ENSAYO:

“EL HOMBRE COMO SER PRODUCTIVO”

TRABAJO E IDEOLOGÍA

LIC. EN PSICOLOGÍA
INTRODUCCIÓN
En este ensayo, analizaremos el papel que desempeña el ser humano
como un ser productivo y laboral, donde el factor motivacional del
empleador es estimulado generalmente para que el hombre alcance sus
metas u objetivos, conduciendo a la actividad por medio de dos factores
que se convierten en determinantes de la fuerza de trabajo: La percepción
que tiene el individuo respecto de satisfacer una necesidad, de acuerdo
con su experiencia, vale decir, la expectativa y la facilidad o limitaciones
para poder satisfacer dicho motivo, ello es la accesibilidad.
Así mismo, el trabajo está directamente relacionado con el hombre,
siendo el principal actor de cualquier actividad. Las organizaciones se
encuentran integradas por personas que llevan a cabo la tarea de
responsabilidades mayores con aciertos y errores. Por mencionar el
aspecto socio-político y tecnológico, los recursos humanos se encargan
del proceso de selección de personal realizado de manera profesional y
responsablemente, lo que determina que las organizaciones deben
desarrollar y promover en sus miembros la capacidad de innovación,
responsabilidad, autonomía y un grado adecuado de autoestima. Este
departamento, se apoya de la entrevista al igual que otras técnicas, las
cuales le permiten comprender y manejar el proceso de selección como
una forma dinámica y constructiva de elección.
El hombre es el principal objeto y sujeto por su carácter activo, que a la
vez se transforma en el desarrollo de la actividad.
DESARROLLO
El trabajo constituye la actividad humana primordial y el marco de
referencia crucial que define el sentido de la existencia de los seres
humanos. Las personas estructuran su vida en etapas y tiempos
laborales, organizando a las sociedades en función del trabajo,
constituyendo así, el principal contexto modelador de los seres humanos.

