Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA
https://www.topdoctors.es/diccionario-medico/terapia-gestalt#
TERAPIA GESTALT: ¿QUÉ ES Y EN QUÉ PRINCIPIOS SE FUNDAMENTA?
1. AQUÍ Y AHORA
Desde la Terapia Gestalt se asume que los seres humanos percibimos todo lo que
nos ocurre como una experiencia unificada. Esto significa, entre otras cosas, que
nuestra idea de lo que es en futuro y el pasado no son más que proyecciones de
cómo vivimos el presente. En definitiva, trabajando nuestra manera de pensar el
presente estaremos interviniendo sobre nuestras maneras de plantearnos el futuro
por llegar y el modo en el que echamos la vista atrás para revisar el pasado.
Esta idea, por cierto, cuenta con el respaldo de unas investigaciones que hicieron
famoso al psicólogo Gordon H. Bower.
2. TOMA DE CONCIENCIA
La Terapia Gestalt es imprescindible tomar nota de lo que le ocurre a uno mismo.
Sólo a partir de ese modo se podrán detectar nuevas formas de formular la
experiencia del aquí y el ahora en términos que nos acerquen más a la
autorrealización.
Echar la mirada hacia las propias experiencias y pensamientos nos permite, por
un lado, ser mejores reconociendo nuestro estilo a la hora de experimentar, y por
el otro, tener más poder de decisión a la hora de cambiar nuestra manera de ver
las cosas. En otras palabras, podría decirse que ser honestos con nuestra manera
de experimentar nos permite desarrollar una mejor Inteligencia Emocional.
3. RESPONSABILIDAD
Tomar conciencia de los propios actos y estilos de experimentar las cosas implica
también asumir las consecuencias de esas opciones. A partir de la aceptación de
los errores y la hipotetización de los riesgos, se gana autonomía. Esto abre el
abanico de opciones y de concepción de sentidos en los que se puede actuar,
desde una perspectiva existencial.
La irresponsabilidad se considera fruto de una ilusión, una negación del presente y
una negativa a la hora de tomar conciencia. Es por eso que la Terapia Gestalt
enfatiza la necesidad de asumir responsabilidades, no ya para mejorar la
convivencia con los demás, sino para ser más libres y más capaces de dotar de
significado a nuestras vidas.
En definitiva, los terapeutas que se adscriben a la Terapia Gestalt entienden que
sus intervenciones deben centrarse en la autonomía y las potencialidades de la
persona. Una buena manera de experimentar lo que ocurre puede servir para
saber guiarse a uno mismo a través de esa jungla de opciones posibles, de
maneras de concebir la propia existencia.
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA
https://psicologiaymente.com/clinica/terapia-gestalt-principios
FRITZ PERLS, EL PADRE DE LA TERAPIA GESTALT
Para conocer y comprender la Terapia Gestalt es importante contemplar sus
orígenes, sus influencias y sus fundadores, es decir, su historia. Con la finalidad
de evitar escribir un artículo excesivamente largo y denso, he optado por
fraccionar en tres entregas la biografía de Friedrich Salomon Perls (1893-1970),
más conocido como Fritz Perls y considerado junto a su esposa Laura Perls como
el creador y fundador de la Terapia Gestalt.
Friedrich Salomon Perls, nació el 8 de julio de 1983 en un gueto judío de las
afueras de Berlín. Fue el tercero y último hijo después de dos niñas —Else y
Grete—. Su padre, Nathan, era fraccionador (distribuidor) de vinos, viajante de
comercio y masón. Pasaba mucho tiempo fuera de casa y siempre mantuvo una
mala relación con Fritz. Amalia, su madre, judía practicante, provenía de la
pequeña burguesía y logró despertar en su hijo un interés por el arte y en especial
por la ópera y el teatro, que perduraría a lo largo de toda su vida.
Perls pasó su época inicial como estudiante en el Mommsen-Gymnasium de
Berlín, un centro escolar que con el transcurrir del tiempo recordaría con el
desagrado propio de una nefasta experiencia, debido al exceso de disciplina y al
ambiente antisemita que se respiraba en el centro del que, pese a ser un alumno
brillante, fue expulsado a los trece años de edad por mala conducta. Como
consecuencia, el padre de Perls le obligó a trabajar como aprendiz en una
bombonería.
