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La esquizofrenia es una grave enfermedad mental que afecta la forma de pensar, sentir y comportarse. Los síntomas incluyen alucinaciones, delirios y problemas de pensamiento. Aunque no existe cura, el tratamiento puede controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. La esquizofrenia se diagnostica generalmente entre los 16 y 30 años y se cree que factores genéticos y ambientales contribuyen a su desarrollo.
La esquizofrenia es una grave enfermedad mental que afecta la forma de pensar, sentir y comportarse. Los síntomas incluyen alucinaciones, delirios y problemas de pensamiento. Aunque no existe cura, el tratamiento puede controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. La esquizofrenia se diagnostica generalmente entre los 16 y 30 años y se cree que factores genéticos y ambientales contribuyen a su desarrollo.
La esquizofrenia es una grave enfermedad mental que afecta la forma de pensar, sentir y comportarse. Los síntomas incluyen alucinaciones, delirios y problemas de pensamiento. Aunque no existe cura, el tratamiento puede controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida. La esquizofrenia se diagnostica generalmente entre los 16 y 30 años y se cree que factores genéticos y ambientales contribuyen a su desarrollo.
Facultad de Humanidades Licenciatura en Psicología Clínica y Consejería Social Psicofarmacología II
Esquizofrenia
Ileana María Zea García (000101459)
Guatemala, septiembre 2022
Esquizofrenia
Ileana María Zea García (000101459)
Lic. José Rafael Minera Baldizón (catedrático)
Guatemala, septiembre 2022
Esquizofrenia La esquizofrenia es una enfermedad mental grave que afecta la manera en que una persona piensa, siente y se comporta. Quienes padecen de esta enfermedad mental parecieran haber perdido contacto con la realidad y esto puede ser angustioso tanto para ellos como para sus familiares y amigos. Los síntomas de la esquizofrenia pueden dificultar el desarrollo de actividades cotidianas o habituales, sin embargo, existen tratamientos eficaces para que quienes lo reciben, pueden retomar sus actividades en la escuela, trabajo, y lograr su independencia disfrutando de las relaciones interpersonales. Los síntomas de la esquizofrenia es importante reconocerlos para que quienes sean diagnosticadas con esta enfermedad reciban el tratamiento adecuado. Las personas que sufren el primer episodio de psicosis generalmente son entre las edades de 16 y 30 años. Se recomienda tomar el tratamiento después de la primera psicosis ya que esto será un paso muy importante hacia la recuperación. Existen estudios que indican que los cambios en el estado de ánimo, en el pensamiento y el funcionamiento social suelen aparecer antes del primer episodio. La esquizofrenia no es frecuente que se observe en niños pequeños. Los síntomas son diferentes en todas las personas, pero se clasifican en tres categorías principales: psicóticos, negativos y cognitivos. Los síntomas psicóticos incluyen cambios en la forma en que una persona piensa, actúa y percibe el mundo. Quienes padecen esta clase de síntomas pueden perder el sentido compartido de la realidad con los demás y percibir el mundo de manera distorsionada. En algunas personas este tipo de síntomas aparecen y desaparecen, mientras que en otras los síntomas se estabilizan con el tiempo. Los síntomas psicóticos incluyen: • Alucinaciones: es cuando la persona ve, oye, saborea o siente cosas. Quienes oyen voces pueden haber escuchado desde hace mucho tiempo antes que sus amigos o familia se den cuenta que tiene un problema. • Delirios: Es cuando una persona tiene creencias fuertes que no son ciertas y pueden parecer irracionales para los demás. • Trastorno del pensamiento: Cuando una persona tiene formas de pensar inusuales o ilógicas. Estas personas pueden presentar dificultad para organizar sus ideas y el habla. A veces dejan de hablar en medio de un pensamiento, pasa de un tema a otro o inventa palabras sin sentido. • Trastornos del movimiento: Cuando la persona presenta movimientos corporales anormales y puede repetirlos una y otra vez. Síntomas negativos: estos síntomas incluyen la pérdida de motivación, de interés o disfrute de las actividades diarias, así como el alejamiento de la vida social, dificultad para mostrar emociones y problemas para funcionar normalmente. Dentro de estos síntomas se puede mencionar: • Tener problemas para planificar y ceñirse a las actividades, como ir de compras • Sentir dificultad de prever y sentir placer en la vida diaria • Hablar con voz apagada y mostrar limitada expresión facial • Evitan la interacción social • Tener poca energía y dedicar tiempo a actividades pasivas. En casos extremos las personas dejan de moverse por largo tiempo y a esto se le llama catatonia. Es común confundir estos síntomas con los de la depresión. Los síntomas cognitivos: incluyen problemas de concentración, atención y memoria. Estos síntomas pueden dificultar el seguimiento de una conversación, aprender cosas nuevas o recordar citas. ¿Que causa la esquizofrenia? Entre los factores que contribuyen al riesgo que una persona presente esquizofrenia están: • Genética, la esquizofrenia puede ser hereditaria. Aunque es bueno aclarar que la esquizofrenia no es causada por un gen específico. • Ambiente, estudios sugieren que una combinación de factores genéticos, aspectos del entorno y las experiencias de vida de una persona pueden desempeñar una función en el desarrollo de esta enfermedad. Entre los factores ambientales se pueden incluir vivir en la pobreza, exponerse a situaciones estresantes y peligrosos, así como el riesgo de contraer algún virus o problemas nutricionales antes del nacimiento. • Estructura y función del cerebro, hay estudios que muestran que es probable que las personas que tienen esta enfermedad su cerebro tengan diferencias en tamaño en ciertas áreas y algunas de estas diferencias pueden desarrollarse antes de su nacimiento. Aun se realizan estudios para comprender mejor como la estructura del cerebro está relacionada con esta enfermedad.
