivo de retirar el respirador en un coma
irreversible, pero no está de acuerdo con continuar con las medidas de soporte después que ya se
diagnosticó, con el objetivo de extraer los órganos.

En la muerte cerebral es la cesación total e irreversible de toda la actividad cerebral, en la llamada


Muerte Encefálica se han perdido todas esas facultades que son intrínsecas de la persona, por tanto,
podemos concluir que la verdadera muerte se produce no cuando el sujeto deja de respirar o cuando
desaparecen los latidos cardiacos, sino cuando el sistema nervioso pierde su condición
indispensable de asiento material de la vida psíquica, social y espiritual del hombre, al llegar a
determinar una muerte cerebral el paciente se lo considera una gran posibilidad de ser donante para
la extracción de sus órganos al realizar este proceso sus cuerpo deja de funcionar en su totalidad y
sus órganos permite ser trasplantado hacia otra persona.
6. EL ESTADO VEGETATIVO

El Estado Vegetativo (EV) es un término el cual corresponde a un diagnóstico clínico que se debe
diferenciar de otras alteraciones del nivel de conciencia (coma, muerte encefálica,
enclaustramiento, mutismo acin-vigilia y carecen de actividad voluntaria. Las causas más
frecuentes de EV son los traumatismos craneoencefálicos, trastornos cerebrovasculares, tumores
cerebrales, encefalitis isquémico-anóxicas, entre otras.

Entre algunas de las características clínicas del EV se pueden mencionar: alternancia de períodos
de vigilia y sueño, mantenimiento espontáneo o ayudado de la respiración y las constantes
cardiocirculatorias, y ausencia de: respuestas motoras precisas y dirigidas, vocalización verbal (son
posibles gruñidos o ruidos primitivos), respuestas a órdenes verbales, persecución ocular
mantenida, incontinencia de ambos esfínteres y otros signos neurológicos habituales (expresión
facial vacía, posturas anormales, espasticidad muscular en las extremidades, mamoneo y chupeteo)

El tiempo de sobrevivencia de un paciente con EV es incierto, un estudio realizado encontró que


el 58% sobrevive más de 3 años, el 34% más de 6 años, y el 22% más de 8 años

Actualmente, ningún método especifico de investigación permite predecir, en un caso concreto


cuál de los pacientes en estado vegetativo se recuperará y cual no podrá lograrlo, Hasta ahora, las
valoraciones de pronóstico de tipo estadístico sobre el estado vegetativo se han obtenido mediante
estudios limitados en cuanto al número de casos y a la duración de la observación. Por ello, se
recomienda renunciar definitivamente a términos equivocados como el estado vegetativo,
limitándose más bien a la indicación de la causa y la duración del estado vegetativo

7. Eutanasia

El término eutanasia por su etimología significa “buena muerte”, lo que no es del todo apropiado,
a pesar de que en determinadas circunstancias la muerte debe aceptarse desde el punto de vista
técnico, social y moral, no es aceptable el deseo o precipitación de la misma, lo que lleva implícito
en primer lugar la voluntad orientada hacia la muerte y en segundo término la acción que la
desencadena.

• Eutanasia pasiva
Su motivo y justificación puede ser evitar molestias, dolor o sufrimiento al paciente, no se ejecuta
ninguna acción ni se aplica ningún procedimiento o medicamento que termine con la vida del
enfermo. En la eutanasia pasiva en pacientes terminales con patología avanzada, la que de acuerdo
con la valoración clínica e índices pronósticos se considera irreversible, se retiran todas las
medidas extraordinarias o desproporcionadas, las que representan un riesgo para el enfermo y le
producen incomodidad, dolor o sufrimiento, las que se consideran futiles al no esperarse ninguna
respuesta favorable, sin embargo se debe continuar con las medidas ordinarias o proporcionadas,
medidas de sostén habituales que actúan como paliativos, alimentación, hidratación movilización,
aseo, fisioterapia, dejando que la enfermedad tenga su evolución natural, aunque muchas veces es
difícil establecer la diferencia entre medidas proporcionadas y desproporcionadas.

• La eutanasia pasiva

Puede ser solicitada por el mismo paciente, o sus familiares, quienes manifiestan el deseo de no
ingresar a la UCI ni ser sometidos a maniobras de resucitación cardiopulmonar, puede ser
expresado por el enfermo antes del inicio de la enfermedad, a lo que se ha denominado “testamento
en vida” en el que se invoca el derecho a la muerte o muerte con dignidad, todo lo anterior continúa
siendo un dilema bioético, se relaciona con la adistanasia a la que ya nos referimos con
anterioridad.

