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El método Montessori
El Método Montessori, es un enfoque educativo centrado en el niño basado en
observaciones científicas de los niños. Este método considera al niño como alguien
que está naturalmente ansioso por el conocimiento y capaz de iniciar el aprendizaje en
un entorno de aprendizaje de apoyo, cuidadosamente preparado. Intenta desarrollar a
los niños física, social, emocional y cognitivamente, también en este método se
priorizan las necesidades e intereses de los estudiantes, el educador tiene que seguir
al niño reconociendo las características del momento del desarrollo en el que se
encuentra y las diferencias individuales. Las características principales de este método
son:
Respeto al ritmo individual de cada niño
Libertad de elección (tanto de la actividad a escoger como de la duración)
Libertad de movimiento
Aprendizaje por medio de la experiencia
Autocorrección
Fomento de la autonomía y la independencia tanto física como psíquica
Preparación del adulto y del ambiente
Todas las experiencias vividas por el niño son absorbidas por su vida física y
adaptada a la identidad social del medio en el que vive y crece. El niño construye su
momento.
Montessori presenta cuatro periodos de desarrollo en los que, cuando se llega al
límite de cada uno de ellos, notamos un niño nuevo con unas nuevas
necesidades.
La primera infancia (0 a 6 años) -
La infancia (6 a 12 años)
La adolescencia (12 a 18 años)
La madurez (18 a 24 años)
Conocer las etapas de crecimiento nos permite poder responder mejor a las
Todo este proceso se logra gracias a la "mente absorbente" del niño (que en esta
etapa está dividida en dos partes) que incorpora experiencias, relaciones, emociones,
imágenes, lenguaje, cultura, a través de sus sentidos y por el simple hecho de vivir.
Estas experiencias de vida dan forma a su cerebro, formando redes neuronales que
tienen el potencial de permanecer con la persona toda su vida.
En esta etapa el método se concentra y toma como algo prioritario el desarrollo del
habla, el movimiento coordinado y la independencia, que le den confianza al niño así
se permite descubrir su propio potencial y su lugar dentro de la sociedad.
De los 3 a 6 años para que el niño se desarrolle y cumpla los objetivos del método
estos son los materiales más importantes que se deben presentar en esta etapa y que
en las próximas ya no necesitamos mostrarlo tanto como en esta, esta etapa es el
comienzo de todo:
1. Materiales de vida práctica: Durante los tres primeros años los niños tienen
fuertes tendencias a hacer desorden y romper sus cosas entonces muchas de
las actividades van al cuidado de sí mismos, de los demás y del ambiente físico
en el que están. Las actividades incluyen tareas que le son familiares a los
niños: lavar, ordenar, poner la mesa, barrer, etc. También se introducen
actividades de "gracias y de nada" que son importantes y nos caracterizan a
todos los seres civilizados. A través de éstas y otras actividades también se
logra coordinación y control del movimiento y exploración del entorno. Los
niños aprenden a realizar una tarea de principio a fin, desarrollan su voluntad,
su auto disciplina, la capacidad de concentración y la confianza en sí mismos.
Estos se consideran los materiales más importantes para posibilitar una buena
autoestima, largos periodos de concentración, pensamiento lógico, equilibrio,
resolución de problemas, independencia y cuidado de uno mismo, de otros y del medio
ambiente.
También tenemos tres materiales importantes que son el ambiente, el lenguaje y los
materiales académicos (matemáticas): para que el aprendizaje auto dirigido tenga
lugar, todo el ambiente de aprendizaje – aula, materiales de estudio y entorno social-
debe ser de apoyo para el niño. El “guía/facilitador tiene que proporcionar los recursos
necesarios, incluidas las oportunidades de los niños para funcionar en un ambiente
seguro y positivo. En conjunto, el “guía” y el niño forman una relación basada en la
confianza y el respeto que fomenta la autoconfianza y la voluntad de probar cosas
nuevas.
3. Material del Lenguaje: cuando los niños entran al ambiente a los 3 años
mejoran de a poco el lenguaje ya adquirido. Son capaces de usarlo
inteligentemente con precisión, dándose cuenta poco a poco de sus
propiedades. Aprenden a escribir partiendo de los sentidos (el oído, el tacto) y,
como una consecuencia natural de esto aprenden a leer. Como una extensión
de las actividades de lenguaje, los niños aprenden sobre geografía, historia,
arte, música. Estas áreas ayudan al niño a conocer el entorno que lo rodea y a
despertar la conciencia en el niño del lugar que ocupa en el mundo; los lleva a
sentir respeto y amor por su ambiente, y crea un sentido de solidaridad con
toda la familia humana y su hábitat.