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McLuhan y la Escuela de Comunicación de Toronto

1. En busca de las leyes de los medios

Englobada y denominada como Escuela de Comunicación de Toronto: Relación intelectual,


geográfica y temporal entre Eric Alfred Havelock, Harold Adams Innis y Marshall McLuhan.

Pero se debe tener en claro que ellos no fundaron a una escuela de pensamiento, las escuelas
son desarrolladas después por sus seguidores, tanto en el programa McLuhan en Cultura y
Tecnología de la Universidad de Toronto, como en el ya desaparecido programa de posgrado
Ecología de los Medios de la Universidad de Nueva York, creado por Neil Postman y en la
Media Ecology Association principalmente.

En dichas instancias se estudia el legado de los tres autores fundacionales.

En momentos diferentes de su historia personal, cada uno reconoció en el trabajo del otro al
menos tres aspectos fundamentales.

Primer aspecto: la ecuación oralidad-escritura: el papel de la escritura, por lo tanto el alfabeto


como una primera tecnología que permitió el surgimiento de un pensamiento crítico, analítico-
filosófico

Segundo aspecto: el método diacrónico comparativo en la historia, esto implica identificar


momentos de transición tecnológica que marcan una crisis en la comunicación humana, desde
la Antigüedad hasta la Edad Contemporanea, para establecer relación entre ellos.

Tercer aspecto: la naturaleza de las tecnologías de la comunicación y su relación con el sentido


social del tiempo y el espacio. Fundamental para comprender el tipo de pensamiento y
sociedad a la que pertenecen ciertas tecnologías.

Estudiando este fenómeno es posible observar la compleja trama de relaciones que se


establecen entre el ser humano y sus tecnologías de la comunicación en la medida de que éste
crea hábitos de acción y de apropiación.

Objetivo del capítulo: estudiar los cambios que se dieron en la manera de ver el mundo a
partir de las crisis en tres periodistas de transición tecnológica. Estas crisis de transición
implicaron una transformación paulatina de las culturas y sus entornos materiales.

Havelock

Aborda la cuestión del problema de la oralidad desde varios puntos de vista: histórico,
lingüístico, filosófico y contemporáneo.

La invención del alfabeto griego permitió el desarrollo de la filosofía y el pensamiento analítico,


resulta importante señalar que el alfabeto se convirtió en el mecanismo por el cual fue posible
desarrollar la infraestructura mental para acumular conocimiento basado en la
comunicación.

Innis

Hace una lectura de la historia de la economía de las civilizaciones occidentales desde la


perspectiva de la comunicación y los medios de transporte. De esta lectura surge al menos un
tema importante: la relación entre el espacio y el tiempo con los medios de comunicación.
¿Por qué leerlo? Porque él es el primer teórico que incorporó la noción de tiempo y espacio en
el estudio de los medios de comunicación. Además, utilizó esas dos dimensiones para señalar
la manera de en que surgen monopolios del conocimiento en diferentes épocas.

Aquellos grupos que controlan cierta tecnología importante o cierta práctica ejercen control
sobre la cultura y el cambio cultural

McLuhan

Importancia que las nociones de espacio y tiempo adquieren en su obra a la luz de las
tecnologías eléctricas y la nueva realidad computacional

Walter Ong en su libro Orality and Literacy menciona que la elaboración de las diferencias
entre oralidad y escritura nació apenas en la era eléctrica, no antes, esto significa que la era
eléctrica nos permite situarnos en la oralidad secundaria mediada por los teléfonos, la radio, la
televisión y más, pero sigue dependiendo de la escritura y la impresión para su existencia.

McLuhan argumentaba que la tecnología eléctrica, tan esencialmente acústica, reintroducía


una forma de comunicación y tal vez de experiencia no lineal y más rica.

Havelock afirmaba con cierta ironía que, a pesar de su estilo popular, los estudios de McLuhan
habían contribuido al estudio de la oralidad y la literalidad en dos aspectos fundamentales:

1. Demostraba con ejemplo el hecho de que las cambiantes tecnologías de la


comunicación ejercen un grado considerable de control sobre el contenido de lo
comunicado: el medio es el mensaje
2. Una literatura oral había de ser cualitativamente diferente de una literatura o
escrita.
Detrás de la conciencia lineal de la modernidad, derivada de la linealidad tipográfica,
se podía distinguir una conciencia oral que sigue unas reglas propias y distintas del
pensar y sentir; una conciencia que existió en el pasado histórico, pero que la
tecnología moderna hacía revivir en el presente histórico.

Una característica de la Escuela de Comunicación será el método comparativo en la historia,


esta forma de extrapolarla a momentos de transición tecnológica

A McLuhan le impresionó el método que usaba Innis, debido a que él no estudiaba el


contenido de estructuras, por ejemplo, los tipos de libros en viejos bibliotecas o la naturaleza
de los filósofos o religiones, sino más bien la existencia de bibliotecas o la predominación de la
creencia religiosa.

Lo más trascendente de todo es que McLuhan aceptó la principal tesis inniana que dice que
la cultura, la sociedad y la civilización cambian aparejadas con los cambios en los medios de
comunicación En su trabajo hay

Babe nos dice que cabe suponer que el aforismo McLuhaniano y eje básico de su teoría “el
medio es el mensaje” fue formulado mientras leía la introducción al libro de Innis Empire and
Communications. Este hecho es importante a tratar con detenimiento, debido a que McLuhan
invirtió la explicación de Innis sobre la naturaleza de la interacción entre medios y sociedad.
Este aspecto es esencial para poner en la justa medida la influencia del economista sobre el
crítico literario.

