Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
net/publication/274215325
CITATIONS READS
0 28,168
1 author:
Antonio R. Tabares
Consejería de Salud y Familias. Junta de Andalucía
69 PUBLICATIONS 187 CITATIONS
SEE PROFILE
Some of the authors of this publication are also working on these related projects:
Health Technology Assessment and Modeling electronic health record View project
All content following this page was uploaded by Antonio R. Tabares on 30 March 2015.
rÍtica
©
tos, de las utopías, de los relatos de sentido; con los demás; la atadura de ganar dinero, la
aparición de fenómenos nuevos, como el alco- atadura de mantener el estatus, la del éxito… 3
holismo juvenil y la difusión del consumo de El optimismo es el más próximo familiar de la
drogas; “farandulización” de la política; co- esperanza. Por debajo de estos mares de que-
rrupción pública abierta y evidente, exhibida a brantos y amarguras, hay quienes creen con
veces como trofeo; televisión-basura con altos firmeza que también corren ríos de agua clara
índices de audiencia y entronizamiento de las y transparente, por debajo del individualismo,
modelos y actrices como ideales a emular; des- el desasosiego y la agresividad hay quien con-
dibujamiento de las normas sociales bajo la fía en la tenacidad del bien, la generosidad, la
presión del placer y el beneficio inmediatos, solidaridad y la ternura. ©
Directora
Manuela Aguilera de mes a mes
aguilera@revista-critica.com
06 NIEVES SAN MARTÍN
Maquetación
Virginia Fernández Aguinaco
virginia@revista-critica.com actualidad
Gloria Bustos Conferencia Misionera Mundial. En el Centenario de la
gloria@revista-critica.com Primera Conferencia del Consejo Mundial de las
Iglesias. Edimburgo 2010
Colaboran en este número 08 CARMEN FERNÁNDEZ AGUINACO
David Felipe Arranz, Ana Azkargorta
Prat, Victoria del Barrio, Esther Calvete,
Antonio Cano Vindel, Mayte Criado, monográfico
Esperanza Dongil Collado, Enrique G.
Fernández-Abascal, Carmen Fernández ANÁLISIS
Aguinaco, Cecilia García, Ana
García–Mina Freire, Esther González, Ansiedad, estrés, emociones negativas y salud
Itziar Iruarrizaga, Luis Mª Iturbide
Luquin, Javier López, María Dolores 12 DR. ANTONIO CANO VINDEL
López Bravo, María Dolores Martín Díaz, ¿Qué hacer con el estrés?
Mª Jesús Mozaz Garde, Margarita
Olmedo, Maite Ordóñez María, Sandra
17 SANDRA PÉREZ RODRÍGUEZ
EN PRIMERA PERSONA
Y de mí, ¿quién
ha cuidado? Crónica de una experiencia de “cuidadora”,
más o menos estresada
90 VIRGINIA FERNÁNDEZ AGUINACO
DECÁLOGO
Viajar bien para recobrarse
93 JOAQUÍN SUAREZ BAUTISTA
cultura
LITERATURA
Miguel Delibes, periodista y “El norte de Castilla”: Libertad de
información frente a censura
96 DAVID FELIPE ARRANZ
TEATRO
CINE
Mujeres de El Cairo
Toy Story 3
104 CECILIA GARCÍA
TV
Apatía
106 VIRGINIA FERNÁNDEZ
DEPORTE
ARTE
Entrevista con Antonio Damián Gallego, documentalista y
autor de una fotografía antropológica
109 FRANCISCO VICENT GALDÓN
IMPUNE VIOLENCIA
CONTRA LAS MUJERES
EN CONGO
©
6
B rasileños, italianos y españoles son los usuarios del
mundo que más tiempo pasan conectados a las
redes sociales y a los blogs, un fenómeno en auge al que
ya se han unido tres cuartas partes de los navegantes del
atrás, con un 77% de usuarios conectados a este tipo de
páginas, sólo por detrás de los italianos, con un 78%.
En España, Facebook captó a un 57% de los usuarios, por
detrás de Reino Unido y el mismo porcentaje que
planeta. Así lo muestran los nuevos datos de abril ofreci- Francia.
dos por la medidora de audiencias Nielsen, que reflejan En cuanto a los sitios de Internet más populares, Google
un incremento del 24% de visitas a las redes sociales se mantiene en la cima, con un 82% de visitantes, donde
durante el último año. el usuario pasó de media una hora y 21 minutos en
Por primera vez, los internautas dedican a las redes abril.©
TRES MILLONES
DE REFUGIADAS “SILVIO BERLUSCONI QUIERE
AFECTADAS POR AMORDAZAR A LA PRENSA”
CRISIS DE LARGA
DURACIÓN
us libros sobre el primer ministro de Italia, Silvio
as mujeres refugiadas son espe- S Berlusconi, han dado disgustos a il Cavaliere. El
L cialmente vulnerables a los abusos
de los derechos humanos en casos en
escritor y periodista Marco Travaglio (Turín, 1964)
publica en España el libro Papi, El escándalo
los que han sido obligadas a dejar sus Berlusconi –del que es coautor– sobre la agitada vida
casas durante periodos largos. Caritas personal de Berlusconi y sus fiestas con prostitutas
Internacional afirma que la comuni- de lujo.
dad internacional puede hacer mu- A la pregunta de cómo afectará a las investigaciones
cho más por protegerlas de la violen- judiciales la llamada “ley mordaza”, Travaglio respon-
cia. Tres millones de mujeres están de:“Limitará drásticamente la capacidad de la magis-
afectadas por crisis de larga duración. tratura para investigar a través de escuchas telefóni-
Hay diez millones de refugiados en el cas, e impedirá así descubrir a culpables de delitos.
Eso interesa a políticos del Gobierno de centrodere-
cha implicados en corrupción, falsedad de balances,
fraude fiscal, estafa o relaciones con la mafia, pero
protegerá también a autores de otros delitos, como
robo, violación, narcotráfico…
¿Y a nivel periodístico? “Berlusconi quiere amordazar a la prensa. Estará prohi-
bido publicar noticias sobre actas de investigaciones judiciales en curso; sólo
podrá hacerse acabada la audiencia preliminar, es decir, años después. El perio-
dista que lo haga antes puede recibir dos meses de cárcel por artículo, y el edi-
tor afronta multas de hasta 450.000 euros por artículo. Esta ley no se refiere a
asuntos bajo secreto de sumario, cuya publicación ya está prohibida, sino a
mundo. Unos dos tercios están atra-
actas que ya no son secretas, las conocen indagados, abogados… Berlusconi
pados por crisis de cinco o más años.
quiere protegerse a sí mismo y a los suyos”. ©
Las mujeres son el 49% de la pobla-
ción refugiada, lo que significa que
unos tres millones están afectadas
por crisis de larga duración.
Huyen de conflictos en lugares como
Colombia, Sudán, Irak y Afganistán. A La crisis abarrota las urgencias psiquiátricas
menudo viven en lugares inseguros
tales como campos improvisados sin
protección. a crisis económica ha llenado las urgencias psiquiátricas de personas
“Las mujeres pueden ser víctimas de
violencia en estos campos –dijo
L que acuden a ellas por intentos de suicidio, ansiedad y abuso de alco-
hol y drogas, según el primer estudio realizado sobre la influencia de
Martina Liebsch directora de Política esta coyuntura en el Hospital La Paz de Madrid entre unos seis mil
de Caritas Internacional--. Son más pacientes atendidos desde junio de 2007 hasta diciembre desde 2009 en
vulnerables a los ataques dado que las urgencias psiquiátricas.
frecuentemente tienen que dejar los El psiquiatra Luis Caballero presentó este análisis en el VII Seminario
campos para buscar suministros bási- Lundbeck sobre ansiedad y depresión, en Ibiza.
cos para sus familias, tales como leña Caballero informó que, en plena crisis, se registró un incremento de casi
y agua”. el 50% de enfermos con respecto a los dos años anteriores, si bien mati-
Cáritas afirma que la experiencia en zó que podría haber aumentado también el número de personas atendi-
campos de refugiados en Benin
muestra que dar liderazgo a las muje-
res mejora su seguridad. Les da una
palabra en el modo de gestionar los
das en ese periodo por cuestiones administrativas. Las visitas a urgen-
cias por intentos suicidas ascendieron un 22%; un 14% por ansiedad y
un 6% por abusar del alcohol y las drogas.
En el periodo de marzo a junio, coincidiendo con el periodo de inicio de
©
7
campos y tener voz eleva su perfil. los problemas económicos, se registraron entre los atendidos “más refe-
Las actividades de construcción de la rencias al desempleo, al impago de deudas y a la pérdida de estatus
paz entre las refugiadas y la comuni- social”. Se estima que en España seis millones de personas sufren depre-
dad que acoge puede también redu- sión, entre un 10 y 15% de la población, aunque la mitad de ellas está
cir las tensiones.© sin diagnosticar; la ansiedad afecta hasta a un 9%.©
Acto de apertura
©
8
está, por supuesto, solucionada, pero al
menos existe el diálogo y la aceptación
pasado. Para empezar, estaban presentes
muchos grupos que no habían sido invitados
en 1910: pentecostales, evangélicos, católi-
cos, ortodoxos, pueblos del “Sur global”,
por parte de todos de ese sentido de mujeres y jóvenes.
misión como parte de la esencia de la Pero no sólo en la composición de los gru-
iglesia. pos participantes fue Edimburgo 2010 una
©
10 pos a los países de acogida todavía no se ha
explorado lo suficiente en la mayoría de los
países, si exceptuamos a Estados Unidos,
que ha tenido una trayectoria mucho más
larga en este sentido que el resto de los pa-
íses occidentales. Las teologías de frontera, El Arzobispo, Primado de la Iglesia Anglicana, John Sentam, en su
las teologías de transición, así como las con- intervención en el acto de clausura.
Opinión Itziar Iruarrizaga. Profesora Titular del Dpto. de Psicología Básica (Procesos
Cognitivos) Universidad Complutense de Madrid. Vicepresidenta de la Sociedad
Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés – SEAS
Esperanza Dongil Collado. Profesora de la Universidad Católica de Valencia.
Coordinadora de la Comisión de Estrés Postraumático y Malos Tratos de la Sociedad
Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés. Miembro del Grupo de
Investigación “Cognición, Emoción y Salud” de la Universidad Complutense de
Madrid
Esther Calvete. Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento
Psicológico. Universidad de Deusto
María Prieto Ursúa. Facultad de Ciencias Humanas y Sociales. Departamento de
Psicología, Universidad P. Comillas
Luis Mª Iturbide Luquin. Doctor en Psicología. Profesor Agregado de la Universidad
del País Vasco (UPV/EHU)
Mayte Criado. Formadora- Profesora de Yoga. Directora-Fundadora de la Escuela
©
11
Ansiedad, estrés,
emociones
negativas y
salud
Dr. Antonio Cano Vindel
análisis
Catedrático de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid
Presidente de la sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y
el Estrés (SEAS)
©
12 Las emociones son reacciones que se de-
sencadenan en tres niveles diferentes: la ex-
periencia emocional, los cambios corporales
y la conducta. Dichas reacciones se vivencian
ción emocional puede reflejarse también en
expresiones faciales típicas, fácilmente iden-
tificables por cualquier observador externo
(expresiones de alegría, tristeza, miedo, en-
como una fuerte conmoción del estado de fado, etc.), así como en otras conductas mo-
ánimo (estado afectivo), suelen tener un mar- toras también observables, como algunos
cado acento placentero o desagradable y van movimientos, posturas, cambios de voz, etc.
Salud
Los cambios fisiológicos emocionales se
consideran respuestas adaptativas del indivi-
duo a las demandas de la situación. Una alta
activación fisiológica, producida por situa-
ciones que generan ansiedad, en principio no
es patológica, pero si su intensidad es excesi-
va y crónica (se mantiene en el tiempo) pue-
de afectar a la salud.
La tensión muscular es mayor cuando ne-
©
13
©
14 Entre los desórdenes físicos que cursan con
niveles altos de ansiedad encontramos algu-
nos trastornos cardiovasculares, como la hi-
pertensión o las arritmias funcionales, algu-
na presenta este tipo de reacciones de manera
marcada tiende a desarrollar distintos desór-
denes mentales o físicos, que están bien defi-
nidos en las clasificaciones nosológicas. Entre
nos digestivos (gastritis, síndrome de colon los desórdenes mentales, cabe mencionar los
irritable, etc.), dermatológicos, respiratorios, trastornos de ansiedad (crisis de ansiedad, o
musculares (v.g. contracturas), dolor (v.g. do- ataques de pánico, agorafobia, trastorno de
benzodiazepinas, se vuelve adictivo y el pro- de estrés incluye una serie de reacciones emo-
blema de ansiedad no se cura. Especialmente cionales negativas (desagradables), de las cuá-
si no hay información. Pero el médico de les las más importantes son: la ansiedad, la ira
atención primaria no dispone de tiempo para y la depresión.
darla. Este proceso de estrés supone una reac-
ción compleja a nivel biológico, psicológico y
El estrés social. La mayor parte de los cambios bioló-
El estrés es un proceso general de adapta- gicos que se producen en el organismo cuan-
ción a las situaciones que vivimos, en el cuál do está sometido a una reacción de estrés no
tenemos que responder a las demandas del son perceptibles para el ser humano y se pre-
ambiente con unos recursos biológicos, psi- cisan procedimientos diagnósticos para de-
cológicos y conductuales, que a veces resul- terminar el nivel de la reacción. Sin embargo,
tan escasos. Por ejemplo, tenemos que ir a a nivel psicológico muchos síntomas produ-
trabajar, a una determinada hora, salvando cidos por el estrés pueden ser fácilmente iden-
atascos de tráfico. tificados. La reacción más frecuente cuando
La interpretación que hacemos de las de- nos encontramos sometidos a una reacción de
mandas es subjetiva, de manera que dos indi- estrés es la ansiedad. Pero además de estas
viduos pueden entender la misma situación de reacciones emocionales podemos identificar
manera diferente. Cuando la demanda del am- claramente otros síntomas producidos por el
biente (laboral, social, etc.) es excesiva frente estrés, como son el agotamiento físico, la fal-
a los recursos de afrontamiento que se poseen, ta de rendimiento, etc. Finalmente, si el estrés
se van a desarrollar una serie de reacciones es muy intenso y se prolonga en el tiempo,
adaptativas, de movilización de recursos, que puede llegar a producir enfermedades físicas
implican activación fisiológica. Esta reacción y mentales.
Búsqueda de ayuda
En la página de Internet de la Sociedad
Española para el Estudio de la Ansiedad y el
Estrés (www.ucm.es/info/seas) hay un peque-
ño test que permite evaluar el nivel de ansie-
dad. Si sospecha mucha ansiedad, o estar vi-
viendo una etapa muy estresante, puede au-
toevaluarse y comprobar si debe tomar algún
tipo de medida: en primer lugar, aprender
más sobre sus emociones, sobre ansiedad y
estrés. Ello ayudará a estar un poco más tran-
quilos. En esta Web hay información y un ser-
vicio gratuito de asesoramiento psicológico
especializado para ayudar a afrontar mejor
estos problemas emocionales. ©
©
16
REFERENCIAS
Cano-Vindel, A. (2002). La ansiedad. Claves para
vencerla. Málaga: Arguval.