• Eutanasia activa

Comprende todas las medidas encaminadas a terminar con la vida del enfermo, mediante la
aplicación de un procedimiento o medicamento que suprime la función cardio-respiratoria y
encefálica, con la supuesta justificación de suprimir el dolor o sufrimiento del paciente, no es
aceptable desde el punto de vista legal ni ético.22 Existen algunas circunstancias que son motivo
de reflexión para colocar a la eutanasia en su verdadero lugar moral y ético ¿Se puede considerar
a la pena de muerte como una eutanasia social? ¿El aborto por alteraciones congénitas evita una
vida miserable, es una forma de eutanasia? o ambas constituyen un homicidio, a pesar de estar
legalizado en algunos países.21,22 La solicitud por parte del enfermo o sus familiares de la
aplicación de procedimientos o medicamentos letales, en enfermos en fase terminal de
padecimientos crónicos como insuficiencia renal, insuficiencia cardio-respiratoria, cirrosis,
tumores malignos avanzados o el síndrome de inmunodeficiencia adquirido (SIDA), o bien
pacientes con padecimientos agudos portadores de insuficiencia órgano funcional múltiple sin
respuesta a las medidas de terapia intensiva, cada vez es más frecuente, sobre todo en países donde
legalmente es aceptada como Holanda, Australia o Estados de la Unión Americana como Oregon.

La petición y aplicación de la eutanasia activa pretende su justificación basándose en la autonomía


y calidad de vida del enfermo, se relaciona con la libertad del paciente y derecho a morir, sin
embargo, la muerte es parte de la vida que constituye una situación condicionante previa, por lo
que derecho a la vida tienen primacía, por otra parte, la beneficencia debe prevalecer sobre la
autonomía, razón de más si consideramos las condiciones de estos enfermos, su capacidad de
comprensión, juicio y raciocinio, lo que también influye en los familiares.23 La calidad de vida
depende de las molestias que ocasionan los procedimientos diagnósticos o terapéuticos, control
del dolor, cuidados generales, alimentación, aseo y la integración al medio social y familiar, mucho
puede hacerse mediante la administración de analgésicos y sedantes con intervalos y dosis
adecuadas para suprimir el dolor, preservando el estado de conciencia y raciocinio, aún con el
riesgo de acortar la sobrevida, lo que permite al enfermo planear y utilizar sus últimos días para
resolver problemas personales, la psicoterapia y psicofármacos para tratar estados de depresión o
angustia son de mucha utilidad.24 Suicidio asistido

En el que por voluntad del enfermo y de conformidad con sus familiares o persona responsable, el
enfermo generalmente con una enfermedad penosa decide acabar con su vida, para lo cual el
médico o un integrante del equipo de salud le proporciona los medios para lograrlo, pero es el
mismo paciente quien pone en marcha el mecanismo para infundir la solución con el o los
medicamentos letales, un hipnótico, un opiáceo y/o cloruro de potasio. Desde el punto de vista
legal y ético hay poca diferencia con la eutanasia activa, no se acepta legal ni éticamente, en
algunas legislaciones se considera como complicidad en un homicidio, en Holanda, Australia y el
estado de Oregon en los Estados Unidos ya se ha legalizado. El doctor Harold Frederich Shipman
en Inglaterra y el doctor Jack Kevorkian en Estados Unidos durante varios años facilitaron la
muerte de sus pacientes, el primero fue condenado por homicidio al demostrarse que las muertes
producidas por la inyección letal no obedecieron a petición del enfermo, quienes no sufrían dolor
incontrolable ni una enfermedad terminal. El doctor Kevorkian llamado “Angel de la Muerte”
asistió a más de 130 suicidios, gran parte de ellos fueron grabados en video, los que sirvieron como
evidencia para condenarlo en 1999 por homicidio con premeditación, alevosía y ventaja.
Sorprendentemente los familiares de los pacientes muertos lo defendieron y en los juicios
declararon en su favor, invocando la labor humanitaria del doctor Kevorkian al suprimir el dolor
y evitar la vida miserable de los enfermos

8. VACUNAS COVID

Ante los efectos biológicos, económicos, sociales, culturales y políticos de la pandemia por la
enfermedad infecciosa COVID-19, para la cual la mayoría de la población ecuatoriana no ha
desarrollado inmunidad, cuyo tratamiento efectivo todavía se desconoce, y ante el inicio del
proceso de vacunación en el país, la Comisión Nacional de Bioética en Salud:

