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“Las condiciones y los derechos humanos dentro de los

establecimientos penitenciarios en Chile”

Alumna: Amanda Sofía Castillo Ponce


Profesor: Sebastián Retamal J.
Derecho Penal I 2022.1 – Universidad Academia de Humanismo Cristiano

En el siguiente ensayo, se expondrá acerca de las deficiencias del sistema


penal y las condiciones carcelarias en Chile, junto con su vínculo con el
derecho penal y el deber que tiene el Estado para mejorar las condiciones de
los establecimientos penitenciarios y la preocupación por los derechos y
condiciones de vida en que se encuentran los reclusos.

Un estudio del instituto nacional de derechos humanos (INDH) sobre las


condiciones carcelarias en Chile realizado en los años 2014-2015, visibiliza las
paupérrimas condiciones en las que los reclusos/as de diversos
establecimientos penitenciarios del país se encuentran en cuanto a temas de
calidad de vida, salud, alimentación, derechos, etc.

Durante los últimos años, la delincuencia ha afectado gravemente al país, lo


que produce que el Estado deba actuar mediante el uso de diversas
herramientas de control social, con el fin de evitar o disminuir este problema,
una de esas herramientas es el derecho penal, el cual actúa de ultima ratio, es
decir, cuando las herramientas menos severas del Estado no funcionan. Por lo
tanto, a través del derecho penal, se imponen diversas penas las cuales van
desde las menos graves como lo es el servicio a la comunidad o multas, hasta
la pena más grave, la cual es la pena privativa de libertad. Si bien la pena

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privativa de libertad es algo que el derecho penal debe evitar a través de la
imposición de otras penas, lamentablemente es la más utilizada, lo que ha
producido un aumento explosivo en la cantidad de reclusos y reclusas en los
establecimientos penitenciarios de todo el país, provocando así, problemas
como el hacinamiento, problemas de salud, falta de alimentos, violencia y riñas
entre los reclusos, etc.

Al hablar de hacinamiento y sobrepoblación, el INDH reveló que hay


establecimientos penitenciarios que superan su capacidad por más del doble,
al separar entre los establecimientos femeninos y masculinos, en el caso de las
cárceles masculinas, la cárcel de Limache lidera en el ranking de
sobrepoblación, contando con un 259,1% de ocupación, mientras que en el
caso de los establecimientos femeninos, el que lidera es el Centro de
Cumplimiento Penitenciario de Chañaral, contando con un 390% de
sobreocupación. Sin contar que estas cifras son de hace unos años atrás,
lamentablemente la situación ha empeorado, por lo que actualmente, estas
cifras deben haber aumentado considerablemente.

Dicha sobrepoblación provoca que los internos tengan menos espacio y deban
compartir camas, no puedan acceder a asistencia médica de calidad y que
incluso no tengan suficiente comida para todos, lo que como se menciona
anteriormente, provoca segmentación dentro de los establecimientos,
causando conflictos y riñas entre reclusos, este hecho es gran grave que una
gran cantidad de reclusos que fallecen dentro de las penitenciarías, lo hacen
por homicidio o suicidio. En cuanto a estas cifras, se registró que éstas son
más frecuentes en la población masculina, registrándose 52 en 2014 y 18 en
2015.

En cuanto al respeto a los derechos humanos dentro de los establecimientos


penitenciarios, estos derechos se encuentran regulados en la constitución
política de la república de chile, específicamente en su artículo 19, donde se
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regulan derechos tales como el respeto a la vida integra de todas las personas
y la igualdad ante la ley, protegiendo así también, los derechos de los privados
de libertad, quienes se encuentran en una posición de vulnerabilidad dentro de
la sociedad. Ante esto, la Gendarmería de Chile, se ve obligada a crear normas
especiales que deben ser respetadas por todos los funcionarios, con el fin de
proteger y velar por los derechos de los internos, sin embargo, muchas de
estas normas no son respetadas, puesto que los reclusos no cuentan con
derechos básicos dentro de los establecimientos penitenciarios, tales como la
salud y la alimentación, y muchos de ellos son violentados en cuanto a sus
derechos, donde han sido expuestos a maltratos y torturas por parte de los
gendarmes. Pero ante este hecho realmente no se hace nada, ya que no hay
ningún organismo que se preocupe realmente de que estos derechos y normas
sean respetados, además de preocuparse por las condiciones en que se
encuentran los reclusos.

Ahora bien, respecto a lo expuesto a lo largo de este ensayo, es posible decir


que el Estado chileno debería preocuparse realmente por la grave situación
que actualmente afecta a los establecimientos penitenciarios de todo el país, ya
sea cumpliendo con sus deberes correctamente, como el hecho de cumplir con
las visitas mensuales que deben realizar los jueces a las penitenciarías,
preocupándose de que los derechos de los reclusos sean respetados,
utilizando otras penas menos graves, antes de recurrir a la privativa de libertad,
ya que el hecho de que esta sea una pena de ultima ratio, debería respetarse,
puesto que en realidad esta pena no es una solución, ya que los reclusos se
ven afectados mentalmente por el ambiente en que se encuentran dentro de
las cárceles; o preocupándose realmente por lograr una correcta reinserción en
la sociedad para los reclusos que terminen sus penas, aportándoles
herramientas para que no deban volver a reincidir y puedan hacer una vida
normal.

Bibliografía:
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Instituto Nacional de Derechos Humanos. (2018). ESTUDIO DE LAS
CONDICIONES CARCELARIAS EN CHILE. Diagnóstico del cumplimiento de
los estándares internacionales de Derechos Humanos sobre el Derecho a la
integridad personal. WEB:
https://bibliotecadigital.indh.cl/bitstream/handle/123456789/1180/estudio-
general-2016-2017.pdf?sequence=3&isAllowed=y

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