A lo largo de la his-
toria, han existido
numerosas concep-
ciones y definiciones del es-
trés. En psicología, el térmi-
fisiológica se mantienen pa-
ra afrontar las demandas de
la situación (fase de mante-
nimiento) y en una tercera
fase de agotamiento, el nivel
la interacción entre una si-
tuación provocadora de es-
trés y de los recursos o estra-
tegias que el individuo pone
en marcha para hacer frente
no fue importando por el fi- de activación fisiológica dis- a dicha situación. Según La-
siólogo Hans Selye, quien minuye de forma brusca, ya zarus y Folkman –autores
entendió el estrés como una que de otro modo nuestro pioneros en el estudio del es-
serie de reacciones fisioló- organismo llegaría al colap- trés desde esta perspectiva– el
gicas manifestada por el in- so. Por ello, tras vivir mo- estrés surgirá tras una serie
dividuo. Según Selye, cuan- mentos de gran tensión o es- de valoraciones de la situa-
do una situación o estímulo trés –como sucede cuando ción a la que nos enfrenta-
nos produce estrés, nuestras somos atacados en la calle e mos y de los recursos dispo-
pupilas se dilatan para me-
jorar la visión, el oído se
agudiza, nuestros músculos
se tensan, preparados para
iniciamos una conducta de
huida o tras realizar un exa-
men– después nos sentimos
agotados. Estas tres fases
nibles para hacer frente a di-
cha situación. Cuando la per-
sona considera que una si-
tuación es peligrosa o ame-
©
17
actuar, y la frecuencia car- conforman lo que Selye de- nazante, como en una situa-
diaca y respiratoria aumen- nominó Síndrome General ción de sobrecarga de traba-
ta, entre otros cambios fi- de Adaptación. jo (“tengo que acabar un in-
©
18 va en sí. Por ello, una misma
situación puede ser vivida
como estresante por una per-
sona –el que cree que será
sación de malestar físico y
mental. Entonces, ¿estrés es
sinónimo de ansiedad? Aun-
que ambos términos se han
dades que antes les satisfací-
an, tengan problemas para
dormir, pierdan el apetito, se
fatiguen fácilmente, se sien-
despedido– pero no por utilizado indistintamente en tan culpables, les cueste con-
otra –aquel que no conside- determinados contextos, sin centrarse y, en ocasiones, in-
ra relevante el cumplimiento embargo no hacen referencia cluso tengan pensamientos y
©
20 La técnica de la reestructuración cognitiva ayuda
a combatir las creencias negativas acerca de
nuestra eficacia personal y nos ayuda a ser más
vos innecesarios o inalcan-
zables. Para ello es muy im-
portante aprender a ser
asertivos y decir no sin sen-
positivos, interpretando la realidad de forma más tirnos culpables. En muchas
optimista. Otras técnicas son las de relajación y ocasiones, como hemos co-
las de gestión del tiempo. mentado anteriormente, no
Estrés positivo y
afecto positivo Enrique G. Fernández-Abascal
y María Dolores Martín Díaz
análisis
©
22 positivos o apetitivos, como negativos o
evitativos. Aunque en el uso coloquial del
término estrés sólo hacemos referencia a
los aspectos negativos, el propio Selye
(1974) ya diferenció los dos tipos de es-
trés: el distrés o estrés negativo y el eustrés
o estrés positivo.
activan emociones negativas. Y por último para enfrentarse de una manera diferente a
puede darse una situación valorada como des- tales situaciones. Es decir, la mayor parte de
afío, es decir una situación que supone un re- las personas eran resistentes y/o resilientes an-
to o una lucha en la que piensa que saldrá ven- te acontecimientos altamente traumáticos que
cedor (como hemos visto, se estima que se po- rompían el curso de sus vidas.
drá ejercer control sobre la misma), lo que Aunque existen diferentes líneas de con-
producirá emociones de tono hedónico positi- ceptualización de la resistencia al estrés, glo-
vo. balmente hacen referencia a una tendencia a
Por último, Lazarus y Folkman (1986) percibir los potenciales eventos traumáticos
nos hablan del afrontamiento al estrés, que se en términos menos amenazadores, a no sufrir
refiere al conjunto de esfuerzos cognitivos y sus consecuencias negativas y a recuperarse
conductuales constantemente cambiantes que por sus propios recursos personales. Por su
se desarrollan para manejar las demandas es- parte, la resiliencia se refiere a la capacidad
pecíficas externas y/o internas que son eva- para seguir proyectándose en el futuro, a pe-
luadas como excedentes o desbordantes de sar de esos acontecimientos desestabilizado-
los recursos del individuo. Cuando la perso- res, de condiciones de vida difíciles o de su-
na se encuentra bajo los efectos del afecto po- frir graves traumas. Es decir, más allá de re-
sitivo el tipo de afrontamiento que prima es sistir al estrés se pasa a no verse afectado por
el activo, que además de ser el más ejecutivo el mismo, a responden positivamente, a
en la resolución de las condiciones desenca- afrontarlo, a superar las demandas y a ser ca-
denantes, proporciona regulación emocional. paz de continuar con su vida.
Es decir, que el estrés positivo ayuda a la re- En estos dos fenómenos las emociones
solución efectiva de los problemas además de positivas juegan el importante papel de con-
eliminar las alteraciones emocionales que las tribuir a la disminución de la angustia y la
condiciones puedan haber causado. Y es que aflicción que siguen a la vivencia de las expe-
el enfrentamiento a situaciones de reto e in- riencias traumáticas. Estudios como el de Co-
cluso de amenaza, aumenta nuestra autoesti- an, Schaefer y Davidson (2006) han puesto
ma generando importantes dosis de afecto de manifiesto como el simple hecho de coger
positivo. de la mano a un ser querido ante una situa-
ción estresante reduce considerablemente la
Disminuir la angustia y la aflicción respuesta fisiológica al estrés. Y como esta re-
Otra importante interacción entre el es- ducción es mayor si la persona con la que se
trés y las emociones positivas ha surgido de afronta esta situación posee mayor vínculo
la investigación más reciente, en la que se ha emocional con nosotros (por ejemplo un ser
dado un cambio en el foco de atención a las querido o la pareja).
diferencias individuales frente al estrés. Así, Dentro de esta línea de estudio de rela-
se ha pasado del estudio de la vulnerabilidad ción entre emociones positivas y el estrés, ca-
o déficits que hacen a la persona sufrir más be destacar el modelo propuesto por Press-
severamente las consecuencias del estrés, a in- man y Cohen (2005), que se conoce como de
teresarse por el fenómeno contrario, es decir, amortiguación del estrés por la influencia del
de cómo algunas personas resisten ante el es- afecto positivo. En él se muestra como el
trés e incluso cómo algunos salen fortalecidos afecto positivo juega un importante papel en
ante esas mismas situaciones. varios puntos de la secuencia del proceso de
Cuando una persona se ve sometida a estrés. En primer lugar, las personas con alto
©
24 cambios drásticos y traumáticos en su vida se
pronosticaba el desarrollo de un trastorno de
estrés postraumático (DSM IVtr, 2002). Sin
embargo, el estudio de los grandes atentados
afecto positivo experimentan menos estrés en
su medio ambiente, por ejemplo es menos
probable que se impliquen en conflictos so-
ciales. Además los recursos sociales que están
terroristas de esta década han puesto de ma- asociados con el afecto positivo ayudan a re-
nifiesto que la mayor parte de las personas ducir el daño potencial, y refuerzan la per-
con una afectividad positiva, tenían recursos cepción de habilidad y control para poder
A la búsqueda de la felicidad
Pero esta línea de estudio no se ha que-
dado en los conceptos de resistencia y resi- REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
liencia frente al estrés, sino que ha ido más Coan, J. A., Schaefer, H. S. y Davidson, R. J. (2006). Lending a
allá generando un nuevo concepto como el de hand: Social regulation of the neural response to threat. Psy-
crecimiento postraumático. Se trata de una chological Science, 17(12), 1032-1039.
noción totalmente contraria al de estrés pos- DSM IVtr (2002). Manual diagnóstico y estadístico de los tras-
tornos mentales IV, texto revisado. Barcelona: Masson.
traumático, es decir, que los cambios que se
©
Lazarus, R.S. y Folkman, S. (1986). Estrés y procesos cognitivos.
producen en la persona son positivos y se ex- Barcelona: Martínez Roca. 25
perimentan como resultado del proceso de lu- Pressman, S. D. y Cohen, S. (2005). Does positive affect influ-
cha que se emprende a partir de la vivencia ence health? Psychological Bulletin, 131(6), 925-971.
de un suceso altamente traumático. Estos Selye, H. (1974). Stress Without Distress. Philadelphia: JB Lip-
pincott.
cambios se concretan fundamentalmente en
Selye, H. (1978). The stress of life. New York: McGraw-Hill.
tres campos: se producen cambios en la pro-
pia persona que se siente más fuerte, más rea-
El estrés: la tensión
en la vida
Cuando empleamos un Ana García–Mina Freire
término para describir análisis
“todo” lo que nos pasa, éste
acaba perdiendo su
capacidad explicativa y razón
de ser. Sin embargo, como
me gustaría transmitir en
este artículo, el estrés, es
una vivencia psíquica de gran
H ans Selye2, fue el primer investigador que en
el campo de la biomedicina empleó el con-
cepto de estrés. Hasta entonces, este térmi-
no se aplicaba en ingeniería para diseñar una estrategia
que permitiera a las estructuras soportar cargas3. Medio
valor para la persona. No es siglo después, el estrés está en boca de todos. Se ha con-
una realidad desconectada vertido en una de las señas de identidad de nuestro tiem-
de nosotros mismos, ni po, y en esa palabra mágica capaz de explicar todos
necesariamente es una nuestros males. Que tenemos insomnio: estrés; que no
experiencia perjudicial para acabamos de curarnos ese catarro: estrés; que discutimos
por cualquier cosa: estrés; que no nos entendemos con la
nuestra salud, aunque pueda pareja: estrés, que comemos más de la cuenta: estrés; que
llegar a serlo. Selye, lo no tenemos paciencia con los hijos: estrés; que rendimos
definía como “el precio del menos: estrés; que las cosas no van bien en el trabajo: es-
desgaste de la vida”1. trés; que estamos inaguantables: estrés; que lo que hace-
©
26
contramos ante situaciones que calificamos por hechos externos, sino por la idea que se
como estresantes y aparece lo que llamamos hace de ellos”. En el caso del estrés, esta afir-
la respuesta de estrés. Así, ésta se define co- mación cobra una relevancia especial. ¿Por
qué sinó ante un mismo acontecimiento hay que nos enfrentemos, sea por ejemplo, una
personas que se estresan y otras no? El estrés enfermedad, la muerte de familiar, el paro
es una vivencia subjetiva, aparece en nuestras tras una regularización laboral... al no estar
vidas cuando una situación nos desborda, o tanto en nuestras manos resolver el proble-
consideramos que va a atentar contra nuestra ma, hace más difícil el desarrollo de este ti-
integridad o bienestar personal; o sentimos po de estrategia, siendo muy útil entonces
que va a interferir en la consecución de una centrarnos en resignificar las emociones que
meta, de unos objetivos, o valores vitales. No las acompañan5.
es tanto la situación en sí la que genera estrés, Ahora, no siempre adoptamos un estilo
sino nuestra valoración, el significado que le de afrontamiento proactivo, también pode-
damos. mos aguantar pasivamente la situación so-
Este proceso de evaluación cognitiva portándola sin hacer nada. En función de qué
consta de tres fases, la primera, llamada eva- conducta de afrontamiento desarrollemos im-
luación primaria, a menudo no solemos per- plicaremos diferentes recursos y se activaran
catarnos de ella y es básicamente afectiva. determinadas estructuras fisiológicas. Final-
En ésta, hacemos una primera valoración de mente, el que acabemos o no por enfermar
la situación en términos de si es irrelevante, dependerá de varios factores. Por una parte,
beneficiosa o amenazante para nuestra per- cuanto más intensa, frecuente, o prolongada
sona. Si tiene lugar las dos primeras no se sea la vivencia de estrés más probabilidad ha-
inicia la respuesta de estrés, pero si la perci- brá de que algún órgano implicado o que to-
bimos como dañina, peligrosa, o desafiante do el organismo acabe teniendo problemas.
entonces se inicia una sobre activación del Así mismo aumentará la probabilidad de que
organismo, proporcionándonos una mayor desarrollemos un tipo de trastornos en fun-
capacidad para discriminar y recoger la in- ción de la predisposición psicobiológica y
formación necesaria para resolver la situa- nuestro estado de salud previa al estrés6.
ción. En esta primera evaluación, nos cen-
traremos en las demandas, ya que en la si- Situaciones potencialmente
guiente fase, nos detendremos en analizar estresantes
tanto las estrategias que se requieren para Si bien, muchas situaciones de estrés son
hacer frente a éstas, como aquellas que uno generadas por la percepción y valoración que
mismo dispone. Esta fase, llamada evalua- hacemos de ellas, ésta no es la única fuente
ción secundaria, también será muy relevan- que puede originarnos esta vivencia. Por una
te, ya que el estrés será mayor o menor en parte, se ha constatado cómo hay una serie
función de la valoración de las capacidades de características que convierten a una situa-
y recursos personales. Por último, la tercera ción en potencialmente estresante, y por otra,
fase, está dedicada a seleccionar la respues- hay otros aspectos relacionados con nuestro
ta, a decidir qué estrategia tomar. De mane- estilo de vida que hace que mucho del estrés
ra general podemos distinguir dos estilos de que vivimos sea autogenerado.
afrontamiento, uno supone adoptar una pos- Si bien, no todo cambio necesariamente
tura proactiva, bien haciendo frente a lo que lleva consigo estrés, en muchos casos cuando
ocurre, o prefiriéndolo evitar. En esta prime- éste está lleno de incertidumbre, de situacio-
ra postura, dependiendo de las fases ante- nes ambiguas, de dificultad para predecir qué
riores y de la situación que nos encontremos, y cuándo van a pasar las cosas; o cuando no
fundamentalmente podemos distinguir dos disponemos de suficiente información, o por
©
28 tipos de estrategias: aquellas que están cen-
tradas en la resolución o modificación del
problema y aquellas que intentan reducir o
amortiguar las emociones que la vivencia de
el contrario ésta es excesiva o caótica, muy
probablemente acabaremos sintiéndonos es-
tresados. Otro aspecto que también se ha ob-
servado que puede inducir esta experiencia es
estrés genera. Estos dos tipos de respuesta a la severidad e intensidad de lo que estamos
menudo se hacen de manera combinada, pe- viviendo así como su duración o frecuencia.
ro a veces dependiendo del acontecimiento al Enfermedades crónicas, la muerte de un ser
El sentido de su presencia
El estrés es como un semáforo, un alta-
voz, una petición. Nos conecta con lo que vi-
vimos, con cómo lo vivimos y con el signifi-
cado y valor que damos a nuestra existencia.
Nos alerta de aquellas situaciones que perci-
bimos como amenazantes, peligrosas o exce-
sivas para nuestras posibilidades. Nos ofrece
una información de nuestro sentimiento de
auto-eficacia y de en qué medida nos senti-
mos competentes para vivir. Y a menudo, es
una señal que nos avisa de que, entre tanta
vorágine, nos estamos olvidando de nosotros
mismos y que necesitamos recobrar el equili-
brio, y no sólo el fisiológico. En muchos ca-
querido, no tener trabajo… son situaciones sos, lo que el estrés nos reclama es que revi-
potencialmente estresantes. Pero, no sólo he- semos nuestro estilo de vida, nuestras priori-
mos de considerar que el estrés surge de si- dades y valores para que en diálogo con uno,
tuaciones excepcionales que no suelen ser con una misma, recuperemos nuestro sosiego
muy frecuentes en la vida, o ante situaciones interior. ©
de tensión crónica sostenida, junto con estos
acontecimientos no hemos de perder de vista
que gran parte del estrés lo vamos a ir sin-
tiendo ante situaciones cotidianas, que por su
familiaridad y menor intensidad pero mayor
frecuencia y a veces duración acaban siendo
más nocivas. Los atascos, ruidos continua-
dos, cambios bruscos de temperatura, abusar Notas
del café, té u otras bebidas excitantes, las dis- 1.Hans SELYE, pp.14.
cusiones permanentes para ayudar a crecer a 2.Hans SELYE, The stress of life, McGraw-Hill, New York,
los hijos, las malas caras del compañero de 1956 (Traducida al castellano, 1960).
trabajo, el pago de las facturas, llegar a re-
solver todo lo que tienes pendiente en tu es-
critorio, intentar responder a dos demandas
en sí mismas incompatibles… Estas situacio-
3.Richard S. LAZARUS, Estrés y Emoción. Manejo e impli-
caciones en nuestra salud, Desclée De Brouwer, Bilbao,
2000.
4.Diccionario de la Real Academia Española, 1992, p.649.
5.Ana GARCIA-MINA, Anatomía del estrés. Revista Sal
©
29
Estrés laboral:
breve revisión teórica
y algunas pautas de intervención
Margarita Olmedo
análisis
©
30 laboral activa. La exposición de tal proble-
mática no queda limitada a la descripción de
esta epidemia, en la que nos encontramos in-
mersos muchos trabajadores en el siglo XXI,
sino que también tiene un afán resolutivo,
tratando de realizar una descripción somera
de las estrategias de actuación que, desde la
conforman el resto del artículo, con la inten- principales de estrés laboral el trabajo preca-
ción de dotar los contenidos de un orden al rio (definido como “un empleo de baja re-
describir los factores más relevantes en el de- muneración y de baja calidad con pocas
©
32 respecto). Según un estudio publicado por el
IESE (Instituto de Estudios Superiores de Em-
presa) en 2006, un 30% de las empresas es-
pañolas tiene algún tipo de medida en mar-
gales y a su entorno. De esta forma, contri-
buiríamos a contrarrestar la falta de informa-
ción (a veces debida a un mal funcionamiento
en los canales de comunicación) que se halla
cha y que en los últimos años hemos mejora- frecuentemente en la base de los efectos nega-
do notablemente respecto a estudios anterio- tivos producidos por la ambigüedad y la in-
res. El IESE, tras analizar 360 empresas, ha certidumbre respecto al puesto de trabajo.
zaciones para favorecer el diálogo resultan cla- bastante larga (Pervin, 1967) y una premisa
ves en el manejo de esta problemática. muy simple: según las predicciones de la per-
Teniendo en cuenta las anteriores argu- sonalidad algunos trabajos son más adecua-
mentaciones, desde las empresas sería factible dos para unos individuos que para otros, de
la aplicación de programas dirigidos a facili- manera que a partir de un análisis compara-
tar la comunicación y a producir cambios en tivo entre la persona y el puesto es posible
la forma de abordar los conflictos, con el fin medir adecuadamente el grado de ajuste, el
de incrementar la eficacia del trabajo en equi- cual es tan deseable como indeseable el des-
po y mejorar el resultado de las negociacio- ajuste.
nes. Tal entrenamiento se caracteriza por su Las variables que han sido estudiadas con
énfasis en el cambio de actitudes, más que afán de predecir el estrés laboral son diversas,
por la adquisición de conocimientos. Se trata algunas proceden de las teorías psicológicas
de desarrollar la sensibilidad sobre las rela- sobre personalidad y otras se encuentran más
ciones interpersonales de modo que mejore el vinculadas al ámbito laboral. Entre las pri-
clima humano en los centros de trabajo. Pa- meras podemos citar el neuroticismo como
ra lograrlo, se consideran fundamentales tres predictor de estrés laboral o la extraversión
estrategias de actuación: 1) la realización de como desajuste en puestos laborales en los
un entrenamiento sistemático en habilidades que se realicen tareas monótonas. Por otra
de comunicación de forma grupal o indivi- parte, entre las características personales vin-
dualizada, mediante la presentación de mo- culadas al desempeño laboral destacamos la
delos combinada con la representación de pa- carga mental percibida, una dimensión per-
peles, basándose en los conocimientos dispo- sonal y subjetiva que hace referencia a la di-
nibles en la literatura especializada en aserti- ferencia entre la capacidad de procesamiento
vidad, 2) la formación en estilos y posibilida- requerida para realizar una tarea, alcanzan-
des de comunicación y 3) la aplicación de téc- do un determinado nivel de ejecución, y la ca-
nicas de solución de conflictos al ámbito la- pacidad disponible de una determinada per-
boral (Olmedo, 2009a). sona en un momento dado. Según los resul-
tados de los estudios realizados al respecto, la
Características personales carga mental influye negativamente en la re-
y estrés laboral. sistencia al estrés.