Friedrich Salomon Perls, nació el 8 de julio de 1893 en un gueto judío de las
afueras de Berlín. Fue el tercero y último hijo después de dos niñas —Else y
Grete—. Su padre, Nathan, era fraccionador (distribuidor) de vinos, viajante de
comercio y masón. Pasaba mucho tiempo fuera de casa y siempre mantuvo una
mala relación con Fritz. Amalia, su madre, judía practicante, provenía de la
pequeña burguesía y logró despertar en su hijo un interés por el arte y en especial
por la ópera y el teatro, que perduraría a lo largo de toda su vida.
Perls pasó su época inicial como estudiante en el Mommsen-Gymnasium de
Berlín, un centro escolar que con el transcurrir del tiempo recordaría con el
desagrado propio de una nefasta experiencia, debido al exceso de disciplina y al
ambiente antisemita que se respiraba en el centro del que, pese a ser un alumno
brillante, fue expulsado a los trece años de edad por mala conducta. Como
consecuencia, el padre de Perls le obligó a trabajar como aprendiz en una
bombonería.
Con respecto a la relación que mantuvo con sus progenitores, Fritz dejó
constancia varias reseñas en su libro autobiográfico Dentro y fuera del tarro de la
basura:
“Mis padres eran judíos ‘asimilados’, en especial mi papá. Esto significa que, por
un lado vivía avergonzado de su pasado y que por otro, mantenía algunas de sus
costumbres tradicionales; iba al templo los días festivos, por si acaso dios estaba
en alguna parte. Yo no podía soportar esta hipocresía y tempranamente me
declaré ateo… mi padre odiaba a mi madre y amaba a otras mujeres jugando al
maestro francmasón. En público, ambos aparecían como amistosos”. Con el
tiempo, la relación entre Fritz y su padre empeoró considerablemente, hasta el
extremo de que a su muerte decidió no asistió al funeral.
Más adelante, Fritz Perls retomó sus estudios —ya por propia iniciativa—
matriculándose en una escuela liberal dotada de un profesorado humanista, el
Askaniches Gymnasium, donde entabló contacto con el mundo del teatro, una
vocación que el tiempo consolidaría. Fue en aquella época cuando se produjo uno
de los encuentros más significativos de Fritz a lo largo de su adolescencia al
conocer al director teatral Max Reinhardt, responsable de la compañía Deutsches
Theater, de quien acabó tomando clases y recibió una oferta para trabajar como
comparsa.
En una siguiente etapa de su formación, Perls inició los estudios de Medicina. En
1914, al declararse la Primera Guerra Mundial, fue eximido del servicio militar
debido a una dolencia cardíaca, no obstante, y en contra los deseos de su familia,
en 1915, con veintidós años, decidió alistarse como voluntario en la Cruz Roja y se
dedicó, casi en exclusiva, a tratar a soldados con lesiones cerebrales. En 1916,
fue destinado como médico a un batallón de zapadores en el frente de Bélgica.
Durante el resto de su vida, Perls recordó su experiencia bélica como la más
traumática experiencia de su biografía: “La vida en la agonía de los fosos: horror
de vivir y horror de morir”.
Finalizada la contienda mundial, en 1920, Perls completó sus estudios de
Medicina y obtuvo el doctorado por la Universidad Frederick Wilhelm de Berlín,
especializándose en Neuropsiquiatría y estableciéndose en Berlín donde
compatibilizó la práctica médica con su interés por el teatro, los círculos
izquierdistas, la bohemia artística y el movimiento de la Bauhaus.
Fue en esa época cuando Fritz Perls conoció al filósofo Friedlander, cuya
influencia resultaría rotunda y crucial: “La filosofía era para mí una palabra mágica,
algo que uno tenía que comprender, para entenderse a sí mismo y al mundo, un
antídoto para la confusión existencial y el desconcierto”.
A partir de 1923, Perls emprendió una serie de viajes por los EE.UU, Europa y
Sudáfrica. Ya en su última etapa —antes de cumplir los setenta años— realizó un
último periplo de dieciocho meses alrededor del mundo, que incluyó países tan
distantes y dispares como Israel y Japón. Pero de esto dejaremos constancia en la
segunda y tercera entrega de esta serie.
REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA
https://www.gestalt-terapia.es/antecedentes-historicos-de-la-terapia-gestalt/