RESPONSABILIDAD PENAL

En primer lugar, debemos entender al derecho penal como la disciplina que pertenece al
derecho público, que tiene por estudio el conjunto de norma jurídicas por las cuales el
estado prohíbe determinadas acciones y omisiones bajo amenaza de sanción penal
(Barreto M., 2014). Para el derecho penal, la persona responsable del actuar es la
merecedora de una sanción derecho penal, ya sea que los comportamientos sean de
acción u omisión.
Hans Kelsen señala a la responsabilidad como “la relación del individuo, contra el cual se
dirige la sanción, con el delito que él mismo hubiera cometido o que un tercero cometiera”,
es decir, que es la relación entre una sanción y un agente sobre el que recae. Para definir
la responsabilidad, nos centramos en cuatro sentidos de la responsabilidad clasificados
por Hart: Responsabilidad como rol (este se centra en las obligaciones que se adquieren
al desempeñar un rol especifico, el sujeto asume obligaciones en capacidad de su acto),
responsabilidad como relación causal (los actos del sujeto se relacionan con las
consecuencias), responsabilidad como capacidad o estado mental( existencia de la
conciencia del sujeto sobre sus actos y consecuencias generales), responsabilidad de
sancionabilidad (se requiere que el sujeto sea responsable en cuanto a capacidad de
responder lo que le asigne el sistema jurídico).
Ahora bien, cuando nos referimos a la responsabilidad penal, Alfonso Reyes, profesor
colombiano, considera que la responsabilidad penal “es la sujeción del agente a las
consecuencias jurídicas del hecho punible cometido”; entonces, la responsabilidad penal,
deriva de aquellos actos cometidos por una persona en particular, actos que provocan un
daño y van contra de la legislación propia del país, actos que no derivan de terceros.
Precisamos, que la responsabilidad penal puede generarse por dolo o culpa, por acción u
omisión, pero, indistintamente, ambas son sancionadas.
En nuestro Código, sobre la Responsabilidad penal, el artículo VII menciona que “La pena
requiere de la responsabilidad penal del autor. Queda proscrita toda forma de
responsabilidad objetiva” en tal sentido, la imputación que una persona reciba por las
acciones que comete, debe estar prescrita en ley, evidenciando la importancia de la
tipificación de los delitos. La responsabilidad está ligada a diferentes principios del
derecho penal, dentro de estos, como se menciona anteriormente, está relacionada con el
principio de legalidad, toda vez que no existe responsabilidad sobre delitos no tipificados.
Por otro lado, cuando nos referimos al carácter individual de la responsabilidad penal, ello
corresponde a la acción propia de los actores, es decir, una persona no puede responder
por la conducta delictiva de terceros ajenos. El deber jurídico penal de cumplir las
normativas y no causar daño a otros depende de cada sujeto como tal, unos con mayor
carga que otros, pero es personal. Sin embargo, como lo veremos más adelante en el
presente artículo, también existe una responsabilidad derivada de la actuación una
persona jurídica que es atribuible a una persona natural.
Para que se atribuya responsabilidad penal a una persona en específico, debe concurrir la
imputabilidad, la tipicidad, la antijuricidad y la culpabilidad, partes propias para a la
identificación del delito; ya que si no existe una acción u omisión que vaya contra nuestras
normativas, sea cometida por persona exenta de responsabilidad penal, no exista la
tipificación de la conducta realizada y no exista la intención ya sea dolosa o culposa de las
acciones, no podemos hablar de responsabilidad penal.
La responsabilidad penal es importante no solo para poder identificar un supuesto
merecedor de sanción, sino que también es importante definir y entenderla como un
atributo necesario para identificar la pena a imponer y, también para considerar el nivel o
grado de pena que pueda ser merecedor, ejemplificando, un funcionario público a razón
de su nivel, tiene más responsabilidad o una responsabilidad penal exclusiva sobre un
delito en específico que un ciudadano normal y corriente que lo comete.