Una nueva perspectiva de ajuste al Por último, subrayamos la importancia
puesto de trabajo que, de forma general, han adquirido las ca-
No cabe duda de que algunas personas racterísticas personales vinculadas a la noción
están más capacitadas para ciertas profesio- de “inteligencia emocional” de cara al logro
nes que otras, y esto no sólo en cuanto a la del éxito laboral (Bar-On y Parker, 2000; Go-
formación académica se refiere. Los estudios leman, 1998). Es por ello que, en los últimos
enfocados a analizar el “ajuste” y “desajus- años, se ha generado un enfoque aplicado al
te” en el trabajo, cuentan con una historia ámbito laboral a partir de dicho concepto
(Olmedo, 2009b). Bajo este enfoque se de-
Para lograr el éxito en las fiende que, para lograr el éxito en las organi-
zaciones del siglo XXI, el trabajador debe cul-
organizaciones del siglo XXI, el tivar competencias personales y sociales, ta-
trabajador debe cultivar competencias les como la conciencia emocional, la valora-
personales y sociales, tales como la ción adecuada de uno mismo, el control de
©
34 conciencia emocional, la valoración
adecuada de uno mismo, el control de
nuestros estados de ánimo y nuestros impul-
sos, la motivación, la empatía y las habilida-
des sociales. Las diferencias individuales en
dichas competencias parecen mostrar un
nuestros estados de ánimo y nuestros
buen nivel de predicción en cuanto al rendi-
impulsos, la motivación, la empatía y miento laboral, de tal manera que son cada
las habilidades sociales vez más las empresas interesadas en utilizar
El estrés en
El niño
Victoria del Barrio
análisis
©
36 tanto en niños como en
adultos; por otro lado, las
diferencias entre ambos se
dan especialmente en el
campo social.
©
38 bras. Hay numerosas investigaciones que
muestran cómo la situación emocional de los
padres condiciona el modo como el niño
afronta los acontecimientos vitales negativos
Por el contrario los niños que son sobrepro-
tegidos se caracterizan por presentar una de-
pendencia enquistada y son incapaces de
afrontar personalmente las dificultades que
(Melamed & Bush, 1986). Las madres ansio- les tocan en suerte; como resultado de ello
sas dificultan la socialización de sus hijos pierden autoestima y se van haciendo cada
puesto que trasmiten temor hacia el entorno. vez más ineficaces. Aquí radica una de las
fuentes más potentes del estrés infantil. El estado emocional de los padres
De acuerdo con todo lo anterior, la crian- también cuenta en el proceso de
za de los hijos debe promover en ellos un
aprendizaje La madre ansiosa tiene
equilibrio psíquico que garantice una explo-
ración eficaz del mundo, lo que a su vez es in- un peso impresionante en la
compatible con las respuestas de estrés (Flum, transmisión de estrés al niño. El
& Kaplan, 2006). estado emocional de los padres se
En el seno de la familia la ausencia de ese comunica a los hijos sin necesidad de
equilibrio se da en forma de abuso. Una de sus palabras. Hay numerosas
formas aparece cuando el padre actúa como investigaciones que muestran cómo la
“dueño” del hijo. Este es considerado como
uno de los más serios estresores a que puede
situación emocional de los padres
ser sometido un niño, con efectos negativos condiciona el modo como el niño
largamente duraderos, pues sus efectos alcan- afronta los acontecimientos vitales
zan a la edad adulta y generan, además, una negativos.
mayor vulnerabilidad a la depresión, especial-
mente en las mujeres (Weis et al, 1999).
se mantiene como estresor principal a lo lar-
Estresores go del tiempo. (Arnold,1990, del Barrio,
Los acontecimientos que tienen mayor 1996). (ver cuadro 2).
probabilidad de suscitar reacciones de estrés En el rango de 0 a 6 años los aconteci-
en los niños van cambiando con la edad. En mientos acaecidos dentro de la familia expli-
los primeros años, la familia es el ámbito en can los más elevados niveles de estrés; luego
donde se concentran los estresores, pero a eso va siendo debido a los acontecimientos li-
medida que crece se vuelven importantes la gados a la escuela o a los compañeros (del
escuela y los compañeros, aunque la familia Barrio & Colodrón, 2002).
Otro factor determinante de la aparición
de estrés en los niños es la Socialización pre-
caria. Ello puede ser debido a un aislamiento
que en ocasiones es imposición de la familia o
bien del medio. En ambos casos se produce el
mismo efecto: una inexperiencia del niño ante
las situaciones de interacción social y un estrés
ante las mismas. Toda situación novedosa ge-
nera estrés. Aquellos niños que no han sido
habituados paulatinamente al contacto con
otros se encuentran sometidos a una situación
extraña para la que no tienen recursos.
Un niño, con unas determinadas caracte-
rísticas personales, puede reaccionar con estrés
ante situaciones neutras que, como ya hemos
visto, no resultan penosas para otros niños. En
cambio, los estresores violentos –abuso, enfer-
medad, muerte, guerras, inundaciones, terre-
motos, etc.– pueden provocar una respuesta de
estrés en cualquier niño, pero son tan traumá-
ticos y poco frecuentes que suelen recibir una
atención y solución inmediatas. Sin embargo,
©
39
©
40 la enfermedad y las restriccio-
nes respecto de la vida nor-
mal. Esto ocurre tanto en ni-
ños como en adolescentes
(Ortigosa, 2000; del Barrio,
1998). Cuando la enferme-
dad lleva consigo la hospitali-
Prevención Secundaria
La terapia cognitivo conductual es la que
más ha estudiado este campo, asi como su
efectividad. Hay muy diversos programas efi-
caces (Bruce,Compas, Connor–Smith, Saltz- d) Por último se busca general una auto-
man,Thomsen & Wadsworth, 2001) de los eficacia que proporcione al niño los recursos
que haremos un resumen: necesarios para enfrenetarse a los retos de su
entorno y competencias de las que el niño ca-
a) Actividad física, ésta se ha convertido rezca (habilidades académicas, sociales, de-
en uno de los modos más eficaces de diluir las portivas, etc.).
emociones negativas y es una de los primeras
estrategias a emplear ante la aparición del es- Hay programas que hacen hincapié en el
trés. proceso de solución de problemas. Aquí el pri-
mer paso es dar información; luego se ha de
b) La Alexitimia, o incapacidad de ex- animar a los sujetos a participar en discusio-
presión emocional, se asocia a la acumula- nes y actividades que refuercen los puntos de
ción de estrés. La mejor manera de enseñar a vista adecuados, después se entra en el análi-
un niño a expresar sus emociones es enseñar- sis de errores y se dice que los errores sólo in-
le a reconocerlas y a hablar de ellas, tanto de dican que los fracasos se pueden enmendar ac-
las positivas, como de las negativas. Lo pri- tuando de otra manera; por último se les lleva
mero que hay que hacer es que el niño pueda a la convicción de que el afrontamiento exito-
reconocer el estrés en sus primeros estadios. so de un problema consiste más en la manera
Hay que ayudarle a identificar los síntomas en la que se aborda que en las características
del estrés y las circunstancias que lo elicitan. del sujeto (Blacwell et al., 2007).
En la canalización de la emoción es impres- Algunos utilizan técnicas de visualización en
cindible este autocontrol para que la emoción las que tratan que el sujeto visualice una figura
pueda ser expresada de una manera social- de apoyo que pueda ser su guía en la solución
mente aceptable. de problemas (Mikulincer &Shaver, 2007).
La terapia clásica del estrés post trauma-
c) Racionalización de agendas: en oca-
siones los niños hacen una vida muy agitada
con una serie de responsabilidades que incre-
mentan la tensión. La supresión de activida-
tico ha aplicado la terapia de grupo en don-
de la narración ocupa un lugar central.
Ahora parece que se aplica con éxito la téc-
nica OJO EMDR (Eye, Movement, Desintiza-
©
41
estrés en la vejez
María Dolores López Bravo
análisis
©
42 tivo y negativo y prevalencia de depresión y
ansiedad durante la edad adulta y la vejez,
entre otras. En este terreno se observan pun-
los mismos sobre diversos indicadores de mor-
bi-mortalidad (por ejemplo, la pérdida de la
pareja y la jubilación se ha asociado a riegos
tuaciones adecuadas e incluso se evidencia de mortalidad y declive cognitivo). No obs-
una ventaja positiva con respecto a los jóve- tante, el nivel de impacto está en función de
nes (ej: Diener & Suh, 1998; Stock, Okun, múltiples variables, como son la presencia de
Haring & Witter, 1983). Estos resultados han relaciones sociales positivas con los otros en el
dado lugar a la denominada “Paradoja del caso de la viudedad o los tipos de jubilación
Bienestar en la Vejez”; hay paradoja puesto (obligatoria, anticipada o relacionada con la
que el carácter de los acontecimientos a los salud) en el caso de la jubilación.
La variabilidad en el impacto de estos 1990). Los cuatro parten del hecho de que
eventos dentro de la población mayor nos lle- una regulación adaptativa requiere de meca-
va a preguntarnos qué recursos personales nismos para localizar recursos limitados.
(personalidad, habilidades de afrontamiento)
y contextuales (apoyo social) facilitan la 1. El Modelo Socio-Emocional de Carstensen
adaptación a los cambios. Y, así, los siguien- (Carstensen, 1995) establece como la edad se
tes epígrafes ahondan sobre el carácter de los asocia a un descenso en el número de relacio-
recursos personales que facilitan la adapta- nes sociales y concluye que, con el paso del
ción y la consecución de altos niveles de fun- tiempo se seleccionan y priman las relaciones
cionamiento en edades avanzadas. íntimas y de corte, más específicamente, afecti-
vo.
Cambio en la utilización de
estrategias de afrontamiento 2. Heckhausen y Schulz (1993) proponen la
con la edad Teoría del Control como elemento principal
La investigación actual describe un cam- de regulación en la vejez. Esta teoría parte del
bio en la utilización de estrategias de afron- hecho de que el individuo utiliza estrategias
tamiento en función de la edad. Dicho cam- de control primario y secundario. Las estra-
bio, como expondremos más abajo, es conse- tegias de control primario permiten el mane-
cuencia de un proceso de acomodación a las jo de las situaciones y por lo tanto la autoe-
situaciones diferenciales que se producen en ficacia mediante la consecución directa de un
la vejez, con respecto a otros periodos del ci- objetivo. Sin embargo las estrategias de con-
clo vital, y debe de ser entendido como un re- trol secundario persiguen el mismo fin me-
curso personal predictor de un buen funcio- diante la modificación de las reacciones emo-
namiento en edades avanzadas. cionales propias y el establecimiento de obje-
Cuatro marcos teóricos versan sobre la tivos nuevos y más asequibles. Estos autores
utilización de estos recursos: Teoría de selec- sugieren que la edad lleva consigo la mayor
ción socioemocional (Carstensen 1995); Mo- utilización de la estrategia de compensación
delo de procesos duales de estrategias de de control secundario.
afrontamiento asimilativas y acomodativas
(Brandtstädter & Renner, 1990); Optimiza- 3. En la misma línea El Modelo de Procesos
ción en control primario y secundario (Hec- Duales de Afrontamiento Asimilativo y Aco-
khausen and Schulz, 1993) y Selección, opti- modativo (Brandtstädter & Renner, 1990) es-
mización y compensación (Baltes & Baltes, tablece que los procesos de asimilación fun-
El cambio en la utilización de
habilidades dirigido a una mayor
utilización de estrategias internas
está, debido a la propia
naturaleza del proceso de
envejecimiento, caracterizado por
una mayor pérdida de recursos
©
43
cionan cuando es posible cambiar de forma Antes de poner fin este apartado consta-
activa la situación o el individuo posee re- tamos que, como parece obvio, también, se
cursos eficaces de compensación. En caso ha comprobado que las personas mayores
contrario se pone en funcionamiento el pro- combinan las estrategias activas y pasivas de-
ceso de Acomodación centrado en modificar pendiendo del tipo de problema que afron-
metas y reducir aspiraciones ligadas a la ca- tan. Diversidad de autores han resaltado la
pacidad funcional. gran flexibilidad que muestran las personas
mayores en la utilización diferencial de estra-
4. El modelo de la Optimización selectiva con tegias de afrontamiento (ver revisión de Fer-
compensación (Baltes & Baltes, 1990) pro- nández-Ballesteros, 2009).
pone una serie de estrategias de afrontamien-
to para encarar el deterioro físico y cogniti- Resiliencia y envejecimiento
vo; la habilidad consiste en que el individuo El envejecimiento saludable o activo
fije sus objetivos, valore sus capacidades y (OMS, 2002) se puede considerar un proce-
busque, de alguna forma, cómo llegar a las so de afrontamiento de situaciones conflicti-
metas propuestas, a pesar de las limitaciones vas. Esta conclusión se apoya en que, como
y las mermas. Las estrategias de selección, op- se explicaba más arriba, el envejecimiento se
timización y compensación permitirían ges- asocia a diversidad de cambios personales y
tionar los recursos de los que dispone el indi- eventos vitales que requieren de adaptación y
viduo. resiliencia. En este epígrafe vamos a partir de
una revisión del concepto de resiliencia psi-
Es evidente el paralelismo entre los cua- cológica aplicada a la gerontología y de la re-
tro modelos presentados. De este modo las flexión de los factores personales que están en
estrategias asimilativas (Brandtstädter and la base de la misma y por lo tanto de un buen
Renner, 1990) se pueden equiparar a las re- envejecer.
lativas al control primario (Heckhausen & Este concepto de resiliencia es un concep-
Schulz, 1993), del mismo modo que las aco- to complejo expuesto, al menos, desde dos en-
modativas a las referidas a control secunda- foques: (1) el referido al crecimiento postrau-
rio. Otro ejemplo de paralelismo puede estar mático; esto es, a la capacidad para sobrepo-
entre las estrategia de selección (Baltes & nerse a la adversidad, recuperarse, y salir for-
Baltes, 1990) con la selección de contactos talecido, con éxito y de desarrollar competen-
sociales que se lleva a cabo en función de la cia social (Rutter, 1985); y (2) el vinculado con
edad (Carstensen, 1995). la habilidad para mantener un equilibrio esta-
El cambio en la utilización de habilidades ble o un nivel adaptativo de funcionamiento;
dirigido a una mayor utilización de estrate- esto es, en ausencia de sintomatología de es-
gias internas está, debido a la propia natura- trés postraumático (Bonanno, 2004).
leza del proceso de envejecimiento, caracteri- La resiliencia en este contexto de estudio
zado por una mayor pérdida de recursos físi- del envejecimiento activo se ha referido, más
cos, sociales y psicológicos. Se produce una que a la recuperación de circunstancias trau-
transición de estrategias de afrontamiento ac- máticas poco frecuentes como el maltrato, a
tivo o compensatorias a estrategias que im- la capacidad de recuperación de circunstan-
plican la modificación de creencias, emocio- cias difíciles de carácter más normativo. La
nes o metas. capacidad de recuperación se ha operativiza-
do, por ejemplo en tiempo de recuperación,
en vuelta al nivel de funcionamiento emocio-
nal previo o en percepción subjetiva de recu-
peración, entre otros.