Innis menciona en su tesis central que hay un sesgo en los mensajes comunicativos y este
sesgo es hacia el tiempo o hacia el espacio. En su trabajo hay muestras de la sustitución dell
ojo por el oído en la medida que los medios de comunicación cambian, causando una
transformación en la percepción.

2. El pensamiento pragmatista en comunicación: página 119

El campo de los estudios en comunicación en América del Norte nació durante las primeras
décadas del siglo XX con los escritos de John Dewey, Charles Horton Cooley y Robert Ezra Park.
Los tres reconocidos como la Escuela de Chicago, fueron académicos humanistas que
concebían a la sociedad como un organismo en evolución.

Estos humanistas norteamericanos veían a los medios como los lazos que vinculan, o al menos
que deberían unir, a los diferentes actores sociales. Se les puede llamar humanistas mas que
científicos sociales debido a su sesgo hacia el razonamiento analógico; por ejemplo: a concebir
la sociedad como organismo. Además, pertenecían a la tradición idealista y pluralista de
pensamiento, ya que preferían especular acerca de las posibilidades de unos nuevos medios
de comunicación que enriquecieran la vida individual y comunal.

A la Escuela de Chicago la animaba la posibilidad de que la naciente industria de la


comunicación pudiera educar al público y ayudar a la creación de una gran comunidad.

Concebían a los medios como una fuera de cohesión, proveedora de conocimiento y


facilitadora del diálogo

Dewy: la sociedad no existe únicamente gracias a la transmisión o por la comunicación, sino


que existe en la transmisión, en la comunicación, debido a que las personas viven en
comunidad en la medida en que tienen cosas en común y es la comunicación la manera en que
llegan a tenerlas, además permite que se de la retroalimentación, necesaria para establecer
conexiones.

Las comunidades no están constituidas por individuos que simplemente transmiten mensajes
entre sí, sino que son definidas por el tipo de relaciones, por el patrón de relaciones que
establecen entre ellos, es decir que los medios de comunicación contienen a las comunidades
y a los individuos que las constituyen, siendo al mismo tiempo la causa y el remedio de la
perdida de la comunidad social y de la democracia política.

La mayor falla de la Escuela de Chicago fue su negativa a abordar la realidad social y económica
de los conflictos del presente. Mientras que por un lado recnococieron el potencial político de
las tecnologías de la comunicación como medios para la transformación industrial de la
sociedad en esa gran comunidad, por el otro ignoraron la distribución del poder, que Innis
denominó los monopolios del conocimiento.

Durante la década de 1930 surgió en los Estados Unidos la escuela de investigación en


comunicación conocida como Communication Research, con un sesgo marcadamente
estadístico y experimental, que fue la base de la mercadotecnia moderna. Ahora los objetivos
tenían que ver con la medición de la audiencia y la opinión, el comportamiento en el consumo
de bienes materiales, la recepción de la propaganda y la publicidad.
Los exponentes más visibles de esta escuela fueron Paul Lazarsfeld, Harold Laswell y más
adelnte Wilbur Schramm

La escuela de Chicago y Toronto comparten el carácter empírico resultado de la herencia del


pragmatismo estadounidense.

La de Chicago sentó las bases filosóficas para el desarrollo del empirismo.

La idea central del pragmatismo es que el conocimiento tiene valor siempre y cuando pueda
ser aplicado, puesto en práctica, es decir que para conocer el significado de un concepto
abstracto que tengamos en mente habrá que observar las repercusiones prácticas que de este
concepto podamos imaginar en el mundo.

3. La Escuela de Comunicación de Toronto y la sociedad en red

Nuestras sociedades se están estructurando rápidamente en función de una relación bipolar


entre la tecnología de la comunicación (la red de redes, vale decir Internet) y el sujeto, y las
consecuencias de esta nueva relación están transformando vertiginosamente la economía, la
sociedad y la cultura como nunca antes lo había experimentado la humanidad.

El proceso lento de alfabetización fue dejando a un lado a las imágenes y al sonido priorizando
el papel de la palabra escrita sobre ellas. Pero en el siglo XX, con el surgimiento de la
televisión, la radio y el teléfono, volvieron a poner en su lugar a la comunicación tribal y
afectiva

Actualmente, la integración de varios modos de comunicación en una red de comunicación


interactiva, nos deja ver que estamos ante una revolución tecnológica de dimensiones
históricas.

La integración de los modos de comunicación oral, visual, auditiva y escrita permiten la


interacción entre los dos lados del cerebro, las máquinas y los contextos de uso de las
tecnologías en una plataforma tecnológica que funciona como un metalenguaje supertexto.

La compresión del espacio y el tiempo que los nuevos medios de comunicación crean tiene un
impacto en todas las concepciones abstractas que los sujetos hacen de u mundo y marcan,
además, la sincronía de los ritmos para la producción de bienes y servicios.

A partir de la década de 1980 que los medios electrónicos se fueron especializando hacia el
gusto personal del usuario y el mercado se fue segmentando: la aparición del walkman y la
televisión por cable aun sobre la plataforma analógica, abrieron el camino para la
diversificación de una oferta mediática que en los años noventa se dispararía gracias al soporte
de la plataforma digital.

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