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MARITZA MARTINEZ

MATRICULA 20-SPSS-7-029

PROFESORA: THELMA EUNISE DE LEON ZAPATA

ASIGNATURA: PSICOPATOLOGIA

OBJETIVOS GENERALES

Analizar los conceptos básicos de la Psicología Anormal.

La psicología anormal es la encargada de estudiar todos los trastornos que impiden que
una persona lleve a cabo su vida con normalidad.

La psicología anormal se centra en el estudio y tratamiento de aquellos trastornos


mentales y emocionales que interfieren con la capacidad de una persona para sentirse a
sí misma y llevar a cabo las funciones de la vida diaria.

La psicología de la anormalidad es una de las ramas de más interés en la psicología, y


una de las que más discusiones generan pues se debate si esta debería existir en primer
lugar.

Describir los diferentes métodos de evaluación de la conducta anormal

Existen dos modalidades principales para evaluar comportamientos anormales en


personas, la primera evaluación biológica y la segunda evaluación psicológica. En la
biológica se realizan exámenes tales como el TAC o la resonancia magnética en la
estructura cerebral con el fin de hallar alguna anomalía.

OBJETIVOS ESPECIFICOS

Describir la Psicología y la Conducta Anormal.

El enfoque del comportamiento de la psicología anormal se centra en las conductas


observables. Los conductistas creen que nuestras acciones están condicionadas en gran
medida por la experiencia en lugar de por la patología subyacente de las fuerzas
inconscientes. Por lo tanto, se considera que la anormalidad es el desarrollo de patrones
de comportamiento des adaptativos (es decir, perjudiciales) para el individuo.

La psicología anormal es una rama de la Psicología que estudia patrones inusuales de


comportamiento, emociones y pensamiento, que pueden o no estar asociados al
empeoramiento de enfermedades mentales de mayor importancia.

Reconocer y  diagnosticar multiaxial las diferentes enfermedades mentales, según las


metodologías internacionalmente aceptadas.
Este sistema divide el diagnóstico en cinco grandes áreas o ejes. Esto permite una
evaluación más exhaustiva del paciente, una mejor organización de la información
clínica y una comunicación más eficiente de la misma.

Se enumeran aquí tanto los trastornos mentales (esquizofrenia, trastorno bipolar, etc.)
como los cuadros no atribuibles a un trastorno mental pero que requieren atención o
tratamiento (por ejemplo, problemas conyugales.

Se consignan estos trastornos, que comienzan en la niñez o adolescencia. Puede haber


coexistencia de diagnósticos en los Ejes I y II.

Percepción de la conducta anormal: La psiquiatría como ciencia... hecho


psicológico que lo hacen diferente al de su generación anterior,

Durante esta época, la conducta extraña de las personas con un trastorno


mental era vista como obra del demonio o de brujas. Así, se concluía que cualquier
problema o catástrofe ocurrida en el pueblo, sucedía como consecuencia de estas
personas. Los trastornos mentales eran producto de los pecados, las fuerzas divinas y los
espíritus malignos. El tratamiento se aplicaba mediante exorcismos y torturas. Había
gente poseída, y se trataba de entrar en el mundo oculto del paciente a través de
conjuros y oraciones.

Presentar  un análisis comparativo de los enfoques teóricos más influyentes sobre


los temas de la sicopatología.

Siglo XXI: sorprende que subsista la psicopatología en el auge de los psicofármacos. La


psiquiatría se convierte en una disciplina puramente medica en la que el diagnostico
psicológico es reemplazado por el diagnostico de trastornos con sistemas que
prescinden de consideraciones teóricas. Antes la psiquiatría era un pilar para la
psicopatología, como fuente y campo de aplicación, pero esa relación está
disminuyendo. Surge el DSM: un supuesto ateorismo y consenso democrático construye
un mero nomenclador, provisorio y mutante. Se promueve una medicalización de la
vida cotidiana que afrenta a la psicopatología de la vida cotidiana, ya que atenta contra
el escuchar lo que del padecimiento se escucha en un discurso, contra la contingencia de
un encuentro singular.

Las tres principales orientaciones teóricas que cubren de manera más completa el
panorama de la psicopatología científica actual: perspectiva biomédica, conductual y
cognitiva. La perspectiva biológica, también llamada biomédica o médica, fisiológica o
neurofisiológica. Trastorno mental.

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