Aunque es evidente la diversidad de mati-
ces, sí parece clara la utilidad de considerar a
la- resiliencia, más que cómo un proceso
ex
plicativo, como un fenómeno que necesita ser
qué tipología de recursos permiten una pron- Rutter, M. (1987). Psychosocial resilience and protective mech-
ta recuperación ante dichos cambios desde el anisms.
planteamiento del proceso de envejecimiento American Journal of Orthopsychiatry, 57, 316–331
Stock, W. A., Okun, M.A., Haring, M.J. y Witter, R.A. (1983): Age
activo. and subjetive well-being: A metaanalisysis. En R.J. Light (ed.),
Un reto futuro implica acotar, con mayor Evaluation studies: Review Annual (vol.8), PP.279-302. Bever-
claridad, tanto la tipología de circunstancias a ly Hills, CA: Sage.
las que se enfrenta el individuo, referidas ya a
una filosofía
de vida para
la superación
del estrés
La creciente competencia Ana Azkargorta Prat
profesional, la incorporación análisis
de la mujer al mundo laboral y
la crisis económica actual, Maite Ordóñez María
son aspectos que han análisis
cambiado nuestro estilo de
vida y nuestros valores. Estas
variables y otras muchas
hacen que día a día el
fenómeno del estrés sea
objeto de atención en centros
de salud, siendo una de las
principales causas de las
bajas laborales tramitadas. La
familia, la pareja, el tiempo de
T omando como base
la definición de La-
zarus y Folkman1
(1983), el estrés es un estado
de alerta mantenido en el que
Estrés positivo y
estrés negativo
Aunque la ansiedad y el
miedo tienen una cualidad
desagradable, y en el len-
ocio y el entorno social existe un estímulo o situación guaje común el estrés también
también se ven afectados, que la persona evalúa como se considera un estado nega-
creando dinámicas poco demandante o amenazante, tivo, desde una perspectiva
saludables y/o conflictivas que supera sus recursos y ca- evolutiva es un proceso que
pacidades para hacerle frente nos prepara para la acción y
difíciles de gestionar. Por todo
y que por tanto, puede poner la adaptación a situaciones.
ello, es importante reflexionar
©
46 sobre qué provoca estrés,
qué es lo que nos hace más
resistentes a él o si podemos
en peligro su bienestar. Du-
rante este proceso pueden
aparecer emociones como la
ansiedad y el miedo, que si
Por ello, este poder de acti-
vación es muy positivo, aun-
que si se prolonga en el tiem-
po, convirtiéndose en un mo-
elegir entre estresarnos o no bien no son lo mismo que el do de vida, comienza a surgir
introduciendo ciertos cambios estado de estrés, son fenóme- lo que llamamos estrés nega-
en nuestra filosofía de vida. nos concomitantes a éste. tivo. De esta manera, la per-
©
48 afrontamiento más diri-
gido a cambiar nuestros
pensamientos o intentar
calmar nuestras emocio-
Entre los valores en alza
de la sociedad actual se en-
cuentran algunos como la
actividad, la eficiencia y la
gunta de ¿existe coherencia
entre los valores que consi-
dero importantes y el tiempo
que les dedico en mi agenda
nes (p.ej. redefiniendo productividad. Aprovechar semanal? Al respecto, cabe
nuestros objetivos o ex- el tiempo, hacer muchas co- señalar la importancia de di-
pectativas, o realizando sas y hacerlas todas bien pa- ferenciar tiempos y espacios
para cada actividad, disfru- manera tranquila y sosegada. tadas cuando no disponen de
tando de nuestras ocupacio- Esto implica, a su vez, un un plan de acción concreto.
nes, así como de los momen- compromiso con el momen- En este punto habremos de
tos de ocio, descanso o, sim- to presente, una capacidad aliarnos con nuestra parte
plemente, de no hacer nada. para vivir plenamente en el receptiva y creativa, para po-
Por improductivo que pueda aquí y ahora, evitando que der así aceptar y disfrutar de
parecer, desarrollar una acti- nuestros pensamientos con- esa nueva situación, en lugar
tud contemplativa de la vida tinúen ligados a todas aque- de estresarnos ante la incer-
es un buen antídoto ante el llas obligaciones que tene- tidumbre que supone.
estrés, especialmente para las mos, a todas esas tareas que Por otra parte, también
personas que viven en entor- aún están por hacer. De la puede ocurrir que seamos
nos de gran actividad, velo- misma manera que nos con- poco eficaces a la hora de de-
cidad y presión. centramos y nos implicamos finir o comunicar nuestros
En estos casos, conviene en el trabajo y obligaciones, propios límites. Esto puede
tomar en consideración al- habremos de aprender a des- deberse a un exceso de auto-
ternativas que ralenticen conectar de ello y a disfrutar exigencia, a una sobrevalo-
nuestro ajetreado estilo vida, de otras facetas de la vida. ración de nuestras capacida-
realizando regularmente ac- Para ello puede ser nece- des o a una necesidad de
tividades como contemplar sario darnos ese “permiso”, cumplir las expectativas de
pausadamente las obras de reconocer nuestras necesida- otras personas. Cualquiera
un museo, dedicar un tiempo des y comprometernos en su que sea el motivo, la conse-
a una plácida lectura de un satisfacción. Uno de los obs- cuencia puede ser que nos en-
tema de interés, charlar sin es- táculos que podemos encon- contremos habitualmente an-
tar pendiente del reloj con trar en este sentido es la difi- te una estimación de tareas y
amigos o familiares, cultivar cultad para aceptar la deses- tiempos demasiado ambicio-
aficiones como la pintura, tructuración del tiempo y la sa, que requiera un sobrees-
la jardinería o cualquier otra falta de actividad pautada. fuerzo por nuestra parte, in-
que nos permita desconectar Algunas personas pueden virtiendo así en el trabajo o
de los quehaceres diarios de sentirse ansiosas o desorien- en las obligaciones la energía
y el tiempo correspondientes
a otras áreas vitales. El au-
toconocimiento y la asertivi-
dad serán entonces estrategias
que mejorarán nuestra ges-
tión de situaciones poten-
cialmente estresantes. Refle-
xionar sobre nuestras expe-
riencias de estrés puede dar-
nos pistas de cuáles son nues-
tros límites y dónde, cuándo
y con quién hemos de esta-
blecerlos. Las habilidades de
decir “no” y la de negociar
alternativas son susceptibles
de mejora mediante el apren-
dizaje y, sobre todo, me-
diante la práctica.
Por último, conviene te-
©
49
©
50 cuerpo y protegerlo
del estrés
Nuestro cuerpo reacciona
ante el estrés con cambios
sencillos, como dar un paseo
(a ser posible cerca de la na-
turaleza) o dedicar algunos
minutos a respirar profun-
titud y calidad de vida. Barcelona: Edi-
ciones Gestión 2000.
Pintanel, M. (2004). Técnicas de relajación
creativa y emocional. Madrid: Thomson.
Rosal, R. (2003). ¿Qué nos humaniza, qué
neurofisiológicos (aumento damente en soledad y tran- nos deshumaniza?. Bilbao: Desclée De
de la tensión arterial, secreción quilidad, nos darían la opor- Brouwer.
de adrenalina, agudización tunidad de contactar con
enfoque
Neuropsicofisiológico
del estrés
Mª Jesús Mozaz Garde
análisis
Conceptos básicos
En términos generales y a nivel po-
pular el estrés es entendido como pre-
sión debida a la escasez de tiempo (Lu-
pien y cols., 2007). Es decir, sentimos el
estrés cuando percibimos que el tiempo
disponible para realizar alguna tarea o
para llevar a cabo nuestros planes, es
escaso. Cuando ello ocurre, y en fun-
ción de su intensidad, se producen unas
reacciones que pueden dar lugar, si la
situación se mantiene, a estados de can-
©
51
el estrés se refiere tanto a los factores estre- sería el resultado de la pérdida del equilibrio,
santes como a las respuestas a los mismos y es decir, de la homeostasis.
como proceso global que incumbe a ambos, Atendiendo a los estresores hay que dife-
renciar entre estresores absolutos, que serían
aquellos que inevitablemente desencadenan
en las personas reacciones fisiológicas que in-
cumben al sistema endocrino, al sistema ner-
vioso y a la conducta (Lupien et al. 2007), y
estresores relativos que serían aquellos que en
función de la interpretación emocional y cog-
nitiva individual de las personas desencade-
nan o no las respuestas fisiológicas asociadas
al estrés. Los primeros darían lugar (sean
agudos o crónicos) a lo que conocemos como
estrés fisiológico y entre ellos se encontrarían
aquellos estímulos y/o circunstancias que
comprometen seriamente a la homeostasis,
como por ejemplo, ausencia de alimentación,
de sueño, una operación quirúrgica, una en-
fermedad, así como cualquier circunstancia
que comprometa la supervivencia de la per-
sona. Los estresores relativos serían aquellos
que tienen la capacidad de generar reacciones
Anatomía del cerebro fisiológicas en unas personas pero no en otras
por ejemplo; o aquellos que en algún mo-
mento de la vida de una persona, pero no en
otros, generan ciertas reacciones fisiológicas.
Este tipo de estresores inducirían el estrés psi-
cológico y el estrés social.
Otro aspecto relevante a tener en cuenta
es la diferenciación entre estrés agudo y estrés
crónico. Las hormonas asociadas con el estrés
protegen al cuerpo en el corto plazo (adapta-
ción). Sin embargo, tanto estresores absolu-
tos como relativos, asociados con los aconte-
cimientos de la vida diaria, pueden llegar a
producir un estrés crónico con efectos dañi-
nos a diferentes niveles. El cerebro sería el ór-
gano clave porque calibra los estímulos, de-
cide si resultan estresantes y organiza la res-
puesta, la cual puede ser adaptativa o dañi-
©
52 na. El cerebro sería también el blanco del es-
trés y de las hormonas que median el mismo,
así como de los procesos de allostasis (enten-
dido como el proceso de mantener de forma
El hipotálamo produce norepinefrina y segrega el péptido
activa la homeostasis) y el desgaste que dicho
denominado liberalina, que a su vez estimula a la hipófisis mantenimiento requiere por parte del cerebro
para que segregue la hormona adrenocorticotrofina (ACTH).
Esta última llega, a través de la corriente sanguínea, a las (McEwen, 2007). El estrés influye en la co-
glándulas adrenales situadas en los riñones, formando el co-
nocido eje hipotálamo pituitario adrenal (HPA), estimulando
municación entre el cerebro y los sistemas
la producción de glucocorticoides cardiovascular e inmune a través de dos vías,
la neural y la endocrina.
©
54 los glucocorticoides relacionados con el estrés
afectan a la neurogénesis, a la supervivencia
neuronal y a la arborización dendrítica en el
nas que salen de la amígdala. La interacción
hipocampo-amígdala participa en el procesa-
miento de las memorias emocionales apor-
hipocampo y tienen un efecto negativo en la tando información del contexto, mientras que
supervivencia y función de las neuronas pre- el control del cortex prefrontal sobre la amíg-
frontales. Es importante tener presente ade- dala juega un rol importante en la extinción
más, que los efectos del estrés en edades tem- del miedo (fuente de estrés).
pranas pueden incubarse y manifestarse más En casi todos los modelos de aprendizaje
tardíamente en periodos de mayor vulnerabi- se observa una activación del eje HPA, de
lidad, como puede ser la adolescencia o el en- manera que el aprendizaje y el estrés parecen
calibrar e interpretar los estímulos y afrontar development. Developmental Medicine and Child Neurology,
el estrés. 36, 826-832.
La actividad física, una vida saludable y McEwen, B.S. (2007). Physiology and Neurobiology of Stress
and adaptation: Central role of the brain. Physiol.Rev., 87,
el apoyo social como alternativa a la farma- 873-904.
cología, pueden minimizar el estrés (McE- Sandi, C. and Pinelo-Nava (2007). Stress and memory:
behavioral effects and neurobiological mechanisms. Neural
wen, 2007). Recientes estudios con animales Plast., doi:10.1155/2007/78970.
confirman que el tratamiento postnatal (que
Imago mundi
La contribución
cultural
de la Medicina
al estrés urbano
Antonio Romero Tabares
análisis
©
56 capacidades y que ponen a
prueba su capacidad para
afrontar la situación”.
rece tener nada de bueno.
La medicalización de
la vida cotidiana
Sobre la medicalización de
la vida cotidiana ya hablé
hace algunos años desde las
páginas de esta revista. El
punto de vista que adopté en
aquél momento fue la de na-
rrar la historia de una prácti-
ca mercantilista despiadada y
la oposición que a ella ejercen
las “fuerzas del bien”, repre-
sentadas en esa ocasión por la
remedio y, probablemente, porque, en última instancia, Ciencia y la Razón pero ¿có-
puedan obtener mejor alivio son males sociales, tanto co- mo puede una burda manio-
si el que esto sufre puede con- mo lo fue la tuberculosis en bra como ésta tener éxito? En
seguir un puesto de trabajo el siglo XIX o la enfermedad su artículo de 2003 sobre es-
con el que mantener con hol- de Chagas en la actualidad. te asunto, Márquez y Meneu,
gura una vida digna. En este Paradójicos ejemplos, pero aunque exponen el papel de la
sentido, el mejor invento que ciertos. gente común, de nosotros, y
han originado la Medicina y Por el contrario, podemos de nuestra percepción de sa-
su rama subsidiaria la Far- asegurar que, a imagen del lud en el hecho de que esta si-
macología, ha sido el Va- mundo en el que se desarro- tuación sea la que es, declaran
lium®. Hasta ahora, la Me- llan, la Medicina y sus cien- que son los médicos los prin-
dicina y la Psicología se han cias periféricas aportan cau- cipales agentes de la medica-
ocupado de describirlo y de
diagnosticarlo pero, por des-
gracia, el remedio al estrés no
pertenece a la naturaleza de
los objetos de los que se ocu-
La Medicina y la Psicología se han ocupado
de describir y diagnosticar el estrés, pero,
por desgracia, el remedio no pertenece a la
©
57
lización. Yo creo estar en des- lación médica ex-profeso? Es- (creo que esto ocurre también
acuerdo con ellos. El éxito en te ejemplo es el más antiguo en otras comunidades espa-
la estrategia de hacer pasar y, aunque pueda no parecer- ñolas) abre una campaña in-
por enfermedad algo que no lo, es el más evidente sobre to- formativa al acercarse el estío.
lo es radica en que el trabajo do porque prácticamente nin- Suele haber una rueda de pren-
ya está hecho porque lo he- guna de las intervenciones o sa o una presentación pública
mos hecho nosotros. maniobras o prácticas habi- de la campaña en la que pue-
Actualmente hay médi- tuales que se realizan a una den conocerse, por boca de la
cos que hablan con despar- parturienta está destinada a la persona que mantiene la más
pajo de “estados pre-patoló- comodidad o seguridad de alta responsabilidad de la con-
gicos”, como “pre-diabetes” ésta, sea la postura, o el ra- sejería, las líneas básicas de la
o “pre-hipertensión”. Esto surado o la episiotomía, sólo intervención, en este caso pre-
quiere decir que alguien que sirven para hacerle la vida más ventiva, que habitualmente
no está enfermo, en opinión fácil al médico. No obstante, son beber agua y buscar la
de un médico, basada en su- todo esto forma parte de sombra. Yo recuerdo una épo-
tiles signos, va a estarlo “con nuestra cultura, y casi sin ca durante la cual también ha-
alguna probabilidad”. Mu- oposición. Esto también es cía muchísimo calor y asegu-
©
58 chas veces esos signos son
algo menos que sutiles y, en
todo caso, ¿para ser paciente
medicalización de la vida co-
tidiana. Aunque imperceptible
es parte de ese trabajo que ya
ro que, ante ese evento mete-
orológico la gente común be-
bía mucha agua y buscaba con
no hay que estar enfermo? está hecho. tesón la sombra sin mediar
Quizá la prudencia aconseje En Andalucía hace mu- consejo sanitario alguno. Sor-
que sea ésta una condición ne- chísimo calor en verano. Esto prendentemente nadie se ríe.
cesaria. Esto puede ser alar- es un hecho conocido por to- ¿Sorprendentemente? La me-
mante pero, en cambio ¿quién dos desde antiguo. Desde ha- dicalización del calor estival es
puede negar la naturalidad de ce algunos años, la Consejería un hecho al que asistimos im-
realizar partos en una insta- de Salud del gobierno andaluz pasibles.
©
60 vez más percibidas como mé-
dicamente necesarias? La fron-
tera entre mejoras terapéuticas
y no terapéuticas, que no ha
estado clara desde la segunda
mitad del siglo pasado, se
vuelve imperceptible.
concept of health: a new challenge for HTA, health research, and health pol-
tos en el concepto de Medici- icy. Edmonton: Alberta Heritage Foundation for Medical Research, 2005.
na que la hace coherente con HTA Initiative #23.
el marco conceptual actual del
¿Cómo diagnosticar
un trastorno por
Estrés
Postraumático?
Las personas expuestas a acontecimientos traumáticos tales como desastres
naturales, desastres provocados por otros seres humanos, secuestro,
tortura, atraco, violación, accidentes, etc., incrementan el riesgo de
desarrollar distintos trastornos psicológicos como el trastorno por estrés
agudo, el trastorno por estrés postraumático (TEPT), el trastorno de pánico,
la depresión, la ansiedad generalizada y el abuso de sustancias.