Situando la interacción humana en su marco más definido, podemos decir

que las clases sociales condicionan el sentido estructural de lo que las
personas son y hacen, subrayando que el trabajo es el elemento crucial
en el que las estructuras se hacen concretas para las personas.
El análisis de la percepción, de las actitudes o de los intercambios
personales son de manera continua, haciendo referencia al contexto
laboral, que constituye un molde esencial de posibilidades y de
significación histórica social.
Desde el punto psicológico, el trabajo es una situación humana ante la
cual el hombre responde con una conducta. Describiendo de manera
psicológica el trabajo, tenemos en cuenta tres aspectos: el personal: es
un hombre en toda su integridad el que trabaja y es ahí donde forja su
vida, desarrolla su personalidad e influye en la vida y personalidad de los
demás; el productivo y el social. El trabajo es una forma de hacerse a sí
mismo y a los demás. Si un trabajo ofrece a un trabajador expresar su
personalidad, desarrollarla y enriquecerla, será un trabajo más eficaz.
Podemos llamar al trabajo como una actividad productiva, ya que al
realizar su trabajo produce algo que satisface una necesidad, convivencia
o demanda de la sociedad.
El hombre al trabajar, desarrolla una actividad social y una situación
interpersonal y social al trabajar con otros y su trabajo, también depende
de los otros, es decir de las relaciones humanas que existen en una
empresa, del sentido que se le dé en una sociedad en la que la empresa
se integra y de la estructura de la sociedad.
“Trabajo eficaz será, pues, aquella situación humana en la que el trabajador consiga una alta producción a
través de la expresión y desarrollo de su personalidad, en un ambiente técnico e interpersonal que favorezca
su sana incorporación a un grupo y a una sociedad”. Mariano Yela Granizo (psicólogo y filósofo español).
En la vida social del hombre, el trabajo le permite organizarlos alrededor
de su trabajo, ya que dedican una buena cantidad de su vida a prepararse
para el trabajo, como aprendiz en los sistemas sociales y como estudiante
en los sistemas de organización social.
Una vez determinado el trabajo que desempeñará, determina su lugar de
vivienda, la organización de su tiempo, la distribución de sus otras
actividades partiendo de las exigencias del trabajo, organizando su vida
personal. El trabajo organiza la vida del individuo, así como las
estructuras urbanas establecen una regulación de espacio y tiempo en
función a las necesidades impuestas por el trabajo. La división social del
trabajo en relación con la propiedad de los medios de producción separa
a la sociedad en grupos y clases contrapuestas, determinando quién
puede ser "señor" y quien tiene que ser "esclavo", quién manda y quién
obedece.
Una organización moderna, no puede funcionar con pocas personas que
piensan y el resto que se limita a cumplir órdenes. Además de un nivel
más alto de conocimientos y aptitudes de todos los participantes, las
organizaciones requieren mayores niveles de independencia, seguridad y
confianza en uno mismo y capacidad de ejercer la iniciativa: autoestima.
Las organizaciones requieren personas con un grado adecuado de
autoestima.
La persona es producto de su propia historia, lo que incluye tanto los
determinismos biológicos como los determinismos sociales, el impacto de
las fuerzas que confluyen en el individuo y las acciones que el individuo
realiza en el entramado de esas fuerzas, en la medida en que el trabajo
es la principal actividad que conforma la historia humana, el trabajo
constituye el molde fundamental donde se acuña la vida de las personas.
En el trabajo, el ser humano puede encontrar el motivo principal que dé
sentido a su vida: la persona sabe lo que está haciendo, sabe la
importancia de lo que está realizando y se sabe a sí misma frente al
producto de su quehacer.
El trabajo nos ubica en un contexto material, un medio ambiente donde
día tras día tenemos que realizar nuestras tareas. Hablar del mundo del
trabajo es, entonces, afirmar que el trabajo nos vincula en una situación
material, física, en una circunstancia específica, sea ésta en casa o la
oficina, el autobús o la clínica, la fábrica o el comercio, el aula de clases
o la estación de servicio.
La psicología ecológica apunta a un sentido más profundo en el que el
trabajo se constituye en contexto de la existencia humana: el mundo del
trabajo, cada mundo laboral concreto, constituye un sistema social
específico con sus intereses grupales, sus valores y sus principios, sus
normas y su estilo de vida, cada contexto laboral admite y aun exige un
particular tipo de comportamiento. Cada uno de estos contextos laborales
propicia. y reclama una forma característica de comportarse; es ahí donde
los intereses en juego se convierten en valores y los valores se traducen
en expectativas cuando no en exigencias normativas inapelables.
CONCLUSION
El trabajo para el hombre es algo indispensable para satisfacer la mayoría
de sus necesidades, así mismo, la satisfacción laboral, podemos definirla
como el resultado de varias actitudes que tiene un trabajador hacia su
empleo, es decir los factores concretos como lo es una compañía, los
compañeros, un supervisor, asensos, salarios, condiciones de trabajo y la
vida en general; esto hace un conjunto de actitudes positivas hacia el
trabajo, es decir, quien tiene actitudes positivas hacia su trabajo se
encuentra satisfecho con el mismo.
Las actitudes que demuestra una persona, son afirmaciones de valor,
favorables o desfavorables acerca de objetos, gente o acontecimientos.
Cuando una persona comenta que le gusta su empleo, refleja su actitud
hacia el trabajo, presentando cientos de actitudes concretando el
comportamiento organizacional en un limitado número de las que se
refieren al trabajo.
Para lograr la satisfacción laboral y el compromiso con el puesto, depende
del grado en que uno se identifica con su trabajo y participamos
activamente con él y tomamos en cuenta la organización, la cual indica la
lealtad y la identificación con la empresa.
Generalmente, buscamos empleos que nos brinden oportunidades de
aplicar las habilidades y capacidades aprendidas ofreciendo una variedad
de tareas, retroalimentación y libertad sobre lo bien que estamos
realizando las actividades.
Si tenemos un empleo con pocas posibilidades de retos o reconocimiento
laboral, puede provocar fastidio, frustración o un sentimiento de fracaso.
Buscamos un empleo con un sistema de pago bien remunerado y políticas
de asenso justos, claros y congruentes con nuestras expectativas, si el
sueldo cubre nuestras necesidades y nos parece equitativo de acuerdo a
las exigencias del puesto, nuestras habilidades darán resultados de
satisfacción. Para un mejor desempeño, queremos y esperamos un
entorno seguro, cómodo y limpio, de acuerdo al puesto desempeñado, el
cual nos dé una buena remuneración y al mismo tiempo satisfacer
necesidades de trato personal y tener compañeros que brinden amistad y
respaldo.