Constitución Política

Segundo Semestre 2022

Profesor: David Eduardo Lara Corredor
Nombres: Gleisom Henrique da Silva, Luís Alveiro Villada, Emmanuel Lola Mundele.

PREGUNTA 01.

Desde una perspectiva participativa y colaborativa del grupo, se considera que la

Constitución Política de Colombia de 1991, hace un énfasis importante, resaltando por
encima de cualquier situación, o por encima de cualquier cosa o interés personal, “el
Don de la vida”. Y todos los artículos numerados desde el 11 hasta al 41 van en defensa
y protección de ella misma; es por esto, por lo que se considera fundamental estos
derechos (civiles y políticos). Se podría decir que si no hay vida humana en cualquier
lugar del planeta, como podría haber una norma de normas en los territorios de nuestra
tierra. Es así, que antes de los demás derechos se tiene que proteger “la Vida”; es decir,
que este don tan preciado se nutre y se enaltece de los demás derechos contenidos en
nuestra Constitución Política Colombiana.

De igual forma cuando hablamos de que el derecho a “la Vida” es inviolable, recae
sobre todos los colombianos (as) y los que no lo son, defenderla y protegerla a toda
cuesta. Es en este sentido que se le viene dando respuesta a la pregunta del porque estos
derechos (civiles y políticos) se consideran fundamentales. No es que los demás no lo
sean; sino que de “la Vida” misma se derivan otros derechos. Ya que es acá donde
aparece la familia, su dignidad, su libertad, sus deberes y derechos entre otros,
plasmados en nuestra Constitución Política. Desde esta respuesta están invitados todos
los colombianos (as) para que podamos entender y comprender lo que realmente
significa vivir y dejar vivir a los demás, protegiendo así, a los más vulnerables y el lugar
donde vivimos; “el Planeta”, ya que la Vida es invaluable.

PREGUNTA 02.
Los derechos humanos se refieren a la relación entre el estado y el individuo; ello lleva
a algunas obligaciones del estado y a los derechos de los individuos. De este caso el
estado debe garantizar las condiciones de posibilidades para la vivencia plena de estos
derechos. Todos los derechos humanos son interdependientes y correlacionados. Por
ejemplo, la salud es un derecho humano fundamental de la persona, indispensable para
el ejercicio de otros derechos humanos y el estado tiene que colaborar en ello, con la
creación de hospitales, centro de Salud, dispensario médico... La sociedad
contemporánea reconoce con claridad que, los valores que el ser humano tiene por el
solo hecho de ser persona humana y que le han pertenecido desde siempre. Son
derechos innatos de las personas desde que nacieron hasta que mueren. Son aquellas
condiciones necesariamente para todas personas, sin distinción alguna, disfruten del
bienestar físico, mental, social y espiritual.
Los derechos humanos constituyen una especie de “ethos” secular, portador de
salvación cristiana, ya que en último término está presente en él la acción salvadora de
Cristo (Gaudium et Spes 26). Son pues un intento humano de unidad desde la
perspectiva social para poder disminuir el sufrimiento y dar sentido a la vida humana.
Son intentos de controlar y solucionar los múltiples males: desigualdades e injusticias

1
presentes en el mundo. Son también un intento de poder reconocer al hombre tal cual es
en su naturaleza como un ser digno a pesar de su sufrimiento o de las circunstancias en
las cuales se encuentran, dándole unos derechos y unos deberes que le permiten vivir
plenamente su vida.

PREGUNTA 03.
Cuando pensamos en los derechos humanos, automáticamente nos acordamos de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos1, de 1948. Esta declaración proclama
los derechos de primera y segunda generación, que incluyen los derechos civiles y
políticos que están alineados con los derechos económicos, sociales y culturales. Sin
embargo, es necesario reflexionar sobre los derechos de la tercera generación. En la
Constitución Política de Colombia, en el capítulo 3, encontramos los Derechos
Colectivos y los Derechos Ambientales2. El artículo 79 llama nuestra atención: Todas
las personas tienen derecho a gozar de un ambiente sano. La ley garantizará la
participación de la comunidad en las decisiones que puedan afectarlo. Es deber del
Estado proteger la diversidad e integridad del ambiente, conservar las áreas de
especial importancia ecológica y fomentar la educación para el logro de estos fines3.
Sabiendo que en el artículo 79 el Estado Colombiano tiene el deber de promover un
medio ambiente digno para el crecimiento humano, así como de proteger la diversidad y
la naturaleza, concluimos que la 3ª generación deberá perseguir estos objetivos: la
promoción de la fraternidad, formado por los derechos medioambientales (medio
ambiente ecológicamente equilibrado), los derechos de los consumidores, los derechos
de los niños, los adolescentes, los ancianos y los discapacitados, así como la protección
de los bienes que forman parte del patrimonio común de la humanidad: el patrimonio
artístico, histórico, cultural, paisajístico, estético y turístico. Como sociedad hemos
avanzado en la consolidación de estos derechos, el derecho al medio ambiente por
ejemplo es un derecho colectivo y todos debemos ser responsables.