Un habitante de Puerto Príncipe (Haití) observa la ciudad sentado sobre una montaña de escombros
Itziar Iruarrizaga
opinión
©
62 E n la aparición de esos trastornos,
mencionados en la entradilla, deriva-
dos de eventos traumáticos jugarán
un importante papel los aspectos cognitivos,
psicosociales y biológicos, interrelacionados
Los acontecimientos traumáticos
Según el estudio ESSEMeD, la prevalencia
vida del TEPT en la población general en Es-
paña es del 1,95%, siendo del 2,79% en la
mujer frente al 1,06% en el varón. En EE.UU.
de forma compleja y para poder diagnosticar las cifras son mucho más altas, con valores que
un trastorno por estrés tras un acontecimiento superan tres veces las cifras españolas.
traumático deberemos atender al tipo de Son muchos los tipos de acontecimientos
acontecimiento traumático que causa el tras- capaces de generar un trastorno por estrés en el
torno, a los síntomas clave del trastorno, al individuo que los sufre: un accidente grave
impacto del estresor y de los síntomas, y a la (p.e., automovilístico, aéreo, náutico o indus-
duración de los síntomas. trial), un desastre natural (p.e., inundación,
emocional que tiene como fin proteger al in- tipo de estímulos y disminuyen la capacidad
dividuo frente a nuevas situaciones similares, de concentración, memoria, toma de decisio-
pero que va a ocasionar toda una serie de nes, provocando reacciones emocionales muy
síntomas agrupados en tres grupos diferen- fuertes, con intensas respuestas de ansiedad
tes estrechamente relacionados entre si: re- que se manifiestan en elevados niveles de
experimentación, evitación/embotamiento y preocupación, miedo intenso, falta de control,
activación fisiológica. alta activación fisiológica, evitación de situa-
©
64 fisiológica, un tremendo malestar psicológico
que mantiene la reacción de estrés, como si
volviera a repetirse actualmente la situación
llevado a cabo por otro ser humano de ma-
nera intencionada. El concepto de víctima no
es fácil de delimitar ya que en muchas ocasio-
traumática, o pudiera repetirse en cualquier nes, especialmente en aquéllas que tienen que
momento, generando agotamiento, emocio- ver con eventos traumáticos masivos (p. ej.,
nes intensas, pensamientos irracionales, sesgo catástrofes naturales, incendios, guerras, actos
atencional (todo el tiempo se piensa en lo terroristas, etc.), son muchas las personas im-
mismo), sesgo interpretativo (estímulos que plicadas que con frecuencia sufren pérdida de
antes eran neutros ahora se viven como ame- bienes, empleo, o seres queridos. Todos ellos
nazantes y se evitan), que aumentan aún más sufren las consecuencias del evento traumá-
tico, pero sin duda el grado en que lo sufren noce que su agresor ha sido, o va a ser, libe-
es bien diferente y estará fundamentalmente rado de la cárcel. Incluso algunas personas
determinado por la intensidad de la exposi- pueden exagerar sus síntomas con objeto de
ción, la duración y la proximidad al evento mejorar una ganancia secundaria, por ejemplo,
traumático, así como por la pérdida sufrida. una indemnización o una condición exigida
Así por ejemplo, aquéllas personas que hayan para obtener una determinada prestación.
escapado a la muerte, hayan resultado heridos
o hayan perdido a sus familiares y seres queri- Cuánto duran los síntomas
dos tenderán a mostrar un mayor grado de A la hora de evaluar a una persona que ha
afectación que aquéllas cuya pérdida haya sido estado expuesta a un acontecimiento traumá-
de índole económica. Una consideración espe- tico resulta de interés diferenciar el TEPT del
cial merecen las víctimas de delitos y los efec- trastorno por estrés agudo. Para ambos tras-
tos de las implicaciones en el sistema judicial, tornos se requiere considerar la respuesta de
ya que las personas que padecen un TEPT pue- la persona ante el acontecimiento traumático
den verse implicadas en acciones judiciales bien así como la naturaleza del evento traumático.
por estar involucrados en un caso civil (por El trastorno por estrés agudo aparece en las
ejemplo, un accidente de tráfico) relacionado cuatro semanas posteriores al acontecimiento
con la patología que padecen, o por haber sido traumático y perdura como mínimo durante
víctima de un delito. Durante el procedimiento dos días; si al cabo de un mes persisten los sín-
judicial, dependiente o independientemente del tomas deberemos diagnosticar un TEPT. Sin
momento en que este se encuentre, algunas embargo, aunque muchas personas que pre-
personas pueden manifestar síntomas crecien- sentan un trastorno por estrés agudo con fre-
tes o decrecientes o, incluso, embellecerlos o cuencia desarrollan posteriormente un TEPT
reelaborarlos. Así, puede que algunas personas esto no ocurre siempre e invariablemente. Al-
manifiesten síntomas que pueden desaparecer gunas personas que desarrollan un TEPT pue-
una vez finalizado el proceso judicial o reali- den manifestar pocos síntomas o ninguno en
zado el pago de los daños, quizás explicado en el momento inmediamente posterior al trau-
base a la retraumatización por la exposición ma e incluso puede ser de comienzo demorado,
repetida a un agresor, o a los efectos acumula- apareciendo meses e incluso años después de
tivos de acontecimientos traumáticos durante la vivencia traumática. La evaluación clínica de
la declaración, la preparación del juicio o el ambos trastornos requiere la evaluación de los
testimonio, o incluso los síntomas pueden in- síntomas de reexperimentación, evitación/em-
crementarse de nuevo cuando la víctima co- botamiento y activación fisiológica, pero para
el diagnóstico del trastorno por estrés agudo es
de necesario cumplimiento que la persona
El trastorno por estrés agudo muestre síntomas disociativos (embotamiento,
aparece en las cuatro semanas desapego, desrealización o despersonalización,
amnesia disociativa en la respuesta inmediata
posteriores al acontecimiento al trauma) durante el acontecimiento traumá-
traumático y perdura como tico o inmediatamente después del mismo, y es
mínimo durante dos días; si al precisamente la importancia de los síntomas
cabo de un mes persisten los
síntomas deberemos diagnosticar
un TEPT. Sin embargo, aunque
disociativos la principal característica que di-
ferencia al trastorno por estrés agudo del
TETP.
©
65
Desarrollo del
trastorno por
estrés postraumático
Esperanza Dongil Collado
opinión
Muchas personas
pueden experimentar o
han experimentado
acontecimientos
traumáticos a lo largo
de su vida. Cuando
hablamos de trauma
nos referimos a un
acontecimiento o
situación que suele
aparecer de forma
brusca, inesperada,
Francis Bacon, Retrato de George Dyer en un espejo (1968).
incontrolable, que pone Museo Thyssen-Bornemisza, Madrid.
en peligro la integridad
©
66 física y que tiene
consecuencias
dramáticas pues no
forma parte de las
experiencias humanas
L os sucesos trau-
máticos más ha-
bituales son las
agresiones sexuales en la vi-
da adulta, la violencia en la
y el maltrato infantil. Todos
ellos son sucesos traumáti-
cos de tipo intencionado.
Entre los no intencionados
se encuentran los accidentes
habituales, siendo el pareja, el terrorismo, el se- y las catástrofes o desastres
elemento clave la cuestro, la tortura, la muer- naturales. No se consideran
te violenta de un hijo, el sucesos traumáticos cam-
pérdida de confianza. abuso sexual en la infancia bios vitales estresantes co-
©
68 ción, ataque sexual, acci-
dente, etc., dicha experien-
cia se queda grabada a fue-
ción del procesamiento cog-
nitivo voluntario consciente)
la respuesta de lucha huída,
con un palo, pues de lo con-
trario, si nos detenemos a
comprobar si es palo o ser-
go en la amígdala, una es- que producirá una reacción piente, en el caso de que sea
tructura cerebral muy primi- emocional de miedo que serpiente nos puede atacar.
tiva que sirve para grabar si- prepara al organismo para Lo mismo sucedería aunque
tuaciones de peligro en la la acción: atacar, huir o que- la serpiente fuera de goma,
que ha estado en juego la vi- darse paralizado (para que la alerta sería intensa y rápi-
da y en la cual tienen lugar pase el peligro), con el fin de da. La amígdala lo procesa-
una serie de aprendizajes au- protegerle. rá primero como un peligro
El aprendizaje
relacionado con el
trauma
Otro tipo de aprendiza-
je que se da en una expe-
riencia traumática, es el cog-
nitivo o consciente relacio-
nado con el acontecimiento
traumático y con sus conse-
©
69
©
70 concede mucha importancia
a estos pensamientos (per-
diendo relevancia las cosas
sensaciones vividas en los
momentos del suceso (olo-
res, gritos u otros sonidos),
mencionados: atención, in-
terpretación y memoria. ©
el estrés
en profesores Esther Calvete
opinión
¿Qué factores estresan a los mas de disciplina por parte de varios alum-
profesores? nos en una misma aula. Asimismo, las pre-
Con frecuencia el profesorado tiene que siones temporales y sobrecarga de trabajo son
afrontar circunstancias adversas que generan también habituales.
estrés. Estas circunstancias incluyen el tener Los problemas mencionados son impor-
que trabajar con alumnos poco motivados, tantes, pero posiblemente el problema que
que no tienen interés por las clases y lo que más estrés genera en muchos profesores se re-
fiere a las agresiones de las que son objeto ca- El apoyo ‘emocional’ hace referencia a
da vez más frecuencia. Estas agresiones pue- la provisión de confianza, empatía y
den oscilar desde comentarios negativos e in- cariño por parte de los demás que
sultantes a amenazas de agresión física y eje- hacen que la persona se sienta
cución de estas amenazas. Lamentablemente apreciada y querida. Se ha visto que
son cada vez más abundantes estos casos de en el ámbito laboral es
agresión. En un estudio reciente realizado con particularmente importante el apoyo
adolescentes del País Vasco, cuando se les
proporcionado por compañeros y
preguntó acerca de si habían agredido a al-
gún profesor, el 15.8% admitió haber insul-
superiores.
tado o dicho palabrotas en alguna ocasión a
su profesor, el 4.3% había amenazado con que reacciona en condiciones de estrés, y sín-
usar la violencia física y el 2.1% había gol- tomas como los mencionados nos envían se-
peado en alguna ocasión a su profesor (Cal- ñales de que algo no va bien y de que son ne-
vete y Orue, 2010). Sin duda, estos datos son cesarias ciertas acciones para controlar ade-
alarmantes y ayudan a comprender que en cuadamente ese estrés.
ocasiones la labor de los profesores sea cuan- Además, es importante tener en cuenta
do menos estresante. que existen importantes diferencias indivi-
Es interesante que este fenómeno crecien- duales en la forma de responder a situaciones
te de agresiones hacia los profesores tenga lu- estresantes. Es decir, no todos respondemos
gar de manera casi paralela al de las agresio- igual en situaciones de dificultad. Así, por
nes hacia los progenitores. En el mismo estu- ejemplo, algunas personas pueden experi-
dio se encontró que de hecho la mayoría de mentar intensas vivencias subjetivas de ansie-
los adolescentes que reconocían haber agre- dad o depresión. Otras, sin embargo, se vuel-
dido a sus profesores lo había hecho también ven irritables y entran en continuo conflicto
a sus progenitores. con los compañeros o familiares que les ro-
Sin duda, estas agresiones no hacen sino dean. Por último, otros profesores desarro-
reflejar un proceso en el que la falta de lími- llarán sobre todo molestias somáticas (tras-
tes y la permisividad en los procesos de so- tornos digestivos, dolores de cabeza, proble-
cialización contribuyen a quebrantar las tra- mas en la piel, etc.). Por todo ello, si preten-
dicionales figuras de autoridad para niños y demos aprender a reducir con eficacia nues-
adolescentes. tro estrés es preciso introducirnos en el auto-
conocimiento de nuestro propio estilo de res-
¿Cómo se manifiesta el estrés? puesta en situaciones estresantes.
Son numerosos los síntomas que pueden Cuando la experiencia de estrés se pro-
indicar al profesor que está sometido a un es- longa en el tiempo sin esperanza de solución,
trés intenso. El estrés le llevará experimentar puede desencadenar lo que se conoce como
cambios de naturaleza fisiológica, subjetiva e, Síndrome de Burnout (o síndrome de quema-
incluso, en su conducta habitual. Así, por do). Cuando los profesores emplean el térmi-
ejemplo, ante una confrontación estresante no se describen a sí mismos como consumi-
con un alumno o alumna podemos experi- dos, vacíos, alienados y quemados (Maslach,
©
72 mentar síntomas tales como tensión muscu-
lar, sudor excesivo, aceleración cardíaca, res-
piración entrecortada, sentimientos de miedo,
1982). Este síndrome representa un agota-
miento de los esfuerzos por adaptarse a las
circunstancias estresantes sin que estas mejo-
enfado, ira o aumento en el tono de la voz. ren. Por ello, cuando la multitud de estreso-
Además, los síntomas continuarán una vez fi- res encontrados en la situación de enseñanza
nalizada la confrontación de modo, que mas continúa sin esperanza de solución, el patrón
tarde el profesor puede sentirse más suscepti- de reacciones descritas como burnout daña
ble con otros compañeros de trabajo, amigos seriamente la habilidad del profesor para eje-
y familiares, o mostrar un mayor riesgo de cutar su trabajo. Los sentimientos de éste se
accidentes. Es decir, es la persona entera la vuelven negativos, se desarrolla una actitud
de cinismo, se pierde la implicación con los posiblemente las más importantes son las re-
alumnos, aumentan las enfermedades físicas ferentes a los estilos cognitivos del profesor y
y mentales y el absentismo y, en ocasiones, el al apoyo por parte de otras personas.
consumo de drogas y alcohol. Los estilos cognitivos se refieren a la forma
El síndrome de burnout se manifiesta en en la que el profesor se percibe a sí mismo, sus
tres componentes. 1) El Agotamiento Emo- relaciones con las demás personas y el mundo
cional, que se refiere a los sentimientos de es- en general. Estos estilos determinarán la forma
tar emocionalmente sobrepasado y agotado en que el profesor interpreta cada aconteci-
por el trabajo. El profesor se siente fatigado miento y circunstancia docente y, como resul-
cada mañana ante la perspectiva de afrontar tado, desempeñarán un papel crucial en el
una nueva jornada de trabajo. 2) La Desper- eventual desarrollo de síntomas de estrés y bur-
sonalización, que implica una actitud fría e nout. Para ilustrarlo imaginemos una profeso-
impersonal hacia los alumnos. El profesor ra que se enfrenta en el aula a un grupo de ado-
siente que realmente no le importa demasia- lescentes que, lejos de colaborar, se burlan de
do lo que les pase a estos y se siente insensi- ella y se niegan a seguir sus instrucciones. Co-
ble ante sus problemas. 3) La Falta de Reali- mo resultado de esta provocación el resto de
zación Personal, que consiste en creer que la los alumnos comienzan a alborotar y el aula
labor docente no merece la pena y en una au- por unos minutos se convierte en un pequeño
sencia de sentimientos de éxito y competen- caos. La escena relatada es bastante habitual en
cia en el ejercicio profesional. muchas aulas de enseñanza secundaria. Lo que
Numerosos estudios han identificado el aquí se pretende resaltar es que la reacción
estrés y el burnout como un importante fac- y consecuencias de este acontecimiento para la
tor de riesgo en el desarrollo de las enferme- profesora dependerán de la forma de interpre-
dades cardiovasculares, problemas psicoso- tarlo y extraer conclusiones acerca del mismo.
máticos como las migrañas y dolores de ca- Si ella interpreta que lo ocurrido se debe a que
beza o enfermedades mentales como la de- es una mala profesora, que siempre seguirá
presión y los trastornos de ansiedad. Asimis- siéndolo y que como consecuencia tendrá pro-
mo, el estrés se asocia a diversos problemas blemas una y otra vez, experimentará desespe-
organizacionales como la falta de satisfacción ranza. Si estos acontecimientos y la desespe-
en el profesorado y el absentismo. ranza subsiguiente se repiten tendrá riesgo de
desarrollar problemas asociados al estrés, co-
Protectores del estrés mo la depresión. Alternativamente, nuestra
No todo el profesorado experimenta las protagonista podría presentar creencias consis-
mismas dificultades cuando se enfrenta a es- tentes en que es necesario hacer bien todo y te-
trés en su profesión. Hay numerosas caracte- ner éxito siempre. En tal caso, el aconteci-
rísticas personales y ambientales que contri- miento relatado podría llevarla a experimentar
buyen a acrecentar o, por el contrario, a una gran ansiedad, sobre todo en torno a la
amortiguar el impacto del estrés. De éstas, idea de que sus compañeros podrían evaluarla
©
73
negativamente por su pobre manejo de la cla- a la persona una valoración o contraste de opi-
se. Además, tanto si experimenta ansiedad co- niones acerca de cómo está haciendo las cosas.
mo depresión aumentará el riesgo de que vuel- Responde a una necesidad humana de saber
van a producirse problemas similares porque cómo perciben los demás nuestras acciones y
posiblemente los alumnos intuyan su vulnera- criterios. Por último, el apoyo emocional hace
bilidad. Por último, la profesora del relato po- referencia a la provisión de confianza, empa-
dría interpretar que lo ocurrido no significa tía y cariño por parte de los demás que hacen
que ella haya fracasado o sea una mala profe- que la persona se sienta apreciada y querida.
sora. Por el contrario, podría pensar que lo que Se ha visto que en el ámbito laboral es parti-
le ha sucedido tiene lugar a menudo en las au- cularmente importante el apoyo proporciona-
las y representa un problema cada vez más fre- do por compañeros y superiores.