• Reconoce que la circunstancia es excepcional. La pandemia puede afectar gravemente la


vigencia plena de los Derechos Humanos de la población y del modelo democrático como
resultado de serias amenazas para la vida, salud e integridad personal que supone la
COVID-19; así como por sus impactos de inmediato, mediano y largo plazo sobre la
economía, la estructura y el funcionamiento de la sociedad en general, y sobre las personas
y grupos en situación de especial vulnerabilidad.
• Identifica como principio rector en la gestión de la pandemia y de la inmunización el
respeto a los Derechos Humanos y a la igualdad de condición moral de las personas.
• Reitera que el valor fundacional que debe primar en la asistencia sanitaria comunitaria e
individual es la protección de la salud de las personas, prevenir la enfermedad y evitar la
muerte a destiempo, con medidas eficaces basadas en las mejores evidencias científicas
disponibles.
• Señala que el actuar ético debe ser parte integral de la gestión y manejo del proceso de
inmunización y que, dentro de sus competencias, las autoridades sanitarias y decisores
políticos serán los llamados a tomar resoluciones de alto estrés moral, político y
económico, entre ellas la adquisición, distribución, administración y selección y
priorización de quienes recibirán la vacuna, y otras medidas dirigidas a la mitigación de
los efectos provocados por la COVID 19.
9. Aborto

El debate sobre aborto en el ámbito de la bioética se encuentra empantanado desde hace ya largo
tiempo entre quienes adjudican al cigoto un supuesto derecho absoluto a la vida desde la
concepción hasta la muerte natural, y quienes confieren a la mujer un supuesto derecho absoluto a
decidir sobre su cuerpo. Ambos, lemas efectistas que simplifican una problemática compleja, con
implicaciones graves para la salud individual y social.

En términos de un choque de absolutos, el debate sobre el aborto es un falso debate: apelar a


derechos absolutos resulta improcedente en el ámbito del Derecho, ya que todo derecho encuentra
su límite en el derecho de terceros; ante derechos en conflicto, lo que procede es la ponderación.
Tampoco es válida la tesis de que el derecho a la vida es “el primero y superior” de todos los
derechos humanos. Ningún Derecho Humano tiene ni puede tener preeminencia sobre ningún otro;
por naturaleza son indivisibles, interdependientes, complementarios y no jerarquizables.

La propuesta gradualista liberó al debate sobre aborto del estancamiento en el que se encontraba,
y en la actualidad rige en cada vez más países. El gradualismo parte de la premisa de que el
embarazo no es un acto, sino un proceso, y en consecuencia, atiende a las diversas fases del
desarrollo embrionario.

El conocimiento científico en genética y embriología humanas registran que en la primera fase del
embarazo una proporción “no mayor del 20% de los cigotos producto de la concepción se
desarrolla para dar lugar a un feto que pudiera llegar a ser un nacido vivo. Los cigotos tienen muy
diferentes destinos; entre ellos, generar tejidos amorfos, embarazos anembriónicos, cigotos
caóticos, tumores benignos y malignos, tejido embrionario con deficiencias orgánicas” tan severas
que producen fetos anencefálicos y ausencia de otros órganos. De ahí que ni al óvulo fecundado,
al cigoto, al blastocisto, al pre-embrión, al embrión o al feto se les pueda conferir estatus ni
derechos de la persona con anterioridad al nacimiento.

La neurobiología, por su parte, tras realizar y cotejar numerosos estudios, concluye que “desde el
punto de vista científico, el ser humano, la persona, es resultado del desarrollo ontogénico cuando
éste alcanza la etapa de autonomía fisiológica –viabilidad fuera del útero materno, ya que mientras
tanto depende totalmente del aporte nutricional y hormonal de la mujer– y cuando su sistema
nervioso ha adquirido la estructura y la funcionalidad necesarias para percibir estímulos
sensoriales, experimentar dolor y adquirir conciencia y autonomía, todo lo cual no sucede sino
hasta la fase tercera y última de la gestación.
El gradualismo, pues, se corresponde con el concepto postulado por Potter de una ética basada en
el conocimiento científico de la biología humana. La tesis gradualista reconoce a la mujer –persona
jurídica– el derecho pleno a decidir sobre la interrupción del embarazo durante el primer trimestre.
Al embrión lo reconoce como un bien tutelado jurídicamente –mas no como persona jurídica–
cuya protección incrementa a medida que logra viabilidad extrauterina en el tercer trimestre de la
gestación