PREGUNTA 04
LO QUE LE ESTÁ PASANDO A NUESTRA CASA4
La cuestión ecológica está en el orden del día y hoy adopta una importancia y una
unanimidad que pocos temas lo han hecho antes. Episodios como las Conferencias
sobre el Medio Ambiente, o el lanzamiento de "Laudato Si'" han vuelto a poner en la
agenda internacional el estado del mundo en que vivimos. Reconocer la crisis ecológica
en la que estamos inmersos y sus raíces humanas es un paso fundamental para revertir
este ya prolongado ciclo de destrucción del medio ambiente y de privación de la
dignidad de cada ser humano y de todas las criaturas. Como nos recuerda el documento
final de Río+20:

Reconocemos que el planeta Tierra y sus ecosistemas son nuestro hogar y

que es común a muchos países y regiones y que algunos países reconocen los
derechos de la naturaleza en el contexto de la promoción del desarrollo
sostenible. Estamos convencidos de que, para lograr un equilibrio justo entre
las necesidades económicas, medioambientales y sociales de las generaciones
presentes y futuras, es necesario promover la armonía con la naturaleza.
1
Disponible en: brasa.org.br/declaracao-universal-dos-direitos-humanos.
2
Constitución Política de la República de Colombia (1991).
3
Ibid 79.
4
Francisco (2015). Carta encíclica Laudato si'. Sobre el cuidado de la casa común

2
 Pedimos que se adopten enfoques holísticos e integrados del desarrollo
sostenible que guíen a la humanidad a vivir en armonía con la naturaleza y a
liderar los esfuerzos para restaurar la salud y la integridad del planeta Tierra 5.

En grupo, tratamos de recorrer las conferencias sobre medio ambiente, buscando los
puntos principales y analizando al final si llevan en sí esta preocupación. La
Conferencia, celebrada en Estocolmo en junio de 1972, fue el punto de inflexión en la
voluntad de preservar el medio ambiente, marcando la agenda internacional y sentando
las bases de lo que sería la asunción de responsabilidades sobre el estado de la biosfera
y los caminos a seguir. Al situar al hombre en su entorno natural, la declaración lo
convierte a la vez en constructor y obra de la naturaleza, dependiendo de ella. De ahí
que su protección se presente como una cuestión fundamental tanto a nivel de bienestar
como de desarrollo económico. La declaración señala claramente los daños causados y
sus pruebas, destacando la contaminación y el agotamiento de los recursos. Destacamos
la fuerte responsabilidad del ser humano por el presente y el futuro, buscando un
entorno de calidad para todos.
En la hermosa ciudad de Río de Janeiro, la conferencia de 1992 dio lugar a la firma de
cinco importantes acuerdos medioambientales: la Declaración de Río sobre el Medio
Ambiente y el Desarrollo; la Agenda 21; los Principios para la Gestión Forestal
Sostenible; el Convenio sobre la Diversidad Biológica; y el Convenio sobre el Clima 6.
En Johannesburgo podemos destacar el amplio debate sobre los objetivos relacionados
con el uso de las energías renovables, además de reafirmar algunos de los puntos
tratados en Río en 1992. En Copenhague destacamos las negociaciones sobre un nuevo
acuerdo climático. En Varsovia, Nueva York, París, Chile/Madrid y Glasgow
encontramos las mismas premisas en cuanto a la preocupación por nuestra "casa
común" que pasa por la creación de políticas públicas para abordar esta cuestión y por la
firma de acuerdos por parte de los países en los que se comprometen a reducir los daños
causados al medio ambiente. Por supuesto, algunos países no firman estos acuerdos,
como Brasil, que no firma la Declaración de Nueva York. Así pues, concluimos que,
afortunadamente, los acuerdos coinciden entre sí en el sentido de promover la
preservación del medio ambiente al tiempo que se buscan métodos y medios para frenar
los impactos del calentamiento global. Encontramos en los documentos algo que se ha
reflejado mucho en la actualidad: el desarrollo sostenible que tiene como objetivo el
mantenimiento de los recursos naturales en beneficio de la sociedad, oponiéndose a la
idea de progreso irresponsable y depredador del medio ambiente y de todas las formas
de vida.
En el ámbito eclesial, hay que dar voz al documento del Papa Francisco titulado
Laudato Si', haciendo referencia al canto de las criaturas de San Francisco de Asís, que
también era conocido por ser un defensor del medio ambiente. Creemos que la carta de
Francisco es una verdadera llamada a la "conversión ecológica" 7 y está en comunión
con las Conferencias celebradas a lo largo de la historia.
En el primer capítulo, el Papa trata de hacernos comprender y tomar conciencia de los
males que sufre la humanidad y el mundo, males que se pueden observar y reconocer.
Enumera dos factores que contribuyen a su agravamiento: "la continua aceleración de
los cambios en la humanidad y en el planeta" 8, que van más allá de la "lentitud natural
5
Disponible en: riomais20sc.ufsc.br
6
Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUMA). Un nuevo balance para las Naciones: El
UNU-IHDP y el PNUMA lanzan un índice de sostenibilidad que va más allá del PIB. Disponible en:
www.pnuma.org.br/comunicados_detalhar.php?id_comunicados=213.
7
Francisco (2015). Carta encíclica Laudato si'. Sobre el cuidado de la casa común.
8
Ibid 25.

