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Carlo

Maderno
POR BRIAN
ULISES TREJO
FLORES.

Instituto Tecnológico de Tepic.


Análisis Crítico del Arte y la Arquitectura II.
Arq. Hector Daniel Mejía Morales.
11 de Enero de 2021.
Durante el tardío Manierismo, muchos arquitectos de aquel tiempo
se estancaron en el ideal urbanístico de la fecha, dejando de lado
la idea de concebir y diseñar nuevas soluciones a las problemáticas
de ese entonces convirtiéndose en diseños monótonos al igual que
homogéneos. Mas con el tiempo destaca un nombre, el nombre de
Carlo Maderno, arquitecto el cual trajo grandes soluciones a
proyectos existentes al igual que nuevas ideas las cuales sentaron
base para el arte Barroco.

Nacido en el año de 1556, en el pueblo Capodelago, Suiza, se


formó en una familia de canteros, pues ahí aprendió este arte en el
cual su familia era muy diestra. Mientras que fue pasando el tiempo,
él junto con 4 de sus hermanos se trasladan a la ciudad de Roma
para realizar trabajos y así ayudarle a su tío, el reconocido
Arquitecto Domenico Fontana, en el frente de las obras de la
basílica de San Pedro.

Poco fue el tiempo en que Carlo necesitó para demostrar sus


grandes habilidades y su nato talento en las obras de San Pedro,
que en el año de 1597 recibió su primer encargo personal para
construir la fachada de la iglesia de Santa Susana, en la cual
demostró todo su talento dando como resultado una obra, en donde
se destaca la presencia de grandes claroscuros y contornos
sobresalientes al igual que muy detallados, dando esto como
resultado una atención hacia al centro de la fachada pero que al
mismo tiempo se apreciaban aquellos contornos de esta.

Al terminar esta obra, fue casi inevitable que su nombre se diera a


conocer aún más de entre aquellos arquitectos manieristas de la
época, pues esta obra fue una base para establecer poco a poco el
arte Barroco.

Esto llamó la atención del Papa Pablo V, quien después lo


nombraría Jefe de Arquitectura pues ganaría el concurso para la
terminación de la basílica de San Pedro. Esto fue un gran reto para
Carlo, quien, al verse atraído por esto, se introduciría en un gran

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debate al modificar los planos del gran Miguel Ángel al hacer un
cambio en la aquella Planta Griega, pues así se incrementaría el
espacio para los fieles, por medio de una Planta de Cruz Latina
ubicada longitudinalmente.

Las complicaciones vendrían después, ya que, al hacer esta


modificación, el propósito de hacer la planta visible desde la plaza
de San Pedro se impediría debido a la monumental fachada que
presentaría la Basílica, pues esto hizo que hubiese varias críticas
amargas respecto a esto, pero también fue un movimiento muy bien
planteado debido a que así no se modificarían los planos de Miguel
Ángel y se concebiría una solución urbanística en conjunto con la
plaza de San Pedro, en donde finalmente la basílica sería terminada
en 1612.

Durante su dedicación a las obras del vaticano, dejo muchos


proyectos incompletos los cuales gracias a otros arquitectos fueron
terminados, de entre ellos destaca la iglesia de Sant’Andrea della
Valle, pues la principal característica y atractivo de esta es una
magnifica y monumental cúpula la cual es la segunda mas grande,
siguiendo de la basílica de San Pedro. Otras sobras son el palacio
Mattei y el proyecto del palacio Barberini, el cual esta residencia se
vería construida en una sola planta con la característica forma de
una H.

Finalmente, en el 30 de enero de 1629, en la ciudad de Roma,


fallece Carlo Maderno. Si bien algunos autores destacan
individualmente varias de sus obras como la obra maestra, es difícil
escoger para mi cual de todas estas es la más representativa de
Carlos Maderno, pues todas y cada una de ellas representan
aspectos muy claros como la volumetría, el dinamismo, y las
innovaciones en su composición, las cuales sirvieron como base
para la próxima generación de arquitectos en la siguiente corriente,
el arte Barroco.

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