cuente en los adolescentes actuales. Eso no sig-
nifica –seguiría razonando– que no pueda ha- Programas de prevención y
cerse nada por manejarlo. A partir de esta va- reducción del estrés para profesores
loración del problema, la profesora podría Los programas de reducción del estrés
adoptar una actitud de búsqueda de soluciones buscan desarrollar habilidades de afronta-
para el problema, de modo que el enfrenta- miento al estrés mediante una combinación
miento no vuelva a sucederse o al menos pue- de técnicas. Aunque se han desarrollado nu-
da controlarlo mejor. merosos modelos, la mayoría incluyen técni-
En síntesis, el relato anterior únicamente cas que ayudan al profesorado a un mejor
pretende ilustrar como a menudo no son los manejo de los conflictos en el aula, estrategias
acontecimientos en sí mismos los que provo- de relajación y liberación de la tensión y téc-
can los síntomas de estrés, sino que éstos están nicas para modificar los estilos cognitivos.
en buena parte condicionados por nuestra for- Por ejemplo, el programa Deusto 14-16 in-
ma de pensar e interpretar los acontecimien- cluye un pormenorizado programa para la
tos. La mayoría de los modelos teóricos ac- prevención y reducción del estrés docente
tuales sobre el estrés coinciden al señalar que (Calvete y Villa, 1997).
buena parte del estrés que experimentamos lo Sin embargo, además de potenciar los re-
creamos nosotros mismos. cursos individuales de los profesores, es ne-
Además de los estilos cognitivos, tal y co- cesario abordar los problemas objetivos que
mo se ha mencionado, el apoyo social desem- causan estrés. Dificultades como las mencio-
peña un papel muy importante como modera- nadas (falta de disciplina, agresiones, etc.) re-
dor del estrés. El apoyo social se refiere a los quieren de acciones conjuntas, en las que no
recursos de diversos tipos proporcionados por sólo los agentes educativos sino también las
los demás. Cuando las personas perciben que familias, y la sociedad en general, aúnen es-
cuentan con el apoyo de otros, el impacto de fuerzos en el desarrollo de valores, derechos
los acontecimientos estresantes es mucho me- y obligaciones en niños y adolescentes. Esta
nor y manifiestan menos síntomas. Desde que colaboración contribuirá a reducir el estrés
este modelo fue propuesto son cientos los es- del profesorado. ©
tudios que muestran esta función protectora
del apoyo social (Cohen, Gottlieb y Underwo-
©
REFERENCIAS
74 od, 2001). En el caso de los profesores, el apo- Calvete, E. y Villa, A. (1997). Programa Deusto 14-16: Evalua-
yo social puede ser de diversos tipos. El apo- ción e intervención en el estrés docente. Bilbao: Mensajero.
yo informativo suministra información y con- Calvete, E. y Orue, I. (2010). Cognitive schemas and aggres-
sejo cuando tenemos que realizar una tarea. sive behavior in adolescents: The mediating role of social in-
formation processing. The Spanish Journal of Psychology, 13(1),
Por ejemplo, si el profesor tiene que hacer al- 189-200.
go nuevo y un compañero le explica cómo ha- Cohen, S., Gottlieb, B.H. y Underwood, L. G. (2001). Social re-
cerlo o le indica dónde obtener recursos para lationships and health: Challenges for measurement and in-
ello. El apoyo práctico o instrumental implica tervention. Advances in Mind-Body Medicine, 17(2), 129-142.
ayuda tangible cuando tenemos un problema. Maslach, C. (1982). Burnout: the cost of caring. Englewood
Cliffs, NJ: Prentice-Hall.
El apoyo evaluativo consiste en proporcionar
CÓMOSUPERAR EL ESTRÉS
María Prieto Ursúa
opinión
P ara entender el
proceso de forma
adecuada, convie-
ne conocer las fases por las
que pasa nuestro organismo
ante una situación que nues-
tra mente interpreta que
puede suponer un peligro
para nuestra integridad o
superviviencia (en adelante,
a estas situaciones las lla-
maremos “demandas” o
“estresores”):
1. En primer lugar se
produce lo que Selye llamó
“fase de alarma”, que con-
siste en una reacción fisio-
lógica compleja provocada
por la aparición del estre-
puede ser muy intensa (y
entonces la notamos e iden-
tificamos claramente como
2. En la “fase de resisten-
cia” nuestro organismo se
moviliza activamente para
©
75
©
76 la tercera fase y nuestro or-
ganismo ya está mostrando
señales de agotamiento y
tresadas las personas some-
tidas a este tipo de situacio-
nes tan intensas. Aún hoy
gunda fase), no se pone en
marcha el mecanismo de
homeostasis, con lo cual
problemas relacionados con hay muchas personas que esas mínimas activaciones se
el estrés, estas orientaciones creen que no pueden tener van acumulando y mante-
no serán suficientes para problemas de estrés porque niendo nuestro organismo
manejarlos, es fundamental no tienen este tipo de situa- en un nivel de tensión lige-
acudir a un profesional y ciones en sus vidas. ramente superior al normal.
personalizar las intervencio- Sin embargo, más ade- Esta tensión mantenida, co-
nes que cada uno necesite. lante se descubrió que eran mo ya hemos visto, produce
©
78 gún la naturaleza de esta va-
loración dará lugar a un ti-
po u otro de estrés: de ame- Es fundamental revisar nuestro diálogo
naza (se prevén daños o pér- interior y detectar los “amplificadores de
didas, aunque todavía no se problemas” que a veces tenemos sin darnos
han producido), de daño- cuenta: el perfeccionismo, la sobre-exigencia y
pérdida (el individuo ha re-
cibido ya un perjuicio), o de
las obligaciones que sólo nos imponemos
reto-desafío (semejante al de nosotros (haciendo frecuentes los
amenaza, pero el sujeto va- pensamientos que empiezan con “debería…”).
DEPORTE Y ESTRÉS
Luis Mª Iturbide Luquin
opinión
estar físico y una evidente mejoría psicológi- Para que una persona comience a
ca. Y así, hasta llegar a concretar un sinfín de
provechosas ventajas.
practicar deporte y se mantenga
Es verdad, sin embargo, que el interés de “enganchada” y activa durante
los médicos por el uso del ejercicio físico y el un tiempo razonable, hace falta
deporte como herramienta terapéutica co-
menzó a declinar a mediados del siglo XX,
que la modalidad elegida tenga
cuando la psicofarmacología y la neurobio- algún atractivo, sea agradable
logía desarrollaron drogas eficaces para com- y/o posea la virtud de satisfacer
batir la depresión y los psicólogos y psiquia- alguna de sus necesidades.
tras adoptaron la psicoterapia como instru-
mento para tratar de ayudar al ser humano a
superar sus problemas emocionales. Por suer-
te, y aunque fue necesario esperar hasta bien Calidad de vida
entrada la década de los ochenta, el papel de De un tiempo a esta parte, el término ca-
la conducta comenzó a cobrar importancia en lidad de vida se ha convertido en un vocablo
la prevención y en la lucha contra las enfer- de uso común tanto en el ámbito científico
medades mentales –pautas saludables de como en el cultural. Aparecido en los años se-
comportamiento–, produciéndose un retorno senta para dar cobijo y sentido a algunos de
hacia la consideración del ejercicio físico co- los valores que la sociedad moderna conside-
mo factor clave en la etiología y en el trata- ra indispensables para justificar su particular
©
80 miento de los trastornos emocionales. Ac-
tualmente, existe literatura específica que
avala y acredita la eficacia del ejercicio en el
forma de vida, el estudio de este constructo
ha sido abordado por disciplinas tan hetero-
géneas como la Biología, la Medicina, la Psi-
tratamiento de diversos trastornos emociona- cología, la Sociología o la Economía, llegan-
les del ser humano (Antonelli, 1974), utili- do a ser considerado como el objetivo por ex-
zándose el término “psicoterapia a través del celencia del estado del bienestar y de las po-
movimiento” para referirse a la aplicación del líticas socio-económicas de todo estado mo-
ejercicio físico como herramienta adicional de derno. Pero, vayamos por partes. En primer
trabajo en los tratamientos con dispositivos lugar, debemos señalar que la calidad de vida
tradicionales de psicoterapia. no puede ni debe identificarse únicamente
con la satisfacción de las necesidades perso- da marcadamente sedentaria, lo que para al-
nales, ni con la cantidad de bienes materiales gunos autores es tan peligroso como fumar
poseídos, ni siquiera con el estado de salud. (McGinnis, 1992). Por eso mismo, las auto-
La calidad de vida, como constructo multidi- ridades gubernamentales de los países indus-
mensional que es, debe ser considerada como trializados se esfuerzan en organizar y poten-
una consecuencia de la interacción dinámica ciar campañas informativas y cursos prácti-
entre las condiciones externas del sujeto (ca- cos de iniciación animando a sus ciudadanos
lidad ambiental, redes de salud, política so- a que practiquen ejercicio físico de forma re-
cial, infraestructuras, etc.), sus circunstancias gular. Pese a todo, y aun habiéndose demos-
personales (situación económica, estado de trado de forma fehaciente los numerosos
salud, personalidad, etc.) y su percepción sub- efectos positivos –físicos y mentales– que tie-
jetiva de satisfacción. ne la práctica deportiva, lo cierto es que son
Sin embargo, a pesar de la sensatez de es- pocas las personas que realizan esta actividad
ta proclama, lo cierto es que, alejada de la desde una perspectiva de bienestar y desarro-
“calidad”, la “vida” en los países desarrolla- llo personal.
dos suele implicar un ritmo frenético de acti-
vidad que apenas si deja tiempo para disfru- Eustress y distress
tar de las actividades de ocio y esparcimien- En general, se suele aceptar la idea de que
to. Horarios “inflexibles”, obligaciones “in- la actividad física y el deporte, practicados
salvables”, prisas “inevitables” y compromi- con moderación y constancia, favorecen la
sos “ineludibles” determinan la forma de vi- salud y ayudan a frenar el endémico estado
da de una sociedad en la que la actividad fí- de estrés que nos impone el mundo moderno.
sica y el deporte apenas si tienen cabida. Has- El trabajo, los estudios, el hogar, la familia,
ta hace unos años, el propio trabajo garanti- los amigos… se convierten en más ocasiones
zaba niveles básicos de salud al estar directa- de las deseables en auténticos focos de in-
mente relacionado con la ejercitación física quietud, nerviosismo y excitación, obligando
(Generelo, 1998), pero, en la actualidad, de- al modélico ciudadano de a pie a idear estra-
bido a la mecanización de los sistemas de tegias de afrontamiento que le permitan re-
producción, la mayor parte de los trabajos ducir, en mayor o menor medida, la intensi-
que se ofertan no solo no favorecen la movi-
lidad y el ejercicio, sino que fomentan el se-
dentarismo y la pasividad. Así las cosas, ca-
da uno debe reflexionar si merece la pena es-
te estilo de vida o si, por el contrario, sería
mejor dedicar algún tiempo semanal o inclu-
so diario a hacer ejercicio, ya que tener un es-
tilo de vida saludable, en el que la actividad
física y el deporte desempeñen un papel fun-
damental, es la mejor garantía de obtener ca-
lidad de vida.
En cualquier caso, y a pesar de haberse
demostrado que la relación del ejercicio con
la salud es directa, Dishman (2001) advierte
que sólo un 25% de la población adulta de
©
81
©
82 ambiente le demanda -especialmente cuando
sospecha que no posee las habilidades nece-
sarias para solventar el problema o no dispo-
mos de señalar. Cuando la actividad física se
convierte en un fin en sí misma y no en un
medio para conseguir un fin (salud, bienestar,
ne de tiempo suficiente para hacerlo-. Por de- satisfacción…), los efectos positivos de su
cirlo con otras palabras, nos hallamos en el práctica se diluyen como un terrón de azúcar
mundo y frente al mundo, por eso, ante un en el café. De hecho, son muchos los especia-
estímulo o situación percibida como amena- listas que han relacionado el deporte de com-
zante, el organismo se prepara para la defen- petición, el tradicionalmente llamado depor-
sa, generando una serie de respuestas, su- te de alto rendimiento, con riesgos físicos,
puestamente adaptativas, que afectan a as- psicológicos y sociales que pueden repercutir
económicos y sociales directamente vincula- Dosil, J. (2004). Psicología de la actividad física y del deporte.
dos con la satisfacción de las necesidades de Madrid: McGraw Hill.
sus miembros, tanto de las biológicas como Generelo, E. (1998). Educación, actividad física y calidad de vi-
da. En J. Martínez (Comp.), Deporte y calidad de vida. Madrid:
de las psicológicas. Esto quiere decir que, al Esteban Sanz.
margen de otras consideraciones, la calidad McGinnis, J. M. (1992). The public health burden of a seden-
tary lifestyle. Medicine and Science in Sport and Exercise, 24,
de vida de una persona no sólo exige tener un 196-200.
estilo de vida saludable, sino que también re-
Yoga y
Transformación:
un modelo para la prevención y
tratamiento del estrés en la sociedad actual
Mayte Criado
opinión
©
84 es así nuestra naturaleza de paz. Diríamos
que esta palabra se ha convertido en un tópi-
co manoseado en grado sumo por toda la vo-
rágine de propuestas alternativas que nos
oferta el consumismo pseudoespiritual, como
si de un bien carísimo se tratara al alcance de
pocos. Porque también este tipo de “bienes”
resultan ser bienes de consumo en esta socie-
dad caracterizada por los excesos (exceso de
sueño o exceso de carencia del mismo; exce- Mayte Criado
bienestar físico y mental. Transformar nues- funciones principales del organismo como la
tra vida es proporcional a la capacidad que oxigenación de la sangre o el cerebro, la pre-
seamos capaces de desarrollar para integrar- sión arterial o la digestión. Además, respirar
los. No estamos hablando de retomar con- bien facilita el sueño y relaja, es decir, co-
ceptos “elevados” o entender su significado. mienza a estimular, de manera espontánea,
Antes de tomar el Yoga como un camino es- los otros factores primordiales del bienestar.
piritual o algo similar, el propio Yoga nos Profundizar en la práctica de la respiración
propone comenzar por lo cercano (lo más natural (reaprenderla) y desarrollar la escucha
cercano es el cuerpo, después la mente) En lo atenta de la misma, son los fundamentos que
humano, lo esencial, es decir lo simple, toma hacen posible que la vida cotidiana, la activi-
ya una relevancia muy importante como ex- dad de cada día, las propias vivencias en cada
presión de lo más elevado. Por ello el Yoga, momento, no deriven en estrés, ansiedad o se-
vivido como un camino de transformación, es cuelas psicosomáticas sino que vayan trans-
el cambio hacia lo simple. Tal vez, esto sea lo formándose en conciencia y liberación.
más difícil. El segundo paso es la Relajación combi-
¿Qué propone el Yoga y por qué tantos nada con la Actividad del cuerpo (las famo-
miles de personas en todo el mundo se acer- sas posturas o âsanas). Estamos acostumbra-
can buscando una salida al estrés? dos a vivir en tensión. Es increíble. Cualquier
El primer paso es recuperar la Respira- tipo de actividad física o mental va al lado de
©
86 ción Natural. Es aquella que vuelve a facili-
tarnos el movimiento completo del diafrag-
ma, tan característico en los bebés, para to-
otras tantas o llega como respuesta del siste-
ma nervioso a situaciones límite. La mente,
que filtra a su manera esta actividad, va di-
mar el aire, o libera los músculos (en general bujando la cotidianeidad que nos somete sin
la cintura abdominal) que bloquean la espi- ningún tipo de “control”. El Yoga busca ha-
ración y nos devuelve un cuerpo rígido y una cernos sensibles a esta impronta mecánica
obstrucción incomprensible. El simple hecho dándonos las claves, sobre todo en el cuerpo,
de reconquistar la respiración natural es pro- para que la propia actitud se vaya tornando
fundamente transformador para la vida coti- cada vez más consciente de las sensaciones
diana: comienzan a verse beneficiadas las que ocurren en un momento dado. De esta
forma se comienzan a desechar los “vicios” comprensión de uno mismo, podemos ir de-
comportamentales que, con tanta experien- sarrollando la capacidad de reconocer las ten-
cia, nos empujan al sufrimiento. Me refiero al siones y “soltarlas”, dejarlas marchar o trans-
sufrimiento, no sólo emocional, sino también formarlas. Si aprendemos a generar esta dis-
físico. Así que, los dos aspectos, relajación y posición con el cuerpo, el siguiente paso in-
actividad, van de la mano en la práctica de cluirá la mente; pondremos en marcha los
Yoga. “Despertar” esa inteligencia genuina mecanismos que modifican las actitudes y los
del cuerpo a través de una actividad que in- comportamientos; tendremos a nuestro al-
corpora también la calma, impide que la in- cance, por inercia, el secreto de la felicidad,
estabilidad integral, el desarrollo de tensiones entendida ésta como una actitud de plenitud
físicas, emocionales y/o mentales sean la úni- y no como un continuo festín de los sentidos.
ca defensa que nuestro organismo desarrolle Meditar vendrá cuando hayamos podido des-
como respuesta al ritmo de vida que nos ha- hacernos del estrés, la depresión, el miedo o
ce vivir constantemente en actividad con ten- la ansiedad. No es fácil pero sí es posible.
sión. La somatización de esta angustia en for- Todas las herramientas* que componen
ma de contracciones musculares conscientes la práctica del Yoga llevan la misma direc-
o inconscientes en el cuerpo y/o enfermeda- ción: generar experiencias para despertar un
des de variado tipo y gravedad, van, poco a estado de sensibilidad y atención que derive
poco, consumiendo toda nuestra energía y en bienestar físico y mental. A partir de este
proponiéndonos una vida inaceptable. punto, nos encontramos en el ámbito de los
La práctica del Yoga abarca todos los as- “altos conceptos” que son sólo esto, con-
pectos del individuo, también la mente. Por ceptos. Conceptos, al menos para quienes no
eso el paso crucial es precisamente transfor- hemos completado el trabajo de excavar la
mar esa parte con el Pensamiento Positivo. tierra, limpiarla y prepararla para acomodar
Fíjense que no estoy hablando de Meditar. In- en ella sólidos pilares. ©
sisto en lo cercano para comenzar este viaje
hacia la comprensión de los rasgos más suti- * Se resume en este cuadro anexo la di-
les de nuestro ser. Es una carrera que nunca námica de las técnicas de Yoga para prevenir
termina pero su inicio es claro. A través de la o tratar el estrés.