Aunque la esquizofrenia es conocida
como el tipo más común y mejor conocido como una enfermedad psicótica, no es sinónimo de psicosis. En estadísticas recientes se ha observado que esta enfermedad afecta al 1% de la población, solo en Estados Unidos se producen anualmente más de 300,000 episodios esquizofrénicos agudos. Entre un 25% a 50% de los pacientes esquizofrénicos intentan suicidarse y un 10% de ellos acaban por conseguirlo. Solamente en Estados Unidos más del 20% de subsidios de la seguridad social se emplean para el cuidado de pacientes esquizofrénicos, los costes directos e indirectos ascienden a decenas de millardos de dólares al año. Las características de la esquizofrenia son de gran variabilidad tanto en tipo de síntomas como en su intensidad y el conocimiento esperanzador, pero aún limitado sobre el origen de la enfermedad, no han logrado encontrar una cura de la esquizofrenia en la mayoría de los casos. Sin embargo, es posible reducir muchos de sus síntomas, prevenir recaídas y mejorar su pronóstico siguiendo los tratamientos psiquiátricos aceptados por expertos. Resumiendo lo anterior, se debe establecer un diagnóstico preciso, controlar los síntomas psiquiátricos del paciente lo mas pronto posible, establecer un tratamiento integral que incluya tanto medicación como procedimientos terapéuticos, una buena relación entre el paciente y su especialista y si es posible formar un equipo multidisciplinar para lograr mejores resultados. Todo esto ayudara a una mejor adaptación psicológica y social del paciente, enseñar a identificar los síntomas precoces de posibles recaídas y qué medidas tomar al respecto. La familia del paciente debe participar del tratamiento para que este funcione y disminuir así la tensión. En relación a la medicación existen hoy en día fármacos eficaces llamados antipsicóticos porque mejoran la sintomatología psicótica, es decir, los delirios y las alucinaciones. Conclusiones La esquizofrenia es una enfermedad mental grave y compleja, aunque la ciencia ha avanzado en estudios al respecto, aún no se concluye con un tratamiento que procure la curación de la misma. Queda claro que aunque es una enfermedad genética, no se debe generalizar que al tener un familiar diagnosticado con esta enfermedad, todos los demás miembros de la familia tienen riesgo de padecerlo, esto es por que no se le atribuye la enfermedad a un cromosoma en especial. En general la enfermedad de esquizofrenia se diagnostica en personas entre las edades de 18 a 30 años, no es común observarlo en niños, aunque existen algunas excepciones. Llama la atención que los episodios psicóticos aparecen mucho antes que sea diagnosticada el paciente y suelen confundirse con ansiedad o depresión. Esta enfermedad no afecta únicamente al paciente, afecta a todo su entorno, ya que la familia sufre de tensión y mucha preocupación al no tener en sus manos la cura a los síntomas que sufre el paciente. De allí la importancia que sea diagnosticado lo más pronto posible y que tenga acceso al tratamiento psiquiátrico adecuado para que los síntomas sean controlados y disminuir las crisis. En Guatemala es lamentable el precario estado del sistema de salud mental, no existe acceso a tratamientos preventivos, mucho menos a una atención adecuada para este tipo de trastornos, por lo que se hace urgente que las autoridades soliciten apoyo a entidades internacionales para crear un frente de profesionales y centros de atención a todo tipo de enfermedades que afectan la salud mental de la población. Referencias Stahl, S. (2003). Psicofarmacología esencial de antipsicóticos y estabilizadores del estado de ánimo. eLibro.net https://elibro.net/es/ereader/upana/48282
Ortuño, F. (2008). Esquizofrenia. eLibro.net https://elibro.net/es/ereader/upana/47019
National Institute of Mental Health (2021). La Esquizofrenia. NIMH » La esquizofrenia (nih.gov)