CONCLUSIONES

• Se debe fomentar la discusión de los principios bioéticos y la problemática asociada al


ejercicio de la medicina en una UCI.
• La divulgación y discusión de los principios bioéticos facilita la toma de decisiones, porque
se crea una matriz de opinión que se va enriqueciendo con cada caso que se presenta.
• Tomar en consideración el nivel de calidad de vida que se espera pueda tener el paciente,
una vez desconectados los equipos de soporte y su disposición para aceptar su condición
de sobrevivencia.
• Se debe procurar disminuir el grado de incertidumbre en la información asociada a la
evolución de un paciente. Sin embargo, siempre existe la posibilidad de un diagnóstico
erróneo.
• La pena de muerte es uno de los dilemas lo cuales no se puede determinar si puede
solucionar problemas debido a que va en contra de la moral debido a que esta quita la vida
a una persona, pero justificable debido al incremento de la delincuencia provoca asesinatos
de personas inocentes y aquello puede reducir muertes debido a las consecuencias que esta
produciría al aplicar la pena de muerte.
• Al determinar al paciente que ha cesado sus funciones cerebrales se llega a determinar un
coma irreversible el cual nunca volverá a despertar por lo cual solo sus órganos se
encuentra en funcionamiento debido a que se encuentra conectado con máquinas
manteniendo su cuerpo con actividad produciendo el dilema de efectuar una desconexión
debido a que el paciente ya no volverá a recuperar la conciencia por lo cual el medico no
puede efectuar una desconexión si hacer ver al familiar las consecuencias, es difícil tomar
decisiones acerca de la vida de un familiar un ser querido, pero a su vez saber que ya no
hay solución para él.
• El estado vegetativo es un estado de como el cual el cuerpo pierde movilidad de sus
extremidades, el mismo que necesitara de cuidados prolongados debido a que no se acierta
si el paciente reaccione o en que tiempo lo ara para ello no se puede tomar decisiones
acordes que permita terminar con su sufrimiento o que recupere o despierte del como
profundo al cual a llegado o teniendo la posibilidad de que llegara a ser un paciente con
muerte cerebral, por lo cual el medico conoce las consecuencias que lleva el tratamiento
que necesita sabiendo que existe la leve posibilidad de reacción algo contradictorio para
efectuar una decisión acorde y siguiendo los principios éticos médicos
• Eutanasia en este caso se puede considerar este proceso cuando es descion propia en el
caso de una enfermedad que cause mucho dolor la propia persona pide para no sufrir, pero
por otro lado la familia de esta persona no estaría de acuerdo ya que ellos desiarian que la
persona siga viviendo pero ellos no entienden el dolor sufre aquella persona con su
enfermedad.
• La pandemia de la covid-19 ha tenido impactos inconmensurables en la economía, la
educación y la socialización, además de la pérdida de millones de vidas. Por lo tanto, se ha
acelerado el desarrollo de un número sin precedentes de candidatos a vacunas contra la
covid-19 para controlar la pandemia. A su vez, la autorización para su uso de emergencia
por parte de la Organización Mundial de la Salud permitió el inicio de la inmunización de
la población a través de vacunas que aún se encuentran en ensayos clínicos. Aquí
presentamos una perspectiva de los preceptos bioéticos de autonomía, no maleficencia,
beneficencia y justicia en el contexto del uso de emergencia de vacunas contra la covid-19.
Además, se enfatiza la importancia de la vigilancia en todas las etapas del desarrollo de la
vacuna con el fin de detectar efectos adversos y asegurar el cumplimiento de los preceptos
bioéticos.
• Vacunas en el caso de vacunas existen personas que están de acuerdo a seguir las reglas y
vacunarse, pero por otro lado hay personas no están de acuerdo ya que estas vacunas no
tuvieron el proceso adecuado de preparación y existen expedientes en los cuales estas
vacunas hacen mal a muchas personas y cual no están de acuerdo.
• Aborto en el caso del aborto existen mujeres desean realizar eso esto en caso de violaciones
y no desean tener un bebe producto de una violación, las personas las cuales no entienden
estos casos casos de vilacion están en contra del aborto.
BIBLIOGRAFIA

• Búsqueda, ☞., Médica De México, G., & Number, N. (s/f). Otras secciones de este sitio.
Ignaciodarnaude.com. Recuperado el 28 de octubre de 2022, de
http://www.ignaciodarnaude.com/masalla_experienciaspostmortem/Samperio,Bioetica%
20y%20muerte.pdf
• Zonenzsain Laiter, Y. (2021). Las vacunas contra el Covid-19: dos dilemas éticos a
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