©
87
ESTRÉS EN EL DOCENTE
l http://www.educaweb.com/noticia/2007/01/
15/estres-laboral-docente-dificultad-anadida-reto-
l http://www.potenciales-
humanos.com.ar/manejo%20stres.htm
Página que trata numerosos aspectos
relacionados con el tema.
©
89
Y de mí, ¿Quién
ha cuidado?
Crónica de una experiencia de “cuidadora”, más o menos estresada
©
90 normal, vamos. A lo mejor
debo decir que he ejercido,
porque cuidadora lo soy por
secuelas notables. Me en-
cuentro bien y lo físico no es
superior a lo que sufriría por
que soy cristiana, católica
para más señas. Uno no tie-
ne fe o es religioso o siente
naturaleza y por tanto es razones tan tontas como que en sí un instinto –llamémos-
probable que lo siga siendo el tiempo pasa… y pasa fac- lo así– de trascendencia por
mientras viva. tura y el mecanismo que fun- alguna razón utilitaria. Ha
recibido una gracia, un don. La fe en eso que para los mingo ha venido a casa fiel-
Vaya, que no se hace cristia- cristianos es el misterio del mente para estar con ella
no –o confirma lo recibido dolor redentor, es casi el mientras yo iba a Misa. Y
en el bautismo– para sentir- único soporte que hace que Beatriz, la ecuatoriana que
se bien, como quien hace te mantengas en pie y sigas contratamos y que procuró
oposiciones para tener una dando cuidados y continúes exactamente el trato delicado
seguridad de por vida. Sin haciendo lo que hay que ha- y de afecto prudente que mi
embargo, la religiosidad, la cer, compasivamente. madre necesitaba. Dios la
devoción, el hábito de orar, bendiga.
de dirigirse a Dios con con- Los de alrededor Crítica y la Fundación
fianza en su amor, la espe- Después está la familia. Castroverde me han facilita-
ranza en que el dolor tiene Los más directos –mis her- do un horario reducido y
sentido y en que tras cada manas, mis sobrinos– han es- muy flexible. Y la gente con
muerte habrá, hay, una re- tado en los peores momentos la que convivo en el trabajo
surrección, son poderosas y día a día durante los años, ha soportado y comprendi-
ayudas que pueden sacar del seis y tres meses, que ha du- do mi humor sombrío, mis
pozo y mitigar la ansiedad o
el miedo o aliviar la carga.
Yo diría que son un anties-
trés. Y en mi caso, sin duda.
Sobre todo, encontrar
sentido al deterioro mental,
a la vejez, a un sufrimiento
que se antoja desproporcio-
nado y sin objeto. Un dolor
de parto se justifica con la
alegría del nacimiento, un
esfuerzo físico o mental está
relacionado con lo que uno
se propone lograr, sacrificar-
se para ayudar al prójimo
muchas veces trae la com-
pensación del agradecimien-
to o al menos la de “ser una
buena persona”… Pero ver
sufrir a alguien a quien se La familia es uno de los soportes más
quiere mucho y tener la cer- gratificantes en situaciones de estrés o
teza de que ese sufrimiento
no se va a traducir ensegui-
dificultad…
da en algo gratificante como Nota: La fotografía, con la autora del artículo en primer plano, es de octubre de
2007, durante una reunión familiar y festiva
una mejoría que dure algo
más que unas horas, un cier-
to bienestar, un mejor áni- rado la enfermedad y el decli- excesos verbales, o mi mu-
mo… Ver que sufre como ve inexorable de la abuela. tismo y no ha llevado cuen-
una animalillo herido, sin
conciencia de por qué y pa-
ra qué salvo en instantes de
Los demás con interés, con
cariño, cada uno en su medi-
da y en sus posibilidades.
ta de mis desatinos…
Siempre están también
los que sobran. Es posible
©
91
lucidez… produce un des- También muchos amigos y que pongan interés y afecto,
consuelo mucho mayor que especialmente una vecina, pero son tan desacertados
el propio cansancio. María, que domingo tras do- algunos consejos –que te
©
92
aunque casi, casi, lo roce, co-
mo antes de atender a la so-
licitud un comité de expertos
debe evaluar el grado de de-
al pedirles información, inca-
pacidad para escuchar ni pa-
ra comprender un estado de
ánimo a punto de reventar
de los amigos, facilidades
en el trabajo. Y lo mejor:
creer en el amor de Dios,
tan invisible a veces y de
pendencia, como para tener de cansancio y preocupa- una evidencia apabullante
derecho a percibir algo en ción… De todas formas, en otras. Al menos esa ha sido
calidad de cuidadora yo ten- ese ámbito no me apoyé la fórmula en mi caso. ©
.
Viajar dejándose llevar instintivamente
©
94 el tiempo distendido y placentero, el ocio relajado, el buen gusto…
Viajar para compartir con sus gentes su agradable forma de vida.
Las citas en cursiva pertenecen a Claudio Magris, El infinito viajar (ed. Anagrama)
©
angustia. mo se supera? A estos interrogantes se inten-
Jeffrey Brantley. ta dar respuesta en este libro acompañado de 95
Oniro. Barcelona, 2010. numerosos ejemplos recogidos de la amplia
experiencia de la autora que, con un estilo claro y didáctico, ofre-
ce la información necesaria para reconocer cuándo sufre un niño
Calmar la ansiedad se basa en lo que el au-
estrés, los medios para prevenir su aparición y las pautas de acción
tor llama “conciencia plena” (mindfulness) y
para ayudar a superarlo.
en las técnicas, más o menos inspiradas en doctrinas orientales
de meditación, atención a los propios estados interiores y “des-
cubrimiento” de las propias capacidades para manejar el mie-
do, la ansiedad y la preocupación.
©RÍTICA ❙ Nº 968 ❙ Julio- Agosto 2010
literatura David Felipe Arranz
Profesor asociado de la Universidad Carlos III
S
in ir más lejos, en el ensayo La censu-
ra de prensa en los años 40 y otros
ensayos (1984), Miguel Delibes expli-
ca cómo el régimen franquista “ordenaba”
el nuevo espacio mediático: “Desde mi po-
sición marginal de caricaturista, primero,
y, a partir de 1944, como redactor, yo asis-
tí desde El Norte de Castilla a la ‘reden-
ción del periodismo de las servidumbres
reaccionarias o marxistas’, según la cual al
periodista español se le ofrecía la magná-
nima alternativa de obedecer o ser sancio-
nado. Las disposiciones de la nueva ley de
1938 no dejaban el más mínimo resquicio
a la iniciativa personal. Hoy, después de re-
visar centenares de papeles que se conser-
van en el archivo de mi periódico, observo
que el montaje censorio de aquella prime-
ra etapa de la posguerra civil fue tan meti-
culoso que cuesta trabajo imaginar un apa-
rato inquisitorial más coactivo, cerrado y
maquiavélico”.
©
96 El 4 de noviembre de 1941, tan sólo
un mes después de que Delibes se incorpo-
rara al periódico como caricaturista, la De-
legación Nacional de Prensa suprimió el
calificativo de “independiente” que el dia-
rio ostentaba en su cabecera. Las consig-
nas, a través de campañas, según el docu-
sección de crítica literaria titula- tual del escritor: los datos apa- bién de periodistas. En los edi-
da “Los libros”, publicada por recían desnudos de todo artifi- toriales, Delibes burlaba a los
primera vez el 23 de abril de cio y la opinión personal de censores con el recurso retórico
©
98 breve editorial). La segunda
amonestación, tras la fecha del
18 de julio de 1955, fue motiva-
da de nuevo por la ausencia de
vecinos del Barrio España, rea-
lojar a los habitantes de la ines-
table Cuesta de la Maruquesa
en el Barrio Girón y reconstruir
entusiasmo al rememorar la fe- la casa en la que murió Cristó-
cha del Alzamiento e inicio de la bal Colón. Estas campañas de
Guerra Civil: Delibes decidió, los periodistas escritores, cono-
E s la segunda
novela de la
E l polifacético escritor Jesús
Sánchez Adalid nos ofrece
un nuevo libro, Los milagros
autora, que re-
pite personajes
del vino. Una novela histórica de la primera,
ambientada en la Grecia deca- Gafas de sol
dente del Siglo I que narra el para los días
tránsito del mundo cultural de lluvia, para reivindicarlos según ella
griego al cristiano. misma confiesa, como es el caso de Gre-
Hay quien opina que ésta es la novela más religiosa del autor, ta Bouvier.
sobre todo porque retrata la etapa en que el cristianismo se va ex- El relato se nos presenta bajo una estruc-
tendiendo por los países del Mediterráneo oriental gracias a la pre- tura claramente distorsionada, que juega
dicación de S. Lucas, de San Pablo y de los primeros cristianos. con el salto atrás y adelante no sólo en el
La importancia del influjo cultural griego, aunque Grecia ya tiempo, sino también en los espacios. Bas-
estaba bajo el dominio romano, era singular. No cabe duda de que ta con leer el primer capítulo donde pasa-
su lengua fue un vehículo excepcional para la expansión del cris- mos sin apenas transición del 2002 a 1951
tianismo. Se sabe que S. Pablo la hablaba, que S. Lucas escribió su y de Madrid a Acapulco o Nueva York.
evangelio en griego y que en esta lengua se propagó la primera li- Porque, efectivamente, la acción se desen-
turgia de San Juan Crisóstomo. vuelve desde la década de los 50 hasta la
Preguntado Sánchez Adalid a este respecto, él opina que “en época actual, y en distintos ambientes de
un mundo que rechaza lo religioso, esto no es un tópico, lo esta- México, EE.UU. y España.
mos viendo cada día, sin embargo, éste es el lanzamiento más fuer- Son muchos los personajes que pululan
te de Planeta del año 2010. Me quedé asombrado porque yo siem- en este mundo de ficción, quizá excesi-
pre pensé que esta novela tenía un gran handicap: el tema religio- vos para seguir con comodidad el des-
so, la novela trata cosas que el mundo no está preparado para arrollo de los acontecimientos. Los dos
recibir. Pero yo creo que los lectores, creyentes o no, religiosos o personajes femeninos, Clara y Greta son
no, de nuestra religión y de otras, se pueden acercar con mucha los que acompañan toda la acción al en-
libertad a Los milagros del vino. En él van a descubrir cosas de sí carnar a la periodista que se documenta
mismos porque aquí se habla del alma, aparecen los demonios del para escribir las memorias de una gran
alma que sufrimos (el dolor, los celos, la angustia, el miedo a la dama, Greta Bouvier, cuya vida esconde
muerte…) y la libertad y la grandeza con la que Jesús exorciza to- un terrible secreto.
dos esos miedos del hombre”. Es una novela claramente narrativa, don-
Sin embargo, es lógico que junto al tema religioso aparezcan de prima la intriga, cuyas pistas se nos
también los grandes enemigos de toda religión, la superstición, el niegan hasta el final un tanto sorpresivo y
fanatismo y la hipocresía, las tres grandes lacras que amenazan las engañoso, en cuanto queda reivindicada
creencias. la persona de pasado dudoso, y, por el
En el libro cobra gran relevancia el tema del vino. Afirma Ada- contrario, queda vilipendiado el persona-
lid que “sin el vino no se pueden entender ninguna de las religio- je más y mejor reconocido socialmente.
nes mediterráneas”. Y aclara que el tema del vino le viene además Quizá se deba a la intención de la auto-
por familia, ya que poseen una bodega desde hace varias genera- ra, manifestada por ella misma, de que
©
100 ciones y su hermana es enóloga.
Junto a una meticulosa documentación, como suele ofrecer en
todas sus obras este autor, la novela nos presenta, sobre un fondo
abigarrado de antiguos mitos y rituales, la peripecia interior de un
detrás de personajes con mucho éxito so-
cial, se esconde a veces lo más bajo de lo
humano.
Es un libro entretenido, sin más trascen-
sacerdote del dios Asclepio, Podalirio, que al perder su fe en su mi- dencia que un relato de aventuras bien es-
sión sanadora, va a descubrir un camino abierto a la esperanza en crito, por la voluntad de estilo que mani-
la vecina Palestina. Y todo esto aderezado con vivos diálogos y fiesta la autora.©
simpáticos toques de humor. .©
menudo se aprovecha
A el descanso veraniego
para leer novelas policía- E n este libri-
to –apenas
cas o de intriga simple- 150 páginas–
mente porque captan me- encontramos
jor nuestra atención sin mucho más de
mucho esfuerzo. En ese lo que su simple
caso es recomendable apariencia pro-
acercarse a alguno de los libros de Camilla Läck- mete. Es el sabor agridulce de la vida
berg. Esta autora es reconocida actualmente como sabo- reado en este caso en un entor-
la mejor representante de la novela negra escandi- no familiar, íntimo, entre cuatro herma-
nava y la autora más leída de Suecia. Comenzó a nos que comparten por un breve espa-
escribir siendo muy joven y pronto se abrió paso cio de tiempo la carga sentimental de
en la narrativa europea donde ha obtenido diver- sus recuerdos de infancia y juventud.
sos premios por la madurez que demuestra en sus Demuestra Anna Gavalda que para
libros. reflejar las experiencias más humanas
En España se dio a conocer con La princesa de de toda persona no es necesario un gran
hielo, a la que le han seguido Los gritos del pasado andamiaje, ni muchas páginas –recor-
y Las hijas del frío todos ellas protagonizadas, al demos El consuelo con el que se dio a
modo de la serie Millenium de Stieg Larsson, por
conocer entre los lectores españoles–
unos mismos personajes, el policía Patrik Hedstrom
y su pareja la escritora Erica Falk, que tienen que sino que el gran misterio de la vida, su
enfrentarse con misteriosos crímenes y asesinatos. sentido más emotivo, puede aparecer
Precisamente la última aparecida en las librerías lle- entre unos pocos personajes, dos her-
va por título Crimen en directo. manos y dos hermanas que hace tiem-
El escenario suele ser el mismo, el pueblecito po no se ven, y que se encuentran con
costero de Fjallbacka, por otra parte lugar de naci- motivo de la boda de un primo suyo.
miento de Camilla Lackberg, donde esta pareja vive Todo les resulta evocador, una mú-
y donde suceden casos extraños, quizá por ser un sica, un olor, un sabor… Recuperan lo
lugar de veraneo muy apreciado donde acuden mu- mejor de ellos mismos, celebran sus vi-
chos turistas. vencias compartidas, más allá de de-
libros
Precisamente con un misterioso asesinato da plorar sus elecciones posteriores y el
comienzo Los gritos del pasado. Un niño que se es- devenir de cada una de sus vidas. Qui-
capa a jugar en un sitio algo escarpado, descubre zá sea este aspecto humano, cercano a
el cuerpo de una joven muerta. Y lo que más intri- toda experiencia personal, el que eleva
ga plantea es que debajo del cuerpo de la mujer este simple relato a mensaje universal:
asesinada hay restos antiguos de dos esqueletos de lo decisivo que resulta el entorno fami-
mujer. liar y afectivo de la infancia, los lazos
De ahí el título del libro Los gritos del pasado. que crea por encima de posteriores re-
La investigación se tiene que desenvolver entre laciones…
1979 y el momento actual. A lo largo de la misma El estilo de Gavalda, como siempre,
se van sucediendo otros hechos violentos sin que las
transmite sensaciones reconfortantes,
pistas den a primera vista grandes resultados. En este
punto Camilla Läckberg se declara ferviente admi- alegres. Lo consigue con el simpático
radora de Agatha Christie y juega al despiste con los
lectores. Sólo al final, de modo sorpresivo, se des-
vela la verdad.
Gracias a un estilo ágil y muy eficaz, Camilla
relato en primera persona de Garance,
la hermana pequeña, que cuenta sus ex-
periencias del encuentro en un tono di-
vertido, –muy buena la traducción de
©
101
Läckberg consigue que sus obras se lean con avi- frases hechas y giros coloquiales– y que
dez, tanto por la intriga que rodea la trama criminal logra crear, bajo capa de humor, una in-
como por los personajes.© timidad emotiva a partir de sus mutuas
confidencias.©
©
102 he visto en años, canta con un sen-
timiento sólo reservado a las perso-
nas de alma trabajada y cansada,
pero es que además canta con una
seo un buen verano. Recuerden que
pueden tener sus vacaciones teatra-
les en los festivales de Almagro, Al-
calá, Cáceres, San Sebastián, Alcoy,
Favero.