La responsabilidad penal surge como consecuencia de la violación de la ley penal y se
determina con un proceso judicial que es guiado por un juez penal quien, en ponderación
a la condición del sujeto, el hecho cometido y el tipo penal pertinente, determinar una
sanción o pena como castigo a su actuar.
Supuestos que eximen la responsabilidad penal
Es menester mencionar cuáles son las causas o supuestos que eximen o atenúan la
responsabilidad penal en la que deriva una persona. La exención es un mecanismo que
absuelven la responsabilidad penal al agente que realiza la conducta.
En nuestro cuerpo normativo penal, el Capítulo III, se encarga de establecer aquellos
supuestos que excluyen o atenúan la responsabilidad, entre estos supuestos se
encuentran las causas de justificación, causas ex culpantes, atipicidad y en específico el
Artículo 20, sobre la inimputabilidad que comienza indicando “Está exento de
responsabilidad penal …”.
La inimputabilidad es la exención de la responsabilidad a razón de las características
propias de un sujeto. La inimputabilidad es la excepción por la cual una persona no podrá
recaer en responsabilidad penal o no podrá ser totalmente sancionada por su conducta es
la ausencia de culpabilidad o capacidad penal de una persona para poder responder
sobre sus actos.
Sin embargo, la situación de inimputabilidad debe ser examinada de acuerdo con el caso,
con el tipo penal y con el razonamiento del juez a cargo, ya que, para enunciar la
inimputabilidad de una persona, es determinante un juicio normativo previo, razonable y
motivado.
Las causas eximentes de la responsabilidad son: por anomalía psíquica (presencia de
síntomas que alteran la facultad del sujeto, haciendo que pierda contacto con la realidad),
grave alteración de la conciencia (es el trastorno mental transitorio del sujeto por la cual
no tiene dominio ni conciencia de su propio acto) , alteración de la percepción
(alteración de todos los sentidos del sujeto, como el habla y audición), minoría de edad (el
sujeto no tiene suficiente madurez para comportarse conforme a derecho), legítima
defensa (el sujeto está en peligro y trata de evitar un daño inminente), fuerza física
irresistible, por miedo insuperable, acciones por disposición de ley o por orden de
autoridad competente, entre otros.
Cómo se puede apreciar, cualquier persona natural podrá incurrir en responsabilidad
penal, tras efectuar acciones que contravenga la ley, de la misma forma los funcionarios
públicos incurren en responsabilidad, pues también pueden verse envueltos en diferentes
delitos.
Responsabilidad penal internacional
La responsabilidad penal fue incorporada en el derecho internación por la naturaleza de
los crímenes internacionales. El tribunal de Núremberg señala en uno de sus principios
que "toda persona que cometa un acto que constituya delito de derecho internacional es
responsable de él y está sujeta a sanción"; es decir, todo sujeto tiene consecuencias
penales si su comportamiento contribuye a la realización de un acto criminal. Los
crímenes que la Corte puede conocer son: el genocidio, crímenes de agresión, de lesa
humanidad; Estos delitos sobrepasan a la comunidad interna y son de transcendencia
para la comunidad internacional.
El sujeto de los crímenes es de carácter individual y es de competencia exclusiva de la
Corte, este debe se autor directo o coautor para ser penalmente responsable. Asimismo,
la corte deberá examinar si se ejecutaron todos los elementos que configuren el tipo
penal, así sea un delito agotado.
El Derecho Internacional Penal sostiene que aún no existe una obligación general de los
Estados de abstenerse de conceder amnistías e indultos por crímenes internacionales, sin
embargo, el tribunal puede hacer caso omiso basándose en tratados internacionales, sin
afectar la soberanía de los Estados. Entonces, podemos señalar que la amnistía e indulto
no tiene ningún efecto para los tribunales internacionales en materia de crímenes
internacionales.
 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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