3
de la evolución biológica"9, y cuyos "objetivos no están necesariamente orientados al
bien común y a un desarrollo humano sostenible e integral" 10. A continuación, agrupa en
siete ámbitos "las cuestiones que nos preocupan hoy, con la intención declarada de
hacernos "dolorosamente conscientes, atreviéndonos a transformar en sufrimiento
personal lo que le sucede al mundo" y suscitando así "la contribución que cada uno
puede aportar11".
El Pontífice hace un repaso sistemático y rigurosamente científico de la crisis ecológica
ya instalada en el planeta: la degradación de los recursos naturales, como el agua, la
deforestación y la desertificación, el monocultivo y la pesca depredadora, el abuso de
los combustibles fósiles y el calentamiento del sistema climático, la pérdida de la
biodiversidad, una lista interminable de ataques a la vida de la tierra y de la humanidad.
Admitiendo su lúcido diagnóstico, desde entonces hasta hoy se han multiplicado las
mismas alarmas lanzadas por los más diversos sectores, que se han visto trágicamente
confirmadas por las gravísimas catástrofes naturales y las crisis sociales y humanitarias
que se han ido sucediendo y que afectan de manera especial a los más frágiles del
Planeta. Los que no tienen ni voz ni voto en la sociedad son los más afectados por esta
crisis climática sin precedentes.
Sin eludir su responsabilidad, el Papa termina el capítulo reconociendo humildemente
que, aunque no le corresponde a la Iglesia proponer una palabra definitiva, "debe
escuchar y promover el debate honesto entre los científicos, respetando la diversidad de
opiniones". Pero añade: "Basta con mirar la realidad con sinceridad para ver que hay un
gran deterioro de nuestra casa común" y que "el actual sistema mundial es
insostenible12".
Y para completar nuestro trabajo no podemos dejar de mencionar lo que supone la
conversión ecológica.
Implica permitir que todas las consecuencias del encuentro con Jesús surjan
en las relaciones con el mundo que les rodea. Vivir la vocación de ser
administradores de la obra de Dios no es opcional, ni es un aspecto
secundario de la experiencia cristiana.
no es algo opcional, ni un aspecto secundario de la experiencia cristiana, sino
una parte esencial de una existencia virtuosa13.

Según Francisco, a esta conversión ecológica se unen ciertas actitudes, como la gratitud
y la gratuidad de reconocer el mundo como un don recibido del Padre; la conciencia
amorosa de no estar separados de las demás criaturas, sino de formar parte de una
magnífica comunión universal; y, como cristiano, desarrollar la creatividad y el
entusiasmo para resolver los dramas del mundo. Así podremos construir juntos una
sociedad más justa y fraternal, respetando y protegiendo el medio ambiente.

9
Ibid 16.
10
Ibid 17
11
Ibid 20
12
Ibid 61
13
Ibid 123.

4
 BIBLIOGRAFIA

 CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LA REPÚBLICA DE COLOMBIA (1991).

 DECLARACIÓN UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS.

Disponible en: brasa.org.br/declaración-universal-dos-direitos-humanos.

 FRANCISCO (2015). CARTA ENCÍCLICA LAUDATO SI'. Sobre el cuidado

de la casa común.

 EL FUTURO QUE QUEREMOS. RÍO+20. Disponible en: riomais20sc.ufsc.br.

 PROGRAMA DE LAS NACIONES UNIDAS PARA EL DESARROLLO

(PNUMA). Un nuevo balance para las Naciones: El UNU-IHDP y el PNUMA
lanzan un índice de sostenibilidad que va más allá del PIB. Disponible en
www.pnuma.org.br/comunicados_detalhar.php?id_comunicados=213.

 CONSTITUCIÓN PASTORAL GAUDIUM ET SPES.