Teatro Nuevo Alcalá – hasta el 18
de julio.
De martes a viernes a las 20.30
técnica apabullante, y sin dejar de Olite, Olmedo, el Grec de Barcelo-
na, Niebla, Chinchilla… No se me sábados a las 19.30hs y 22.30hs
ser actriz en ningún momento, entre
vayan a aburrir. Un saludo.© domingos a las 19.30hs
acciones inverosímiles y movimien-
teatro
como animales dóciles y sin libertad; y es nueva-
mente Prometeo quien se rebela y entrega a ese re-
baño ciego el fuego de los dioses y con él la posi-
bilidad de su desarrollo. Y por ello el transgresor
es condenado a cadenas eternas en el Cáucaso. Prometeo encadenado. Obra de Dirck van Baburen,1623.
Rijksmuseum, Ámsterdam.
Este momento marca el comienzo del Prometeo
encadenado de Esquilo.
Pero el Prometeo de Carme Portaceli es una ti-
tánica. La actriz Carme Elias no encarna a un per-
sonaje masculino sino a uno femenino. ¿Es una op-
ción consciente de la directora el que una titánica
sea quien encarne el gesto de dar, enseñar, compa-
decerse de los humanos? Puede ser.
Además la versión de Müller-Portaceli añade
un prólogo (para uso de los olvidados de las mito-
logías mediterráneas) en que se explican los he-
chos anteriores al castigo. Y así como la obra de
Esquilo concluye con el hundimiento del héroe en
©
103
N
o es fácil que se puedan ver aprecia rabia en el discurso del di-
películas de cualquier país rector, todo está narrado en un tono MUJERES DE
árabe en nuestras pantallas. de serenidad y de rebeldía serena
Primero, porque su producción convencido de que la lucha de la EL CAIRO
suele ser escasa; después, porque razón sólo puede ser el camino a la
no son económicamente rentables. victoria. Mujeres en El Cairo se pue-
Por eso, sólo cabe felicitarse del es- de considerar una película testimo- Director:
treno de Mujeres de El Cairo. La nial, que ha logrado pasar la censu- Yousry Nasrallah.
cinta, muy crítica con la situación ra, que no es poco y que ha tenido
política y social de la mujer en una gran acogida en su país, hecho
Egipto, arranca con la peripecia vi- nada baladí si sirve para despertar
Intérpretes:
tal, emocional y existencial que pa- conciencias. Aquí también debería
Mona Zaki, Mahmoud Hemeida.
decen una pareja de periodistas. Él dejar un poso de reflexión. Primero
está a punto de un ascenso, sólo para conocer mejor a las socieda-
con una condición: que su esposa des árabes e islámicas y después,
no hable de política en televisión, para unirse a la denuncia. Mujeres
ya que sus opiniones están muy en El Cairo es de esas películas que
alejadas del poder. son como ventanas a las que aso-
El director no se pone cortapi- marse para ver el mundo en estado
sas y muestra a través de un len- puro.©
guaje cinematográfico sencillo
pero tremendamente elocuente la
discriminación que sufren las fémi-
nas en Egipto, en teoría uno de los
países musulmanes más avanzados.
Pues la visión de Nasrallah defien-
de todo lo contrario: en el país se
está viviendo una importante invo-
lución en el sistema de libertades.
La protagonista, lejos de mirar para
otro lado o acomodarse muestra
una rebeldía ante el integrismo is-
lámico, la imposición de llevar el
velo, sólo para taparse la cabeza; lo
que a ella más le inquieta es ese
velo moral e ideológico que se está
implantando sutilmente entre las
mujeres del país, reducidas a meros
objetos cuyas voces pretenden ser
silenciadas. Nasrallah acierta de
pleno al mostrar la evolución de la
protagonista, su progresiva toma de
conciencia tanto de su humanidad
como de su feminidad y de qué
manera ésta se ve cercenada por
las leyes inspiradas en el islamismo
y una cotidianeidad que anula a la
mujer.
©
104
El mayor mérito de la película
es su valentía. Es una cinta que ofre-
ce una visión agreste de la sociedad
egipcia, contaminada por el poder
político y religoso que vulnera la li-
bertades de los individuos que vi-
ven en ella y se ceba principalmen-
te en la mujer. Sin embargo, no se
TOY STORY 3
T
oy Story supuso un antes y Estamos pues ante una super-
un después en el cine de ani- producción que no desmerece a sus
mación. Simplemente revolu- antecesoras; al revés, las enriquece
cionó el género técnicamente con la con guiños cinéfilos más que conse- Director:
animación digital; después, demos- guidos, en la que el público verá Lee Unklich
tró que se puede hacer cine de ani- cómo el cine se alimenta de sí mis-
mación para niños y para adultos mo incluso para bien. De más está
desde la inteligencia. La cinta origi- decir que el trabajo de estrellas Con las voces de: Tom Hanks,
nal tuvo tanto éxito de crítica y de como Tom Hanks, Tim Allen y Joan Tim Allen.
público que era evidente que más Cusak, que se prestan más que gus-
pronto que tarde llegarían las secue- tosamente a dar voz a los persona-
las. Y en este verano llega- jes, es más que estimable. No en
Toy Stoy 3. En esta cinta
los protagonistas viven
una suerte de pérdida de
la inocencia, ya que su
dueño, el pequeño Andy
empieza a ir al colegio. Y
ellos terminan en una ha-
bitación que puede ser lo
más parecido a un cemen-
terio de juguetes.
Este argumento le per-
mite a Unklich rodar una
comedia alocada cuya
mayor virtud es su ausen-
cia de complejos, la auda-
cia visual y temática y,
como no, su originalidad.
Rodada en la más feliz de
las libertades artísticas,
Toy Story 3 es un más que
noble entretenimiento que
sabrán valorar más los
adultos que los niños, por
cuanto el derroche de in-
cine
teligencia aquí aplicada
supera y multiplica a otras
cintas de ficción. Lejos de
recrearse en los éxitos pre-
téritos, la cinta va más allá
para presentar al especta-
dor una cinta donde pocas secuen- vano están dando vida a un guión
cias son prescindibles y no hay es- mucho más complejo y gustoso de
pacio para lo obvio. interpretar de los que reciben habi-
El espectador simplemente se tualmente.
tiene que dejar llevar por una trama Entretenimiento de primera cali-
que incorpora nuevos personajes
que, a su vez, abren el campo argu-
mental con nuevas vías nada desde-
ñables. La aparición del oso Lotso,
dad, es una apuesta segura para un
verano que será muy poco emocio-
nante desde el punto cinematográfi-
co y donde las buenas producciones
©
105
APATÍA
hora, hacer fotos y hasta vídeos y una magazin de bobadinas. Los
alguna cosa más que el vendedor demás ni lo he intentado, salvo al-
me explicó pero que olvidé inme- guna excepción que luego expli-
diatamente. Lo utilizo sólo para caré. No veo concursos, porque
llamadas: hacerlas y recibirlas, cla- sólo “Pasapalabra” mantiene mi
ro, y no siempre con éxito. Así que interés y no coincido con el hora-
no me hablen de IPod, IPAD y de- rio… ¿Entonces no veo televisión?
más artefactos. Y casi tampoco de Pues sí, algo veo en canales muy
la “era de la información” con las pequeños, poco conocidos, y ví-
Antonio Jiménez, Director de maravillosas posibilidades de la deos cortitos, casi siempre sor-
El Gato al agua TDT. prendentes, en You–tube, qué
Tengo, cómo no, TDT, lo que, gran invento. Así que la mayor
en teoría, me daría acceso a un parte de mis veladas televidentes
sinnúmero de canales y emisoras. se nutren de debates en cadenas
Y veo sólo tres y excepcionalmen- minoritarias: Libertad Digital, In-
te cuatro. Y esto, a ratos y mucho terteconomía, Popular María Vi-
menos que hace algunos años, sión y ocasionalmente Telema-
cuando tenía para elegir la 1 y la drid. De telenoticias en estos mis-
2 de Televisión Española y tres mos y de películas casi siempre
más. ¿Por qué? Pues porque la antiguas como en el estupendo
cosa del manejo no es tan compli- “Cine en blanco y negro” que pre-
cada, pero yendo de un canal a senta Garci en Telemadrid.
otro y probando aquí o allá, lo que Pues eso, debates: bastante
encuentro son anuncios, muchos “Madrid opina”, el de César Vidal
anuncios de teletienda y bastantes en Libertad Digital (a veces y a ra-
de imagen de marca, y aburri- tos) y en la misma emisora “Deba-
miento cercano al tedio cósmico. tes en libertad” con Javier Soma-
Y no tengo paciencia ni tiempo lo. Sobre todo “El gato al agua” de
Ernesto Sainz de Buruaga, Director para estudiar minuciosamente la Intereconomía, que es el que se
de Madrid opina programación y hacerme un plan lleva el idem, en mi caso. Pero va-
diario o semanal para ver espacios mos a peor: los participantes cada
que hipotéticamente me pudieran vez debaten menos y están más
agradar. Así por encimilla, paso de de acuerdo en la crítica, por su-
N
o tengo tema para esta pá- series porque no estoy en condi- puesto, al gobierno. Así que no
gina. Sospecho que no es- ciones de recordar que los jueves hay argumentos contrapuestos de
toy preparada. Pertenezco o los martes ponen un capítulo de cuya discusión pueda salir algún
a otra época o a otro siglo y no es- no sé qué historias sobre vinateros criterio equilibrado. Y es que los
toy preparada para los avances de o aceiteros o reponen algunas que desmanes, despropósitos, contra-
la tecnología, y seguramente mu- ya he visto hace años. Tampoco dicciones y disparates de toda cla-
cho menos para la vida política o me interesan los telediarios con- se que perpreta la casta política,
©
106 social de la España actual. Puede
que llegue a estarlo en unos me-
ses, pero en este momento, está
claro que no.
vencionales. El de la primera de
Televisión Española porque es tan
“neutral” que no cuenta nada de
lo que realmente ocurre. El de Te-
apenas tienen defensa. Con que,
perdonen, estoy desanimada y me
asalta una tremenda apatía cuan-
do enciendo la tele y lo que veo o
Tengo un móvil sencillito pero lecinco porque rebosa mala baba no me interesa o ya lo sé o me da
que puede conectarse a internet, y que me perdone Pedro Piqueras. arcadas… Y así andamos: sin
organizarme la agenda, darme la El de Antena 3 porque es como tema.©
UN CIUDADANO EJEMPLAR
deporte
Desde el 3 al 25 de julio tos clichés hasta conseguir el res- campeón de Europa, subcampeón
peto y admiración de cada uno de olímpico y campeón europeo. Y
sus rivales. Gasol es el triunfo de siempre con un papel estelar mer-
la tenacidad; la victoria de la cons- ced a la diversidad de su juego.
La selección española de tancia; el talento y la avidez al ser- Sus éxitos sobre el parqué vienen
vicio de la gloria. acompañados por un curriculum
baloncesto defiende su El pívot español llegó a EE. impecable fuera de la cancha. Ni
condición de campeones UU. con la ilusión del que quiere siquiera su jugoso caché (cobra
mundiales a partir del 28 de triunfar fuera de su tierra. Pero la cerca de 15 millones de dólares
agosto en Turquía con la NBA es una jungla. Aterrizó en la por año), le ha hecho abrazar la
ausencia de Pau Gasol. ciudad de Elvis con apenas 21 excentricidad o la prepotencia. Su
años, aspecto de chico formal y sencillez es envidiable. Su cordu-
con poco músculo para competir ra, recomendable. Y su inconfor-
contra los superhombres de la mismo, admirable. Se trata de uno
liga. Lloró y sufrió. Los primeros de los embajadores más nobles
Mundial de años se empapó de derrotas en que atesora España. En una socie-
Fórmula 1. Se Memphis. Brillaba, pero no gana- dad que tiende a la exageración
celebran cuatro
carreras entre julio y
agosto. Gran Bretaña (11 de
ba. Sus buenas actuaciones que-
daban emborronadas por la ristra
de fracasos colectivos. Pero el 1
de febrero de 2008 le vinieron los
para lo bueno y lo malo como la
estadounidense, Gasol patenta la
mesura. En la meca del individua-
lismo, aporta conceptos gremiales.
©
107
julio), Alemania (25 de julio), dioses a visitar y, de paso, le cam- Las derrotas suponen un estímulo
Hungría (1 de agosto) y Bélgica biaron la vida. Destino, los Lakers. de superación. En las victorias no
(29 de agosto). Cambió la pequeña y aburrida reclama más elogios que los nece-
Memphis por el glamour y la sarios.©
C
uenta el Museo Colecciones ICO, que abrió sus garon a incorporarse al panorama plástico español.
puertas al público en Madrid en marzo de 1996, Así, entre estos fondos del ICO, junto a pinturas del
con más de 600 piezas, entre pinturas, esculturas y también veterano y acreditado Eugenio Granell, hay
grabados. Su colección, realizada en estas últimas dé- otras obras de artistas como Arroyo, Clavé, Bonifacio,
cadas por el Instituto de Crédito Oficial, surge como Farreras, Gordillo, Mompó, Navarro Baldeweg, Rà-
resultado de un largo período de estudio y análisis de fols-Casamada, Pérez Villalta, Barceló, Broto, Sicilia,
las más relevantes aportaciones plásticas que el arte Amat, Plensa y Ugalde, entre otros muchos exponen-
español ha generado dentro del pasado siglo XX. Por tes representativos del pop, de la figuración, de la abs-
lo que el Museo Colecciones ICO viene a constituir- tracción y del resto de las corrientes plásticas surgi-
se en un escaparate de excepción para todos aque- das desde los años 80 hasta finales del siglo XX.
llos, ya sean estudiosos o profanos, que deseen cono-
cer la plástica española del referido siglo. Como cual- n Colección de escultura. Ésta, como la anterior, reú-
quier otra institución museística, el ICO, para dar vida ne piezas importantes de cerca de medio centenar de
a sus colecciones, viene desde 1999 desarrollando escultores españoles. Obras que van acompañadas de
una actividad expositiva en sus espacios, organizan- dibujos con los que se intenta mostrar la relación en-
do exposiciones temporales con las que pretende tre ambas técnicas. El interés de esta selección de pie-
mostrar una visión más enriquecedora del arte actual, zas que conforman la Colección ICO de escultura, ra-
ya sea nacional o internacional. Así, por sus salas pa- dica en que además hace posible ofrecer una intere-
saron importantes muestras de pintura, escultura, ar- sante visión de la evolución de la escultura surgida
quitectura, diseño, dibujo, fotografía, cine y vídeo, durante el pasado siglo XX. Así, quedan representa-
con obras procedentes de acreditadas instituciones y das todas las corrientes de vanguardia (geométricas,
museos de todo el mundo. También, entre su progra- expresionistas, surreales y abstractas), hasta las de fi-
mación, no faltaron aquellas muestras realizadas con nales del pasado siglo. Hay piezas de Dalí, Ferrant,
fondos procedentes de su propia colección. De ahí, Gaudí, Gargallo, González, Gris, Hugué, Miró, Otei-
la recientemente clausurada Iluminación de contras- za, Palazuelo, Tàpies, Picasso y Torres García, entre
te, en la que daba a conocer una importante selec- otros muchos exponentes.
ción de obras escogidas de las Colecciones ICO, con
las que se pretendía originar o provocar nuevas suge- n La Suite Vollard de Picasso. Es este conjunto de 100
rencias y diálogos, fruto de la reunión o acercamien- piezas, una de las obras cumbres del grabado moder-
to entre ellas. no en donde el genio de Picasso logra combinar
como nadie la tradición clásica de Occidente con la
n Colección de pintura. Se nutre mayoritariamente atrevida modernidad. En estas composiciones, el ar-
de obras de artistas contemporáneos españoles, aun- tista manifiesta una de las etapas más convulsas y di-
que entre estas piezas no faltan referentes y ejemplos fíciles de su vida. Son los años de la guerra civil y de
arte
de la creación de otros creadores españoles como son sus rupturas matrimoniales. De ahí, la ansiedad, la
el caso de Esteban Vicente y de José Guerrero, ambos tensión, el erotismo y la melancolía que transmiten
exponentes relevantes pertenecientes a las vanguar- estas obras. ©
dias neoyorquinas, que tras su etapa americana, lle- (Museo ICO, Zorrilla, 3, Madrid).
©
109
©
110
I gualmente relevante se nos presenta esta exposición de
Mapfre, compuesta de más de 400 obras que muestran
el encuentro del movimiento surrealista con la fotogra-
fía y el cine. Estructurada en nueve secciones, comien-
Funke hicieron de ella un referente cultural y París reu-
nió nombres como Man Ray, Brassaï, Gillot, Kollar,Sou-
gez y otros muchos. De igual manera Barcelona tuvo au-
tores como Casas, Lladó, Gomis, Català Pic, Centelles,
za la muestra con las Acciones colectivas que tan impor- Masana, Godes y Arissa que se adentraron con gran éxi-
tantes fueron entre los surrealistas. Escritos conjuntos, ca- to en el campo de la experimentación fotográfica.©
dáveres exquisitos y collages. Le siguen, entre otras MNAC, Barcelona, hasta el 12 de septiembre.
arte
Jesús Campoamor
Paisaje László Moholy-Nagy
Celos, 1927
Helen Levit
Chicos
©
111